Text

Haz más silencio. P.J
GENERO: Smut, masturbación, sexo con protección, palabras sucias, palabras de disculpa, sentarse en la cara, tragar semen, squirting, cachetadas.
Un viaje de vacaciones con los amigos de tu hermano podría terminar en algo más con el menor de todos.
Hace bastante tiempo que no lo veías, la última vez que lo viste fue cuando era un puberto de 17 años que tenía las hormonas alborotadas. Sería incómodo mirarlo a los ojos o simplemente el volver a verse luego de mucho cuando supiste de todo lo que pensaba sobre ti, aún no podías creerlo ya que siempre lo viste como un dulce y adorable niño. A la mierda eso, se deseaban mutuamente y era obvio. Jisung siempre fue tu peor tentación y perdición, a pesar de su carita de niño dulce, querías con todas tus ganas que te domine y te haga rogar por él, tal vez esas fantasías nunca pasarían. Hace años no se ven y mucho menos hablan, Jaemin siempre está pendiente de todo y puede notar la falta que se hacen pero nunca dijo nada. Tu hermano era su mejor amigo y siempre estaba al tanto de tus pensamientos o sentimientos, por eso se le ocurrió la grandiosa idea de llevarlos a acampar en cabañas, sería perfecto.
“Jisung, por favor ya sal de ahí, nos estamos atrasando para el viaje y debemos pasar por la hermana de Jaemin!” Gritó Jeno detrás de la puerta del baño donde estaba Jisung.
Él estaba sentado en el inodoro con la tapa baja, sus pensamientos se alborotaron y no estaba preparado para volverte a ver luego de mucho tiempo. Nunca ha estado tan nervioso en su vida.
“Maldita sea Jisung! Sal del baño y deja de comportarte como un puberto, ya tienes 21 años” Hablaba Renjun detrás de la puerta algo enfadado, hace tiempo que Jisung estaba metido en el baño y aún no salía.
La perilla se giró y de ahí salió un Jisung mirándolos mientras cubría su rostro y suspiraba. Jeno y Renjun se miraron entre si, no entendían que le sucedía.
“Que mierda te sucede ahora?” Renjun se cruzó de brazos mirándolo.
“No estoy preparado para verla... ¿Porque no van ustedes y yo me quedo?” Los chicos se echaron a reír al escucharlo, comprendían porque tardó tanto y porque decía todo eso. Era normal en jisung, sentirse avergonzado por lo que hizo y volver a ver a la chica que le gusta.
“Oh dios mío, Jisung, no es el fin del mundo, ella ya ha olvidado todos tus pensamientos, además, eso pasó hace 4 años” Jeno trató de tranquilizarlo con algunas palabras coherentes, si supiera que aún no olvidaste todo lo que pensaba.
Y si supieras que aún sigue pensando de esa forma.
“Jeno tiene razón, ahora apresurate, Mark está por matarnos” Renjun y Jeno se retiraron dejando a Jisung solo.
No hubo de otra, fue a buscar sus maletas, serían prácticamente 3 días en esa cabaña, ni siquiera sabía que pantalones llevar, tampoco sabía si era invierno o verano. Bajaba las escaleras con los pensamientos en otro universo mientras en su mente se imaginaba los momentos lindos que podrían pasar allí, te pusiste más bonita y él nunca ha dejado de sentir cosas por ti. Se enamoró a temprana edad de ti y tú de él, nunca lo confesaron pero era obvio en las miradas que se tiraban.
Dejando la parte de Jisung, vamos por tu parte. Ahí estabas, regañando a Jaemin por haber elegido un viaje juntos, tampoco estabas preparada para verlo, mucho menos para interactuar con él y dormir juntos, te negaste rotundamente a ir a ese viaje pero tus padres salieron a favor de Jaemin, querían que te dieras un respiro de la tecnología y que salieras de tu "guarida".
“No me pondré esto!” Exclamaste mirándolo. Traías puesto una camiseta a tirantes y un pequeño short de vaquero ajustado a tu cuerpo, podías deducir que lo eligieron Jaemin y tu madre.
“Oh si te lo pondrás, ya te dije que no vas a ir con esos pantalones gigantes, hace un calor extremadamente insoportable, así que hazme caso” Te miró fijamente cruzando los brazos, te diste por vencida, no querías discutir con tu hermano, al final siempre tenía razón.
“¿Porque carajos debo ir? Ni siquiera soy cercana a tu círculo de amigos” Era la verdad, no eras demasiado cercana, solo hablabas con Haechan.
“Irás porque vas a pasar tiempo con todos y también porque noto que extrañas a Jisung... Y no, no te creeré si me dices que no, perfectamente sabes que te conozco” Él tenía demasiada razón en sus palabras, te quedaste callada dando un último suspiro.
“Además, no creo que lo único que metas en tu boca sea comida, hermanita ” Y ahí estaba su doble sentido, guiñó el ojo mientras reía. Era un hijo de puta.
Antes de poder decir algo escucharon la bocina de algún coche, miraste a Jaemin haciéndote una seña para irse. Tomaste tus cosas, bajaron las escaleras y te despediste de tus padres, con una cara de frustración te fuiste mientras ellos se reían de ti, no podías creer que estabas por ver de nuevo a tu "mejor amigo" pondría muchas comillas pero se entiende.
La camioneta era prestada de Taeyong, el que conducía sería Mark, antes de usar esa camioneta, Taeyong le dió mil advertencias sobre lo que no debía hacer para luego amenazarlo por si llegaba con algún rasguño. Jaemin abrió la puerta, subiendo atrás, en el medio de Renjun y Jisung había un asiento para ti, maldeciste con todo tu alma a Jaemin. Subiste y tomaste asiento en ese lugar, obviamente sin antes saludar a los dos chicos de tus costados.
Jisung se sentía extremadamente nervioso, no sabía dónde esconder su rostro, quería desaparecer de la faz de la tierra pero maldita sea, te veías tan perfecta que con la mirada ya te saboreó. Lo miraste examinandolo con la mirada, no cambió nada, aunque estaba más guapo de lo normal, su cara de niño pequeño seguía ahí.
Los pensamientos de Jisung eran un río de obsenidades, miraba tus piernas con deseo, su cabeza de vez en cuando estaba en el asiento solo para mirarte de reojo a ti y a tus saltarinas. Habían muchos baches en el camino, eso hizo que su tentación aumente.
“t/n ¿Porque dejaste de venir a vernos? Hace tiempo que no te veíamos” Renjun habló iniciando una conversación.
“Oh, supongo que no lo sé, creo que Jaemin dejó de llevarme y yo dejé de insistir... También tuve mucho trabajo últimamente” Respondiste sonriéndole.
“Desde hoy ven más de seguido, los chicos incluído jisungie te extrañan mucho” Escucharlo decir eso te hacía sonreír. Miraste a Jisung dedicándole una sonrisa cálida, su rostro estaba rojo como un tomate y su mirada era de asombro.
“Realmente... Si me hacías f-falta” Los chicos empezaban con sus abucheos de forma tierna gracias a lo que dijo, te encantó escucharlo decir eso, tu corazón se aceleraba a mil por segundo.
“Jaggi, yo también te extrañé” Haechan abrazaba tus hombros mientras besaba tu mejilla. Los asientos no tenían cabeza así que era fácil que él hiciera eso.
Reiste ante sus palabras, acariciando sus brazos. La mirada de Jisung era intensa en ustedes, cosa que Haechan notaba y aún así lo hacía frente suyo para provocarlo.
El viaje fue largo, llegaron a eso de las 13:30, bastante tarde, habían almorzado por el camino y lo único que querías hacer era descansar en la cabaña, todos estaban agotados. Al llegar bajaron las cosas, el dueño les dió las llaves de las cabañas, tomaste la de ustedes y se dirigieron a la cabaña 11, justo al lado de Renjun, Jeno y Jaemin. Abriste la puerta mirando el diseño rústico que había dentro, gracias a Dios habían 2 camas, algo grandes pero era algo, cerraste la puerta bajando tus cosas a un lado y tirandote en la cama agotada. Jisung miraba sus pies, jugando con sus zapatos.
“ Es lindo, ¿No?” Rompiste el silencio sentandote en el borde.
“ Realmente si” Te sonríe tímidamente volviendo a desviar la mirada.
Su comportamiento no te sorprendió ya que él siempre ha sido un chico tímido y deseguro le sorprendía estar durmiendo contigo de nuevo. Quitaste tus zapatos incorporandote en la cama, ni siquiera te importaba que las luces estén encendidas.
Jisung notó tu cansancio y apagó las luces por ti, volviendo a su cama te miró un poco asegurándose de que estés descansando tranquilamente. Sonrió al verte tan tierna y se tiró en su cama, mirando su teléfono celular.
“Jisung la va poner”
Jisung: Quien mierda puso ese nombre al grupo.
Jaemin: Yo, y que?
Jisung: Tienen una obsesión con que yo la ponga.
Haechan: Es obvio que lo harás hoy, no te hagas, será seguro que vas a llevar dos sandías a tu boca.
Mark: Es por eso que yo y Jeno te compramos preservativos, están en el bolsillo de tu mochila.
Jeno: Te compré uno de fresa, no sé porque con sabor pero por si a su vagina no le gusta tu olor.
Jisung: Váyanse a la mierda, los odio.
Renjun: Nos iremos a la mierda pero tú te irás a comer unas ricas tetas.
Chenle: Quien pudiera.
Jisung dió un suspiro, dejando de lado su teléfono, miró el techo pensando.
“Realmente puede pasar eso? No lo creo, soy demasiado virgen para ella” Pensó.
Sus ojos se cerraban lentamente, te dió la espalda acomodándose en la cama hasta por fin cerrar los ojos por completo, estaba demasiado cansado para pensar en esas cosas. Hasta en sus sueños le perseguía eso de que comería unas tetas, le sorprendía y le intrigaba saber si eso sucedería.
Era de tarde-noche, habían despertado casi recién gracias a el toque de la puerta, eran Renjun y Chenle, dijeron que en la cabaña de Mark cenarian.
“Realmente ya creí que era un nuevo día ” Hablaste frotando tus ojos.
“También yo” Jisung imitó tu acción levantándose torpemente de la cama.
“Tienen que ser demasiado estúpidos para creer eso” Habló Chenle atacandolos con sus palabras sarcásticas.
“¿No es obvio? Bobos con bobos deben coger ” Renjun rió junto con Chenle golpeando puños.
“Bueno, los esperamos allá” Chenle habló saliendo de la cabaña y cerrando la puerta. Tus ojos entreabiertoa miraron a Jisung confundida.
“Son unos idiotas ” Respondió rodando los ojos a lo que soltaste una pequeña risita. Tu vestimenta de hace un rato era lo que llevarías, luego de la cena vendrías a darte una ducha. Te levantaste sentandote de nuevo en el borde, frotando tus ojos suavemente para luego colocarte tus converse negras. Jisung imitó tu acción, estaba demasiado cansado para cambiarse en este momento.
“Uh, t/n” Tus ojos se posaron en él, hicieron contacto visual pero él rápidamente retiró la mirada mirando sus zapatos. “Si Mark o alguien de los chicos hace algún comentario con doble sentido, por favor no te lo tomes personal... Sabes cómo son ellos”
Comprendias que no serían en broma porque claramente nadie olvida los pensamientos obsenos del pequeño jisungie. “Claro Ji, no te preocupes, sé lo molestos que pueden ser”
Te sonrió tímidamente de nuevo, tu mirada seguía posada en él pensando en como podía ser tan lindo? Ha pasado un tiempo desde la última vez que se vieron y él seguía tan lindo, deseguro hasta tiene novia.
“Entonces Jisung... ¿Como está tu vida desde que yo no estoy en ella?” Soltaste de repente jugando con tus dedos, querías saber de su vida a pesar de que ya sabías algunas cosas.
“No hay nada nuevo... t/n no creas que mi vida mejoró porque no es así, entre nosotros, si me haces falta” Su sonrojo carmesí se hizo presente, era lo más común en jisung. Sus palabras eran tiernas, dejando de lado que es un chico pervertido y virgen contigo, él realmente acumulaba muchos sentimientos perdidos sobre ti, el problema es que no los sabe expresar a la perfección.
Hubo una pequeña charla antes de ir a la cabaña 9, la cual era la cabaña de Mark y haechan. Al ingresar Haechan los recibió, saltando a tus brazos como si se tratase de un pequeño niño que extrañaba a su madre, llenándote de besos en la cara cariñosamente. La mirada de Jisung era seria, sus ojos asesinaban a Haechan y su mente decía mil aberraciones por segundo, Mark notó esto entonces pasó su brazo por el cuello de este susurrandole “Cambia esa cara, a kilómetros se nota que estás celoso” Se alejó mientras llamaba la atención de todos. “Hoy cenaremos ramen ya que aquí no llegan los deliverys, peroo” Se acercó al refrigerador de su cabaña, abriéndolo y mostrando las botellas de cerveza que había allí dentro, todos aplaudieron felices. Sabias que esto se descontrolaria totalmente pero sería divertido verlos a todos borrachos.
No pasó mucho tiempo para que eso suceda, estaban tomados todos, a excepción de tú, Chenle y Jisung. Chenle no era alguien que bebe demasiado pero si lo sigue haciendo es posible que termine borracho como los demás, te sorprendía ver borrachos a Jeno y Renjun, tenían conversaciones raras pero divertidas. Jisung y tú estaban en el piso, teniendo una que otra conversación, no habían perdido la esencia de tener miles de conversaciones al azar.
Viste como Jaemin bebía toda una botella mientras le gritaban “¡Fondo, fondo!” Esto terminaría mal y con un castigo por parte de tus padres, sabían que eran mayores de edad pero vivían bajo su techo y comprendían sus reglas. La botella la coloco en el suelo, haciendo señas para que formen una ronda, aquí si sería la perdición de todos, jugar verdad o reto borrachos era el juego favorito de todos, menos el tuyo.
“Bueno, jugaremos verdad o reto pero, será todo subido de tono... Abstenganse a las consecuencias” La voz de borracho de Jaemin era tan graciosa, no pudiste evitar soltar una risita.
“No me besaré con nadie de aquí, prefiero besar el piso” Chenle reía ante su comentario.
“Si no te gusta algún reto o verdad, pásamelo a mi” Jisung susurró a tu oído haciéndote sentir seguirá y cómoda, le diste una sonrisa dándole a entender que lo harías.
El juego había comenzado, esto sin duda se saldrá de control. No pudiste evitar reír por todos los retos y verdades, realmente eran tan divertido y demasiado raros, en todo eso rezabas para que no te tocara aún. Tus padres veían que Jaemin era el organizador de este juego y sin duda alguna los castigaría por meses sin dejarlos salir. Estabas tan distraída en hablar sobre estupideces con Jisung que no te diste cuenta que la botella paró en ti, apuntandote, te sorprendiste al verlo allí pero también te lo esperabas, tarde o temprano te tocaría.
Al ser tu turno todos gritaron mientras aplaudían, sabías que estaban esperando para este momento. “¡Verdad o reto!” Salía de la boca de Mark con entusiasmo.
“Si elijo cualquiera de todas formas tendré un final malo así que elijo...” Pensaste un segundo, cualquiera de los dos te dejaría en ridículo. Verdad era donde habían preguntas como; Si estuvieras en una habitación, con quién tendrias sexo? Cosas así, reto era más tranquilo, casi nadie lo eligió y no pasó a más arriba de bailes. “Reto.” Dijiste haciendo que todos gritasen y aplaudieran, era obvio que se te venía lo peor encima.
La mano de Jisung apretó tu muslo suavemente llamando tu atención y susurrando de nuevo a tu oído “t/n, si no te sientes segura con el reto nos podemos ir” Era atento y se preocupaba por tu comodidad. Sonreiste y acariciaste su mano suavemente haciéndole entender que estaba bien “Hay que divertirnos un poco”
“¿Los tortolitos ya terminaron de decirse cosas lindas?” Decía Mark burlón haciéndolos reír un poco. “t/n, te reto a besar a Jisung peroo” Un reto más infantil, era obvio que escogerían eso, no ibas a negarlo y mucho menos a oponerte si era muy obvio que lo querías, al igual que Jisung. Lo miraste asegurándote de que esté cómodo y solo asintió con la cabeza desviando la mirada para no encontrarse con tus ojos.
“Debe ser un beso con lengua, así de esos picosos” Mark hacía caras mientras expresaba la palabra 'picosos'.
“Pan comido” Dijiste. La última vez que besaste a alguien fue a los 15 años, con tu último ex novio, no sabías demasiado de besar pero un poco si, estabas segura de que le gustaría. Giraste tu cuerpo sentado hacia Jisung y te acercaste lentamente, los chicos estaban emocionados que se golpeaban entre si por lo que pasaba, Jaemin era el más emocionado entre todos ellos, al momento de unir sus labios, soltaron un grito de felicidad, te concentraste en el beso, poniendo tu mano en su cuello y besándolo suavemente, de a poco introduciste tu lengua, podías notar la falta de afecto femenino que le hacía a Jisung, no te sorprendía, él mismo te confesó que su primer beso robado fue a los 13 años. Sus manos acariciaron tus muslos, el beso se intensificó y ahora estaban jugando con sus lenguas, los chicos no paraban de emocionarse mientras ustedes seguían en su órbita, deseabas comerlo ahí mismo pero sin embargo dijiste que lo harías luego, te separaste lentamente mirándolo a los ojos.
“Tuvieron que coger frente nosotros!” Abucheo Haechan riendo.
El rostro de Jisung mostraba vergüenza, estaba completamente rojo, sus manos rascaban nerviosamente su nuca mientras su mirada se perdía. Nunca había creído que este momento llegaría, realmente creía que estaba en un futuro demasiado lejano, sentía que necesitaba aún más de ti, el beso le había encantado que quería volver a probar tus labios.
El juego siguió, era lo mismo pero ahora estaban hablando de idioteces, eran las 3:50 am cuando todos comenzaron a cerrar sus ojos, era sorprendente porque el piso les resultaba cómodo. Con tu cabeza le hiciste una seña a Jisung para irse a lo que asintió con la cabeza, salieron de la cabaña sin hacer ruido y riendo por el camino.
“Hoy fue tan loco” Hablaste riendo mientras golpeabas su brazo suavemente.
“Realmente lo fue, nunca pensé ver a Jaemin Hyung tan borracho” Rió recordando la escena de Jaemin bailandole a Jeno. “Por cierto... T-tus labios saben a caramelo”
Era repentino que haya dicho eso así que realmente te sorprendió pero entendiste que le había gustado el beso. “¿Realmente dices que saben a eso?”
“Ujum” Asintió con la cabeza, mirando su camino, ni siquiera era capaz de mirarte a los ojos. “También son muy adictivos”
Soltaste una pequeña risita, abriendo la puerta de la cabaña para que pudieran pasar, al ingresar quitaron sus zapatos y miraste a Jisung, estabas nerviosa y insegura por lo que dirías. “¿Quieres volver a probarlos?”
En su mirada se veía como le tomó por sorpresa pero estaba decidido a hacerlo. “No te lo negaré”
Sus brazos se envolvieron alrededor de tu cintura mientras los tuyos alrededor de su cuello uniendo sus labios de nuevo en un beso lento pero ardiente, sus lenguas jugaban entre sí dejándose llevar mutuamente. Estaban perdidos en el momento, decididos a hacer esto, se deseaban demasiado, era obvio que esto pasaría, no pueden poner a dos personas que se desean mutuamente en una habitación solos. Las manos de Jisung acariciaban tu espalda baja, bajando sus manos hasta tu trasero donde lo apretó fuertemente, sus manos eran grandes y fuertes, no pudiste evitar jadear en medio del beso al sentir su apretón, una mano tuya se deslizaba por el pecho de Jisung, posándose en su erección, estaba duro y por su pantalón corto de tela algo fina se notaba lo inchado que está, jugaste con el elástico unas veces y luego volviste a posicionar la mano en el mismo lugar. Jisung caminó hacia atrás, asegurándose de sentarse en su cama, te posicionaste en su regazo, manteniendo ambas piernas al costado.
Sus manos apretaban todos los lugares, tus caderas eran juguetonas y se movían en círculos contra él, su cabeza estaba tirada hacia atrás mientras aprovechabas para dejar besos y pequeños marcas en ese lugar. Su mano ahora se escabullia por debajo de tu camiseta tocando tus pechos, moviendolos arriba y abajo torpemente, con la ayuda de sus manos quitó tu camiseta, tampoco te quedaste atrás, hiciste lo mismo apreciando el abdomen marcado que tenía, las venas por debajo de su pelvis se hacían demasiado notorias.
“Santa mierda, estás tan deliciosa...” Habló tocando tus pechos con sus dos manos como si fuese un niño pequeño.
Te deslizaste al piso, arrodillandote enfrente suyo. Tus manos jugaban con su pene, moliendolo por fuera de sus pantalones, pasaste al elástico jugando con él, bajaste lentamente su pantalón observando lo erecto que estaba su pene, te sorprendiste, realmente era sorprendente el tamaño pero te lo esperabas, era un chico alto, con muchas venas así que prácticamente te imaginabas como sería al bajarlo. Tus manos bajaron su ropa interior, Jisung solo soltaba gemidos silenciosos, tus ojos se abrieron, era grande y con venas, dolería pero te gustaría tenerlo dentro.
Con una mano envolviste su miembro, bombeandolo lentamente mientras tiraba la cabeza hacia atrás, su respiración era algo entrecortada, él estaba lleno de excitación y adrenalina, sus ojos se pusieron en blanco al verte besar la punta de su pene antes de meterlo en tu boca, era demasiado largo, no podías meterlo completamente. Lo chupabas haciendo que toque tu cabello, te hizo una cola de caballo mientras bruscamente te empujaba hacia abajo dándote pequeñas horcadas gracias al tamaño, aumentaste la velocidad buscando llevarlo a su orgasmo, sus caderas empujaban hacia arriba mientras sostenía tu cabello, notaste que estaba cerca por los murmuros casi inaudibles que soltaba, sus gemidos eran bajos pero intensos, su orgasmo se acercó más rápido que flash “Tu garganta m-me está apretando.... Mierda” volviendo a empujar tu cabeza hacia abajo, viniendose completamente en tu garganta. Levantó tu rostro con su mano, mirándote tragar su semen mientras que con su pulgar limpiaba los restos que se escapaban por tus mejillas.
“Sientate en mi cara... Por favor” Sus palabras repentinas te sorprendieron, creíste que lo decía en broma pero luego lo viste levantarte del suelo haciendote quedar de pie, desabrochando tu pantalón corto de jeans desesperado, lo ayudaste, miró tus bragas un momento para luego mirarte buscando tu consentimiento, asentiste con la cabeza y él solamente las bajó, su mano no tardó en tocar tu clítoris, haciendo círculos, tus piernas sintieron un peso de pluma por la carga de excitación que te dió eso.
“Amo lo mojada que estás, allí adentro deberá ser apretado solo para mí... Ven cariño, siéntate en mi cara” Su voz era ronca y lujuriosa, tenía gran carga de excitación que lo sentías en la matriz. Subiste en la cama, él se acostó, entendiste como sería esto así que posicionaste insegura tu vagina en su boca sintiendo un cosquilleo por todo tus cuerpo, sus manos se movían en tu espalda, desabrochando atrevida y audazmente tu sostén, no pudiste hacer nada más que tirarlo a un lado, sus manos ahora estaban apretando tus pechos como si fuesen bolas antiestrés. Su lengua comenzaba a moverse por toda tus paredes vaginales, se sentía tan bien que te preguntaste de donde había aprendido a hacer eso siendo que en su vida había tocado a una mujer.
Si supieras que Haechan y Mark le dieron lecciones de cómo "satisfacer a una mujer" poniendo de ejemplo a una naranja, fue traumático pero al menos le estaba sirviendo.
Sus brazos rodeaban tus muslos, manteniendote firme mientras su lengua seguía haciéndote sentir satisfacción, sentía que ya no podrías más, se movía tan bien que tus gemidos no podían siquiera parar.
Uno, dos, tres orgasmos tuviste para que te desvanecieras, retirandote de encima suyo y acostándote, respirando agitadamente por la gran ola de excitación que te dió, sentiste sus brazos de nuevo alrededor de tus muslos atrayendote a él. En su boca traía un condón, con mucho cuidado lo abrió colocandoselo mientras rozaba su pene contra tu entrada haciendote estremecer.
“Tus tetas son iguales a las sandías... Totalmente deliciosas” Te miró, sus ojos eran negros como la noche sin estrellas, no tenía ni siquiera un poco de brillo en ellos, ya no sabias con qué ojos mirarlo, su lado de niño pequeño se había acabado, estaba tomando el control de todo. Un último roce hasta que por fin metió su longitud dentro tuyo, su tamaño no era apto para ti, hasta te preguntabas como es que eso pudo entrar por completo dentro tuyo. “Lo siento... Sé que esto duele, en serio perdón pero te estoy deseando demasiado” Hasta que por fin lo había metido por completo, haciéndote gemir alto y cerrando con fuerza tus ojos mientras agarrabas sus brazos fuertemente, se inclinó hacia a ti, apoyando sus manos a tus costados y comenzando a dar embestidas, no podías con el dolor y el tamaño.
“J-jisung... Es demasiado grande para mí...” Dijiste en un gemido entrecortado, tus manos ahora estaban en la espalda de Jisung, clavando tus uñas algo fuerte.
“Lo sé, perdona... Vas a ver que luego se te pasa, perdón si sigue doliendo” No comprendias que estaba tratando de decir al disculparse tantas veces. “Te deseé tanto desde los 17, y ahora que te vi de nuevo, los pensamientos obsenos regresaron a mi mente... Lo siento” Sus disculpas hacían que te confundas pero luego comprendiste cuando comenzó a acelerar sus embestidas, entendiste que no podría controlarse, tus gemidos eran un río imparable sintiendo tus paredes apretarse contra él, aún no te acostumbrabas a su tamaño, era demasiado para ti pero aún así no podías evitar sentir excitación de todas formas.
Sus embestidas comenzaban a ser más fuertes, dándote más razones para llorar, tomó tus manos agarrandolas de tu muñeca y posicionandola en tu estómago, mirando como rebotaban tus pechos, estaba vuelto loco con eso. Ya habías tenido un primer orgasmo que realmente fue violento, se acercaba el segundo con un gran cosquilleo en tu estómago. Las embestidas eran dolorosas, sus bolas chocaban contra tu trasero, su mano libre frotaba tu clítoris con su pulgar haciéndote sentir más cosas, gemías incontrolablemente junto con Jisung, sus gemidos eran demasiado graves que te encantaba y más ver su rostro.
El segundo orgasmo llegó más violento que el otro pero fue diferente, un gran chorro había salido de tu vagina sorprendiendolos mientras él se salía de dentro tuyo, haciéndote sentir más adolorida, tus piernas temblaron poniendo tus ojos en blanco.
“Tan cachonda que estabas mi pequeña perra” Volvía a frotar su pulgar contra tu clítoris antes de poder embestirte con mucha más fuerza y rudeza tomando de nuevo el control.
No bastó demasiado para que comiences a ser más sumisa de lo que ya lo eras con él, una cachetada se insertó en tu mejilla por parte de Jisung haciéndote gemir de nuevo, él te tenía como querías, en persona él era otra cosa pero al parecer en el sexo no podía contener sus impulsos. Otra y otra cachetada fue aterrizada en tu mejilla junto con más gemidos de parte tuya.
“Haz más silencio puta, no quisieras que tu hermanito oiga como te estoy dando ¿O si?”
“A la mierda jaemin” Expresaste dando a entender que no te importaba lo que él diga aunque en el fondo estaba claro que te atormentaria de por vida.
No había pasado demasiado desde el segundo orgasmo, el tercero ahora estaba llegando de la misma forma en la que el segundo llegó, notó que te estabas acercando así que volvió a frotar tu clítoris con rudeza haciendo que tus pliegues de nuevo se aprieten alrededor de su pene, lo animó a seguir aún haciendo las embestidas mucho más fuertes, estaba claro que Jisung estaba en su mejor momento, sus sueños se habían vuelto realidad, había hecho todo lo que alguna vez soñó. Al ver gran chorro volviste a gemir haciendo temblar tus piernas, Jisung sacó su pene y se inclinó hacia ti, besando tus labios suavemente, correspondiste algo débil por la gran cantidad de chorros.
“No quiero que esto sea solo de una noche... Me gustaría follarte siempre pero siendo algo tuyo” Era gracioso oír sus palabras ya que sus manos jugaban con tus pezones mientras sus labios dejaban besos en esa zona, envolviendolos con su boca, ni siquiera cabían en su boca y le gustaba eso.
“Mmhp” Jadeaste acariciando su cabello “Estás sugiriendo ser novios?”
Levantó su cabeza mirándote a los ojos y asintiendo sinceramente, él quería eso y no dejaría pasar la oportunidad, mucho menos dejaría que esto sea solo una pequeña aventura.
“Entonces también quiero que me folles todas las noches pero siendo mi novio” Reiste un poco envolviendo sus brazos alrededor de su cuello.
Besó tus labios suavemente dandote a entender que estaba feliz porque lo hayas aceptado, en serio no podría describir su felicidad pero era grande, era simplemente un sueño para él. “¿Lista para un segundo round?” Preguntó alineando su pene en tu entrada de nuevo, jadeaste ante eso mordiendo tu labio.
“Mierda” Gemiste.
52 notes
·
View notes