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10 cosas que le pasan al estudiante de psicología.
Estudiar psicología implica un verdadero esfuerzo, no sólo por las tareas, ensayos y exámenes, sino porque uno no está exento de identificarse con lo que estudia. Por eso hoy les presentamos diez cosas que le pasan a la mayoría de los estudiantes de psicología, especialmente al principio de la carrera.
1. Haces una pregunta “casual” en la clase, intentando ocultar que preguntas por ti mismo o (en el mejor de los casos) por un conocido cercano.
Esas preguntas siempre tienen la misma estructura: “¿Y por ejemplo, si una persona …..?”. En realidad todos saben que “una persona” eres tú, pero nadie dice nada porque ellos también lo han hecho.
2. Autoaplicarte las pruebas psicométricas para ver qué tan inteligente eres o que “patología” tienes.
Que además casi siempre salen con resultado inválido porque ya conoces las respuestas, pero igual lo intentas.
3. Identificarte con cada una de las patologías que ves en clase.
Entrar en pánico cuando estudias psicosis.
4. Piensas que debes ir a terapia, pero lo dejas para después, y para después y para después.
Y para después, y para después y para después…
5. Diagnosticar como obsesivo, histérico, psicótico o perverso a cada uno de tus compañeros.
El coqueto se convierte en “histérico”, el perfeccionista en “obsesivo”, el raro en “psicótico” y el que te cae mal en “perverso”.
6. Te das cuenta de que en medio año leíste más que en toda la secundaria.
Lo notas al final del cuatrimestre, cuando intentas ordenar la montaña de libros, fotocopias y apuntes que ya no caben en ningún lugar.
7. Intentas explicar todos tus problemas de pareja y familia con las teorías que aprendes.
Después le reclamas a tu pareja por ser un “narcisista, incapaz de establecer relaciones de objeto medianamente sanas” y culpas a tu madre por no satisfacer tus necesidades orales de la primera infancia.
8. Cualquier texto de Lacan parece escrito en otro idioma.
Y sólo por lo que te han contado, porque no te atreves a tocar uno de sus libros.
9. Si tienes preferencia por las chicas, te emocionas al notar que el 80% de tu clase son mujeres. Si te gustan los varones te decepciona que sólo el 20% de tus compañeros sean hombres; si eres mujer heterosexual te decepcionas aún más porque de ese 20% la mitad son homosexuales.
Al pasar unos meses la emoción o decepción disminuye y la mayoría asume que probablemente no encontrará al amor de tu vida entre tus compañeros de carrera.
10. Comienzas a ver formas fálicas en todas partes.
La publicidad deja de ser lo mismo de antes, tus amigos que no estudian psicología te critican por eso.
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Desde el momento que una chica se ve gorda, es desde el momento en el cual esa misma niña se trauma
(via iamandreag)
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Muchas personas son adictas a estar enamoradas. Terminan sus relaciones cuando la magia de haber conocido alguien nuevo desaparece; cuando empiezan a ver defectos en la otra persona y a darse cuenta que no es tan perfecta como pensaban. El verdadero amor no es ciego. Cuando amas a alguien puedes ver sus defectos, sus fallas y quieres ayudarle a superarlas. Al mismo tiempo esa persona ve tus propios defectos y los entiende. El amor verdadero está basado en la realidad. No en un sueño de encontrar a un príncipe azul o a una princesa encantada. Es encontrarse a una persona maravillosa, que no es perfecta y tu tampoco.
Erich Fromm (via belle-indifference)
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La familia está enferma y la persona más frágil presenta los síntomas.
(via alxndro)
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8 LECCIONES QUE NOS DEJÓ FREUD.
Un día como hoy, de 1856 nació Sigmund Freud, conocido como el Padre del Psicoanálisis y una de las figuras intelectuales más importantes del siglo XX. Con más de veinte tomos, las Obras Completas de Freud nos enseñan un nuevo paradigma para el entendimiento del psiquismo, sin embargo, en esta ocasión les compartimos 8 lecciones que este importante personaje nos dejó como parte de su legado.
1. La mayor parte de lo que ocurre en nuestra vida psíquica no pertenece al mundo consciente.
Así es, gracias a Freud, hoy en día sabemos que la mayoría de los procesos que ocurren en nuestro psiquismo son imperceptibles para nosotros mismos, y cuando se dejan notar, lo hacen de forma disfrazada.
2. El ser humano no tiende únicamente a la búsqueda del placer y la felicidad.
Después de muchos años de observación y análisis, Freud alcanzó a notar que, contrario a lo que podríamos creer, no tendemos únicamente a buscar el placer. Es entonces cuando escribe uno de sus más famosos textos “Más allá del principio del placer”, en el cual explica el concepto y metapsicología de la pulsión de muerte.
3. La sexualidad humana no inicia durante la pubertad, sino desde la infancia.
Efectivamente, gracias a Freud hoy en día sabemos que los niños no son pequeños querubines insensibles a la excitación sexual. Desde el inicio de la vida el erotismo del niño es estimulado por la persona que se encarga de los cuidados del infante, inaugurando así el inicio del desarrollo psicosexual. Freud describe a los niños como “perversos polimorfos”, ya que buscan el placer sexual de diversas maneras.
4. La perseverancia lleva al éxito.
Aunque esto no aparece escrito literalmente en las Obras Completas, no cabe la menor duda de que Sigmund Freud es un ejemplo de perseverancia y disciplina. A pesar de las diversas críticas y rechazos que sufrió por parte del resto de la comunidad médica, jamás desistió en propagar los resultados de sus observaciones, ni se doblegó ante las amenazas que surgían por sus declaraciones. Como él mismo afirmó: “He sido un hombre afortunado; en la vida nada me ha sido fácil”.
5. El pasado tiene vigencia en la actualidad, olvidarlo no lo sanará.
Gracias a Freud conocemos la importancia de nuestra propia historia de vida. Las figuras importantes durante la infancia, así como el vínculo que pudimos establecer con ellos, dejarán huellas permanentes que tendrán vigencia por el resto de nuestras vidas. Olvidar aquellas cosas que nos lastimaron no ayudará a sanarlas, sólo las mantendrá alejadas de nuestra conciencia, generando efecto sin que logremos notarlo. “Recordar es el mejor modo de olvidar”.
6. El poder de las palabras.
Uno de los aportes más importantes del padre del psicoanálisis fue darle a las palabras de los que padecían algún tipo de sufrimiento psíquico la importancia que merecían, la asociación libre constituye el método principal mediante el cual podemos indagar en el inconsciente del paciente. La palabra y la escucha constituyen un elemento central en la teoría psicoanalítica.
7. “El que ama se hace humilde, aquellos que aman, por decirlo de alguna manera, renuncian a una parte de su narcisismo”.
En diversos textos Freud nos demuestra como la capacidad de amar y cuidar a los otros es un indicio de madurez psíquica, abre la posibilidad de la trascendencia y de la fortaleza psíquica.
8. Nuestros sueños son manifestaciones de los contenidos del inconsciente.
Antes de Freud el significado de los sueños se mantenía como un misterio. Tuvo la sensibilidad de explicarlos como formaciones del inconsciente, lo que permitiría a los analistas una vía regia a comprender sus contenidos a través de sus relatos en el diván. Como los sueños, los chistes, los lapsus lingues, olvidos, etc. no volvieron a ser los mismos después de Freud.
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Poema de un obsesivo-compulsivo
La primera vez que la vi, todo en mi cabeza se tranquilizó.
Todos los tics, todas las imágenes que aparecían, solamente desaparecieron.
Cuando tienes un trastorno obsesivo-compulsivo, no tienes momentos tranquilos, la verdad. Incluso en la cama, estoy pensando:
¿Cerré las puertas? Sí.
¿Me lavé las manos? Sí
¿Cerré las puertas? Sí.
¿Me lavé las manos? Sí
Pero cuando la vi, lo único en lo que podía pensar
era en la curva cerrada de sus labios,
o en la pestaña en su mejilla,
la pestaña en su mejilla,
la pestaña en su mejilla.
Sabía que tenía que hablarle.
La invité a salir seis veces,
en treinta segundos,
dijo que sí en la tercera pero parecía que ninguna me había salido bien,
entonces seguí intentándolo.
En nuestra primera cita, estuve más tiempo organizando mi comida por colores que comiéndola o hablándole a ella.
Pero le encantaba…
Le encantaba que le diera un beso de despedida dieciséis veces, (o veinticuatro si era miércoles).
Le encantaba que me tomara una eternidad volver a casa,
porque hay un montón de grietas en la vereda.
Cuando nos mudamos juntos,
me dijo que se sentía segura,
como si nadie nunca nos robaría jamás,
porque definitivamente cerré las puertas con llave…
unas dieciocho veces.
Siempre miraba su boca cuando hablaba,
cuando hablaba,
cuando hablaba,
cuando hablaba,
cuando decía que me amaba, su boca se acurrucaba en los bordes.
En las noches, se recostaba en la cama y me veía apagar todas las luces.
Y prenderlas,
y apagarlas,
y prenderlas,
y apagarlas,
y prenderlas,
y apagarlas,
y prenderlas,
y apagarlas.
Cerraba sus ojos e imaginaba que los días y las noches pasaban frente a ella.
Una mañana, comencé a darle besos de despedida, pero,
se fue porque la estaba atrasando para llegar al trabajo.
Cuando me detenía enfrente a una grieta en la vereda,
ella sólo seguía caminando.
Cuando me decía que me amaba,
su boca era una línea recta…
Me dijo que estaba haciéndole gastar mucho tiempo,
y desde la semana pasada que está durmiendo en la casa de su madre.
Me dijo que no debió haberme dejado apegarme tanto a ella,
que todo esto era un error…
Pero, ¿cómo puede ser un error si no tenía que lavarme las manos después de tocarla? ¡El amor no es un error!
Y me está matando que ella puede escapar de esto y yo no,
no puedo simplemente salir y encontrar a alguien más porque siempre estoy pensando en ella.
Por lo general, cuando me obsesiono con cosas,
veo gérmenes moviéndose dentro de mi piel,
me veo a mí mismo siendo atropellado por una sucesión interminable de automóviles.
Y ella… fue la primera cosa hermosa en la que he quedado atrapado.
Quiero despertar cada mañana pensando en la manera en que ella toma su volante,
la manera en que gira las perillas de la ducha como si estuviera abriendo una caja fuerte,
la manera en la que sopla las velas,
sopla las velas,
sopla las velas,
sopla las velas,
sopla las velas…
Ahora, sólo pienso en que alguien más la esta besando.
Siento que no puedo respirar, porque la besan una sola vez.
Y a el no le interesa que el beso sea perfecto…
Quiero tanto que vuelva,
que dejé las puertas sin llave,
dejé las luces prendidas.
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Estudia sociología el que no está a gusto con la sociedad en la que vive; estudia psicología el que no está a gusto consigo mismo; pero el que no está a gusto ni con la sociedad en la que vive ni consigo mismo ese sujeto, señores míos, estudia antropología.
Clyde Kluckhohn
(via la-razzia-cosmica)
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Somos todos esclavos de nuestro personaje, creado primeramente por la familia, segundo por la sociedad y tercero por la cultura. El camino de la transformación es liberarse de la esclavitud. Detrás de mis mil máscaras soy auténtico.
Alejandro Jodorowsky
(via belle-indifference)
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La psicología dice que si una ex pareja puede mantenerse como amigos, es porque aún se aman o nunca se amaron
10/12/15 (via extraviada-mente)
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¿Cómo es posible que una voz pueda convertirse en tortura psicológica?
No lo comprendo. (via todomenosordinaria)
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