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La sirenita, 1968

Película soviética

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jeje

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The woman on the moon blows kisses to a lucky stargazer in Gaston Velle’s Voyage autour d’une étoile (1906).

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Alexander McQueen: SS1999 ‘No. 13′ Prosthetic Leg, made of Carved Elm Wood.

ARCHIVE.pdf: Archive Fashion Scans, Articles & Content for the World

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Maison Martin Margiela S/S 1996 Spine Corset

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Women of Amphissa (detail) (1887), Lawrence Alma-Tadema (1836-1912)

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ANTONIO de César Moro

ANTONIO es Dios ANTONIO es el Sol ANTONIO puede destruir el mundo en un instante ANTONIO hace caer la lluvia ANTONIO puede hacer oscuro el día o luminosa la noche ANTONIO es el origen de la Vía Láctea ANTONIO tiene pies de constelaciones ANTONIO tiene aliento de estrella fugaz y de noche oscura ANTONIO es el nombre genérico de los cuerpos celestes ANTONIO es una planta carnívora con ojos de diamante ANTONIO puede crear continentes si escupe sobre el mar ANTONIO hace dormir el mundo cuando cierra los ojos ANTONIO es una montaña transparente ANTONIO es la caída de las hojas y el nacimiento del día ANTONIO es el nombre escrito con letras de fuego sobre todos los planetas ANTONIO es el Diluvio ANTONIO es la época megalítica del Mundo ANTONIO es el fuego interno de la Tierra ANTONIO es el corazón del mineral desconocido ANTONIO fecunda las estrellas ANTONIO es el Faraón el Emperador el Inca ANTONIO nace de la noche ANTONIO es venerado por los astros ANTONIO es más bello que los colosos de Memnón en Tebas ANTONIO es siete veces más grande que el Coloso de Rodas ANTONIO ocupa toda la historia del mundo ANTONIO sobrepasa en majestad el espectáculo grandioso del mar enfurecido ANTONIO es toda la Dinastía de los Ptolomeos México crece alrededor de ANTONIO

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Clarice

Ya escondí un amor por miedo de perderlo. Ya perdí un amor por esconderlo. Ya me aseguré en las manos de alguien por miedo. Ya he sentido tanto miedo, hasta el punto de no sentir mis manos. Ya expulsé a personas que amaba de mi vida, ya me arrepentí por eso. Ya pasé noches llorando hasta quedarme dormida. Ya me fui a dormir tan feliz, hasta el punto de no poder cerrar los ojos. Ya creí en amores perfectos, ya descubrí que ellos no existen. Ya amé a personas que me decepcionaron, ya decepcioné a personas que me amaron.

Ya pasé horas frente al espejo tratando de descubrir quién soy. Ya tuve tanta certeza de mí, hasta el punto de querer desaparecer. Ya mentí y me arrepentí después. Ya dije la verdad y también me arrepentí. Ya fingí no dar importancia a las personas que amaba, para más tarde llorar en silencio en un rincón. Ya sonreí llorando lágrimas de tristeza, ya lloré de tanto reír. Ya creí en personas que no valían la pena, ya dejé de creer en las que realmente valían. Ya tuve ataques de risa cuando no debía. Ya rompí platos, vasos y jarrones, de rabia. Ya extrañé mucho a alguien, pero nunca se lo dije.

Ya grité cuando debía callar, ya callé cuando debía gritar. Muchas veces dejé de decir lo que pienso para agradar a unos, otras veces hablé lo que no pensaba para molestar a otros. Ya fingí ser lo que no soy para agradar a unos, ya fingí ser lo que no soy para desagradar a otros. Ya conté chistes y más chistes sin gracia, sólo para ver a un amigo feliz. Ya inventé historias con finales felices para dar esperanza a quien la necesitaba. Ya soñé de más, hasta el punto de confundir la realidad. Ya tuve miedo de lo oscuro, hoy en lo oscuro me encuentro, me agacho, me quedo ahí.

Ya me caí muchas veces pensando que no me levantaría, ya me levanté muchas veces pensando que no me caería más.Ya llamé a quien no quería sólo para no llamar a quien realmente quería. Ya corrí detrás de un carro, por llevarse lejos a quien amaba. Ya he llamado a mi madre en el medio de la noche, huyendo de una pesadilla. Pero ella no apareció y fue una pesadilla peor todavía. Ya llamé a personas cercanas de “amigos” y descubrí que no lo eran… a algunas personas nunca necesité llamarlas de ninguna manera y siempre fueron y serán especiales para mí…

No me den fórmulas ciertas, porque no espero acertar siempre. No me muestren lo que esperan de mí porque voy a seguir mi corazón! No me hagan ser lo que no soy, no me inviten a ser igual, porque sinceramente soy diferente! No sé amar por la mitad, no sé vivir de mentira, no sé volar con los pies en la tierra. Soy siempre yo misma, pero con seguridad no seré la misma para siempre!

Me gustan los venenos más lentos, las bebidas más amargas, las drogas más potentes, las ideas más insanas, los pensamientos más complejos, los sentimientos más fuertes. Tengo un apetito voraz y los delirios más locos. Pueden hasta empujarme de un risco y yo voy a decir: “Qué más da? Me encanta volar!”

Pensamientos , Clarice Lispector

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Instructivo para cuando dejemos de hablar. Hola, esto lo escribo mientras está todo bien o mientras fingimos que está todo bien y en realidad hacemos oídos sordos a la fractura que crece en donde estamos parados, o sentados, o sobre las ruedas de las bicicletas que nos llevan. Este es el instructivo para cuando dejemos de hablar, un ritual que inventé para el punto en el que el deseo y la voluntad errática hayan terminado con lo que quedaba de algunas de nuestras mejores intenciones.  Para esto, tiene que ser de noche, tipo 22. Quiero que vayas en bicicleta hasta la esquina en la que nos encontramos por primera vez y pegues un sticker en la pared de una pollera roja. Podés conseguir estas planchas en el barrio chino, las que vienen con prenditas. Sé que es la que usé y un día me confesaste que vos también te la acordabas, o sin querer soñé que me decías eso y ahora ya no puedo distinguir si de verdad pasó. Ese día antes de ir al trabajo pensé mucho en qué ponerme para no dar ningún mensaje y no sentir que estaba yendo a una cita. Después quiero que vayas al bar que elegiste esa noche, pidas una cerveza Heineken de litro y cuando te la traigan finjas que vas al baño y te vayas sin pagar y sin tomarla. Que te subas a tu bicicleta y pedalees con toda velocidad hasta puerta del BAMA, el cine al que final seguramente nunca fuimos. Quiero que dejes sobre el banco que queda enfrente, la copia que tenés de más de ese libro de semiología de Barthes y arriba le pegues un post it amarillo vacío. Estaría bueno que seguido a eso hagas la vertical y sostengas la posición por tres segundos, pero esto no es estrictamente necesario. A continuación deberías ir por Libertad hasta Juncal y bajar por la biscicenda hasta Julián Alvarez. De ahí vas a estar cerca de la plaza que vos sabés. Dejá la bicicleta en un estacionamiento, podés pagarlo con  los 10 pesos que te deposité en la cuenta o podés usar esta plata para otra cosa. Ahora tenés dos opciones: sentarte en la puerta del edificio que queda enfrente del cartel que nos hizo reír media hora o tirarte en la mitad del banco de madera y concreto que queda enfrente del local donde no nos dejaron pasar al baño. Acá elegís si querés o te sale llorar, aunque pienso que lo ideal sería que permanezcas en silencio el tiempo justo, ya que lo cierto es que no te imagino llorando.  Cuando consideres que estás listo, skrolleá desde tu celular hasta el primer mensaje de nuestro chat en el que te pedí que ya no habláramos más y leelo en voz baja, casi susurrando. Tené cuidado con las personas sospechosas, quizás a esta altura del ritual sean algo así como las doce.  Una vez que termines podés buscar tu bicicleta. Por el camino que te resulte mejor, andá hasta  la otra plaza, esa en la que miramos fijo a un señor que hacía deporte, mientras le inventábamos las vidas a los demás. Seguramente esté cerrada, si mal no recuerdo tiene rejas altas. Quiero que te apoyes con tu bicicleta en la entrada en la que nos dimos un abrazo que creíamos que iba a ser el de la despedida verdadera, un abrazo del que costó soltarse porque era la segunda vez que te pedía que ya no nos viéramos más. Después quiero que cierres los ojos y pienses en mí, en todo el esfuerzo que hice, en lo fácil que para mí se veía tu parte, que entiendas que yo sentía que con vos tenía todo para perder, mucho más en riesgo de lo que parece. Quiero que repases las palabras que elegiste ese día, que al final no fue el final, en el que dijiste en algún momento: algunas personas son la droga y yo estoy como en un matrimonio. Cuando buscando con quién resolver el discurso lo hablé con un amigo, él me dijo: los matrimonios siempre están en crisis y también dijo: rajá, no es para vos. Pero yo seguí, no sé cuánto más y en unos términos un poco raros. Y todo lo hice porque hacía muchísimo tiempo que sólo sabía irme. Quise probar cómo era quedarse, quise transformar el vínculo que no supo ser en otra cosa, algo que no nos destruyera.  Ahora bien, cuando llegues a tu casa, en el barrio que sea en el que estés ahora, quiero que vayas a tu habitación, anotes kokeshi en un papel, y sobre una maceta vacía lo prendas fuego. Para terminar transplantá algún helecho en este recipiente.  Así capaz nuestras cenizas sirvan para algo.

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Hoje é dia de festa Hoje é dia de festa. É dia de jogar flores no mar É dia de dar presentes para Iemanjá