sagezt
sagezt
* 𝐓𝐑𝐀𝐆𝐄𝐃𝐘.
172 posts
sage, 26.always an angel, never a god.
Last active 3 hours ago
Don't wanna be here? Send us removal request.
sagezt · 3 months ago
Text
━━━   ∗  𝐓𝐀𝐒𝐊  𝟎𝟎𝟐   :    interrogatorio.   𝘌𝑁  𝐿𝘈  𝘗𝐸𝘕𝑈𝘔𝐵𝘙𝐴  𝐷𝘌𝐿  𝐶𝘖𝑁𝘍𝐸𝘚𝐼𝘖𝑁𝘈𝑅𝘐𝑂  𝐴𝘗𝑅𝘌𝑁𝘋𝐼́  𝑄𝘜𝐸  𝐸𝘓  𝘗𝐸𝘙𝐷𝘖́𝑁  𝐸𝘚  𝘜𝑁  𝐴𝘙𝑀𝘈  𝘋𝐸  𝐷𝘖𝐵𝘓𝐸  𝐹𝐼𝐿𝑂. ( @losavntos )
Se adentra en la sala de interrogatorios con semblante cansado y serio, no luce tan sereno como debería. Ha intentado descansar, ha intentado convencerse de que él no está pisando en falso. ¿El problema? La gente que quiere, sí. Camina tras su abogada, una mujer imponente pese a su baja estatura, de hebras rojizas y unos ojos verdes que a pesar de lucir dulces, podrían atravesarte como una flecha. Voltea a ver de soslayo a su abogada, y siente que es demasiado, que no la necesita, mas está ahí por insistencia de su madrina. Se hacen las introducciones pertinentes, se explica el proceso, y Sage solo guarda silencio en medio de asentimientos y monosílabos
¿𝐐𝐮𝐞́ 𝐟𝐮𝐧𝐜𝐢𝐨𝐧𝐞𝐬 𝐜𝐮𝐦𝐩𝐥𝐢́𝐚 𝐜𝐨́𝐦𝐨 𝐥𝐚 𝐦𝐚𝐧𝐨 𝐝𝐞𝐫𝐞𝐜𝐡𝐚 𝐝𝐞 𝐌𝐚𝐮𝐝𝐞 𝐂𝐚𝐝𝐝𝐞𝐥?
Primera y directo a la yugular. Traga con fuerza mientras mira el vaso de agua que se le ha ofrecido y frunce ligeramente los labios. “Mano derecha suena… ¿Cómo decirlo? Maquiavélico,” junta las cejas, observa al detective Jeperson con ojos entrecerrados y la cabeza inclinada. “Siempre le llaman de ese modo a los villanos en las películas— tienen un compinche mucho menos interesante al cual llaman mano derecha, porque lo cierto es que sin él, el villano no sería nada,” explica, y un detective se ve más fastidiado que el otro, pero para empezar, le tienen paciencia. “Maude confiaba en mí porque soy observador. Y le venía bien tener un ojo en el resto del alumnado, dadas las circunstancias. No me malentiendan,” se corta, alzando una mano ligeramente. “Nunca rompió el secreto profesional,” miente a medias. Las cosas que sabía Sage eran en base a descripciones sin nombre que Caddel le brindaba, para luego hilarlas a raíz de lo que veía y escuchaba por los pasillos. “Yo solo… Repetía lo que escuchaba en Pomona.”
¿𝐐𝐮𝐞́ 𝐭𝐢𝐩𝐨 𝐝𝐞 𝐢𝐧𝐟𝐨𝐫𝐦𝐚𝐜𝐢𝐨́𝐧 𝐫𝐞𝐜𝐨𝐩𝐢𝐥𝐚𝐛𝐚 𝐲 𝐜𝐨𝐧 𝐪𝐮𝐞́ 𝐟𝐢𝐧𝐚𝐥𝐢𝐝𝐚𝐝? 
Pestañea un par de veces y encoge los hombros. “Cosas banales,” resume, y sabe que no será suficiente para los sabuesos que tiene frente a sí, por lo que empieza a elaborar: “Pomona podría ser digno de un caso de estudio. El síndrome de la gente rica que lo tiene todo, pero aún así es infeliz, y siempre quiere más,” él no lo entendía, pues teniendo todos los bienes que su madrastra le otorgó, no podía comprender como para otros no simplemente no era suficiente. “Muchos de los que juegan a ser dioses entre humanos, en realidad, son bastante pequeños de autoestima,” alza las cejas, hombros suben y bajan de nueva cuenta. Mira de reojo a su abogada, que le da permiso a continuar por ese camino. “La gente en la universidad me subestimaba y veía hacia abajo por ser becado, lo cual fue decisión propia. No sabían que podía entrar a Pomona con el dinero de mi madrina, que de hecho estudió allí también. ¿Park Minji? Es como la Tomb Raider surcoreana,” busca bromear, y está seguro de que le habría arrancado una risilla a Varela si no fuese por la seriedad del momento. “Así que,” retoma entonces. “Me enteraba de muchas cosas porque me veían como un ente silencioso y sin memoria. No importaba si me enteraba de sus secretos, por cuenta propia o porque ellos los comentaran— No importaba que Sage Hwang supiera esas cosas. Era irrelevante.”
¿𝐐𝐮𝐞́ 𝐬𝐚𝐛𝐢́𝐚 𝐞𝐱𝐚𝐜𝐭𝐚𝐦𝐞𝐧𝐭𝐞 𝐬𝐨𝐛𝐫𝐞 𝐞𝐥 𝐞𝐧𝐭𝐨𝐫𝐧𝐨 𝐝𝐞 𝐀𝐦𝐞𝐥𝐢𝐚, 𝐎𝐭𝐢𝐬 𝐲 𝐀𝐥𝐟𝐫𝐞𝐝 𝐚𝐧𝐭𝐞𝐬 𝐝𝐞 𝐬𝐮𝐬 𝐫𝐞𝐬𝐩𝐞𝐜𝐭𝐢𝐯𝐨𝐬 𝐢𝐧𝐜𝐢𝐝𝐞𝐧𝐭𝐞𝐬?
Inspira algo de aire por su nariz, emitiendo solo un tenue sonido que apenas se alcanza a oír. “Bueno, no creo poder decirles algo que no sepan ya después de varias horas aquí, y otros tantos años arrastrando los casos,” se estira levemente en su asiento, los observa a ambos. “Que Alfred era odiado y amado por muchos,” intenta disimular el disgusto cuando menciona aquello. Recuerda a mejor amiga mirarlo con ojos brillantes, y el malestar se instala en su estómago. “Si me preguntan mi opinión, creo que más bien la gente le temía. Es mejor estar sentado alrededor del rey que recogiendo migajas con el último eslabón,” presiona labios entre sí. Sage no tenía una mala relación con Buchanan, tampoco era tonto. Siempre fue imparcial ante el público, pero tenía sus opiniones bien forjadas en el interior. “Amelia también tenía lo suyo. El mal carácter no la ayudaba mucho, y sé que eso le ganó bastantes enemigos,” relame inferior. “Y Otis… Demasiado bueno, demasiado justiciero,” presiona labios entre sí, como quien da a entender que ese fue su tiro de gracia. “Era mi amigo, así que perdonen si mi opinión está sesgada, y mejor tómenlo con pinzas,” se asegura de aclarar, a lo que su abogada lo mira y asiente imperceptible. “Creo que ese buen corazón fue el que lo llevó a la ruina.”
¿𝐄𝐧 𝐪𝐮𝐞́ 𝐦𝐨𝐦𝐞𝐧𝐭𝐨 𝐜𝐨𝐦𝐞𝐧𝐳𝐨́ 𝐚 𝐫𝐞𝐜𝐨𝐥𝐞𝐜𝐭𝐚𝐫 𝐢𝐧𝐟𝐨𝐫𝐦𝐚𝐜𝐢𝐨́𝐧 𝐫𝐞𝐥𝐞𝐯𝐚𝐧𝐭𝐞 𝐝𝐞 𝐞𝐬𝐭𝐨𝐬? 
Las cejas se encuentran ligeramente, como quien juzga de entrada la pregunta que recibe. “Lo dice como si hubiese sido algo… No sé, sumamente premeditado,” una risa monosílaba y apagada abandona sus labios. Mira a su abogada, luego a los detectives. “No sé qué clase de acosador están sugiriendo que soy,” pretende ofenderse, aunque si lo analiza bien, lo cierto es que siempre ha recolectado ese tipo de datos, la cosa es que nunca fue malintencionado. Además, accionar se amplificó cuando Maude Caddel le hizo sentir útil y especial, incluso con potencial como el de ella. “No es como que hubo un antes y un después, detectives. Como les dije previamente, soy una persona observadora, la gente habla. Simplemente era cuestión de unir las piezas…” deja la oración al aire, pero Varela y Jeperson lo miran expectantes. “Me gusta mantenerme al margen, detectives. No necesitaba esta información sobre ellos, simplemente llegaba a mí. Nunca hice nada con ella.”
¿𝐐𝐮𝐞́ 𝐥𝐞 𝐨𝐫𝐝𝐞𝐧𝐨́ 𝐌𝐚𝐮𝐝𝐞 𝐜𝐨𝐧 𝐫𝐞𝐬𝐩𝐞𝐜𝐭𝐨 𝐚 𝐥𝐨𝐬 𝐭𝐞𝐬𝐭𝐢𝐦𝐨𝐧𝐢𝐨𝐬 𝐝𝐞𝐥 𝐚𝐥𝐮𝐦𝐧𝐚𝐝𝐨? 
“¿Ordenar?” bufa, frunce el ceño. Sí, está molesto con Maude, tiene dudas y preocupaciones, pero de eso a echarla a las vías del tren había una brecha considerable. “¿Recuerdan lo que les dije del compinche del villano?” alza las cejas, y ahí nota que Jeperson empieza a perder la paciencia. Él se mantiene en su posición. Al final, el Valium estaba jugándole a favor. “Maude Caddel nunca me ordenó absolutamente nada. Teníamos una relación de mentora y alumno, al igual que con Clemente. A ambos los respeto y admiro mucho, así que tengan por seguro que no soy el peón que están insinuando,” pero está tan equivocado. Él no era más que una pieza en el tablero de ajedrez, igual que el resto de sus compañeros. Al final, becados o no, todos padecían la misma condición. Jeperson mira a Varela, parece que está a punto de gruñir, y luego vuelven a mirar al surcoreano.
¿𝐐𝐮𝐞́ 𝐢𝐧𝐟𝐨𝐫𝐦𝐚𝐜𝐢𝐨́𝐧 𝐝𝐞𝐜𝐢𝐝𝐢𝐨́ 𝐨𝐦𝐢𝐭𝐢𝐫 𝐨 𝐦𝐨𝐝𝐢𝐟𝐢𝐜𝐚𝐫 𝐞𝐧 𝐬𝐮𝐬 𝐫𝐞𝐩𝐨𝐫𝐭𝐞𝐬? 
Apenas puede pensar en formular una respuesta ante pregunta que lo arrincona un poco, pero la abogada se le adelanta al recordar: ‘Mi cliente está aquí en calidad de colaborador, y me temo que su pregunta está sugiriendo otra cosa’. Sage voltea a verla, y se siente un poco estúpido, por no haberse detenido a pensar en lo que ella objeta. “Perdonen,” dice después, en tono calmo, pero este es pura fachada. “¿Reportes?” acento se marca en desconcierto, se endereza levemente. “Solo estaba compartiendo con Maude las cosas que escuchaba, no estaba pasándole una bitácora con la vida de mis compañeros, detective. Maude Caddel era una persona de mi confianza, con la que podía charlar y contarle mis cosas,” una manera natural e inocente de llamarle a los pedazos de intimidad que escuchaba en los pasillos. 
¿𝐅𝐮𝐞 𝐮𝐬𝐭𝐞𝐝 𝐪𝐮𝐢𝐞́𝐧 𝐟𝐚𝐜𝐢𝐥𝐢𝐭𝐨́ 𝐥𝐨𝐬 𝐝𝐚𝐭𝐨𝐬 𝐩𝐚𝐫𝐚 𝐥𝐚 𝐜𝐫𝐞𝐚𝐜𝐢𝐨́𝐧 𝐝𝐞 𝐥𝐚 𝐜𝐨𝐚𝐫𝐭𝐚𝐝𝐚 𝐩𝐫𝐨𝐩𝐨𝐫𝐜𝐢𝐨𝐧𝐚𝐝𝐚 𝐩𝐨𝐫 𝐏𝐞𝐭𝐞𝐫 𝐋𝐚𝐧𝐝𝐫𝐲?
‘El señor Landry está siendo investigado por el cargo de Obstrucción, a diferencia de mi cliente, que como se aclaró antes, está aquí para colaborar con ustedes,’ una vez más, la abogada interviene ante la sorpresa de Sage por su astucia. ‘Si está insinuando que el señor Hwang es cómplice del acusado, entonces tendremos que detener el interrogatorio hasta que se le garantice inmunidad o se levanten los cargos necesarios’. Por poco la quijada se le cae al suelo, pero músculos están lo suficientemente adormecidos para que azabache se limite a tomar aire antes de relamer sus labios. La detective Varela es quien zanja la pregunta y luego la reformula, pregunta sobre su relación con el mencionado. “Peter Landry y yo no somos ni fuimos amigos, tampoco conocidos,” aclara, sin mencionar las veces que lo trató desde primera vuelta a Dover, así como pudieron cruzarse en la universidad. “Lo único que sé de él es que encontró el cuerpo de mi mejor amiga,” si lo dice con malicia o no, eso no es detectable, pero no se lo puede tragar, le sabe amargo. Es ahí que su abogada se tensa, como quien quiere reprender a un niño que acaba de rebelarse, y por eso aclara que Sage no contestará más preguntas al respecto debido al conflicto de intereses.
¿𝐐𝐮𝐞́ 𝐬𝐞𝐜𝐫𝐞𝐭𝐨𝐬 𝐟𝐮𝐞𝐫𝐨𝐧 𝐩𝐚𝐫𝐭𝐢𝐜𝐮𝐥𝐚𝐫𝐦𝐞𝐧𝐭𝐞 𝐝𝐞𝐥𝐢𝐜𝐚𝐝𝐨𝐬 𝐝𝐮𝐫𝐚𝐧𝐭𝐞 𝐬𝐮 𝐠𝐞𝐬𝐭𝐢𝐨́𝐧?
“Nada de lo que hablaba con Maude o en general era precisamente un secreto si, al final, llegaba a mis oídos,” por supuesto no menciona el apodo que se le otorgó en años universitarios, y no vuelve a mencionar la parte en que sentido afilado lo hacía conocedor, se aferra solo al hecho de aquellos que decidían compartirle cierta información. “Supongo que no es nada nuevo si les menciono que Amelia Melbourne era bastante conflictiva, los problemas que tenía con su hermano Otis— venga, que ni se esforzaban en disimular. Podías andar por los pasillos tranquilamente y te encontrabas a Amelia diciéndole hasta de lo que se iba a morir,” y se ve que le molesta decirlo, porque sentía empatía por Otis. Hace una pausa, luego sigue: “O el hecho de que tenía una relación secreta con Buchanan,” encierra palabras con sus dedos imitando unas comillas, es medio irónico cuando sus labios se estiran en una lánguida sonrisa. “¿Ven que nada es secreto, mucho menos a los diecinueve o veinte años?” se burla de manera falsa, como con pereza. “Al final son cosas banales… Hasta que ya no lo son.”
¿𝐓𝐮𝐯𝐨 𝐜𝐨𝐧𝐭𝐚𝐜𝐭𝐨 𝐝𝐢𝐫𝐞𝐜𝐭𝐨 𝐜𝐨𝐧 𝐥𝐨𝐬 𝐦𝐢𝐞𝐦𝐛𝐫𝐨𝐬 𝐝𝐞𝐥 𝐜𝐢́𝐫𝐜𝐮𝐥𝐨 𝐬𝐨𝐜𝐢𝐚𝐥 𝐝𝐞 𝐀𝐥𝐟𝐫𝐞𝐝 𝐁𝐮𝐜𝐡𝐚𝐧𝐚𝐧 𝐨 𝐝𝐞 𝐎𝐭𝐢𝐬 𝐌𝐞𝐥𝐛𝐨𝐮𝐫𝐧𝐞? 
Sage asiente, es solo una vez, firme y sin dudar. “Ambos,” sentencia, entrelazando sus dedos entre sí sobre su regazo. “Me han dicho que soy bastante, huh, ¿camaleónico? O como a muchos otros les gusta llamar, hipócrita,” alza las cejas, lo dice con ligereza como si no le importara. Lo hace un poco, pero también se convence de que ha sido instinto de supervivencia. “Me mezclaba bien entre la gente, supongo. Soy bueno escuchando, y en mis buenos días me atrevería a decir que soy encantador,” sonríe, aquello solía ser verdad en cierta medida. Hoy por hoy, no se reconoce. “Pero Otis era mi amigo— mi amigo de verdad, quiero decir. No era solo una persona que saludaba entre clases o después de ellas, era alguien con quien compartía gustos y secretos,” rememora con suma sinceridad, y por un instante siente que los ojos le pican y media luna flaquea. Todo eso que ha querido minimizar para mitigar el dolor, se le escapa de las manos. ¿No se suponía que esa pastilla tenía que apagarle los sentidos? “Albertina Solanas era mi mejor amiga, y—” el labio inferior le tiembla tan pronto como formula oración, agacha la cabeza avergonzado. Por su mente se reproduce la memoria de sonrisa encantadora y destellante, contagiosa, saludándolo desde el otro extremo del pasillo con un escandaloso alardeo en español. El corazón se le rompe en un millón de pedazos y un sollozo se le escapa cuando intenta volver a hablar. La abogada coloca una mano en el brazo de Sage, le da un apretón y pide un minuto para que se recomponga, no sin antes aclarar que apresuren ya que no está en las mejores condiciones para continuar por mucho más. 
¿𝐄𝐬𝐭𝐚́ 𝐝𝐢𝐬𝐩𝐮𝐞𝐬𝐭𝐨 𝐚 𝐡𝐚𝐜𝐞𝐫 𝐮𝐧𝐚 𝐝𝐞𝐜𝐥𝐚𝐫𝐚𝐜𝐢𝐨́𝐧 𝐛𝐚𝐣𝐨 𝐣𝐮𝐫𝐚𝐦𝐞𝐧𝐭𝐨?
Aprieta en zurda el pañuelo desechable que se le ha ofrecido, y guarda silencio un par de segundos con mirada recelosa sobre los detectives. Su respuesta instantánea hubiese sido positiva, sin dudar un solo segundo. “¿No es eso lo que estaba haciendo ahora? Lo lamento, mis únicas experiencias con esto han sido viendo Criminal Minds o en medio de un shock,” es irónico una vez que se siente quebrado, y dadas las circunstancias, Varela suspira y lo mira como si esperase convencerlo de que les ofrezca una mejor respuesta. Hwang hace lo mismo, pues su perspectiva ha cambiado. Sí, quiere justicia para Otis Melbourne, quiere que Amelia pague por las cosas que dijo en ese video pero sobre todo por lo que ha hecho. Sin embargo, la última conversación con Ellen lo hace dudar, la actitud de Jesaiah lo confunde. No está seguro de poder seguir pretendiendo pararse en una zona gris. ‘La pregunta es irrelevante, no aporta a la investigación, así que si no hay nada más que agregar…’ la abogada recoge su carpeta y su portafolio, haciéndole una señal al surcoreano para que se prepare para irse. ‘Lo llamaremos de nueva cuenta de ser necesario, señor Hwang,’ le informa Varela, a lo que azabache asiente y se levanta para salir de la sala.
Camina cabizbajo, lúgubre, aturdido. La de hebras rojizas se voltea a encararlo una vez que se alejan de la gente y alza el mentón para mirarlo. “Sage,” lo llama, y él la observa en silencio, preparándose para lo que viene. “Necesito que me digas todo lo que sabes,” demanda de una manera casi maternal. “No puedes seguir con tu juego del velador de secretos. Minji no me va a perdonar si terminas ganándote cargos por tu necedad, y no voy a perder a mi esposa por tus caprichos. ¿A quién estás protegiendo?” Sage mira a ambos lados, relame sus labios y suspira. “Te veo después, ¿vale? Saluda a mi madrina.”
4 notes · View notes
sagezt · 3 months ago
Text
Tumblr media
"lo siento," es sincero, sale natural, en lo que vista cansada sigue el camino del gato abandonando la escena. se siente ajeno, fuera de su cuerpo, y lentamente devuelve su mirada a la morena. "lo siento, yo—" relame sus labios, y despacio observa la oficina que le resultaba tan familiar. marrones lucen apagados, sin vida, y es que un poco es la única manera en que sage se ha sentido las últimas semanas: como un alma errante. se adentra un poco más, sus dedos acarician uno de los muebles y recoge un poco de polvo, que le resulta extraño para lo pulcra que era maude. "quería, eh..." ¿qué quería? encontrar a maude allí, que le diga que todo ha sido un mal sueño, que estará bien. en su lugar, encuentra a izzie, y aunque le agrada, es evidente que no le emociona como la fantasía. "no sé qué quería," confiesa. recuperar un poco de su esencia supone, antes de que esta se desvanezca con ella.
Tumblr media
despacho de maude es quizás único lugar en propiedad de los caddel que no está infestado de personas, por esa razón se posiciona como refugio en el que se esconde junto a mascota. cuando la puerta del mismo se abre, felino protesta en forma de maullido y se levanta de su lugar en el regazo de izzie para luego escabullirse por la puerta nuevamente. “ acabas de espantar a mi apoyo emocional. ” nota, aunque no intenta recriminar, es más bien resignación lo que siente.
76 notes · View notes
sagezt · 3 months ago
Text
Tumblr media
“hazlo doble,” pide en un tono irónico que busca deslizar una broma en medio de fúnebre situación. “no debo beber,” informa, pero igual se acerca y observa las copas. está cansado de llorar, pero también de no sentir nada más que nubosidad cuando lo hacen tomar calmantes. esta vez nadie lo obligó, ya no está maude. "¿de qué otra forma se supone que lleve esta mierda, entonces?"
Tumblr media
al sentir presencia tras ella, gira sólo el rostro para encararle apenas. "¿te sirvo uno también?"
63 notes · View notes
sagezt · 4 months ago
Text
Tumblr media
ceño se frunce instantáneamente, genuinamente descolocado por lo que escucha. "¿cómo te atreves?" suelta sin filtros, anonadado, completamente horrorizado. la simple sugerencia, incluso en medio de discusión, le parece una abominación, completamente ajena a lo que es él como persona, a lo que son ellos como vínculo que se suponía era inquebrantable. de a poco, se da cuenta que esa eternidad y esa incondicionalidad empieza a flaquear, se cuartea y se desmorona cada vez más rápido. en el fondo, su lado cuerdo y sensato, sabe que todo es debido a lo mal que lo han pasado, al trauma compartido. sin embargo, cada vez se siente más difícil mantenerse a flote y seguir sosteniéndose mutuamente. niega con la cabeza, porque aunque suele ser pasivo en ese tipo de encuentros, se rehúsa a que ortega se lleve consigo la idea de que todo se reduce a un luto que no ha sabido sobrellevar. la inquisitiva remueve algo en él, es culpa, y por eso expresión parece ablandarse con facilidad y rapidez, los ojos humedeciéndose en el proceso. nunca se había atrevido a herir a menor con sus palabras, siendo esta la primera vez que cruza los límites y se arrepiente al instante. no obstante, ella continúa, y entonces sage siente todos esos sentimientos negativos volver a la superficie. chasquea los labios, aparta la vista en lo que una risa monosílaba y ácida los abandona. "tu novia," repite, músculos de su cara endureciéndose nuevamente a pesar de que lágrimas siguen destellando en marrones. "jesaiah, vesper no es tu novia," le recuerda, volteando de vuelta a ella. no hay rastros más que de resentimiento y decepción. "eres su sucio secretito otra vez, ¿no te das cuenta?" escupe, irritado, con una rabia creciente hacia la inglesa y sin querer, decantándola en dirección a su mejor amiga. "¿quieres quedarte a esperar a que vuelva a dejarte por un tipo que le regale un anillo de compromiso? bien, disfrútalo entonces," se endereza de un tirón, apartándose un paso. "pero no actúes como si esto no fuese más que cariño y preocupación," se señala a sí mismo, y quizás peca de egoísta. quizás, si fuese otra persona la que estuviese en el corazón de castaña, le daría otra oportunidad, pero se trata de una que sencillamente no puede perdonar. "puedes estar tranquila. no vas a saber más de mí. no voy a quedarme a ver cómo te lanzas directo al abismo," ahí, su voz se quiebra, pero intenta disimularlo cuando suspira con pesadez, con molestia, como si todo el cuerpo le doliera. da un paso más alejándose de ella, se dirige a la puerta. siente que deja parte de su vida en esa habitación, y no sabe cuántas pérdidas más pueda soportar antes de simplemente ceder.
Tumblr media
el giro que toma la conversación no lo anticipaba, incluso con la hostilidad que detecta por parte de antagonista; las nauseas que invaden su sistema son automáticas, la deja sin palabras y francamente hasta se plantea la posibilidad de echarse hacía atrás por temor a qué pudiera decir. se acomoda en su asiento de forma automática, justo como lo hizo durante su interrogatorío cada vez que sabía que iba a flaquear, pero a su costado no tenía un abogado que podría evitarle el mal trago; estaba completamente sola bajo el juicio que mejor amigo al parecer ya había empezado en contra de ella. verdosos se mantienen fijos en él, el cuerpo le arde en cólera que jamás había sentido bajo ningún ámbito hacía él; la estaba lastimando con toda la intención. "desde que albertina murió lo único que haces una y otra vez es juzgarme a diestra y siniestra. a veces pienso que preferirías que ella estuviera aquí y yo no." timbre es quedito, así como él no tiene filtros al hablar, se permite expresarse sin analizar lo que podría desatar, ahogo de corazón herido por frialdad que no conocía y que ciertamente la enfermaba. "pensé que era tu forma de llevar el duelo, pero ya no puedo dejarlo pasar." porque hasta ella tenía un límite, se sentía incluso un poco de pesar en timbre conforme pronunciaba. no es de echar cosas en cara, sabe que por más que algo en ella le exija reclamarle sólo para igualarle la energía, es capaz de canalizarlo; se permite sentir nada más, pero se traga propio veneno. primera pregunta viene, se queda en completo silencio porque pese a que fe en británica sea ciega, sabe que azabache tiene un punto; claro que la segunda se ve que la descoloca por completo. "¿te sientes mejor ahora, sage?" espera un par de segundos cuando devuelve, le está costando de forma sobrehumana no romperse ahí mismo. la sola idea de imaginarse a británica en tal posición, le revuelve mucho más el estómago, le arde el pecho y cólera sigue acumulándose sin tener una dirección todavía. "no sé qué quieres de mí." se pone de pie, acercándose lo suficiente para manterle la mirada incluso con la mesa de por medio. "lo único que te voy a pedir es que de ahora en adelante, por favor, tengas el nombre de mi novia fuera de tu boca." suena firme pese a que orbes delatan que no es su verdad, que está lo suficientemente herida y que se está obligando a encararlo ahí mismo. "aunque sea por el cariño que me tienes o tenías." porque francamente, no era protección lo que sentía, era como si justamente eso fuera sido lo necesario para otra vez empujarla a donde estaba hace un mes.
23 notes · View notes
sagezt · 4 months ago
Text
Tumblr media
no responde, simplemente se limita a negar con la cabeza. es un movimiento apenas perceptible, ligero, casi dubitativo porque ni siquiera él sabe a dónde quiere llegar con eso. no quiere que aquello lastime vínculo entre ambos, que hiedra venenosa eche raíz en medio de cariño que florecía desde hacía algunas semanas. le gustaba vivir, aunque fuese un rato, en esa línea temporal alterna, ese espacio adyacente donde solo eran él, ellen, y esa complicidad e intimidad nacientes. ojalá no tuvieran que preocuparse por esa estúpida red de mentiras y traiciones. puede percatarse de la evolución en psique femenina, puede notar que empeora rápidamente y entonces empieza a negar de a poco y cada vez más marcado. "el," la llama, es suave, suelta agarre para atrapar con cuidado su rostro y hacer que lo mire, palmas envolviéndola con suma delicadeza, el pañuelo en medio de la que está herida. "oye, oye," intenta hacer que vuelva en sí, que se enfoque en su voz tersa y discreta. "no pasa nada— estoy aquí, no voy a irme. no voy a dejarte, ¿bien?" acaricia con suma delicadeza el contorno de su mejilla, pulgar trazando con cuidado casi como si temiera magullar blanquecina piel. "estás bien, te tengo," entonces la envuelve en sus brazos, la protege contra su cuerpo y la aprieta despacio, besándola en la frente y dejando presionados sus labios con ligereza allí mismo. "lo que sea que haya pasado esa noche," empieza, apartándose para mirarla. "sé que habrás hecho lo correcto. no voy a juzgarte— y no tienes que decir nada si no quieres,” concede, sosteniéndola por la cintura mientras acaricia despacio por encima de la ropa. “solo…” relame sus labios, toma aire y agacha la mirada solo un par de segundos antes de volver a par de zafiros. “estoy preocupado por ustedes,” por ella, por jesaiah, por sereia. “quisiera poder hacer algo para resolverlo”.
manos se mantienen en su lugar, junto a la ajena y en su mejilla. en la última, dedica una ligera caricia apenas con el pulgar. palabras ajenas le hacen asentir, aunque cuestión que se plantea después le descoloca un poco. "yo también." admite, y es allí, en mirada que le dedica, que demuestra cuánto necesita que todo llegue a fin, a conclusión, que pueda acostarse por las noches sin pensar en cómo amelia se hizo dueña de seis años de su vida. quiere olvidar el tacto de la sangre que tocó, de todo lo que ella dijo, y si pudiera hacerlo de pomona, también lo haría. parpadea por un momento, pensativa, inclinando rostro a un costado como queriendo adivinar qué ocurre en mente ajena. "¿qué harás con la información?" pregunta no sugiere que esté juzgando, en realidad, es curiosidad genuina la que promueve inquisición. en vínculo, jamás habían tocado el tema del círculo, y de su parte, había sido con la esperanza de evitar manchar relación con la oscuridad del mismo. o más de lo que ya lo hacía. "esa noche—" se toma un momento para tomar una profunda inhalación. cuesta hablar del mismo por el simple hecho de que mente no hace las paces con la vergüenza y arrepentimiento que suceso trajo consigo. incluso si amelia demostró que no se lo merecía, ellen aún se siente ridículamente cobarde, pero siempre ha sido más la presa que otra cosa, y lo sabe muy bien. garganta se cierra, voz se pierde, más que revelar aquello que le atormenta, lo que de verdad teme es su reacción. entiende que opiniones ajenas saben calar en psique, pero es la ajena la que preocupa sobre todas las demás. se pregunta si va a juzgarla, si va a darse cuenta que valentía no es una cualidad suya, si de pronto le parecerá repulsivo que mano que le toca, es la misma que tocó sangre, si va a alejarse, si él— respiración es corta, busca interrumpir espiral de pensamientos en el que es evidente que está por caer y trata casi de forma desesperada de encontrar ancla en cualquier cosa, lo que sea, y lo hace de pañuelo que siente bajo tacto. índice se enfoca en textura, en color, y cuando vuelve a hablar, pareciera que ni siquiera está allí. "estábamos tan felices, ¿sabes? no sabíamos que ser las señoritas de artemisa iba a ser tan diferente a como lo plantearon. entonces llegó ella y estaba tan llena de– de–" voz se entrecorta, es trémula su respiración, y entonces entiende que no puede hacerlo. siente la mano sucia incluso si está completamente limpia. "no quiero recordarlo." o, más bien, es incapaz de hacerlo sin que todo salga por su boca sin mínimo filtro. eso era lo peligroso de la confianza, de sentirse tan segura en espacio que comparte con él, porque se siente justo como un libro abierto por completo, cada capítulo a su disposición, sin importar que existan páginas que quiera mantener sólo para sí. "sage, yo–" se siente presionada, asfixiada, pero intenta recomponerse, organizarse de vuelta, porque si entra así a interrogatorio, sabe que se la van a comer viva. "lo siento, dame un segundo."
23 notes · View notes
sagezt · 4 months ago
Text
Tumblr media
entrecejo se arruga cuando escucha cuestionamiento, se muerde el interior de la mejilla para no emitir respuesta tajante, pero de todas formas es muy tarde. contraria lo conoce lo suficiente para saber que algo está mal, aunque ya venía arrastrándose desde la última vez que hablaron. su estómago se revuelve de solo verla cerca de británica, le recuerda a años atrás cuando sabía que su mejor amiga no estaba bien y a blonda no parecía importarle revolver su vida una y otra vez. solo puede pensar que va a suceder de nuevo. la mira con dureza, fastidiado por el camino que toma la conversación pese a que él mismo lo dirigió allí al mencionar a tercera. “un poco lo eres,” señala sin filtro, sin cuidar lo que aquella frase podría provocar. “cada vez que estás con ella cambias,” quizás su opinión no es muy objetiva tomando en cuenta que cada vez que blonda aparece, él desaparece. se levanta y apoya las manos en la mesa para inclinarse sobre la misma y verla a los ojos, su mano se mueve sobre una de las hojas y expande el tinte rojizo. “estás con vesper, ¿huh? — ¿estamos hablando de la misma vesper que no avisó la desaparición de albertina solanas, tu mejor amiga?” se escucha molesto, resentido. no le agradaba en lo absoluto y especialmente eso era algo que nunca le perdonaría. “¿o es la vesper que hace unos días fue a lo de los caddel y estaba follándose con la mirada a nola wainwright?” escupe al final, sin medir las consecuencias de sus palabras, sin pensar en nola y el vínculo que mantiene con ella, más bien dejándose llevar por el hastío que siente al ver a jesaiah perder el suelo por una mujer que él considera el mismísimo diablo.
Tumblr media
gesto de una se le cuela en la piel, se nota por la forma en la que entrecejo se frunce y mirar rápidamente delata que no le agrado tal accionar; siente gelidez recorrerle toda la espina dorsal y un cosquilleo bastante molesto en el estómago. "¿no sabes? las personas no sangran así y ya, sage." reprocha en automático, sin apartarse pese a que percibe que probablemente eso es lo que quiere de ella. iba a responder como de costumbre indagación sin pensar en segundas intenciones hasta que segundo cuestionamiento la deja desconcertada, obligándola a quedarse en silencio por un par de segundos. "¿por qué lo dices así? suena a que me estás acusando de mentir." resopla a la defensiva más rápido de lo que le gustaría, marcando un poco de distancia para dejar avellanados clavados en él. "me tratas como si fuera una completa extraña desde que estoy con vesper."
23 notes · View notes
sagezt · 4 months ago
Text
Tumblr media
se deja manejar a su antojo, se limita a observarla mientras ella se encarga de limpiar su mano. duele, se siente como si pellizcaran de adentro hacia afuera, pero la pesadez en sus hombros es más que suficiente para que sensación punzante pase a segundo plano. "lo sé," dice por lo bajo, mirándola fijamente aunque su mente viaje a mejor amiga fallecida, a lo traumatico que es el proceso luego de una pérdida así, y el como esto vive como un fantasma que lo acecha por las noches cuando se le dificulta dormir, y en los peores casos, se cuela en sus sueños, corrompiendo el único sitio donde puede volver a ver y abrazar a albertina solanas. cierra su palma despacio una vez que ellen la envuelve con el pañuelo, es su forma de mantener mano foranea sobre la propia como si temiera que se le escapara. es, también, un gesto de agradecimiento. luego, su rostro se inclina para afianzar la sensación de palma acunando su mejilla, intentando reconquistar esa calidez que había estado ausente los días anteriores por culpa suya. "quiero que todo acabe," dice sin muchas vueltas, encogiendo los hombros. "sea como sea," sí, quiere que encuentren al verdadero culpable, pero por momentos duda. "ellen," pronuncia su nombre como quien se prepara para decir algo arriesgado. "esa noche..." hace una pausa, relame sus labios y mira el suelo. por si acaso, eleva diestra para sostener su mano, impidiendo que vaya a alejarse cuando vuelve a mirarla. "necesito que me digas qué viste," no suena a una exigencia, mas bien hay deje de preocupación en vocablos. "necesito saber si... uhm— necesito saber si estamos en el mismo canal," y es la primera vez que sage se plantea la idea de proteger algo más que su integridad y responsabilidades. es la primera vez que no actúa en base a lo que maude caddel le pide, como el títere que recién descubre que siempre ha sido.
Tumblr media
nada grave. palabras se repiten en su mente, una y otra vez, cuando mirada consigue encontrarse con las culpables del sangrado. medialunas llaman su atención, y ni siquiera duda en tomar cuidadosamente su muñeca, grifo que abre en el proceso para poder limpiar el rastro del mismo. gesto es leve, gentil, cuidadoso de evitar causar malestar. “estoy—no sé cómo estoy.” admite, elevando la mirada para encontrarse con la del contrario. su presencia calma, la ancla, y es allí que puede tomar una profunda inhalación. “odio este lugar.” admite, e incluso cerrando corriente de agua, no lo suelta. acciones son cariñosas cuando se hace con pañuelo en el bolsillo para cubrir su herida. deja una caricia con los pulgares en parte de palma que está sana. “siento que van a hurgar hasta lo que no tiene que ver con el caso y—” vuelve labios fina línea. atención en él, diestra se alza hasta posarse muy suavemente en mejilla, como apenas el fantasma de un roce. “¿tú c��mo estás?” quiere saber, a pesar de que situación en su mano le da toda la explicación que necesita.
23 notes · View notes
sagezt · 4 months ago
Photo
@jesaiahs.
Tumblr media Tumblr media Tumblr media Tumblr media
PRETTY LITTLE LIARS (2010-2017)
512 notes · View notes
sagezt · 4 months ago
Text
Tumblr media
menea la cabeza con ligereza, humedece sus labios en lo que lleva mirada hacia la puerta y busca reunir fuerzas para levantarse e ir a buscar agua, o uno de esos horrorosos cafés que ofrecen. "no aún," suelta con simpleza, chasqueando levemente sus labios tras hacerlos una línea y dirigir su mirada al ojiazul. "dime, jules," se endereza un poco para inclinarse en su dirección, buscando complicidad con su amigo. "vas a decir la verdad, ¿cierto?" pestañea despacio, mirándolo. "no pueden seguir saliéndose con la suya," la forma en la que se expresa es como si fuera conocedor de la verdad absoluta, y es que un poco está convencido de su propia postura. suspira entonces, volviendo a caer sobre el respaldo de su silla. "deseo que esto se termine ya, joder".
Tumblr media
hacen contacto visual solo por un segundo antes de esquivar la mirada hacia el frente. se relame los labios, ligeramente nervioso, pero triunfal ante ansiedad que usualmente conlleva. “ bonita forma de llamarlo, ” comienza, “ pero no. aún no. ” se vuelve consciente de que otra vez se está rascando las cutículas de las uñas, y de detiene antes de hacerlas sangrar, casi encajando estas en los jeans que llevaba puestos. vuelve su mirada hacia él y deduce: “ me imagino que tú tampoco. ” y hace de sus labios una línea, inexpresivo, no habían palabras que fueran adecuadas para un momento como el que vivían.
23 notes · View notes
sagezt · 4 months ago
Text
Tumblr media
"nada grave," asegura, volteando a ver su mano para observar las marcas de uñas enterradas debido a la ansiedad, y luego la cierra en un puño que duele, pero no lo suficiente para quejarse en voz alta. alza la vista para encontrarse con mirada ajena, y rápidamente su expresión se suaviza. asiente despacio, cediendo por completo a lo que sea que ellen sugiera, porque la encuentra como espacio seguro en medio de la tormenta. se toma su tiempo en lo que guarda archivo en su maletín y lentamente se levanta de su asiento para caminar con ella al sanitario que le parece más solitario. no se fija en el letrero, no respeta reglas. "no es nada, en serio," reitera para no preocuparla, alzando zurda para revelar carne magullada que aún tiene rastros de la sangre que goteó previamente. "¿estás bien?" se enfoca en ella, marrones buscándole la mirada para intentar leerla mejor. "he estado preocupado por ti".
Tumblr media
menea apenas la cabeza en una negativa. “no aún.” admite, pero desconoce cuánto falta para que sea su turno, y cada segundo que falta parece cerrarse en su cuello, asfixiándola. mirada desciende a mancha que destaca sobre blanco. “¿qué ocurrió?” busca saber, preocupación haciéndose mayor que la ansiedad. “deberíamos poder limpiarla en alguno de los baños.”
23 notes · View notes
sagezt · 4 months ago
Text
Tumblr media
risa nasal y apagada se hace presente, pero semblante no luce ni cerca de sentir verdadera comicidad. sage, una vez más, no siente mucho más que desventura. "oh, no— solo son... textos," menea la cabeza con pesadez, cierra la carpeta que contiene declaración escrita y apenas le devuelve la mirada. "me refería al interrogatorio," entonces sí endurece la mirada. "habrá sido un caos ponerse de acuerdo con tus amigos," acusación sale sin más, producto de la ligereza que tiene su lengua y no sabe si adjudicar al calmante o al hartazgo, quizás a algo en el medio de ambos.
Tumblr media
' ¿con sangre? ' inquiere, no puede evitar fijar la mirada en el carmín empapando pulcritud de papel, la sensación de incomodidad fijada en el nudo en la garganta qué únicamente va tensándose con el pasar del tiempo y la ligereza de cabeza tampoco pareciese auxiliar demasiado a la situación. ' mi abogada no me dijo qué debía rellenar formularios así. ' acota, despacio, no sabe sí quedarse, pero al final tampoco hace mucho por moverse.
23 notes · View notes
sagezt · 4 months ago
Text
Tumblr media
omo un gesto impropio de hwang, tira de su brazo para soltar el agarre contrario, pero instantáneamente siente culpa. los ojos le pesan, suspira y pretende entonces que es vergüenza y no resentimiento lo que lo lleva a apartarse. “no sé,” responde vagamente, sin mencionar que se clavó uñas tan fuerte que atravesó carne hasta hacerla gotear. “hm,” traga saliva y no la mira hasta pasados unos segundos. “¿y cómo estás?” entonces marrones viajan hacia ella. “¿te pusiste de acuerdo con tu novia?” frialdad envuelve pregunta que hace en menor volumen cuando se endereza para generar cercanía. rezagos de decepción en semblante confunden si hay mala intención o preocupación en vocablos. "no se veía contenta cuando salió de la sala de interrogatorios".
Tumblr media
se piensa al menos tres veces si ir hacía masculino, términos entre ambos no eran los mejores pero se obliga a dejarlo atrás; no era de tener un orgullo pesado, incluso cuando este pudiera estar herido por reciente intercambio. "¿cómo te hiciste eso?" es automático para ella entonces ponerse a su costado, tirar de siniestra para chequearla y suspirar. "todavía no me llaman."
23 notes · View notes
sagezt · 4 months ago
Text
Tumblr media
mirada vacía observa los papeles que su abogada le dejó sobre el escritorio, la tintura color bermellón manchando una esquina luego de que sangrado en palma izquierda contaminó la pulcritud del mismo. "supongo que habrán copias," suspira con tono plano, casi fantasmal, en lo que mira a interlocutor. "¿ya firmaste tu sentencia?" murmura agotado, echando la cabeza ligeramente en lo que ve a su nueva compañía.
23 notes · View notes
sagezt · 4 months ago
Text
Tumblr media
━━━    bienvenido,    SAGE HWANG.    ›    capítulo    nueve.
8 notes · View notes
sagezt · 4 months ago
Photo
Tumblr media Tumblr media Tumblr media
I gotta admit, for a while there I was worried you were walking a fine line. But you knew exactly what you were doing. You should be happy. This is the best possible outcome. I mean, tell that to Adriana. She still has to live with the scars, the constant worry of, you know, something going wrong and him walking free. Stella — you did all you could do. And you did good.
CHICAGO FIRE — 10.17 ‘Keep You Safe’
402 notes · View notes
sagezt · 4 months ago
Text
Tumblr media
aflicción se apodera de mirada cuando posa almendrados sobre ella, escuchando su nombre que en esta ocasión, suena desgarrador para quien suele percibirlo dulce y melódico de sus labios. traga con fuerza una vez más, por mucho que intente sintiendo que no consigue deshacer el nudo en su garganta. le afecta ver cómo está tan cerca de tocarlo y encuentro no se concreta, siente cómo se le parte un poco el corazón y por eso agacha la mirada una vez más. últimamente no puede mirarla a los ojos. "yo..." no sé cómo hacerlo, quiere decir, pero la vergüenza que lo carcome le impide completar la oración. la observa y empieza a negar, cada vez con mayor firmeza. "ellen, no. no quiero que seamos amigos," ¿cómo volver a algo que nunca existió? nunca fueron amigos antes de aquél juego de adolescentes que los llevó a donde están parados ahora. ¿cómo intentar retroceder sobre sus pasos cuando ya la ha tenido entre sus brazos al dormir? ¿cómo cambiar la lente con la que la mira cuando ya sabe cómo luce al despertar y a qué saben sus labios? "no sé cómo hacerlo— no sé cómo perdonarme," explica, cerrando los ojos un momento en exasperación que no le dedica a nadie más que a sí mismo. "te veo y me detesto por traicionar tu confianza. sé que me perdonaste, pero no puedo evitar pensar que... quizás no debiste hacerlo," junta las cejas, los ojos se le empiezan a aguar. "te prometí que no volvería a pasar y te he cumplido, pero... dios, ¿de verdad no me odias ni un poco?" pregunta sale de sus labios casi con desesperación, casi como si quisiera una respuesta afirmativa. se acerca un paso más, inclina el rostro para mirarla. "eres demasiado buena," le hace saber. "y siento que no me merezco eso," ojos se pasean por cada una de sus facciones, un tanto temeroso de no volver a tenerlas así de cerca nunca más. "realmente me gustas— mierda, me gustas demasiado, nunca antes había... yo..." relame sus labios intentando encontrar palabras correctas. "lo que siento por ti es completamente nuevo para mí, el. nunca quise a alguien como a ti," confiesa por fin, conectando mirada con ajena. "y estoy tan asustado de arruinarlo que termino haciéndolo una y otra vez".
☀️
resulta difícil navegar por cada uno de los pensamientos que sage pone sobre la mesa. entendía, más o menos, de antemano, lo que en su mente podía habitar, y también comprende que debe haber mucho más de lo que él deja saber. si pudiera hacer con ello lo mismo que hacía para ayudarlo a dormir, lo haría. si existiera una forma de dar descanso a esa tristeza que parece ser también una característica únicamente suya, lo haría sin dudarlo. quiere decir eso, pero el no quiero terminar la deja sin aliento. en ningún momento consideró aquello, o alejarse, como una solución real. está cansada de huir, como lo está de dejar ir. alza mentón cuando cercanía lo requiere, porque para ese punto, es impensable prestar atención a cualquier otra cosa. y —ahí está. el verdadero monstruo en el armario. “sage…” su nombre se pronuncia con tal suavidad que apenas es capaz de escucharlo. eleva la mano hasta la altura donde sabe que su corazón está, oído lo ha notado en varias oportunidades durante convivencia en nueva york. no lo toca, teme cruzar otro límite, pero la deja allí, flotando sobre la zona. “te beso y te toco como lo hago porque yo te perdoné.” a los dos, realmente, por cosas en su totalidad distintas, pero seguía siendo un perdón. “te perdoné porque me gustas, y me gustó lo que hay aquí.” índice le señala corazón antes de permitir a extremidad caer a un lado de su cuerpo. “pero no importa nada de lo que yo haga, o te diga, si no te perdonas tú mismo.” reconoce que esa parte del trabajo era únicamente suya. de cierta forma, sin embargo, lo entiende—al menos, de cierta manera. humedece los labios, niega apenas con la cabeza. “yo tampoco quiero terminar.” admite, incluso si aquello que los une no tiene un nombre en específico, ni está segura de lo que realmente es. sólo sabe que quiere estar ahí. “pero si prefieres que sea una amiga para ti, puedo serlo, ¿sabes? no tienes—no tienes que forzarte a algo que no sientes bien.” lo ofrece en el caso de que sea algo que esté pensando y no quiera decirle. “me gustas mucho, sage, de verdad, pero que te sientas cómodo y bien es mucho más importante.” al menos, para ella, es así. es mínima la sonrisa que curva labios. “¿qué quieres hacer?”
7 notes · View notes
sagezt · 4 months ago
Text
Tumblr media
se queda en silencio unos segundos, evidenciando que no está siguiendo al pie de la letra las instrucciones, pero es que realmente no se ha preocupado por ese tipo de cosas los últimos días. solo piensa en maude, en la traición que siente quemarle la piel, llenarle con ácido el estómago y atravesarle con púas el pecho. también piensa en albertina, en que de algún modo ha logrado salvarse de toda esa mierda (¿a qué costo?), y en la falta que le hace ahora mismo. seguro estaría recostado en su regazo mientras jesaiah le acaricia el cabello a ella y simplemente charlarían sin parar, como si nada malo estuviera pasando. por su cabeza cruza otro pensamiento: jesaiah. el par de ojos verdes con los que se encuentra y la situación que los envuelve, esa de la que prometieron no volver a hablar. "deberías ver al otro tipo, quedó peor," continúa el chiste, y por 'el otro tipo' ambos saben que se refiere a esa vitrina que rompió en medio de crisis. el recuerdo le sabe amargo, no le gusta en lo que se convierte estando allí. su mirada desciende unos segundos pero luego sonríe tenuemente, complicidad implícita al no mencionar nada más al respecto. "estoy intentando," responde, encogiendo un hombro. "siento que todo me está saliendo mal y..." relame sus labios, provocando que una línea aparezca entre sus mejillas hasta que finalmente suelta. "creo que me estoy perdiendo, jes".
Tumblr media
"¿y la estás aplicando a diario?" avellanados nunca abandonan sus facciones, pese a que distancia entre ambos es impuesta indirectamente por selección de asiento, siendo que normalmente no era así de su parte. ha hecho un poco de consciencia desde situación con vesper, no quiere darle mucho espacio a que pudiera reclamarle por amistad con azabache, porque no planeaba alejarse pero tenía presente que tendría que controlar una que otra costumbre. "oh, por supuesto, el más rudo de dover." le sigue la broma, dejando los ojos en blanco. "yo tengo una por—." se corta porque recuerda que probablemente ya la vio después de dicho encuentro que tomó semanas atrás. "recuerdo haberte contado a ti y a albert sobre eso." se encoge de hombros, desvía la mirada. "¿estás bien?"
2 notes · View notes