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#Protesta Ambiental
cuidarelplaneta · 1 year
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Protestas que marcan la diferencia La determinación de Greenpeace se siente en cada rincón del mundo. Sus acciones en Alemania y Canadá reflejan su firme compromiso con el medio ambiente.
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Primeros hitos en la historia de Greenpeace
De humildes iniciativas a grandes campañas a nivel mundial , son el arco que el tiempo trazó en la trayectoria de la ONG, que fue creciendo en importancia , llegada y convocatoria a nivel mundial. Aquí, un breve detalle de algunas de sus primeras grandes conquistas ambientales.
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Corría el año 1993. Eran tiempos en los que todo estaba por descubrirse en materia de estrategias y acciones de lucha por el cuidado medioambiental. Por aquel entonces, Greenpeace fue una de las primeras ONG en alzar la voz y en proponer avances y desarrollos concretos y sostenibles en pos de mitigar el cambio climático.
Desde las cátedras sociológicas , hoy se sostiene que el impulso que representó la acción ambiental de Greenpeace, ha jugado un papel muy significativo en el plano de la responsabilidad social que se desarrollaría a nivel mundial en aquellos tempranos años de la década del 90’.
Desde entonces, Greenpeace ha sido pionera en la concientización social respecto de algunas cuestiones clave de gran impacto. Por ejemplo, ha estado a la vanguardia en llamar la atención respecto al uso de clorofluorocarbonos (CFC). Un material que por su potencial para provocar el calentamiento climático y su efecto en la capa de ozono, era preciso alertar respecto de su uso a las comunidades globales. 
Movilización social y protocolos internacionales
También Greenpeace, fue la primera ONG cuyos integrantes se movilizaron para abogar por la eliminación temprana de las sustancias cuyo uso provocan en el medioambiente un agotamiento temprano del ozono en la atmósfera. Tema que fue debatido en la mesa de los representantes que firmaron el Protocolo de Montreal, el primer gran paso de compromiso global para el cuidado del medioambiente.
Otro hito temprano de Greenpeace ocurrió a comienzos de la década de 1990, momento en el que se desarrolló una tecnología frigorífica sin CFC, Greenfreeze, para su uso industrial. Y por este compromiso, en 1997 el Programa de Medio Ambiente de las Naciones Unidas premió a Greenpeace por ser una ONG que ha hecho “contribuciones sobresalientes a la protección de la capa de ozono de la Tierra”. En base a esta tecnología de punta, en 2011, dos quintos de la producción mundial de refrigeradores se basaron en la tecnología Greenfreeze, con más de 600 millones de unidades puestas en uso.
En los programas de acción directa, Greenpeace ha protestado en reiteradas oportunidades contra el uso del carbón. De hecho , se ha movilizado con acciones en las que voluntarios y activistas han ocupado plantas de carbón, parando la actividad y llamando la atención de la sociedad . Gracias a la difusión mediática de estos hechos, las personas han podido tomar real noción de la situación de riesgo a la que se expone el medioambiente y la gente por el desarrollo de estas actividades. En otros casos participó bloqueando los envíos de carbón y las operaciones mineras en lugares como Nueva Zelanda y Australia.
La misión clave de difundir el uso de energías renovables 
Pero​ Greenpeace no sólo denuncia la minería sino que también critica la extracción de petróleo de las arenas petrolíferas y ha utilizado la acción directa para bloquear operaciones en lugares remotos alrededor del mundo, entre ellos el caso más emblemático de esta iniciativa ha tenido lugar en Athabasca, Canadá.
Greenpeace pone de relieve la necesidad de un cambio de paradigma como alternativa al uso de las energías nucleares y a los combustibles fósiles . Como una solución al cambio climático que se agudiza, se propone el uso de las energías renovables, como la solar y la eólica. Tipos de energías cuya utilización no impacta de manera negativa en el medioambiente, ya que son no contaminantes ; tanto cuando se generan-ya que provienen de la naturaleza- y cuando se utilizan , para la generación de energía eléctrica.
Las batalla que Greenpeace plantea en lo social hoy día, es en seguir realizando acciones cuya trascendencia pueda impactar de modo contundente en los medios de comunicación y en las redes sociales. Cada activista a lo largo y ancho del planeta es un garante del derecho de cada habitante del globo por un mundo en el cual la vida pueda sostenerse . Por ello, cada integrante de la ONG no dudará en arriesgarse para llegar a buen fin cada acción en pos de la conservación medioambiental. 
En este sentido, en 2014 una embarcación contratada por Repsol, realizó prospecciones petrolíferas en aguas de Lanzarote, Canarias. Las lanchas de los activistas de Greenpeace fueron empujadas por las lanchas de la Armada. Tres activistas resultaron heridos. Entre ellos estuvo una activista italiana, que sufrió heridas en una pierna y tuvo que ser hospitalizada en Las Palmas. Aún , con incidentes que no pueden ser contemplados de antemano, las acciones se llevan adelante con la firme convicción de que la vida en el planeta Tierra no tiene una segunda oportunidad y es imprescindible hacer hoy lo que es necesario y urgente para salvaguardar la vida en su conjunto.
Originally published at https://armoniaverde.com/ on March 09, 2023.
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sintagma11 · 4 months
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Protesta por el plan de manejo ambiental del parque Centenario de ibagué.
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radiofrank · 7 months
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Poteva essere una sorta di “favola”, rischia di diventare un brutto sogno… La newsletter di questa settimana:
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reporteambiental · 1 year
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Greenpeace y su rol estratégico en el activismo ambiental
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Greenpeace es una ONG sin ánimo de lucro que, en colaboración con miles de personas asociadas alrededor del  mundo sin intereses políticos, ejerce un rol estratégico en el activismo ambiental. Su principal labor es ejercer presión sobre las empresas y los gobiernos para que tomen decisiones adecuadas en relación con los desafíos que enfrenta el mundo ante la crisis climática. 
A continuación, examinaremos como Greenpeace y su rol estratégico en las campañas para garantizar un futuro sostenible en la región, han ayudado a frenar el avance de varias políticas y acciones que perjudican al medio ambiente.
Greenpeace y su papel en el activismo ambiental 
2021
1.1 Chile prohíbe los plásticos de un solo uso
El Congreso Nacional de Chile aprueba la ley que regula y prohíbe la entrega de vasos, cubiertos, platos y otros artículos de plástico de un solo uso en los locales gastronómicos y deliverys. Además, obliga a otros comercios, como supermercados, a suspender la comercialización de bebidas en envases de plástico y reemplazarlas por materiales retornables. 
Este logro fue el resultado del trabajo en conjunto de diferentes organizaciones y de la campaña de Greenpeace “Chile sin plásticos”. 
1.2 Groenlandia prohíbe la exploración petrolera de gas para frenar el cambio climático
El gobierno del país declara que la emergencia climática es el mayor riesgo para el frágil medio ambiente ártico y se convierte en una razón válida para tomar la decisión de poner fin a la era del petróleo. Este logro histórico fue gracias al resultado de una lucha sin descanso de organizaciones y comunidades. 
Como parte de esta campaña, Greenpeace ayudó en diferentes proyectos en contra de las perforaciones petroleras en el mar Ártico. Para ello, se encargó de documentar todos los efectos negativos de esta práctica en el cambio climático. 
1.3 El tribunal de La Haya obliga a Shell a reducir sus emisiones de CO₂ en un 45% para el año 2030, en comparación con el 2019 
Esta es la primera vez que se responsabiliza a una multinacional por su contribución al cambio climático y se la condena a reducir de manera drástica las emisiones que provocan gases de efecto invernadero.
Este caso fue llevado a cabo por la organización “Amigos de la Tierra Holanda”, junto con Greenpeace Netherlands, otras ONGs  y más de 17 mil personas que colaboraron desinteresadamente. 
1.4 El megaproyecto de combustibles fósiles GNL Quebec es cancelado
El primer ministro de Quebec, François Legault, decide rechazar el proyecto que implicaba licuar y exportar gas, una terminal de exportación marina y la extensión de un oleoducto. 
Gracias a la participación de la sociedad civil y al trabajo de organizaciones como Greenpeace Canadá; se logró el objetivo.
1.5 La república democrática del Congo elimina todas las concesiones petroleras en el Parque Nacional Salonga
Greenpeace África y sus aliados trabajaron durante años para conseguir este hito histórico en la región.
2020
2.1 Se anuncia el cierre definitivo de la Mina Invierno, el único yacimiento de carbón a cielo abierto que aún operaba en Chile
Este resultado positivo se logra luego de 10 años de lucha junto a la comunidad de Magallanes e integrantes del pueblo Kawésqar. 
Greenpeace Chile fue parte de la red de organizaciones que se propusieron a la aprobación del proyecto desde su inicio. 
2.2 Bogotá declara la emergencia climática
El proyecto establece objetivos claros y mandatos específicos para tomar medidas contra el cambio climático y mitigar sus efectos en la población y en las generaciones futuras.
Desde Greenpeace Colombia se trabajó arduamente en la iniciativa a través de la campaña “Nuestra Nueva Ciudad”.
2019
3.1 El Servicio Nacional de Pesca de Chile prohíbe las cuatro concesiones de la empresa Nova Austral para instalar 138 jaulas destinadas a la producción de salmones en aguas del Canal de Beagle
Así, se logra determinar la suspensión definitiva de sus operaciones, el ingreso de peces y el montaje de estas estructuras flotantes. Se confirma a través de la Contraloría General de la República. 
3.2 Colombia prohíbe el asbesto
La Cámara de representantes aprueba el proyecto de ley que prohíbe producir, usar, comercializar y exportar este material cancerígeno en el país. 
Greenpeace Colombia impulsó la iniciativa durante dos años junto a organizaciones civiles, la Fundación Ana Cecilia Niño, universidades, ministerios, y entidades médicas y científicas. 
3.3 El Consejo de Estado de Colombia, máximo tribunal de lo contencioso-administrativo, prohíbe la actividad minera en el Páramo de Pisba
De esta manera, se frenan las actividades de explotación de carbón en la zona. Además, la alta corte solicita a la Agencia Nacional de Minería que no otorgue nuevos títulos misioneros a las campañas que pretenden concesiones en el área del páramo. 
Greenpeace Colombia reclamó durante más de cinco años la protección del páramo de Pisba junto a comunidades del departamento de Boyacá. 
3.4 La reserva natural rusa Dvinsk-Pinezhsky, un área de 300.000 hectáreas, se convierte en una de las más grandes del país
Esta determinación fue resultado de dos décadas de trabajo de Greenpeace Rusia y otras ONGs ambientalistas para cuidar el área. 
Conclusiones
Greenpeace se dedica a la defensa del medio ambiente, y la sensibilización de la población para que modifique sus actitudes y comportamientos hacia la naturaleza.
Mediante su rol estratégico en campañas de concientización ambiental , respalda iniciativas que buscan seguir trabajando en pro de un mundo más sostenible para las generaciones futuras.
Originally published at https://reporteambiental.com/ Juny 04, 2023.
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lilianapsarte · 1 year
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ARTE
En el mundo del arte, existen infinitas formas de expresión y disciplinas que abarcan desde la pintura hasta la escritura creativa. Desde el arte clásico hasta el contemporáneo, podemos encontrar una variedad de estilos y técnicas que nos conmueven y nos hacen reflexionar. Ya sea que prefieras los paisajes naturales o la abstracción, la cerámica o el videoarte, siempre habrá algo que te atrapará.…
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vintagebiker43 · 4 months
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🚨In diciannove mesi le dichiarazioni del PdC, dei suoi Ministri, degli esponenti di aree di destra e centro destra, di gruppi di nostalgici con braccio alzato, hanno tessuto il racconto di un paese che non esiste.
📸 Bilancio del governo Meloni:
👉🏻 Sei milioni in povertà assoluta 👉🏻 Lotta ai magistrati 👉🏻 No alle gare d’appalto 👉🏻 Carcere ai giornalisti 👉🏻 Carcere a chi protesta 👉🏻 Duecentomila sbarchi 👉🏻 800 milioni regalati all’Albania 👉🏻 300 milioni regalati alla Tunisia 👉🏻 Pro-Vita nei consultori
✴️ Inoltre, totale disinteresse per sanità, pensioni, scuola, stipendi, asili, ambiente, strade, mezzi pubblici, sicurezza sul lavoro.
✴️ Senza contare la truffa elettorale in piena regola per tutte le promesse non mantenute, come:
▪️Blocco navale ▪️Taglio delle accise ▪️Dicevano che il ponte sullo stretto non stava in piedi e oggi vorrebbero buttare 12 miliardi per un’opera inutile ▪️Erano contro le trivelle e oggi trivellano tutto l’Adriatico. ▪️Volevano abolire la Fornero, l’hanno mantenuta e hanno tagliato sulle pensioni. ▪️Esultavano per aver messo una tassa sulle banche ma se la sono rimangiata subito. ▪️Volevano prorogare il Superbonus fino al 2025, poi l’hanno cancellato. ▪️Volevano difendere la natalità ma hanno aumentato l’IVA su pannolini, latte in polvere e prodotti per l’infanzia. ▪️Dicevano no a nuove tasse e hanno messo 2 miliardi di nuove imposte nell’ultima legge di bilancio.
➕E si potrebbe andare ancora avanti (pos, commissioni bancarie, vitalizi, ecc).
‼️Un governo composto da persone incompetenti oltreché arroganti, che quando parlano fanno gaffe una dopo l’altra (es. Lollobrigida, Santanchè, Salvini, Sangiuliano etc.)
Ivano Panetti
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deepinsideyourbeing · 18 days
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(Des)Horas - Matías Recalt
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+18! MeanDom!Mati. Un poco de Brat!Reader, biting, CM/NF, (posible) dacrifilia, marking, sexo sin protección (kind of/mención de anticonceptivos orales), spanking, spitting, spit kink, breve aftercare, edades no especificadas. Uso de español rioplatense.
Y cuento las horas Que no pasé a tu lado Son como hojas de un papel En blanco
El tren avanzaba con un suave balanceo sobre los rieles mientras observabas la forma en que el mundo exterior comenzaba a despertar.
El cielo todavía era de unos pálidos tonos grises y azules cuando en el horizonte vislumbraste los primeros rayos de sol, los cuales comenzaron a cegarte una vez que el vidrio empañado por el frío de la madrugada se despejó.
Los árboles bordeando las vías y las siluetas lejanas de algún pueblo eran una constante promesa de serenidad que hacía que tus músculos se relajaran, por no mencionar el ruido mental ahora nulo.
Contabas en voz baja cada camino de tierra serpenteante, los destellos de agua aquí y allá, las suaves colinas cada vez más pronunciadas.
-Veo, veo.
Parpadeaste rápidamente.
-¿Qué ves? - preguntaste sin dejar de admirar el paisaje.
-Alguien con cara de culo.
Volteaste para centrar tu atención en Matías, sentado frente a vos, sosteniendo su teléfono en una mano y el termo en la otra. Estaba concentrado en la pantalla, en lo que fuera que estuviera viendo allí, pero de todas formas se tomó el tan arduo trabajo de apreciar tu semblante para molestarte.
-Tengo sueño- explicaste, pasándole el mate que sostenías hacía siglos-. Y me colgué.
-Me di cuenta- dijo y arrojó el teléfono sobre su regazo-. Falta poco.
-Mentiroso.
Una advertencia cruzó su mirada, pero su postura permaneció igual de desenfadada y mientras jugaba con la bombilla del mate (curioso, pensaste, porque siempre te decía que no hicieras eso) examinó el resto del vagón vacío.
Llevaban horas sentados en la misma posición y el cielo, estrellado e iluminándose cada vez más con el correr del tiempo, era la única compañía.
-¿Querés dormir? Te despierto antes de llegar- ofreció mientras hacía lugar en el asiento disponible con lo que él creyó era el mayor disimulo.
Te divirtió recordar su audible protesta cuando ocupaste el asiento frente a él y la sutil sugerencia que te hizo sobre tomar su lugar: esto le habría permitido estar a tu lado sin delatar sus deseos, pero sabés que también le gusta estar junto a la ventana y por eso la rechazaste. Te pareció tentador dormir sobre su regazo o en su hombro, pero también molestarlo.
-Bueno.
Mientras recogía sus cosas para hacerlas a un lado, con una sonrisa de satisfacción que intentaba ocultar, buscaste una posición más cómoda en tu lugar y cerraste los ojos. Luego de unos instantes de tenso silencio volviste a abrirlos para encontrarte con su cara de molestia y sus ojos fijos en la pantalla del dispositivo nuevamente.
Una risa escapó de tu boca.
-Sos una boluda.
-No te enojes, tonto- estiraste una pierna y tocaste con tu pie descalzo su rodilla-. Vos siempre me hacés lo mismo y yo no me enojo.
-Es diferente.
Capturó tu pie y comenzó a masajearlo distraídamente.
-¿Qué vamos a hacer cuando lleguemos?
-Vos, dormir.
-¿Y vos?
-No sé.
Ignoraste su intento de despertar tu curiosidad y obligarte a preguntar. Él continuó con el masaje en silencio, procurando ayudarte a relajarte porque sabía que necesitabas dormir –consciente de los días que llevabas sin pegar ojo–, fingiendo abstraerse en el paisaje del otro lado de la ventana y en los asientos sin dueño.
El silencio del ambiente y sus manos sobre tu piel eran como un somnífero y tus ojos se cerraban en contra de tu voluntad una y otra vez, tu cabeza caía repentinamente en más de una ocasión y él reía en silencio cuando te veía despertar sobresaltada. No recordaba cuándo fue la última vez que te vio batallar tanto para mantenerte despierta.
-Vení acá, dale.
El tono de su voz era firme y notaste un deje de preocupación que rara vez te permitía oír. Dejaste en tu asiento tu mochila y tu teléfono, como si existiera la mínima posibilidad de que alguien fuera a ocuparlo por accidente en caso de estar vacío, y cuando te sentaste a su lado tu cuerpo se mantuvo tan cerca del suyo como era posible.
-Despertame antes de llegar- le recordaste-, no quiero olvidarme nada.
Besaste su mejilla y cuando te recostaste sobre su hombro él besó tu cabello. Los minutos pasaron y Matías podía sentir la manera en que te relajabas, oír tu respiración ralentizándose y sentir la tensión abandonando tus dedos, cerrados débilmente sobre su brazo, pero sabía que aún estabas muy despierta y que probablemente no fueras a dormir en lo absoluto.
-¿Escuchamos música?- propusiste cuando ya llevabas varios kilómetros recostada en su hombro. El cielo vestía ahora con tonos rosados y los girasoles cobraban vida nuevamente-. ¿Mati...?
Estaba dormido.
Cuando te reincorporaste, lentamente y cuidando no despertarlo, permaneciste en tu lugar para contemplar su perfil. Mientras dormía juraste que podía ser un ángel, alguien diferente, sereno y desprovisto de sarcasmo, pero no estabas segura de querer que fuera así... Porque también era un ángel cuando te ordenó ponerte de pie cada dos horas -molestándose porque intentaste negarte y amenazando con castigarte- para recorrer el vagón.
La primera vez que preguntaste, cuando te hizo dejar tu asiento durante un vuelo, la única explicación que recibiste fue algo entre las líneas de “las pastillas”. No comprendiste qué intentaba decir y cuando te inclinaste hacia él para preguntar, argumentando que te sentías perfectamente bien, su respuesta fue:
-Porque yo lo digo. Punto.
Más tarde ese mismo día, en uno de esos escasos momentos en los que expresa verbalmente los motivos que lo preocupan, explicó que intentaba asegurarse de que no sufrieras una trombosis. Intentaste no reír por su expresión de horror y besaste su mejilla, conmovida por un detalle tan pequeño pero valioso, mientras él –avergonzado– intentaba apartarte.
Volviste a recostarte sobre su hombro, todavía recordando ese momento. No dormiste.
Horas más tarde llegaron a destino y se registraron en el hotel que Matías escogió sin comentarte los detalles. Mientras él se encargaba del papeleo vos te perdiste observando los cuadros expuestos en el salón principal, leyendo las inscripciones que los acompañaban, memorizando a través de las ventanas los detalles en el interminable y vacío jardín.
Durante el desayuno, con sus teléfonos apagados y olvidados intencionalmente en la habitación, te prohibió tomar café. Intentaste confiar en él y no protestar porque, después de todo y sin importar sus métodos, Matías sabe qué es lo mejor para vos... pero tu rostro te traicionó.
-¿Qué te pasa?- preguntó mientras sorbía de su taza.
-¿Por qué no puedo?
-Quiero que duermas bien esta noche.
-Son las diez de la mañana, Matías.
-¿Y…? Te conozco.
Escogiste morderte la lengua en lugar de argumentar en su contra y en tu mente se sucedieron las imágenes de los últimos días: café o una bebida energizante por la mañana, cerca de media tarde y también cuando el reloj marcaba las siete. Matías se aseguró de vigilarte, pero cualquier mínima oportunidad que tenías, la tomabas. Literalmente.
Tu novio dejó pasar tus contestaciones malhumoradas y tus expresiones de molestia, consciente del efecto de la falta de descanso, esforzándose por distraerte con las actividades del lugar y arrastrándote con él para una larga caminata. Si conseguía agotarte lo suficiente para que tomaras una siesta, su plan podría considerarse un éxito.
Estaba convencido de que lo había logrado hasta que salió de la ducha cerca de las cinco. Encontró la habitación vacía, la cama fría como evidencia de que te habías marchado hacía tiempo –y en absoluto silencio, tenía que reconocer tu habilidad-; depositó sobre la pequeña mesa de noche el vaso donde colocaron las flores que recogiste mientras caminaban, ahora colmado con agua, y abandonó la habitación.
Te sorprendió en el jardín, ocupando una de las mesas más lejanas y tecleando rápidamente sobre la pantalla de tu celular, en trance. Sobre el cristal descansaba una taza y Matías supo de inmediato que contenía restos de café. Tomó aire antes de recorrer la distancia que los separaba y carraspear para llamar tu atención.
-¿Qué?- preguntaste con fingida inocencia.
-¿Qué hacés?
-Nada.
Fue su turno de morderse la lengua.
-¿Estaba rico el café?
-Re.
Volteó para corroborar que nadie estuviera cerca.
-Escuchame una cosa- dijo mientras tiraba de tu cabello para obligarte a mirarlo-. ¿Yo no te dije que…?
-Tenía sueño.
Tiró más fuerte y evitaste quejarte. No querías darle la satisfacción.
-¿Y por qué no te quedaste durmiendo?
-No podía.
Te soltó bruscamente y tomó tu teléfono. Permaneciste en silencio sólo por la amenaza que dejaron entrever sus ojos, en el brillo de sus pupilas la promesa de una noche interminable, pero aún así resultaba tentadora la idea de seguir provocándolo, exigirle que te entregara tu teléfono, enloquecerlo en frente de otras personas, hacer que centrara toda su atención en vos.
Qué bueno que no lo hiciste, pensás ahora, porque no creés soportar más que esto.
En algún momento dejaste de contar las nalgadas, perdida en un mar de lágrimas y súplicas, pero Matías encontró una solución rápida y eficiente para no tener que escuchar tus lamentos: te despojó de tu ropa interior, que ya relucía con las gotas de tu excitación, para luego introducirla en tu boca.
De vez en cuando finge sentir compasión y sus manos se deslizan, con cariño y cuidado, sobre tu piel ya sensible; luego de unos segundos recuerda el café, la manera en que le faltaste el respeto desafiando su autoridad, ignorando y arruinando sus intentos de cuidarte, y reemplaza las suaves yemas de sus dedos con sus uñas no tan cortas para hacerte llorar.
Ignora tu cuerpo tiritando sobre su regazo y continúa sosteniendo tus muñecas contra tu espalda, empleando más fuerza de la necesaria. No le preocupa que te resulte doloroso, obvio, porque no le importa provocarte dolor y la prueba de ello son también los golpes en la parte posterior de tus muslos. Es una zona que procura evitar, consciente de cuánto cuidado necesitará posteriormente, pero…
-Cómo te gusta romperme las pelotas- reclama-. Siempre lo mismo con vos.
Por fin suelta tus muñecas, regocijándose con un último golpe que impacta entre tus muslos, para luego manipular tu cuerpo de manera brusca y arrojarte sobre el colchón. El impacto te hace quejarte y retirás la prenda de tu boca, sin ser consciente de lo excitante que es para tu novio ver que esta está empapada con tu saliva.
Las lágrimas se deslizan por tus mejillas como un río y caen directamente sobre las sábanas cuando las mordés, esforzándote inútilmente por soportar el ardor que recorre todas las zonas que Matías marcó sin consideración. Escuchás el lejano sonido de su ropa y suspirás, pero el alivio es fugaz porque pronto lo sentís sentándose sobre tus muslos.
Aún lleva puesto el pantalón y el material reaviva el fuego en tu piel.
-Calladita- ordena.
Tomás aire y reprimís un gemido cuando desliza su punta entre tus pliegues húmedos, presionando sobre tu entrada por unos pocos segundos, como una advertencia, para luego enterrarse en tu cuerpo con una estocada que te corta la respiración. Golpeás el colchón con tu puño y sentís su respiración golpear tu oreja cuando ríe, encantando con tu reacción.
La piel sensible de tus muslos arde tanto o más que tu entrada y tu interior estrecho –no importa, tu cuerpo siempre hace lugar para él- o tus ojos.
Matías te concede un momento, probablemente para cerciorarse de que podés con esto, pero pronto se deja caer sobre tu espalda y te sorprende con movimientos profundos y un ritmo que pretende torturarte más que otorgarle placer.
Es un castigo, lo sabés en cuerpo y alma, pero junto con tus lágrimas se escapan también un sinfín de gemidos. Su miembro llenándote por completo hace desaparecer el recuerdo de todas las noches que pasaste intentando satisfacer tu necesidad con tus dedos o con los diferentes e inútiles juguetes que sólo lograron frustrarte más.
Gemís su nombre una y otra vez y él muerde tu cuello. Tus paredes se contraen en torno a su miembro y su ritmo se vuelve irregular, jadea contra tu piel antes de liberarte y besar tu cabello entre suspiros; es algo que normalmente evitaría, siempre reacio a demostrarte cuánto poder tenés sobre él, pero todo el tiempo que pasaron lejos del otro también pesa sobre sus hombros.
Jurás que podés sentir las venas que recorren su extensión y la casi inexistente curva que provoca que roce tu punto dulce de manera constante. Intentás contenerte, fingir que todavía no delataste cuánto lo estás disfrutando, porque sabés que en cualquier momento podría retomar la sesión de spanking sin importarle cuánto necesita utilizar tu cuerpo. O peor.
Sus movimientos son lentos pero profundos, su punta besando tu cérvix y estimulándote sin más esfuerzo. Y aún así no es suficiente. Matías percibe la histeria, el hartazgo y tu impaciencia, todo con sólo observar la forma en que mantenés los ojos fijos sobre la pared frente a ambos.
Sabe que intentás sacar ventaja de la situación en lugar de empeorarla. También sabe que no podés. Sos más débil que él.
-Mati…
-No, callate.
-Pero…
-¿Qué?- pregunta casi en un grito-. ¿Qué querés?
Escondés tu rostro entre las sábanas y gemís.
-Más- suplicás moviendo tus caderas. Cuando rodea tu cuello con su brazo agregás:- Ya sé que estás enojado, pero…
Su mano impacta contra tu mejilla y te obliga a mirarlo. Ejerce presión hasta que tus labios se separan en contra de tu voluntad y sin pensarlo dos veces escupe en tu boca, sin permitirte tragar y disfrutando ver cómo parte de su saliva cae por la comisura de tus labios hasta tu mentón. Cerrás los ojos y sacude tu rostro con fuerza. Su miembro palpita en tu calidez.
-Sólo por esta vez.
Abrís los ojos, desconcertada, pero comprendés el porqué de su generosidad en cuanto abandona tu interior y se arroja de espaldas contra las almohadas.
Señala su regazo, invitándote, tentándote con su erección que brilla y gotea con la excitación de los dos –manchando su ropa de una forma que te hace morderte el labio-, pero no podés evitar mirarlo con recelo porque sabés cuánto va a doler.
-Elegí- dice sin dejar de mirarte a los ojos-. Esto o…
Dirige la mirada hacia las cuerdas que dejó junto a tus flores. No, negás rápidamente.
Toma tu cintura cuando te posicionás sobre él y sonríe (arrogante, hermoso, insoportable) mientras sigue tus manos temblorosas guiándolo hacia tu entrada. Te dejás caer hasta que su miembro desaparece casi por completo en tu interior y buscás apoyo en su pecho desnudo, el ritmo de tus caderas creciendo gradualmente.
Arroja la cabeza hacia atrás y sus uñas se clavan en tu piel.
El orgullo que llena tu pecho no es suficiente para olvidar el maltrato sufrido bajo sus manos y tus sollozos resuenan en la habitación junto con los obscenos sonidos de humedad provocados por sus cuerpos allí donde se unen. En otro momento un castigo sensorial sería la peor de las condenadas pero, después de semanas sin verse, te parece la mejor recompensa.
El placer nublando tu juicio no te permite saber que estás llorando y tampoco te deja ser consciente de la fuerza con la que te movés sobre Matías. Sólo sabés que se siente muy bien y lo repetís un centenar de veces, rogando porque él comprenda lo que intentás comunicar cuando tus palabras se cortan por tu respiración desesperada y errática.
El vaivén de tus pechos llama su atención y se felicita mentalmente por haberte despojado de toda tu ropa, -tu cuerpo desnudo resaltando todavía más tu vulnerabilidad y entrega- complacido por la facilidad con la que le permitís tomar el control. Ojalá eso bastara para perdonarte por desobedecerlo, ¿no?
-¡No!- te quejás cuando su palma golpea uno de tus pechos, dirigiéndose hacia el otro rápidamente-. Me duele, Mati, no…
-¿Y?- tira de tus pezones con fuerza y tus lágrimas caen sobre su abdomen. Puede sentir tus uñas rozando su piel-. Jodete por no hacer caso.
Interrumpís tus movimientos en un intento de detenerlo, esforzándote inútilmente en concentrar todas tus fuerzas para impedir que continúe con sus acciones, pero es más rápido, más ágil, más fuerte, así que capturar tus muñecas para él no es más que un juego. Tira hasta que terminás recostada sobre su pecho y planta firmemente sus pies sobre el colchón.
Gritás contra su clavícula cuando comienza a abusar de tu interior, aún sujetando tus muñecas entre su pecho y el tuyo mientras recorre con su otra mano la zona de tus costillas, tu cintura, tu cadera, finalmente encontrando su lugar en la parte posterior de tu pierna para dejar allí su huella.
Mordés su hombro para contenerte cuando el roce constante de su pelvis contra tu clítoris amenaza con llevarte hacia el orgasmo. Tus paredes se contraen aún más, succionando su miembro con desesperación, prácticamente imposibilitando sus movimientos, pero Matías continúa con su ataque sin importarle nada más.
Intentás preguntar, un hilo de palabras indescifrables dejando tus labios junto con su nombre y unos suspiros delirantes, pero no estás segura de su respuesta hasta que sentís sus labios besando delicadamente tu mejilla. Un acto de misericordia que termina por desdibujar la línea que separa el dolor del placer. Te desborda.
Los nervios de tu cuerpo son fuego puro y su miembro todavía deslizándose entre tus paredes –imposiblemente apretadas, calientes, más húmedas que nunca- es combustible. El ruido de piel contra piel es nulo cuando tus gritos eufóricos llenan la habitación, seguidos de unos patéticos sollozos acompañando su nombre y ese par de palabras que tanto disfruta oír.
Te amo jura contra tu cuello. No está seguro de que en tu estado lo comprendas.
El violento palpitar de su miembro es la única advertencia que recibís antes de sentir los hilos de semen que brotan, caen y te marcan como suya una y otra vez. Gemís y buscás sus labios, desesperada por un poco más de contacto, besándolo con voracidad.
Te obliga a romper la distancia para ayudarte a regular tu respiración. Tus ojos aún están repletos de esa bruma, tu razonamiento luchando por retomar el lugar que le corresponde.
-Perdón- decís contra sus labios-. Perdón, perdón, perdón.
-Ya está, ya pasó.
Sus nudillos acarician tu pómulo con suavidad, un roce casi inexistente, antes de que su palma acune tu rostro y sus dedos desaparezcan en tu cabello.
-Te extrañaba mucho.
-Yo también- seca una lágrima de tu mejilla y suelta una risa-. Sabés que podías decirme, ¿no? En vez de portarte como el…
-Sí- lo interrumpís-, pero llegaste del viaje re cansado y no quería hacer que te canses más.
Finge indignación.
-Dejame que te cuide, ¿sí?- besa tus labios ante tu protesta cuando se desliza fuera de tu interior-. Vos no tenés que preocuparte por nada.
Ignora su liberación goteando por tus muslos mientras te conduce lentamente hacia la ducha, también tu saliva secándose en su hombro y tus lágrimas aún frescas corriendo por su torso, porque no cree ser capaz de controlarse en caso de prestar atención a esos detalles.
Odia recordar que pasaron tanto tiempo separados, sí, pero el consuelo es poder recuperarlo de esta manera.   
Masajea tus hombros, tu espalda y tus piernas mientras el agua caliente corre por tu cuerpo, llevándose los vestigios de la noche y actuando como somnífero; besa tu piel con una dulzura exagerada, deteniéndose en las marcas que dejó, capturando juguetonamente entre sus dientes la carne de tu cadera, tus brazos, tu mejilla y tus labios.
Matías percibe el agotamiento en tu rostro y en tus respuestas letárgicas mientras sus dedos recorren tu piel para deshacer el bálsamo. La impronta de rojos y violetas que su mano dejó en tu cuerpo tardará en desaparecer, un no-tan-sutil y firme recordatorio de porqué siempre tenés que confiar en sus órdenes y ser paciente. Finge que no considera otro castigo para los días venideros.
-Tengo sueño- susurrás cuando se desliza bajo las mantas.
-Me di cuenta.
-¿Mañana podemos dormir hasta tarde?
-No.
-¿Por qué?
-Tenemos un taller de cerámica a las nueve.
-¿Tenemos?- soltás una risa de escepticismo-. ¿Vos haciendo cerámica?
-¿De qué te reís? Vos nunca hiciste.
-No, pero…
-Callate porque te hago cosquillas- amenaza.
Besás su mejilla.
El alivio lo recorre cuando minutos más tarde nota que estás, por primera vez en muchos días, profundamente dormida.
Dejo por acá esta historia que quedaba pendiente porque es de mi agrado informarles que... ✨por fin se me cayó una idea✨, así que ya voy a dejar de robar con publicaciones atrasadas. Espero que les guste y sí, ya sé, tengo que dejar de relacionar a Matías con Babasónicos 😔
taglist: @recaltiente @chiquititamia @delusionalgirlplace @llorented @madame-fear @creative-heart ♡
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posorjaaldia · 5 months
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Ministerio de Ambiente: El ministerio del chiste y el de los más sabidos.
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Desvelamos otro caso de actuaciones cuestionables del Ministerio de Ambiente.
La protección del medio ambiente debería ser una prioridad para todos los países, sin importar su nivel de desarrollo. Sin embargo, es desalentador observar que, incluso en las naciones más avanzadas, se llevan a cabo acciones que amenazan gravemente nuestros ecosistemas.
Lo que resulta aún más alarmante es que, en ocasiones, estas acciones provienen de las mismas entidades responsables de su cuidado: los gobiernos y los Ministerios de Medio Ambiente.
Caso 'Olon - Valvonessi': Desmonte ilegal en zona protegida genera alarma.
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Las irregularidades en el Ministerio de Medio Ambiente parecen ser un patrón recurrente. Este año, sumamos un nuevo caso a las denuncias públicas que hemos realizado contra esta entidad.
Las comunidades de Olón nuevamente denuncian la violación de sus derechos y un nuevo atentado contra el medio ambiente. Las autoridades, que ya tienen un historial de acciones cuestionables, han permitido la entrada de maquinaria pesada en el área del 'Esterillo Oloncito', a pesar de las protestas de los comuneros.
El proyecto Echo-Olon es un ejemplo más de la inacción y el desinterés del Ministerio de Medio Ambiente, al que se le debería exigir rendición de cuentas.
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La primera dama y la ñañis del Ministerio de Medio Ambiente
En este Ecuador podrido desde los simientis, informa la Fundación La Iguana dio a conocer que la empresa VINAZIN S.A., responsable en la tala de Olón, estaria vinculada a la esposa del Presidente Daniel Noboa, donde está llevando a cabo un proyecto hotelsitico que ha levantado las voces de protesta de las comunidades locales y de organizaciones ambientalistas.
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¡Basta de impunidad! El chiste llamado Ministerio de Medio Ambiente y las autoridades responsables deben rendir cuentas por su inacción y falta de compromiso con el medio ambiente y las comunidades.
Quedan más preguntas en este complejo caso donde prácticamente se repiten del anterior caso:
¿Cómo el Municipio autorizo y generó el catastro?
¿Porqué Ministerio del Ambiente calla ante otro hecho donde se atenta claramente al medio ambiente?
El silencio del Ministerio es completamente inaceptable y da una muestra clara de un gobierno que solo le importa sus intereses sin importar si necesita atropellar a unos cuantos en el camino.
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blogitalianissimo · 2 years
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Tutto si può dire ai cugini d'oltralpe, però che bello vedere che i francesi sono pronti a scendere in piazza in massa a protestare. Da noi stiamo allo sfacelo e se protesti le persone si indignano contro i manifestanti piuttosto che contro il governo o il sistema che glielo sta cortesemente mettendo in quel posto (vale per tutto eh, pensioni, sanità allo sfascio, corruzione, razzismo diritti civili, ambiente, clima, fa**i al governo...).
I francesi sono sempre stati così da quando ne ho memoria, sempre scesi a protestare se qualcosa non andava bene. TBH invidio molto la mentalità del francese medio da questo punto di vista, perché come hai detto tu qua la minima protesta causa indignazione pubblica
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hookumdays · 1 year
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Había corrido a la zona de las protestas y la explosión apenas escuchó la transmisión de la Red Mágica Inalámbrica. Era una tontería, lo supo apenas decidió que quería ir al lugar de los hechos, porque Daisy era una persona miedosa y esa era justo la clase de lugares que tenía que evitar. Sin embargo, Hookum tomó su cámara mágica de todas formas y se apareció cerca del lugar de los hechos. Y aunque estaba a una distancia prudente, el humo, los gritos y el caos llegaron rápidamente hasta ella– Hey, ¿se sabe algo nuevo? –preguntó a una persona cerca de ella, asumiendo que quizás llevaba más tiempo ahí que ella. Mientras esperaba respuesta, alzó su cámara y le tomó una fotografía al ambiente, donde aún no parecía haber ni una resolución de lo que estaba pasando. 
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cuidarelplaneta · 1 year
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Símbolos y Acción Directa: La Lucha de Greenpeace Greenpeace combina simbolismo con acción directa, defendiendo la naturaleza y desafiando la contaminación. Su valentía inspira y genera conciencia sobre la urgencia de proteger nuestro planeta.
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Greenpeace y su historia de lucha contra los transgénicos
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La historia de Greenpeace recorre acciones en pos de más y mejor propuestas de ayuda en favor de los países más pobres del mundo. En este marco global se encuentran las iniciativas para frenar el envío de alimentos transgénicos a las regiones más desfavorecidas del mundo. 
Uno de los pilares en el foco de la protesta pacífica y lucha por los derechos básicos del hombre en el mundo moderno , implica el desarrollo de políticas que garanticen el derecho al acceso a una alimentación saludable. En los países más pobres y menos desarrollados, esto no es posible y muchas poblaciones quedan a la merced de la ayuda internacional. Gracias a programas sostenidos en el tiempo, en muchos casos, se puede garantizar una alimentación básica e iniciativas de enseñanza en relación a la labranza de la tierra y al aprovechamiento de cultivos locales. 
Pero, lamentablemente, en este trayecto suelen aparecer algunos proyectos que disfrazados de buenas intenciones, son altamente perjudiciales para la salud de las personas. Este es el caso de los alimentos transgénicos a los que Greenpeace se opone con férrea convicción. 
Greenpeace también ha apoyado el rechazo a la comida con cereales genéticamente modificados con los que los EE. UU. han estado surtiendo a las zonas de hambruna en las regiones africanas de Zambia. Según la ONG, los EE. UU. deberían seguir los pasos de la Unión Europea y permitir a los receptores de la ayuda elegir la ayuda alimentaria que les está siendo destinada. O , por ejemplo, en el caso de que se les proporcionara maíz transgénico, poder proceder como corresponde para atenuar sus consecuencias negativas en el organismo. Por ello se debería promover en la misma circunstancia, un programa educativo que enseñe cómo debe ser molido el maíz transgénico , tal como se hizo en otras zonas como Zimbabue y Malawi.
El arroz transgénico un peligro en potencia para la salud
Greenpeace se opone puntualmente al consumo del arroz dorado, una variedad transgénica con betacaroteno, un precursor de la vitamina A. La adición de betacaroteno al arroz se considera preventiva para la pérdida de visión en los países pobres donde el arroz dorado está destinado a la distribución en las familias. Según Greenpeace, el arroz dorado no ha logrado hacer nada en lo que respecta a la desnutrición durante 10 años, en los cuales métodos alternativos fueron aplicados para abordandar la dramática problemática de la desnutrición en todas las franjas estarias.
Las iniciativas de Greenpeace apuntan a desalentar el monocultivo de maíz y aumentar la producción de cultivos que son naturalmente ricos en nutrientes (que contienen otros nutrientes que no se encuentran en el arroz dorado además del betacaroteno). Además de luchar porque los países desarrollados gasten sus recursos destinados a la ayuda a los países más pobres, en programas de enseñanza para combatir la desnutrición. Estas iniciativas son vitales, y se enfocan en que las mujeres aprendan que con poco pueden hacer mucho. La clave de estos programas está en la combinación de alimentos básicos y accesibles cuya inteligente combinación aporta una gran cantidad de nutrientes previniendo la desnutrición y bajando las tasas de mortalidad en todas las edades.
La problemática de los alimentos transgénicos no es nueva y lleva largo tiempo en los debates instalados en los ámbitos privados y públicos. Su proliferación se debe a que por sus características genéticamente modificadas , logran adaptarse sin mayor dificultad a la mayoría de los suelos. Además su diseño de laboratorio, hace que estos cultivos puedan soportar todos los climas y temperaturas extremas. El eje de la problemática radica en que su acción en el organismo humano es peligrosa. Funcionan como disruptores hormonales causando alteración en el funcionamiento de las glándulas hormonales. Ello implica que las glándulas que gobiernan al organismo se desregulan causando serios perjuicios a la salud integral del ser humano.
Aunque Greenpeace había argumentado que la verdadera eficacia del arroz dorado en el tratamiento de las poblaciones malnutridas era su principal preocupación en 2001, en sus declaraciones recientes continuó expresando su preocupación por la salud humana y la seguridad ambiental. En particular, Greenpeace ha expresado su preocupación por la falta de pruebas de seguridad en cultivos transgénicos, como el arroz dorado, y por el hecho de utilizar la vida de las personas para promover este tipo de alimentos.
Originally published at https://armoniaverde.com/ on March 14, 2023.
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ilblogdellestorie · 2 years
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Nuova protesta del gruppo ambientalista "Ultima generazione", stavolta a Firenze.
Due attivisti hanno imbrattato di vernice arancione la facciata di Palazzo Vecchio e sono stati interrotti dal sindaco Dario Nardella, che proprio in quel momento stava effettuando un sopralluogo sull'Arengario. Il sindaco ha poi partecipato alla pulizia dell'edificio salendo su un ponteggio mobile munito di tubo dell'acqua e spazzola.
Nardella: "Nessuna causa giustifica attacco all'arte, per ripulire consumati 5mila litri acqua" - Sui social gira il video in cui si vede il sindaco che placca uno degli attivisti e grida: "Ma che c...o fai?". "L'attacco all'arte, la cultura e la bellezza, che sono inermi davanti alla violenza e che nascono per il bene dell'umanità non può mai giustificare la battaglia per una causa, anche la più condivisibile - ha poi scritto sui social Nardella -. A proposito di ambiente e di siccità, per ripulire Palazzo Vecchio dal 'blitz ambientalista' sono stati consumati più di 5mila litri d'acqua. Cinquemila".
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rubimoon45 · 1 year
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EL RUIDO DEL RELOJ -Hobie Brown x Reader
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CAPÍTULO 5: Mis derechos
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CAPÍTULOS: PRÓLOGO, CAP 1, CAP 2, CAP 3, CAP 4,
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Verano de 2023, 3 de Agosto EN ALGÚN LUGAR DE NUEVA YORK Hora: 21:49
Khristina se despertó como si hubiese estado años durmiendo. Le pesaba el cuerpo y la cabeza le dolía como si una estampida de rinocerontes le hubiera dado una paliza. También sentía el pecho comprimido, costándole respirar, y la espalda.
Y no estaba en su casa. Estaba tumbada en un sofá, no el de su casa, pues lo habría reconocido. Este estaba más duro, como los de la sala de espera de los hospitales. Y estaba en un salón amplio, no como el suyo tal vez, pero con muchas puertas, y la puerta de entrada cerrada con cerrojo. Estaba muy oscuro, y por la ��nica ventana entraba la luz de la luna. O la poca que podía entrar dando a otro muro. Había muchas plantas, y las paredes estaban llenas de pósteres y papeles. No era el mismo ambiente en el que Khristina se habría criado, pero no estaba tan mal.
Una chica apareció en el salón dando zancadas. Alta y esbelta, bastante joven pero no tanto, y caminaba erguida como una bailarina haciendo su danza. Era la chica del local, la que tocaba la guitarra. ¿Cómo se llamaba?
-Oh, ya estás despierta. Gracias a Dios. No te asustes por la ropa, es mía, yo te he cambiado. Pensaba que preferirías eso a estar llena de pintura... Yo sí. Soy Gwen.
-Yo...Me tengo que ir -miró a todos lados-. ¿Dónde está mi ropa?
-Lavándose. Tenía restos de pinturas. Tú también tenías, y he limpiado lo que he podido, pero no quería meterme donde no me llamasen.
Khristina asintió. Entendió a lo que se refería rápidamente. Ella también habría hecho eso. Prestarle su ropa pero no tocar donde no debía por pudor y porque no era su cuerpo, sino el de otra persona, y dormida.
-Eeeh, ¿no tienes ropa y mañana puedo revolvértela?
La chica se rió suavemente.
-Esta no es mi casa -señaló, divertida-. ¿No se nota? Solo estoy por aquí de paso hasta solucionar...unos problemas.
-¿No es tu casa?
-Es de Hobie.
¿Hobie? Khristina recordó a los integrantes de su banda, e instantáneamente recordó al guitarrista y chico que había estado yendo más días a su cafetería. Maldita sea. Y había hablado con él. Se había liado con el novio de aquella chica, vivían juntos, y ella los había visto.
Y por la forma con la que la estaba mirando, no parecía tan enfadada. Pero mentir era fácil. Y camuflar el enfado aún más si se tenía experiencia o eras un manipulador de manual. Algo le decía que no iba a dejarla salir por las buenas de ese sitio.
-Oye...
Entonces, alguien más entró por la puerta. Iba descalzo por estar en su casa y todo parecía diminuto a su lado. Incluso sin aquellas botas con plataforma, era una persona alta e intimidante. No solo por el gesto, sino por la postura. Pero ahora... Ahora caminaba como una persona normal y no como el vacilón que la había subido a una torre en medio de Nueva York.
-Estás contando de más, Gwen.
Khristina se levantó del sofá. Le pesaba el cuerpo, pero igualmente tenía fuerzas para mantenerse en pie y caminar. Antes, claro, estaba más cómoda.
-Me tengo que ir,
-Han cortado las calles por las protestas.
-Para algo existe el metro. Gracias a Dios que vivimos en el siglo XXI.
Gwen se enderezó.
-Tampoco funciona. Lo han anunciado después de cortar la movilidad en determinadas zonas.
Khris la miró como si la estuviera vacilando.
-Y una mierda -maldijo en alto. No se arrepintió.
No dejaban salir a nadie por el corte de carreteras y de servicios. Entonces, era imposible volver a casa y salir de aquel sitio. Ese no era el problema. El problema era que estaba al otro lado de la ciudad e ir caminando era imposible sin el metro. Tardarían horas y horas en volver a casa con sus padres. Khristina se puso blanca.
Sus padres. Mierda. Habrían visto o escuchado las noticias en algún lado. Y la habrían visto en medio de eso. Con un poco de suerte, tal vez no supieran nada a esas alturas. Pero lo dudaba. Khristina se mareó con solo pensar en la idea de que sus padres la hubiesen visto en ese tipo de situaciones. La matarían. Bueno, no literalmente porque iba fuera de su ideología, pero se encargarían de que recordase aquel castigo. Gwen la ayudó a sentarse otra vez.
¿Tenía también un instinto innato para ayudar a la gente?
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Hora: 22:20
Gwen y Hobie estaban hablando en otra sala. Ya llevaban un rato, y había subido el volumen de la televisión para no escucharles. Tal vez era privado. No quería inmiscuirse más en sus vidas; si es que era posible.
Dios. ¿En qué estaba pensando cuando lo besó? Un chico con novia se respetaba, era lo básico en la ley femenina. Y en el respecto y educación de una persona. ¡Y encima vivían juntos! Maldita fuera su suerte. ¿No tenía él también la culpa por corresponderla? Seguro que a Gwen no le importaba eso. Lo raro era que la hubiese tratado bien después de pillarles besándose... ¡En su propio concierto! ¡Maldita sea!
Un golpe le llamó la atención. Centró su concentración el lugar del que venía, en la única ventana del salón que daba a una pared de ladrillo con otra ventana y la pared pintada de graffitis. Había una escalera de incendios. Si se pensaba que era tan tonta como para no darse cuenta de lo que estaba haciendo, de lo que sospechaba, estaba equivocado. Y mucho. Tiró hacia arriba de ella, arrastrándola. Hizo un sonido tan feo que podría haberla echado para atrás de ser una niña con miedo a las alturas, como si las bisagras estuvieran desgastadas de tanto abrirla. Pero eso tampoco la detuvo.
Hobie estaba ahí arriba. Sentado al borde de la azotea y con el rostro serio. Tenía algo entre las manos.
-Cuidado cuando subas.
Khris no se lo debatió. Ni tampoco le preguntó cómo se había dado cuenta de que estaba ahí.
En vez de eso, se acercó con cuidado hacia donde estaba. En lo alto de una azotea, cómo no. Debían de gustarle mucho las alturas como para ponerse ahí y quedarse tan tranquilo, como si una caída desde ahí arriba fuera el menor de sus problemas. Aunque literalmente la había subido a un edificio más alto que ese, y luego atrapado en el aire con ese absurdo disfraz de araña metalera... Khristina pasó una pierna con cuidado y se subió, sin mirar hacia abajo para no despertar un vértigo que la pudiera matar, y se puso a su lado. Hobie tenía algo entre manos, de la forma más literal. Estaba dándole vueltas.
-No tendría que haber estado ahí, ¿verdad? En plan, no es como si alguien como yo pudiera hacer algo contra unos policías.
-Es culpa de la pasma y que son unos cabrones asesinos. Se piensan que una diferencia de color o unos ojos diferentes son la razón por la que pueden empezar a disparar.
Khristina pensó en ello.
Era una buena razón, la verdad, para odiar a toda la policía. Él era negro, e iba en contra de los ideales que se proponían en todos lados para aceptar. Sus leyes morales irían también en contra de la sociedad, seguro. Podría haber tenido experiencias en el pasado como una agresión policial injustificada de un blanco y que le haya cambiado la vida. Y ella tenía ascendencia asiática por parte de madre, concretamente coreana. Lo demostraban la forma de sus ojos y algunos de sus rasgos.
-Las leyes ahora van en nuestra contra. Pero de todos. Esto -hizo un gesto señalando con la barbilla al frente, hacia el mar de luces y sonidos- solo es el inicio.
Ella también miró.
Solo veía una ciudad normal y aún despierta frente a ellos. Ruidos de coches y ambulancias a lo lejos, donde las calles estuvieran abiertas. En aquella zona, si bien había luces en los establecimientos en los apartamentos, las calles cortadas no dejaban la entrada ni salida de vehículos. Khristina razonó en la posibilidad de hablar de lo que ambos habían estado esquivando; o al menos, ella.
-No... No voy a decir nada de lo que eres. No tengo a nadie más a quien decírselo, además. Después de esto tengo menos ganas de verme en problemas -le confesó, con la mano en el corazón aunque él pudiera pensar lo contrario.
Él solamente tarareó una respuesta, concentrado en lo que tenía entre manos.
-NPI*, tía. Aunque no será un problema. No altera nada, así que los de arriba estarán a otras cosas.
*[NPI: jerga. No Poseo esa Información]
Khristina se acercó las piernas al pecho un poco más, en busca de refugio contra sí misma. No sabía la jerga que utilizaba, pero podía hacerse una idea de lo que significaba solo sacando un poco el contexto... Más o menos.
-Nunca he dicho que sea muy lista.
-Podrías serlo y ser humilde. La gente es así... O tienes un problema contigo misma -sintió su mirada sobre ella pese a no estar mirándole-. Nah, creo que eres lo primero.
Khristina reprimió una sonrisa. Abajo, las luces de la calle parpadeaban cuando
-¿Esa chica... Gwen...?
-¿Buena onda, verdad? La recogí de la calle. Me dije "sus mechas molan, seguro que sabe hacer cosas", y desde eso vivimos juntos. Cocina bastante bien.
-Pensaba que era tu novia... O algo así. No sé.
-Nah, su pive está perdido por ahí y la tiene loca. Y los calificativos son horribles.
Volvió a mirarla, solo para encontrarse con ella devolviéndole la mirada con los ojos muy abiertos. Su risotada sonó por lo alto de la azotea. Khristina se sintió avergonzada... Muchísimo. Y su cuerpo lo demostró haciendo que empezara otro momento bochornoso del que se arrepentiría.
-Toma -le pasó un trozo de pañuelo después de rebuscar en los pequeños bolsillos de todo su atuendo. Khris lo tomó amablemente y lo puso debajo de su nariz para detener la hemorragia-. Segunda vez, ¿eh?
-Es por la presión.
-O una excusa, quién sabe. Es una buena metáfora.
Negó con la cabeza.
Él cruzó los brazos detrás del cuello, mirando al horizonte contemplativo. Los anillos de su cara resaltaban con todas las luces. Y las púas metálicas de sus muñequeras.
-No tiene.
-"El sistema se desangra" o "La sangre de los inocentes que mancha el sistema".
Khristina suspiró.
Hizo más fuerza contra su nariz, agachando la cabeza. Hobie se acercó a ella para ver cómo estaba desde más cerca... Y se volvió a alejar cuando vio lo bien que lo llevaba.
-El sistema no está tan jodido.
Hobie lanzó un silbido.
-Eso es lo que diría un capitalista.
Khristina miró el pañuelo manchado con su sangre en silencio.
Miró el mensaje muy por encima, sorbiéndose por última vez la nariz, pero lo leyó dos veces más cuando vio de quién era. Era el correo electrónico de la universidad en la que estudiaba. Y el contacto secundario del Comité Extraordinario de Becas del Estado de Nueva York. Le habían aceptado la beca.
"Esto no es capitalista", pensó inmediatamente.
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libriaco · 8 months
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Ruba delle crostatine e rischia la pena capitale
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La vicenda avrebbe dell'incredibile se la cronaca non fosse stata puntualmente annotata da un famoso e stimato cronista dell'epoca.
La cuoca aveva preparato un vassoio di tortine e il malvivente, con gesto abile e repentino, era riuscito a sottrarlo in un attimo. Il giovane non ebbe però il tempo di far sparire il corpo del reato, prova n. 1 al processo, e fu arrestato in flagrante. La vicenda si svolge in un ambiente altolocato, anzi, regale: querelante la Regina di Cuori, imputato il Fante di Cuori; in aula presiede il Giudice Re di Cuori. Testimoni, ma ben poco informati sui fatti, il Cappellaio Matto, il Leprotto Marzolino, la Cuoca e Alice.
L'Autore descrive la comunicazione ufficiale dell'accusa fatta dal Cancelliere, preannunciata da tre squilli di tromba e letta da un rotolo di pergamena:
On this the White Rabbit blew three blasts on the trumpet, and then unrolled the parchment scroll, and read as follows: The Queen of Hearts, she made some tarts, All on a summer day: The Knave of Hearts, he stole those tarts, And took them quite away! (*)
Il processo si avvolge in mille rivoli di quisquilie, condite con giochi verbali che prendono il sopravvento sulle questioni fondamentali di giusto e sbagliato, di innocenza e colpa. Alla fine non è dato sapere se il Fante sia condannato o no, dato il caos che si crea in aula e anche perché, mentre Alice protesta ad alta voce contro le sciocchezze che sta dicendo il Re, la bambina si risveglia dal sogno che stava facendo con la testa appoggiata in grembo alla sorella.
(*) Una mia resa: Di Cuori la Regina fece qualche tortina, d'estate un caldo dì; di Cuori poi il Fante le prese tutte quante e le rubò da lì!
L. Carroll, Alice’s Adventures in Wonderland [1865], online su Gutenberg, in italiano su LiberLiber.
Lewis Carroll, pseudonimo di Charles Lutwidge Dodgson (Daresbury, 27 gennaio 1832)
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