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más flopera que el mismo naim

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“Estás aquí...” P.J

dni: ninguno.

advertencias: Soft, fantasma, angel guardián, besos suaves (cuello y hombros)

me asusta estar soñando siempre con él, like what-

Jisung no era igual a los demás, de hecho, siempre fue alguien considerado "extraño" debido a su forma de ser, pero, él tenía lo que nadie más tenía... Exacto, él podía ver a su ángel guardián. ¿Pero por qué? Ni siquiera él lo sabe y mucho menos ella. Todo inicia cuando apareces en su vida a la edad de 9 años, ambos tenían la misma edad y se entendían muy bien pero eso le provocó problemas, demasiados que marcaron su infancia y en muchas llegó a culparte pero no era tu culpa, tú lo protegias. Él siempre fue un niño curioso y cuando llegaste a su vida te presentó con sus padres, los cuales creyeron que solo era un pequeño juego de niños, lamentablemente esto empeoró cuando él tenía 12 años, ellos estaban hartos y hasta enviaron a Jisung a terapia, cambiando así constantemente de terapeuta.

Pero las cosas no terminaron ahí, sus compañeros de la secundaria siempre se burlaban de él por eso, obviamente lo defendías y los hacías tener raspones leves debido a tu edad, pero todo afectó a Jisung y bastante, siempre te culpaba y te culpó mucho más cuando sus padres se separaron porque él hablaba contigo y lo trataban de loco.

Actualmente las cosas van bien, él vive solo en su departamento y tú estás constantemente a su lado, ambos tienen la misma edad y son muy unidos pero, sientes algo indescriptible por él, te sientes insuficiente ante él, sientes como si tú estómago quisiera explotar cuando lo ves sonriendo o disfrutando contigo.

En unos días sería luna llena, lo cuál cae en el cumpleaños 22 de Jisung, siempre a los angeles guardianes se les concede un deseo para su "protegido" cuando es mayor de edad o su cumpleaños cae en luna llena, lo cuál él tuvo una buena suerte porque podrías hacerle un lindo favor y un hermoso regalo de cumpleaños.

“¿Que quieres de cumpleaños?” Preguntaste flotando sobre su cabeza mientras él hacía su tarea, se veía tan concentrado que podrías deducir que en este momento no le importa nada y es obvio, en pocos días tiene un examen.

Él solo soltó una pequeña risa. “T/n, no puedes darme nada más que tu presencia... Bueno, ni eso, no sé si esto cuenta como presencia ” Sus ojos te miraron unos segundos antes de volver a escribir.

Hiciste un pequeño puchero dando un suspiro mientras flotabas en la habitación sin un espacio fijo. “Oh vamos Jisung, si pudiera, ¿Que pedirías?”

Niega y luego ríe. “Que dejes de ser tan tonta” Él siempre fue así contigo, se llevaban de esa forma pero sabías que en el fondo, ignorando todo lo que pasó, él deseguro te quería con la misma intensidad que tú a él.

Suspiraste y reíste, no podías decir nada acerca del deseo de cumpleaños, no quería qué él pregunte acerca de eso. “Tienes razón, simplemente debo ver cómo la pasas bien en tu cumpleaños”.

“Si no hubieras aparecido en mi vida, ¿Tú crees que mis padres seguirían juntos?” Preguntó de la nada, la pregunta te tomó por sorpresa y realmente dolía, a lo largo de sus momentos juntos, habías aprendido mucho acerca de las emociones gracias a él, tanto que podías experimentarlas pero no podías sentir tacto físico de él.

“Uhm... Si, no lo sé, ¿A dónde viene esa pregunta?” Flotabas frente su rostro mirándolo atentamente.

“Si me hubieras dado a elegir antes, tal vez hubiera deseado tener una buena infancia sin ti.” No era nada inusual que él te culpara a veces, no era tu culpa pero a la vez si, pero él había pasado una mala infancia gracias a tu presencia. “Uh... Lo siento. Solo estoy algo estresado por el examen, no me prestes atención, digo cosas incoherentes” Podías entenderlo pero él nunca entendería como te sientes por dentro a pesar de que no estás apto para sentir emociones pero aún así las sentías, lo cuál era extraño.

“No te preocupes... Te entiendo” Siempre entiendes pero nunca es un “Por qué me culpas a mi si quise ayudarte?”

Los días pasaron como si nada, Jisung estaba ocupado en sus estudios y tú molestandolo como siempre, su cumpleaños estaba cada vez más cerca y estabas feliz de poder hacerle un regalo pero, no salía de tu mente el pensamiento de su deseo de su infancia sin ti, eso puede afectar el regalo si lo sigues pensando pero por más que lo intentes, no sale de cabeza. Su cumpleaños llegó como rayo a cable de electricidad y estabas feliz, demasiado que simplemente se te olvidó lo que él había deseado hace días antes.

“Feliz cumpleaños! Oh dios mío! Aún recuerdo cuando eras un pequeña bola con cabello de Maruchan” Reías mientras flotabas por toda la habitación, él te miraba con asombro y felicidad, eran las 00:00 y le darías se regalo pronto porque sabías que él estaba cansado y quería dormirse.

“Gracias... En serio gracias, a pesar de todo lo que pasó con nosotros, te aprecio mucho y desearía que estés conmigo y no como un fantasma” Esa era la frase que querías oír, ahora el regalo de cumpleaños sería el mejor y el más inolvidable para él.

Jisung estaba acostado en la cama mientras flotabas encima de él y lo mirabas con atención, poco a poco se quedaba dormido, sabías el gran día que fue hoy debido a su examen y te sentías orgullosa por él. Antes de que él pudiera descansar, llamaste su atención y pusiste tus manos en su rostro, él no podía sentir tus manos pero si podía ver el lindo gesto. “Te amo Jisung” Susurraste suavemente.

“Te amo más” Susurró antes de quedarse completamente dormido, te dió ternura como dormía por el cansancio y realmente lo extrañarías pero valdría la pena tu ausencia. Miraste un momento su habitación antes de desaparecer, no dejaste ningún rastro y eso definitivamente marcaría a Jisung.

La mañana fría llenó a Jisung, sus ojos rojos por llorar, ha pasado toda la mañana buscándote y llamandote y simplemente nada, ni siquiera una pista de ti y eso lo desesperó bastante, hasta se arrepintió de todo lo que dijo hace años, se arrepintió de todo con tal de que vuelvas pero nada ocurrió, él pasó su cumpleaños solo y no querías eso, te dolió simplemente cuando te fuiste y saber que la pasaría solo.

Y así continuaron los meses sin ti, cada día era igual para él, ya ni siquiera tenía con quién pelear, mucho menos con quién reír y no le interesaban personas reales, se había encariñado contigo a tal punto de que se enamoró de ti perdidamente, jamás te lo dijo y ese ha sido su arrepentimiento desde entonces pero él sabía que no podía hacer nada porque él no iba poder sentir un tacto tuyo.

Habían pasado 3 meses sin ti, todo le parecía aburrido por más nuevas cosas que hayan, no le interesaba nada, absolutamente nada. Un día de frío, realmente demasiado frío, insoportable para todos, era normal estás temperaturas en Corea, Jisung estaba en el sofá, leyendo un libro hasta que escuchó el timbre, eran las 23:00 pm. ¿Quién podría ser a esta hora?

De mala gana se levantó del sofá y fue a la puerta, abriéndola con enojo y frustración. Y allí estabas, parada frente él, tu cabello era del color que se mostraba cuando eras un fantasma, tu piel no era demasiado pálida, tus facciones eran adorables, tu ropa era bastante abrigada, tu estatura era perfecta y abrazable, en tus brazos traías un hermoso ramo de flores que a él le gustaban, sabías absolutamente todo lo que él le gustaba.

“Sorpresa, Jisung...” Lograste pronunciar. Jisung te miraba como si hubiera visto algo que no quería, se quedó completamente helado, sus labios temblaban mientras tragaba saliva varias veces, el nudo en su garganta no lo dejaba tragar la saliva y sus lágrimas querían aparecer. En un abrir y cerrar de ojos te abrazó fuertemente, sintiéndose reconfortado por sentir tu tacto, se sintió increíble al oler tu cabello, tu aroma y simplemente sentirte, él estaba completo.

Te dejó pasar al departamento mientras limpiaba sus lágrimas, caían sin cesar y no entendías el por qué, sentías felicidad y todas las emociones pero entendías porque él lloraba, siempre creíste que las personas lloraban solo por tristeza. “Por qué lloras? De nuevo hice algo mal?” Preguntaste mirándolo atentamente.

Él rió, negando y secándose las lágrimas. “No... Al contrario, lloro porque te extrañé y por felicidad.” Su cabeza estaba en tu hombro mientras sus manos sostenían tus brazos y daba suspiros temblorosos. “Por qué me abandonaste en mi cumpleaños?”

“Para darte tu regalo, perdón si me tardé pero hubieron complicaciones” Reíste alejándolo y entregándole las flores. “Son tus favoritas” Y eso provocaron más lágrimas de su parte, cosa que te sorprendió bastante. “Mira, me convertí en humana por ti. Los angeles guardianes podemos cumplir deseos cuando nuestro protegido cumple mayoría de edad o cuando su cumpleaños es en luna llena y tú, tuviste suerte, entonces quise darte la sorpresa pero debido a la primera opción que dijiste, me tardé más pero aquí estoy”

Él no creía esto y aún así lloraba como un niño chiquito que extraña a su madre, sus manos dejaron caer el ramo en la mesa de café y volvió a abrazarte, haciéndote caer en él sofá, con él encima, esto es nuevo para ti pero no te asusta por completo, de hecho, el sentimiento de poder abrazarlo era como si tu corazón pudiera abrazar el suyo. Lloraba desconsoladamente, diciendo palabras incoherentes mientras reías y acariciabas su espalda.

“T/n, fui un tonto al decir todo eso, nunca quise que tuvieras la culpa de nada, simplemente no entendía tu función en mi vida... Pero carajo, me gustas y realmente que estés aquí, haces que mi corazón lata como un loco” Entendías las palabras a la perfección, él te enseñó mucho acerca del amor y definitivamente sonreias como nunca, te sentías simplemente feliz de poder estar con él.

Tus manos por fin pudieron agarrar su rostro, tocando sus mejillas con tus pulgares, admirando la suave piel que él tenía, era surrealista. “Te amo, Jisung..”

El impulso hizo que Jisung uniera sus labios, simplemente él estaba tan emocionado y feliz de tenerte con él que no quería separarse de ti ni por dos segundos, quería llevarte a todas partes y quería mantenerte con él, simplemente quería que fueron solo ustedes dos. No sabías cómo reaccionar, así que intentaste imitarlo, no salió tan bien porque ambos eran inexpertos pero luego agarraron un ritmo agradable y simplemente disfrutaron de la presencia del otro, Jisung besaba tus labios, bajando a tu cuello y besando tus hombros, haciendo así su recorrido de nuevo, era su forma de demostrarte amor y cariño.

“Estás aquí... Y conmigo” Susurró plantando besos en tus mejillas suavemente.

Desde ese día él fue tu guía en todo y jamás se abandonaron el uno al otro.

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“Es solo mi mejor amiga”

dni: menores

Advertencia: sexual, besos húmedos, estimulación.

esto es algo que soñé con un integrante, ni siquiera sé porqué. 🤷🏻‍♀️

btw, fue raro y corto pero yo lo alargue más aquí, jiji.

Mark siempre dijo que eras solo su mejor amiga, su familia te conocía como su pequeña hermana, eran un dúo inseparable y ambas familias confiaban en ambos ya que se cuidaban como hermanos, los dos se querían bastante.

Pero sin embargo, su amistad da giros inesperados de vez en cuándo, que digo, siempre da un giro. Ninguno de los dos puede pasar dos segundos sin comerse la boca, es fácil para los demás no notar eso ya que siempre tienen la puerta cerrada, tu familia y la de mark nunca sospecharon de ninguno ya que tenían confianza en ambos, pero nadie sabe lo que pasa detrás de esa puerta.

Bueno, todo terminó hoy. Era un día caluroso, el ventilador de mark dejó de funcionar y su madre le dijo que no encendiera el aire acondicionado porque puede bajar la llave de la electricidad debido a que otros electrodomésticos están funcionando, no hubo de otra que abrir la ventana. La ventana de mark daba al patio, el cuál era amplio y espacioso, allí se encontraban jugando sus hermanos mayores, estaban jugando al fútbol mientras ustedes dos se besaban en su habitación, acostados en la cama, de vez en cuando se fijaban si ninguno de sus hermanos no venía mientras hacían sus cosas.

Su mano estaba posicionado en tu coño vestido, tu pantalón corto era ligero y muy ventilado, por lo cuál su dedo del medio frotaba tu clítoris por fuera de la tela, haciendote jadear en medio de los besos.

“No hagas demasiado ruido.” Murmuró mordiendo tus labios suavemente antes de seguir besándote. Claro, era fácil retener jadeos pero una vez que gimes, no es fácil aguantarselos. Su dedo seguía frotandose contra tu clítoris mientras jadeabas más, su dedo realmente estaba haciendo que empapes tus bragas y no podían evitar mirar de vez en cuando por la ventana, quería privacidad pero hacia demasiado calor para cerrar la ventana o la cortina.

“Justo en el peor momento, tu ventilador dejó de funcionar” Dijiste contra sus labios provocando una linda risita de su parte mientras su otra mano amasaba tu seno.

“Deseguro el destino quería que fuéramos naturales” Soltó otra risa, besando tu cuello lentamente, su mano ahora se introdujo dentro de tus bragas, pero lo hizo por la parte de las piernas de tu pantalón corto, haciendo a un lado la línea de tu braga y moviendo su dedo en círculos por tu clítoris, haciendote estremecer. “Tranquila, princesa, te vas a sentir bien, lo prometo”

Asentiste mientras levantabas tus muslos y amenazabas con cerrarlos debido a la excitación que te está provocando, tus gemidos eran suaves y muy bajos mientras él disfrutaba de las reacciones de tu cuerpo.

Sus dedos bajaron hasta tu húmeda entrada, dónde jugó con esos fluidos de excitación antes de ingresar su dedo del medio dentro y luego el anular, curvandolos mientras lo movía dentro, tu mano cubría tu boca, evitando los gemidos pero eran casi insoportables ya que soltabas uno que otro, sin importar qué.

Sus dedos entraban y salían, tus ojos se dirigieron a su polla, la cuál se movía en su pantalón, como si tuviera vida propia, tu mano agarró de bulto apretandolo mientras él jadeaba, podías sentir lo duro que se ponía con cada apretada o frotación de tu palma.

En cuestión de segundos te hizo correrte haciendote gemir bajo pero no demasiado, sacando sus dedos y lamiendolos. “Deliciosa” Murmuró mirando tu mano. “Saca mi polla, bonita” Dijo con voz ronca, te sentaste y bajaste un poco el elástico de sus pantalones, revelando su erección palpitante en sus boxers color gris, tenían una mancha de presemen en el costado, sabías lo excitado que se había puesto.

Sentada podías tener mejor la vista del patio para ver si alguien de sus hermanos venía, mark estaba recostado por sus codos mientras te miraba atentamente, tu mano lentamente bajó sus boxers, mirando su polla dura, sus ojos te pedían por favor que lo tomes en tu mano, ya que tu boca sería riesgoso ahora, jugaste con su cabeza antes de bombearlo. Él no emitía sonidos pero su boca estaba abierto, inhalando y exhalando el aire mientras su pecho subía y bajaba.

Tú cabeza se inclinó hacia él, besando sus labios con pasión mientras se perdían en el momento, ninguno de los dos era consciente de la ventana cuando se besaban, ninguno iba notar que uno de los hermanos mayores de mark ya los pilló y definitivamente se burlaría de él más tarde.

Tu mano bombeaba su miembro mucho más rápido, buscando llevarlo a su deseada liberación. “Te diré cuando esté cerca y tómalo en tu linda boquita” Murmuró contra tus labios antes de seguir besandote. Él ahora emitía lindos sonidos, los cuáles eran callados por tus besos, su mano apretaba tu cabello con fuerza mientras sus caderas se movían hacia arriba, buscando más de tu tacto. “Estoy... Cerca”. Dijo gimiendo bajo, tu boca su dirigió a su polla, tomándola y chupandola mientras tu lengua se enroscaba en él. Su mano agarra tu cabello para guiarte, en cuestión de segundos sentiste su carga caliente y blanquecina en tu boca, tragaste eso y levantaste la cabeza, volviendo a besar sus labios.

“Bebé, detente... Esto puede llegar a otra cosa” Esa linda risita apreció de nuevo en sus labios mientras decía eso, no tuviste opción que solo asentir y alejarte. Levantó sus pantalones, ajustandolos.

Y así pasaron la tarde juntos, hubo uno que otro beso, juguemos, charlas, entre otras cosas, a eso de las 20:00 pm tuviste que irte debido a la cena familiar que habría en tu casa, de no ser así te hubieras quedado a dormir con mark. Él se despidió de ti, todo bien y fue a cenar con su familia en la mesa, todos hablaban entre si hasta que su madre preguntó;

“Mark, cómo está t/n? Supe que le agarró una resfriado, ¿Ya está mejor?” Preguntó a lo que mark sonrió y simplemente asintió. “Me alegra que la hayas cuidado, me encanta verlos juntos, hacen un gran duo”

Él iba decir una palabra más hasta que su hermano mayor habló. “De hecho mamá, ambos se adoran mutuamente porque mark se folla a su mejor amiga” Y eso la gota que derrames el vaso. Mark se quedó en silencio mientras su familia se quedaban boquiabiertos, ninguno estaba preparado para esa declaración.

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jisung is so me

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Even if time passes I will always love you

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Even if time passes I will always love you

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Montame — P.J

Un día normal con tu novio, se supone que verían una película en tu casa pero eso terminó más en una corrida en tu rostro.

Contenido: Sexo sin protección, relación estable, venirse dentro, dedos, palabras sucias, masturbación.

Hace tiempo no veías nada con jisung gracias a su trabajo y el tuyo, los dos estaban muy ocupados que no tenían tiempo a veces pero hoy era uno de esos días donde pusieron excusas para no ir a trabajar solo para verse. Habías llegado hace unas horas, él quería aprovechar el mejor tiempo contigo.

Jisung no sabía que le ocurría últimamente, te extrañaba pero era de una forma desesperada, extrañaba tus beso y extrañaba sentirte cerca suyo, extrañaba meterse tus pechos a su boca. Su hormonas estaban alborotadas y él estaba como un horno, jodidamente caliente. Ustedes dos aún no han pasado más allá de besos apasionados y masturbaciones mutuas, siempre los interrumpian en el mejor momento o algo sucedía.

“Entonces, ¿Que veremos?” Preguntaste mirándolo mientras cerrabas la puerta y te acercabas a él.

“Uhm aún no sé, que tal si vemos algo de extra-” Lo interrumpiste negando.

“No, extraterrestres no, la última vez que los vimos estuviste hablando de eso hasta la madrugada” Reíste sentandote en la cama, apoyando tu espalda en la cabecera.

Soltó un suspiro asintiendo, tu novio era muy fan de los extraterrestres hasta tal punto de querer verlos siempre “¿Que te parece alguna comedia? Renjun hyung me recomendó una película muy buena” Respondió buscando la película.

La noche de películas era escencial en ustedes luego de estar tiempo separados, era una forma para volver a unirlos y disfrutar juntos de todo. Sin embargo, jisung quería algo más que solo ver películas, estaba claro que hoy estaba caliente, demasiado que le daría una erección en cualquier segundo y más con la pijama reveladora que traías. En su vida se había puesto tan caliente pero ahí estaba, dándote miradas cómplices y ocultando su entrepierna. Los momentos pasaron, en media película de acercó a ti, rozando su nariz contra tu menton, sus labios hicieron fricción contra tu cuello soltando un leve gemido en respuesta de que te gustaba pero no le dabas demasiada importancia por estar vendo la película.

“Prestame atención..” Hablaba contra tu piel, su aliento era caliente y su voz era demasiado ronca como para ser él.

“¿Que estás pensando?” Preguntaste. Tus ojos seguían fijos en la pantalla.

Jisung y tú llevaban 9 meses de relación, eran muy serios y siempre tomaban buenas decisiones para su relación y mejorarla. Nunca habían tenido sexo, siempre fueron pequeños rozes o provocaciones pero nunca más allá.

“Estoy pensando en... Tú sabes” Se alejó mirándote, ahí volvía el jisung tímido, no era capaz de pronunciar la palabra “follar”.

“No es tan difícil decirlo” Lo miraste, tu mirada demostraba que también querías lo mismo que él.

Y para que mentir, 9 meses de provocaciones y rozes, se sentían torturados por no poder hacer un simple movimiento.

“¿Quieres follarme? Sabes que si quieres, no te abstengas” Ahora eras tú quien besaba su cuello. Él nunca lo dijo pero la parte más sensible y erógena de su cuerpo era su cuello y otra parte.

“Si, si quiero..” Un suspiro salió de sus labios asintiendo con la cabeza.

“Pero será silencioso... Recuerda que tus hyungs están todos durmiendo” Elevaste la cabeza besando su mejilla acercando tus besos a sus labios.

Parecía darle igual, no le importaba que los escuchen, realmente también era lo que quería, quería que todos oigan como te lleva al límite una y otra vez. Sus labios ya se habían unido en el beso más magnífico de todos, era lento, suave y lo mejor, apasionado. Sus manos acariciaban tus brazos lentamente, su propósito no era tocarte al segundo, primero sería acariciarte y luego tocar tus pechos. Le encantaba esa zona, eran grandes y perfectos para él, ni siquiera cabían tanto en sus manos pero digamos que si. El beso era uno más intensificado, ahora utilizando sus lenguas, sus manos al fin tocaron tus pechos, los apretaba tanto como podía y hasta gemia contra tu boca, su mano realmente era inquieta, hacia un recorrido de tus pechos hasta tu clítoris vestido, dándole atención a esas dos cosas, tus manos no eran inquietas, se mantenían en su ya endurecido miembro, apretandolo de vez en cuando.

Ustedes dos a la hora de "tener sexo" eran dos personas diferentes, jisung era muy impaciente, lo quería rápido, en cambio tú solo querías tomarlo con calma aunque te gustaba su modo. Luego de unos minutos se separó y te miró, sus ojos estaban totalmente oscuros, envolviste tus brazos alrededor de su cuello al sentir su mano fría meterse dentro de tu pantalón, él era bueno usando los dedos, te hacía venir en cuestión de segundos.

“¿Ya, cariño?” Preguntó al mirarte a lo que asentiste, primero hacia círculos en tu clítoris y luego bajó hasta tu entrada, lo mojada que estabas era algo increíble, lo cual significaría una cosa; Burlas de parte de jisung, le encantaba burlarse de las veces que te mojabas con un solo un toque pero también te burlabas de él porque se venía muy rápido, sin importar qué. “Estás tan mojada para mí, creo que podría deducir que es un río aquí dentro”

Rodaste los ojos ante su burla mirándolo “Jisung, solo cállate, luego te enfadas porque me rio de que tú te vienes muy rápido” Eran un 50/50, así que solamente se calló y metió un dedo bruscamente haciéndote soltar un gemido repentino, escondiste el rostro en su cuello mientras él hacía su trabajo, tus piernas temblaban de lo rápido que movía los dedos, ese hombre hacia muy bien su trabajo, sabía usar los dedos a la perfección.

Tu agarre en su cuello se apretó ligeramente sin molestarlo o hacerle causar dolor. Tus gemidos eran reprimidos porque te mordias el labio. Un, dos, tres orgasmos bastaron para que colapsaras pero eso solo era el comienzo de lo que estaban por hacer.

Jisung te miraba fijamente, esperando a que notes su erección, lo miraste de nuevo, confundida “Que pasa?” Preguntaste y luego bajaste tu mirada hasta donde te llamaba la atención. Sabías que el miembro de jisung era grande, prácticamente era tu tipo y cada que lo metias en la boca te daba arcadas pero era eso lo que más te gustaba. Sin dudarlo solo lo ayudaste a bajar sus pantalones revelando su erección palpitante y un poco goteante debido a la excitación, agachaste la cabeza en una posición cómoda y lamiste la punta escuchando los jadeos del chico que estaba tocando tu cabello impaciente. Lo torturaste un rato dando unas lamidas y luego lo metiste en tu boca completo, haciéndole así una garganta profunda, tal y como a él le gusta. Escuchabas sus gemidos y maldiciones mientras empujaba tu cabeza y eso te gustaba, en la habitación solo se escuchaba el sonido de tu boca chupando su miembro y los quejidos de tu novio.

“Maldita sea... Tu garganta está ahorcando mi pene” Dice en unos gemidos, agarrando tu cabello con fuerza y aumentando tus chupadas. Luego alejó tu cabeza, no entendías porque hizo eso de repente así que lo miraste extrañada.

“Que pasa?” Preguntaste mientras lo veías respirar agitadamente, su miembro palpitaba y seguía recto.

“Arrodillate en el suelo, vas a disfrutar de esto” Ordenó. Tenías una idea de lo que haría así que solo abedeciste, él se puso en el costado de la cama y te miró mientras sostenía tu cabeza.

Esa pequeña idea de lo que sabías que él quería, había desaparecido, realmente no entendías lo que él estaba queriendo hacer hasta que lo viste masturbar su polla frente tu rostro, ahí supiste lo que te esperaba. No bastó más de 3 segundos para que te llenara la cara de semen. No te la llenó por completo, solo cayó cerca de tu boca, era bueno que no haya ido a tus ojos.

“Maldita sea... Siempre quise hacer eso, saborealo perra” Jisung era otra persona al tener sexo, lo virgen que era lo convertía en vulgar y algo obsceno pero a la vez era cuidadoso.

Te ayudó a limpiarte la cara, ahora estaba entre tus piernas, bajando tu pantalón junto con tus bragas, tus pechos a su vista mientras respira agitadamente por lo impaciente que está por meter su polla.

“Jisung, sé cuidadoso por favor... Soy virgen” Recalcaste mientras tus manos acariciaban sus hombros.

“No te preocupes amor, lo seré” Besa tu frente antes de entrar dentro tuyo. Apenas sentiste la punta y ya causó dolor junto con excitación, tus paredes se apretaron unos segundos alrededor de él al sentir como te abría completamente, dolía pero se sentía bien.

“Maldita sea, estás tan apretada”

Luego comenzó a moverse, sentiste como tú himen se rompía, te sorprendió pero a la vez solamente lo dejaste pasar.

Tus gemidos eran sofocados por los besos de jisung o porque te mordias el labio, no podías contenerlos, eran algo silenciosos pero igual se escucharían si Renjun o alguien esté en el cuarto de al lado, las paredes eran demasiado delgadas y la cama hacia un poco de ruido por las embestidas.

“Me estoy volviendo loco con tus gemidos, por favor no los silencies... Quiero que yo y los chicos los escuchen” Era un descarado y lo sabías.

Sus embestidas eran cada vez más fuertes haciendo que lo sientas completamente dentro tuyo, creías que este sería tu último día de vida pero era una entrada al cielo. Agarrabas las sábanas mientras te retorcías debajo de él, su agarre ahora era fijo en tus caderas, impulsando a que su polla se adentre más en tu vagina.

“Carajo Jisung... Te siento demasiado dentro mío” Tus manos ahora estaban apretando las muñecas de jisung mientras soltabas gemidos más fuertes que los anteriores. A este punto los chicos estaban preguntando en el grupo de ellos que es lo que estaban haciendo. Si supieran que su pequeño maknae está por destruirte la matriz.

Las embestidas seguían y seguían, decís obscenidades a cada embestida mientras sus labios hambrientos saboreaban tus pechos desarrollados, te sentías mejor que en el primer momento, era más fluido y su agarre ahora ahora suave, indicando que estaba por llegar.

“Oh dios, estoy a punto de correrme...” Dijo, su voz completamente ronca, también estabas por llegar a tu primer orgasmo. Retiró su pene rápidamente, no entendías porque, cuando viste que aún no se corrió te cuestionaste que es lo que estabas haciendo mal.

“Montame” Soltó de repente. Tus ojos se abrieron como platos al escucharlo decir eso, ni siquiera tenías experiencia montando un caballo, mucho menos tendrías experiencia al montar a tu novio. Pero como estabas tan excitada que solo asentiste, jisung solo se sentó en el colchón recostando la espalda contra la cabecera mientras te subías encima de él. ¿Cómo carajos debo hacer esto? es lo único que pasaba por tu mente.

“Jisung... No sé cómo hacerlo” Dijiste avergonzada, claramente daba vergüenza admitir eso pero era la verdad. Jisung solo soltó una risita y tocó tu cabello.

“Cariño... Solo levantate un poco y alinea mi pene.. yo sé que puedes captarlo” Susurraba en tu oído mientras su respiración seguía más agitada de lo normal.

Pensaste unos minutos para luego intentarlo, salió bien después de todo pero dolió más que la primera posición porque ahí si sentías su polla muy dentro, y no mentirias al decir que lo sentiste en el estómago. Te apoyaste por sus hombros y comenzaste a cabalgarlo como podías, dabas saltos en su regazo haciendo que jisung mire fijamente tus pechos, parecía un bebé hambriento de leche. Estaba luchando por qué cosa mirar; tu lindo rostro o tus pechos, era una tortura para él hacer esto.

“Santa mierda, desearía tener más ojos para mirarte por completo” Sus gemidos se intensificaban mientras agarraba tus caderas ayudándote un poco.

Buscabas llegar al climax y también hacerlo llegar a él, la habitación estaba llena de gemidos y pieles chocando, como si de personas aplaudiendo se tratara. Jisung estaba al límite, no podría contenerse por más tiempo.

“Voy a correrme... Dios mío, jisung..” Su nombre salía de tus labios automáticamente mientras tus uñas se clavaban en su hombro.

“t/n... Solo sigue, vente para mí..” Tu nombre también salía de su boca como si de una canción se tratase.

Gemiste al sentir sus climax chocar, tus piernas temblaron contra sus muslos mientras tu rostro se escondía en su cuello respirando agitadamente.

“Que tal si sigues montandome? Me gusta tenerte encima mío”

“Carajo”