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-Ay, Carolina

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“La terminé y me dijo una última frase “me buscarás en todos lados pero no me vas a encontrar” después la vi marchar sin mirar atrás, pensé que era una más de sus adivinanzas sin sentido que pronto me explicaría lo que significaba. Así pasaron semanas y yo ya no sabía nada de ella, era como si se hubiera esfumado de la ciudad así que empecé a salir con muchas mujeres pero no era como yo lo tenía en mente, en cada conversación que tenía con ellas esperaba escucharla a ella dándome sus consejos o regaños inesperados, ver su cara enojada, esperaba que se lanzara mis brazos como normalmente lo hacía o simplemente verla ahí, sentada a mi lado sin decir nada… pero no ella no estaba ahí, no iba a estarlo y jamás lo estaría. En cada lugar, conversación y persona la quería a ella y sólo ella, la buscaba como loco pero no la encontraba, ahí fue donde comprendí la frase que dijo el día que la deje ir.”

— Cartas de amor.

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me alejo y apareces

me acerco y te vas

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“Es la última vez. La última vez que lo intento. Que doy el todo por el todo. Que te entrego mis letras sin pensármelo dos veces. Que te miro con ojos de amor. Que me rompes el puto corazón. Es la última vez que me dejas así: a medias, con las palabras atoradas en la boca, con las ganas de quererte toda la vida. Es la última vez que te digo que te amo, porque a partir de aquí, me esforzaré todos los días en dejar de quererte, de ver tus manías como el ancla de mis sueños. Es la última vez que me pierdo, que me abandono a mí para entregarme a ti. Amor, estoy cansada, entiéndeme. De no ser más que la puta de tus fines de semana, el bajón de todas tus calenturas, la mujer a la que buscas cuando la soledad te reclama. Te juro que es la última vez que te escribo llorando. La. Última. Vez. Y como sentencia te digo, que es la última vez que regreso a ti.”

— Paulina Mora

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Volverías esta noche, y no fue así.

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Yo era una granada...

—Un día, estaba solo pensando en nosotros, y me di cuenta de cuánto la lastimaba. Para entonces, ya era demasiado tarde para arreglar lo que había roto un par de miles de veces... su corazón. Nunca quise causarle dolor, pero, supongo que eso es lo que todos dicen... Aun así, ella estaba allí para mí, en lo malo y lo peor. Sin embargo, tomé la decisión de marcharme, porque sabía que ella no se merecía eso, y sabía que por más que la amara, yo no la merecía a ella. Así que sí, de todas las veces que me había ido y había vuelto, esta vez era para siempre... y no sé si mi acto de amor, (o como sea que quieran llamarlo) no la lastimó nuevamente, pero estaba seguro, que está sería la última vez. La verdad es que... yo era una granada.

-S.

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“Supe que querías volver Y donde quiera que te encuentres hoy, no te molestes. ¿Supiste que te quería de vuelta? Yo te quería a mi lado, quería devolver el tiempo, yo te quería de vuelta, te quería… Te quería… Supe que a las relaciones como la que era nuestra les llaman “destructivas” A veces duele saber… Supe que querías volver Pero nunca lo hiciste Y realmente te esperé ¿Supiste que me dolía no tenerte? Fuiste demasiado cruel… Supe que la vida tenía que continuar, contigo o sin ti. Aunque yo no lo quisiera. Supe de tu carta Nunca entendí por qué me escribiste una carta. ¿Supiste que me llamaron para hablarme de ti? Oh… Tal vez no debí saberlo… Y tú debiste saber que fue la mejor carta jamás leída… Lastima que esa fue tu carta suicida… Yo supe llorarte Ojala sepas volver.”

— Sa

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Si algún día me lees y te encuentras en cada letra,

si algún día entiendes lo que dolió tu partida

o algún día entiendes la forma en que te amé

y piensas que no fue como querías

recuerda que fue como sabía.

–V.

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Dijiste que estabas cansado, que no funcionábamos, que no valía la pena intentar seguir porque cada vez fallamos. Dijiste que te ibas, que mis promesas rompí una y otra vez y no confiabas más en mi.

¿Qué hay de mi?

Que soporté tus engaños, tu indiferencia, que no te dieras cuenta que me herías cada que te ibas, que rompieras tus promesas y me culparas a mi de tus errores, de tus problemas.

¿Qué hay de mi, que te quise como jamás sabrás quererte?

–V.

[repti-lectric]

No puedo odiarte,

te amé como nunca amé antes,

bajé la guardia y me volví vulnerable,

no me importó que pudieras dañarme,

solo quise aprender a quererte

y te dejé conocerme completamente,

hoy extraño a quien alguna vez amé

y a quien una vez me amó.

–V.

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Mood

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“Fui un total desastre lo admito, pero este desastre te amo más e hizo más por ti de lo que haría por sí misma.”

— vidas

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"23 Cicatrices" | Por Camila

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“Nunca entenderé muchas cosas, como todas aquellas ocasiones en que todo parecía perfectamente bien, y en un instante esa tranquilidad se desvanecía completamente.”

— Alex García.

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“Es la última vez. La última vez que lo intento. Que doy el todo por el todo. Que te entrego mis letras sin pensármelo dos veces. Que te miro con ojos de amor. Que me rompes el puto corazón. Es la última vez que me dejas así: a medias, con las palabras atoradas en la boca, con las ganas de quererte toda la vida. Es la última vez que te digo que te amo, porque a partir de aquí, me esforzaré todos los días en dejar de quererte, de ver tus manías como el ancla de mis sueños. Es la última vez que me pierdo, que me abandono a mí para entregarme a ti. Amor, estoy cansada, entiéndeme. De no ser más que la puta de tus fines de semana, el bajón de todas tus calenturas, la mujer a la que buscas cuando la soledad te reclama. Te juro que es la última vez que te escribo llorando. La. Última. Vez. Y como sentencia te digo, que es la última vez que regreso a ti.”

— Paulina Mora

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Vuelve a mi

Ese aroma tuyo lo percibo ahora

Tal ves tus recuerdos que giran

Me tráen tu esencia a mi mente

Cuánto te quise , cuánto te ame.

Un piano a lo lejos me trae

Una dulce melodía a mis oídos

Que marca una sonrisa volátil

De aquellas noches llenas a placer.

No existía nada a nuestro alrededor

Te acuerdas , no se perdía el tiempo

Cada segundo lo disfrazábamos de eterno

Mirada tras mirada nos encantábamos

Sabes no me cansaba mirarte

Esos ojos brillaban para mí

Y solo para mi , que fortuna tenía

En ellos encontraba sosiego y paz

Tus labios recorrí siempre sin afán

Los aprendí de memoria a conocer

Cada beso era extraer tu esencia

Que desembocaba en mis labios.

Extraño tus palabras casi susurros

En mis oídos que se afinaban para oírte

Sabía que lo dulce de ti , brotaba

De esa alma desnuda que me brindabas

¡ Cuánto te conocí ! Más que nadie

Tus sueños se reclinaban en mi pecho

Y yo te brindaba esa confianza

Para que desarmaras tus máscaras.

Dos manos entrelazadas dedo a dedo

Eran sometidos por esa fuerza creciente

Que nos llevaba a vivir cada impulso

Con ese desparpajo del enamoramiento

Era una historia que nacía a borbotones

Que corría entre nuestras venas

Y que circulaba entre nosotros sin leyes

Solo estamos ahí entre dos amores.

Cierro mis recuerdos en estas líneas

Y aunque ahora no estes presente

Sé que si los lees por la suerte del amor

volverias a escribir un segundo capítulo

Riberpa