#compensación por no haber roleado tanto estos días?

[vcspero]

daddy said i never could win                         that’s probably why i never pretend.

marco temporal: viernes seis de agosto, 05:13 pm ambientación: algún rincón semialejado de los terrenos de la granja byungari. tw: mommy and daddy issues (?) @smpuntos

      timbre suena, y en medio de la tranquilidad del espacio en solitario donde ha decidido hacer uso del beneficio obtenido, parecería ser el único sonido en el mundo. agallas no han sido suficientes para cambiar identificación numérica y marcar continente europeo, por lo que se conforma con una charla más local, aunque infinitamente más ausente. se pasea por terreno, sin duda dejando marca visible de su nerviosismo en el camino que comienza a crear sobre césped, cuando al cuarto toque la llamada conecta y se detiene del todo, aliento que suelta en exhalación que no sabe discernir entre alivio y cansancio.

“ madre. ”

quietud permanece desde el otro lado de la línea, le hace considerar que quizás elegir un rincón alejado de la granja para cobrar recompensa no ha sido su idea más brillante, o tal vez que simplemente ha sido atrapado en las redes de una broma elaborada con fines de entretenimiento televisivo, cámaras ocultas dispuestas a hacerse de conocimiento personal en cualquier momento.  pero tras un instante nacen señales de vida en canal auditivo, aspiración lejana que trae un distintivo titubeo a pecho. ‘ ¿vesper? ’ 

“ sí, soy — uh, yo. ¿me extrañaste? ”

pregunta no es más que chiste privado. ¿me extrañaste? ¿acaso le había echado de menos durante los catorce años en que dejó de ser vessie y cargó con la herencia seo en hombros? dudoso.

apenas puede reconocer la voz que se reproduce en oído, a pesar de que por tanto tiempo fue el único método de conversación con quien es progenitora en todo menos función. sabe que es ella, y puede distinguir cierto aspecto de preocupación entonando la forma en que exclama reproche por repentina desaparición, pero sabe que heejin opera más desde posición de responsable asignada que madre abnegada. ni siquiera la resiente por ello; hace mucho tiempo que dejó de sentir pena de sí mismo por ser huérfano.

‘ ¿ya hablaste con tu padre? ’

el flujo de conversación —suficientemente estancado— sufre de detenimiento súbito cuando reacciona con una mueca que podría jurar es audible, pues la mujer del otro lado de la línea responde con un resoplido que casi puede visualizar; quizás, después de todo, ni siquiera la distancia ha sido capaz de eliminar rasgos similares entre ambos.

“ no me ha sido… esta es la primera llamada que puedo realizar en un mes, mamá. ¿por qué? ¿has — has escuchado algo? ” fastidio inicial con que recubre frase perece de manera efímera cuando es duda la que toma control de voz, iniciando de nuevo un trazo en rotonda por terreno. se siente como un niño. cuatro años, incontables discusiones, y la sola mención en voz alta de todo aquello que dejó atrás le hace perder la confianza tan pronto como globo desinflado. “ ¿ha preguntado por mí? ”

sabe cómo suena su pregunta, y lo detesta. heejin también lo nota — el silencio desde lado opuesto de llamada se extiende, oprime, habla, y provoca que vesper se detenga en cero, nudillos de mano que sostiene aparato telefónico palideciendo ante la fuerza con que aprieta móvil, rostro una máscara de quietud que es todo menos natural. respira una, dos, tres veces. no tiene siquiera que escuchar el ‘ no ’ que viene de voz de su madre para saber que ha finalizado con el teatro del día.

“ la próxima vez que te comuniques con él para el cobro del cheque, mándale mis saludos. ”

no cierra la llamada; mejor, apaga el móvil, presionando conocido botón por mucho más tiempo del necesario, mirada en blanco que es incapaz de enfocar algo en particular. hay un huracán de pensamientos haciendo estragos en mente, y el pecho se oprime, duele, la respiración se agota… hasta que finalmente libera la carcajada que hunde en lo más profundo lo innecesario de sentimientos. no necesita su ayuda. no necesita su reconocimiento. ha estado triunfando por cuenta propia durante cuatro años, y de una forma u otra terminaría aquel estúpido programa sacándole algún tipo de provecho personal.

con o sin el apoyo del fantasma presionando expectativas contra su oreja.