cocreciente - Tumblr blog

[cocreciente]

Que bonitos recuerdos.

No sé porque siempre que tengo que tomar una decisión importante en mi vida, me da por revivir el pasado, al menos los momentos bonitos. Todos estos, por ejemplo; los encontré en una carpeta. Y, puedo decir con toda seguridad que es lo único que rescataría de esa etapa de mi vida, puesto que es lo único que recuerdo que me dejó amigos, experiencias y que gracias a... Pude darme cuenta de que era lo que me hacía vibrar más alto. Con el paso del tiempo me di cuenta que puedes hacer o estar en el lugar que te gusta, lo cual no significa que pase de la forma en que tú esperabas. La reacción del público siempre será mi sonido favorito.

Por cierto, hoy es luna llena como la primera vez que me presenté ante un publico. No tengo nada más que decir que no sea bueno. Éste siempre es y será mi vibración más alta

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Inocente

La pequeña que miraba con ojos tristes aquel retrato, retrato de una mujer que dibujaba en su rostro una sonrisa. La pequeña que intentaba decifrar por qué se producía. Un retrato: ¿de quién habla? ¿Es la pintura la que habla de la persona o es la persona la que le da sentido a la pintura? Tienen una relación simbiotica; sin una no existe la otra.

Al menos en éste contexto yo soy siempre joven y sólo por ésta vez, considero importante recalcar el "yo" porque sôlo por hoy abrazo a mi ego, sólo por hoy. Mañana volveré a ser grande, mañana volveré a ser ajena, mañana.

Sólo por ésta noche quiero reposar desnuda bajo mis sabanas, sólo por ésta noche quiero no dormir, quiero sentir mi cabello cubriendo mi rostro, quiero que mis lagrimas borren la comisura de mi sonrisa. Sólo por ésta noche, mañana volveré a ser yo.

Como la pequeña niña que miraba con nostalgia aquel retrato, como aquella niña que no era ella, era yo. Como los ojos de mi receptor cuando le digo que lo quiero, como los mismos si se humedecen cuando le digo que me voy.

Aveces, sólo aveces me gustaría ser una estrella y mirarme desde el cielo. Porque sólo entonces sabré cuan pequeña soy. En algún momento quisiera no ser sola y ser con alguien. En algun momento me gustaría no ser con alguien y verme sola.

Como la pequeña niña que miraba con tristeza la sonrisa.

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Solía pensar que el amor tenía que venir de otra persona para ser feliz. Así que me encerré en unos brazos que no me dejaban volar, en una boca que no pronunciaba mi nombre y en unos ojos que no me miraban cuando me tenían frente a ellos. Primero, pensé que tal vez aquellos ojos estaban ciegos. Así que cambie de brazos y me recibieron unas manos cálidas, que me tocaban con pasión, unos labios que me besaban, sin embargo unos ojos que, por más que yo insistiera… Miraban a alguien más. Así que cambié el camino. Y al seguir buscando, me topé con infinidad de besos, un montón de caricias, besos, suspiros, sollozos. Me encontré a mi misma al pie de una recámara. Intentando pronunciar la palabra amor, e insistiendo en que esos ojos se giraran y me mirasen. Entendí, con el tiempo, que todo aquel aprendizaje conlleva errores. Formulé mil veces la misma pregunta ¿Qué necesito para que unos ojos me miren? Ya no buscaba labios que pronunciaran mi nombre, tampoco brazos o manos que recorrieran mi piel sin desdén. Me veía a mi misma sola, pidiendole a todos los dioses que llegasen y me ayudarán. Pero ninguno respondió, y todavía espero su respuesta. Pasé mucho tiempo, muchísimo, pensando que quizá había algo malo en mi. Ya sabes, lo mismo de siempre. Que el chico no volvió a llamar, que ya hay alguien más. Que siempre el mismo patrón. Hoy en día puedes encontrarme sola en mi recamara, sola en las calles, sola cantando la misma canción. Pero ya no hay puentes, ya no hay febreros, ya no existe el piano en mi oración. Entendí que ningun par de ojos me miraban, porque yo tampoco me miraba a mi. Me preocupé tanto por que me besaran, que olvidé besarme a mi. Y aquí estoy, en la azotea de un viejo edificio, lamiendo mis heridas. Estoy deseando volver a empezar, liberando mi pasado. Quiero irme, huir de él. Para el día que regrese, recibirlo con una sonrisa y una taza de té. Pero también con una despedida. No necesito flores, ni chocolates, ni caramelos ni una canción. No necesito nada, nada. Lo unico que busco es encontrar mi paz. Paz interior.

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Un año soltera, para amarme y aprender a amar.

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Si hay algo que me gusta más que mirar el techo, es mirar tus ojos. Si hay algo que disfruto más que escuchar Piazzolla es escuchar tu voz, escucharte a ti contandome historias, escuchar como te quejas de todo aquello que te pasa. Si pudiera definirte en un número serías el cinco. Porque no hay nada más bonito que perderme en tus palabras, cuando de repente interrumpes mis pensamientos y me preguntas si sigo ahí. Mientras yo, apenada te respondo que sí. Me gusta susurrarte siempre que no puedes verme lo mucho que te quiero. Me gusta mirarte cuando platicas con alguien más. Y me gustaría encelarme menos cada vez que estás pero no estás. Hoy es 14 de Noviembre y he caído en cuenta de que me he vuelto a enamorar. Que dificil la fase de aceptación ante lo que siente el corazón. Y aunque le repito que no quiero volver a sufrir, me basta un mensaje tuyo, para ir corriendo a ti. Contigo no necesito puentes, ni piano, no piazzolla, ni luna, ni estrellas. Cuando eatoy a tu lado pierdo la noción de todo lo anterior. Creo que tú le das un rotundo cambio a toda la oración, a la palabra, a la interpretación. Y ahora está mi corazón, otra vez pensando en ti ¿puedes hacer que pare o pretendes seguir? Ya no necesito canciones, ni palabras, ya no necesito nada, mientras tus ojos me miren a mi...

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Te he querido mal durante cinco noches. Pero dicen que al final la sexta siempre es la vencida ¿no? Me veo a mi misma de nuevo, frente al pie de la cama de un completo desconocido, deseando estar en cualquier otro lado que no me recuerde al sabor de tus besos. A veces quisiera saber como le haces para no sentir nada, para no involucrarte, porque a mi, apenas una noche me ha bastado para quedarme enredada en tus sabanas y no querer salir de ellas. Por primera vez no planeo salir huyendo. Por primera vez no planeo salir huyendo y para mi desgracia, es eso lo que tú lamentas. Porque durante varias noches me has puesto la mascara que llevaba ella y me has susurrado su nombre mientras dormía y no te podía escuchar. Te decías en silencio que aquello sólo cubría la leve referencia de lo que se siente dormir acompañado y que si no fuese por mi ya le habrías olvidado. Me he cortado el cabello esta mañana, tú me has dicho que ya no me parezco a ella y me has echado. He tomado mis cosas del baúl y te escribí una carta con 1345 carácteres. En algunos digo que te quiero, en otros cuantos, trato de evadir lo que siento. Espero que lo sepas leer entre líneas. Me he mirado al espejo ésta mañana, ya no era ella, ahora era yo. Y no me reconocía, tal vez, porque nunca me conocí cuando compartías mis besos conmigo y su recuerdo. Una vez, me tomaste de la mano y me dijiste que yo siempre sería tuya. Qué manía esa de llevarse a la boca siempre el juguete favorito. Te he querido mal durante cinco noches, te he querido más de la cuenta. Uno siempre dice que debe amar como se le ama. Y yo te he amado más. He tirado aquella piedrita que te regalé un día, pues comprendí que no hacía falta que mi cuerpo tocará el tuyo para sentirte. Hacía falta con mirarte. He sacado mis cosas de aquel viejo baúl, encontré una foto de ella. Y lo único que pensé; fue que tú tampoco eres tan suficiente como él.

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Carta de despedida

Trata de decir siempre lo que sientes y haz siempre lo que piensas en lo más profundo de tu corazón.

Si supiera que hoy fuera la última vez que te voy a ver dormir, te abrazaría fuertemente y rezaría al Señor para poder ser el guardián de tu alma.

Si supiera que estos son los últimos minutos que te veo, te diría “te quiero” y no asumiría, tontamente, que ya lo sabes.

Siempre hay un mañana y la vida nos da siempre otra oportunidad para hacer las cosas bien, pero por si me equivoco y hoy es todo lo que nos queda, me gustaría decirte cuanto te quiero, que nunca te olvidaré.

El mañana no le está asegurado a nadie, joven o viejo. Hoy puede ser la última vez que veas a los que amas. Por eso no esperes más, hazlo hoy, ya que si mañana nunca llega, seguramente lamentarás el día que no tomaste tiempo para una sonrisa, un abrazo un beso y que estuviste muy ocupado para concederles un último deseo.

Mantén a los que amas cerca de ti, diles al oído lo mucho que los necesitas quiérelos y trátalos bien, toma tiempo para decirles, “lo siento”, “perdóname”, “por favor”, “gracias” y todas las palabras de amor que conoces.

Nadie te recordará por tus nobles pensamientos secretos. Pide al Señor la fuerza y sabiduría para expresarlos.

Finalmente, demuestra a tus amigos y seres queridos cuanto te importan.

Autor: Anónimo, (Falsa carta de despedida anteriormente atribuida a Gabriel García Márquez).

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¿Sabes? A veces, cuando estpy en medio un problema y siento como... Como si el universo me presionase con su dedo pulgar, cierro los ojos y pienso en las estrellas, en ti. Y me imagino miles de historias que podrían funcionar, y te imagino a ti, siendo feliz conmigo. Pero otras veces cuando todo está bien, en orden y siento paz en todo mi ser, me basta sólo parpadear para que tú llegues a mi pensamiento, para que llegues y me digas que me quieres. Que me quieres, no sé no sé que daría por escuchar eso de tus labios. No lo sé, ultimamente sé muy poco, pero pienso mucho en ti.

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¿Alguna vez te has enamorado tanto que has sentido como si el sentimiento se te saliera del pecho? Hablo de ese tipo de amor que te duele tenerlo, porque sabes que no es correcto, que no está bien visto, que no debe. ¿Alguna vez has amado a alguien tanto y tan profundo de manera en que pudieses soportar cada gillotina que lanzaran las bocas? Hablo de este amor que sabes que nunca será correspondido de la misma manera en la que tú lo das, de este amor que entregas sin la esperanza de que recibirás. Hablo de este amor, por el que pondrías las manos mil veces en fuego, a sabiendas de que te podrás quemar. Del tipo donde entre mil lagrimas una sonrisa siempre vale más. Te quiero tanto, tanto que nisiquiera me lo puedo permitir a mi misma, te quiero de esa forma en la que el corazón se me sale del pecho, y en que los besos encajan como espinas, te quiero de la manera en la que busco tus ojos, aún cuando no me miras. Pero cuando nuestras miradas se cruzan, sé con certeza, que tu sonrisa y la mía, encuentran una caricia. Y en silencio, nuestras almas bailan, cantan, se regocijan. O al menos, eso mi mente se imagina. Te quiero tanto que no puedo permitirme estar contigo, porque eso significaría un final. Y yo contigo nada de finales, te quiero siempre en mi vida. Te quiero tanto que no me importa lo que diga la gente, las normas, la moral, que paso de ellos. Que me importa poco lo que piensen un monton de reglas, un monton de ojos y oidos que no entendienden lo que es amor, que no saben lo que es amar. Porque nunca han dicho 'te quiero' entre un mar de lagrimas, porque nunca han aceptado ver a la otra persona siendo feliz sin ti. Porque nunca en la vida han tenido que renunciar mutuamente a las persona que aman. Porque nunca han entendido lo que es hacer el amor sin que los cuerpos rocen. Que no entienden lo que es amar. Te quiero. Te quiero. Te quiero. Te quiero tanto que duele.

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+Ya, pero el problema es que yo te quiero -Y por qué sería ese un problema +Es que el problema radica en si tú también me quieres o no. -Ya, y si te digo que no te quiero? +Bueno, ese sería un gran problema por lo que ya te he dicho -Y si te digo que te quiero, que yo también siento lo mismo +Pues que ese sería un problema aún más grande, pero, que haría que mi sonrisa creciera de lado a lado. -Pues no, que no, que lo nuestro no, que lo nuestro nunca, conozco a tus padres, que no. +A ver si me escuchar, que yo a ti si, que lo nuestro si, que me da igual lo que diga mi madre, lo que diga mi padre, el cura, tus amigos, los vecinos, que me da igual lo que piense el mundo. Que yo te quiero y cuando estoy contigo no paro de comprobarlo, y me da igual lo que pienses tú, porque vas a terminar muerto de amor por mi. Te juro por lo que más quiero que no vas a dormir sin pensar en mi. Que voy a ser lo más bonito que te ha pasado en la vida.

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¿Qué es el amor? ¿Hasta que punto estamos dispuestos a luchar por otra persona? ¿ Acosta de qué? ¿De mi felicidad? ¿De mi trabajo? ¿De mi familia? ¿De mis sueños? ¿Qué estoy dispuesto a sacrificar? Me resulta imposible mirar al amor de la misma manera en la que tú lo miras, me resulta imposible ponerle candados y cortarle las alas al sentimiento que más nos hace volar. ¿En qué momento uno comienza a enamorarse? ¿A partir de qué momento una persona pasa de ser un amigo a ese "algo más"? ¿Apartir de cuantas charlas? ¿De cuantos besos? Uno siempre se pone murallas invencibles y se llena de escudos el corazón, esperando a que llegue alguien que pueda derretir el acero y entrar con un aguja, que nos pinche sistole y diastole. Yo deje de buscar el amor, el día que entendí que el amor no se busca, porque si lo buscas lo ahuyentas, el día que entendí que no siempre se obtiene lo que quieres en el momento que quieres. Ahora sólo me limito a sonreír y disfrutar el momento, me limito a conectarme a mi..