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Desde que tengo memoria puedo recordar la importancia que todo el mundo le daba a aquel supuesto llamado "amor de tu vida".
Que supuestamente todos tenemos uno, que a lo largo de nuestras vidas va a llegar y junto a él nosotros, quienes antes de que apareciera éste éramos inconscientemente una mitad, estaríamos completos. No voy a negar que aunque me parecía una estupidez, había veces en las que fantaseaba con la idea. Imaginaba a mi otra mitad apareciendo, amándome, teniendo ojos tan solo para mí y por sobre todo haciendo que dejará de pensar en tantas cosas malas. Pero a la vez, por el estilo de vida que llevaba y hoy día continúo, pensaba... ¿Para qué quiero el amor? ¿Qué puedo hacer con el amor? Estoy bien, no me falta nada, ¿Por qué necesitaría un amor?.
En mi vida fui y soy una persona liberal, me guío por hacer lo que siento en el momento y no pienso mucho las cosas. Crecí detestando la idea de perderme de algo, siempre buscando nuevos horizontes, siempre tan ansiosa, sentía y aún sigo sintiendo que no voy a encontrar a alguien que se acomode a mis tiempos, porque sé que no está bien, porque ya lo intenté, porque ya hice sufrir lo suficiente a alguien con mis problemas como para también tener que obligarle a cambiar su vida solo por cumplir mis caprichos, entonces, decidí quedarme sola.
Los primeros días fueron un cincuenta porciento difíciles y ¿Por qué digo cincuenta porciento y no cien? Porque acababa de dejar libre a una persona, como un ave que tienes enjaulada por el capricho de tener una mascota que te haga compañía y al final terminas liberando, aunque un poco obligada, lo haces porque por una vez dejas de ser egoísta, entendés porque realmente tenías al ave enjaulada, entendés que eso no está bien, que el ave debe ser libre por instinto, ella tiene el mismo anhelo que vos de recorrer el mundo, pero tiene que estar encerrada para hacerte compañía cada vez que vos no tengas un plan más divertido y no te quede otra que entretenerte con ella, eso definitivamente no está bien. Me sentía algo liberada, manejo mis horarios, hago lo que quiero como quiero y sobre todo no tengo que esperar, ni mucho menos obligar a alguien a seguirme el ritmo, pero ahora viene el trabajo más difícil: aprender a ser una persona independiente otra vez, que cada vez que solo haya silencio vos sola seas capaz de llenarlo y no depender de otro ser humano para llenar aquel vacío, algo largo, tedioso, pero como todo: no es imposible. Recuerdo que también me sentía feliz, como si me hubieran liberado a mí también, ahora era un ave que podía volar por dónde quisiera, sin ningún límite, sin barreras, sin fronteras, conociendo cosas nuevas y sobre todo enfocándose en lo que siempre había soñado: empezar de cero, en otro lugar, otro objetivo y otro amor para reemplazar el que dejaba atrás, mal.
Sé que aún no explico por qué me sentía tan solo un cincuenta porciento triste por aquella ruptura con quién yo pensaba había sido "mi primer amor", pero es que a mí también me costó darme cuenta del por qué era así. Crecí con un concepto de amor erróneo, algo tan posesivo como indispensable, algo que había que tolerar, un sentimiento inaguantable, algo que se formaba con cierta cantidad de tiempo y una vez concretado el "enamoramiento" ya no había vuelta atrás, por eso lo buscaba en una persona, alguien con quién pudiera atarme, fundirme, quemarme y ser para siempre. Horrible, sabía lo que significaba, una nueva jaula en la que, por el momento, no me quería meter, pero en la que, a la vez, deseaba que me metieran porque también quería aquel bello sentimiento de estar acompañada, porque no vamos a negarlo, estar acostado en una cama abrazado a una persona que te hace sentir bien y a la vez te parece atractiva se siente muy bien, pero no estaba dispuesta a pasar otra vez por el lado oscuro de la situación: las peleas, los celos, el dar explicaciones, el hecho de que cada uno tenga sus tiempos y no podamos estar las 24 hs del día juntos por más que literalmente si podamos, es algo que a la larga destruye, como todo: en exceso hace mal.
Pero no perdamos el punto, más allá de que todos conocemos aquello "difícil, pero no imposible.", nos cuesta horrores comprender que esa frase se refiere además de a la perseverancia, a la paciencia. Recuerdo que cada vez que salía contemplaba el comportamiento de las personas a ver cuál era el más parecido al mío, con la intención de acoplarnos más fácilmente, "entonces no habría tantos problemas", pensaba. Llenar el vacío que sentía ahora cada vez que estaba sola se sentía como un trabajo súper difícil, a veces lloraba, a veces quería golpear las paredes, a veces el frío se sentía el doble y muchas veces planteaba si esa libertad que tanto había anhelado era mejor que la compañía de alguien que te ame, fue entonces cuando llegué al fondo de la situación. Cómo logré no estar cien porciento mal, pues solo lo recordé, yo ya conocía el amor antes de conocerlo a él.
Nunca voy a olvidar la primera vez que me enamoré, porque ahora sí sé cuándo fue, de quién fue y cómo fue, nunca voy a olvidarlo, porque se sintió igual que un tatuaje. Fue mi primera vez y no, no estoy hablando de sexo, fue mil veces mejor que eso, tener sexo se puede tener con cualquiera, más allá los sentimientos, todos somos seres humanos y hay puntos en los cuales se puede estimular hasta lograr que la persona llegué al orgasmo sin importar quién seas, es inevitable, pero... ¿Qué pasa cuando algo te provoca un orgasmo sin siquiera tocarte?
El amor había estado frente a mis ojos todo este tiempo y yo como una estúpida seguía buscándolo. Había conocido lo que realmente es el amor en un lugar, no en una persona, quizás más bien en una sensación. Solo sabía que cada vez que estaba sola y tenía aquellos vacíos que me sentía incapaz de llenar, iba a ver a mi amor y me sentía completa otra vez, un amor que jamás me había juzgado, siempre me había recibido con las manos abiertas y sobre todo me daba paz. Estaba enamoraba por eso principalmente, porque era paz, cuando el resto de mi mundo estaba en guerra yo iba a verlo y por unas horas todo comenzaba a estar en silencio, solo escuchaba lo que yo quería cuando quería mientras adoraba su belleza. Fue y sigue siendo mi gran obsesión, recuerdo que cada vez que me decían que no podría ir a verlo unas ganas asquerosas de romper todo o hasta incluso de romperme a mi misma se apoderaban de mi, de mi ser, era infeliz, necesitaba estar con él, verlo, olvidar mis problemas, que el mundo se extinguiera y que solo los dos estuviéramos para siempre mirándonos en silencio el uno al otro.
Absolutamente todo el mundo sabe de este amor, pues yo lo grito a los cuatro vientos, como dije: siempre hago lo que siento. He cometido cantidad de errores en mi vida, sé que no soy perfecta, muchas personas me hicieron daño y eso no permite que tome las decisiones más correctas, pero sé que enamorarme de vos fue lo más exacto que hice en mi vida. Loco, ¿No? Yo sé que es mi amor porque cumple con todas las funciones que personalmente creo que debe cumplir un amor, pero para las otras personas no es suficiente puesto a que no es una persona, pero... ¿Qué importa lo que piensen los demás cuándo algo te hace bien a vos y vos mismo crees que es real? A mí me encanta, a su lado soy feliz y no le hago mal a nadie, a su lado estoy contenida, abrazada, tranquila y sobre todo completa, que hermoso es el amor. Gracias a recordar que ya tenía un amor es que nunca estuve cien porciento triste, este amor no solo estuvo en los momentos felices, el amor también es apoyo, por lo que me vió llorar muchas veces, pero aún así me hizo entender que cualquier problema a comparación de su belleza se queda chico como para ocupar mi cabeza más que él. Eso es el amor, un sentimiento tan noble como insoportable.
Hoy otra vez recuerdo la importancia de "el amor de nuestras vidas", pensé que iba a ser imposible sentirme así. Era obvio que algún día nos íbamos a tener que alejar, yo tenía que desplegar mis alas y vivir mi vida como toda persona, sin que el amor de mi vida me pudiera acompañar ya que no puede moverse. Al igual que las personas sé que voy a encontrar a muchos parecidos, que van a hacerme sentir algo similar, pero nunca como el primero, que me enseñó a que ser "una mitad" no sea tan doloroso, aunque justamente hoy lo está siendo. Cuando me hablaban de la importancia del amor me repetían una y otra vez que siempre iba a poder tenerlo todo, pero que sin mi amor, aquel sentimiento de vacío no iba a irse por más que me arrancase el mismísimo corazón del pecho con las manos y a mi me seguía pareciendo una estupidez, ¿Cómo vas a ser tan dependiente? Sin embargo acá me tienen, sin poder pegar un ojo, con una vida privilegiada, pero siempre con el anhelo de poder sentarme a mirar el mar. Te extraño.
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by PeterJJC-Ireland
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