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“—No quiero que me hagas el amor —susurró, besándome en el cuello—. Quiero que me abraces, que me des calor y que me quites el miedo que siento. Me estoy muriendo de terror.”

— Mario Vargas Llosa. Travesuras de la niña mala.

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Y necesito.

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Quiero tu voz en mi oído, gimiendo despacito.

Poupée arrangée

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“Ilusionarse siempre está bien. No importa si después no se da, más triste es nunca entusiasmarse con nada por miedo a fracasar.”

— casitodoesletras (via casitodoesletras)

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“Sucede que, ella no perdía el sueño con nadie, y ahora se lo quitaste. Jugando a ser el señor de las frases convincentes, viviendo de tus artes, caíste en conciencia que bajaste la parte más linda del cielo. Y te pesa que te quiera tanto, que sus ojos puedan abrigarte como soles que no se quieren esconder. Ahora te haces preguntas: ¿Qué podrías ser para ella? ¿Qué podrías enseñarle? Pero ella conoce todo lo que necesita saber, lleva su vida a cuesta y no quiere que la sostengas. Si ella quiere algo, es que seas feliz, feliz con ella. Y te pesa tener que ser la equivocación y no el acierto. Pero en tu lugar, preferiría ser error, su peor error, que la duda o el pretexto que guardaría en su corazón. Atrás los miedos, asumí lo mutuo. Mucho tiene que pasar, para que alguien te quiera de esa manera. Todos algunas vez nos quedamos sin nada; y si llegara ese momento, a mi me gustaría estar acompañado por la persona que caminaría conmigo hasta los limites de cualquier abismo.”

— Luciano O.

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“Si vamos a andar debes saber que te voy a escribir cartas, te diré poemas al oído, también soy bien cachondo y pervertido. Quiero ser el que te quite la tristeza a sentones. El que te la meta cuando andes insoportable. El que te ponga sobre la mesa y te abra con un beso las piernas. Si vamos a ser novios deja que yo me case con la sensualidad que desbordan tus pétalos en mis hombros como si fuesen las hojas que se desprenden de las estaciones. Quiero ser con el que te quedas en tu casa a ver películas y a mitad de esta empieza a abrazarte y besarte el cuello para fajar y al acabar contentos irnos por unos tacos o una hamburguesa y decirte todos los poemas que se me amontonan en la cabeza nomas de oler tu aroma a niña fresa, a adolescente dispuesta, a señorita curiosa, a viajera hippie, a champú de cereza. Yo quiero que me dejes la espalda arañada y los brazos todos mordidos. No me mandes a la verga diciéndome: Sólo seamos amigos”

— Las viejas cartas para Ana, Quetzal Noah

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La triste historia de tu cuerpo sobre el mío (consideraciones con respecto a la tristeza). |Marwan|

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“No se enfadaba jamás. Sonreía casi siempre, y de cuando en cuando se ponía triste. Y su faz, que era muy bella cuando sonreía, era incomparablemente más bella cuando se ponía pensativa y melancólica, porque adquiría una expresión nueva que jamás tuvieron los rostros de los ángeles…”

— Amado Nervo, El ángel caído

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“She was laughing even as we kissed and kissed again. There is no better taste than this: someone else’s laughter in your mouth.”

— Maggie Stiefvater (via goodreadss)

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Feliz Día del Padre

A papá, que sin darse cuenta todos los días  se hace querer un poco más.

A papá,  un héroe sin capa, que me alza en sus brazos, y me dice que todo esta bien.

A papá, que cerca o lejos, se siente igual de cálido el “te quiero” de sus labios.

A papá, mi hombre favorito, le queda corto un te amo. 

A mi papá, y de corazón, yo le deseo el mejor día, todos los días.

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“Mis papás nunca me prohibieron nada, pero me educaron como para que yo sepa cuáles son mis límites, y nunca me voy a cansar de agradecer eso.”

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“Me gustó eso de ti. Eras impredecible. A veces las cosas que dijiste e hiciste fueron sorprendentes. A veces me molestaban. Pero eras emocionante, y eso es lo que más me gustó de ti. Tú eras muchísimas cosas, pero nunca fuiste algo aburrido.”

— Poeta Invisible

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45 Cosas que pasan en el Internado de medicina.

 Basado en mi experiencia como interna en el 2014-2015. 

A ley de menos de 15 días para terminar el internado he analizado todo lo que ha pasado durante este año. Y cabe destacar algunas cosas.  

1. Nunca habías estado tan desorientado en tu vida…. No sabes que hacer, no sabes nada del sistema del hospital, te explican mil veces lo que se hace el día antes de entrar pero en realidad no tienes idea de que hablan porque usan términos nuevos para ti como: salón, entrega de guardia, servicio post servicio, sur, norte, este, la 1era es el sótano, la segunda es la 1era, oncológico, transfuguear, vivir, tire pa lante, evoluciones, órdenes, superior, los Rs y sus colores, jefe de residentes. En fin no importa porque cuando llegas todo el mundo esta igual que tu o peor.

2. Como todo en la vida, el internado será como tu quieras dependiendo de la actitud que tengas. Será productivo y pasará rápido si lo tomas desde el punto de vista en que quieres aprender y de cierto modo disfrutar el tiempo que te queda con tus compañeros. De lo contrario será una pesadilla porque lo que quieres es salir de esto.

3. Conoces el verdadero potencial de tus compañeros. Te das cuenta que aquell@ sabelotodo no tiene las mismas capacidades a nivel practico y que aquel vago trabaja más que nadie y aprende de lo más mínimo. 

4. Te harás experto en: sacar muestras, poner sondas, hacer curas, hacer EKG, dar RCP, tomar vitales, medir PVC y sobre todo en como trasladar pacientes (aka camillero). 

5. El interno tiene tres estados de ánimo: preservicio, en servicio y postservicio. con su individual cantidad de sueño y hambre.

6. Sientes que trabajas demasiado hasta que ves la vida de los residentes. Y te asusta entrar a una residencia. 

7. La cangurera no se despega del cuerpo. Sea lo que sea que vayas a hacer no te la quites. Ahí debes tener. Comida, celular con internet, el cargador, chicle, wipes, manitas limpias, tubos de sangre de todos los colores, jeringas, esfigmo, esteto, termómetroS, oximetro. Dinero. Guantes, gasas. LapiceroS muchos. Recetarios con seguros y sin seguros, un pedacito de hoja papel carbón.

8. Te vuelves adicto a la Coca-Cola y en su defecto al café. 

9. El primer servicio desde que sales de tu casa sientes que vas para la guerra con tu bulto y temprano. Sin saber lo que te espera.  Simplemente deseando que el servicio no se complique. 

10. En tu primer post servicio dormirás más de 10 horas es posible que llegues a tu casa a las 2pm y te duermas de 4pm a 6am. 

11. Sí. Ya paso un mes y… se le fue el forro interno del saco, tus zapatos no son blancos y tus pantalones se han ensuciado con fluidos de todo tipo.

12. Posiblemente nunca te habías sentido tan bruto en tu vida. Te preguntan cosas tan simples y al final tu sabes la respuesta pero de una forma u otra lo único que sale de tu boca es: lo tengo que investigar. 

13. Te acostumbras a los boches y discusiones. Al final ya ni te das cuenta. 

14. Tu nariz podrá decir que microorganismo infecto a ese paciente, cuáles fluidos han caído al suelo y que químicos han usado. Créeme lo reconocerás. Además tendrás pequeños picos de adrenalina cuando oigas decir: seguridad, paro, completa, dopa, tubo de pecho, ambú, laringoscopio, desfibrilador, monitor, llamen a anestesia, pediatra, ventilador, vitales x hr, una severa, llévalo a RX…y así por el estilo. 

15. Aprendes a trabajar en equipo. Si se ponen de acuerdo todo es posible. 

16. Tus mejores aliados son tus compañeros internos. No importa la universidad. También ten en cuenta a los demás en tu team como las enfermeras y otros son de vital importancia. 

17. Aprendes medicina de guerra. Trabaja con lo que hay. (Licen páseme un kit de sutura y un nylon 4-0 por favor. Aquí tiene doctor el nylon 2-0 y un paquete de gasas y los guantes no hay kit de suturas). 

18. Hay cosas que valen oro. Como el papel de baño, los wipes, las botellas de agua, los chicles y el desodorante. 

19. Los mejores zapatos para los servicios no son los crocs. Son unos tenis. pero realmente son aquellos que más te acomoden. 

20. Aprendes a dormir DONDE SEA… 

21. Te pueden pasar dos cosas: engordas o rebajas. O las dos. 

22. Comerás cosas cuyo origen o paradero son desconocidos pero el hambre ataca.  

23. Puedes pasar hasta 36 horas sin bañarte. 

24. Las relaciones con tus compañeros se vuelven más íntimas. Se conocen mejor y hasta sabes como duermen y que les gusta comer.      

25. Serás acosad@ frecuentemente y por cualquier persona. Todos sabemos lo irresistibles que son l@s doctores; a pesar de las ojeras, las barbas, el despeine y demás componentes del decricaje. 

26. Si. Tu literalmente eres un doctor aunque no lo creas y no tengas el título, mucha gente confía su salud en tus conocimientos y acciones. 

27. Verás muchos accidentes y traumas que pueden salir en ciencia ficción y cosas que salen por donde no deberían salir. Pero lo mejor del caso es ver como arreglan eso. 

28. Cosas indispensables para tu internado. Tu disposición. COMIDA,  Agua, papel de baño, si usas medicamentos los llevas, wipes, desodorante, pasta y cepillo, perfume, otro scrub, si tienen shampoo seco. 

29. La comida del hospital nunca es buena. Excepto los desayunos del área de ginecología. 

30. Compra un clip. Que agarre tu plaquita y carnet. Así no tienes que estar pegando la plaquita al saco todos los días. 

31. No pintes tu carro durante ese año. Es muy problable que te lo rayen. Y compra un seguro antirrobo por si acaso. 

32. Habrán pacientes y familiares de pacientes sobretodo que sacarán a prueba tu paciencia.  Pero respira dos veces y recuerda que el matar es ilegal. 

33. Vas a ver muchas personas nacer y muchas morir.  Cada día te haces un poco más insensible.

34. Vas a crear muy buenas relaciones con la gente del hospital, ya sean empleados, pacientes, compañeros, superiores y demás. Tanto así qué posiblemente llegue un momento en que los consideres familia.

35. No hay nada peor que un servicio un domingo o un día feriado. 

36. Aprenderás algunas palabras esenciales en creole como pusseé madame, retire kilot, ouvri pieds, descendeu, pas pusseé. Entre otras. 

37. Nunca habías hecho tantas exposiciones en tu vida. Si es que te tocan. 

38. Te sorprenderás de muchas cosas. De tus compañeros y tus superiores. 

39. Cuando sales del hospital… bueno sales, pero siempre hablas del hospital. 

40. No tengas miedo a hacer algo. Siempre hay una primera vez. Y si no sabes observa, aprende y aplica. 

41. No te dejes abusar de los demás. Cada quien “debe” hacer su trabajo pero si ellos no lo hacen tu no tienes que hacerlo.  Es simplemente injusto. 

42. Te dirán que no tienes tiempo, pero en este momento el tiempo es lo que más hay y lo que mas rápido se va. Aprovéchalo. 

43. Si en tu rotación hay un especialista que le gusta enseñar. No te despegues Pk puedes aprender muchísimo de ellos. Y ellos son escasos.

44. Al final no quieres que te hablen de tomar vitales y menos si son por hora. 

45. Al final tienes sentimientos encontrados. Cuentas los días para salir de esto pero te pones a pensar en que dentro de esos mismos días dejaras de ver a tus compañeros hasta la graduación y después de ahí quien sabe. Solo quedan los recuerdos y las experiencias del internado.  

Les deseo que aprendan mucho, aprovechen el tiempo y cumplan sus sueños. Bienvenidos nuevos internos. 

Por: S. Camilo Tertulien. 

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