Text
EL SUEÑO DE VIVIR EN EL EXTRANJERO Y LO QUE NADIE TE CUENTA DE ESO
La mayoría de las personas siempre anhela vivir en el extranjero y no está mal, sobre todo si vienes de un país dentro de Latinoamérica donde la inseguridad, la injusticia y la delincuencia abundan.
Antes de viajar, todo el mundo sabe que se las va a tener que bancar, que no va a ser fácil “sobrevivir”. Sin embargo, cuando uno ya está en el país se da cuenta de que todas las cosas difíciles que uno imaginaba que tenía que pasar, no son nada en comparación a lo que en verdad se pasa.
Hablemos de cosas tan simples como hacer amigos, el volver a crear un círculo social, volver a crear relaciones, no saber en quién confiar, a quién recurrir, el hecho de estar solo y tener que dar manotazos de ahogado porque no conoces a nadie… nadie conoce tu historia. Al inicio, puede ser una de las cosas más difíciles en el proceso de “hacer una nueva vida”, sobre todo cuando son de esos días en los que te preguntas si en verdad es necesario pasar por todo esto para lograr tus metas, tener que abrazarte tu sola, consolarte y decirte a ti misma que todo va a estar bien, mientras lloras hasta quedarte dormida. ¡Vamos! Que esto no se trata de dramatismo, es lo que la mayoría de las personas pasan. Supongo que algunos pensarán: ¿Si tan difícil te parece, por qué no te regresas a tu país? – Bueno, la respuesta es simple, las cosas no son así de fáciles amiguitos.
Particularmente en países como Europa piensan que la mujer latinoamericana solo viene a casarse o a conseguir una visa y no es así, muchas queremos construir una vida mejor a la que teníamos en nuestros países, y eso lo queremos hacer estudiando, trabajando, esforzándonos. Es difícil tener que lidiar con personas que te juzguen por la educación que recibimos en Latinoamérica, que piensen que sólo estamos acostumbrados a limpiar, cocinar y trabajar para otras personas, que no tenemos aspiraciones. Aquí hago un paréntesis, porque hay algo que me gustaría aclarar: - Una vez estaba hablando con un amigo que me decía, no está mal limpiar una calle, no está mal limpiar casas, pero vamos, cuando eres pequeño no dices “de grande quisiera barrendero”. ¿Si entienden a lo que voy? Se trata de crecer, de ser mejor.
No digo que todas las personas sean iguales, sin embargo, hay un gran número que puede pensar así.
¿Qué haces cuando los demás te ponen en un estereotipo “latino”? y, que por el hecho ser de un país latino debes comportarte o ser de cierta manera? ¿O cuando las personas se aprovechan porque saben que no tienes a familiares a los que puedas recurrir? (dejaré esta parte sin respuesta, para que cada uno pueda dar una opinión)
A pesar de que los primeros meses pueden ser difíciles, si tienen una meta clara, no la abandonen, siempre se conoce gente en el camino, con la cuál puedes formar lazos de amistad muy bonitos, no necesariamente tiene que ser de tu país, o tener tu edad, busquen ayuda si en verdad la necesitan, no tengan miedo de hablar o callar abusos, siempre hay alguien que está dispuesto a ayudarte y brindarte una mano. Es muy valiente (de por sí) agarrar las maletas y tomar ese avión para buscar una mejor vida.
Así como algunas cosas de las que escribo, hay muchos más obstáculos por los que vamos a tener que pasar en el extranjero, pero que eso no nos detenga a seguir luchando por lo que queremos. Busquen maneras de conocer personas que les ayuden a crecer, que tengan sus mismos intereses, busquen la manera de ampliar su circulo social, intenten no quedarse encerradas en sus casas llorando y lamentándose (yo sé que es difícil).
Oportunidades para quedarse en el país hay muchas, sólo es cuestión de buscar, nunca se queden con una sola opción, si son buenos y dedicados en lo que hacen, las puertas se van a abrir solas, y habrá muchas personas que van a querer apostar por ustedes, pero para eso, primero tenemos que apostar por nosotros mismos.
1 note
·
View note