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LA CORPORACIÓN PEDÓFILA NECESITA DE LA INSTITUCIONALIZACIÓN DE LA IMPOTENCIA.

Muchas personas creen tal vez que el abuso sexual en las Infancias y adolescencias es un hecho excepcional.

O tal vez creen que es un hecho actual, que antes no ocurría y que sólo se debe a las nuevas libertades con las que vivimos hoy día.

Así hasta el infinito, un mar de creencias nunca explicitadas ni puestas bajo una lupa crítica se convierten en el telón que encubre a La Corporación PEDÓFILA internacional para seguir destrozando las vidas de enormes cantidades de seres humanos reducidxs a la condición de objetos.

Esa inmensa masa humana desamparada no cuenta con muchas veces con alguien que amplifique sus voces, y cuando eso sucede quiénes se convierten en víctimas somos toda la red de profesionales de la salud, la educación, la justicia, o el activismo social, que estamos detrás de la defensa de los derechos humanos.

La corporación PEDÓFILA tiene un enorme anclaje de poder no sólo logístico por entramarse en el poder judicial desde el poder económico, sino que cuenta con una estructura psíquica que prevalece en las personas que hemos sido educadas en sociedades de raigambre colonial.

Las sociedades que provenimos de un ordenamiento histórico nacido de la Colonialidad se organiza a través de un eje: las violencias emanadas de la Colonialidad del Poder: así la moral colonial crea al Patriarcado como tecnología política y desde allí herramientas como el machismo, el individualismo, el autoritarismo, la xenofobia, la heteronormatividad y otras, para sostener el esquema "amo - esclavo" y por su intermedio la red de comportamientos indispensables: el mérito, la obsecuencia, la obediencia, la sumisión, la culpa y el silencio.

Es así que tan monumental y compleja estructura de poder, enraizada en un entramado sociocultural, político y económico que a la vista aparece como una madeja indesentrañable, opera en quiénes queremos dar protección a las Infancias y adolescencias víctimas o potenciales víctimas de la pedofilia, en dos sentidos:

El de la complicidad por la intromisión de la perversidad en nuestra estructura psíquica, desde dónde actorxs de todas las áreas de la comunidad favorecen y fortalecen las acciones de la Corporación PEDÓFILA.

Y la INSTITUCIONALIZACIÓN DE LA IMPOTENCIA en quiénes no hemos permitido que la moral colonial arrase nuestra subjetividad y nos mantenemos erguidxs y en resistencia siendo las voces, lxs defensorxs y lxs cuerpxs - blanco, al fin, de los ataques de esta Corporación.

La institucionalización de la impotencia es la clave de la Corporación PEDÓFILA y para ello utiliza el Backlash o políticas de contraofensiva desacreditando a testigxs de las víctimas de cualquier calibre: profesionales de la salud, de la justicia, de la educación, de las áreas de Niñez y Adolescencia, familiares, vecinxs, y activistas.

Todxs estamos expuestXs POR IGUAL si no somos perversxs o si no estamos atrapadxs en la institucionalización de la impotencia.

Es por eso que, si el problema es grande, grande debe ser la respuesta a él.

Y es así que nos congregamos en unidad comunitaria internacional por los Derechos Humanos de las Infancias y Adolescencias víctimas y/o en riesgo del Abuso Sexual este sábado 21 de noviembre desde las 9 de la mañana.

Incluso poniendo en favor las condiciones que nos impone el COVID-19, generando un conversatorio con personas de América Latina de larga trayectoria en la problemática, a las que en condiciones de normalidad tal vez deberíamos viajar para conocer y escuchar: las tecnologías de la comunicación nos permiten y obligan hoy a estar conectadxs a través de la virtualidad.

La virtualidad como oportunidad para desarticular un poder que goza de su más prepotente impunidad desde hace miles de años, podemos entre todxs comenzar a desgranar juntxs.

Por lxs pibxs.

Por nosotrxs qué tal vez padecimos también esos abusos.

Por una sociedad libre de Violencia.

Porque terminemos con la cultura de las dictaduras.

Por el Grito Global #AbusoSexualEnLasInfanciasNuncaMas

María Laura Razzari (Malala)

Concejala Feminista Independiente Chivilcoy Mandato Cumplido.

Presidenta de la Asociación Civil Maltratocero.

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ESTAMOS BAJO ATAQUE DE LA CORPORACIÓN PEDÓFILA

Nuevo ataque a través de fake news de la corporación pedófila a la Licenciada Daniela Lezcano, Perito Forense especializada en Abuso Sexual en las Infancias.

Nuevamente, y mientras tenga vida, voy a ser parte del inmenso grupo de personas de bien de este mundo que defenderemos a profesionales de la salud como Daniela Lezcano a quien acompaño desde el 21 de septiembre de 2015 con aquella editorial que publiqué en el Diario La Razón de Chivilcoy titulada YO ACUSO dónde contaba la historia de esta valiente mujer, que por ser perito forense especializada en Abuso Sexual en las Infancias, fue falsamente denunciada de alterar una pericia de una niña abusada para ser condenada por la IN-Justicia Patriarcal que también intentó inhibirla del ejercicio de su profesión.

Contra toda lógica informativa y dentro de las prácticas usuales del Patriarcado Colonial, y su reserva histórica "LA COLONIALIDAD DEL PODER", el Diario Tandil vuelve sobre sus perversos pasos a caminar el mismo recorrido y publica como nueva una noticia vieja; práctica a la que entendemos como BACKLASH, o lo que sería lo mismo decir CONTRAOFENSIVA a Daniela Lezcano y todo su equipo de trabajo que no ha cesado un sólo instante en llevar a cabo acciones políticas, comunitarias, sociales, académicas y de toda índole para formar a la toda la ciudadanía A LA PAR DE de Profesionales de la Salud y del Poder Judicial en la problemática de las Violencias Patriarcales, dónde la Violencia de Género y el Abuso Sexual en las Infancias CONVIVEN BAJO EL MISO TECHO DE LAS FAMILIAS QUE LAS PADECIMOS Y SIEMPRE PADECEREMOS.

No creemos "casual" con Daniela que precisamente en Facebook nos hayan desaparecido notas de años atrás que muestran la historia de nuestra travesía contra la Corporación Pedófila Internacional; creemos que al igual que la publicación de una noticia VIEJA COMO SI FUERA NUEVA, HACER DESAPARECER LA PRIMERA PUBLICACIÓN SOBRE EL FALSO SÍNDROME DE ALIENACIÓN PARENTAL QUE YO ESCRIBÍ EN 2013 (Nota que también salió publicada en diciembre de 2013 en la Revista Clip del Diario La Razón de Chivilcoy) es otra de las acciones VEJATORIAS propia de la MORAL COLONIAL en la que se inscriben estos monstruos de todo calibre.

Y digo de todo calibre, porque entre estos abusadores se encuentran varones de a pié que llevan en el mandato de masculinidad el certificado del permiso de violar prendido en la solapa, pero sobre todos ellos se yerguen varones CON ALTO PODER POLÍTICO, ECONÓMICO Y LOGÍSTICO QUE INTEGRAN DISPOSITIVOS COMO EL PODER JUDICIAL DESDE DÓNDE ENCUBREN SUS MÁS HORRENDOS CRÍMENES; esos que vemos a diario en las noticias y no podemos creer que- gracias a las ALIANZAS PATRIARCALES- de ellos salgan ILESOS, LIBRES DE CULPA Y CARGO.

Sin embargo, es imprescindible decir que la "corpo pedófila" es apenas una extensión de un poder mayor, una especie de logia con beneficios, prebendas, protección, sofisticadas redes de aliadxs de distintos ámbitos dónde se entrecruza la trata laboral y sexual, los usuarios de la prostitución, la prostitución y trata infanto adolescente, y hasta inocentes partícipes/usuarixs de la industria de la moda o concursos de belleza, entre otros hilos de esta tremenda y casi indesentrañable madeja.

Igualmente voy a volver a dejar registro de nuestras acciones –y de las publicaciones que he podido rescatar- después de tantos años y trabajo permanente.

La violencia familiar y de género obliga a todxs lxs actorxs de nuestra comunidad a superar el modelo de la cultura patriarcal como lente a través de la que se interpretan los modos de relación interpersonales de hombres, mujeres y niñxs.

Un nuevo avance jurídico expresa que esta revolución se está convirtiendo en realidad, protegiendo a nuestrxs hijxs y la salud futura de la institución más maravillosa de nuestra sociedad: la Familia.

Un paso más en la dirección    correcta: La declaración de ilegalidad del S.A.P.

Por María Laura    Razzari, Revista Clip (Diario La Razón de Chivilcoy) 12/13.    www.maltratocero.org

El tránsito de salir de una historia de violencia familiar y de género es un camino espinoso que, lamentablemente, más allá de los avances de nuestra legislación actual, quienes deben atravesarlo no cuentan aún con los soportes asistenciales que darían cumplimiento efectivo al espíritu de leyes revolucionarias como la ley provincial de Prevención de Violencia Familiar 12.569 y la ley nacional de Protección Integral para Prevenir, Sancionar y Erradicar la Violencia contra las Mujeres en los Ámbitos que Desarrollen sus Relaciones Interpersonales 26.485.

Existen todo tipo de obstáculos para el tránsito de lo que lxs especialistas denominan la “ruta crítica”, desde la ausencia de un refugio para poder alojar a las mujeres víctimas y a sus hijxs, la inexistencia de un programa de asistencia psico educativo para todxs lxs integrantes de esos sistemas familiares, la falta de legisladorxs, abogadxs, policías,  juezas y jueces con perspectiva de género.

Estos obstáculos hacen eco en la vida de la gente, de muchos modos:  

·         Cuando recurrir a una Comisaría de la Mujer no alcanza porque la comunidad carece de dispositivos para acoger, acompasar el duelo y empoderar emocional, cultural, económica y políticamente a la mujer y sus hijxs.

·         Cuando el modo en que se interpreta la situación de aquellas familias dónde se ha corroborado legalmente una historia de violencia familiar y de género, hace que las mujeres nos enfrentemos con larguísimos juicios de divorcio de carácter contradictorio (dado que nuestras parejas no aceptan el divorcio de común acuerdo) que re victimizan a todo un sistema familiar porque éstos frenan la resolución de las cuestiones afectivas y económicas.

·         Cuando se establecen regímenes de visitas de lxs hijxs con el maltratador como si éste fuera un padre normal y su violencia sólo hubiese afectado a su esposa.

Es muy difícil de entender, para las mujeres e hijxs que recorremos o hemos recorrido este triste camino, que en el marco de los avances de nuestra legislación se omitan criterios tan elementales como el que establece que si un hombre es violento con su esposa, de cualquier modo que sea, esta violencia enferma a sus hijxs y es suficiente para que se revise la automática aplicación de un régimen de visitas que obliga a sus hijxs a ver periódicamente a un padre que naturaliza prácticas comunicacionales y modos de relación interpersonales, que invariablemente constituirán la cultura familiar y extra familiar de todxs esxs niñxs o jóvenes cuando lleguen a adultxs.

Somos espectadorxs a diario de verdaderas guerras familiares que se desatan a partir del litigio por la custodia de lxs hijxs, guerras que la justicia históricamente ha interpretado fuera de los marcos teóricos que hoy explican la violencia familiar y de género y que han sido reducidas, por la miradas técnica y científicamente miopes de todxs lxs especialistas involucradxs, a simples “manías femeninas” por convertir a lxs niñxs en botines de guerra de una crisis marital.

Denuncia de Abuso infanto-juvenil, Falso Síndrome de Alienación Parental y violencia judicial a la Lic. Daniela Lezcano

Los siguientes documentos aquí expuestos son probatorios de la violencia institucional de la que está siendo víctima la Lic. Daniela Lezcano de Tandil, por dedicar su carrera profesional a la defensa de menores víctimas de abuso desarticulando la estrategia de encubrimiento pedófila del Falso Síndrome de Alienación Parental.

Documento 1

El Colegio de Psicólogos de la Provincia de Córdoba (CPPC), cumpliendo con sus atribuciones de contribuir al desarrollo científico, de informar y opinar críticamente sobre problemas que afectan a la comunidad, ha resuelto pronunciarse en relación con el inexistente Síndrome de Alienación Parental (SAP).

Por Junta Ejecutiva Colegio de Psicólogos de la Provincia de Córdoba

La Junta Ejecutiva del CPPC advierte a la comunidad y a los colegas que el supuesto SAP y/o sus derivados -como el Trastorno de Alienación Parental, Madre Maliciosa, Co-construcción del Relato- constituyen pseudoteorías que no han sido aceptadas por la comunidad científica internacional.

El SAP, ideado por el doctor Richard Gardner, sostiene que un niño puede mentir cuando relata una experiencia de abuso sexual por parte del padre como consecuencia de haber sido programado por la madre, que ha introducido ideas extrañas en la mente del niño producto de un “lavado de cerebro”, lo que genera en el niño la convicción de lo que ha ocurrido y el rechazo al progenitor denunciado por abuso sexual o maltrato.

El supuesto SAP ha sido rechazado por la Organización Mundial de la Salud, la Asociación Española de Psiquiatría, la Asociación Americana de Psicología, la Asociación Americana de Psiquiatría , la Asociación Médica Americana y la Asociación de Psicólogos Americana; todas estas asociaciones lo inhabilitan como síndrome por no haber sido debidamente probado. El supuesto SAP intenta demostrar la existencia de lo formulado por argumentaciones exclusivamente, por lo tanto carece de soporte científico. Ha sido rechazada su inclusión en los grandes sistemas de Clasificación de los desórdenes médicos: DSM III, DSM IV, DSM V, CIE 10.

Gardner propone como intervención para el supuesto SAP, una vez que ha sido diagnosticado, lo que él llama terapia de amenaza, que consiste en que el juez deberá cambiar inmediatamente la tenencia del niño y entregársela al padre falsamente acusado de abuso sexual, sin que tome contacto con la madre en ninguna forma; al comienzo el niño puede resistirse pero luego comprenderá que fue sometido a un “lavado de cerebro” y aceptará al progenitor falsamente acusado.

Esta terapia comienza con la mediación de un psicólogo y si ésta no da resultado se procede a la coerción judicial. El terapeuta debe guiar la desprogramación del niño que está a cargo del padre denunciado por abuso sexual y/o maltrato; si el hijo insiste en la negativa de rechazar al progenitor el paso siguiente es la internación en un centro psiquiátrico.

Quienes defienden esta intervención clínico-jurídica destinada a modificar la situación de los denunciados por delitos de abuso sexual infantil e incesto paterno- filial muestran un absoluto desconocimiento de los derechos de niños, niñas y adolescentes que son vulnerados en cada una de estas instancias que plantean los seguidores de Gardner en el ámbito jurídico, psicológico y psiquiátrico, violando además la legislación internacional vigente al respecto.

Los psicólogos conocemos la complejidad que revisten las situaciones de incesto paterno-filial, abuso sexual y maltrato infantil, la relevancia del relato del niño/a y la importancia de que se dé crédito a su palabra para romper el secreto familiar. Disponemos de un amplio cuerpo de conocimientos científicos que nos permite conocer aspectos intra psíquicos y relacionales de la vida de niños, niñas y adolescentes.

El amplio desarrollo de la psicología evolutiva nos brinda herramientas teóricas así como técnicas para el diagnóstico y tratamiento de los niños y adolescentes que sufrieron abuso sexual e incesto. El abordaje interdisciplinario, los avances permanentes de nuestra ciencia y la capacitación permanente respaldan nuestro decir y hacer.

No estamos ajenos al accionar de algunos psicólogos, abogados y jueces que en la defensa de los abusadores instrumentan argumentos carentes de todo respaldo científico para lograr la invisibilidad de los delitos cometidos contra niños y niñas.

Mala praxis

Advertimos a la comunidad de que la utilización y/o aplicación de pseudoteorías, como el SAP, en el ámbito clínico-jurídico, es ilegal y puede constituir mala praxis por ser violatorio de la Declaración Internacional de los Derechos del Niño, que en nuestro país tiene rango constitucional; de las leyes 26061, de Protección Integral de Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes; 9944, de Promoción y Protección Integral de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes de la Provincia de Córdoba; 26657, de Salud Mental; 9848,de Salud Mental de la Provincia de Córdoba; y 24417, de Protección contra la Violencia Familiar.

También constituye una transgresión a los códigos de Ética del Colegio de Psicólogos de la Provincia de Córdoba y de la Federación de Psicólogos de la República Argentina (Fepra); por lo tanto, su utilización es pasible de sanciones éticas.

Documento 2

Defensoría del Pueblo de la Provincia de Santiago del Estero, 20 de Octubre de 2015

Conforme a la situación de persecución judicial en la ciudad de Tandil, Provincia de Buenos Aires, Argentina, donde se ha realizado juicio condenatorio contra la psicóloga Daniela Lezcano, perito en abuso sexual infantil. Que se la acusa de utilizar metodologías relacionadas con el denominado "Síndrome de Alienación Parental", el cual no existe y así lo ha proclamado la Organización Mundial de la Salud. Ante manifestaciones explicitas del mundo científico en el sentido que este falso síndrome fue pergeñado por un pedófilo para encubrir las denuncias de abuso sexual infantil y vulnerar el derecho a ser oído de las niñas y niños víctimas de delitos contra su integridad sexual. Así como manifestaciones de poderes ejecutivos como fue la del ex Presidente Zapatero de España, la Sindicatura General de la Nación de Argentina, el Congreso de la República del Paraguay, el Congreso de la Nación Argentina, también los poderes judiciales de varios países como la Casación de Italia, la Corte Suprema Argentina que manifestó el deber de escuchar a los niños, Colegios de psiquiatras del mundo como el Estados Unidos que lo ha rechazado siempre, el de Paraguay, el de Argentina, la Federación de Psicólogos de la República Argentina y el Colegio de Psicólogos de la Provincia de Buenos Aires entre otros, este último advierte a los profesionales que utilicen el SAP sanciones severas.

Adhiriendo a que la voz de los niños no debe ser acallada. Que ha sido herramienta de dictaduras y no de democracias culpar a las víctimas y evitar la denuncia de los delitos. Que se está cometiendo una grave violación de los derechos humanos como mujer que merece vivir en un contexto libre de violencia como dice la Convención de Belem Do Para y la Convención de Beijín, que merece no ser discriminada en ningún ámbito como advierte varias Convenciones Internacionales de protección de la mujer tanto de la OEA como de Naciones Unidas, que asimismo se avasalla su rol profesional como psicóloga interviniente en casos de abuso sexual infantil violando su derecho laboral y su derecho a ejercer dignamente la profesión enmarcada dentro de lo que mejor de la ley internacional procede.

 Que Daniela Lezcano está siendo víctima de violencia judicial con un juicio que no sigue los patrones legales que las leyes argentinas 26485, 26061, 25087 advierten sobre la protección integral de mujeres y niños. Y que en este juicio se están violando leyes de marco de la Argentina como de marco internacional. Advirtiendo la violación de los derechos humanos de una mujer que es activista por los derechos de las mujeres y la niñez.

Por lo expuesto envió mi adhesión a Daniela Lezcano, porque merece ser protegida como ser humano, como mujer, como psicóloga, como perito en abuso sexual infantil y como activista por los derechos de los más desprotegidos.

Dr. Luis Horacio Santucho - Defensor Adjunto de los Derechos de las Niñas, Niños y Adolescentes de la Provincia de Santiago del Estero.

Documento 3

Anteproyecto de Ley- Falla ética y mala praxis por utilización de pseudos síndromes.

Federación de Colegio de Psicólogos de la República Argentina (FEPRA) - Asociación Argentina de Prevención del Maltrato Infanto-Juvenil (ASAPMI)

En las últimas décadas asistimos a la proliferación de falsas categorías diagnósticas, de pseudo-síndromes sin ningún soporte o sostén científicos.

Los mismos se caracterizan por carecer de investigaciones previas que lo avalen y no haber sido reconocidos por ninguna asociación profesional, ni científica, siendo -en todos los casos- rechazada su inclusión en el DSM-IV por la Asociación Americana de Psiquiatría, y en la CIE-10 de la OMS.

Lamentablemente muchos profesionales médicos/as y psicólogos/as no dudan en la utilización de los mismos en lo que entendemos constituye una falla ética notable y a la vez un acto profesional constitutivo de mala praxis, que además atenta flagrantemente contra la salud mental del paciente.

Asimismo, inducen a errores y confusión dentro de las instituciones sanitarias, educativas y especialmente jurídicas. 

En algunos casos, dichos falsos síndromes son seguidos de recomendaciones terapéuticas que directamente quebrantan los Derechos Humanos de los pacientes en cuestión. 

Por otro lado, la aparente simpleza de los mismos, suelen generar una especie de popularidad, pretendiendo además una especie de validación y reconocimiento -a partir de esta difusión y la consecuente confusión y simpatía que suelen generar- precisamente fuera de los claustros universitarios o de las sociedades científicas donde naturalmente son rechazados. 

Es entonces que arteramente recurren al mecanismo de la autoproclamación promovida en algunos casos por profesionales de la salud mental que niegan y reniegan de los dispositivos ético-deontológicos y jurídico-legales vigentes, presentándose como especialistas de estos pseudo – síndromes, lo que impone a los colegios profesionales y a las sociedades científicas abordar en forma inmediata la cuestión ya que está en juego también la salud pública. 

En resumen, la utilización de teorías no validadas científicamente, quebranta lo dispuesto expresamente por el art. 2º del decreto reglamentario de la ley 23.277 de Ejercicio Profesional de la Psicología, que dispone:" El ejercicio de la psicología comprende toda actividad profesional, específicamente psicológica, desarrollada en forma individual, grupal o institucional, aplicada sobre las personas. Las teorías, métodos, recursos, procedimientos y/o técnicas específicas que se apliquen en el ejercicio profesional de la Psicología deberán ser aquellos reconocidos en los ámbitos universitarios académicos del país en los que se imparta enseñanza de Psicología". 

En función de lo anterior, es que se presenta la siguiente propuesta:

ARTICULO 1º: Las currículas de grado de la formación universitaria de Psicología en el país, públicas y privadas, incluirán la utilización de técnicas de evaluación diagnosticas aceptadas nacional e internacionalmente por la comunidad académica de psicología, no pudiendo utilizarse en situaciones de la infancia en riesgo, evaluaciones y abordajes de los vínculos familiares fallidos, disfuncionales y/o nocivos; con teorías y/o síndromes no validados por dichos centros académicos. 

ARTICULO 2º: La comercialización y uso del material para dicha evaluación diagnóstica, queda reservado sólo a los psicólogos egresados de carrera mayor universitaria.

ARTICULO 3º: Queda prohibido el acceso al material de "uso psicológico", la información generalizada y difusión en medios no especializados dirigido a personas ajenas a la profesión de psicólogo/a egresado de carrera mayor universitaria.

Documento 4

Matar a la mensajera

Una psicóloga enfrenta un juicio y una sanción de un colegio profesional de Azul que la fuerza a no ejercer por dos años. La acusan de poner una mueca de tristeza en el dibujo de una niña a la que atendió por un abuso sexual. Ella desmiente las acusaciones y sospecha de la manipulación de las pruebas. Pero, además, enmarca su procesamiento en la persecución a las peritas que legitiman la voz de las niñas y los niños víctimas de violencia sexual. El fenómeno del backlash que busca hacer retroceder a la Justicia y a la credibilidad de las denuncias y la intención de asustar a las mensajeras.

Por Luciana Peker

Angela tenía cinco años e iba a la parroquia Santa Rosa de Lima, en el barrio porteño de Balvanera, a recibir clases de apoyo. Estaba en primer grado, pero sus renglones no estaban ordenados. Vivía en un conventillo a donde su familia había llegado, desde el norte, en busca de trabajo. Angela tenía mucho miedo y el pis se le escapaba sin que pudiera hacer nada para cerrar su cuerpo. Jugaba a que un lobo perseguía y asustaba a una niña hasta que le contó a Daniela Lezcano que ella era la niña y su papá, el lobo que la asustaba. Lezcano estudiaba psicología, con una beca, en la Universidad Católica Argentina (UCA) y colaboraba gratis para ayudar a las niñas a aprender. De un golpe se enteró de que la violencia más extrema y escalofriante existe. Y que el cuerpo pequeño, todavía sin estirarse a los desafíos de la vida, a veces, está expuesto al mayor abismo. Angela, igual que muchos niños y niñas, no podía defenderse sola. Necesitaba ayuda para poder frenar el abuso. Angela le pidió ayuda y Daniela Lezcano nunca volvió a ser la misma.

Ahora tiene 42 años. Se recibió de psicóloga y está en el cuadro de honor de la UCA. El título se lo entregó, en 1997, Jorge Bergoglio en la Catedral de Buenos Aires. Pero enfrenta un juicio por su intervención en un caso de abuso sexual. Ella cree que no se trata de una causa aislada, sino que tiene que ver con una conducta sistemática de protección a los agresores y descalificación a las víctimas y a quienes las defienden en una serie de casos en Tandil, en la provincia de Buenos Aires. Y, también, que la acusación contra su trabajo es un caso testigo de las embestidas que sufre la mayoría de los y las profesionales de la salud que peritan y certifican las voz de los niños y niñas abusados.

Qué es el backlash?

Las denuncias de abuso sexual no suelen tener pruebas físicas. Pero sí la voz de chicos y chicas que relatan su historia y que en la Argentina empezaron a escucharse a partir de 1983, con el regreso de la democracia. Pero los agresores no levantan las manos y se entregan como ovejas mansas. Su mejor defensa es silenciar la voz de quienes revelan ser ultrajados. Por eso, la estrategia de los denunciados es descalificar la voz de sus denunciantes alegando que no es la palabra real de niños y niñas sino la de las madres (en la mayoría de los casos) que les llenan la cabeza a través del Síndrome de Alienación Parental (SAP). Pero, cuando eso no es suficiente, también invalidan, enjuician, amenazan, golpean o embargan a las psicólogas que peritan o atienden a los niños o niñas.

El backlash es la reacción frente a la mayor visibilización y denuncias de abuso sexual e implica una corriente de retroceso para dejar impunes a los agresores, revincular a las niñas o niños con sus victimarios (en muchos casos sus progenitores), perseguir a las psicólogas comprometidas, desalentar la intervención de otras profesionales en la defensa de niños y niñas abusados y hostigar en redes sociales a víctimas, madres protectoras, profesionales de la salud, organizaciones contra la violencia y periodistas que visibilizan el abuso sexual.

El 17 de noviembre del 2006 Las12 publicó la nota “No denunciarás”, en donde se informaba de la persecución a psicólogas que tenían que contratar seguros por la cantidad de juicios contra su patrimonio por parte de poderosos y adinerados acusados. “De la desmentida de la palabra de los niños se ha pasado a la desmentida de la palabra de quienes trabajan en función de la protección de su subjetividad. ¿Cuál es la consecuencia? La vigencia de un alto grado de visibilidad de la victimización sexual de los niños y sus consecuencias, coexistiendo con el intento de paralizar e impotentizar a quienes deberían seguir siendo los portavoces de la auténtica palabra de los niños”, advertía hace ya ocho años la psicóloga Alicia Ganduglia. La psicóloga Patricia Gordon, presidenta de la ONG enRED, de Mar del Plata, apunta: “El fenómeno del backlash crece paralelamente a todos los avances logrados por la lucha contra el abuso sexual y los derechos de los niños y las mujeres. Los profesionales que se comprometen con su saber, pero también con su implicación seguimos siendo denunciados en los colegios profesionales en un claro intento de matar al mensajero”. Ella también apoyó y contuvo a Rocío Girat, la joven que, con veinte años, pudo hablar públicamente en nombre de ella y de muchas niñas abusadas que, por su edad, no tienen acceso a decir su verdad y, por eso, son desmentidas por sus agresores. A Rocío su papá, un suboficial de la Armada, la abusó desde los 14 años. Fue condenado a 14 años de prisión domiciliaria, pero luego del dolor público de Rocío y que se replicara su indignación, la Justicia cambió de idea y lo trasladaron a la cárcel de Batán.

Por su parte, la psiquiatra infanto-juvenil Irene Intebi, ex presidenta de la Sociedad Internacional para la Prevención del Maltrato Infantil (ISPCAN, por sus siglas en inglés) y autora del libro Proteger, reparar, penalizar, de Editorial Granica, promueve un salto de calidad: “No creo que haya un significado único de la persecución de profesionales, creo que puede tener significados diferentes en los distintos contextos en que ocurre. Lo que sí puedo afirmar es que la falta de lineamientos comunes para la toma de entrevistas ante sospechas de abuso sexual infantil y la falta de capacitación dejan abierta la posibilidad de que la parte acusada impugne o cuestione el trabajo de quien confirma y que, eventualmente, pase a la persecución. Habría menos posibilidades de persecución si la evaluación se hiciera de manera similar en Buenos Aires, La Pampa o Córdoba y si el Poder Judicial o el Ministerio Público ofreciera capacitaciones obligatorias para sus profesionales, peritos externos y aspirantes”.

Los chicos no mienten

La propuesta es un paso adelante en la defensa de niños y niñas. Mientras tanto, Daniela Lezcano, psicóloga con especialización en maltrato y abuso infantil y perito forense (que también intervino en el juicio contra Alberto Juárez Villegas, ex ministro de Economía de Santiago del Estero y sobrino del ex gobernador Carlos Juárez que fue condenado, a fines de septiembre, a seis años de prisión por abusar de su hija), enfrenta un juicio porque el dibujo de una nena a la que ella atendió apareció (sin que estuviera con cadena de custodia) con una mueca de tristeza y una sanción administrativa del Colegio de Psicólogos de Azul, que intenta obligarla a no ejercer por dos años. Ella apeló y considera que su caso es un escarmiento para alejar a otras profesionales de la escucha a chicos y chicas abusados/as.

¿Cómo fue tu intervención en el caso del sobrino del ex caudillo santiagueño Carlos Juárez?

–Evalué al abusador a pedido de él y le hice un psicodiagnóstico que muestra que era compatible con el abuso. La mamá de la nena pide que me llamen como testigo y presento el informe en el 2002. Ahí me persiguieron judicialmente. Pero, igualmente, en el 2014 hay juicio oral y mi declaración lo pone en jaque. La lucha es grande y nos toca, como en el caso de Juárez Villegas, pasar catorce años hasta que se logra justicia. Pero, al final, se logró romper la impunidad y la niña, que ahora tiene 17 años, va a poder empezar una vida más normal sabiendo que se le creyó aun después de tantos años.

¿Qué te pasa después de escuchar un relato de abuso sexual?

–Se siente el compromiso. Los chicos hablan, dibujan o usan títeres y plastilina. Cuentan desde el cuerpo, la voz, las palabras, y para ellos dejaron en una el problema. Es muy difícil desprenderte de eso. No podés no comprometerte. Confían en que dijeron la verdad y que los van a proteger, están sufriendo y tienen miedo, mientras que el abusador utiliza mecanismos de coerción, como amenazas de que les va a pasar algo a ellos o a su mamá o el cuentito de “esto es un secreto y no se lo digas a nadie”. Los niños no mienten. Nuestro trabajo es que el/la niño/a se reorganice, decirle que no tiene culpa por lo que está contando, que él no es malo. Nuestro rol es tratar de que sane. Y en el caso de las pericias, poder llevar el testimonio cuando se nos cita. Aunque nos encontramos con escollos.

¿Qué es lo que más te marcó en tu experiencia con chicas abusadas?

–Justo veía en la televisión el caso de la chica violada en el colegio de Avellaneda y me acordé del caso de Sofía, que hoy tiene ocho años y tenía cuatro años cuando la vi, a mediados del 2010, después de un abuso. El padre denunció que su hija era abusada por la madre y su pareja. La Justicia obliga a que se haga un proceso de revinculación con la madre mientras que seguía el proceso penal. Un día a ella le tocaba la visita y el papá me llama que, al salir, la nena le dijo que había sido abusada nuevamente. Los fui a ver a la comisaría de la mujer. La carita de esa nena, colorada, llorosa, pero con lágrimas pegadas en las mejillas, que les veías los surquitos, esa cara de recién abusada, fue impactante.

¿Este caso demuestra que los varones también pueden ser protectores?

–La mayoría de las denuncias son realizadas por mujeres. Es el único caso que conozco de un padre protector.

¿La actuación sobre este papá denunciante muestra que no se trata de una persecución a varones sino de un modus operandi de abusadores sexuales?

–Se trata de invisibilizar el abuso y no verlo como delito. Hay un poder muy grande de los pedófilos. Es sistemática la persecución, el descrédito y la invisibilización del relato del niño y de los mensajeros que seríamos los psicólogos que validamos el relato. Siempre te dicen que estás paga y que estás mintiendo. El descrédito no está fundamentado en mi trabajo. El efecto es que los familiares que quieren proteger a las víctimas no consiguen psicólogas porque se replegaron a partir de la condena social.

¿Esta embestida contra las psicólogas genera que haya menos profesionales que quieran peritar o atender a chicos y chicas abusadas?

–Sí, por eso es importante que haya colegios como el de Córdoba, el de Bahía Blanca, el de Mar del Plata y el de La Plata, que se pronunciaron contra el Síndrome de Alienación Parental (SAP) y alertan a los profesionales que no utilicen el SAP.

¿Por qué te sancionaron?

–En Tandil estaba el caso de Sofía y otros quince casos. Por eso se autoconvocó un grupo de familiares que fueron buscando justicia y respaldo e hicieron denuncias públicas al Ministerio de Justicia de la Nación, a Madres de Plaza de Mayo y a la Asamblea Permanente por los Derechos Humanos (APDH). Pero ante cada pasito adelante había una embestida. Hubo un caso en el que se les sacó los niños a la madre porque era pobre y los dieron en adopción, también a una abuela el asesor de menores le fisuró dos costillas porque ella le decía que no iba a permitir que re vincularan a sus nietos con el abusador. A mí me cortaban los cables de mi casa y llamaban a mis hijos. Pero no me intimidaban hasta que lograron armarme una causa. Yo tengo mi título y fui el orgullo de mis viejos y es terrible salir en los diarios como la psicóloga cuestionada.

¿Cuál es la acusación?

–En el 2010 una nena, M., de cuatro años, que era paciente mía, después de un año de terapia, viene con un hematoma a la altura de la cadera y me cuenta que se había golpeado en una situación de forcejeo. Me dice que no quería que el padre “le chupe el pilin”. Le cuento a la mamá y ella hace la denuncia. Yo no hago el diagnóstico. El equipo técnico del Juzgado de Familia evalúa a la nena, dicen que hay indicadores de abuso sexual y le ponen una restricción de contacto al padre. En el 2011 me notifican que el fiscal Marcos Eguisquiza me investiga por falso testimonio y falsificación de instrumento privado como si yo hubiera tergiversado o tocado el dibujo de la nena. La acusación no dice que se cambiaron las partes sexuales, sino que en la cara se le hizo una mueca hacia abajo como si estuviera triste.

¿Qué pasó con ese dibujo?

–En julio del 2010 yo le entrego ese dibujo a la madre y ella lo deja en la Comisaría de la Mujer, pero nunca tuvo una cadena de custodia. Un año después dicen que pude ser yo la que tocó el dibujo y que la nena pudo denunciar al padre porque la induje.

¿Alegan que la terapeuta le metió en la cabeza que fue abusada?

–No pueden decir que no dijo lo que dijo, entonces dicen que yo la induje. Hay una historia clínica completa, hay testimonios de las maestras del jardín en el que ella tenía cambios de conducta sexualizados y la costumbre de dar besos como sapo. Y un diario donde la mamá contaba día a día lo que la nena iba diciendo. Ahora puedo ir a un juicio oral por esta denuncia. Estoy tranquila porque tengo una buena defensa con mi abogado Carlos Zimerman. Pero, a su vez, el juzgado manda la investigación al Colegio de Psicólogos del Distrito Ocho de Azul, que me arma un tribunal y me imponen, en febrero del 2012, una sanción administrativa: el bloqueo de matrícula y la inhabilitación para ejercer por dos años, dando por hecho que pude inducir a la niña y falsificado el dibujo. Yo no dejé de ejercer porque estoy apelando judicialmente la sanción administrativa, aunque sí me afectó muchísimo el ánimo la condena de algunos medios interesados en defender intereses de los poderosos.

¿Qué implica este proceso?

–Si no hay psicólogas/os que validen las palabras de los niños y niñas se terminan las denuncias de abusos. Si instalan que las madres están locas, las cansan y las invisibilizan y acallan a la psicóloga, también quedan más indefensos los niños y niñas. 

El fin es acallar las denuncias de quienes queremos proteger a los más débiles.

Documento 5

PRONUNCIAMIENTO SOBRE EL SUPUESTO SINDROME DE ALIENACION PARENTAL - COLEGIO DE PSICOLOGOS - DISTRITO X - MAR DEL PLATA

Del Colegio de Psicólogos - Distrito X de Mar del Plata.

Es de público conocimiento que la proliferación de pseudoteorías y de síndromes inexistentes son empleados cotidianamente como argumentos que pretenden entre otras cosas, invalidar, ignorar y silenciar los testimonios de niños, niñas y adolescentes víctimas de abuso sexual y de incesto paterno filial. 

Sabemos de la complejidad para poder determinar que muchos de los síntomas de carácter inespecífico que presentan los/as pacientes, en muchas oportunidades, se corresponden con la vivencia de una situación de abuso y/o de incesto paterno filial. Pero a la vez conocemos la importancia fundamental del relato de la posible víctima a la hora de asegurar que se ha ejercido abuso o incesto. 

Afortunadamente, contamos con conocimientos y con una vasta producción científica que desde hace tiempo avanza día a día no solo en materia de cuestiones intrapsíquicas referidas a la niñez y a su evolución, sino también en consonancia con otras disciplinas a saber, psiquiatría, derecho, trabajo social, sociología, antropología, y otras. 

Específicamente sabemos hoy mucho más acerca de los procesos de la memoria, el recuerdo y la posibilidad que tienen niños y niñas de dar a conocer situaciones relevantes de su vida cotidiana. 

Por tal razón, como agentes de salud, tenemos que profundizar constantemente en los avances científicos y en las técnicas necesarias para la atención terapéutica y la validación de nuestro proceder profesional. 

A propósito del "SAP" (llamado síndrome de alienación parental) los/as remitimos a la atenta lectura de la bibliografía de su creador, Richard Gardner. 

Sintéticamente podemos decir que su producción se ha basado en una serie de consideraciones acerca de la sexualidad de neto corte pedófilo al punto tal de recomendar a los padres la iniciación sexual de sus hijos e hijas. 

Es harto conocido que el inexistente síndrome no fue aceptado en su país, Estados Unidos, y que no fue considerado científico en ninguna asociación del mundo entero. 

Ahora bien, en la Argentina, esta pseudoteoría fue aceptada y empleada por grupos de profesionales que poco a poco han creado una gran industria en la defensa de abusadores. 

Jueces, abogados y psicólogos nucleados en asociaciones que, bajo la consigna de la defensa de padres separados de sus hijos, intervienen como peritos de parte en numerosos casos de supuestos abusos, algunos de ellos de público conocimiento. En ellos se esgrime a través de la co-construcción de memorias y del "SAP" (ambos inexistentes en el campo científico), que los relatos de las víctimas en realidad son construcciones que parten de sus madres alienadoras y que las mismas, a través de la inoculación de ideas en contra del progenitor no conviviente, logran que los niños y niñas reproduzcan relatos. 

Pero es más grave aún, ya que en la mayoría de los casos argumentan que son los/as profesionales quienes co-construyen también los relatos junto a las madres y los/as pacientes, o simplemente no se dan cuenta de la falsedad de los dichos de sus pacientes. 

Ahora bien, en esta simplificación de la grave situación que estamos exponiendo caben algunas consideraciones: 

La descalificación de la palabra de las víctimas de abuso sexual infantil e incesto paterno filial. 

La hegemonía del patriarcado ya que son las madres, mujeres, quienes tratadas de "alienadoras" influirían en contra de los padres progenitores. 

El desconocimiento de las cuestiones aún más básicas del psiquismo infantil. 

La negación acerca de que niños y niñas pueden dar testimonio de su padecimiento no solo a través de la palabra sino de los síntomas compatibles que junto a relatos específicos configuran una situación de ASI. 

La descalificación a los y las profesionales que desde el lugar que su ciencia lo indica y de acuerdo a la experiencia y formación idónea trabajan comprometidamente en sectores públicos y privados. 

La transgresión al código de ética profesional que de ninguna manera avala la puesta en práctica de pseudoteorías que no están convalidadas científicamente en nuestra comunidad y que por lo tanto resultan inexistentes. 

El Código de Ética de la FEPRA establece: 

3.3.- Con la profesión y la comunidad 

3.3.1.- En tanto que profesionales los psicólogos deberán armonizar los intereses propios con el bien común, reconocer a la comunidad como destinataria legítima de sus servicios profesionales, propender al desarrollo científico y profesional de la psicología y conducirse siempre de manera coherente con los Principios que este código indica. 

3.3.3.- Los psicólogos deberán conducirse de forma proba, con firme sentido del honor en el ejercicio de su profesión. Cooperarán con su formación y actualización continua en el avance de su práctica profesional y en el beneficio de la comunidad. 

3.3.4.- No aplicarán o indicarán técnicas psicológicas que no sean avaladas en 

ámbitos científicos, académicos o profesionales reconocidos. 

3.3.5.- Los psicólogos prestarán sus servicios profesionales eficientemente, con 

sumo cuidado de no incurrir en negligencia o impericia. 

3.3.8.- Los psicólogos tienen la obligación de denunciar. 

3.3.8.1.- el ejercicio ilegal de la profesión, en cualquier forma que ocurra. 

3.3.8.2.- la práctica profesional de los psicólogos que no se efectúe en el plano y nivel científico propios de la psicología. 

3.3.8.3.- el curanderismo y cualquier otra práctica carente de fundamento científico, cualquiera sea su forma. 

6.1.1.3.- Los psicólogos no ofrecerán recursos o actividades relativas a técnicas psicológicas que no estén reconocidas por la comunidad profesional. Tampoco utilizarán el precio o gratuidad del servicio como forma de propaganda. 

6.2.- Divulgación 

6.2.1.- Las declaraciones u opiniones profesionales que los psicólogos deban formular con fines de información al público deberán plantearse siempre con rigor científico, sin perjuicio de adecuarse al nivel de comunicación que corresponda. 

6.2.2.- Los psicólogos deberán abstenerse de hacer declaraciones públicas que sean falsas, engañosas, desorientadoras o fraudulentas, ya sea por lo que ellos establecen, transmiten o sugieren, 

o por lo que omiten, en relación con su investigación, práctica u otras actividades laborales o referidas a personas u organizaciones con las que están asociados. 

6.2.3.- Cuando los psicólogos expresen opiniones o comentarios a través de cualquier medio, directo o indirecto, de divulgación tomarán precauciones razonables para asegurar que las declaraciones estén basadas en la práctica y la bibliografía psicológica apropiada. 

El Código de Etica de la Pcia de Buenos Aires establece: 

Capitulo VI. Investigación 

Art.39 Queda prohibido aplicar a su práctica profesional, tanto pública como privada, procedimientos rechazados por los centros universitarios o científicos reconocidos legalmente. 

Por lo expuesto dejamos expresado nuestro pronunciamiento institucional acerca del empleo del "SAP" como argumento carente de toda validez científica que transgrede, para quien lo utiliza en el ejercicio de esta profesión, nuestro Código de Ética Profesional de acuerdo a los artículos citados. 

Abogamos por una sólida construcción de conocimientos que sostengan prácticas éticas, humanitarias y acordes a las reglamentaciones vigentes sobre los derechos de la infancia. 

Saludamos muy cordialmente. 

Consejo Directivo. 

Lic. Patricia Gordon Lic. Sergio Genchi

Secretaria General Presidente

Documento 6

Numero de Expediente 3604/13

Origen :

Senado De La Nación / 

Tipo :

Proyecto De Resolucion

Extracto :

FERNANDEZ: PROYECTO DE RESOLUCION EXPRESANDO PREOCUPACION POR LA UTILIZACION DEL FALSO "SINDROME DE ALIENACION PARENTAL" (SAP), EN PROCESOS JUDICIALES Y DE FAMILIA COMO ESTRATEGIA EN DEFENSA DE ABUSADORES.

Autores :

Fernández , Anibal / 

Díaz , Maria Rosa

Trámite Legislativo

Fechas en Mesa de Entrada

MESA DE ENTRADA

DADO CUENTA

Nº DE D.A.E.

01-10-2013

13-11-2013

153

Fechas en Direccion Comisiones

DIR. COMISIONES

INGRESO DEL DICTAMEN

15-10-2013

SIN FECHA

Giros del Expediente a Comisiones

De Salud Y Deporte

 ORDEN DE GIRO: 1

FECHA DE INGRESO: 16-10-2013

FECHA DE EGRESO: 13-11-2013

ENVIADO AL ARCHIVO

26-11-2013

Resoluciones

SENADO

FECHA DE SANCION: 13-11-2013

SANCION: APROBO

COMENTARIO: SOBRE TABLAS

OBSERVACIONES

15-10-13: INC. FIRMA SDORA. DIAZ

NOTA:

FUNDAMENTOS

Señor Presidente:

El abuso sexual infantil es el delito más impune de la tierra. Los abusadores de los niños, en la inmensa mayoría de los casos, cometen los hechos entre cuatro paredes, confiando en su poder adulto, en la vulnerabilidad de sus víctimas y en la impotencia de las madres, quienes generalmente son ellas mismas víctimas de violencia en el seno de la familia o grupo conviviente. 

En los últimos años, se han logrado grandes avances en el conocimiento de las principales características del fenómeno, de los victimarios y de las víctimas infantiles; así como también, en la detección de casos de violencia intrafamiliar y la difusión de los casos para lograr mayor concientización en la comunidad. 

El progreso reseñado, como era de esperar, ha generado reacciones muy agresivas de parte de los abusadores, los violentos en general y de quienes lucran con los abusos -tráfico de niños, pornografía infantil, etc.-. 

Esas reacciones se traducen, en lo individual, en agresiones a víctimas, familiares no abusadores y profesionales y funcionarios que les brindan auxilio y contención. Desde lo teórico, se manifiestan en la argumentación de teorías inexistentes, carentes de todo soporte científico y que, inexorablemente, partiendo de la inexistencia de los abusos denunciados, depositan la responsabilidad en las madres de los niños y niñas que, según sostienen, sólo desean dañar a sus ex parejas. 

Para ello, las acusan de haberle "lavado" el cerebro a sus hijos hasta hacerles creer que han sido abusados. Esta estrategia se basa en el denominado "Síndrome de Alienación Parental" (SAP) y es esgrimida ante los tribunales en los que recaen las denuncias. 

El inexistente “Síndrome de Alienación Parental” (SAP) ha sido descartado en su país de origen, Estados Unidos, precisamente por su falta de rigor científico y la total carencia de seriedad de su propulsor, Richard Gardner. 

Si bien la mayoría de los magistrados conocen la falsedad del SAP y su utilización sólo con fines destructivos durante los procesos por abuso sexual infantil, existen otros que, por diversas razones, admiten dichas burdas argumentaciones y disponen medidas altamente perjudiciales para los niños y niñas víctimas. 

La actuación de aquellos magistrados que adoptan este tipo de medidas-desconociendo los avances producidos en la materia y la vigencia de las elevadas normas constitucionales que protegen integralmente a los niños, niñas y adolescentes- es materia de profunda preocupación.

En virtud de lo expuesto, solicito a mis pares la aprobación del presente proyecto.

El Senado de la Nación,

RESUELVE:

Expresar su preocupación por la utilización del falso “Síndrome de Alienación Parental” (SAP) en procesos judiciales penales y de familia como estrategia de defensa de los abusadores, en tanto constituye una flagrante violación a la Ley N° 26.061 de Protección Integral de los Derechos de las Niñas, Niños y Adolescentes, y carece del respaldo y reconocimiento de la comunidad científica.

Conclusión

Estos artículos que con Daniela Lezcano atesoramos, son para quiénes venimos en esta travesía, la única herramienta para poner en conocimiento de la sociedad nuestra verdad, nuestras tragedias cotidianas de lo que es NO SER OBSECUENTES ANTE UN ORDEN CRIMINAL que no sólo comete femicidios en absoluta impunidad dentro de un mar jurídico que dice defender nuestros derechos, sino que DESTROZA EL TEJIDO SOCIAL TODO, IRRUMPIENDO EN LOS CUERPOS Y LAS VIDAS DE MUJERES NIÑOS, NIÑAS Y ADOLESCENTES.

Estamos bajo ataque, en dónde ahora suceden las guerras: nuestros cuerpos, las redes sociales y tal vez también en una PUESTA EN ESCENA DE POLÍTICAS PROGRESISTAS, que engordan la burocracia estatal PARA QUE NADA CAMBIE.

Invitación

Tema: Zoom meeting invitation - Reunión de Zoom de Daniela Lezcano

Hora: 14 nov 2020 06:00 PM Buenos Aires, Georgetown

Unirse a la reunión Zoom

https://us02web.zoom.us/j/87245710955?pwd=cnJkTldLNk9panNkOVlRZU1aMVMwdz09

ID de reunión: 872 4571 0955

Código de acceso:707195

María Laura Razzari (Malala) 

Profesora de Historia y Filosofía.

Concejala Mandato Cumplido Bloque Feminista Independiente Chivilcoy (2013 - 2017) 

Presidenta de la Asociación Civil Maltratocero contra la Violencia de Género 

Ex coordinadora del Área de Género y Diversidades del Instituto Federal de Políticas Públicas FORJAR Usina de Ideas.

[maltratocero-ong]

LOS GRUPOS DE MUJERES EN LOS PARTIDOS POLÍTICOS EXPRESAN LA CONTINUIDAD DE LA MORAL COLONIAL

Haciendo ejercicio de mi libertad intelectual y afectiva, y siempre preocupada por ser honesta con las personas con quiénes construyo la política cada día, comparto esta reflexión que me acompaña desde hace mucho tiempo.

A esta altura de mi ser mujer en una sociedad patriarcal, colonial y capitalista; en un país y una región donde las estructuras más profundas del feudalismo siguen siendo la cimiente de todos los males de las personas y las repúblicas, he llegado personalmente a la convicción de que no existe nada menos natural -DENTRO DE LOS PARTIDOS POLÍTICOS Y OTRAS INSTITUCIONES DE SIMILAR CARÁCTER- que los denominados "Grupos de Mujeres'. Los Grupos de Mujeres históricamente y a raíz de la expresión de Los Feminismos (muy diversos ellos entre sí) nacieron para que las mujeres SIN LA TUTELA PATRIARCAL DE LOS HOMBRES hallaran espacios dónde -abrazadas por la empatía de género, clase, etnia, raza, identidad, etc.- tuvieran un espacio gozoso de AUTONOMÍA y SEGURIDAD DE SU INTEGRIDAD HUMANA, pudieran allí deconstruir todo cuánto las oprimía, les/ nos causaba y causa padeceres profundamente políticos pero perversamente consignados como "problemas personales". Así los Feminismos, más allá de sus Diversidades, no tienen demasiado resquemor en aceptar que LO PERSONAL ES POLÍTICO. Dicho esto y consciente de que los únicos grupos "feminizados" o VULNERADOS en sus derechos humanos esenciales no somos sólo las mujeres, sino un infinito abanico de COLECTIVES que padecen más o menos (subrayo: más o menos) las mismas  realidades en general que nosotras las mujeres ( cis, lesbianas, trans, travestis, queer, etc, etc, etc.) creo que LLEGAMOS TARDE EN LA HISTORIA O AL MENOS CONFUNDIDAS con la agenda de creer necesarios los Grupos de Mujeres para la intervención en las áreas de acción política de los partidos políticos, y aún algo mucho más grave que vuelvo a advertir en cada reunión de este tipo de grupos en cualquier institución. Que los grupos de mujeres están creados en el orden del conjunto de TÁCTICAS Y ESTRATEGIAS de una política aun ABSOLUTAMENTE ATRAVESADA POR LA LÓGICA patriarcal donde las mujeres se reúnen dando cuenta a viva voz, en muchos casos, de los varones que las apoyan o en un coqueteo tácito con aromas de superioridad su presencia da cuenta al resto de sus congéneres que algún masculino importante de su "orga la banca". Estos grupos y sus reuniones sin agenda propia, cuyos lenguajes son a todas luces ficciones políticas de un feminismo domesticado para la obediencia a la estructura Patriarcal de sus partidos políticos, en ningún momento producen expresiones genuinas de una existencia espontánea, con conciencia de identidad propia como sí ocurre dentro del inmenso, diverso, complejo, tenso, rico, Movimiento Internacional de Mujeres que también se sacude (y muchas veces infructuosamente) las influencias del patriarcado para poder recuperar esa autonomía que a fuerza de los fuegos purificadores de la Inquisición y otras malas yerbas, parecería que creyeron posible quitamos para SIEMPRE. En estos grupos de mujeres aquellas que ingresan con la candidez de creer que son espacios de recreación de nuestras postergadas autonomías políticas por nuestra condición de género, frecuentemente son SEVERAMENTE CASTIGADAS POR SUS PROPIAS PARES, que inconscientemente saben dónde ajusta el zapato. Creo importante que las mujeres se agrupen /nos agrupemos para esto: para la defensa de nuestra politicidad y AUTONOMÍA.

Para la desarticulación de la moral colonial que todo lo contamina y desde allí reproduce los horrores más inmensos que asolan a toda la humanidad. Pero no creo en los grupos de mujeres que los partidos políticos creen necesarios porque son las condiciones epocales de la historia, que hace "que se vea bien" que se los tenga. A partir del hecho de seguir poniendo mi cuerpa en estos espacios con la inquietud de encontrar congéneres que ya advertidas, nos permitan avanzar en transformaciones más radicales para la erradicación del orden Patriarcal, profundicé esta reflexión en la que ya hace tiempo venía trabajando porque la experiencia de haber habitado hace, algo más de dos años, una banca de concejala como Monobloque Feminista Independiente, sin tener que rendir cuentas a un partido y sus prioridades patriarcales, sin tener que pasar por el fuego de la PROSTITUCIÓN POLÍTICA para poder decidir cómo llevar mi causa, me dio ventajas considerables a las de mis congéneres feministas devenidas de estructuras partidarias. Mi deber era mantenerme en contacto con las mujeres del territorio, desde dónde nacía la agenda para esa banca Feminista y las únicas habilitadas para el debate y la definición de estrategias de acción fueron las organizaciones de mujeres que respetaron mi compromiso y se comprometieron con mi trabajo. No había jefes ni jefas, no había nomenclatura de poder a la que rendir cuentas. Por eso no me cuesta advertir y con dolor que los partidos políticos que se enrolan en el PROGRESISMO NO ESTÁN HACIENDO LO QUE PREDICAN. Muy por el contrario: reproducen y fortalecen los escenarios de la PROSTITUCIÓN POLÍTICA Y CLIENTELISMO DE GÉNERO, a expensas no sólo de una avidez histórica anclada en las deudas que las democracias tienen para con las mujeres, sino también usufructuando las necesidades económicas (por lo general desesperantes) que las crisis y la FEMINIZACIÓN DE LA POBREZA le regalan a la política patriarcal, de moral colonial, para que siga haciendo lo que mejor sabe. No se debate en esos espacios como las Mujeres del Proyecto Nacional yerran -desde mi punto de vista de feminista decolonial- en el modo en que abordan las políticas partidarias cuando se subordinan a tareas casi domésticas, de cuidado "directo de personas en condición de vulnerabilidad" en lugar de producir políticas públicas con perspectiva de género para así -como hacedoras de una política del cuidado, la comunidad y el arraigo para la soberanía política- intervenir y modificar las injustas realidades humanas de la Argentina. Creo que las Mujeres, a excepción de que necesitemos de espacios de despatriarcalización política y moral junto a la seguridad que sólo ofrecen otras mujeres, debemos HACER POLÍTICA PARTIDARIA POR FUERA DE LOS GRUPOS DE MUJERES, porque éstos (y lo digo con dolor) no son más que la expresión de las tácticas y estrategias que los varones y el patriarcado vigente dentro de los partidos y otras organizaciones, digitan tal vez con la mejor buena fé. Creo que cuando las mujeres de las organizaciones, preserven sus grupos sólo para que EN UN MUNDO DE EMPATÍA Y SEGURIDAD DE SU INTEGRIDAD PERSONAL, esos espacios se pongan EXCLUSIVAMENTE al servicio de la deconstrucción del Patriarcado que nos habita; SÓLO ENTONCES los partidos políticos tendrán la oportunidad de iniciar el proceso de descolonizar ideológicamente su sustrato moral. El desafío Histórico, después de 5 Paros Internacionales de Mujeres y de que en todos los países del mundo (alcance más, alcance menos) hayamos CREADO Y ESTABLECIDO UNA AGENDA POLÍTICA DE GÉNEROS Y DIVERSIDADES, es la descolonización política y moral de todas las organizaciones políticas. O de lo contrario todas nuestras avanzadas seguirán siendo "cartón pintado" dónde una infinita cantidad de congéneres, super valiosas y valientes, son corroídas en funciones públicas dónde no tienen presupuesto para materializar las políticas nacidas en el devenir histórico de los Feminismos. No necesitamos Grupos de Mujeres en los partidos políticos, necesitamos que nuestra clase política ponga en remojo su moral colonial para que no nos prostituya ni clientelice, ni explote laboralmente dentro de los partidos políticos tanto como en las funciones públicas que esos partidos nos ayudan a alcanzar. María Laura Razzari (Malala) Concejala Mandato Cumplido Bloque Feminista Independiente Chivilcoy (2013 - 2017) Presidenta de la Asociación Civil Maltratocero contra la Violencia de Género

María Laura Razzari en Facebook

[maltratocero-ong]

La escucha atrofiada

Es estéril redefinir ante la comunidad que la Asociación Civil Maltratocero no realiza tareas de asistencia a mujeres en situación de violencia de género.

Cada día, invariable e irremediablemente cada día, las mujeres que van por ayuda a las dependencias oficiales del Estado “rebotan” y vienen a nosotrxs en busca de ayuda.

Aclaro: todos los días.

Cómo organización explicamos que nuestra tarea son las acciones de prevención, auditoría, promoción y producción de políticas públicas así como la formación de equipos técnicos de abordaje de la problemática para diversas instituciones, organizaciones o centros de asistencia.

No obstante la humanidad, capital existencial que ninguna de las personas que componemos Maltratocero quiere perder, nos obliga a poner les cuerpes en la asistencia, con voluntarismo pero sin recursos.

Una y otra vez, y otra, y otra más esas mujeres nos dicen, “no vuelvo más!”, “me prejuzgan”, “me violentan”, “me critican como madre”, “no me creen”… etc. etc.

Y es así como las personas que integramos Maltratocero acabamos “enredadas” en la ruta crítica de las personas en situación de violencia procurando –con un éxito precario- que las dependencias estatales desplieguen la escucha en clave de género.

Hemos obtenido muchos logros, varias veces, no venimos aquí a quejarnos.

Es una oportunidad inmejorable para decir que estamos satisfechxs con que desde hace algunos días en Chivilcoy la Comisaría de la Mujer y la Familia ya no exija testigxs, y que el Juzgado de Paz local no obligue a la ratificación de las denuncias para librar medidas cautelares.

Como organización celebramos que cada día las Convenciones Internacionales de carácter supra constitucional, vayan siendo comprendidas más y mejor a cada paso, en cada caso…

Cómo también celebramos que en estos días en reiteradas ocasiones el Honorable Concejo Deliberante de Chivilcoy nos convoque para legislar sin reproducir violencias institucionales.

Sin embargo es obligatorio denunciar que el Estado tiene para con las mujeres en situación de Violencia, una escucha atrofiada.

La atrofia proviene de un conjunto de elementos/ estereotipos, devenidos de los roles y caracteres de Género que el propio patriarcado impone, que construyen una "hipótesis de víctima" y se expresa en las voces de funcionarias del Área de Género diciéndonos “estoy cansada” de que tal o cual mujer en situación de violencia no me escuche, no me haga caso o aún más desconcertante: “que ME maltrate al personal de salud mental dónde le conseguí un turno”.

Punto y seguido ya no fue necesario que la víctima rebotara: nos la revoleó el Estado desde su propia Área de Género.

Es claro que la hipótesis que el Estado tiene prevé una persona rota por sus experiencias de vulnerabilidad que se acerca docilizada por el dolor y dispuesta a hacer lo que le digan.

El Estado no espera que las mujeres en situación de Violencia puedan aparecer desencajadas de odio, extremadamente enojadas y desconfiadas.

No espera que digan No, o que exijan otra cosa que -siendo compatible con sus derechos- el Estado no pueda proveer.

La mujer en situación de Violencia viene con su propia frustración y así se choca con la frustración de las dependencias estatales que no la pueden "digerir".

Es el comienzo de la ruta crítica.

Y por eso es crítica.

El Estado la vuelve crítica: compleja, violentogénica, revictimizante.

Si hablamos con las personas que encarnan al Estado resulta que encontramos la misma situación: falta de formación en perspectiva de género, sobrecarga de roles y tareas que no sólo yuxtaponen responsabilidades sino que destrozan el foco profesional de abordaje de la problemática que deben atender.

El Estado construye una escucha atrofiada y desde ese lugar, sujeta a las mujeres en situación de Violencia que piden ayuda y somete a las mujeres que -desde las dependencias oficiales- son las encargadas de la intervención.

La escucha atrofiada no es atraso, ni ausencia, ni falta: es una decisión política.

La decisión subterránea a toda la legislación actual de mantener el statu quo del Patriarcado vigente.

Como siempre perversamente sostenido por mujeres, para que así la masculinidad hegemónica que lo gesta pueda señalarnos como culpables, arrojarnos a la competencia entre nosotras, volver a romper la sororidad que nos vuelve irrefrenables y mantenerse impune y al margen de la visibilidad social en tanto agente que crea las condiciones para que las cosas no cambien.

María Laura Razzari

Profesora de Historia y Filosofía

Concejala, mandato cumplido, Bloque Feminista HCD Chivilcoy 2017

Presidenta de Asociación Civil Maltratocero

Referenta Seccional del Movimiento Alfonsinista

[maltratocero-ong]

3 Hombres “Públicos” y la violencia de género como un búmeran

Tres hombres “públicos” (conocidos nomás) se filman consumiendo prostitución y el impulso de espectacularización de la crueldad machista empuja a uno de ellos a compartir ese vídeo con otro varón implicado en la “fiesta”.

La Real y Opresora Academia Española ha hecho lo suyo al cabo de los siglos para que estas cosas sucedan…

Hombre público: Personaje prominente. Funcionario Público.

Mujer pública: Puta.

Definiciones desde dónde todxs construimos nuestras representaciones de las relaciones de poder dentro de una sociedad.

Los hombres públicos, por públicos tienen garantizada su impunidad, pues la cultura política de la masculinidad hegemónica les ha encomendado desde que nacieron ser los encargados del orden moral, y así –después de consumir prostitución, a sabiendas de la vulnerabilidad socio económica y política de la mujer que la ejerce- levantan a las redes sus videos pornográficos ya que está, no sólo para exhibirse, sino para moralizarla.

Y la primera en ser juzgada es ella, por su condición de mujer reducida a la prostitución.

Tres hombres públicos se filman entre sí y en el tránsito de los videos no se advierte que ninguno le diga a otro que no es necesario filmarse, por el contrario, tal vez secuestrados en los estereotipos machistas que ellos han creado y sostenido, hoy se ven desesperados por frenar lo que han sabido llamar el “viejazo”, concepto de su propia autoría que minoriza social y sexualmente a sus propios congéneres varones.

Por el camino, mientras una sociedad machista, de doble moral, pro femicida, a la que no le importa dar muerte simbólica a una mujer en situación de vulnerabilidad, replica hasta la viralización estos videos perversos, las esquirlas de la bomba se dispersan sin control y se llevan puestas a muchas más víctimas.

En especial a las mujeres que deseen ser soberanas de su libertad sexual, a las que se prostituyen porque ya no saben cómo remar sus vidas en un mundo dónde el 70% de las personas pobres son mujeres y sus hijes, y después la onda expansiva se extiende lenta pero segura sobre todas las personas que volvemos a ver como el ejercicio irrestricto e impune de la masculinidad hegemónica o conciencia machista no mide el dolor que causa hasta en los propios núcleos afectivos de lxs protagonistas.

La fuerza de la espectacularización no es otra cosa que una pedagogía de la opresión, una maniobra para recordarle al mundo quiénes están a cargo.

Hoy estos machos degradados, dicen que sienten ganas de morirse pero que no les da el coraje para matarse. Allá ellos…

Pueblo chico, infierno grande, también es una creación suprema de su propio Patriarcado.

Debajo de la principal víctima que es esa mujer desesperada, excluida, y educada para concebir su cuerpo como moneda de cambio para después ser juzgada y moralizada por ello, hay un montón de gente.

En el fondo de la montaña de las víctimas se apilan también tres tipos atrapados por el “viejazo”, del que alguna vez también se mofaron, por haber pretendido seguir siendo ya fláccidos moralizadores, jefes salientes de una manada de machos que ahora se renueva, porque serán reemplazados por todos los que puedan seguir comprando impunidad y ejerciendo violencia.

La violencia simbólica de género esta vez golpeó tan fuerte y tan de cerca a muchxs conciudadanxs de una localidad con mentalidad machista, que por fin se prueba que duele igual que la violencia física.

A los machitos que se filman en escenas privadas -con o sin el consentimiento de sus partenaires- debería irles quedando claro que su masculinidad no se mide entre sus amigos por la potencia de sus penes, el cielo que supo ampararlos hoy ha recogido su alcance para protegerles.

El Feminismo, cuando volvió letra y Ley el uso del lenguaje no sexista y condena la violencia simbólica de género, es quien también se arroga la discrecionalidad de administración de ese mismo cielo que siempre protegió a algunes en desmedro de otres.

El búmeran de la violencia de género suele causar este efecto en los agresores: cuando el poder de dominación se halla perdido porque ya no pueden dirigirlo, se vuelve hacia los lanzadores y los degüella sin asco, sin que medie justicia, ni moral, pues ese búmeran es su propia política de toda la vida, esta vez acéfala de sus originarios poseedores.

María Laura Razzari

Profesora de Historia y Filosofía

Concejala, mandato cumplido, Bloque Feminista HCD Chivilcoy 2017

Presidenta de Asociación Civil Maltratocero

Referenta Seccional del Movimiento Alfonsinista

[maltratocero-ong]

Incineradas.  Mujeres de la política en Chivilcoy

Era el 9 de diciembre de 2017 y a posteriori de vivenciar la sesión preparatoria en la que se llevaría a cabo el recambio de las autoridades del HCD de Chivilcoy, escribí una editorial titulada “Claudia y Carolina: Víctimas sacrificiales del Estado Patriarcal en el HCD de Chivilcoy”

En la que advertía que todas las mujeres del Concejo Deliberante local quedarían atrapadas por las lógicas del patriarcado que en la política expresa estrategias, liderazgos y juegos de poder donde los varones, que digitan las acciones en el detrás de escena, dirimen sus pujas políticas en los cuerpos de las mujeres que habitan ese mismo ámbito de acción política.

Decía en aquella editorial:

“Sin embargo el escenario de estas mujeres en jaque hace pensar que desde todos los espacios fueron arrojadas al fuego como si sus cuerpos fueran el campo de batalla de una disputa de poder detrás de la cuál predominan no sólo hombres sino las lógicas del poder patriarcal que acabo de describir hasta aquí.

Sin importar la procedencia político partidaria de mis congéneres me alarma, como aquella primera noche que las vi llevar a cabo su sesión inaugural, pensar que el Patriarcado sea capaz una vez más de convertirnos en víctimas sacrificiales de una guerra que no reconoce, no sólo la paridad de géneros, los derechos de las personas en diversidad, sino que por todo ello degrada cada día más la democracia que habitamos a punto de oficiar cualquier método inescrupuloso para gobernar a espaldas del pueblo hasta el fin del receso legislativo”.

Luego de una larga travesía de inestabilidad institucional en el legislativo chivilcoyano tengo la desgracia de decir que no me equivoqué.

El 11 de enero el oficialismo solicitó por fuera de los términos que establece la Ley Orgánica de las Municipalidades la remoción de las autoridades del HCD, esta solicitud fue denegada desde correctos fundamentos por parte la presidenta Claudia Bogliolo, pero no pudo evitar que la  secretaria del HCD la Lic Carolina Di Nápoli fuera violentada por algún edil -que a los efectos de estar ella a la espera de que se le regularizara una licencia laboral para no tener incompatibilidades con el cargo administrativo- dijera que la Señora Di Nápoli andaba “floja de papeles” cuál si fuera un automóvil.

A lo largo de todos estos meses he tomado conocimiento de las políticas de hostigamiento que recibió la Presidenta del HCD por no ceder al pedido de cambio de autoridades.

También se hizo de público conocimiento el nivel de violencia vivido en las sesiones y plenarios, hasta  que en una ocasión supuestamente esto habría implicado la agresión directa de un concejal de Unidad Ciudadana sobre la persona de una concejala de 1 País.

En este marco, la concejala Constanza Alonso junto a su compañero Fernando Poggio de Unidad Ciudadana presentaron dos proyectos al HCD en los que se solicitaba la inhabilitación de funcionarios públicos “denunciados” por violencia de género y varones deudores de alimentos; y otro proyecto que proponía otorgar licencias por violencia de género a trabajadoras municipales.

Sendos proyectos fueron observados por ediles que participaron a la Asociación Civil Maltratocero para que visara los proyectos y manifestara sus observaciones detectándose la violación del principio de inocencia, la obligatoriedad de declarar contra sí mismo, la confusión de legislar “apremios” contra varones y no la desarticulación de la cultura patriarcal y el desconocimiento de procesos complejos como la “ruta crítica” en las víctimas de violencia de género entre otros errores graves que dieron la pauta de que –al igual que a las mujeres- el objetivo era explotar su causa con fines tribuneros.

Al mismo tiempo el oficialismo no había cejado en la insistencia de revocar las autoridades del HCD como lo había hecho en enero de 2018 en 4 oportunidades más con el objetivo de que asumiera la presidencia otra mujer –que habiendo encabezado la lista ganadora del espacio Cumplir- legítimamente merecía de acuerdo a la voluntad popular este cargo.

Sin embargo alianzas políticas subyacentes entre varones de Unidad Ciudadana y Cumplir sostuvieron esta cúpula legislativa aún advirtiendo los enfrentamientos y sufrimientos físicos, psíquicos y morales a los que expusieron a todas las mujeres del cuerpo deliberativo.

Mujeres de la política que en plena avanzada de las causa de género deberían estar aliadas en defensa de los derechos que las atraviesan y por los que se nos ha minorizado milenariamente, se hallaron atravesadas por una guerra sin cuartel sin darse cuenta que todas por igual quedaron presas de estrategias políticas digitadas por caudillos foráneos, presidentes de partidos políticos, concejales varones y operadores de turno…

Se vio la hilacha de la patriarcalización de la compañera concejala de Unidad Ciudadana cuando no soportó el pedido de pase a comisión de los proyectos de género antes descritos, solicitado por la concejala Sofía Mateucci quien quería que fueran mejorados pero de ningún modo se negaba a votarlos junto a su bloque.

La concejala Constanza Alonso en un arrebato de frustración por la presión patriarcal de su propio espacio me insultó como presidenta de Maltratocero (siendo yo en ese instante parte del público), sentada en su banca y en plena sesión al grito de “¡¡cómo se nota que te pagan!!”

El Patriarcado de la política había cumplido su cometido: dirimió sus diferencias a través de lo que más le divierte, una riña de mujeres. Sólo faltaba que nos desnudáramos y revolcáramos en el barro.

El resto de los elementos para el show estaban todos presentes.

La historia alcanzó un nuevo hito durante el solsticio de invierno, cuando hubo de llevarse a cabo la tan solicitada sesión especial para la revocatoria de las autoridades del HCD, en función de obtener un reparto representativo de los alcances electorales de cada fuerza política.

Dicen que Unidad Ciudadana se ofuscó y no quiso ninguna posición… en verdad no lo sé.

Lo que sí sé, es que la concejala Patricia Mangino, primera candidata en la lista ganadora de Cumplir, al momento de ser designada presidenta del HCD recibió de la militancia de Unidad Ciudadana y Cumplir –y de un grupo de mujeres que se dicen feministas- una andanada irreproducible de insultos por su condición de ser mujer en medio de una sesión dónde nadie veló por la dignidad de las mujeres.

Y dónde las propias compañeras de Unidad Ciudadana que siempre sostienen la máxima de “nos tocan a una, nos tocan a todas”, esa noche, machirulamente decidieron olvidarse.

María Laura Razzari

Profesora de Historia y Filosofía

Concejala, mandato cumplido, Bloque Feminista HCD Chivilcoy 2017

Presidenta de Asociación Civil Maltratocero

Referenta Seccional del Movimiento Alfonsinista

[maltratocero-ong]

Aborto, legal, seguro y gratuito: las falacias detrás de un falso debate

¿Qué es cierto y qué no es cierto en torno a esta problemática de los femicidios causados por abortos clandestinos?

Lo cierto:

Que las que se mueren son mis congéneres más pobres y niñas.

Que quienes no practican siquiera un aborto en el marco de la Ley de Interrupción legal del embarazo en los hospitales públicos, por declararse objetorxs de conciencia, en muchos casos se olvidan de sus pruritos morales en sus clínicas privadas dónde por dinero si los hacen.

Que el embarazo y el parto son instancias de las vidas de las mujeres en las que su vida corre altísimo riesgo y es una de las principales causas de muerte de mujeres jóvenes en el mundo actual por las patologías asociadas que conllevan.

Que cada vez que una mujer muere en un aborto clandestino el autor intelectual del femicidio es el Estado por no arbitrar medios que garanticen ninguna condición: ni para maternar en plenitud por sostener tremendas inequidades estructurales de género que impiden la inserción y la autonomía moral, política y económica de las mujeres en la sociedad, y por no habilitar las condiciones esenciales para la interrupción del embarazo.

Que lxs trabajadorxs de la salud desconocen la definición de salud de OMS cuando esta hace referencia a la salud psicosocial, área definitivamente involucrada por el embarazo y el parto.

Que las cuerpas femeninas con capacidad reproductiva ocupan un estatus social y político de menor rango, dado que de su capacidad depende la producción de fuerza de trabajo y bocas de consumo para el mercado y que por ello, las mujeres nos hallamos escindidas de nuestra soberanía política a la hora de decidir sobre nuestra planificación familiar y el libre ejercicio de nuestra sexualidad, todo lo cual se opone a los derechos reconocidos en las Convenciones Internacionales a las que nuestro país suscribe con rango supra constitucional.

¿Qué no es cierto?

Qué el aborto sea un método anticonceptivo por su alcance traumático en términos psicológicos y morales dentro de la cultura patriarcal en las que las mujeres somos construidas socialmente.

Que sea una discusión sobre la vida.

Cuando se debate sobre el aborto no se discute la vida del por nacer, sino el poder de decisión de las estructuras patriarcales sobre las cuerpas femeninas en tanto productoras y reproductoras de capital.

Que lo que está en cuestión no son los derechos de los niñxs porque es evidente que esta preocupación no aparece con la misma intensidad en los sectores “pro vida” cuando denunciamos el abuso sexual infantil, el tráfico de niñes y adolescentes, el turismo sexual infantil, el tráfico de órganos y las granjas africanas dónde hay mujeres secuestradas y retenidas para su reproducción en virtud de proveer al mercado negro de estas mafias que operan a través de la deep web.

Que no es verdad que la vida exista desde la concepción, pues este precepto jurídicamente institucionalizado emerge de un paradigma religioso y por tanto de creencias metafísicas que no pueden imponerse al conjunto de la sociedad como patrones morales.

Pero hay aún peores noticias y por ello he tomado una posición personal que puede ser muy polémica pero es mía y me hago cargo.

Considero a este falaz debate un ejercicio perverso y masturbatorio de la política y de lxs políticxs que -reproducción de la rapiña patriarcal mediante- pretenden hacernos creer a las mujeres que les importa lo que nos pasa.

En este país no importa la vida.

No importa la vida de lxs nacidxs ni de lxs por nacer.

Basta con leer cualquier tipo de estadísticas, ver cada día más gente viviendo en la calle, destruir el mercado interno a fuerza de una política neocolonial y entreguista que deja sin sustento a más familias cada día, o de observar como el sistema de Cobertura Universal de Salud es una trampa para la transferencia de capitales a los sectores de la medicina privada dejando al descubierto los alcances protectorios de la salud pública… por mencionar apenas algunas cuestiones visibles.

Por eso también es mentira que el aborto sea un problema de salud pública.

No lo es.

Si nos preocupara la vida, sabríamos por lo antes dicho que la vida es otra cosa: es protección estatal en todas las dimensiones de la existencia humana, es no ser el primer país del mundo en incremento del HIV entre otros males, por las bondades que por el neoliberalismo están haciendo que la gente muera o dure en vidas miserables.

Por ello no admito, como feminista, ni habilito al Estado para que pretenda darme el permiso de abortar, no admito que estemos procurando este objetivo porque es una política de renuncia a la soberanía política intrínseca a nuestra existencia como seres humanas.

Y me tomo el trabajo de decir esto públicamente porque no conspiro contra la Campaña por el Aborto Legal Seguro y Gratuito, sino porque formo parte de ella y defiendo así su cometido.

Lxs seres humanxs el primer territorio sobre el que tenemos soberanía política irrestricta es nuestro propio cuerpo, y de las experiencias vivenciales que tenemos a través de nuestra existencia material dependen el desarrollo de nuestra autonomía emocional, moral y política.

Nadie puede intervenir en ese territorio salvo para preservar estos derechos.

Me cago en el debate, así literalmente.

No lo doy, no lo permito.

Si al Estado no le alcanzan las declaraciones de derechos existentes y las avanzadas jurídicas vigentes incurre en Violencia Ética en primer grado cuando me arrastra a este infame debate, y a todas las demás violencias cuando ni siquiera está siendo aplicable la ILE.

Odio desde lo más profundo de mi ser mujer este montaje berreta que queremos ver como un nuevo estadío de la política y de la avanzada de los derechos humanxs.

A la Violencia del Estado se le contesta con Desobediencia Civil o Desobediencia Reflexiva, como le llaman algunas compañeras activistas con las que sentamos precedentes en el mundo en la ampliación de derechos desde que ha nacido el feminismo.

Porque eso significa dignidad.

Lo demás es arrastrarse para obtener una clemencia patriarcal.

Con aborto legal, seguro y gratuito o sin él las mujeres seguiremos armando redes para traficar misoprostol y así también resistir al negocio flagrante que la industria farmacéutica está fogoneando detrás de esta puesta en escena.

Y si nos morimos , como nos morimos todos los días en femicidios provocados por abortos clandestinos, seguiremos haciéndonos dueñas de nuestras cuerpas en ese instante -el que nos dejan- el instante en el que abandonamos esta cuerpa oprimida en una tierra de mierda.

Cuando lo reducís a un asunto de salud pública lo minorizás al problema del aborto, porque no es de salud pública es de soberanía política.

No es una cuestión de odio hacia las mujeres, ni de abandono sanitario, es el modo de refrendar qué lugar ocupan nuestras cuerpas en el sistema social, político y económico.

Así que si doy el debate, doy entidad, pido permiso para no ser vista como una miserable incubadora de capitalismo salvaje que de paso se sacan de encima como Actora Política mientras estoy retenida en la maternidad.

Es inaudito dar ese debate.

Es miserable el abuso y la violación que siento cuando políticxs de todxs los espacios se apropian de este dolor para sacar rédito.

Sólo las mujeres, por ser Mujeres, por vivir violadas de infinitas maneras podemos indignarnos y no normalizar esta farsa porque somos las que sabemos que:

A) Si sale bien, terminará siendo otra ley incumplida como la ILE.

B) Si sale mal nos seguimos muriendo en abortos clandestinos.

Por lo tanto sea A o sea B es lo mismo.

Es la guerra de un sistema supra estatal, de intereses puramente económicos que se lleva a cabo en nuestras cuerpas femeninas.

Y en una guerra no se le da ventaja al enemigo: la hegemonía patriarcal.

Te le tenés que adelantar y organizarte para sostener la resistencia.

María Laura Razzari

Profesora de Historia y Filosofía

Concejala, mandato cumplido, Bloque Feminista HCD Chivilcoy 2017

Presidenta de Asociación Civil Maltratocero

Referenta Seccional del Movimiento Alfonsinista

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Marcha y contramarcha

Por segunda vez las mujeres fuimos a un Paro Internacional este jueves 8 de marzo de 2018 por el Día Internacional de la Mujer Trabajadora en medio de un proceso de asambleas que no pueden sortear las influencias que la cultura patriarcal nos ha inoculado.

Asambleas más y menos democráticas, según las realidades de cada localidad, se empiezan  a ver pobladas de mujeres de distintas organizaciones, algunas feministas, otras no, movimientos sociales con largas trayectorias de trabajo con mujeres en condición de vulnerabilidad social y como fruto de esta lucha van apareciendo también mujeres de la política.

La autogestión económica como una de las prácticas de los colectivos feministas, enraizada en una historia de ausencias de marcos jurídicos que reconocieran nuestros derechos, y las deudas del Estado para con las mujeres, empiezan a entrar en conflicto con aquellas que exigimos que los gastos de nuestras actividades culturales corran por parte de los municipios porque así lo dispone la ley en materia de acciones de prevención de violencias y promoción de las equidades de géneros.

La hegemonización política de espacios político partidarios asociados a algunas orgas reproduce la cooptación patriarcal de las dinámicas y las asambleas suelen tornarse en una ficción política que ahuyenta las ganas de participar de aquellas que han osado dejar algo en la heladera, para que el marido no les reclame la ausencia, mientras dan sus primeros pasos de militancia sin pertenencias previas.

La mística feminista que yo habito, nutro, exhibo con fervor, pasión y desenfado produce recelo en aquellas que desconocen aún lo que significa cada símbolo.

La premura del #8M para salir arrasando por nuestros derechos, por la visibilización de una diversidad arrinconada en la feminización de la pobreza y la exclusión política, impide que podamos profundizar, difundir, explicar y dar sentido a nuestros cánticos, vestimentas, colores y símbolos.

El verde pro aborto, el contestatario violeta, las mariposas que evocan la Sangre Mirabal de una familia de cuya historia poca gente está enterada, lejos de promover acercamiento a veces, muchas veces, demasiadas para mí como feminista, espantan y excluyen más de lo que aproximan y suman mujeres al debate.

Las congéneres se acercan de buena fe a las asambleas a veces empujadas por una viralización mediática que atendiendo a sus propios intereses desinforma y vacía nuestras banderas, y traen consigo un manojo de creencias que entran en corto circuito con el purismo teórico nuestro, haciendo que muchas veces el feminismo caiga en la trampa patriarcal de olvidar la sororidad para darle tiempo a todas de entender de qué va la cosa.

Finalmente al menos dónde yo vivo, siempre somos las mismas.

En otras ciudades son cada vez más y más atrevidas aún con el peso de una basílica sobre sus cabezas.

Acá las mismas toman las decisiones convencidas de que ello fue consensuado en asamblea, las mismas toman la palabra, eligen las actividades artísticas y convocan a las mismas grupas o más o menos para enriquecer la jornada…

Y entre las espectadoras una cantidad mayoritaria de mujeres no feministas, mujeres víctimas de todas las opresiones que tienen sus críxs en brazos porque la pobreza no da para cochecito, mezcladas con otras que zarandean niñxs en sus carriolas, se observan miradas atónitas…

La mayoría de las mujeres que suelen aparecer en las marchas no entienden nuestros códigos “enguetados”, se quedan… cuando se quedan, porque se quedan…

Un sin número no pudo adherir al paro, y nos las hemos contado…

Las empleadas municipales y funcionarias de la gestión oficial, pudiendo no chocarse la marcha con su horario de trabajo, temen poner sus cuerpas entre las nuestras por la amenaza de represalias políticas…

Y nosotras las que se supone que somos las actoras políticas de este nuevo sujeto político que es el Movimiento de Mujeres a nivel mundial, en nuestras localidades no le estamos encontrando la vuelta a la democratización y la apertura muy a pesar de nuestros esfuerzos y consideraciones…

¡Estamos a punto de parar el mundo, pero para eso necesitamos ser más!

Necesitamos ser todas.

Porque si nos matan… y nos matan de tantas formas… ¡que produzcan sin nosotras!, a lo mejor ahí está la clave para que el feminismo germine en los hogares y nos traiga nuevas compañeras a las plazas a charlar y pintar murales…

Somos muchas más que antes, pero para ser todas deberemos ser mejores.

María Laura Razzari

Profesora de Historia y Filosofía

Concejala, mandato cumplido, Bloque Feminista HCD Chivilcoy 2017

Presidenta de Asociación Civil Maltratocero

Referenta Seccional del Movimiento Alfonsinista

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Remando en la brea

Un abanico de convenciones internacionales con rango constitucional y unas cuantas leyes nacionales sobre la equidad de los géneros son el marco jurídico obligatorio para el Estado en Argentina que debe promover políticas públicas por una sociedad más justa.

Sin embargo entre la ignorancia, la desidia, la irresponsabilidad y la corrupción nuestrxs funcionarixs de todos los niveles de gobierno, y a veces nuestrxs compañerxs de los propios espacios políticos a los que pertenecemos se convierten en los enemigxs públicos número uno de la materialización de nuestra avanzada de derechos.

Hablo en plural, porque esta no es una conclusión personal ni apresurada, sino la conciencia colectiva alcanzada junto a compañeras de distintos lugares del planeta con las que, gracias a las tecnologías de la información, las problemáticas que atiende el feminismo han dejado de ser un fantasma.

Pasar de fantasma a materia no es chiste. La resistencia se vuelve más violenta y algunas veces idiota y absurda.

“Haced política porque si no la hacéis alguien la hará por vosotros y probablemente contra vosotros” decía en su tiempo Antonio Machado. Si le ponemos las “x” para que se lea con leguaje no sexista, es una premisa que a nosotras las mujeres nos queda perfecta!

Impulsadas por esta convicción, dicha de miles de formas diferentes, las mujeres del mundo nos hemos unido en el Paro Internacional de Mujeres para cada 8 de Marzo, en el #NiUnaMenos o Women’s March cada 3 de Junio y en el Día Internacional de lucha contra la violencia machista cada 25 de Noviembre.

Es decir que al cabo del año las mujeres de todo el mundo, más allá de nuestra militancia cotidiana de 24 hs sobre 24hs los 365 días del año -porque así somos- existen tres instancias anuales para que lxs funcionarixs del Estado en todxs sus niveles y tareas tengan la oportunidad de escuchar nuestras voces para comprender nuestros horrores y restituir nuestros derechos.

Pero no.

No sólo nos siguen matando cada 18 horas, y seguimos desapareciendo, y se siguen llevando adelante los corsos de carnaval y todo tipo de eventos culturales que nos tratan como objetos a la venta, sino que aún en aquellas ciudades como la mía dónde hace cuatro viernes una asamblea de mujeres organiza el #8M frente a la Municipalidad, tenemos que soportar que ignoren una agenda de género completa aprobada por el legislativo municipal hace dos años, sino que además tenemos que tolerar la burla.

La burla de iluminar con rosa el municipio, de seguir viendo el tinte festivo y reproductor de estereotipos patriarcales de las actividades organizadas desde Cultura, Desarrollo Social y Seguridad, anclada en la perversa creencia de que hablándole a la masa de mujeres patriarcalizadas que no han tenido la oportunidad de saber que el 8 de marzo conmemoramos a compañeras asesinadas por la defensa de nuestros derechos laborales -¡¡y por eso no es una fiesta!!- van a seguir consiguiendo sus votos en las urnas para otra vuelta.

En la normalización de las exclusiones propixs y extrañxs se vuelven cómplices de nuestras desgracias y nos impiden reconocimientos ínfimos como la disponibilidad de recursos estatales para las actividades de prevención y promoción de equidad que hacemos las colectivas de mujeres con el dinero que se nos adeuda por las asimetrías patriarcales, o se nos niega la oportunidad de tener dentro de la estructura organizativa de nuestras comunas Comisiones de Géneros que nos permitan tratar y resolver las problemáticas que la propia política machista y heteronormativa nos crea.

Remando en la brea vamos con las compañeras de todas partes, simplemente para decirle a todas las mujeres que este 8 de Marzo rechacen las flores detrás de las cuáles el Estado se exime de restituirnos los derechos humanxs consagrados en toda una legislación tan olvidada como cada víctima que pasa por la pantalla de tu televisor cada día para ser reemplazada por otra en una pocas horas más.

El rosa de la luz que ilumina en marzo a la Muni de Chivilcoy es una orden política que se nos da a las mujeres para que nos quedemos siendo lo que el patriarcado quiere.

El violeta es el color de la resistencia, de la libertad y de la denuncia de las sobrevivientes.

María Laura Razzari

Profesora de Historia y Filosofía

Concejala, mandato cumplido, Bloque Feminista HCD Chivilcoy 2017

Presidenta de Asociación Civil Maltratocero

Referenta Seccional del Movimiento Alfonsinista

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Ojalá

Ojalá significa “Quiera Dios” pero no es el sentido con que titulo esta nota.

Para mi Ojalá en esta ocasión dónde me atreveré a resignificar su sentido pretende decir “Quieran las Mujeres”

Si te preguntás por qué me atrevo? Te contestaré muy simple: porque al igual que el orden injusto del Patriarcado que me oprime, yo también hago lo que creo y puedo.

Es decir, diré Ojalá queriendo decir, “Quieran las Mujeres”, porque se me da la gana.

Ojalá en tu ciudad, como la mía, las mujeres se estén organizando con vistas al Paro Internacional de Mujeres del próximo 8 de marzo.

Ojalá este segundo paro sea más contundente, masivo y exitoso que el año pasado.

Ojalá que las mujeres convocantes de tu barrio, o ciudad sean las mejores para hacerlo.

Ojalá no tengan ambiciones personales por fuera de la colectiva que constituimos como sujeto político.

Ojalá que si así no fuera, no logren hacer que desistas de participar de asambleas y actividades.

Ojalá no te discriminen y te respeten aunque no seas feminista, o no estés muy empapada en cuestiones del feminismo.

Ojalá te abracen y te reconozcan una hermana, una congénere sin necesidad de ser amigas.

Ojalá respeten tu diversidad y tus dolores.

Ojalá ningún espacio político, organización u otra cosa pretenda apropiarse, cooptar el hecho político que supone visibilizar la mayor opresión por la historia de la humanidad conocida y sufrida en todo el mundo.

Ojalá puedas soportar las diferencias y permanecer agrupada.

Ojalá quienes participamos de la organización no perdamos de vista que el PIM no es propiedad del Feminismo sino del Movimiento Internacional de Mujeres, o sea algo bastante más inclusivo y potente.

Ojalá nadie imponga o exija el feminismo como peaje, a mi como feminista me caería muy mal.

Ojalá en los grupos de mujeres que se constituyen haya muchas preocupadas por abrir ese espacio y hacerlo llegar a dónde están nuestras congéneres más vulneradas y todxs lxs colectivxs más vulnerables.

Ojalá los debates no te espanten, puedas soportar que aún las que estamos ahí seguimos patriarcalizadas, unas más, unas menos, pero que nadie pueda bajarle línea a nadie.

Ojalá tengan un nombre para todas y puedan olvidarse de sus procedencias y pertenencias político partidarias o institucionales.

Ojalá seamos una masa, no una masa uniforme, sí una masa de conciencia política y sororidad.

Ojalá si ya fuiste a algún encuentro no te hayan quitado las ganas de volver.

Ojalá si aún no fuiste, no pierdas de vista la importancia de incluir tu voz.

Ojalá sepamos no ser como quienes nos han excluido, explotado y violentado tantos miles de años, no entre nosotras.

Ojalá descubramos juntas, en diversidad y con muchas ganas de subvertir el orden injusto en que vivimos, capaces de entendernos.

Ojalá lleguemos a estar juntas este próximo 8 de marzo Día Internacional de la Mujer Trabajadora para algunxs, simplemente Día Internacional de la Mujer para otrxs…

Ojalá al menos acordemos la sincronía del salto conjunto para mover el eje de un planeta que nos aplasta en beneficio de un puñado de dueñxs cada día más pequeño y más violento.

Ojalá suceda la unión y el respeto sin fisuras por dónde se metan los intereses mezquinos del Patriarcado opresor.

Ojalá resistas las diferencias a favor de la unión.

Ojalá volvamos a escribir la historia este 2018, como lo hicimos siempre, pero ahora firmando nosotras.

María Laura Razzari

Profesora de Historia y Filosofía

Concejala, mandato cumplido, Bloque Feminista HCD Chivilcoy 2017

Presidenta de Asociación Civil Maltratocero

Referenta Seccional del Movimiento Alfonsinista

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¿Los medios de comunicación decididos a licuar el Feminismo?

La editorial pasada se titulaba “La cabeza en la heladera” porque el bombardeo mediático repentino de algunos programas televisivos, y otros efectos colaterales multimediales, disparados a raíz de que a algunos machirulos de vieja data de la farándula se les fue la mano con el goce de la impunidad, y el consecuente derroche de disparates, superó a la oportunidad de definir al feminismo ante la opinión pública que lo resiste y aún más, le teme.

Literalmente puse la cabeza en la heladera y siguiendo los acontecimientos –más que por placer, por deber de militancia– renové la convicción  de que la sobre exposición mediática de lo que arbitrariamente se reduce a llamar feminismo, es una estrategia del poder patriarcal ejercido por una mayoría de productores, directores, inversionistas, empresarios publicitarios y conductores que conscientes o no de ello y a veces comprometidos con diversas situaciones de abuso, han incurrido en una desesperante carrera para esconder un elefante, en el mejor lugar: una manada de elefantes.

Así asistimos sistemáticamente a tomar contacto –y conste que no digo conocimiento– de cuáles son algunos de los problemas sociales que atraviesan al feminismo.

Cuestiones tocadas tangencialmente, administradas más para el morbo de lxs espectadorxs desprevenidxs que para la profundización de ningún debate.

Destacable y admirable la voluntad de las compas feministas que ponen sus cuerpas en esos escenarios para tratar de generar una avanzada en ese territorio minado por las trampas destinadas a reducir, simplificar, masificar, degradar hasta deglutir y defecar las construcciones que al feminismo le han llevado desde 1789 con Olimpe de Gouge hasta acá generar y ganar estatus científico y político.

No tuve la suerte aún de escuchar que entre tantas “pseudodefiniciones” de feminismo no se aclararan algunas cosas simples y otras no tanto.

Por ejemplo no he oído nada sobre que el feminismo no es una ideología de género sino una ética de la solidaridad y la responsabilidad de la humanidad con su capacidad de crear un orden social y relaciones con el medio natural.

A nadie escuché hablar acerca de que el feminismo no denuncia la violencia de género como emergencia sino como síntoma de una estructura de poder dónde lo masculino, pero también lo blanco, lo clasemediero, el dinero y el estatus social, sean el ángulo de referencia desde dónde se piensan y valoran a todxs lxs seres de esta sociedad y que –todxs quienes no tengan esos atributos– serán minorizadxs, marginadxs, excluídxs hasta ser despeñadxs o desterritorializadxs al mejor estilo espartano.

No escuché a nadie decir que los feminismos en plural –por las épocas, las olas y las realidades geopolíticas de las mujeres que lo nutren–  es en sí mismo una nueva epistemología (o ciencia que estudia críticamente la producción de ciencia) con nuevas categorías de análisis: en la que no sólo está el género sino la equidad y la dignidad de las personas.

De todo lo que hace temblar al mundo:

Como cuestionar obscenidades del tipo de la cocina molecular en restaurantes situados en ciudades desérticas como Dubái, rodeadas de los pedazos más pobres y violentadxs del planeta; o un mundo dónde las redes sociales nos censuran a nosotras cuando denunciamos la trata, la prostitución y la pornografía infantil, pero no al gran Segundo Estado manejado por las mafias que financian a la política y a los medios… de eso no escuché nada.

De que el Estado es el primer proxeneta que explota nuestros cuerpos no sólo cuando no nos deja abortar sino cuando desfinancia las políticas públicas que nos permiten maternar, acceder al trabajo y convivir con una maternidad amorosa y responsable… no escuché nada…

De que somos las que nos oponemos a los modelos productivos que nos envenenan con agrotóxicos y la industria de la belleza mientras alimentan a un mundo donde 8 personas son dueñas del 50% de la riqueza mundial no escuché tampoco…

Pude haberme perdido cosas, pero lo que no pierdo de vista es que un elefante sólo se esconde en una manada de elefantes para que su singularidad no rompa el “orden del paisaje” dónde morimos mujeres cada 18 hs, la niñez tiene prohibido el acceso a las proteínas, lxs trabajadorxs vuelven a la Edad Media y la educación se orienta al adoctrinamiento para anestesiarnos ante este mundo espantoso.

Tal vez si el discurso científico del feminismo hubiese llegado a lxs médicxs que atendieron a Débora Perez Volpin, hubiesen sabido que a nosotras los infartos se nos presentan con dolores de estómago (aunque su estrés y la anestesia hayan hecho su parte), y no como a los varones… pero el Patriarcado también se llevó a esta joven profesional a los 50 años por no escuchar al feminismo en la ciencia y la política, y de esto no sé si escucharemos algo.

María Laura Razzari

Profesora de Historia y Filosofía

Concejala, mandato cumplido, Bloque Feminista HCD Chivilcoy 2017

Presidenta de Asociación Civil Maltratocero

Referenta Seccional del Movimiento Alfonsinista

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La cabeza en la heladera

La cabeza en la heladera de tanto escuchar barbaridades estos días en los que –de Cacho Castaña a esta parte– sectores de nuestra sociedad han decidido hablar de la violencia de género en los medios.

Todo bien, más para quienes venimos promoviendo la perspectiva de géneros desde cuando la violencia de género no tenía nombre.

Lo alarmante es la inmensa cantidad de gente que trabaja en los medios de comunicación y dice todas las cosas que se les ocurren al respecto de estas problemáticas como si no les cupiere ninguna responsabilidad sobre ello.

Al cabo de los días decidí no escuchar más, no sólo porque la opinología de café había pasado a ser opinología multimedia, sino porque advertí que como bien dice una compañera de militancia: “el patriarcado se reformula Malala” y me cayó la ficha de que el Patriarcado a través de los vómitos de egolatría parlanchina de conductorxs, periodistas, actrices y actores y más fauna por el estilo, había encontrado la forma de imponernos su agenda de debate, sus tópicos de debate y sus modalidades de cerrar conclusiones como lo hizo toda la vida.

La misma vida que nos roba a las mujeres cada 18 horas.

Capítulo aparte en esta columna para aplaudir al caudal de compañeras militantes feministas que han sostenido esta contienda en las redes sin pausa, dando cuenta de una conciencia mucho más profunda que la teníamos las mujeres hace apenas una década atrás.

Mención de honor para nuestra querida Perla “Sangre Mirabal” Prigoshin que como Coordinadora de la Comisión coordinadora para la elaboración de sanciones para la violencia de género (CONSAVIG) logró con una notita nomás –después de una vida entera de militancia por la defensa de nuestros derechos –bajar del cartel unas cuantas obras reproductoras de violencia simbólica y embromarle el negocio a Cachito de Machirulo Buenos Aires.

Pulgar hacia abajo para las carroñeras congéneres del Pro – Cambiemos que salieron a hacer alarde de una falsa perspectiva de género blandiendo un deficiente 144 y todo un abanico de normas jurídicas que son logros de la pesada herencia que este gobierno se ocupa sustancialmente de desfinanciar otorgando el 1% del presupuesto del Ministerio de Desarrollo Social de la Nación a las políticas de Géneros.

Las cuentas claras: no pueden pretender arrogarse la defensa de los derechos de las mujeres y las personas en diversidad, aquellas personas, grupos, empresas, sectores políticos o corporaciones que no cuestionen las devastación de políticas públicas que alguna vez amortiguaron un poco los efectos salvajes del capitalismo global.

Quienes conviven con las reglas del mundo de la dueñidad, quienes no asumen que la descolonización  no sólo nunca acabó sino que se reformulan los colonialismos y las políticas discriminatorias por clase, género y raza cada día convalidando una reforma del Estado que apremia a lxs más débiles, mienten descaradamente cuando dicen ocuparse de la problemática de géneros y diversidad, porque ideológicamente –si estuvieran cuerdxs o decidieran no rapiñar– no podrían sostener semejantes incongruencias conceptuales.

Mientras tengo la tenue alegría de empezar a escuchar más fuerte las voces del feminismo que ya se apronta al Segundo Paro Internacional de Mujeres, sigo sintiendo como la punta de la pirámide de la economía mundial se clava despiadadamente en mi cuerpo de mujer productora y reproductora de capital, bocas para el consumo y brazos para el mundo de la explotación laboral.

A mí los medios no me van a imponer la agenda de debate.

A vos?

María Laura Razzari

Profesora de Historia y Filosofía

Concejala, mandato cumplido, Bloque Feminista HCD Chivilcoy 2017

Presidenta de Asociación Civil Maltratocero

Referenta Seccional del Movimiento Alfonsinista

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La educación y Milagro Sala, dos presas políticas

Mientras se cumplen los dos años de prisión arbitraria de Milagro Sala en Jujuy, también se cumplen dos años de que la estructura sindical que nuclea a lxs docentxs es el caso testigo de una política de arrasamiento de los derechos democrática, legítima y legalmente reconocidos a favor de una educación más igualitaria e inclusiva, más allá de todas las falencias y “asignaturas pendientes”.

Sin embargo a golpes mediáticos y tiros de DNU hemos transitado estos dos últimos años que ya anticipan -aunque los organismos de DDHH internacionales den la razón a los requerimientos de la ciudadanía organizada- que la administración de Cambiemos está decidida a negar para activar de un modo brutal el neocolonialismo vital a los intereses de un grupo de privilegiadxs cada vez más reducido, y se potencie la entrega de soberanía en un mundo dónde el resto de los países, que ya advirtieron hace rato los efectos indeseados de la globalización, hacen exactamente lo contrario.

La prisión arbitraria y los abusos de poder sufridos por Milagro son en términos simbólicos el paradigma de lo que este gobierno pretende hacer con lxs trabajadorxs de la educación.

Quitar derechos a lxs docentes es convertirlxs en potenciales mercenarixs al servicio de la proliferación de políticas de odio, exclusión y discriminación.

Y esto no es un efecto colateral indeseado de una política de armonización, o racionalidad y promoción de la calidad educativa.

Es una planificación cruel como lo fue la desarticulación de las comunidades aborígenes durante la Conquista de América, para debilitar la resistencia y así promover una aculturación cuyos valores son diametralmente opuestos a los defendidxs por el colectivo de la educación argentina.

Es vital empobrecer, debilitar, atormentar a lxs docentes del modo más feroz posible, para que cada unx de nosotrxs cuando ingrese al aula, se halle lo suficientemente deshumanizadx y solx como para que su autonomía moral y su identidad política salgan volando por la ventana.

Y cuando ello ocurra, lxs docentxs difícilmente tendrán el equilibrio emocional necesario como para resistir el abanico de problemáticas sociales exógenas a la escuela que importan sus alumnxs, y se sentirán estafadxs y desvalidxs, desmotivadxs y superadxs por la situación.

Y les quedará solamente inventarse una trinchera individual, o a lo sumo de dos o tres que con el tiempo ya se han hecho amigxs.

Y en la trinchera sólo planearán como sobrevivir al despojo, igual que Milagro cada día de estos últimos dos años.

En las trincheras habrá muchas mujeres que, gracias a la cultura del cuidadorismo patriarcal, son las que predominan en la educación, pero también gracias a la historia del movimiento de trabajadorxs son las autoras de un modelo nacional de educación preocupado por el federalismo, la equidad, la libertad y el desarrollo de la ciencia y la tecnología.

Es tan vital lograr debilitar la resistencia de Milagro Sala como vaciar la conciencia colectiva de lxs trabajadorxs de la educación, porque en ambos casos se derrumban las fronteras de la soberanía política, cultural y económica que los países buitres cuyas economías se hallan cerradas, desean traspasar para seguirse robando la Matria a pedazos.

Tal vez en las trincheras lxs educadorxs escriban cartas de resistencia, planifiquen clases al aire libre para dar en los días de paros que se avecinan.

Ojalá que las trincheras, como la celda de Milagro sean el lugar dónde se reencuentren con su vocación, con sus convicciones, con ese amor a lxs otrxs que ha sostenido la educación en la Argentina todo el tiempo que la olvidó el Estado.

Ojalá podamos, a pesar del dolor y del saqueo, como Milagro, saber sacar los brazos de las trincheras en busca de otras manos sucias de trizas y tinta, tibias de tantas caricias acumuladas de lxs niñxs y jóvenes que por ellas han pasado.

Ojalá en la trinchera nos atrevamos a cerrar los ojos e imaginar esos días de primavera que solemos dar clases en los patios para no robarles el derecho a un rayito de sol a nuestrxs pibxs, y logremos comprender que en una plaza todxs juntxs, tal vez este año, debamos procurar reproducir esas clases dónde el ruido del bienestar y los alborotos naturales de un espacio de aprendizaje, sean el clima de una educación en resistencia.

Porque como a Milagro, con nosotrxs tampoco podrán.

Nosotrxs lxs docentes de este país no nacimos para que nos conviertan en mercenarixs esclavizadxs con sueldos de hambre para matar la soberanía que late en las almas de nuestrxs educandxs.

María Laura Razzari

Profesora de Historia y Filosofía

Concejala, mandato cumplido, Bloque Feminista HCD Chivilcoy 2017

Presidenta de Asociación Civil Maltratocero

Referenta Seccional del Movimiento Alfonsinista

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La punta del iceberg

A menudo hablamos al cabo del día de la cantidad de femicidios que ocurren, ya más de uno por día.

Hasta hace un tiempo creíamos con las compañeras de militancia feminista que poner las caras y los nombres de las muertas por femicidio en la calle, que denunciar en las redes a verdaderos potenciales femicidas como Cacho Castaña –que vaya a saber cuántos femicidas justificaron su hacer en el romanticismo perverso de sus letras– alcanzaba, que las marchas, etc. etc….

Pero no por el contrario pasaron de matarnos cada 30 y pico de horas, a dos mujeres por día en medio de una campaña tan permanente, como repleta de gente abocada al negocio de turno y que no sabe una mierda, a la desfiguración permanente de conceptos y demás tragedias que se apilan sobre los cadáveres de las congéneres muertas.

Lo que no hemos dicho, o no ha quedado claro, o no conviene difundir ni poner en el centro, es que la violencia de género es sólo la puntita del iceberg de un orden macro político mundial milenario infinitamente más complejo de entender, pero que por suerte da señales a veces muy nítidas desde lugares muy visibles como ha estado sucediendo estos tiempos en un ámbito a dónde nadie va a caer en la equivocación de considerar que la violencia de género es un asunto privado, y por fin se va entendiendo que es un delito de acción pública.

Y las señales las dio el atroz Carlos Pedro Pérez en Luján, a quien gracias a la acción de denuncia desplazamos de su candidatura a la presidencia del HCD de Luján; y también se hizo presente en Chivilcoy cuando me mandaron el cartelito de “mamala” por exigir una Dirección de Políticas de Género, tal como había sido aprobada por unanimidad en el recinto.

Sin embargo el problema de los patriarcas violentos, corruptos y prostituyentes que nos gobiernan no es simplemente cultural o de disponibilidad de fondos públicos para avanzar en políticas de géneros.

No no.

Es más grande el asunto.

Quien tiene el poder reparte y se queda con la mejor parte. Y se asume valiente, ganador, exitoso y con derechos a detentar más poder por esas mismas razones.

Romper esta estructura mental del poder patriarcal a dónde los machos son machos siempre que puedan ser jefes, padres y propietarios no es fácil, porque nuestras propias congéneres no ven un hombre, no pueden erotizarse, ni dejarse seducir, ni confiar en un tipo al que no le importen estas tres coronitas del poder patriarcal.

Así es que a muchas mujeres les costó coraje en Luján salir a la opinión pública a manifestarse contra Pérez hasta que había sido sacado del juego por su propio bloque y así es que en Chivilcoy el oficialismo decide apañar la creación de una Dirección de Discapacidad por decreto, al tiempo que el Ejecutivo degradó la Dirección de Políticas de Géneros a una coordinación dónde encima ambas dependencias estarán a cargo de la misma mujer “obediente” y “multiorquesta” que integra el staff del Ejecutivo y que no ha dado señales de tener perspectiva ni compromiso con las cuestiones de género jamás en sus funciones en el área de Desarrollo Social, más bien todo lo contrario.

La cosa es simple: a Pérez le sacó la cadena Érica Pereyra cuando desde su banca de concejala lo denuncia en el recinto por estar haciendo reformas al Reglamento del HCD sin participación del cuerpo legislativo; a Britos le da terror tener una directora de políticas de género que sepa que manipula las cifras de dinero (40 millones aproximadamente) que recibe por su prostituyente relación con el gobierno de la Pcia y que jamás ingresarán a las arcas de Desarrollo Social para quien prevé más de 20 millones de pesos de diferencia comparada con la selecta área de Seguridad.

¿Qué es lo que pasa que el Estado no protege a las mujeres y destina el 1% del Presupuesto Nacional al Ministerio de Desarrollo Social de la Nación?

Pasa que sabe que el sostenimiento de las asimetrías de poder son un manantial de riqueza como el agua, el litio, el uranio, la fertilidad de la tierra, el oro, la plata y la especulación financiera…

Si las mujeres seguimos muriendo a manos de los hombres, si la (in)Justicia sigue sorda, si la sociedad escucha a Cacho Castaña y toma sus disculpas, el estatus político de las mujeres en toda su diversidad sigue siendo el que nos mantiene desde hace milenios como el sostén de la economía mundial a cambio de nuestras propias renuncias y muertes.

Por eso hay detrás de un Pérez regimientos de perversos en el poder político administrando los recursos que las mujeres generamos con la maternidad, el trabajo doméstico impago e invisibilizado, con la prostitución y la trata que son –además de reductos de poder dónde la mayoría de las esclavizadas son mujeres– las industrias de dónde salen los fondos que nutren las campañas electorales en todo el mundo.

La violencia de Género es sólo la punta del iceberg de un esquema de dominación que pone en jaque la vida de todxs.

María Laura Razzari

Profesora de Historia y Filosofía

Concejala, mandato cumplido, Bloque Feminista HCD Chivilcoy 2017

Presidenta de Asociación Civil Maltratocero

Referenta Seccional del Movimiento Alfonsinista

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Claudia y Carolina: Víctimas sacrificiales del Estado Patriarcal en el HCD de Chivilcoy

Por primera vez en la historia y en medio de las tensiones naturales de un modelo político atravesado por el espíritu neocolonial y de mafialización de la política, llegan dos mujeres del campo popular a convertirse en Presidenta y Secretaria respectivamente del HCD de Chivilcoy, acompañándolas una tercera mujer de misma procedencia política como Vicepresidenta Segunda.

La Presidenta Dra Claudia Bogliolo del espacio Cumplir, la Vicepresidenta segunda Lic. Constanza Alonso y la Secretaria Lic. Carolina Di Nápoli – ambas de Unidad Ciudadana.

A golpe de vista  la composición del gobierno comunal quedó desdoblada en una especie de co-gobierno dónde un Poder Ejecutivo local se caracteriza por la preeminencia desmedida no sólo de varones sino de un ejercicio patriarcal y de neto corte policial de la política que se armoniza perfectamente con los lineamientos de la gestión política Nacional y Provincial neoliberal, anticonstitucional y afable a los intereses de las corporaciones locales y extranjeras.

En contraste  con un Poder Legislativo –integrado por tres mujeres y un  varón- de las cuales todas ellas proceden de ámbitos de militancia y participación en diversas agrupaciones y entidades caracterizadas por la defensa de lo comunitario, los lazos de solidaridad social y las cuestiones de género, amén de ser también tres mujeres cuya formación profesional se asienta en las ciencias humanísticas.

Ellas son mujeres y representan la comunidad, la tribu, la esencia de la supervivencia contra las fuerzas centrífugas del patriarcado capitalista.

La foto se me sugirió alarmante la noche del 7/12/17 de la Sesión Preparatoria en la que fueron designadas las autoridades del Concejo.

No obstante, en ese momento no podía adelantarme a identificar de qué modo el Estado Patriarcal y la mafialización de la política intentarían impedir que este nuevo Legislativo comunal pudiera contar con la independencia que he reclamado durante toda mi etapa de concejalía.

No se estila en Chivilcoy y aledaños la independencia del PL, del mismo modo que no se estilan las autonomías municipales ni provinciales, como ya han dejado de estilarse también la independencia del Ministerio Público Fiscal y del Poder Judicial en la Argentina de estos últimos dos años de gobierno de Cambiemos.

En medio de todo lo que no se estila, saltó la liebre en la negativa de la Suprema Corte de Justicia de la Pcia de Bs As a otorgar la licencia de la Sra Secretaria Carolina Di Nápoli, solicitada desde su votación, lo que se ofrece como un “sospechoso escenario de operaciones” políticas –que bien podrían configurar un abanico de hipótesis variables de las que no debería quedar exento ningún espacio político- al tiempo que se vuelve la excusa perfecta para que el Estado Policial bajo el que gobierna el Dr. Guillermo Britos, siga con su invariante inercia y propulsión a gobernar por decreto y a espaldas de un resultado electoral que le dio un claro mensaje de rechazo en estas últimas legislativas.

Así hay que oír, como uno de sus concejales –fiel siervo de la gleba- dice de la Sra. Secretaria que por estar “floja de papeles” como si la persona en cuestión fuera un auto, se halla el PL en estado de vulnerabilidad institucional y también presiona a la Presidenta del HCD, amenazas mediantes de “ir por su cabeza”, si no se atreve a violentar el derecho pendiente que le asiste a Di Nápoli durante la feria judicial, a esperar la firma de la SCJ de la Pcia de Bs As.

La desesperación ha hecho presa al Ejecutivo policial, violento y patriarcal que después del resultado electoral de octubre quedó con la ñata contra el vidrio perdiendo el control del HCD local.

Sin embargo el escenario de estas mujeres en jaque hace pensar que desde todos los espacios fueron arrojadas al fuego como si sus cuerpos fueran el campo de batalla de una disputa de poder detrás de la cuál predominan no sólo hombres sino las lógicas del poder patriarcal que acabo de describir hasta aquí.

Sin importar la procedencia político partidaria de mis congéneres me alarma, como aquella primera noche que las vi llevar a cabo su sesión inaugural, pensar que el Patriarcado sea capaz una vez más de convertirnos en víctimas sacrificiales de una guerra que no reconoce, no sólo la paridad de géneros, los derechos de las personas en diversidad, sino que por todo ello degrada cada día más la democracia que habitamos a punto de oficiar cualquier método inescrupuloso para gobernar a espaldas del pueblo hasta el fin del receso legislativo.

Una vez más como dice Rita Segato “La historia de la esfera pública es la historia del Patriarcado” (La guerra contra las mujeres, pág 91).

María Laura Razzari

Profesora de Historia y Filosofía

Concejala, mandato cumplido, Bloque Feminista HCD Chivilcoy 2017

Presidenta de Asociación Civil Maltratocero

Referenta Seccional del Movimiento Alfonsinista

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Cambiemos violenta a las mujeres porque encarnamos la antítesis macropolítica de su esencia

Es notable cómo en distintos escenarios, niveles de poder y en especial áreas gubernamentales las mujeres somos de mínimo descalificadas y resistidas a la hora de la participación política, y de máxima amenazadas, castigadas o asesinadas.

Basta advertir la saña del actual gobierno con dos mujeres relevantes del pensamiento popular como lo son Cristina Fernández de Kirchner y Milagro Sala para después ver la innumerable cantidad de casos de mujeres anónimas que somos víctimas de la violencia de género institucional.

Entre las líderes y las anónimas no existe ninguna distancia: todas somos la expresión de la antítesis macropolítica de un modelo de desarrollo mundial basado en la destrucción de la comunidad.

Las mujeres no sólo hemos sobrevivido a lo largo de 12 mil años –de la revolución agrícola hasta acá- en el marco de un modelo relacional dónde la ética de la solidaridad es el eje de una cultura de la protección, cuidado,  producción y administración del sustento colectivo que constituyó las bases del sostenimiento de la economía mundial todo este tiempo, sino que hemos sido el soporte de una falsa creencia: que los liderazgos masculinos son patrimonio exclusivo de los hombres.

“La fantasía de la individualidad” le llama en su ensayo antropológico Almudena Hernando, investigadora de la Universidad Complutense de Madrid; y no casualmente esa idea de la individualidad convertida con el tiempo en la ideología del individualismo, es hoy la médula espinal de una cultura que entiende que la libertad e inclusive la democracia se resumen a poder hacer cada cuál lo que desea, en especial consumir, acceder al confort, al placer y la posibilidad de automatizar por vía de la tecnología una innumerable cantidad de actividades que otrora nos obligaban a tomar contacto con otrxs: ir al correo por ejemplo…

La fantasía de la individualidad es también constitutiva del imaginario de lxs actores que dan vida al mundo de las corporaciones económicas internacionales. Desde esta falsa hipótesis la disponibilidad de poder es casi absoluta y esa creencia es “derramada” a partir de una infinidad de recursos simbólicos que nos aturden diariamente a través no sólo de la multimedia sino de la reestructuración comercial y de los estilos de vida de las comunidades, grandes o pequeñas dónde vivimos.

Cuánto más pequeña es la comunidad dice Rita Segato, más difícil se le vuelve el ingreso a esta “fantasía de la individualidad”, porque la proximidad humana y la conservación de los vínculos dónde anidan los lazos de solidaridad social permiten a las personas construir una identidad relacional, cooperativa o comunitaria muy por encima de la percepción de su individualidad.

Y las mujeres hemos sido y seguimos siendo esto.

Las mujeres seguimos siendo tribu. Comunidad organizada, cultura del cuidado, sentido de la reciprocidad…

Tenemos concepciones tales como que un plato que recibimos con comida jamás se devuelve vacío, y esa idea, aunque parezca mentira habla de la concepción macropolítica de la vida que encarnamos las mujeres.

Es por eso que sobre todo las mujeres que provenimos del campo popular, que en nuestro haber de vida tenemos más capital amoroso que material, somos potencialmente peligrosas y nos volvemos destinatarias de las violencias de género institucionales a todo nivel, porque tenemos en nuestra identidad milenaria ya inconsciente la tendencia a pensar las políticas públicas como una extensión de ese mundo dónde sobrevivimos milenariamente.

En nuestro acervo más ancestral anida la prueba más contundente de que el capitalismo salvaje, la concentración de la riqueza y la hostilidad como reguladora de las relaciones sociales no son el único modo de pensar la organización, la producción, la administración y la proyección del mundo humano.

Esta es la razón por la que tantas mujeres como Érica Pereyra insultada en pleno recinto por el concejal de Cambiemos Carlos Pedro Pérez en Luján o Laura González afiliada de ATE y brutalmente golpeada por los matones del intendente de Quilmes Martiniano Molina, o yo misma hace días atrás amenazada por el Intendente Guillermo Britos por haber rechazado el presupuesto 2018 en Chivilcoy, somos atacadas para que la fantasía de la individualidad que nutre al fundamentalismo de mercado no salga a la luz jamás.

Pero parece que ya va siendo un intento fracasado.

María Laura Razzari

Profesora de Historia y Filosofía

Ex Concejala Bloque Feminista HCD Chivilcoy 2015-2017

Presidenta de Asociación Civil Maltratocero

Referenta Seccional del Movimiento Alfonsinista

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Resistencia Mirabal hasta mi muerte

Erradicar las normalizaciones que contienen las injusticias es nadar en un río de mierda.

A lo largo de estos años de militancia feminista, superpuesta a otras militancias políticas no siempre tan visibles, ni tan corpóreamente exhibidas, es una experiencia de aprendizajes infinitos, de autoconocimiento y toma de decisiones permanentes acerca de cuáles son los reductos desde dónde resistir para alcanzar aquellas transformaciones que nos acerquen a la equidad, la justicia y la libertad.

Ha sido un camino largo que bien vale recordar un 25 de noviembre, cuando conmemoramos los femicidios de las hermanas Mirabal a manos del dictador Trujillo en República Dominicana.

No se puede nadar en el río de mierda de la política patriarcal si no se tiene como norte ético a las Mirabal, por eso siempre pegamos mariposas por todas partes las feministas, porque a ellas se las había apodado “Las mariposas” y por eso llevo una colgada en mi pecho todos los días.

Como decía Minerva: “Si me matan, sacaré los brazos de la tumba y seré más fuerte”.

Porque el río de mierda es un suplicio, pero el suplicio de ellas fue mayor y merece que lo honremos asumiendo los desafíos que se presentan cada día.

No hablo de lucha, ni de guerras, hablo de desafíos… no propongo pensar nuestros alcances bajo las mismas lógicas que lo ha hecho el patriarcado como sistema.

Es por eso que habiendo llevado la agenda de géneros por primera vez en la historia al gobierno de mi comuna, y más aún logrando que sea comprendida por el Poder Legislativo y mencionada por primera vez en la historia de Chivilcoy en el presupuesto, descubro –porque cada día es un aprendizaje– que hoy el nuevo nodo de resistencia, en este río de mierda, es votar en contra de un presupuesto que vacía las políticas sociales en general y de géneros en particular que ha promovido el Honorable Concejo Deliberante.

La misoginia se hizo presente en la degradación arbitraria de una Dirección de Políticas Públicas de Géneros e Igualdad de Oportunidades (DPPGeIO), a la categoría de una simple coordinación con dos administrativxs.

¿Cuál es la razón? Evitar que exista dentro del Poder Ejecutivo un centro de control y producción de políticas públicas con perspectiva de géneros.

Es vital para un Ejecutivo policial y misógino evitar que las políticas públicas sean monitoreadas por especialistas en género, y de este modo al no haber DPPGeIO, tampoco habrá quien esté a la altura de las circunstancias para dos avanzadas claves: Supervisar que el Hogar de Protección Integral para Víctimas de Violencia de Género no se convierta en un simple depósito dónde se “trafique políticamente el cuerpo de las mujeres en situación de violencia”, ni que tampoco se cree la Escuela de Géneros en el CUCH desde donde formar profesionales.

El pícaro Poder Ejecutivo sabe muy bien como borrar con el codo lo que el Poder Legislativo escribió dos años con la mano, y como llevar al vaciamiento el nodo de políticas de géneros más importante que se ha logrado en la Pcia.de Buenos Aires.

El Estado Policial y misógino también ignoró la creación de la Dirección de Economía Popular para la coordinación de las cooperativas de trabajo, ente que sabemos bien cuánta importancia tiene en la erradicación de la feminización de la pobreza.

No ha dejado cabos sueltos, y tampoco –a la usanza de Trujillo– se ha perdido la ocasión de violentar a aquellas mujeres que hemos encarnado estas políticas.

Parecería ser que la prepotencia prostituyente les hace suponer que seremos tan dóciles como para que, por vía de una miserable conformidad, nos sometamos a la normalización del vaciamiento de las políticas sociales, que es una constante histórica en este país.

No sospechan, ni se les cruza, que quienes tenemos valores jamás tendremos precio, que no somos asimilables a un sistema que finalmente nos trata junto a las víctimas que pretendemos defender.

El Legislativo aprendió bastante, el Ejecutivo decidió “no entender” nada.

María Laura Razzari

Profesora de Historia y Filosofía

Concejala Bloque Feminista HCD Chivilcoy

Presidenta de Asociación Civil Maltratocero