dark-cry

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Estas palabras te las dedico con todo mi amor, el que aún te tengo, y el que siempre te tendré.

Yo no te odio, jamás lo haré, jamás podría tener un sentimiento que no sea amor por ti, tome malas desiciones, unas tras otras y caí en un círculo vicioso del cual no puedo salir.

Lamentablemente fuiste arrastrada por todas y cada una de mis malas decisiones, y desde lo más profundo de mi corazón te pido perdón, el más sincero que te puedo dar.

Te amo, te amo como jamás lo e hecho, te amo con cada parte de mi, y no hay sentimiento más grande en mi que el amor que siento por ti, y justo ahora se vuelve en la tristeza más grande que tengo.

No se que hacer, una parte de mi se rindió ante todo y la otra espera algo que jamás sucederá. Pero aún lo espera, el otro día te entregué las llaves, y aunque haya parecido una jugada cobarde, tuve que tomar todo el valor que tenía para hacerlo.

Pues aunque para mí eran esperanza, sinceramente me hiciste sentir lo contrario, y esperanza para seguir muriendo en esta tristeza como lo estoy haciendo ahora es lo último que necesito. Tristemente eso me destruyó, y me tomo todo de mi esa noche para no cometer una estupidez.

Me alegro que decidieras quedarte el libro, hubiera dolido que lo hubieses regresado, la verdad mi regalo del 14 de febrero era otro, ese libro lo compré deliberadamente solo por qué quería que lo tuvieras.

Paso las noches en vela, escribiendo como lo estoy haciendo esto que lees, tratando de dormir y de vaciar el estómago de todo el dolor que lo inunda, recordando las noche que cenamos juntos, como dormíamos abrazados y las mañanas en mis vacaciones que pasamos almorzando y amándonos, todo me hace pensar que teníamos un verdadero hogar, éramos una verdadera familia, una que extraño con todo de mi, no puedo evitar llorar al traer eso a mis recuerdos, extrañarte mientras trabajas, y llenar mi alma de alegría al momento en que llegabas, de verdad que hicimos un hogar lleno de amor.

Pero a su vez, todo se nos fue de las manos como el agua entre los dedos, algo muy patético la verdad, tratándose de nosotros debimos haber luchado más.

Entiendo todo el dolor de tu corazón, el no saber si todo cambiara, el no saber si realmente debas perdonarme, el luchar por ti mientras intentas no aferrarte a lo nuestro, yo no tengo la fuerza para eso, por eso soy tan patético, tan tonto, tan basura. Se que jamás querrás estar de nuevo conmigo, eso me arruga el corazón, se que te debo dejar ir, pero como le hago entender razones a mi corazón, se que para ti todo está en el fondo del mar, y yo no sé nadar.

Me gustaría creer que hay esperanza, me gustaría creer que tengo la oportunidad de arreglar lo que sucedió, que algún día aceptes mi salida al cine, o a la cena, o simplemente al parque donde iniciamos esto.

Hablabas del coraje y desprecio que sentías, que el perdón no quitaría eso, y lo se, te conozco bien, se que perdonar es un acto de valor, uno muy personal. Pero también se que sería capaz de soportar ese desprecio, ese coraje, esa tristeza, lo se por qué a la mala descubrí que no hay cosa más grande que el amor que te tengo, no estar contigo es estar muerto en vida y aún así seguir muriendo de dolor noche tras noche.

No tengo nada que reprocharte, te amo, te quiero, te adoro.

Mis impulsos siguen jugando en contra mía, pero al final, entiendo que quieras alejarte de eso, no lo mereces, no lo necesitas.

Te deseo la mayor alegría del mundo, te deseo todo lo bueno que mereces, aunque triste también deseo que encuentres a alguien que jamás te falle, y que no te cierres al amor, al final nosotros los indignos de ti no tienen que ser piedras en tu camino si no el marcador diferencial. De verdad deseo que completes tu vida como la soñaste, yo oraré por ti, y pediré a dios que te guarde siempre en la vida.

Yo personalmente te guardaré eterna en mi corazón. Calida, explendida así como te recuerdo siempre. Siempre llevaré tu foto conmigo. Y espero si la vida me alcanza, cruzarme de nuevo contigo.

Y si no fue en esta vida, ojalá en la próxima podamos ser eternos.

Te ama con todo su corazón: Milo