#si algo aprendimos de la act pasada

[ana-paolaga]

Lunes 16 de enero 2023

Clase 2

“Acting is behaving truthfully under imaginary circumstances.” 

-Sanford Meisner

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En esta clase aprendí la importancia de la postura en el teatro, ya que al estar parados de una manera “neutral” podremos estar preparados para cualquier situación que llegué a ocurrir en el escenario, como si algo de utilería se llegase a caer y nos veamos en la necesidad de correr. Para tener una postura adecuada tenemos que pararnos derechos; sin estar jorobados o sacando el pecho. Para lograr dicha postura podemos imaginar que tenemos un hilito en la cabeza, el cual nos estira. Sin embargo hay otros puntos a considerar, como el tener nuestras piernas en paralelo (a la altura de la cadera) y un poco flexionadas, y tener los brazos relajados y a los costados. Dicha postura se me hace sencilla de realizar, por lo que siempre que me encuentro parada intento realizarla con la finalidad de que se vuelva más natural y cómoda en mí.

Por otro lado, retomamos un poco el tema de la improvisación que vimos en la clase pasada, como el concepto de vivir en el escenario, las situaciones imaginarias y el que cualquiera puede actuar e improvisar si se lo propone. Entre esos conceptos, se le dio continuidad a la imaginación, en donde aprendimos cómo funciona en cada persona. Para eso, realizamos una pequeña actividad en donde cerrábamos nuestro ojos y visualizamos lo primero que se nos viniera la mente al escuchar una serie de palabras, objetos o situaciones. Al finalizar dicha dinámica, logré ser consciente de cómo mi imaginación mezcla mis recuerdos para crear escenarios o despertar sensaciones; algo que también se presentó con algunos de mis compañeros. Al final, se me hizo muy interesante como funciona la imaginación de acuerdo a las experiencias y recuerdos de las personas.

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En cuanto a las actividades, al comienzo de la clase realizamos la misma dinámica de pases con pelotas; la razón seguía siendo para que tanto la maestra, como el resto de la clase, nos aprendiéramos los nombres de cada uno. La única diferencia fue que dicha actividad la realizamos estando sentados en nuestros bancos, específicamente en una posición tipo alerta con nuestras piernas y brazos abiertos. En un comienzo fue algo caótico, ya que algunos compañeros, incluyéndome, tuvimos dificultades para atrapar las pelotas y/o hacer pases sin que esta cayera en otro lugar. Personalmente, considero que no soy muy buena en los juegos con pelotas, pero a medida que avanzaba la dinámica, sentía como era más capaz de seguir el ritmo sin dificultades. 

La segunda actividad realizamos fue una que practiqué mucho el semestre pasado, está siendo ¿Puedo? Ven. Dicho juego consiste en formar un círculo; una persona comienza apuntando a otra mientras pregunta “¿Puedo?” y si esta está de acuerdo, le responde con un “Ven”. Una vez dicho, el primer participante camina hacia el segundo, el cual deberá repetir los pasos del jugador 1, con otro participante, y así sucesivamente. Un aspecto importante durante el juego es que se debe utilizar la mano izquierda para apuntar y hacer la pregunta, y la derecha para aceptar.  Retomando la experiencia grupal, como la mayoría del salón había cursado teatro el semestre pasado, estábamos muy familiarizados y tranquilos, por lo que la maestra decidió subir la dificultad del juego hasta el punto de solamente utilizar la mirada para comunicarnos; algo que me llegó a desorientar un poco, ya que en algunas ocasiones, llegué a perder el enfoque de la persona que tomaba el rol de escoger con quien cambiar de lugar.

Por otra parte, volvimos a jugar gatito pide esquina. En esta ocasión intenté cambiar de lugar las más veces posibles sin que el gatito me ganara el hueco; esto hasta el punto de que casi me caigo en el salon. Solo fue una ocasión donde quise regresar a mi lugar, pero como mi compañera se encontraba corriendo hacia a mi tuve que acelerar mi paso y llegar sin que el gatito me ganara. Dicha situación la llegué a ver con otros de mis compañeros. Fue una actividad muy divertida. 

[dvnnte]

para ser un cliente bastante frecuente de aquel bar, era apenas la segunda vez que encontraba a otre participante de alew. y no está seguro qué tanto le agrada aquello. tal vez, chicago no era una ciudad tan grande como le gustaría. “¿vienes mucho a este lugar?” podría asegurar que no es así, detalle que se guarda, mientras coloca bebida símil a la que contrarie ya tiene en frente -una especie de oferta de paz-; y procede a limpiar con el borde de su camisa sus anteojos. “¿o lo descubriste en la misión pasada o algo?” inquiere con toda la casualidad que es capaz de reunir y que no es poca.