Tumgik
#me hiciste falta
iquecursi-blog · 1 year
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Hoy también me hiciste falta.
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hollow--graphic · 5 months
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Lo que siento por ti lo seguiré sintiendo por el resto de mi vida... No importa si me ignoras.
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He necesitado el abrazo mas grande y cariñoso
que se pueda dar en esta vida, hoy he llorado con las lagrimas mas dolorosas que jamás imagine que llegaria a llorar.
Hoy me he sentido tan sola!
Esperando por un abrazo que nunca llego y nunca llegara.
Hoy me hizo tanta falta tu calor, tu amor.
Hoy me hiciste mucha falta y llorando espere
verte llegar,mas se que nunca pasará.
Hoy sufrí el desengaño, hoy sufrí el dolor que causa saber que ya no estas aquí.
Te extraño 🕊️
ℜ𝔬𝔰𝔞🖤
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tortademaracuya · 11 months
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creo que nunca dibuje una micah tan genuinamente contenta. el poder del guiso
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cute-gifs · 2 years
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El apego emocional hacia otra persona hace daño.
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evahousewife · 8 months
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Yo estaba de vacaciones sin internet por una semana. Me hiciste mucha falta.
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Que bueno que estás de regreso!
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karylvsjuanii · 1 month
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Desvelado | Juani Caruso
tw: ningunoo, todo es súper fluff, algo cursi y menciona infidelidad pero es negada porque no sucede nada. Discusiones.
Por favor dime si hay un error o falta algo.
Basada en la canción “Desvelado - Bobby Pulido”
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Gordi, ya venís? - Pregunta Fran al otro lado de mi celular.
Estoy a 15 Fran, no empiecen sin mi porfa. - Pido finalizando la llamada después de un “no tardés más” de parte de Fran.
Iba manejando por las calles coloridas escuchando “desvelado” de bobby pulido.
“Muy buenos días a todos, y mejores por esta buenísima rolona, como están todos?”
De nuevo esa voz, si sigo así me volveré esquizofrénico.
Llevaba unas dos semanas aproximadamente enamorándome de una voz anónima que pasaba por la radio cada que tomaba rumbo a algún lugar por las mañanas, me había grabado de memoria la estación. La hora. Y la hora en la que se iba.
“Recuerden que la línea está disponible para que llamen para pedir una canción” “Oh, justo a tiempo”
Subí el volumen de la radio para poderla escuchar mejor.
“Hola?, Bien, vamos a reproducirla una vez y se acabe esta canción, gracias por su llamada, que tenga un muy bonito día”
Su voz sonaba tan tranquila, era como escuchar las olas del mar, me enamoré aunque nunca la conocí, y cada que vuelvo a escucharla, anhelo poder encontrarla por alguna de estas calles.
Sinceramente me considero un psicopata por decir todo esto, pero quien no se resistiría a esa voz de ángel?
Finalmente llegué a mi destino. Un restaurante donde se supone todos mis amigos me están esperando para pasar el rato juntos.
Mas tarde tendríamos que ir a una conferencia del cast principal, pero eso sería ya por la noche. Últimamente habíamos tenido esta rutina. Almorzar por la mañana y vernos en la noche para entrevistas, conferencias, premios.
Aburrido. Y más sin poder dejar de pensar en su voz.
Ya tienen su traje listo? Yo tengo que ir saliendo por el mío. - Felipe ríe por lo bajo.
Te acompaño. - Habla Matías antes de meter un pedazo de carne a su boca.
Listo, Juani? -
Blas iba a llevarme en su auto, ya que el mío estaba en mantenimiento y él se ofreció a hacerme el favor. Un amor.
En que tanto pensás, boludo? - Blas me pregunta sin alejar la vista de la carretera.
“No lo sé.” Suelto sin respuesta.
Blas, vos te pensás, tipo, que alto forro si alguien te contara que se está hasta las manos de una voz y no puede dejar de pensar en ella, aunque ni siquiera la conozca, pero incluso ha soñado en su querer, en estar en sus brazos, en que ella le habla. Repito. Sin conocerla. - Creo que estoy todo rojo.
Na amigo, estás re copado. Me estás jodiendo vo’ - Blas ríe haciendo montoncito con sus dedos.
No te jodo boludo, me estoy volviendo loco. Vos entendés eso? Juani, volviendosé loco por una piba que ni en pedo la conoce. -
Me siento aliviado de poder sacar mi frustración aunque un poco mufa por la reacción de Blas.
Me estás diciendo vo’ que por eso has estao’ re colgado por ella? Más bien, por una voz que probablemente sea de cualquier forra bagarta? - Se burla Blas.
Cerrá el orto cheto de mierda, no la conocés. - Quedé re picado por lo que dijo Blas, me hirvió la sangre a 1000 grados.
Ni vos tampoco, gil escracho. -
Okey, eso me envió a la concha de mi madre.
En un par de 10 minutos más, ya estabamos junto a nuestros compañeros y amigos, unos tomandose fotos, arreglandose, otros ya dentro de cabinas donde asignaron sus entrevistas, y los demas, aceptando las bebidas del lugar.
Amigos, me putearon todo. - Llega Mati riéndose.
Por que? Que hiciste pelotudo? - Pregunta Simón dejando su celular a un lado.
Naa, me llenaron de cosas que ni yo me acuerdo por quedarme colgado con la gila que estaba ahí metida en la cabina, era como una de ahí, re linda ella eh. - Matías toma un vaso de agua para llevarlo a sus labios y dar un sorbo sin dejar de vernos.
Te gustó más que Malena? - Pregunto riéndome.
Obviamente, la piba ha de ser unos 10 años o 10 siglos menor que malena. - Felipe ríe burlándose.
No estes jodiendo forrito, tampoco pa tanto, te la dejo a vos que te hace falta una manita eh. - Ríe alejándose lo más rápido de Felipe que inmediatamente fue perseguido por él.
Veía twitter tranquilamente en lo que esperaba pacientemente mi turno, me tocaba después de Enzo.
Pasé viendo todos los comentarios que hacían al respecto por mis rt. Últimamente eran solo de alguien que me gustaba y de lo mucho que me encantaba su voz. Ya se imaginarán las reacciones de todas. A veces eran re bardas las pibas.
Che, Juani, tu turno. Suerte. - Enzo toca mi hombro demostrándome amabilidad, no sin antes dejar una sonrisa y desaparecer de mi vista.
Él y todos sabíamos en sí que a veces era algo tedioso ser entrevistado. Che, cuidar que decís, que hacés, que opinás, las preguntas re incomodas que al toque hacen, vos sabés boludo.
Doy un último sorbo a mi agua helada, y me dirigí con cortos pasos a la cabina número 3, antes adueñada de Enzo.
Y hasta el momento, sigo creyendo que haber cruzado esa puerta fue la mejor decisión de toda mi vida.
Hola Juani, cómo estás? - Se acercó a mi dejando a un lado un frasco que parecía ser un gel.
Extendió su mano con una sonrisa en su rostro, mirándome.
Su voz fue lo primero que me hizo derretir, y ahora estarla escuchando de la nueva niña de mis ojos, me hizo sentir escalofríos.
Era ella. Y no lo dudé ni un segundo.
Parece alta pero no más que yo, llevaba puesta una falda color negra y una blusa color vino de manga larga la cual descubría sus hombros y dejaba ver su clavícula marcada, ese color hacía resaltar demasiado su tono de piel, era blanca como si en su vida hubiera estado bajo el sol y su cabello hacía que se viera aún más.
Qué tal?, Todo bien y vos? - Devuelvo el saludo, encantado.
Igual que vos, un gusto. - Su mano se alejó de la mía, al igual que su cuerpo para llegar a donde antes estaba y señalarme con su dedo un asiento rodeado de cámaras, luces, y micrófonos.
Seguí su indicación y tomé asiento a donde ella señaló.
En la cabina habían más personas vestidas de negro, con cables, computadoras, micrófonos, luces por todos lados, tripiés, e incluso mates.
Empezaron a retocarme un poco el rostro con polvo iluminador, también pasaron un peine por mis rizos, un spray fijador y más polvo.
Para ser sinceros, no preste atención a lo que estaban haciendo conmigo, y no me interesaba, estaba muy ocupado viéndola.
Se encontraba anotando unas cosas en una agenda y computadora, sin dejar a un lado un mate en lo que parecía ser una guampa.
Se veía tan atenta en lo que hacía, tan bonita.
Bien, Juani, como última pregunta. Fuertemente suplicada por tus fans. Quién es esa afortunada chica de la que estás enamorado? -
“Que chota?”, Pensé.
Vos, sos vos mi amor hermosa, la tengo en frente.
Claro que eso es lo que quería gritar, lástima que soy puto.
Ah, eso, una pibita por ahí, secreto. - Digo riendo, jugando con mis manos mostrando nerviosismo. Sabía los altos edits que se venían de esto.
Mm, no es lo que esperaba, la verdad, si te soy sincera, me gustaría saber quien es esa chica. Dicen que estás muy enamorado de su voz, es eso cierto, Juani? - Pregunta mi próxima mujer y dueña de mi corazón, haciendo que una sonrisa invada mis labios.
Si, eso es cierto, me fascina su voz. - Asiento, dándole la razón.
Si? Debe ser una muy bonita voz entonces. - Veo una sonrisa formada en sus labios rosados. Que mujer más perfecta.
De repente quiero sacar el anillo.
Eso es todo Juani, muchas gracias por tu tiempo. Un gusto y que tengas linda noche. - Me dedica nuevamente una sonrisa despidiéndose.
Las cámaras ya se habían apagado. Pues yo era el último.
Gracias a vos, pero no me gustaría irme sin antes pedirte una canción para mañana en tu estación. - Puedo notar su asombro y sonrojo rápidamente.
Oh, muchas gracias, y claro que si. Cual es? - Me acerco lentamente hacia ella con una sonrisa.
Desvelado, de Bobby Pulido. -
Por supuesto, para tu enamorada, verdad? - Ella se cruza de brazos riendo.
Exactamente, oh, y podés leerle este papel cuando pongan la canción? - Saco de mi bolsillo el papel para entregárselo.
Si, no te preocupes. Gracias Juani. - Vuelve a lanzarme una sonrisa y yo salgo de la cabina con una cara de bobo. Anhelando volver a escucharla, volver a verla.
Y para despedirnos, quiero poner una canción a petición de alguien con el que tuve la oportunidad de hablar, espero estés escuchando esto. - Digo antes de dar click a la canción en Spotify.
La radio empezó a reproducir “Desvelado”.
“Será fe que yo encontré
Una voz de ternura
Que me llena de placer
Cuando la oigo hablar
Con ella me enamoré
Que nunca la conocí
Sueño en su querer
Y en sus brazos quiero dormir
Escucho cada día la radio
Seguro que la vuelvo a oír
Por el cielo busco mi estrella
A la luna quiero subir
Voy desvelado
Por estas calles esperando encontrar
A esa voz de ángel que quiero amar
¿Dónde andará?”
Antes de escuchar el último verso de la canción, bajo un poco el volumen de esta.
Y finalmente una nota dejada por él para su dichosa enamorada. - Abro la nota que Juani me dio antes de irse por esa puerta la noche anterior.
“Al final si te encontré. La dueña de esa voz” - Juani.
“Juanicar comenzó a seguirte”
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a--z--u--l · 29 days
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Un día te contaré la falta que me hiciste.
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sol-y-luna-eclipse · 9 months
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MI CARTA PARA TI :  El dolor siempre permanecerá en mi corazón , en mi alma y  en mi ser siempre recordare el dolor inmenso por el que me hiciste pasar (pero no es tu culpa ) fui yo quien permitió tanto a tan grande escala. Ni siquiera tuve un momento para pensar en poner un límite para que te detuvieras y te dieras cuenta que estaba siendo parte de un daño colateral de tus decisiones  En miles de ocasiones intente hacer que entendieras la magnitud de lo que tu vicio, tu forma de ser, tu irresponsabilidad, tu falta de respeto hacia, me estaban acabando emocionalmente,  me convertí en una persona que carecía de  tanto amor propio, me convertí en alma en pena, con tal de que tu estuvieras a mi lado, tuve la insensatez de perdonar cada decisión tomada por ti que obviamente me lastimo, pase mi dolor por alto y me enfoque en ti  con tal de que “nuestra relación “ estuviera a  salvo, con tal de que tu no fueras de mi lado , porque creí que eso era amor, soportar cualquier adversidad que se nos cruzara en nuestro camino, pero la adversidad no se refiere a malos tratos, insultos, infidelidades ,falta de empatía, menos preciar, estrés emocional,  dependencia emocional, adicciones y podría  hacer una lista enorme de todo lo que me hiciste pasar. Pero no quiero dejarte claro de lo que tú eres. Tú me lo advertiste y te aprovechaste de mi vulnerabilidad. Yo acepto la responsabilidad de mi parte de lo que permití y de los límites que llegue a cruzar, pensando que eso podría ayudar. jamás alguien lleno de bondad y paz, va a poder reparar a una persona narcisista, vacía y egocéntrica como tú. mi error fue pensar que el demostrar que alguien te podía a amar tal y como eres, podía cambiar lo vacía que era tu vida, no importa todo lo que hubiera hecho por ti, lo terminarías arruinando de cualquier forma. Me hiciste creer que yo era la mala de la relación, la loca, la incomprensible, la celosa, posesiva, la inmadura, la impulsiva. Que por más que yo diera lo mejor de mí siempre terminaría catalogada en alguna de esas etiquetas. Después de romper miles de veces me di cuenta que en cada ruptura te iba necesitando menos, me iba sanando poco a poco. Hasta que llego el día en que embazaste a tu ex pareja y fue ahí cuando me di cuenta que tenía que poner mi máximo potencial para alejarme de ti, mi niña interior pudo haberte aceptado una vez más con ese error, pero para tu mala suerte ya estaba agotada de ti y tus malas decisiones. Mi yo grande decidió irse y no soportar nunca más un golpe tan, tan bajo. Con el paso de los días me di cuenta que tu ausencia me trajo más paz de lo que tu persona no quiso nunca intentar. Ahora lloro porque ya no estas. Pero no solo por eso, porque ahora siento más paz desde que no estas, recupere mi brillo, llore también porque la vida es injusta, pero también llore porque sin ti a mi lado tengo oportunidad de algo mejor para mí. Espero y nunca toparme con alguien como tú en vida, ahora ya sé que a la primera señal de falta de respeto tengo que irme. Cuando alguien me grite, me insulte  y me haga temblar del  miedo a ser golpeada( espero y no llegar a volver a ese punto ) marcharme talvez no me golpeaste pero me dañaste emocionalmente y eso está mucho peor que una marca en el cuerpo que fácilmente se puede ocultar. No te deseo el mal, pero tampoco el bien. Quiero que crezcas y si decides cambiar sea porque tú lo necesitas no porque alguien con lágrimas en los ojos de lo implore. Rehace tu vida y mejora como ser humano porque tu hija lo necesita. por cierto. Espero y cuando me vuelvas a ver ya no me reconozcas, que ya no conozcas cual es mi color favorito, que no conozcas si tengo miedo de dormir sola en la noche, que si superé mi miedo de ser mama soltera o de estar sola, que conocí nuevas personas, que volví a hacer feliz, que me estén amando con locura, que cumplí mis promesas y volé más alto de lo que creía porque tú ya no me estabas deteniendo, que tu vicio por fin pude quitarlo de mi espalda asi que Adiós.
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nevenkebla · 4 months
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Infarto
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Guionista: Dwayne McDuffie Dibujante: Paul Pelletier Publicación original: Fantastic Four #549 (2007)
— Susan Storm: Y ahora, ¿qué voy a hacer contigo? — The Wizard: Esto es entre tu marido y yo. — Susan Storm: Me secuestraste, me hiciste daño, has tratado de matar a mi familia y amigos… que ni se te ocurra atacarme mientras hablo. Eres patético. Una de las mejores mentes del planeta malgastada durante años en trucos de magia… y luego tratando de imponerte a un hombre que nunca te haría daño de verdad a pesar de tus continuas provocaciones. Pero esa es la diferencia entre mi marido y yo. — Johnny Storm: ¡Sue, no! — Susan Storm: Él no entiende de venganza. Pero yo no me decido entre los muchos modos de hacerte daño que voy a usar. ¿A quién quiero engañar? Sé exactamente lo que voy a hacer. Veamos tu cavidad torácica. Habría perdido la apuesta, sí que tienes corazón. Late un poco rápido, ¿nervioso? Posiblemente, un hombre tan listo como tú sabe qué ocurriría si bloqueara con un campo de fuerza tus tres arterias coronarias. — The Wizard: T-trombosis, infarto. — Susan Storm: Piénsalo, Wizard, llevas años atacando a mi marido, y a mi hermano, incluso más tiempo. Y he peleado contigo aunque no me hiciera falta. Te puedo apagar como una bombilla en cuanto quiera. Y ahora mismo quiero hacerlo. — Storm: Sue, no habrás… — Susan Storm: No. Se ha desmayado. — Ben Grimm: Y tanto. Casi me desmayo yo. — Johnny Storm: ¿Dónde has aprendido todo eso del corazón? — Susan Storm: No sé, supongo que viendo Anatomía de Grey.
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ojos-sabor-miel · 7 months
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Tu ausencia ha quemado cada poro de mi cuerpo, quemaduras de segundo grado que llevo a todas partes en cada momento de mis días, ¿Dónde estás? ¿Por qué te fuiste así? Veías como ardía y seguías soplando mi fuego, sigues alimentando el ardor de mi piel en carne viva, simplemente viste mi casa en llamas y corriste en dirección contraria mientras yo me quedaba entre los escombros de este incendio tratando de sobrevivir a la falta de oxígeno, al envenenamiento de tu adiós sin explicaciones.
Me quedé desnuda y sin refugio, sin nada que protegiera mis heridas de la infección, con los ojos fijos hacia donde te fuiste, haciendolos creer que no huiste sino que fuiste por ayuda, pero no vuelves y cada vez las cicatrices se apoderan de mi mente, la endurecen como fibrosis y yo que ya no me derrumbo pero tampoco siento las caricias de quienes intentan escombrar un poco, todo me sabe a dolor y campos secos devastados por la catastrofe.
Tú que te negaste a volver y decidiste buscar a alguien que no te hace volar pero tampoco se quema, te aburrió mi corazón caótico y flamable, vulnerable a tus silencios que raspaban como cerillos dispuestos a destruirme, preferiste dejar que todo esto ardiera de poco para seguir usando mi calor antes de dar el salto a otros brazos que ya tenías seguros.
Hiciste de mis explosiones un castigo con el que más tarde me harías entender que yo fuí la que apagaba tu flama, cuando tú ya la habías puesto en otra casa y sólo esperabas a ver cuánto más destellaba por ti, te fuiste y ahora estoy apagada, sola, rota y cansada, cristalizada en el momento eterno de tu "no quiero estar contigo" como lluvia ácida, recorriendo este cuerpo destrozado, te negaste a hacerte cargo del corto circuito que ocasionaste y sólo desapareciste hacia donde mis cenizas no te alcanzaran.
Me encendiste, alimentaste el caos, me hiciste polvo y cuando ya no supiste como lastimarme más me abandonaste. Y lo peor es que ni siquiera volteaste a despedirte porque ya te esperaban al otro lado de la calle.
-Ojos-sabor-miel.
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tinta-y-cometas · 9 months
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Claro que te extraño, me haces falta. Pero, me hiciste muy feliz los días que estuviste conmigo, solo por eso valió la pena.
yesscorn
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hollow--graphic · 5 days
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Que horrible de tú parte no ver que me lastimas de la misma forma te lastiman a tí.
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sunflowerzyk · 2 months
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Detrás del depredador -König Híbrido!Oso x Lectora [Medieval AU] Cap. 4
Eres una plebeya de familia numerosa, tu vida es de lo más tranquila como lo puede ser para alguien de tu estatus. Hasta que una de las tantas mañanas en las que sales de tu hogar para recolectar frutos de los arbustos en lo más profundo del bosque una flecha atraviesa tu brazo. Tu no lo sabes, pero el dueño es el príncipe König , un híbrido bestia/oso, quien te tomara como su esposa, aunque no lo quieras así.
Lista maestra
Contiene: diferencia de edad, perversión, könig Yandere, konig Mayor, Diferencia de tamaño, obscenidad, dub-noncon, könig posesivo, daño/consuelo, pelusa, violencia típica del canon, dime si me olvide de alguno. Este capitulo en particular contiene somnofilia!
Si este tipo de contenido no es de tu agrado ignóralo y sigue con tu camino
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— El Príncipe könig exige su asistencia en el gran comedor a la hora de la cena. Está noche.
Oh. Recién estabas despertando y conectando todos tus sentidos, siendo consciente de tu entorno nuevamente y ya tienes malas noticias que revuelven tu estómago vacío. La criada abrió las cortinas y el resplandor del sol inundó la habitación. Era un nuevo día.
— Ahora desea verme?
Preguntaste lo más tranquila que pudiste, controlando tu semblante mientras te levantas y sales de la cama, sintiendo esa sensación de costras secas de algún líquido esparcido en tu vientre y zona inferior nuevamente, caminas a la habitación de limpieza para remover esa sensación de tu cuerpo nuevamente, la criada corre a tu lado cuando lo nota.
—  Si señorita, en la cena.
Respondió la criada detrás tuyo, alistando las fragancias y jabones para limpiarte.
Tu por tu lado te quitas el camisón, miras tu vientre manchado, ya te has acostumbrado, ligeramente, no te gusta, solo se hizo una costumbre retorcida entre könig y tu. Piensas para ti misma, y entras a la tina de agua tibia.
Es relajante para tu cuerpo y tu brazo que aún no se ha recuperado por completo, la perforación de la flecha ya estaba cerrando y no habían indicios de infección, algo bien.
Tu mirada deambula en la habitación a la que ya te has acostumbrado a visitar para limpiarte esas costras todos los días, y ahora más que nada te está ayudando para distraerte del hambre que sientes por negarte a comer un bocado el día anterior buscando desesperadamente despertarte en la noche y confrontar a könig para que te escuchará. Lo cual no funcionó en lo absoluto, dormiste igual de profundamente como las noches anteriores a esa. En conclusión, la comida no tenía nada que ver con tu sueño profundo.
— Yo no creo que sea prudente que me presenté.
Murmuraste como excusa.
—  El príncipe exigió su presencia.
— No quiero
— Cierre los ojos por favor señorita, no quiero que le caigan aceites en los ojos.
Ella No escucha tus reclamaciones, obviamente no es culpa de ella, no es su obligación, ella solo sigue órdenes y lo entiendes. Hasta cierto punto. Está situación de una u otra forma era tu culpa, hiciste todo eso de la comida por suposiciones sin sentido en lugar de preguntar directamente a la criada; aunque lo más probable era que ella lo negaría.
— No quiero verlo.
Susurraste para ti misma, jugando con la superficie del agua, formando ondas y rompiéndolas con un desliz de tu dedo. Te cuestionas tus decisiones hasta ahora.
Confrontarlo. Eso se suponía que debías hacer,(eso querías) e hiciste eso, (solo una parte de ello) formulaste un plan y lo aplicaste, no comiste durante todo el día anterior porque sospechaste que la comida tenía algo que provocaba que durmieras muy profundamente. Estabas equivocada, por supuesto. Resultó que tu cuerpo se relajaba tanto gracias a las comodidades y falta de responsabilidades que caías como una piedra en el colchón suave y las finas telas. maldecías haber hecho una tonta huelga de hambre. Fue muy tonto ahora que lo piensas a profundidad, por eso tu estómago ruge incansablemente.
— La apariencia es importante, pero lo son más los modales, le enseñaré sobre la etiqueta en la mesa, tenemos todo el día de hoy para ello.
No prestas mucha atención realmente, tu cabecita está demasiado ansiosa buscando una manera de salir de ahí. Tal vez querías verlo antes para hablar con él para negociar que te dejara volver a tu hogar, cuando recordabas lo furiosos que podrían estar tus padres por desaparecer así, pero ahora?, ya ha pasado más tiempo, ahora no hay nada que puedas hacer para apaciguar la ira de tus padres; solo aceptaste tu realidad, ahora te agradaban esas comodidades y querías que könig se mantuviera alejado....
Pero justo cuando no lo querías cerca de ti, la criada llegó con las terribles noticias de que el príncipe del reino quería que acudieras obligatoriamente a una cena con él. No sería una velada agradable, no del todo. Sospechas.
También querías reclamar las razones del porqué él jugaba contigo como si no fueras nada, dejándote sucia y pegajosa  sin estar casados o siquiera comprometidos! ¿no tenía suficiente ese hombre con todas las mujeres que existían en su harem? Tal vez era un hombre totalmente asqueroso y horrible como lo decían los rumores. Eso pensaste. No lo dirías así, no querías morir decapitada. O peor.
El baño terminó más temprano que tarde, señal de ello fue que la criada camino hacia el otro extremo de la habitación de baño para tomar las toallas. Por tu parte, te quedaste ahí, sintiendo unos segundos mas la calidez del agua que comenzaba a desaparecer.
— Mi estomago duele, ¡Que hay esta vez para comer?
—Señorita....el príncipe nos ordeno no alimentarla hasta la hora de la cena, para garantizar que no deje ni una migaja, lo lamento.
— Me siento apenada por hacer suposiciones sobre la hospitalidad, si se lo hiciera saber al príncipe....
— El príncipe sabe que usted esta arrepentida señorita.
Valla, ese tal príncipe realmente era un hombre rencoroso e inteligente, aunque no te sorprende demasiado, estas feliz de que no viniera personalmente a admitir que estaba ofendido por tu rechazo hacia la comida y presentar el castigo por ello.
Te molesta de cualquier modo que se burle de ti, sabiendo que claramente te ibas a arrepentir tarde o temprano.
Escuchaste a la criada acercarse de nuevo a ti, ella extendió la toalla hacia ti, señal para que finalmente salieras de la tina. y obedeciste. El agua tibia escurría por todo tu cuerpo cuando saliste completamente de la tina y te envolviste en la toalla, al principio era vergonzoso que alguien viera tu cuerpo desnudo, ni siquiera tu madre lo hacia después de que tuviste edad suficiente para ducharte tu misma; pero la criada te hizo entender que realmente el pudor no existía ni importaba mucho en el palacio, al menos no a la hora del baño, la mayoría de sirvientes tenían una habitación de aseo compartida y las concubinas siempre tenían a un grupo de mujeres que las ayudaban a limpiarse y arreglarse todos los días.
Per claro, tu no eras ningún sirviente, ni mucho menos una concubina, y no estabas ansiosa por ello tampoco.
Sin pensar mucho en tus acciones y movimientos, simplemente caminaste fuera de la habitación de baño y caminaste hacia el otro extremo, donde se encontraba la cama donde dormías.
Un vestido color azul cielo largo hasta los tobillos, sencillo, sin encaje, olanes o brillos exagerados estaba colocado delicadamente sobre la cama. eso no estaba ahí hace unos momentos. Levantaste el vestido de la parte superior, extendiéndolo y juntándolo a tu cuerpo. Medidas exactas. solo verlo te hacia saber que te quedaría perfectamente.
Tus mejillas se sonrojaron totalmente al saber que Konig seguramente entro en la habitación apenas entraste a ducharte y te escucho decir que no querías verlo.  Y saber que era totalmente consiente de tus medidas para mandar a confeccionar un vestido así Te puso aun mas nerviosa al respecto.
Miraste por encima de tu hombro y la puerta de la habitación estaba entreabierta, el no estaba ahí, ya no, pero no hacia mucho que se fue.....
—Vamos señorita, comencemos sus lecciones.
La voz de la criada detrás de ti te saco de tu transe nuevamente. Tampoco podías negarte, no había nada mas en que distraerte de tu estomago rugiendo hasta el anochecer.
Pediste a la criada que te ayudara a ponerte el vestido, por mas que no quisieras admitirlo, el príncipe no tenia tan malos gustos, al menos en el diseño, la tela era del mismo color del vestido viejo que llevabas el primer día que llegaste ahí y se estropeo aun mas con sangre, TU sangre. Hasta ahora lo único con lo que vestías eran con camisones iguales y de tela relativamente delgada, ahora con el nuevo vestido puesto era agradable usar una cosa diferente y colorido después de un tiempo.
El vestido se sentía fresco y suave sobre tu piel, casi ayudándote a olvidar tu situación actual y la cicatriz que se curaba lentamente en tu brazo. Y casi, CASI, del hambre que tenias.
Faltan pocas fracciones para que el sol se oculte finalmente por el horizonte, tiempo en el que no estarás tranquila. Tu corazón palpita frenéticamente durante unos minutos y se relaja después, un ciclo  que se lleva repitiendo durante la mayor parte del día.
Y la actitud de la criada no te ayudó a relajar tus nervios, se comporto mas ansiosa de lo normal, volando alrededor tuyo, analizando cada uno de tus movimientos y corrigiéndolos inmediatamente.
En los momentos en que estabas por caer inconsciente por la falta de comida, la sirvienta te reanimaba dándote sorbos de agua y colocando trapos húmedos sobre tu frente, pero como le ordenaron, no te dio  ni un poco de comer, tampoco era que le reclamaras o exigieras demasiado, no tenias derecho a hacerlo.
Lograste distraerte  con las lecciones de etiqueta en la mesa la mayor parte del tiempo, no sabias que los nobles podían ser tan quisquillosos a la hora de comer, con tantos tenedores, cucharas y cuchillos para cosas diferentes, la postura del cuerpo también era importante y estaba completamente prohibido tocar la comida con las manos, eso quedo muy claro.
Lo aterrador no eran los modales en si que la criada te enseño, si no que te recordaba que eso era muy básico, lo esencial para no hacer el ridículo frente al príncipe en la mesa y mostrar un poco de respeto y agradecimiento por su hospitalidad (seguías preguntándote la razón de ello). Tal vez así era con todas las doncellas que lastimaba, eso creías.
—Hemos terminado señorita, Ahora es aceptable que se presente en la cena.
La criada volvió a hablar con su tono de voz habitual, tranquila, pero aun reservada y uniforme. Ya no con ese tono autoritario y ansioso de antes.
—Que alegría.
lograste contestar con los labios secos y el estomago vacío.
La sirvienta (Ahora que lo piensas ella nunca te dijo su nombre, siempre te referías a ella como sirvienta y era extraño, por mas que se tratara de su trabajo) se alejo de tu lado, dándote un respiro; Desde la mesa donde practicaron la etiqueta, la viste apresurarse hacia la salida de la habitación y cerrar la puerta con llave detrás de ella, una costumbre a la que ya te habías acostumbrado, por mas que al principio te hizo sentir como un animal en cautiverio.
Esperaste unos minutos y finalmente suspiraste con fuerza, relajando tu postura y recargando tu espalda contra el respaldo de la silla.
No mucho tiempo después la puerta volvió a abrirse y los pasos de la criada se hicieron presentes dentro de la habitación de nuevo.
— Permítame mostrarle el vestido que el señor escogió para usted, si me permite decirlo, es hermoso.
Apenas levantaste la mirada te encontraste con un vestido que te dejo sin aliento y con los ojos muy abiertos.
Es de un escote cuadrado pronunciado, lo suficiente para hacerte sentir como una amante o concubina (no tan exagerado), tiene mangas largas que se ensanchan desde los codos hacia los puños, y una falda amplia que cae hasta el suelo, decorado con detalles dorados en los bordes..
Te quedaste congelada unos momentos, levantándote casi instintivamente de tu sitio, caminando en dirección a la criada, estiraste la mano y tocaste el vestido, completamente asombrada por lo suave que se sentía bajo tus manos, sacando una sonrisa de tu cara casi de inmediato.
- Usare esto?
preguntaste con la sensación de que estabas alucinando por la falta de comida - realmente necesitabas comer - y la poca autonomía que tenias actualmente.
- si señorita.
- Es hermoso.
- Pruébelo señorita.
respondió la criada, haciendo una pequeña inclinación con su cabeza para que te dieras la vuelta y ayudarte a vestirte, con una leve sonrisa al ver tu emoción, no era común ver a las jovencitas del palacio sonreír tan tiernamente o alegres por algo tan simple como un vestido de ese estilo, la mayoría de concubinas pedirían mas encaje y cosas brillantes, tal vez por eso era fácil saber tu clase social. eso la conmovió.
Obedeciste con un poco de duda, te quitaste ese vestido que te pareció tan lindo, para cambiarlo por  otro que lo era aun mas y la criada te coloco el nuevo vestido, sorprendentemente estaba echo..... a la medida, igual que el anterior, exacto, te dio un escalofrió al recordar al remitente.
- divino.
Dijo la criada con una sonrisa, guiándote hacia el tocador, sentándote en la silla, miraste tu reflejo, un tanto avergonzada de usar algo tan bonito, desviando tu atención a el tocador en si. "No hay demasiado encima de este tocador, señorita" señalo la criada cuando te asustaste por los regalos que el príncipe dejaba todas las mañanas, (además de los fluidos)según su experiencia en las habitaciones de otras concubinas, la joyería, alhajeros, listones y polvos para resaltar mas rubor en tus mejillas no eran absolutamente nada en comparación a los accesorios de las chicas demás nobles. 
Pero ella resaltó que considerando que los regalos venían del príncipe Konig valían mas que los presentes de cualquier otro hombre.
- El príncipe realmente es..... generoso.
admitiste en voz baja, levantando la vista de nuevo, observando como la criada recogía tu cabello en un moño bajo, inmediatamente interviniste.
- M-me gustaría el cabello suelto.... por favor.
solicitaste un poco nerviosa, el escote de por si dejaba ver demasiado, no querías que tu nuca también estuviera al aire libre, te sentías mas indefensa y expuesta de esa manera, mas sabiendo a donde ibas. una cena. con konig.
- Al príncipe no le agradara, no quiere que "su cabello se un obstáculo".
ella recalco eso ultimo con seriedad y una pizca de vacilación, casi temerosa.
Temblaste ante la idea, tus mejillas cubriéndose de color rojo, tu piel de gallina, dejando de ver tu reflejo. eso fue inesperado, pero no protestaste, de nuevo, ella no tenia la culpa, si no el príncipe bestia, y sus peticiones extrañas, inadecuadas. frunciste el ceño, no queriendo ser avergonzada por el de nuevo, levantaste tu cabeza, sonriendo, bajando el rubor de tus mejillas.
- entiendo, supongo que se vera bien.
- lo hará.
afirmo ella, continuando con los arreglos de su peinado.
- cual es tu nombre?
preguntaste, sin pensarlo mucho, realmente queriendo saberlo; ella se quedo callada unos momentos, dudando demasiado en contestar.
- Puede llamarme Elis, señorita.
Ella respondió en voz baja, su nombre es bonito, pensaste, y le dedicaste una sonrisa.
- Es bonito, Elis.
- gracias.
Devolvió la sonrisa, manteniéndola durante el resto del tiempo. le agradas....
Para buena o mala suerte, quedo bien, encantador, podrías decir, pero no sabes si eso era lo mejor, ya que al mirar tu reflejo de cuerpo completo en el espejo, te dieron escalofríos.
Observaste todo a detalle, el escote - dios, ese escote, realmente era vergonzoso - se amoldaba bien a tus pechos, manteniéndolos firmes, el vestido en general relucía muy bien, favoreciendo cada aspecto de tu cuerpo, el cabello alzado resaltaba aun mas el escote junto a una cadenita larga de oro que cuelga de tu cuello.
- Falta una ultima cosa señorita.
Señalo la Elis, buscando algo entre los cajones del tocador, no prestaste mucha atención, hasta que un resplandor llego a tus ojos, un tocado para cabello, era deslumbrante, definitivamente lo era. Miraste hacia ella y Elis te lo mostro con entusiasmo.
- Si me lo permite, nunca vi un tocado así en mis años trabajando como criada de las concubinas, es realmente bello.
Miraste el tocador con asombro, Elis se movió detrás de ti y lo coloco con cuidado, suspirando de alivio cuando lo coloco con firmeza, ella hablo sobre ello. El hermoso tocado de cabello con forma de una flor peculiar, una Edelweiss, significaba pureza noble, coraje y osadía, ya que suele crecer en ambientes poco favorables, eso te provoco un mar de emociones, entre ellas mariposas en el estomago, inusual.
Tocaron la puerta de la habitación, interrumpiendo la información que Elis te estaba dando sobre el broche con tanto entusiasmo, ella cambio de actitud de nuevo, corriendo a la puerta y abriéndola, hablando en voz baja con quien fuera que estuviera del otro lado.
Caminaste lentamente para acercarte a Elis, y ella concluyó su charla, dando la vuelta para hacerte una reverencia, abriendo la puerta completamente.
- ya es hora, el príncipe llama señorita, sígame, por favor.
sentencio, con voz quebrada, era obvio el miedo que todos le tenían a konig, los guardias que custodiaban la puerta por fuera, tenían la cabeza completamente gacha, nunca los habías visto desde que llegaste, porque nunca se te permitió salir de la habitación, pero era notable su incertidumbre, el miedo en el aire, sus cuerpos temblaban ligeramente, casi imperceptible, y sus ojos - si tu vista no te engañaban - estaban cerrados.....
Ahora si tenias miedo.
Y fue aumentando gradualmente mientras avanzaban por los pasillos, ya era mas prominente la noche, de no ser por las antorchas y los candelabros colgantes todo seria el doble de espeluznante, todo lucia solitario, no había personal por los pasillos, parcia que estabas en una zona realmente apartada del palacio.
Continuaste en un trance, hasta que llegaron a un pasillo mas grande de todos los demás con una  puerta gigante de madera realmente era imponente al final del pasillo, Elis se detuvo y se aparto hacia un lado.
- hasta aquí debo acompañarla, continue, y entre por esa puerta señorita, me retiro.
Elis no esperó ni un momento a que respondieras cuando ya estaba huyendo de la escena, desapareciendo entre el laberinto de pasillos de nuevo, dejándote sola con un silencio total, tu corazón ahora estaba en tu garganta, latiendo desenfrenadamente, ansiosa, tus manos comenzaron a sudar, miraste por donde se fue Elis y luego hacia la puerta, podías huir, pero sabias que ahora era una terrible idea, tragaste saliva con dificultad, dando los primeros pasos hacia la enorme puerta.
"No tengo miedo" repetías una y otra vez, sabiendo que era un  pobre intento de mantenerte andando, porque obviamente estabas aterrada, tus piernas se movían en automático, de lo contrario seguramente estarías petrificada en el mismo lugar, era mejor avanzar, no?
Llegaste a la puerta, con tu mano temblorosa diste dos golpes, no fuertes, pero tampoco débiles. no hubo respuesta inmediata, pero sentiste unas pisadas fuertes y pesadas detrás de la puerta, se acercaban y el suelo temblaba debajo de ellas, diste un chillido ahogado mientras tus ojos estaban totalmente abiertos, alerta, tu respiración se atoraba en tu garganta y el corazón latía increíblemente rápido, quieres huir.
Los pasos se detuvieron.
Y tu respiración, corazón, todo, se detuvo completamente, ya no escuchabas nada a tu alrededor, lo único que lograbas detectar en tu shock era una respiración, no la tuya, le de él. konig. el príncipe bestia.
La puerta se abrió, de manera muy lenta pero constante, se abrió a la mitad al mismo tiempo, dejando ver el príncipe, separando la puerta con ambos brazos, su figura se mostraba poco a poco junto con el interior de la habitación en la que él estaba.
Una chimenea encendida, el fuego ardía e iluminaba detrás de konig, generando una sombra que caía sobre ti, manteniéndote aun en estado estupefacto, recorriendo su cuerpo desde los pies hasta su cabeza. El también hizo lo mismo, tu estaba mirando desde el principio, sus ojos sin separarse de los tuyos en ningún momento, incluso cuando soltó las manillas de la puerta optando una postura mas erguida, haciendo énfasis en la diferencia de alturas.
Ninguno de los dos habló, aun  seguías hipnotizado por su mirada pesada e intensa, él carraspeó la garganta, solo entonces notaste que estabas mirando demasiado, probablemente fueron sus ojos que brillaban aún con el contraste de la luz de las llamas de la fogata de atrás, sumado a la espantosa mascara que llevaba en la cara, la misma que traía puesta el día que lo conociste. 
Desviaste la mirada rápidamente. realmente aterrada.
Con una presión en el pecho, sudor recorriendo por tu frente por tu corazón acelerado, fluyendo sangre más rápidamente, cubriendo con color tus mejillas de manera involuntaria, era su presencia que te hacía sentir mucho más pequeña, te repetías en tu cabeza.
— Tienes miedo?
Preguntó con una voz gutural y acento bien marcado. Viendo directamente a tu rostro sin ningún tipo de vergüenza ni vacilación. Siempre fue orgulloso, todo lo que tenía lo merecía, incluida una linda campesina, de la que ya había mandado a buscar todos sus antecedentes, incluida tu familia, todo de tu vida. Todo.
Tragando saliva rápidamente inclinaste la cabeza ligeramente, repitiendo los pasos que Elis te enseñó para saludar adecuadamente al príncipe. Una reverencia.
— Un saludo para usted, Príncipe König, El escudo de nuestro imperio, conquistador y protector de-
— De sus vidas, Lo sé.
Respondió él con indiferencia, era de suponer que se sabía las alabanzas hacia su persona al derecho y al revés . Pero fue muy grosero, pero no podías decir eso, solo cerraste la boca, manteniendo la reverencia unos segundos más antes de levantar tu postura, aún mirando al suelo.
Escuchaste un ligero ronroneó profundo de su pecho, estaba satisfecho , o eso creías, jugando con tus dedos , pasando tus uñas sobre ellos para regular tu ansiedad y el estrés.
Finalmente después de una eternidad, könig finalmente se movió hacia un lado, su sombra dejando de estar sobre ti, ahora el brillo de las llamas te cubrían completamente.
Levantaste la mirada, contemplando todos los platillos que pudieras imaginar, frutas, golosinas, postres, todo, tu estómago involuntariamente gruñó al oler la comida.
Una risita profunda salió de könig que solo te hizo fruncir levemente el ceño, se estaba burlando de ti de nuevo.
Pero ignorando lo molesto que era, tu boca saliva solo de imaginar el sabor de la comida en tu boca.
Tu desconocías lo que sucedía en la cabeza del príncipe, pero sin muchos rodeos, sentiste como se movió para cerrar las puertas detrás de ti, haciendo un clic al final. Bajo llave.
Recordaste cómo llegaste a esa situación y el sudor en frío regreso, junto la sensación de una mano enorme cubierta por guantes de seda tocar tu espalda y bajar hasta tu cadera.
Empujó su mano contra tu espalda baja, sin decir nada, para indicarte que podías avanzar.
Tus emociones y pensamientos estaban revueltos, tus pies se movían de manera automática bajo las órdenes del príncipe, y lo notaste.
Solo había una silla.
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vacio-inconsumerable · 6 months
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Me vas a extrañar cuando te des cuenta que te falta la persona con la que te reías por todo, con los momentos más felices, con los momentos en los que te hacía enojar, con la que te desveladas y te ibas a dormir con esa sonrisa enamorada, podrás tener a alguien, pero no cambiará el hecho de que todo lo que hiciste, lo hiciste conmigo.
-chipnervous.
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nuestro-mundo-oficial · 5 months
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CARTA DE DESPEDIDA A QUIÉN ALGUNA VEZ FUE EL AMOR DE MI VIDA
Hola, mira la verdad pensé mucho en si contestarte o no, lo cierto es que no se que hacer.
Tengo tantas cosas que decirte que a la vez me ahogo en tantos pensamientos, no creas que estoy muy feliz con todo esto que ha pasado, es triste, yo sé que también me equivoque y que tuve mis errores contigo, sin embargo siempre luché para que estuviéramos bien y juntos, trataba siempre de mejorar tanto como persona y para nuestra relación porque enserio no quería esto, no quería estar lejos de ti, porque sé que nos iba a doler y que sería demasiado difícil.
Y es difícil tener que dejarte ir porque no es simplemente terminar y cada uno por su camino, significa que te estas llevando una parte tan grande de mi, mi amor, mis tristezas, alegrias, mís locuras que fueron en algún momento de nosotros. No me despido de ti porque se que no podre olvidarme de ti como si no hubiera pasado nada, paso mucho y ambos lo sabemos. Aun así te ame de la manera que nunca ame a alguien, te sigo amando aunque ya no seamos nada y siempre seguiré aquí porque así lo prometimos.
Sabes creo que hablamos demás pues seguimos siendo jovenes, aun nos falta personas por conocer, experiencias que vivir y muchas cosas más.
Sé que no estuvimos juntos todo el tiempo que habíamos prometido pero el tiempo que estuvimos fue tan lindo.
Siendo sincera insisti hasta cansarme y la verdad es que la decepción que me dejaste es tan grande que no puedo más, me estoy hundiendo. Quiero que sepas que no estoy contigo no porque no quiera o no te quiera, no estoy interesada en alguien más ni nada de eso, si es lo que piensas, si no que por primera vez tengo que pensar en mi y no en ti, no puedo permitirme seguir contigo, si en mi cabeza siempre está el pensamiento de que estás con alguien más, chulo yo no sé qué te pasó siempre hablábamos y me prometiste que jamás harías eso, dijimos que el día en que pasara eso, era motivo para terminar para siempre, me engañaste y esa es la cruda realidad que tengo que aceptar, no solo fue una vez, me ocultaste las cosas y me las negaste en mi cara, me da tanta rabia y tristeza el hecho de que hayas estado con alguien más y que luego hayas estado conmigo, como si nada sin arrepentimiento en tantos mensajes que enviaste y todas las cosas que hiciste quien sabe por cuánto tiempo.
Desde que te conocí siempre pensé que eras el indicado y que me quedaría contigo para siempre, pero me has decepcionado de una manera tan baja y asquerosa que me dejas con el corazón en la mano hecho pedazos, enserio espero que no te arrepientas de tus actos y que hayas disfrutado las cosas que hiciste, y que sobre todo que haya valido la pena. Tanto como para tirar a la basura los 5 años de conocernos y perdón si sueno algo rencorosa pero es que esta vez si estoy muy molesta, un tanto contigo y con la vida, alch me porto bien, estoy estudiando, me estoy rompiendo la madre trabajando y por primera vez en mi vida estaba sintiendo que estaba haciendo las cosas bien, como para que pasara esto y contigo, que eres la persona que más me importa y amo, y como me dijiste tu, NO MEREZCO ESTO.
Te di todo de mi, siempre me preocupe por ti, siempre procure tratarte bien, darte regalos, mensajes, fotos, momentos especiales, llenarte de amor, incluirte en mi familia, te respete, te ame y te cuide como a nadie, nunca me gusto que llegaras a sentir que no te amaba yo te daba todo para que nunca sintieras la necesidad de irte o estar con alguien mas, pero veo que no te basto, y eso créeme que ya no queda en mi.
Pero a pesar de todo esto, quiero que recuerdes que te ame con todo mi ser, no fuiste un pasatiempo ya que contigo quise todo, quería lograr mis metas y ayudarte a lograr las tuyas y todas aquellas que en su momento tuvimos. No fui la mejor por momentos pero sé que te hice reír, procuré darte lo mejor de mi, de darte tanto amor inclusive del que me hacía falta darme a mi, contigo me sentía tan bien, me sentía en mi hogar, podía ser yo misma, no tuve miedo a entregarme a ti en todos los sentidos y de todo lo que te conté, cosas que no sabía nadie, todo fue mutuo no lo voy a negar. Me enseñaste que el amor era algo bonito, siempre te admirare por lo fuerte que eres, tan buena gente e inteligente, yo sé que no nos encontramos en nuestra mejor etapa, hubieron ciertos problemas que eran difíciles de controlar pero también gracias por ayudarme con mis problemas y tristezas, por estar en mis momentos más difíciles y nunca dejarme sola, cerré heridas y me di cuenta de lo valiosa que soy del corazón noble y hermoso que tengo aún me falta mucho por mejorar, me hubiera gustado mucho que vieras mi trayecto.
Y aunque no me arrepiento del tiempo que tuvimos, a tu lado aprendí muchas cosas, conociste mi lado más tierno, el más sincero, despertaste en mí muchas ilusiones, inclusive llegue a soñar un futuro a tu lado, me hiciste tan fuerte tan vulnerable a la vez, jamás olvidare tu nombre y tú recuerdo siempre estará en mi mente y en todos los lugares donde anduvimos.
Con los ojos llorosos y un nudo en la garganta, te escribo todo esto esperando que te tomes el tiempo de leerlo. Sabes que te quiero, y aunque cueste aceptarlo esto es lo mejor para los dos aunque cueste tanto.
Si Dios quiere que estemos juntos, lo estaremos, ya sea en unos meses e incluso unos años después, la vida se encargará de reencontrarnos y si no es así, estoy feliz de que fueras parte fundamental de mi vida.
Gracias por todo el amor incondicional y esos momentos tan extraordinarios que compartimos, por ese gran amor que nos tuvimos y por esa gran conexión que nos unió y al final nos soltó. 🐥❤️
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