Don't wanna be here? Send us removal request.
Text
Carta para mi ex
No se ni por dónde empezar ni por dónde acabar, contigo todo era una explosión de emociones y sentimientos, lo mejor es que todo era positivo y bonito. Tanto tú como yo sabemos que nos amábamos, que nos teníamos el uno al otro y que nos apoyabamos mutuamente. Yo desde que te vi sabía que tenías un toque y no se si era por tu sonrisa perfecta, por tu forma de ser o por lo enamorada que estaba de ti desde un principio.
Se que las épocas esas del 22/23 no las queremos recordar ni tú ni yo ya que lo pasamos mal y son ‘’etapas oscuras’’. Estoy llena de recuerdos, uno de ellos es cuando en los recreos te perseguía para que no te fueras solo porque me sentaba mal, aparte de que quería estar contigo. También recuerdo lo tanto que lloré ese día porque sentía que no te importaba lo que hacía por ti, que no te importaba que diera más por ti que por mi misma y no te dabas cuenta que estabas en mi cabeza las 24 horas del día.
En diciembre del 2023 empezaste con mi mejor amiga, Sandra, sabía que estabas enamorado de ella desde octubre y si te soy sincera a mi esto no me sentó muy bien, estaba enamorada tuya y ya tenía muchas ilusiones contigo. En mi cabeza sonaba esta frase cada vez que os veía juntos:
–¿Por qué ella y no yo, que me falta para ser lo que él quiere? —
Otro de mis recuerdos un poco más positivos es cuando me decías lo mucho que me querías aunque no fuéramos nada, me decías que yo demostraba más que ninguna otra persona y que sabias que yo era la indicada. Me ilusioné tanto cuando me dijiste eso que ni me lo creía, ¿sabes la típica sonrisa que te sale cuando te mandan un mensaje bonito?, pues esa era mi sonrisa pero multiplicada por 3 millones.
Llegó el día de mi cumpleaños e invité a Alba, a Sandra y a ti ya que erais lo único que tenía. Me acuerdo justo del momento que te vi bajar del autobús en la parada, tenias el regalo que me ibas a dar en las manos y eso me puso muy feliz. Te abrace cuando bajaste, y cuando vi el regalo algo de mi explotó, creo que fue una parte del corazón de tanto amor que te tenía. Siempre tiene que haber algo negativo en los cumpleaños, y en este fue cuando os vi a Sandra y a ti juntos en una parte del parque en el que estábamos y yo estaba con Alba llorando en otra parte del parque, diciendo lo mismo de siempre:
–¿Por qué ella y no yo, que me falta para ser lo que él quiere? —
Llegué a mi casa fatal, y a los pocos días decidí bloquearte de todos lados. No podía aguantar los cambios, unos días me sentía lo mejor del mundo y sentía que tocaba la luna contigo de la mano y otros días sentía que me estabas pisando la cara.
Me enteré por Sandra que en Abril terminasteis, y a los pocos días de terminar Sandra me dijo que tú seguías escribiendome. Me contabas cómo te iba en los partidos de baloncesto, también me contabas tus problemas aunque yo no estuviera ahí para contestarte. Lamento no haber estado ahí cuando lo necesitabas.
A finales de Abril te empecé a escribir de vuelta, con la excusa de que felicites a tu amiga Natalia de mi parte ya que era su cumpleaños. Empezamos a hablar más y más, me contaste lo que hiciste este tiempo y vimos que nuestro brillo no se había apagado del todo, que aún había una llamita encendida que podíamos intentar evitar que se apagara.
Y así fue, el 9 de Mayo del 2023 empezamos a salir, por fin podía decir oficialmente que el chico al que quería locamente era mi novio y te juro que te amaba a más no poder. Te juro que quería verte a todas horas, ojala haberme ido al viaje que hiciste a Londres en Julio del 2023, no soportaba que estuvieras lejos de mi. Amaba verte en el instituto, cuando me esperabas a la entrada para darme un abrazo e ir de la mano hasta clase, cuando mutuamente nos dolía cuando cada uno tenía que ir a su clase… Te admito una cosa, amaba los días de 1ro de la ESO cuando tocaba ingles a primera hora, porque era la hora en la que en el intercambio de clase me tocaba a tu lado.
Cuando acabó el verano siento que las cosas empeoraron un poco, en septiembre yo me encontraba algo mal conmigo misma y siento que desde ahí puede que lo haya pagado contigo. En noviembre decidí terminar contigo ya que sentía que te hacía cada vez más daño y lo que menos quería era ver al niño que me sacaba una sonrisa todos los días estar triste por mi culpa. Bueno, esto no duró ni un día ya que entre la charla que tuve con mi madre sobre ti, mi hermano escribiendote si tu sabias lo que me pasaba, porque se me escuchaba llorar desde su habitación… Quede contigo el día siguiente de terminar, nada más te vi me lancé a ti, me puse a llorar y lo primero que dije es:
– Te echaba de menos amor –
Justo en noviembre también fue nuestro primer beso, éramos muy vergonzosos y no sabíamos cuándo dar ese paso pero los dos queríamos hacerlo. Al final lo di yo, y cuando te lo di no entendí nada ya que me salió solo, fue como un impulso y de tener tantas ganas que al final me descontrole. Igualmente fue precioso, recuerdo incluso la hora y el lugar, el atardecer que había, recuerdo lo que sentía y la emoción que tenía. Los días siguientes después de nuestro primer beso te escapaste de casa para verme y me parecía muy tierno el hecho de que alguien quisiera pasar tanto tiempo conmigo y de ser capaz de escaparse de casa únicamente para estar a mi lado aunque sea poco tiempo y con consecuencias.
En enero me dijiste que tenías dudas sobre lo nuestro, que estás confuso y no sabías lo que querías, no sabías si de verdad querías pareja o si estabas listo para tenerla. Yo estaba asustada, no quería perderte, pero al final siempre quedabamos en un ‘’da igual, ignora todo lo que te acabo de decir, te amo’’. Desde ahí, vivía nerviosa y pensando que me ibas a dejar sola, tuve pesadillas con el hecho de que me dejaras.
Y llegó marzo, maldito mes de marzo, sobretodo el 14 de marzo a las 00:20 de la noche. Ese día a esa hora me dejaste con el corazón roto en las manos ya que me dejaste con un
–Te quiero pero no quiero nada –
Recuerdo aquella noche como si fuera hace 5 minutos, recuerdo cada lágrima y cada sollozo, recuerdo las veces que re lei nuestro chat, recuerdo cuando mire los mensajes tuyos de WhatsApp del día anterior diciendo:
–Te amo mi princesa –
Al día siguiente me levanté pensando que todo era una pesadilla, pero llegué al instituto y no me estabas esperando en la entrada, y tampoco recibí un mensaje tuyo diciéndome los buenos días y que tenias ganas de verme. En mayo volvimos a hablarnos, y resulta que le convencí para que quedáramos y un rato con la excusa de ‘’quiero verte’’, aunque en realidad quería verle a los ojos y decirle por última vez las siguientes frases:
– Te amo –
– ¿Te digo un secreto? Me encanta tu sonrisa –
Quería darle de la mano por última vez, acariciarle el pelo donde a él le gusta, mirarle a los ojos, poner mis piernas encima de las suyas, reírme con él y ver por última vez su sonrisa.
Los mejores momentos de mi vida los pasé con él, y los volvería a repetir un millón de veces más. Con él me sentía especial, sentía que éramos inseparables y con el de verdad veía mi futuro. Me imaginaba a mis hijos llamándole papá, a nosotros en nuestra propia casa, nosotros casandonos o yendo de viaje a donde queramos.
79 notes
·
View notes