Tumgik
#dengue paranoia maternidad mujeres psicológico
madrecoco · 9 years
Text
Smoking Fever (el dengue son las madres)
La noche que terminé llorando de emoción en el sillón de casa con la doctora.
Tumblr media
"La energía de la presa": Obsesión del último tiempo, convicción fundada tanto en el síntoma destructor, como en la salud armónica, de esta madre intensa. Cuando atendemos la posibilidad del terror (ya sea: dengue, zika, robo y/o balazo) nos acercamos a ella, encendemos su existencia y dependiendo del grado de persistencia neuronal que tenga este "miedo", es posible que...voliá: suceda. Más básico echale RAID. El día siempre está lindo para recordar que todo, todito en esta vida, es una decisión. ¿Con esto quiero decir que es posible evitar el ingreso de la sintomatología del momento a tu lomo de bicho atrapado? No mamucha! Ni la enfermedad de moda, ni la ancestral, podrá ser evitada por más autoconsciencia galopante que tengamos de nosotras mismas (ah sí, me pintó no generalizar más en masculino, ya se me pasa). Esta actitud, la de considerarse una unidad psicobiológica, puede darte mucha luz, mucha vida, pero también: te estimula tanto la nausea hacia el sistema médico que quizás no estés muy al día con el carnet de salud, con los chequeos médicos, de repente ni con la cuota, que se yo.. Te podés ir a la mierda. Pero por suerte la vida misma sigue activa cuál película de Clint Eastwood (”la vida debería ser cine independiente en tierras comerciales” dijo nadie nunca) y pasan estas cosas:
Mi madre me mandó un audio por whastapp de un señor, un conocido de un amigo de otro amigo suyo, que alertaba sobre la inminente llegada de LAEPIDEMIA. Según el tipo (que con la pasión que le ponía al discurso parecía un un biólogo de antenas G3) habrían 10 MIL CASOS DE DENGUE en el país (o en la ciudad, ya no recuerdo). Nos pedía que estuviéramos las 24hs con repelente y "por favor no sacar los chiquilines a la calle". Pedía también mosquitero, y mientras lo escuchaba se me dio por mirar la reja con languidez. Contaba además que "una primera picadura si te agarra fuerte no pasa nada, pero la segunda te mata". A todo eso: mi hijo cantaba "Mambo Congrí", una canción cubana sobre los frijoles colorados, el ají, la cebolla morada.. Un videito que transcurre en una cocina, bah un croma, donde varios niños tocan instrumentos que son utensilios de cocina, y una cocinera blanca pintada de negro, prepara el típico plato isleño. Seguro que ellos lidian no con 1 sino con 347 tipos de mosquitos peligrosos, y con tipos peligrosos, pero.. Mi enano de alma afro y rulos rubios, tan delicadito, tan sangre fresca, tan sangre promesa de un mundo nuevo... ¿Cómo impido yo que esa antena de trompa que tienen los hijos de puta se incruste en su piel y suceda el horror? Ommm... Energía de la presa no, somos energía de depredador, actitud positiva, actitud positiva, amor es todo lo que hay, esta realidad construida por los media es una fantasía, la normalidad es una fantasía, ay.. Me bajó la presión un poco, me arden los ojos, y qué chiquitos que los tengo por cierto. Momento! Cachetes colorados, cuello sudado, dolor muscular en toda la espalda y rápidamente en todo el cuerpo.. Oh no, un pequeño temblor. ¿Frío o calor? Me tomo la fiebre y el termómetro indica 37,6 - NO ME DIGAN QUE MENOS DE 38 NO ES FIEBRE porque yo a partir de los 37 y medio ya tengo la percepción absolutamente afectada, ando flojita, pinchuda, ardida (la temperatura normal del cuerpo es 36,7, y en mi caso sospecho que 35). En fin tengo los síntomas del dengue, tengo dengue, por supuesto que tengo dengue. Mando audio a mis amigas contando del ataque hipocondríaco, recibo bromas y reflexiones de todo tipo, pero la fiebre no baja. Llamo al SEMM, Vicente baila "Mambo Congrí" por decimoquinta vez. Mala madre, mala madre, mala madre. Decido jugar a pleno hasta que venga el doc, pero pasa media hora, una hora, casi dos y nada. "Nos vamos a acostar, mi amor, venipacá". Me tomo dos pastillas de ibuprofeno, enchufo la tableta de los mosquitos, prendo el ventilador, me saco el soutien y TOC TOC.. Voy o no voy? "Mamá quién es? Mamá abrí la puerta. Abrí mamá" BOEEEE... “Es la doctora que va a controlar a mamá, vos quedate acá, sí?” Le abro, es una mujer de unos cuarenta años, muy rubia, de ojitos negros diminutos, cachetes colorados también. La hago pasar y nos sentamos en el sillón mientras yo le hablo a Vicente que quedó expectante en mi cama: "Vicente la doctora va a revisar a mamá y le va a sacar la fiebre. ¿Vos querés venir y acompañar a mamá? ¿Querés conocer a la doctora?". "Sí, voy" dice el adulto de 28 meses. 
Empiezo a contarle mi síntoma, me hace preguntas y aparece Vicente por el pasillo: "Yo tambén teno fere" y se sube al sillón sentándose en el hueco mínimo que había entre mi cuerpo afiebrado y el posabrazos. "No mi amor, tú estás perfecto, sólo mamá tiene un poquito, muy poquito de fiebre" KE GANAS DE DECIRTE QUE TENGO DENGUE Y QUE ME ABRACES MIENTRAS LLORO POR TODOS MIS ASUNTOS POSTERGADOS. La doctora sonríe y el enano sentencia "Todos tenemos fere" y sigue "Yo te cuido, mamá. Te estoy cuidando". AGGGGH! "Sí amor, me estás cuidando como nadie, hermoso, te amo, ta? Ahora dejemos que la doctora revise a mamá". La doctora, que ya había dejado de mirar la hoja hace un rato, se apoya de espalda entera en el sillón y me pregunta qué edad tiene mi hijo. "2 años y cuatro meses?”. “No puedo creer". "Se me fue un poco la mano con la estimulación, no?" Respondo muerta de orgullo, a lo que ella dice: "Veo niños todo el tiempo, veo padres todo el tiempo, no te hacés una idea lo sano y feliz que es tu hijo. Es especial, me di cuenta apenas lo vi. Te felicito, estás haciendo un gran trabajo" ME PONGO A LLORAR ante sus palabras, lógicamente, porque este post podría contar otras cosas, podría hablar de auténticos dramas que estamos viviendo además de una paranoia pseudosimpática ante el dengue, pero no, lo que sí subrayo con MARCADOR DEL CARO es que esas palabras cayeron en un momento de vulnerabilidad máxima, de culpa, cuestionamiento, miedo (las verdades de la fiebre)... y fueron simplemente perfectas, lo que necesitaba escuchar, un "vamos bien" antes de arrancar la semana, en boca de una desconocida vestida con túnica blanca y estetoscopio cruzado al cuello en el sillón de mi casa. Desde esa frase nos ponemos a hablar de estimulación, de emociones, de amor, también de violencia, de la violencia doméstica, de violencia obstétrica: "es lo que nos toca por ser mujeres" dijo ella con una credibilidad y resignación que otra vez se empañaron los lentes. A todo eso, Vicente (estimuladito pero con un sobregire del carajo) agarró el tambor, se lo colgó, y empezó a cantar, pidiéndome que lo siga, el himno del cuadro de Basket de la casa: "Yo te daré, te daré niña hermosa, te daré una cosa, una cosa que empieza con A: ATENAS!" Era muy gracioso realmente, sin embargo cuando miro a la doctora veo que estaba con los ojos cargados de agua: "es muy emocionante ver a este niño, de verdad, tenés una bendición por el resto de tu vida con este personaje"... LISTO, ABRAZO A LA DOCTORA Y LLORAMOS LAS DOS JUNTAS EN EL SILLÓN NEGRO, SUCIO CON SOPA Y TIERRA, DE CASA. En un momento, con la voz quebrada le digo "che, yo escribí un libro inspirada en todas estas cosas, una pavada, pero me gustaría regalártelo y fui a la biblioteca, agarré 1 de los 2 libros de madrecoco que me quedan y se lo di. Me pidió que se lo firmara y eso hice, también le dejé mi celular anotado en la última página, de locos. Nos despedimos en la puerta con visibles ganas de quedarnos tomando un trago fuerte, de poner música, esas cosas.. Pero bueno, no daba para tanto. Nos dijimos "Gracias" con mucha emoción, le abrí la puerta y salió.
En cuanto mi síntoma, la doctora me alertó que al tercer día con fiebre vaya a la emergencia para que me hagan el examen del dengue y todos los bichos mejor rankeados en cuanto a presencia colonizadora. Ayer fui, porque no baja la señorita, pero no tengo dengue, no tengo mononucleosis, no tengo nada, simplemente estoy viva.
7 notes · View notes