naylabeyene

[naylabeyene]

¿Sentirme culpable por jugar con tus fantasias? Nunca.

[naylabeyene]

Jugando al gato y al ratón, te busco entre letras y te insinúas, insatisfecho por el recuerdo, me buscas, insistes y luego queda el silencio incitador. Sigo las migajas y volvemos a comenzar.

Me preguntó si me mantendré al borde o me sumergiré en tu necesidad ahogando así la mia.

[naylabeyene]

Le susurre al universo su maldad y me devolvió tu voz.

Voz de pecado que me estremece, voz de pasado que me sacude.

[naylabeyene]

Por un momento la ansiedad de verte me gano, he imaginé ese encuentro fortuito. Milagrosamente el universo es cruel.

[naylabeyene]

Nocturno

No cortes mi voz jadeante

Abrasame en el fuego de tu boca

Y has de mi una fuente fecunda

Que la noche no silencie mi paroxismo

Y observe indiscreta mi convulsión.

[naylabeyene]

Y cuando creí que ya abrazaba la soledad y su fría caricia me contentaba el alma, vuelves con tu vigilancia. ¿Qué haces rondando el vecindario virtual del cual te he desterrado? Buscas mi mirada inquisidora a tu silencio, o tal vez solo quieres estar seguro de que he caído desde tu partida. Soy acaso ese pájaro que cae de tu nido y solo procuras saborear la agonia de mis heridas.

Famélica ha de ser tu alma para buscar de mi dolor saciarse. Pobre criatura que espera en la oscuridad mi lamento, pues este nunca llegará.

[naylabeyene]

Volvieron las lluvias.

En los cristales empapados parece que voy a encontrar tu figura, pero son quimeras hijas de la velocidad. El tiempo ha pasado. Ocasionalmente llega a mi la esquina de un recuerdo, una conversación de hace tiempos. No me atormenta, las palabras suenan diferentes, apagadas. La mirada no acusa y se siente vacia gracias a mi incapacidad para recrearla. Sano borrándote poco a poco. Así como borro el calor en los vidrios en medio de la tormenta.

[naylabeyene]

Cuando deje de soñar contigo dire que te he olvidado.

[naylabeyene]

Nunca les interesó llevar la conversación más allá, tanto desgaste no se vería compensado. Sonrisas y juegos de palabras para llegar rápido a la meta, al subterfugio de la seducción diluida en afanes y precocidad mal camuflada. Nunca importó cual fuese el tema, todo era interesante, todo era sensacional mientras las manos buscaban a ciegas otros territorios que explorar.

Y luego de saciado el deseo el telón de silencio caía para despedir al personaje y regresar al ser que no sabe como deshacerse de sus errores. Mira con afán el cuarto y se siente perdido, como estar allí con una persona a la que apenas soporta, como evitar sus preguntas, sus gestos, sus miradas. Se resguardan en el silencio con la comodidad de un niño que piensa que nada sucede si no prestas suficiente atención.

Se vuelven esquivas sus palabras y la distancia inicia con cortesía presuntuosa. No eres interesante porque consumiste su deseo con la ansiedad de cada beso y eso los sobrepaso. Los desbordó. Volverán cuando todo pase y crean que eres tu quien los necesita a ellos. Cuando quieran volver a jugar para reafirmar que no han perdido contra el tiempo y el silencio. Volverás a ser excitante y construirán de nuevo sus viejos trucos. Te asomaras en las palabras recicladas que ellos piensas has olvidado. Son ellos buscandote, devorando tus pasos mientras los olvidas.

[naylabeyene]

Sigues orbitando. ¿Acaso buscas un desliz en mis publicaciones? ¿Esperas ver lo que ya no te permito tener? ¿Te gustaría recibir mis migajas? ¿Sueñas con la hora en que te ofrezca el secreto virtual de mi preferencia?

[naylabeyene]

Regrese a los foros pornográficos que solíamos leer. El tiempo parece no transcurrir en esos lugares. Los mismos temas, los mismos relatos. Los tristes ejecutivos, las amas de casa, los juegos perversos de por medio.

Navegar entre textos, intentando encontrar algo nuevo me lleva algo de tiempo. Sin embargo, lo encuentro en medio de descripciones rocambolescas de orgías y medidas hercúleas de miembros ficcionales. Allí están, esa aventura porno que parece tener una historia de misterio, muerte y corrupción entre mamadas e iniciaciones al sexo lésbico. Algo digno para wattpad ahora que se volvió el hogar de la tendencia al romance tóxico con toques de mojigateria descriptiva sexual.

[naylabeyene]

Es un alivio pensar que mi obsesión ha quedado en los limites saludables de las fantasías ansiosas del tal vez si.

Reproducir una y otra vez escenarios imposibles, conversaciones que nunca llegarán. Sentirme ahogada por tus dedos en mi garganta de nuevo. Ese jadeo que estremece mi cuerpo mientras lo exploras. Allí, dejando que acampen tus propias inseguridades sobre el frenesí de un beso.

La imagen es súbita y el lugar inapropiado. Sólo puedo suspirar con el cansancio de saber que nunca existió tal relación. Que nunca llegamos a tanto. Nos desvanecimos entre los malos tratos de nuestro orgullo. Mi mente no lo sabe, no le importa mientras pueda sacudir mi monótona humanidad con tu imagen aunque le diga que odio verte dentro de mis días.

Te usara mientras pueda hacerlo, ella siente que es lo que le debes. Serás por siempre su figurín en la tormenta de mi mente.

[naylabeyene]

Siempre me pregunto si en verdad ves mis publicaciones. Te veo allí fisgoneando, pero me niego a creer que he dejado en ti el gusto por el voyerismo.

Buscas acaso algo que te refresque la tenue imagen de mis labios, o quieres cerciorarte de que lado iba el lunar de mi boca. Qué buscas allí si nos media el silencio de una ciudad entera.

Acaso es sólo rutina, un movimiento corriente de tus dedos que ya no reconocen mi carne. Que lejos quedo nuestra última caricia. Pero allí sigues, observando lo que publico aunque no te devuelva la cortesía.

Acaso esperar ver mi avatar en el mar de tus publicaciones, como la sombra que deseaste que fuese.

[naylabeyene]

Te soñe otra vez. Tocabas mi abdomen y levantabas el pijama para estimularme. Cerré los ojos y me deje llevar por tus dedos. Eras un sueño en el que me volvías a tocar.

Tener sueños húmedos a esta edad es algo que se agradece. Desperté y solo ví mi techo, blanco y espantoso.