Tumgik
buscandoalara · 3 years
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INTRODUCCIÓN
Kyle dejó una pequeña montaña de papeles sobre el escritorio, frente a mí, y me dedicó una mirada incómoda que en realidad no me lo pareció ni la mitad de lo que lo fueron sus siguientes palabras.
—Solo tienes que firmar aquí —señaló con un dedo al final del folio superior—, y todo habrá terminado.
—Una forma muy limpia de decir que mi hermana estará oficialmente muerta —contesté, mientras cogía el bolígrafo. Lo apoyé sobre el papel y volví a mirarle—. ¿Y qué pasará cuando vuelva?
Reconocí la forma en la que me observó; era exactamente la misma manera en la que lo había hecho unos años atrás, segundos antes de decirme que mi padre se había suicidado, y también como me había mirado hacía ya un año, al decirme que el helicóptero de Lara se había estrellado en algún punto inconcreto de Siberia. Casi podía escucharlo estrujarse el cerebro, pensando en la forma de responder sin darme esperanzas.
Como si a mí me hicieran falta para negarme a la idea de que Lara estuviera realmente muerta.
—En caso de que Lara apareciera algún día, y lo hiciera con vida —dijo con cuidado—, tú no tendrías que hacer nada. Lo solucionaríamos todo ella y yo.
Asentí y bajé los ojos hacia la pila de papeles, donde firmé con rapidez. Después solté el bolígrafo y miré otra vez a Kyle.
—Pues si ya está, me voy.
Me giré y empecé a caminar hacia la salida de su despacho.
—¿A casa? —su voz sonó genuinamente preocupada, y aquello fue lo único que logró que me frenara frente a la puerta.
Negué, todavía de espaldas a él.
—A Siria.
Porque la distancia entre Siria y Siberia era de 5091 kilómetros, y algo debía de haber en el primer lugar que había guiado a Lara al segundo, y ya era hora de descubrirlo, y también de traerla de vuelta Inglaterra.
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