Argentina-Estudiante de Lengua y Literatura- Pseudoescritor
Don't wanna be here? Send us removal request.
Text
Abrir los ojos
caminar por las curvas del espejo
sonreir por inercia y gravedad
que mis palabras te lleguen
por medio de, a través de,
o no te lleguen
que pasen desapercibidas como las nubes,
o que se escuchen
que haya sol y truene
Yo no sé muy bien
qué es amar
más que en la memoria y los ojos.
Es medianoche y pienso
tirado en una cama
al lado de una gatita
que amar es estamparse
la frente y la nariz
contra lo invisible
abrir los ojos.
-Misael Castillo-
4 notes
·
View notes
Text
Existen ciertos momentos sublimes de la vida que son como una especie de perfección anormal, una belleza inconstante, un amor fugaz, una consciencia fugitiva.
Existen momentos terribles, como uno de esos dolores en el costado al trotar, pero que no apretan el costado, sino que agobian al alma.
Necesito uno de esos momentos, el que sea. Necesito un momento que me recuerde que estoy vivo, un momento que, con todo atrevimiento, me pegue golpazo de realidad.
Porque, tristemente (tengo que decir), a veces, uno necesita recordarse que está vivo, y que el aire no respira a la gente, y que la gente no quema al sol.
Uno necesita recordarse que los amaneceres no son tan lejanos como parecen. Uff, dejaría mi vida por un amanecer, un ratito de amanecer, o un anochecer que no tenga que ver la oscuridad inminente que deambula en mi ser.
Qué ingrato. Tener que recordarme que estoy vivo, esperar uno de esos momentos, vivir un suplicio, esperar no sé qué, mientras respiro.
Misael.
5 notes
·
View notes
Text
Morí
Hoy más que ayer, y menos que mañana, pero más fuerte que nunca, siento cómo todo comienza a florecer. Morí tantas veces con vos, ya alcanzó, ya me bastó, hoy quiero dejar de morir, para empezar a vivir. No es tu culpa, ni es mía, no hay culpables, cuando un amor no triunfa, y cuando el fuego no enciende, de nada sirve soplarle de lejos… Una noche el cielo me susurró que hay historias que entre algodones se guardan, y otras que entre penas se olvidan Y esta historia ni se guarda ni se olvida,la llevo a flor de piel, entre silencios y miradas, para contármela cuando la olvide, y para saborearla cuando me faltes.
38 notes
·
View notes
Text
Siento el latir de esta brisa
en las entrañas de tu humanidad
te revuelca y te da la mano
te invita a continuar.
Te espera para dejarte atrás
te sonríe con los ojos cerrados
te invita cuando se está por ir
te lastima para pedirte perdón.
Siento a las sonrisas despertarse,
mi corazón no está marchito;
te espera, con el alma caliente,
para hablarte de libertad.
Un caminante sin camino
que camina para olvidar,
que deja huellas, por las dudas,
la vida invite a volver atrás.
Con los ojos bien abiertos,
y la sonrisa en la oscuridad
queriendo salir a flote
queriendo perderse
queriendo volar.
0 notes
Text
Estoy aquí, ahogándome en mi miseria,
naufragando en un pasado demasiado gastado,
atormentándome con recuerdos destructivos,
alimentando sueños destruidos por la realidad.
No sé si estoy, pero me siento respirar entre tanta gente,
camino por el metro y escucho los latidos de algún que otro corazón,
esquivo las miradas de algunos, y conecto con otros,
para mentirme que todavía estoy.
Lo cierto es que me estoy yendo, porque este tren ya frenó muchas veces
es hora de subirme y dar la espalda
es hora de irme.
Encarar nuevas aventuras, sufrir nuevos dolores, disfrutar nuevas risas.
El mundo está agitado, pero el tiempo, por más apurado que gire, nunca se acaba.
1 note
·
View note
Text
Derrumbame el infierno
esa sonrisa se deja ver,
el miedo empuja,
pero hay dos latiendo en uno.
Convidame tu universo,
caída libre, mundo inferior,
de a poco, con fuerza
no estoy lejos, ni gastado.
Camino, como puedo, lento
y, quizás, un tanto triste
después de todo, cuesta llegar,
incluso más que seguir,
alma perversa,
mente puta,
creo volar, no me bajes.
Salto al encuentro.
0 notes
Text
Si esta soledad lo permite, me permitiré desear un poco, entre los árboles y las flores. Si lo permite, quizá hasta me anime a animarme a deambular sin rumbo. Donde el viento calla habla el corazón Y donde ilumina el sol, donde silban los gorriones, se desnuda el alma. Tanta distancia entre seres que no quieren ser nadie. Y si! Esta soledad debe comprender que soy nadie, en este mundo donde los corazones no hablan, y las almas no se desnudan, donde los humanos son bichos, y las mascotas no sonríen Quizá, no sea nadie, y aspire a nada Pero camino bajo el sol, con el corazón en la mano, Y el alma en el pecho.
6 notes
·
View notes
Text
Hay una dicotomía absurdamente evidente entre lo que las personas son y lo que creemos que son, supongo que un poco el amor es eso no? Lo que construimos a partir del enamoramiento. Esto resulta en un aguante constante de decir, bueno, no me gustan todas estas cosas, pero a pesar de eso estoy acá. Y así, nos quedamos, nos sometemos a una lucha entre la imagen que conocimos, y la que construimos a partir de eso. Nos sometemos a no aceptar que lo que vemos es lo que es, no rompemos con lo que nos idealizamos, no rompemos con nada, nos quedamos y aceptamos todo. Y ahí es cuando perdimos, cuando dejamos de querernos para querer a alguien más, cuando nos mentimos para no aceptar cuando naufragamos para no flotar cuando idealizamos para no asumir cuando ganamos, sólo, para no perder.
3 notes
·
View notes
Text
Tan perfecta, increíble, indiscutiblemente inteligente, tan vos Tan llena de pasado, de historias que sacuden los deseos de cualquiera Tan fuerte, tan intensa tan llena de futuro, de vida, y de fuerzas Soñás con la imprudencia de la adolescencia, y el coraje de la adultez Tan vos, corrés con la suerte del transcurrir del tiempo, y caminás con los restos, aburridos y tediosos, del presente. Tan diáfana, incapaz, por tu aventura constante, de firmar un contrato. Y eso no te hace menos, ni te hace más, no te hace puta, ni te hace virgen, eso, sólo te hace libre.
0 notes
Text
Chico Spinetta
Te vi y supe que me ibas a volar la cabeza con una sola mirada. Te vi y predije que vos ibas a moverme el piso con una sola pisada. Te vi. Ya te conocía pero nunca me había fijado en vos hasta que vi el brillo que resplandecía de tu ser. Sabía que eras un pibe bien. Un flaco de los que se sientan en el pasto a hablar de la vida, van a museos a ver y analizar obras de arte que ninguno entiende, sienten la música y hacen de ella una pasión inagotable. Nunca observé tu resplandor. Y por casualidades de la vida, te vi en una foto y empecé a buscarte por todos lados. Necesitaba encontrarte y saber de vos. Y te encontré. Te vi con tus guitarras, tu piano, tu bajo, tus máximas posesiones. Te vi tocarlos tan suave y con una delicadeza semejante a la de cuando acariciás una mujer. Te vi admirar vinilos de Almendra, Pescado Rabioso, Suí Generis, y otras grandes obras. Te vi sonreír de placer al escuchar el conjunto de melodías que formaban esos discos. Te vi reir mirando una obra de arte inentendible. Te vi, tan tranquilo, tan sereno, tan racional. Te vi y supe que ibas a ser mi chico Spinetta. De alguna manera, de cerca o de lejos, brillando sin cesar y creando en mí el inagotable sentimiento de libertad.
414 notes
·
View notes