Tumgik
Text
Me da miedo que mañana nos crucemos por esa calle donde siempre nos cruzábamos y me sonrías desde la cuadra de enfrente porque aunque ya no hablamos me deseás lo mejor, porque mi recuerdo solo te trae cosas buenas, mientras yo me muerdo la lengua para no llorar y pienso en como escaparme porque vos seguís igual pero todo es tan diferente. Me da miedo cruzarte y darme cuenta que ya no sentís esa intensidad casi adolescente que algún día te hizo odiarme casi tanto como me amabas, sino un poco más. Y en realidad solo pensás en mi esporádicamente como alguien a quien alguna vez quisiste y de ese amor ni un rastro quedó. Ni siquiera convertido en odio. Ni siquiera convertido en indiferencia. Me da una puntada en el pecho de solo pensar que quizás mirás mis fotos con una sonrisa de tranquilidad, mientras que a mi se me sale el corazón de lugar cada vez que leo tu nombre en mi celular. Prefiero este dolor eterno antes que madurar y olvidarte, o aún peor, acordarme de vos como alguien que conocí alguna vez, y honestamente no puedo concebir que vos hagas lo mismo conmigo. Fantaseo con que a pesar de que estás con alguien nuevo, mientras ella duerme la mirás y te imaginás mi cara y mentalmente intentás unir mis pecas formando algún dibujo sin sentido o pensás que alguna vez yo estuve acostada en esa misma cama y te preguntás porque carajo lavaste las sábanas si llevaban mi perfume, y tus brazos sostienen a alguien pero a la vez están vacíos. Que te atormenta prestarle los mismos shorts que me prestaste a mi esa noche de verano, y te atormentan las canciones. Que a veces no podes dormir pensando en que carajo nos pasó y porque no soy yo la que te está abrazando. Fantaseo que cada vez que te cruzás a mi mamá o a alguien que conozco se te llenan los ojos de ilusiones porque pensas que puedo estar yo, pero nunca estoy. Porque la suerte y la vida tienen la manía de funcionar de esa manera. Yo igual no quiero cruzarte porque seria demasiado doloroso, ni en mil vidas voy a estar lista para volverte a ver. No sabría como manejar la verguenza de seguirte queriendo y dedicarte todas las canciones que escucho, cuando ni siquiera sé si me pensas o si solo soy una anecdota que les contás a los demás. Prefiero una indiferencia premeditada antes de que me trates como cuando fuimos amigos y que me des a entender que ya todo está bien y no hay rencores. Por favor que haya rencores. Por favor sentí algo por mí, aunque solo sea bronca y tengas que rechinar los dientes cuando me escuchás hablar. No quiero soportar enterarme que estás realmente feliz con otra persona y ya no te atormentan los “que hubiese pasado si…”. Yo todavía me acuerdo de tu cama y de las piernas enredadas y de las pelis que pusiste en la tele y nunca vimos y se me revuelve el estomago pensando que tal vez ya no te acordás. O peor, que te acordás y no te mueve un pelo porque ahora tenés otra persona con quien hacerlo y te da lo mismo que esa persona ya no sea yo. Ojalá seas feliz, pero ojalá la felicidad que tuviste conmigo sea unica e irrepetible, que la busques por todos lados y no la encuentres más. Porque yo te quiero de forma egoísta deseando que no me superes nunca y te tiemblen las piernas cuando pienses en mi. Solo espero que no me olvides, quiero que mi recuerdo se pegue a tu cabeza con cinco capas de cinta scotch. Quiero que sufras y sientas todo lo que tengas que sentir mientras tu cuerpo no se desintoxique del mio. Perdimos las fotos, perdimos los textos, perderemos la piel e iremos perdiendo todo el resto. Quizás algun dia esta carta sea la única evidencia que quede de que alguna vez existimos juntos.
3 notes · View notes
Text
Cuánto extraño el dolor. Porque si te duele, significa que algo te importa lo suficiente. Estoy cansada de ir anestesiada por la vida, si nada te atraviesa nada te inspira. No me acuerdo lo que se siente amar tanto a alguien que le escribirías mil poemas. No recuerdo esa intensidad. Hoy soy solo un fantasma de lo que era, intentando evocar un sentimiento que ya murió. Solo se puede escribir de lo que se siente, y yo siento que no siento nada. Que voy a pasar el resto de mis días congelada en un mismo plano, intentando recordar. Tengo miedo de no poder sentir nunca más, de quedarme estancada mientras el mundo avanza para los demás. Mi corazón seguirá en esta hoja mientras pasen las estaciones. Mi cuerpo quedará atascado para siempre en el ultimo invierno que amé y me sentí amada. Lo que no se mueve se marchita, y quizás yo haya esperado demasiado tiempo, y cuando me quise dar cuenta, ya no quedó nada de mí.
5 notes · View notes
Text
Me escapé de la ciudad en un auto azul. De madrugada, asegurándome que todos estuviesen dormidos. Como quién está cometiendo un crimen, como quién está cometiendo un error y no quiere ser descubierto. Miré hacia atrás y ví todo aquello que conozco hacerse mas pequeño. Desde la distancia todo este dolor no da tanto miedo. Desde la distancia aquello que te atormentaba no parece tan importante. El viento tibio en mi cara me susurra que quizás no tomé la decisión correcta, que puedo intentar escapar de todos los lugares del mundo menos de mí misma. Soy el equipaje que siempre voy a tener que cargar, aunque me pese la espalda (y el corazón). De repente ya no recuerdo de que estaba huyendo, y me asusta un poco. Estoy sola y me encuentro en un lugar donde nadie conoce mi corazón.
1 note · View note
Text
El mundo se pintó de amarillo cuando te ví por primera vez. Al principio todo era el verano, y las flores, y la miel. La vida parecía saturada, pero en el buen sentido. Como cuando un color se torna tan intenso que es difícil de mirar. O como cuando todo desborda y se prende fuego, pero uno encuentra cierta paz en el caos. Como ver nuestros sueños escapar de nuestras manos y no poder correr, porque estás tan adormecido que solo podes sentarte a observar lo que quedó de aquel verano de ensueño. Los pocos pedazos que sobrevivieron, llenos de tierra, y algunos pedazos de oro que ya no tienen valor. Nada de lo que escribo parece tener sentido en la realidad, pero en mi cabeza encaja perfectamente. Vos no lo entenderías. Tengo que cambiar las sabanas mojadas con el sudor que provocaron las peores decisiones que tomamos en la vida. Hay olor a mermelada de frutilla, y te juro que no quiero verte nunca más. Mi ultima carta quedó plasmada en la pared. Te quiero. O no. No sé. Pero llevo tu corazón en el mio. Ojalá este mundo vuelva a tener color.
Candy (2006)
3 notes · View notes
Text
No sabría por dónde empezar a agradecerte. No sabría tampoco por qué agradecerte. Supongo que para englobarlo puedo decirte gracias por ser aquello que soñé por tanto tiempo. Mi lugar de protección. Mi hogar. Gracias por devolverme la fé en el amor. Por enseñarme que no debería doler. Que no tengo que hacerme pequeña para encajar en la vida de alguien. Gracias por quererme. Y por demostrármelo. Gracias por los gestos. Las miradas. Los abrazos. Por besarme los lunares y las heridas. Por hacerte cargo. Por respetar mi pasado y cuidar las cicatrices. Con vos me siento en una burbuja de protección donde no debo preocuparme por nada. Gracias por no querer cambiarme. Por decirme siempre la verdad. Gracias por cambiar la visión que tenia de mi misma. Gracias. Por agarrarme rota y liberarme completa. Por iluminar mi existencia y ayudarme a brillar a mi.
3 notes · View notes
Text
Puedo quererte de lejos. Puedo quererte amando a alguien más. Incluso puedo quererte olvidándote. Dándome cuenta que ya no te pienso como antes, que ya no estás en todo. Puedo quererte incluso deseando no verte nunca más. No cruzarte en ningún lado porque mi corazón no podría soportarlo. Puedo quererte incluso corriendo hacia el lado opuesto de dónde te encontras vos. Alejándome lo mas posible y pidiéndote de rodillas que ya no vuelvas a mi vida. Puedo quererte sin querer tenerte. Sin querer despertar con tu voz en la mañana y dormirme arropada en tus brazos. Puedo quererte con distancia, la necesaria para cuidar mi alma. Puedo quererte aunque nunca más vaya a mandarte un mensaje de feliz cumpleaños. Te prometo que siempre voy a estar pensando en vos en ese día, aunque no lo vayas a saber nunca. Puedo quererte aunque pase el tiempo. Aunque vos te olvides de mí y de mi manera de querer. Yo puedo quererte igual. Así. De la única manera sana en la cual podemos querernos: sin hablar.
1 note · View note
Text
En otra vida. Si, en otra vida nos volveremos a encontrar. O quizás en otro universo, ¿no? Uno alterno donde las cosas no hayan salido tan mal y podamos volver a entrelazar nuestras manos. O puede que en otra realidad todavía estemos juntos. Aunque no entiendo porque no en esta, la que verdaderamente importa. Quizás, tal vez, en otro momento, en unos años, puede ser… pero no es. Y esto es lo único que tenemos, que tengo. Vos ya despertás al lado de alguien más y yo te sigo viendo con los mismos ojos que siempre con la esperanza de que todavía no me hayas olvidado. No puedo sacarte de mi vida aunque sé que tengo que hacerlo porque no puedo seguir anhelando que las cosas funcionen en algún universo alterno del cual no tengo conocimiento. Es tan doloroso ver como le das a otra persona todo lo que yo te pedí por tanto tiempo que solo me queda esto. Convencerme y des convencerme de que la vida nos volverá a encontrar. O de que no sos la persona para mi y que por eso las cosas no funcionaron. Corro y recorro los mismos pensamientos y los mismos pasillos, día tras día. Mes tras mes. Se me va a ir la vida pensándote. Me voy a volver loca esperando a tu fantasma, a tu otra versión que solo existe en mi cabeza. Tengo que dejarte ir, sin ningún pretexto ni ninguna esperanza. Tengo que despedirme y permitirme ser feliz. Y entender que esta es la vida, universo y realidad que nos tocó.
1 note · View note
Text
No es fácil darse cuenta que dejaste de ver con ojos de amor a alguien a quien antes solo podías ver a través de la idealización. No es fácil entender que la gente muta y cambia de piel. Yo ya no podría reconocerte en esta vida ni en la próxima. Ya no sos la persona que me amó y tengo que aprender a hacer las paces con eso. Yo tampoco sigo siendo la persona que era al lado tuyo y por eso mismo siento este dolor. A veces lo único que quiero es volver a verte pero tengo que acordarme que esa versión de vos que extraño ya no existe en ningún otro lugar que no sea mi memoria. Que vos ya no sos vos. Ya no sos mío. Y ya tampoco quiero que lo seas, o al menos no esta versión tuya. Que aunque los brazos que extraño sigan siendo los tuyos ese abrazo nunca será el mismo. Y que aunque los ojos que anhelo sean marrones como siempre, ya no me mirarían de la misma manera. Y que los besos compartidos ya no tendrían tanta pasión. Y que tocarnos no se sentiría tan necesario simplemente porque ya no nos queremos. Porque cambiamos. Y seguir atándonos a lo que alguna vez sentimos es lo más parecido a una tortura. Yo ya te dejé ir a vos como persona, lo único que no parezco poder dejar ir es a los recuerdos de quien fuiste alguna vez. Tengo que entenderlo a la fuerza: ya no somos quien fuimos. No soy esa chica que dio todo por vos, hasta lo que no tenía. No sos ese chico con el pelo peinado para abajo que juró protegerme de todo. Y está bien resignarse. Eso es lo lindo de la vida, no te cruza con la misma persona dos veces ni en la misma persona.
22 notes · View notes
Text
Recorro hasta el último rincón de mi casa buscando a ver si quedó algo tuyo. Lo que sea. Un encendedor, un aro. Algo pequeño que te hayas olvidado. Una excusa para que vuelvas a mi vida. Un objeto aleatorio que me permita traerte de vuelta sin sentir que me traiciono a mi misma. Una remera, un peine. Algo que me de el pie para escribirte. Revuelvo los cajones buscando un pretexto. Unas medias, un collar. Nada. Mi casa quedó vacía. Te llevaste todo, yo misma incluida. No dejaste ni una moneda. Ni un rastro en mi vida para que pueda encontrarte otra vez.
6 notes · View notes
Text
A veces pienso que ya estoy bien, que la herida que dejaste ya no sangra y hasta parece que estoy cicatrizando. Pero después hay días dónde siento que deberán cortarme las manos para no escribirte y amputarme los pies para no correr hacia vos. Hay días que la nostalgia me invade y se apodera de mí, y el pensamiento de que vos ya me olvidaste y yo te sigo amando me hace llorar. “Saber irse de los lugares es llegar temprano a otro lado”, me repito a mi misma en el intento de que una frase hecha pueda consolar este dolor encarnado e infinito (al menos hoy se siente así, infinito). Sé que es verdad y que vos no sos lo que yo deseo para mi vida pero sin embargo no hago otra cosa más que esperarte. Aunque sea inconscientemente. Pasaron años y yo sigo con los brazos abiertos de par en par por si un día querés volver, aunque sé que no vas a hacerlo. Aunque ame a alguien más, siempre habrá un pedacito, una mínima parte que pensará en vos y en los que hubiese pasado. Intento reprimir este sentimiento porque sé que nada bueno puede salir de eso, juntos somos veneno. Un veneno que sabe y huele a miel. Pero que quema por dentro y mata. La única cura es esta, alejarnos y dejarnos ir. Pero mi mente te trae de vuelta una y otra vez, no puedo alejarme de vos. No puedo olvidarte. Pero no voy a ser yo quien vuelva, porque mi orgullo no me lo permitirá esta vez. Así que simplemente será esto, morir de una u otra manera. Si no estoy con vos muero ahogada por las palabras que nunca dije, y si estoy con vos muero envenenada por este amor.
3 notes · View notes
Text
Todo lo que nos quedó fueron las promesas vacías y un postre que dije que iba a cocinarte. Nunca llegué a hacerlo pero todavía guardo la receta. Probablemente ya no lo vaya a cocinar jamás, se sentiría raro comerlo sin vos. Como tantas otras cosas que quedaron incompletas. Pero sé que va a pasar el tiempo y voy a aprender a vivir con todas las ausencias que dejaste, aunque nunca nada vuelva a ser igual. Eventualmente voy a despertarme en otros brazos y vos vas a ser feliz sin mí. Eventualmente voy a amar sin pronunciar tu nombre y vos estarás haciendo algo que te guste, en algún lugar del mundo. Eventualmente pasaré mis tardes de Domingo junto a alguien más y vos vas a ser quién quieras ser. Porque tu prioridad nunca fue el amor pero la mía si. Así que elijo creer que eventualmente cada uno va a estar donde tiene que estar. Y ese postre que jamás compartimos pasará a ser solo una anécdota más. Algo qué pasó antes de que pasen cosas aún más importantes. Pero siempre será algo que tendremos en común, cómo toda una parte de nuestra historia.
1 note · View note
Text
Es Domingo, llueve y te extraño. En mi cabeza se reproduce la misma memoria una y otra vez. La primera vez que nos vimos después de un año. Las manos entrelazadas. La pasión. Me dan ganas de escribirte pero me convenzo que es solo por hoy, y que mañana voy a arrepentirme. No sé que me duele más, si estar con o sin vos. Me pregunto si vos pensarás lo mismo. Si es real este sentimiento de que mi corazón sigue atado al tuyo. Si las paredes de tu casa te gritan mi nombre y no sabes como callarlas. Si la soledad te envuelve, y no podes hacer más que mirar el espacio vacío en la cama, donde antes dormía yo. Me pregunto si haces las cosas que hacíamos para sentirme más cerca, aunque sabes que no estoy. Si me extrañas de la misma manera y te arrepentís de no haber sido más valiente. Si tiraste mi cepillo de dientes o si todavía lo miras cada vez que entras al baño, sabiendo que es inútil guardarlo, pero hay una parte tuya a la cual no le da el corazón para tirarlo a la basura. Pienso si la lluvia te hace extrañarme, como a mí. Si pensas que el Domingo sería más llevadero si estuviese yo a tu lado. Me pregunto si alguna vez pensas en hablarme o si seguís siendo el mismo orgulloso de siempre. Dispuesto a perder todo con tal de no bajar la guardia. Ya te lo dije mil veces, pero puedo repetírtelo una vez más, no gana el que protege su corazón bajo siete llaves, ganan los que incluso con el miedo a perder, se la juegan por amor. Quizás hay una parte mía que espera que vos seas así. ¿Pero a quién le miento? Si vos nunca estuviste dispuesto a cambiar por mí. Puede ser que me engañe el hecho de que es Domingo, y llueve, y te extraño tanto que siento que me puedo morir.
3 notes · View notes
Text
Y cuando vuelva el calor, quizás yo finalmente deje de ser tuya. Como tantas otras veces. Solo que esta vez sería para siempre. Tal vez con la inminente llegada de la primavera, dejaré de creer que todas tus canciones de amor son para mi, y podré recibir con los brazos abiertos a alguien nuevo. Puede que la sal del mar cicatrice nuestras heridas, y por fin podamos volver a respirar. Si las noches son más cortas, tendré menos tiempo para pensarte en mi habitación. Anhelo la llegada del verano, porque con él florece la esperanza, la pasión. Si no me aferro a lo nuevo, quedaré congelada para siempre en aquel invierno que nos perteneció. Pretendo huir de este frío que me hiela la sangre, y así poder salvarme de tu amor.
6 notes · View notes
Text
Tengo que dejarte ir pero todavía no sé como. Nunca me enseñaron a irme con el amor intacto. Y sé que tengo que mirar hacia adelante pero el pasado es tan tentador, sobre todo si tiene dibujados tus ojos. Sobre todo si amenaza con envolverme en tu perfume, y me hace promesas vacías que me hacen creer que en realidad todo fue mejor. Quiero que estés feliz y que cumplas todo lo que te propongas, pero no puedo evitar desear con todas mis fuerzas ser yo quién esté a tu lado cuando eso suceda. Aunque ya nunca voy a estarlo. Ni para navidad, ni para tu cumpleaños. Ahora todas las canciones sobre corazones rotos pasarán a ser tuyas y también los poemas mediocres de amor. No vas a enterarte de todas las palabras que te dediqué en mi cabeza, pero espero que lo sientas en algún lado. Como una puntada al corazón. Sé que nuestras almas están entrelazadas de alguna manera, como alguna vez lo estuvieron nuestras manos. Sé que pasa el tiempo y el sentimiento no se diluye. Pero tal vez eso sea todo lo que alguna vez vamos a ser. Quizás viniste a mi vida a enseñarme que no puedo tener todo lo que quiero, o al menos no para siempre. Somos súbditos del tiempo y él decide las historias. El nuestro ya se terminó y me encantaría hacer reproches, pero ya no tiene sentido. Sé que ahora me toca quererte en silencio, rezando que sigas con tu vida y a la vez pidiendo no ver algo que me rompa el corazón. Quiero estar en paz con el hecho de que quizás nunca volvamos a cruzarnos pero por ahora no puedo. Lo único que quiero es volverte a ver. Como si eso pudiera reiniciar nuestra historia, como si no estuviese todo tan desgastado. Como si el amor pudiera salvarnos de este inevitable final. El desenlace siempre iba a ser el mismo, pero encontrarse cara a cara con el destino y chocarse con la pared es lo más difícil de todo. Me gustaría que sepas que te pienso y le pido a los ángeles que nos traigan paz. A los dos. Juntos. Por separado. Ya no importa. Hay algo que siempre va a unirnos, pero siempre va a arrastrarnos hacia el mismo lugar.
23 notes · View notes
Text
El día después de que te fuiste salió el sol. Y un par de días después también llovió. Siguió haciendo frío, pero de ese frío tenue, que da aviso de la inminente llegada de la primavera. Después crecieron flores, pasó el tiempo. Y eventualmente murieron. La vida siguió su curso, incluso cuando pensé que se había terminado cuando no estabas. La mañana siguiente también me levanté, me tomé un té, hice mi rutina para la piel e hice también todas las cosas que hubiese hecho con tu presencia. Me compré ropa nueva, que no vas a ver nunca. Escribí mucho en mi diario, a veces sobre vos y otras no. Conocí gente nueva. Mucha. Demasiada. Intentando llenar el lugar que dejaste. Comprendí que era imposible. Me resigné. No se conoce a la misma persona dos veces. Que tragedia y que placer. Conocí personas distintas. Miré el celular sin esperar tu mensaje. Incluso lo miré esperando mensajes de otras personas. Sonriendo. Inevitablemente, también vi las cosas que subías. Al principio me agarraba una puntada en el pecho pero luego ya no. Fui feliz. Tuve días muy oscuros. Me abrazaron. Me sentí cuidada en otros brazos y luego también dejé de sentirlo. En algún momento, no sé como, encontré paz en tu ausencia. Queriéndote de lejos. A la distancia. Agradeciéndole al destino por haber llegado hasta acá, y al universo porque el mundo siempre siguió girando.
27 notes · View notes
Text
Después de algunos años, que se sintieron como muchas vidas, tu existencia continúa siendo el ancla que me lleva de vuelta al pasado. Es inevitable e inescapable. Solo con escuchar tu nombre vuelvo a ser una niña que se muere por saber cómo estás, qué es de vos. Me convierto en una adolescente, y quiero salir corriendo a buscarte para decirte que todo va a estar bien. Que nosotros vamos a estar bien. Aunque sea una mentira y hayan pasado años desde la última vez que te sentí. Cada vez que me entero, de casualidad, que estás mal me dan ganas de arrancarte la tristeza y quedármela yo, de tomarme un taxi hasta la otra punta de la ciudad para abrazarte, aunque sean las dos de la mañana y esté lloviendo. No puedo explicar la sensación que me envuelve, como una nostalgia infinita de algo que nunca más va a poder ser. Y aunque vos no seas el mismo tu esencia continúa, y yo nunca te dejé de mirar con el mismo amor. Incluso amando a otras personas. Siempre sos vos mi punto débil, mi talón de aquiles. El recuerdo vivo de lo que fui. Es imposible dejar de quererte, y aún más lo es sacarte de mi corazón. Supongo que algunas cargas se llevan para siempre, están tatuadas en nuestro destino. No voy a luchar contra esto, hace años lo dejé de intentar.
2 notes · View notes
Text
El amor fue real. No te preocupes que eso lo sé yo y lo sabes vos. Solo que no fue suficiente. La forma en la que me querías no hizo que florecieran jardines en mi estómago, ni que se sienta más liviano el corazón, pero más importante, no calmó mis miedos. No me dió seguridad. Y creo que todos merecemos eso. Entiendo si no estás dispuesto a cambiar, yo no puedo obligarte a hacerlo. Entiendo si no podes ser quien yo quiero que seas. Sé lo que diste, pero también sé lo lejos que estamos de llegar a un buen lugar. Estoy cansada de caminar descalza y cargarte en mi espalda, esperando que algún día me sostengas vos, y quizás esto sea un poco más justo. Más equitativo. Pero mis pies están desgastados y también lo están las palabras. Lo más importante se dice sin hablar. El amor fue real, pero ya no es nuestro. Es hora de dárselo a alguien más.
7 notes · View notes