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Día 222:

Hoy es jueves, pero al ser mañana feriado, parece el termino de la semana. Una semana llena de esperas. Una semana bastante agotadora psicológicamente, todas las mañanas despertaba esperando un correo de trabajo, avanzar en alguno de los procesos, o que nos dieran una fecha para entregarnos el departamentos. Cada notificación, cada correo era una ilusión que se rompía, cada día me hacía más a la idea de que no me llamarán de esos trabajos a los que postule. La incertidumbre siempre ha sido mi mayo enemiga, y ahora mismo me enfrento a ella a diario. Es cansador, estoy cansado, pero sé que lo estoy porque estoy dando mi mayor esfuerzo, por encontrar un buen trabajo, uno que me sea un reto y además me brinde lo suficiente para poder hacer de ese departamento nuestro hogar, uno que me permita darte el anillo más hermoso que pueda encontrar, que me permita llenarte de buenos momentos. Sé que puedo hacerte feliz con pequeños gestos, pero también sé que desde que estaba en mis últimos años de universidad, una vida contigo era todo lo que me motivaba a esforzarme cada día, y ahora no es distinto. Quiero que estés orgullosa de mi, y a pesar de que para ello no necesite riquezas, te las quiero dar. Quiero darte la vida que una princesa merece. ... Haz sido un gran apoyo en estos días, y por mi parte no puede ser distinto. Decidiste tomar una decisión muy importante en tu vida, una que también me involucraba a mi. El cuidarnos de no volver a pasar por algo tan fuerte como lo de Alma. Por mi parte y como me pediste, haré mi parte, nos cuidaré y protegeré, y va de la mano con lo escrito más arriba. Siempre lo he dicho, y no es por cliché, eres una persona muy valiente y decidida, pero a veces necesitas apoyo, y cuando así sea, seré el primero en esperar tu aviso. Por siempre será así. ... Estos últimos días las cosas han ido bien, hemos sabido hablar y expresar nuestro amor, estoy muy agradecido por ello. Nuestra compañía es un alivio en este mundo de incertidumbres, en donde espero sepas, que siempre me tendrás como certeza. Pues tú eres para mi, la prueba más grande de que el amor existe, y a esa certeza le soy fiel todos los días. A esa misma certeza que me apoya y levanta, esa misma que me anhela y espera. Esa misma que quiero tener toda mi vida, y espero en unos meses pueda ser así, puedas aceptarme como tu certeza. Si bien ahora mismo, cuando solemos hablar y ver nuestra serie, no me estás hablando, espero que sea por ese cansancio que sueles sentir, por el agotamiento de esta vida adulta. Cuando despiertes y quieras mirar hacia mi, estaré esperando por ti, así como los girasoles que te regalé (que espero hayas conservado) miran al sol y los buscan sin cansancio. Para ti, mi fuerza, mi cielo, mi sol, mi mundo. P.D: No sabes cuánto quisiera acompañarte en estas noches frías, y cuánto espero por verte o hablar contigo.

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Día 217:

La noche de ayer fue como de película, con esos momentos que no pasan por la cabeza de nadie. Quién diría que vería una pedida de matrimonio por primera vez, que el corte de luz nos entregaría un concierto intimo y en primera fila, que compartiríamos y seriamos tan amigos como siempre., que tu hermana me volviera a seguir tiene un significado inmenso para mi corazón. Será un recuerdo que guardaré con mucho amor, que será una hermosa historia que contar. Sé que las cosas no estaban del todo bien entre nosotros dos, e incluso pensé en decirte que fueran solamente ustedes, pero leer tu mensaje fue un darle arranque a mi corazón que había estado tenue durante todo el día. Si bien nuestra tensión nos hacia parecer unos divorciados, a veces prefiero eso que no estar a tu lado, y no lo romantizo, pero si lo entiendo, y acepto, que no todo siempre estará perfecto, pero si voy a estar bien. No cambiaría nada del día de ayer, no cambiaría nada de nosotros, si bien este contexto no es ameno para ninguno, sé que estamos dando lo mejor del otro, y eso nos da noches como las de ayer.

... Hay que sanar de adentro hacia afuera. Hace unos días escuché eso, y es lo que he intentado hacer, después de cada error, he intentado hacer cosas para compensarlo, mostrar que puedo arreglarlo o cambiar. Y esta bien por supuesto, pero me he encargado tanto del exterior, que olvido que tiene que venir de adentro. Quizá esa sea la razón de mis retrocesos, al menos fue lo que hizo pensar. Porque no estoy bien, no tengo una buena relación con mi familia, ni con mi amada ahora mismo, ni tampoco trabajo e incluso debo millones. Estoy cansado, cansado de todo lo que yo he mismo he provocado, hasta el punto de no querer seguir luchando. Hace poco me dijiste que estaba bien llorar o sentirme mal, que tenia el derecho de hacerlo, y hace unos días lo empecé a hacer. Pero son tantas cosas, tanto realmente que al dejarlo manifestarse me derriba. Tengo mucho dentro de mi por sanar, que comenzaré a hacerlo para avanzar, para que sea un avance real y no superficial, quiero en un punto mirar hacia atrás y desconocerme, pero a la vez abrazarme, no quiero alejarme de quién soy, sino guiarme. Este es un camino que, aunque tenga tu apoyo, estoy recorriendo solo, y a veces, simplemente me canso. Y está bien así, está bien no poder más. Lo único que no me permitiré es abandonarlo. Sé que puedo hacerlo, lo estoy haciendo, pero necesito tomar aliento.

En días como hoy es cuando más te extraño, cuando más quisiera regalarte mis domingos. No sabes cuánto extraño vivir a tu lado, no sabes cuánto anhelo volver a hacerlo. Es mi único deseo, y aunque este cansado, apenas pueda seguiré trabajando para ello. Es mi promesa más grande.

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Día 215:

Recordar lo que pasó a estas alturas es complicado, porque todo ya está dicho, no hay algo que decir sin parecer repetitivo, y no es que me importe serlo, sino que siento que deseas escuchar algo más, o que no quieres escuchar lo mismo. Por eso mi silencio. Sé lo perturbador que debe ser tener esos pensamientos repentinos. También me pasan, y en esos momentos solo agito mi cabeza en negación, como cuando un padre desaprueba a su hijo. como si eso pudiera borrarlo. Pero no es así, por el contrario hay que enfrentarlos, y eso fue lo que pasó hoy. Si describirte los hechos fue difícil y desagradable para mi, no imagino como debió haber sido para ti. Volver a un día que desearía olvidar para siempre solo remueve y pone en frente a la mierda de persona que llegué a ser, me recuerda lo delicado que era todo aquello que decidí romper con mi egoísmo. Espero que sea para avanzar, al menos esa era la intención, retroceder o parar para observar, para decidir si avanzar, ya sea hacia el mismo lado o uno nuevo. Por mi parte sigo firme en mi lucha, por despegarme de ese ser, por jamás recrear un momento así en mi vida, y así será. Hablo con decisión, porque esta decisión la tome hace meses, y por más retrocesos que haya, seguirá siendo la misma, hasta el día que ya no la quieras. Sé que no es así, que si me preguntaste como fue es porque quieres salir de la duda, y afrontar la verdad, hoy la escuchaste una vez más. Solo espero que ese pensar sea en pro de tu tranquilidad. Siempre lo digo y cuando lo escribo también temo, pero lo que decidas mejor para ti, será lo que haré. Mientras tanto y siempre que tenga la oportunidad, te demostraré lo que significas para mi, y el como aprendo de mis errores. Siempre que tenga la oportunidad te demostraré porque eres tú solamente la persona que quiero en mi vida para siempre, porque no tienes comparación. Al abrazarte esta tarde no pensé que nuestro día terminaría de esta forma, sin hablarnos, cada quien pensando en su pequeño mundo. Pero qué es sol de invierno sin lluvia de por medio, que es la vida sin atender a eso que nos preocupa, en lugar de ignorarlo. Hoy será una noche de viernes en donde te extrañaré más de lo habitual, pues probablemente no escucharé tu despedida, más si recordaré las horas previas a nuestra conversación, y reflexionaré sobre esta última. Buenas noches mi amor, descansa, pues hoy terminaste una semana más de tu internado, una semana más cerca de terminar eso que tanto te ha costado. Mereces descansar, y mereces mi amor, espero poder dartelo todo, por más tiempo que me tome. Por más noches en vela que eso signifique. Te amo.

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Día 211:

Ha llovido sobre mojado.

Hace mucho no pasaba por aquí. La razón no es muy grata. Hace 5 días me echaron de mi trabajo, y si bien he tenido mucha contención, tanto de mi familia como de mi amada, estoy en un constante vaivén de cuáles son realmente mis capacidades.

Es primera vez en mi vida que me pasa, y en un momento particularmente apretado económicamente, a ratos pienso que fue para pagar el dinero que perdí y empezar de cero en busca de nuevas oportunidades. Pero a la vez pienso que es una desgracia de la que no sé si saldré bien parado.

Siempre me ha preocupado el futuro, y hoy es más encierto que nunca, todo lo que tuve ya no está, no eres mi pareja, no tengo ese trabajo, ni un lugar donde estar cómodo. Ese pensar me derrumba.

Pero al final de todo, y a pesar de todo, haz estado ahí para amarme, haciendome notar una vez más que no valgo por mi trabajo o lo que tengo, sino por mi persona. Gracias, por demostrarme tu amor y apoyo incondicional.

Prometo hacer lo posible para caer parado, cuál gato, casi siempre lo hago. Y espero que ahora no sea distinto. Sé que debo ser paciente, y tú me ayudas en eso.

Mientras no me faltes en mi vida, no bajaré mis brazos.

...

Tanto es ese apoyo, que el fin de esa mala semana, fuimos a refugiarnos a la playa. Fue un viaje improvisado, y cuándo así es, nos sale perfecto.

Para mi, amor mío, me entregaste durante unos días un oído al cual hablar, brazos a los que aferrarme, y un refugio en el que pensar. Muchos momentos que me hicieron valorar, que por más grave que parezca, soy millonario sin dudarlo.

No hicimos más que el amor, comer bien, conversar y mirar nuestra serie. No había más que hacer, no teníamos otro propósito, pues cada quién tenía una razón para estar ahí, y el otro lo sabía muy bien.

No necesitamos llegar a un acuerdo, para saber que nos hace falta, y eso es conexión. Ese atardecr a tu lado y el viaje lleno de nostalgia fue la firma final, de una semana que parecía olvidable convirtiéndose en una de las más lindas de este otoño.

Te amo por todo mi corazón, llenas mi vida como el naranjo llenaba el cielo la tarde de ayer, de una forma hermosa y mágica.

Ha llovido sobre mojado, pero en algún momento parará. Sé que en algún momento te podré ver, y todo calmará. Me darás el aliento para seguir.

Gracias una vez más. Y te ruego me des más razones para agradecerte. Que me dejes amarte hasta morir. "Ahi vamos, lento pero seguro"

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Día 205:

No puedo creer que ya sean más de 200 noches sin ti, más de 200 días resumidos en escritos, historias y acontecimientos, tantos buenos como malos. Al igual que los días, hoy fue uno no tan bueno. La incomodidad se hizo presente una vez más, el hecho de no poder tener un hogar donde poder descansar genero una tarde incomoda, que había partido bien, pero a medida que el cansancio se hacia presente, el malestar producto de la incomodidad también. Intenté dar lo mejor de mi, la verdad tampoco estaba con todo en animo del mundo, pero intentaba apreciar ese momento, por más silencioso que fuera. A veces no hay más que hacer que callar, no hay más que hacer que aceptar que más nada se puede hacer. Como quisiera ofrecerte un lugar donde puedas descansar, donde te puedas sentir cómoda y que sea tu refugio. Es lo que quiero construir. Una vez este listo sé que seguirán habiendo días así, pero tendré la certeza de poder besarte y abrazarte antes de dormir. Podré consentirte o hacer algo más al respecto que simplemente tratar de sacar un tema de conversación. Mientras tanto, seguiré agradeciendo que a pesar de todo, estabas ahí conmigo. Tal vez solo porque estabas esperando a tu hermana, tal vez tu enojo también era por mi torpeza, pero aún así estabas. Espero que siga siendo así, que sigamos estando juntos, tanto en los días buenos como en los días malos. Y también espero que esta noche puedas descansar, puedas encontrar paz en tu cuarto, distracción en tus pasatiempos, o respuestas en tus reflexiones. Sea lo que pase, espero que sea para mejor, y que estes bien, que esta bien tener un día mal, y que no espero que me entretengas, ni te autorizo a no hacerlo. Entiendo tu malestar, así como tú me entiendes a mi. Soporto tu irritabilidad, como tú mi torpeza. Acepto tus malos momentos, porque eres más que mi pareja, eres una profesional, una estudiante, una madre, hija y hermana. Eres todo y aún así, te queda tiempo para mi ser. Sé que también intentas dar lo mejor de ti, tanto para mi como para todos, como para ti. Y hoy es un día que debes dedicarte, una noche en la que debes mimarte. Quizás no necesites que te lo diga, pero es lo único que puedo hacer. Gracias. Buenas noches mi amor, descansa.

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Día 203:

Un domingo más a tu lado. Un domingo más claro. Tu mensaje ayer en la noche para vernos hoy día fue la sorpresa más linda de esta semana, y que después de pasar una hermosa tarde juntos, me hayas dicho textualmente que querías verte, me hace sentir lleno por dentro. Sé que cada vez que salimos es así, pero escucharlo de tu boca, es una afirmación que entrega goce a mi alma intranquila. Al volver a mi casa pensaba en este reencuentro que hay con la realidad al despedirnos y vernos marchar. Pero en ese mismo pensamiento entendí que no es así, que el estar en esta casa no es toda mi realidad. Mi también está en el Jumbo cada vez que te voy a ver, o ese motel en el que nos refugiamos a espera de nuestro departamento, incluso en ese auto en el que llevamos miles de kilómetros recorridos. Mi realidad eres tú, tu familia, la mía y mis amigos. La realidad es que ya no vivimos juntos, pero aprovechamos cualquier instancia para estarlo. La realidad es que estamos construyendo aquello que queremos, y actualmente involucra despedidas, pero todas son un hasta luego, y ese hasta luego, siempre llega antes de lo pensado. La realidad, es que somos dos personas que se aman. ... Al volver pensaba en tus palabras, en tu preocupación para que no erre más, y en el retroceso que ese último error significó. Pensaba en el por qué no pude responderte en ese momento. Y ahora sé que es porque todo ya está dicho. Ahora mismo no hay algo más que te pueda decir que no haya hecho. Cada una de las cosas que he hecho mal me han dejado una enseñanza, he sido consciente de como te afectan, y he tomado cartas en el asunto para corregirlas. No pienso igual que hace unos días, ni que hace unos meses. Siento que he ido poco a poco cortando cables de esta bomba que puedo ser, y ahora mismo no hay más que cortar. Que he sido todo lo errático que puedo ser, y que a pesar de ello, en las personas que amo mi esencia a prevalecido, y que ahora solo he de avanzar con los limites que conozco. Lamento mucho que esto te haya dañado, y que te preocupe lo que pueda hacer, pero ahora no me veo capaz de hacer nada más que amarte, por todo lo que me das, por todo lo que ves en mi. Solo quiero trabajar a diario, enviarte mensajes de animo y salir cada vez que podamos, pensar en como conseguir nuestro siguiente objetivo de una forma realista. Quiero que en los meses que sean necesarios para estar juntos a diario, miremos hacia atrás pensando en que lo conseguimos, con esfuerzo, dedicación, paciencia y amor, sobre todo amor. Y que sigamos avanzando hacia esa vida que nos hace más adultos cada vez. No digo que todo será perfecto a partir de ahora, pues la vida no es así, pero no habrán problemas tan grandes como los ya ocurridos, no habrán más sorpresas que las de amor. Hoy todo es más claro, hoy ya no veo oscuridad, y quiero iluminar nuestro camino para que también puedas verlo. Es pronto aún, pero me lo haz encomendado al quererme aún en tu vida, y encantado te cumpliré, princesa mía. Solo quiero acompañarte, y sobre todo, quiero amarte. No pido más, no necesito más. Para Lizbeth, mi compañera, amiga, amante, y alma gemela.

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Día 202:

Tengo un sentimiento muy cercano a cuando nos separamos, un despertar agitado, y una necesidad de hacer cosas para ocupar mi cabeza en algo más. Pero no puedo negar que todo lo que pasó fue algo traumático. Algo que realmente me marcará. Cosas impactante para la vida, lecciones duras y crudas en muy poco tiempo, que solo me hacen pensar en cuán importante es valorar todo lo que ya tengo. Si antes fue a la persona más importante de mi vida. Hace unos días fue mi trabajo, mi carrera y como en unas horas también todo se puede hundir. Creo que nunca valoré más lo que tengo que ahora mismo, y no porque justo ahora deba cuidar mi dinero, sino porque realmente entendí que romanticé tanto el que no me importara el dinero, que terminé creyendo demasiado en esas palabras. No se repetirá, pues aunque la herida siga abierta, dejará una cicatriz para siempre, y al igual que las que me dejo mi anterior error, las miraré a diario para recordar cuál es la definición de paciencia, esfuerzo y trabajo honesto. No me suelen gustar mucho las frases como "Los aviones siempre despegan cuando tienen cuando tienen viento en contra", pero ahora mismo es mi consuelo. Y si he de ser objetivo también, todo cambio en mi vida ha venido acompañado de un momento difícil, espero que este sea un cambio bueno, así quiero verlo, y así mismo quiero tomarlo. ... Me hubiera gustado tener esta costumbre en 2022 de escribir como sentía. Quizás de esa forma, ese choque, el nulo interés de mis papás en el final de mi carrera y el impacto por empezar de nuevo en otra ciudad no me hubieran consumido tanto. Sin embargo, no puedo negar a quien siempre fue mi apoyo en esos momentos, así como en este. En cada cosa importante en mi vida, desde 2021, haz estado tú. Cuando todo esto pasó, a pesar de tu mal sentir, decidiste responderme, decidiste escucharme. De la misma forma que lo hiciste ayer viernes. Decidiste estar una vez más ahí para mi, en esos momentos irreales, en ese momento en donde pago esa buena suerte que me acompaña. Nada de esto que estoy haciendo lo podría hacer sin ti, y a pesar de que no es algo que hablamos a fondo, el solo hecho de que no me hayas abandonado, y hayas decidido creer en mis palabras que te recite al entregarte esas flores, es más que suficiente. Podría perder todo en la vida, pero si te tengo a ti en ella, lo tengo todo. Somos poderosos juntos, y así seguirá siendo, lo prometo. Prometo que te recompensaré de la mejor forma que sé hacerlo, amandote como solo yo puedo hacerlo, como solo yo sé que te gusta. Eso, y mucho más que esta por venir. Si se trata de mi, se trata de ti. Gracias por decidir quedarte. Te amo.

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Día 200 (2):

Que lento han pasado estas 4hrs desde que hablamos, y hace menos de 1hr que lo único que quiero es hablar contigo. Hace 1hr terminé de racionar todo lo que esta pasando, terminé de hacer cálculos y una preocupación enorme me invadió, no por el hecho de tomar una deuda así, sino el hecho de haber sido estafado. Pensé tanto en comentartelo a ti, que olvidé decirmelo a mi mismo, olvidé darme cuenta que si bien fue mi error, fui engañado y burlado. Sentí una tristeza enorme al tener verme tan estupido y crédulo, todo eso lo canalicé en ira para dejar en claro que me di cuenta de todo lo que debo rescatar, pero una vez lo asumí pude sentir la tristeza que significa llegar hasta ese punto en la vida. Esa desesperación por tener dinero que solo me ha traído males. No niego buscar grandes riquezas ni querer tener una buena vida, pero esta tristeza acompaña mis sentimientos anteriormente mencionados. Ahora mismo, solo quisiera estar en tus brazos para calmarme, solo quisiera sentir tu mano en mi cabeza y aunque sea egoísta, que me cuides como la víctima que fui. Y que en mis lagrimas veas mi arrepentimiento y ganas de que todo sea distinto a partir de ahora. Sé que son palabras que ya he dicho, pero en este caso como ya dije, fue el colmo. Si ahora no quieres hablarme lo entiendo, pero nada en esta vida puede hacerme quererte ahora mismo a mi lado, y saber que esto, al contrario de lo que pensaba en la mañana, puede separarnos, es lo que más me preocupa. Lo que más me preocupa es perderte a ti. Por favor amor mio, vuelve tus palabras hacia mi, y dame ese aliento que necesito para ser fuerte nuevamente. Dame la razón para seguir, dame tu esperanza. Solo te pido, tus palabras.

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Día 200:

Hola, dije que no quería escribir de esto. No me gustaría hacerlo. Hoy me equivoque, pensando en que hacer con todo el dinero que podía tener me deje llevar. Creo que nada de eso lo quería para un capricho mio, ahora mismo eso se convirtió en una carga, una carga que es solo mía. Porque como ya dije, solo quiero llevarla yo, es un problema que quiero resolver por mi cuenta. Te conté y fui transparente porque eso es algo que quiero practicar, y si fue en persona es porque así creo de deben conversarse cosas como estas, y porque necesitaba ese abrazo, para saber que todo lo que me importa está aún ahí para mi. Aunque quizá sea la última vez. Solo te quería contar, porque es evidente que te involucra, porque eres mi compañera, o lo estas queriendo ser en este viaje, y porque ese dinero es para un proyecto en común. Por eso mismo quería decirte cara a cara que todo estará bien, que esto no afectará en la compra de esa propiedad ni los planes que ahí en ella, va ser un pequeño desnivel, pero nada que afecte tu tranquilidad. ... Sé que más allá del dinero, está el pesar del problema. De como de una semana a otra sale uno nuevo. Pero es injusto decir que siempre pasa, que no he tenido mis épocas y semanas en donde aburro, y sé que está bien ser así, que no debo impresionar con lo que hago, solo que me come la cabeza no hacer más, pudiendo. Entiendo que la advertencia pasada fue cercana, y que esto rebaso el vaso. Pero también para mi, este fue el último intento por querer adelantarme, por querer algo que solo se consigue con paciencia. Hoy aprendí otra lección, y pagaré por ella lo que sea necesario, pero será la última, lo digo con la misma convicción que dije que te ofrecí un hogar y la misma con la que he avanzado hasta hoy en día. Hoy será la última vez en la que esta ansia me domine y que intente saltarme pasos en mi vida, lo digo con la mano en el corazón, y lagrimas sobre mis mejillas. Hoy fue mi error, y cuando lo cometí pensé en aislarlo de ti, es lo que haré. Viviré con él y será un recordatorio de la palabra esfuerzo y paciencia. Hoy fue el último día de tomar las cosas a la ligera. Y quisiera que entiendas eso, sin apelar a sentimentalismos, este día fue una piedra angular en lo que significa mi vida. Si estas en ella te lo compensaré, como siempre he intentado hacerlo. Y si decides aislarte están más que claras las razones, más espero que tomes el peso de estas palabras, como unas de las más importantes de mi vida. No quiero jugar con tu paciencia, ni probar tus limites, solo quiero que me escuches, y me creas, que imagines la seriedad con la que te veía a los ojos hoy día, y que todo va estar bien, en especial tú. Todo estará como ha estado estos últimos días, y seguirá así, solamente mi pensar cambiará, una vez más, como debe de ser. Sé que si se trata de mi, se trata de ti. Si decides quedarte. Gracias por leerme.

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Día 197:

El día después de nuestro mal entendido nos vimos, para terminar una conversación que tuvimos en la noche, aunque más que una conversación, fue una explicación y disculpa de mi parte. Esa tarde ya se había ido el pesame de lo ocurrido, o al menos así se sintió, comimos y conversamos dejando claras las cosas. No fue mi intención omitir esa información, y mucho menos la tuya querer ser alguien de quien yo piense que no me comprenderá, ya que realmente eres la única que lo hace, y esa es una de mis razones para amarte, amarte y no fallarte. Fue una linda tarde, un lindo reencuentro después de todo. El viernes salí con un amigo pero honestamente mi cabeza estaba en el momento en que me irías a buscar. Y mis expectativas fueron pocas, fue una linda noche, de nosotros dos y tu hermana riendo y comiendo, con esa magia que tiene la madrugada, en donde no hay preocupación más que lo que estás haciendo. Si bien al irnos a dormir hubo un momento tenso, ambos creo que supimos entenderlo. Creo que fue así porque al día siguiente nos vimos nuevamente, un día nublado en donde comimos cosas ricas y nos recostamos, conversamos y reímos nuevamente los tres. Sin duda lo que marcó mi semana fue esa dinámica que tanto extrañaba, ahora con conversaciones nuevas que marcan el paso del tiempo, las etapas por las que cruzamos. Y ya ayer domingo fue más de lo mismo, pero de otro sabor, en donde el plan principal fue hacer aquello que no pudimos toda la semana. Hacer el amor y poder liberar toda esa tensión. Con un momento de ternura absoluta, en donde parecía no haber conocido la comodidad hasta ese momento, en el que estábamos abrazados sin nada más que decir, más que lo bien que se siente estar en los brazos del otro. ... Cada uno de estos días tienen algo especial que los marcó, y por eso merecen estar acá. Tanto los buenos como los malos, porque eso especial eres tú. Tenerte en mi vida es tener calor en invierno al abrazarnos, sueño en mis noches por toda la compañía que nos damos, y algo por lo que esforzarse cada día pues tenemos planes juntos. Pensé durante mucho tiempo que para tener paz, no había que hacer nada, pero estaba muy equivocado, para tener tranquilidad, hay que construir y trabajar en ella. Y con ese foco es que hoy día veo nuestro futuro, uno que cada vez es más claro cuando lo conversamos, uno que quiero hacer realidad a tu lado. Por nuestro futuro. Y disfrutar también de su camino.

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Día 192:

Cometí un error, no confíe en ti. El día anterior al examen que di, hable con una persona para que me ayudara en él, para que respondiera aquellas que no sabía para asegurar mi éxito. Lo hice porque llevo tiempo queriendo subir de puesto y hacer cosas más importantes, porque estamos comprando un departamento y quiero asegurar tener el dinero suficiente, porque todos quienes quiero estaban esperando ese momento, en el que podía no ser una decepción. Entiendo que la gravedad no esta en el acto en si, que de cierta forma lo comprendes. El error está sino en ocultarlo, en no haber confiado en ti como mi confidente, y ser claro desde el comienzo. No lo hice porque quería mantenerme intachable frente a ti, capaz y que nada mermara ese cariño que me estabas entregando. Un gran error, ya que al no confiar en ti, generé mayor desconfianza de ti hacia mi, he ahí la equivocación. Tú no eres santa, y no mucho menos, para que me perdones mis errores una y otra vez. No mereces vivir con esa preocupación, no mereces a alguien como yo, que aun le falta mucho para ser quien desea ser. No es tu obligación acompañarme, y siento creer que así debía ser, siento no haberte cumplido una vez más. No sé muy bien de que manera escribir esto, si como una pseudo despedida, o como una constancia de un error para no volver a cometerlo. Pues no sé qué pasará entre nosotros ahora, si es tan grave como creo o quizá solo es un enfado. Quisiera saber lo que piensas pero sé que es temprano. Sé que que probablemente lo entiendas, y que me digas que solo eso puedes hacer pero que la desconfianza y el vacío se quedan. Por eso soy realista al decirte que no debes acompañarme, aunque por dentro solo quiera llorar frente a ti para que podamos seguir adelante. Porque todo iba muy bien estos días, y si bien esto que pasó no se esta al nivel de lo primero, va en la misma linea de lo que queremos construir. Esperaré poder verte, no para explicar ni justificar, sino solo conversar, solo saber lo que piensas. Porque no soy tonto, y puedo imaginar todo lo que esto gatilla en tu pensar, y esta justificado el no querer siquiera volverme a ver. Mientras tanto, solo te doy las gracias por leer.

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Día 190:

Un fin de semana casi perfecto. El sábado pasé a buscarte a tu casa, no teniamos muchas prisa de vernos, pues sabíamos que ibamos a pasar mucho tiempo juntos. Ir a comprar las cosas se tornó un poco estresante al comienzo, y el viaje fue algo incomodo, pero nada nuevo, nada que no sea normal en cualquier relación. Al llegar al domo ya nos pudimos relajar un poco y comenzar una dinámica de paz, en donde solo éramos nosotros en medio de la nada. Nos recostamos un tiempo, entre besos, caricias y un masaje que te debía, ya llegaba la hora de almorzar, o más bien cenar, porque comer había pasado a segundo plano. Bebimos vino y conversamos a la vez que cocinamos. Ese juego de preguntas entre parejas dejo ver muchas cosas que a veces nos cuesta decir, o simplemente damos por hecho. Entre preguntas de amor y erotismo llegamos a la cena, para hablar de la vida y de como pasan los años, mientras seguiamos bebiendo. Finalmente decidimos hacer el amor, esa tensión que hubo entre nosotros todo el día se disipó, o más bien consumo en un acto de amor, sensualidad, descontrol y ternura en partes iguales. Luego de eso decidimos seguir bebiendo hasta agotar el vino, el vino, las cartas con preguntas y nuestras cabezas. Nos fuimos a acostar nuevamente, hasta quedar dormidos junto al otro, en una noche que me parecía eterna, y agradezco que fuera así. Pues cada vez que nos despertabamos, podía gozar conscientemente del privilegio que tenía de estar a tu lado, de tener tu cuerpo cálido y desnudo al lado mio. A la mañana siguiente nuestro despertar fue apasionado, hicimos el amor una vez más empañando los cristales de ese pequeño domo, para luego ducharnos juntos y desayunar. Al salir del lugar paseamos con hermosas vistas y tomamos fotos. Para luego pasar toda la tarde juntos, paseando, riendo y simplemente estar junto al otro. Al describir todo lo vivido en esas no más de 30hrs entre en transe, y solo puedo decir que lo que no lo hizo perfecto, fue en hecho de tener que alejarnos al final de todo. Pero a la vez, ese mismo sentimiento engrandece la fortuna de nuestros momentos. Momentos que atesoro con toda mi alma. ... Agradezco cada momento que tengo y he tenido a tu lado. Cada vez que me dices que me porte bien o que me gane este amor que me estas dando es el lo que pienso, no solo en buenos momentos, sino todos los que hemos pasado, cada uno de ellos es una razón para querer estar contigo. Sé que es imposible que imagines cuánto es el esfuerzo he puesto para estar junto a ti y merecer esta chance que me estas dando, pero espero que estas palabras así como mis actos sean una ventana para que lo puedas ver. No eres mi tiempo libre, ni mis viajes de placer. Eres el amor de mi vida, la persona a la que intento escuchar siempre, que ayudo cuando me lo permite y con la que deseo compartir todos los frutos de mi trabajo. Eres mi razón de vivir, porque no se puede vivir sin amor, y no hay algo que quiera más que estar contigo, en las buenas y en las malas. P.D: Saber que quieres ir al matrimonio de tu primo conmigo o que ellos aún piensan en mi me llena de cariño, pues los extraño así como ellos a mi, quizá más diría yo.

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Día 187:

Quizás sean las nubes. Un viernes un poco extraño. Mañana saldremos de paseo, iremos a un hermoso domo que encontramos, y tengo pensado llevarte a lugares bonitos que hay cerca, además de cumplir tu antojo de cenar sushi. Sin embargo, ahora mismo, en esta noche de temporal y casi nada de luz, me he puesto a pensar en esta semana, y todo esa tristeza que no me he dado el tiempo de sacar. Mis tardes han sido muy bonitas, pues te he visto y ha habido mucho cariño. Sin ir más lejos ayer fuimos a comer y conversar. He buscado una excusa para verte, así como he tenido el descaro de hacerlo solo por querer. Porque sé que también te hace bien. Pero es en tu ausencia cuando la tristeza llena más y más el día. Quizás sean las nubes, pero esta semana he ido observando como ya no hay un buenos días de tu parte, como mis temas de conversación se desvanecen, y mis palabras de cariño son ignoradas. Y lo entiendo, estás ocupada, realmente agotada psicológicamente y tienes 3 vidas ahora mismo, en la farmacia, en tu casa, y conmigo. No puedo tener todo lo que quiero y mucho menos cargarte este pesar. Al final es algo que merezco, en este silencio y soledad es donde puedo reflexionar sobre lo que hice, sobre quien soy, quien quiero ser y sobre todo que quiero para mi vida. Te quiero en mi vida, pero solo si tú quieres estar en ella. A ratos en esta neblina de pena pienso que no. Pero luego ocupo mi mala memoria, para recordar todos los momentos que hemos pasado juntos, y no me hace falta mirar muy atrás, basta con volver a 1 semana o 2, 2 años o 4 si quisiera. Entiendo que estes agotada, y por eso quiero darte tiempo, quiero darte tu espacio, quiero darte lo que quieras, con tal de que estés bien. Pues sé que cuando lo difícil pase, me querrás, de la misma forma en la que lo haces ahora. Porque es distinto, lo es, no todo puede ser igual, no te puedo pedir todos los días lo mismo, así como no puedo entregar lo mismo siempre. Pero en el fondo el cariño siempre estará, al final de cada día, o cada semana. Esto no es un reproche a tu actitud, es un desahogo de mi corazón, que día a día lucha por amarse a si mismo, y no cargarte esa responsabilidad a ti ni a nadie más. Estoy triste y está bien. Solo son las nubes, y estas mismas, pasan, solo he de ser paciente. Espero que esta noche puedas descansar, y que aquello que pese en tu existir puedas calmar, que de alguna forma te pueda ayudar, porque yo solo te quiero amar. Hasta mañana mi amor, lo estás haciendo bien, puedo jurar que así es, y por eso, estoy orgulloso de llamarte mi compañera.

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Día 182:

Domingo, un día que siempre tiene algo de nostalgia, quizá porque es el día que marca el fin de lo que fue una semana más. Está en particular fue dura para ambos, el cansancio y la incomodidad de hicieron presentes en esta dinámica que parecía haber estado funcionando bien. El viernes tuvimos una profunda conversación sobre que estábamos haciendo y si era lo correcto. Ayer sábado nos respondimos a través de hacer el amor, acompañarnos a hacer compras y cenar en un lugar random mientras conversabamos de mil cosas. A veces, por más que se hable sobre algo e intente encontrar un por qué, no se podrá. Pues las palabras sobran cuando se trata de sentir. Esta semana nuestros ritmos fueron dispares, ambos queríamos algo que el otro no podía ofrecer, pero a pesar de ello seguimos viendonos. Porque no es el estás solo cuando se puede o todo está bien, eso es lo fácil, eso no es amor. El amor requiere de paciencia, comprensión y sobre todo constancia, porque sabes que eventualmente, tú y esa persona que amas, encontraran esa frecuencia que los mantiene unidos, que los hace sentir que ahí es donde pertenecen. No hay otro lugar donde quiera estar que no sea a tu lado. No hay distancia que no pueda recorrer para verte unos minutos. No hay palabras para definir mi amor por ti. Esta semana, ese amor me hizo estar a tu lado, y con todos los matices de cada encuentro, te veías igual de hermosa ante mis ojos. Esta semana recordé todas las razones por las que te quiero en mi vida, y espero que haber entregado las mías. ... Hoy domingo es el día de las madres, y tú eres una de ellas. Juntos tenemos un ángel que no pudo estar a nuestro lado, pero no por ello no la amamos con todo nuestro corazón. Le prometí a Alma que cuidaría de ti así como ella de nosotros. Hoy pensé en ti como madre, y aunque no lo haz practicado, no me cabe duda de que serías la mejor que podrían tener mis hijos. Y en caso de no tener esa suerte, espero que los tuyos sean conscientes de la suya.

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Día 180:

¿Por qué seguimos en esto? Creo que es la pregunta que se ha repetido estos últimos días. El cansancio genera irritación, y la irritación te hace buscar estar cómodo. Pero ¿Qué se hace cuando ya no existe ese lugar seguro? Es estresante no tener donde ir, que nuestro único refugio muchas veces sea un auto, o un lugar que por más limpio que este, se siente frío y estéril, como si la vida solo pasara por ahí, pero nunca se quedase. Pienso que quizás esa es la razón por la cuál decidimos aventurarnos en comprar ese departamento nuevamente. Indirectamente queremos un lugar que nos pertenezca, y nos apresuro nuestro anhelo por sentir ese calor nuevamente. Creo que esa es una de las razones por lo que seguimos acá. Pero, en el fondo, sabemos que ese calor lo podemos tener solos, o en el caso que a ninguno nos gusta, tenerlo con alguien más. ¿Será que somos dos jovenes que viven por primera vez su más grande amor? En mi caso podría decir que sí, que nunca había amado ni me habían amado tanto como cuando estuve contigo. Y sí, siempre quería más, porque se sentía tan bien, que solo pensaba en disfrutarlo, en lugar de conservarlo. Hoy en día es lo que más quiero, porque sé que como tú nadie me amará, porque mejor dupla no haré, ni de la misma forma reiré. De eso estoy seguro, y no me interesa demostrar lo contrario. Nunca fue así. Te quiero porque eres mi única amiga, mi mejor compañera, y mi necesidad de amar. Porque eres quien me elige aún sabiendo cuanto daño puedo causarte. Y es por esa misma razón, que más dolor no he de ofrecerte, solo amor quiero entregarte. Pero no se trata de mi, sino de los dos, sino de ti. Y por más que intente explicar lo que nos tiene todas las semanas al final de los días en ese auto, creo que no podría, no dentro de poco al menos. Descifrar lo que nos tiene juntos, es igual de complejo, que explicar el amor. Tal vez por eso no podemos respondernos. Porque se trata de amor. El amor hoy día significa algo tan distinto que hace unos años, que hace unos meses, que pasó de ser algo que buscaba en la vida, a ser el aire del cual respiro. Tú, eres mi aliento.

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Día 175:

Algo que agradecer, y algo que desear. Otra semana más, en esta bonita nueva dinámica, donde nos vemos con una frecuencia que solo parece aumentar, y que no piensa detenerse. Tengo la fortuna de decir que estas semanas se han parecido, con mensajes durante el día, visitas después del trabajo, y noches de Dexter. Como ya he mencionado varias veces, me gusta escribir en las noches, pero estas ahora te pertenecen cada vez más, y por mi esta bien, pues este pensar que llevo en mi, así como la valoración de cada momento juntos, no es algo volátil. Cada minuto contigo en mi vida es agradecido, incluso los no tan buenos. Porque así como hemos ido avanzando, también hemos tenido que parar, conversar o tener momentos incomodos como el de ayer sábado al terminar nuestro día juntos. Pero como dije, por más pesado que sea a veces este pasar, lo estamos haciendo juntos, y eso me hace sentir que más pronto que tarde, nuestro pensamiento se aclarará, y nuestro sentir ganara, nuestro amor se demostrara. De lo hablado solo puedo decir que tampoco está en mis planes volver a tener todo tal cuál estaba, por más perfecto que fuera. Que el sentimiento que eso conllevaría no es de mi agrado, y que no me importa cuánto cueste construirlo ese hogar de nuevo, pues mientras sea a tu lado, sé que será donde quiero estar. Otra cosa que he de destacar esta semana fue el poder cenas contigo y tu hermana, volver a verla y hablar fue un golpe de recuerdos de una dinámica que añoro. Ver como crece esa persona de la cuál siempre hablamos y fue parte de mi vida durante tanto tiempo es de esas cosas que no tienen precio. Por más simple que haya sido esa cena, para mi significo mucho. Puedo decir que esta semana ha sido como de costumbre, o como dijiste ayer, se está haciendo costumbre. Y me gustaría que así se mantuviese. Pero no por mucho, pues tú bien saber que eso no va conmigo, siempre quiero más, o debería decir queremos, pero es un buen punto en el que podemos oscilar, mientras seguimos avanzando. Pasito a pasito, codo a codo. Mientras estemos juntos, sentiré que es lo correcto. Te quiero. Y quiero seguir viajando para abrazarte unos minutos al atardecer, verte dormir todas las noches, hacerte el amor como si fuera la primera o la última vez, hacer mil cosas que no es necesario hacer juntos, y vernos cada que podamos. Lo quiero de la misma forma en la que anhelaba solo hablarte hace unos meses, y de la misma forma en la que quiero vivir contigo en unos cuantos más. Lo quiero así como te quiero en mi vida, y siempre te querré.

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She's like the sun in winter.

She’s like warm days, sunshine, honey and love.