teesperoconvertidaenluna

[teesperoconvertidaenluna]

Choqué de bruces con tu expresión más dura, la que no había visto desde hace más de 5 meses. Fue un balde de agua fría, que sorpresa volver a verte, ahí sigues.

Vuelvo a afectarme, a llorar, a ver mi reflejo herido con tu imagen encima. Dudo sobre si estoy exagerando con sentirme apenada por la forma en que me hablas, considero si realmente provoqué esa respuesta y si la merezco. ¿Quizás sí era acorde que me respondieras así, hacerte enojar? Me explicaste por que reaccionaste así ahora, yo no dejo de llorar, lo que menos quería era volver a sentirme así. Podría haber estado más atenta, más despierta, más rápida. Te hice perder tiempo, y como odias perderlo, como odias esperar. Odias repetirte. Eso tampoco iba a cambiar.

¿Tengo que borrar la relación anterior? ¿Desapegarme de ella? ¿Cómo puedo sacar selectivamente las cosas de las que me quiero desapegar? Porque indudablemente hay muchas cosas que conservamos, pequeños gestos, pequeños rituales, pequeñas confianzas, vienen y van, esperan volver a salir. Pensé que había salido de la herida, siempre se me hizo muy fácil volver a ti después de un encuentro desagradable. Aún se me es fácil, podría encontrarte ya mismo en un abrazo. Pero hay emociones que quedaron, esa voz dura que me alerta que se viene una tormenta, la tormenta se adelanta solo en mi cabeza y causa estragos en mis emociones. Me encuentro otra vez alerta a los pasos que vas a dar. Me dices que me imagine en la situación de no conocerte, en ese estado estaba hasta que te enojaste, y vuelvo a memorizar "no le gusta que le repita la pregunta" sobre la misma hoja que tenían las mismas palabras ya borroneadas. ¿Tú puedes imaginarte así? ¿No te cuesta tanto como a mí?

Me es durísimo discutir contigo, voy a mi estado más frágil y torpe, lo único que quiero es botar un mar de lágrimas y hundirme en lo más profundo de él. Mi respuesta emocional generalmente vence a mi pensar y mi capacidad de resolución. Siendo las 20:45 aún me quiero hundir, quiero gritar en el silencio. Y me reprocho por no ser más dura, por no aguantar bien un intercambio de argumentos para encontrar una solución. Siempre me encontraste inmadura en ese aspecto, y lo veo claramente, me siento inmadura. No me funciona en este caso el simplemente hacerlo, simplemente no llorar y hablar bien, como el adulto que soy.

Me dices que ya no hay nada que perder, que si algo va a generar malestar que no lo intentemos y ya está. Después de que me escribes y me dices que vamos a intentarlo las veces que haga falta. ¿En qué momento te creo? ¿cuando estás ofuscado o cuando estás contento y nostálgico? Todo eso me confunde, y me quedo creyendo lo que me dices cuando estás enojado, es sólo un intento y no hay más. Además creo que eso es lo que nos podemos permitir, nuestros corazones son tercos, pero sensibles.

No me gusta huir, a veces pienso que por qué no somos como la gente que veo en películas y series, que pelean y hablan fuerte, y terminan la discusión diciendo que se quieren, o que se ven en casa luego. Solo liberan un enojo sin dañar a nadie, se desahogan y vuelven inmediatamente. Tanta intensidad hay en nuestro ser que todo tiene que estar en los niveles más altos; la felicidad, la pena, la rabia, el cariño... dando todo en cada emoción.

Me recuerdo no repetir patrones, me siento al debe. Esto me es un golpe de realidad de no estar donde creía que estaba.

De esto estoy segura:

No quiero malestares que interrumpan la tranquilidad que llevamos, de forma conjunta e individual.

Retroceder al lugar donde odio ver mi reflejo.

En este momento te agradezco la semana que tuvimos, me sentí en una fantasía, y de cierta forma lo fue, siendo hoy el punto donde vimos la realidad, y sentimos todo el esfuerzo que hay que dar para alcanzar lo que queremos.

Gracias por recordar tus propios límites y comunicármelos, y recordarme que no eres el único que tiene que trabajar, que esta relación la hacemos los dos.

[teesperoconvertidaenluna]

Espero y espero, a veces me canso de esperar, así que escribo antes que tú. Por favor, no vayas dejando este espacio hacia el lado, te lo pido. No quiero tener que pedirte que me escribas, o recordartelo en cada encuentro. Quiero ya poder adquirir una libreta en físico y no es mi intención dar directrices de nada. Por esa razón te dije que no me digas nada antes de ir a entrenar juntos, no quiero el libreto. Mi intención es cultivarnos, sin sofocarnos, y eso significa verte concentrado en lo que quieres hacer sin que tengas que preocuparte de mi. Teniendo la seguridad de que todo está bien, yo estoy bien, y luego nos podremos abrazar. Y debo decir que disfruté mucho el verte en lo tuyo sin más preocupaciones, hay una libertad que no había reconocido antes, y me alegra poder verla y practicarla ahora.

Han pasado muchas cosas ya! Estoy emocionada, yendo con cuidado, pensando harto, pero también permitiéndome sentir. Y siento tanto. Me siento tímida, siento vergüenza de la manera más inocente, me siento expectante, ansiosa, encariñada, triste, feliz, todo se viene a mezclar, pero resulta en algo rico de sentir. Como bien hemos mencionado varias veces, parecido a cuando empezamos a salir. Estoy segura de que me gusta verte, disfruto de pasar tiempo contigo y de acordar momentos, de besarte y abrazarte, ya quiero tomar tu mano al caminar, pero también quiero que la busques. Espero que tu miedo por incomodar no interrumpa el deseo que tienes por realizar algunas acciones. Tómame la mano si eso quieres, dame un beso apasionado si así lo deseas, agárrame fuerte cuando quieras y llévame a tu cuerpo, deseo sentirme deseada por ti, que te quemen las manos y la mirada, que no puedas respirar si no es en mis labios.

Aún me siento avergonzada de haber explotado de calor y deseo encima tuyo, es que no aguantaba más sin ti, necesitaba sentirte dentro de mí, con tus manos en mi cintura, empujandome aún más duro hacia ti. Parecía un sueño, aún no pude creerlo al día siguiente, hasta que volviste a encontrarme otra vez, y sentí que es real todo lo que sucede. Aquí estoy, te sostengo con fuerza, y me entrego entera a ti, tómame y haz de mi lo que quieras y no temas.

Agradezco que lo que hacemos, tenga sentido, que no haya sido en vano el sufrimiento, y que más fuertes y sabios nos incorporamos. Espero con ansias lo que viene. Extrañarte duele, pero es delicioso poder extrañarte tanto y luego encontrarte, poder acallar la tristeza y solo dar paso a la felicidad de compartir unos minutos en tu dulce compañía.

Dejo esta foto que tomé en nuestro paseo como buena señal del universo de lo que estamos haciendo. Descampando en rayos de luz y un arcoíris, vamos a encontrar nuestra olla de oro y ser dichosos en nuestro viaje de vida.

Te abrazo cada día más fuerte. Te pienso y te busco, en libertad y paz.

Mi Morro.

[teesperoconvertidaenluna]

Me gusta saber que estás desempolvando recuerdos, que ya no te son tan desgarradores como para no verlos. Que estos traen consigo cierta esperanza para el mañana.

Nos hemos visto y siento tantas cosas que me invaden y me tocan puntos sensibles. Siento ansias por tocarte y pegarme a ti, quiero tener tu piel en mis manos y mis labios, quiero rodearte con mis brazos y piernas. No sé cuánto más debo esperar para aquello, no sé si tú lo quieres, no veo ninguna pista de que lo quieras, y por eso me mantengo al margen. Siento nervios cada vez que llega el momento de vernos, quiero que sea más seguido, quiero todo. Así que tengo que frenarme constantemente para no apresurar nada, pues no nos hemos enfrentado aún a la situaciones que requirieron más análisis y cambios. Por ahora siento que hay muchas cosas que permanecen, pero de las cosas que nos gustan que existan, y otras que quizás no tanto, pero nunca fueron el problema.

Siento que si seguimos en esta distancia, nunca nos vamos a enfrentar en lo profundo, pero dudo de mí misma, quizás sólo soy yo queriendo que suceda de todo ya.

Te extraño tan profundamente, cada mañana me pesan más los pies para levantarme en un lugar donde no estás, y cada noche procrastino la hora de dormir en un rincón de esa cama gigante.

Como hemos comentado, hay un muro aún, se levantó hace tiempo y no ha bajado. El miedo nos consume en cada acción y pensamiento, el miedo a que todo se repita y echar a perder todo una vez màs. Pero también el miedo de que todo siga tal cual y realmente todo este proceso se alargue aún más. ¿Crees que algo ha cambiado?

¿Crees que tú has cambiado? ¿Me cuentas?

¿Me cuentas también qué has sentido tú en más detalles? ¿crees que aún te gusto o sólo vives de la nostalgia? A veces me pregunto eso, cuando no te me acercas, cuando no me das indicios de querer agarrar mi cara y besarme.

Estamos caminando estos lados de querer ir de bruces al otro, pero no querer acelerar nada. Y no sé en qué momento podremos salir de ese bucle. Supongo que el tiempo lo dirá, y llegará un momento en que nos miremos y sabremos que ya es el punto en dar otro paso.

Aquí dejo el recuerdo para ambos de no quedarnos en las letras de estas epístolas y salgamos, llevemos estas expresiones de amor y esperanza a nuestro espacio cada vez que nos vemos. Recordemos personificar nuestras cartas y reflejar todo esto que sentimos.

Quiero volver a decirte que te quiero y escucharte que me quieres.

Nos vemos en el abrazo de hoy.

[teesperoconvertidaenluna]

Mañana nos vemos

Por fin llega el día, en que caminamos un paso más cerca y más certero. Mi impaciencia iría corriendo a tu lado, pero creo que así vamos bien. Hemos tenido mucho tiempo para pensar y masticar cada palabra que nace de nuestros corazones. Hemos viajado a las mejores de las fantasías y a las peores pesadillas, como tal montaña rusa.

Pero aquí estamos, gracias, gracias, gracias.

Me permití sentir miedo en confianza de que esto saldrá bien, me afrontaste y me trajiste de vuelta a tierra. Justo cuando lo necesité. Gracias por hacerlo con contención, gracias por querer entenderme, gracias por también ser firme. Puedo sentir como vas abriendo paso al jardín, como vamos desmalezando tanta murra. Como dices, vamos trayendo en actos concretos lo que nos escribimos en estas cartas. Y te sigo agradeciendo.

Ansío por llenar nuestro cuaderno, por tener nuestro rincón para jugar, por volver a armar nuestro nido con todo lo que somos individualmente, formando nuestro hogar, nuestra morricasita.

Quiero hablarte de tantas cosas, mostrarte tanto, todo lo que estoy recuperando y en lo que me estoy convirtiendo. Quiero volverte a encantar y que me lo escribas en mis libretas como sorpresa, quiero volverte a mirar hasta que te pongas nervioso y cuando no te das cuenta. Quiero volver a conocerte y que adoptemos nuevas palabras el uno del otro. Quiero que se haga realidad el como mantenemos nuestra propia persona y que al mismo tiempo encontramos el balance para unirnos.

¿Cuáles son tus prioridades personales?

Algunas de las mías son el mantenerme creando; invertir intención en mi vida social; comunicar efectivamente mis pensamientos, emociones, inquietudes y límites; cuidar de mí para poder cuidar de ti y nosotros.

Aunque cargamos con grandes pesos y todos aquellos pensamientos negativos que les rodean, creo que nos vamos haciendo más fuertes y estamos logrando hacer frente a esas voces oscuras que nos susurran y nos llaman a caer. Gracias por recordarme que no me olvidas, y que tu objetivo es que volvamos a estar juntos.

Yo tampoco te olvido, pienso en ti todo el tiempo, veo tu sonrisa entre tu barba, y tus ojos achinados detrás de tus lentes. Siento tu pelo entre mis dedos y tu piel tan suave y cálida. Te siento mi refugio, mi calma.

Mañana es un gran día, y ya siento que no dejaré de sonreír al verte aparecer. Te llevo una sorpresa. Mi querido rey.

[teesperoconvertidaenluna]

Entiendo esa resistencia que tienes, de tus miedos de que esto no funcione y necesitar hacerlo bien. Quizás no lo comparto mucho, tengo miedo igual que tú pero no me detiene tanto como a ti. Y no sé como no me detiene, con todo lo sufrido, es natural que me detenga. O quizás es la impaciencia por volverte a abrazar y sentir tu mejilla contra la mía, hundiendonos en el otro.

Pero el miedo está. No sé si pueda tomar tu mano si no está la certeza de que esta separación no se vuelva a repetir, porque por dios que no vuelva a suceder jamás. Jamás. Podemos pelear y enfrentar diferentes crisis, pero unidos. No puedo volver a irme de mi hogar, por más que intentemos transformar todo ese dolor y que resulte en una relación aún mejor, mis manos no dan más de buscar ocuparse en algo para no caer en un agujero de desesperación. Yo siempre tuve la seguridad de mantener nuestro equipo para dar la pelea, tú también debes estarlo, y mantener la postura. Eso es a lo que llamo furia, nada tiene que ver con enojo, sino que es esa energía que me mueve, que crea y transforma, que rodea el impulso de creación de mis manos y lo guía, es convicción y fuerza.

Perdón si creo distancia, todos estos miedos que vienen y van me hacen tomar precaución, creo que puedes entenderlo. Sin embargo, ten por seguro que lo único que quiero es cerrar ese espacio y hablarte y abrazarte cada segundo.

Hoy pensaba en qué hacer cuando nos veamos, si es que vamos a estar cómodos o si vamos a conversar como siempre. Las mismas preocupaciones que tenía cuando nos vimos esa vez, pero que se esfumaron en el momento en que nos vimos y no pudimos dejar de hablar y compartir y mostrarnos. Decido no escuchar tanto a mis preocupaciones al respecto, sé que estaremos bien cuando nos veamos. Ya no puedo esperar! Me imaginaba invitándote de sorpresa a la playa, pero sé que no quieres aún. Todavía faltan conversaciones, quizás preparaciones de tu parte, no lo sé. Por mí te viera ya.

Estos días he estado recordando mucho más nuestro hogar, cómo se sentían las mañanas, los días fríos, los domingos de trajín familiar, las jornadas de juegos... todo. Viviría siempre en ese living soleado amaderado, con los animales alrededor del fuego y nosotros juntos tomando el café de la tarde, disfrutando la simpleza de llenarnos con la compañía del otro. Cada día te extraño un poco más, ¿será porque te siento cada vez más cerca?

Que ganas tengo de ir a buscarte, de llamarte, de traerte a mi. Me estoy llenando de paciencia para que tengas tu espacio y tiempo, para no desenfocarme de lo que hemos estado trabajando, tomo el espacio para cuidar no repetir lo que nos separó. Es mucha la ansiedad que estoy calmando, se siente tan difícil, me ahoga un poco, pero sé que mientras más pueda realizar este control, más fácil se hará con el tiempo y más fácil se hará vivir.

Te extraño, lo repito, me hace falta mi compañero con quien reímos, hablamos y miramos desde lo más verdadero y profundo de nuestro ser. Creo que eso es parte de lo que hace tan única nuestra complicidad.

La nostalgia me consume, pero la visión del futuro me mueve hacia los pasos que hay que dar.

Siempre contigo, ambos presentes en sus versiones más fieles a nuestro interior, conectados en una red para con el otro y con uno mismo.

[teesperoconvertidaenluna]

Hay cierto ruido que me llega con cada día que pasa sin escribir. Por supuesto, no nos da el tiempo para escribir todos los días, pero estos espacios de ausencia son cada vez más largos.

Patrones pasados.

Hay cierta familiaridad con ello, cosas que digimos que haríamos y que se hicieron por 2 semanas y luego nada más. Por ende, aquí estoy, reviviendo el espacio y refrescando el tiempo.

Nuevas palabras para la calma y la compañía.

Gracias por tus llamadas que ya no me causan angustia ni me quitan el apetito. Podemos conversar y reír juntos, pero nos seguimos despidiendo raro, es que faltan palabras ahí, esas que siempre estaban, sabemos que deberían ocupar su espacio. En cierta forma, igual las oímos y las decimos.

Cuanta falta que hacen.

Cada día me siento más cerca de sentir tu existencia rodeando la mía, hay cosas que imagino, otras que ya no puedo crear en mi mente y solo debieran suceder para recordar como se sienten. Hasta ahora me he quedado con tu mano en mi mejilla, de ese día bajo la lluvia.

¿y si busco otra excusa para verte?

O quizás es mejor esperar...

¿Aun recuerdas como se sienten mis manos en tu cara? ¿Mis dedos jugando en tu barba? ¿Y en tu oreja?

Prepárate para la explosión que serán nuestras fundiciones.

Estoy soltando un poco la preocupación, y me estoy enfocando en lo que quiero hacer para hacerlo bien. Quiero decirle a algunas resistencias que se manden a cambiar, en proceso.

En proceso.

Todo.

[teesperoconvertidaenluna]

Transformar lo que sucedió. A eso me lleva cuando dices que el presente puede ser aquella fantasía del ayer. Tomemos cada aprendizaje, cada error, cada tumultuo y guerra, y rodeémosla de ese amor que se escondía detrás de cada granada, para que las armas dejen de ser un disfráz. Transformemos esa destrucción en comunicación real, todo lo que quisimos hacer bien.

Siempre quisimos hacer bien las cosas, siempre quisimos usar las palabras y encontrarnos en un lugar donde no nos tiremos esas balas y cuchillos. Reitero la invitación que te hago, que me haces, y que devuelvo una vez más, que la intención se convierta en acción. La intención no vale nada si no hay una acción.

Es que te quise escribir... pero no lo hice.

Es que te quise hablar más amorosamente... pero no lo hice.

Quise hacer esto y aquello... pero no sucedió.

¿Qué hacemos con esas intenciones? No sustentan nada, que la voluntad sea sinónimo de acción en nuestra relación.

En esta repetición, o esta familiaridad de llamadas y mensajes y sonrisitas, que se sienten muy bien, también tienen un fantasma mirando. Es el miedo de repetir el ciclo de crisis. Revisitemos todo lo hermoso, pero ruego dejemos la destrucción en el pasado. Es un capítulo que se fue, lo dejé atrás y no lo volvería a abrir, porque cada página abierta venía con agujas que disparaban fuertemente en todas direcciones, lo que manchaba con sangre el resto de la historia.

Y sí, se siente dicotómico, lo es. Es que de un capítulo rojo, habían 10 llenos de dicha y brillos, todo lo que quise siempre. Quiero tus gestos, tu amor, tu tacto, tu inteligencia, tu improvisación, tu travesura, tu fuerza, tu imponencia, tu lujuria, tu voz, tu vocabulario, tu impronta, tu energía y tu cansancio, tu acción, tu disciplina, tu vulnerabilidad, tu llanto y tu sonrisa, tu pasión ciega y tu racionalidad, tu cuidado, tu preocupación.

A veces te era difícil entenderme, o verme, pero creo que estás cada vez más cerca. Este tiempo has entendido lo que quería, y lo que quiero, has visto como soy, mi sensibilidad, como observo, como pienso, como emociono, estoy dejando de ser un pedazo de celofán y eso me llena de energías y ganas de ser yo sin preocupaciones de quebrar cáscaras de huevos. Por supuesto, las cosas obvias no las pisaré a propósito, creo que eso se entiende de por sí.

Creo que a veces sueno como un pepita de ají, pequeñísima, y sé que no me veías así, puede que a veces sí. Veces en que se notaba que así me sentía, sin ningún poder, sin esa furia que siempre he querido tener. Estoy descubriendo mi sensibilidad como furia, tengo algo en mi interior que NECESITA salir y no sabe cómo, se termina haciendo algo tan pequeño como una lágrima solitaria que apenas cae por la esquina de mi ojo y que nisiquiera llega a la mejilla. Pero es algo tan grande adentro de mi ser, que logra moverme, me da luces hacia donde quiero ir, hacia donde puedo depositarle. Quiere llegar a ti también, y explotar en ti, rodearte, contagiarte de movimiento y de sentir, quiere armonizar con lo que llevas dentro. Que nos veamos en lo más profundo y verdadero, lejos de cualquier máscara y cualquier mochila. Las veces en que me vi coartada de esta expresión, me vi en escala de grises, y me dolió tanto verme así, pero lo fui incorporando, me fui monocromizando para no colonizar tus propios colores, y tu propio movimiento. No me permito hacer lo mismo otra vez, porque no se trataba de eso. No hay más escala de grises, mis colores están cobrando mucha más vida que antes, y no se quieren apagar. Porque como dijo Camus, me tomaría toda mi fuerza acallar mi corazón.

Hoy puedo ver el cielo llenísimo de estrellas, acá en mi cerro. No sé si sabes cuanto deseo admirarlo contigo.

[teesperoconvertidaenluna]

estos días habia pensado tantas cosas, y no las escribí a tiempo. Siento que hoy estoy más aterrizada, ya no te piensoescribo desde el dolor, pero tampoco desde la fantasía y el sueño. Entonces sí me encanta que realmente podamos llegar a ser ese sueño del otro. Yo amo la idea de mantener un diario para los dos, el que podamos adornar con todas las cositas que tengo para hacer esos collage. Es algo que siempre quise hacer contigo, pero pensé que era mucho pedir con todo el tema del tiempo y de que decías que no te iban las cosas creativas. Me gusta que puedas ignorar eso y hacerlo igual. Pero tampoco me llenaré con las intenciones, debe suceder.

Como bien dices, ahora que hablamos más, se me van algunas ideas, se mezclan, o te las digo en esas llamadas.

Estos días he pensado en cosas más negativas, cosas que han sucedido, que me cuestan un poco dejar atrás. Al mismo tiempo pienso lo bueno que puedes ser, tan preocupado por mi, porque esté bien. Y así pelean esas ideas, constantemente. Otras veces pienso que estamos repitiendo tanto, esos mensajes sorpresivos durante el día, el llamarnos y videollamarnos, molestarnos con picardía, se siente muy a cuando estabas en Puerto Varas.

También he pensado egoístamente. Te comparo por ejemplo al esposo de Rachel, que en lugar de ayudarla, solo la molesta con más estrés, no es claro en nada de lo que dice. Y pienso... que diferentes, el Morro jamás haría algo así, al contrario... Luego veo como me consientes, como dejas gestos románticos que sabes que me encantan, veo como me has querido tanto como yo esperaba, y más quiero acercarme a ti. Más ganas me dan de estar contigo, porque sé que puedes cumplir con lo que me hace feliz, que puedes ser el hombre que me hace feliz.

Me toca recibir. Me toca ser sin preocuparme, me toca no correr primero para después ser amada. Sólo ser amada porque soy.

Perdón si mantuve mucho el silencio cuando me dijiste que pensabas sobre mi cuerpo, ya no sé como responder a esos comentarios. Entre todo lo que perdimos, fue ese coqueteo hacia la tensión fogosa. Me da vergûenza, timidez, nervios, me da miedo equivocarme, expresar mucho y espantarte. Creo que a eso le temí durante mucho tiempo, a espantarte con este deseo que sólo quiso salir cada día, o que te cause rechazo. Y eso significaba humillación para mi. Estoy descubriendo el meollo de esos asuntos, que son mi vida misma, esa ansiedad que me come por todos lados, es miedo al rechazo y humillación. Y para eso estoy bailando.

Estoy yendo a clases de baile, y ahora bailo constantemente, superando esos miedos, tal como cuando en Harry Potter hicieron un ejercicio de ridiculizar sus miedos, no tienen importancia en otro lugar más que en mi cabeza. Hoy me iba a dormir a las diez de la noche, pero un descubrí nuevos álbumes de un artista que amé por muchos años y me quedé bailando, por una hora más o menos. Me hace sentir más liviana, que expulso puros pensamientos intrusivos y obstáculos en mi expresión y movimiento. En cada clase siento ganas de llorar, porque logro conectar conmigo, logro expresar, logro llegar al final, me despejo de puras impurezas, y me siento bien conmigo. ¡Ya quiero mostrarte todo lo que he aprendido! Bailar contigo, bailarte de formas que no son sólo graciosas o tiernas, coquetearte a través de mi movimiento y acercarte a mi cuerpo, que sientas mi piel y mi olor, y mi esencia. Quiero mostrarte todo.

Gracias por la espera por esta carta.

Mi casa,

tu voz.

[teesperoconvertidaenluna]

creo que sí falta menos.

No lo sé. Creo que realmente no lo sabremos hasta que pongamos a prueba nuestra interacción después de este tiempo que ha pasado. Por eso creo que concretar esas citas que siempre quisimos sea una buena idea. Están cargadas ya de algunas emociones, es ahí donde veremos como manejamos nuestras respuestas a esos estímulos.

Y sea cual sea el resultado, ya quiero vernos. Quiero sentir esas sonrisas sin freno al vernos; si permito el descontrol, que sea en eso. En las sonrisas, miradas, tactos, ese amor puro que no obedece a resistencias, ni resentimientos. El abrazarte porque así lo siento.

Hay un sentimiento de seguridad que está sucediendo que me encantaría que permanezca, el saber que vamos a volver al otro, el tener la impronta de trabajar por un amor transformador. Ya sabemos que simples discusiones no nos hacen nada, es simplemente una liberación de energía, un tropiezo para pisar más firme y consciente. De por sí sucede, pero seguimos caminando.

Creo que ya no estás tan alto, no te siento por allá entre las nubes, estás aterrizando. Y yo estoy siendo testigo.

¿Se te escapa el llamarme "mi amor"?

Yo me muero por decirlo otra vez.

[teesperoconvertidaenluna]

a pesar de toda la alegría del momento, y la fe,

te extraño.

Levantarse no es lo mismo.

No me costaba empezar el día contigo al lado, realmente no me molestaba levantarme antes de las 6. Ni dormir apenas 6 horas.

Ahora duermo 7, a veces más y a veces menos, y no se siente la energía. A pesar de la buena alimentación y el descanso, la hidratación y todo eso... me falta algo. Alguien.

[teesperoconvertidaenluna]

Querido

Siento que he dado un giro en 180°

Si no me ves triste, es porque no me estoy quedando en el pasado. En este momento no me estoy hundiendo, no sé que sucedió. Creo que fueron tus cartas, y tu abrazo. Sentir tu piel contra la mía, no sabes cuanta dicha sentí. Estoy reconectando y recentrando mi ser con el universo, por más hippie que suene. Me contagiaron, siento luz y fé, siento ganas, estoy motivada con todo. Por supuesto aún hay cosas, oscuras en rincones aún más negros, pero ahí se quedan, observándome. A veces no puedo evitar pensar que quizás sólo estoy ignorando, pero trato de ir capa por capa, analizando. Les observo de vuelta, les visito, y me voy.

Ya no elijo sufrir, nada sale del sufrimiento, sólo el hoyo sin fondo, las ojeras, el desvelo, la caída de pelo. Elijo disfrutar el hoy, dar lo mejor de mí sin tener que anotarlo, prepararme para recibir mejor el día, para conectar con lo que me rodea y conmigo. Estoy transformando, y creo que a mi también.

Lamento no haberlo hecho antes, pero nada saco en lamentarme. Tú también lamentas no haberte dado cuenta antes de muchas cosas. Ambos deseamos haberlo hecho mejor, haber abierto más los ojos, ya nada queda por hacer por ese pasado, más que hacer las cosas tal como queremos el día de hoy, este minuto, y el siguiente. Hacer lo que queremos, pudiendo llevar a la acción la voluntad.

¿He vuelto acaso a hablar a través de la esperanza?

Y como no, si mirarte a través de la ventana de un auto a otro no me causa más que alegría. Estoy feliz de que sigas existiendo, y de que puedas sonreirme, y llamarme en el camino. Y cómo no, si me hablas con seguridades, sin esos odiados "si es que..."

Gracias. Siempre eres el más bienvenido a mi vida.

[teesperoconvertidaenluna]

Gracias, gracias, gracias. Que se contagie lo bueno, la vista al futuro donde nos tomamos las mano y caminamos en una misma dirección.

¿Será la poesía un motor? Ya no suena solo como un rincon de contención y sueños, aislado de lo que sucede. Ha sido un proceso de comunicación profunda y llena de honestidad y amor, a veces desesperado, otras veces colérico, desaforado. Nos ayuda a conocernos detrás de la máscara y nos enamora aún más.

¿Cómo es eso?

Simplemente salió.

¿Te sientes enamorado otra vez?

¿Cómo diferenciamos el apego que no queremos dejar, del enamoramiento?

Creo que los nervios son la diferencia. Nervios de verte, de que me llames, de sonreír al escucharte, de querer estar linda para ti. Y esos nervios no escuchan al pasado ni al futuro, es solo querer disfrutar del presente.

¿Hay que guardar cuidado? No lo sé. Pero te deseo, en mí y junto a mi. Y nada tiene que ver con extrañar.

Ahora algo completamente aparte. Es que justo me di cuenta, este par de meses no he caído en esa narcolepsia. Apenas he dormido, supongo que es ese mismo estrés que me hace caer el cabello. Y bueno, no he no trabajado ni entrenado. Quizás ahora en marzo comience otra vez.

Otra vez te agradezco por tu vulnerabilidad y tu fuerza, esa que va y viene, pero se agarra como el macaco desaforado que conozco y que me encanta.

Cuento los días para algo grande, pero voy con mucha paciencia, absorviendo cada emoción y momento.

Te abrazo.

[teesperoconvertidaenluna]

Llueve,

y todo se moja

sorprendido.

Todo se pasa de agua, la ropa, los zapatos, el auto, el cabello. Llego a un cuarto oscuro, helado, donde sólo existe menos de lo necesario. Pienso y recuerdo, fantaseo con esa rutina de llegar a prender el fuego para calentar a la familia y el hogar, el nido.

Pasar frío no importa. Ponerme más ropa para qué, no siento el calor de todas formas.

Te cuento un poco, me pasé el día ocupada, otra vez dormiré muy tarde y me levantaré muy temprano. Me faltaron horas, apenas puedo abrir un ojo para ver lo que escribo, el resto de mi cuerpo está durmiendo. Pero no quiero que empieces un nuevo día sin novedades. No quiero que otra vez tomes mi incomunicación como una señal del fin. Déjame reposar las emociones sin apuro, déjame leer mis pensamientos.

Ayer chocamos de frente, creo que con cada uno de nuestros reflejos en el otro. Miedos enfrentados, y tironeo de esperanzas y desesperanzas. Sigo luchando. Mi ansiedad me pelea por un lado, por el otro el pánico, y se pinponean pensamientos fatales.

Supongo que es parte de.

Luego me da más terror, el miedo asecha,

¿podré volver a ser feliz?

¿contigo?

necesito que se vaya (el miedo).

¿y si le dices algo? échalo.

échalo.

Como cuando atrapabas las babosas por mi.

Desde afuera me dicen qué valiente lo que estamos haciendo. ¿somos? ¿te sientes valiente?

Por un momento yo sí me sentí valiente, sentí que me estaba comiendo al mundo por luchar por lo que quiero; por mi y por una relación de ensueño contigo. Aún después de un quiebre, el amor permanece, y la búsqueda de aquella familia sigue en pie. Suena hermoso cuando me lo dicen de vuelta, ahí es cuando se infla mi pecho lleno de orgullo por nosotros, como si nunca separados. Y en ese momento se revela la esperanza, las ganas de que funcione todo.

(Aquí me llamaste y luego dormí)

No sé cómo actuar. Siento tanta atracción a ti, a hablarte del cotidiano y de lo profundo, a correr a abrazarte. Y al mismo tiempo siento que hay que interponer un espacio, ir a la seriedad. Una templanza que contenga esa incertidumbre, como un desapego. ¿Lograste desapegarte ya? Yo no, te extraño en cada uno de mis segundos y de mis actos que generalmente eran de a par. Más agua en la tetera, más tiempo para levantarse, más comida en la olla, dos tazas y dos pares de palitos. Es un fantasma que me persigue, pero también me acompaña. Me da la dulzura de haber conocido y sentido esa época, pero la pena de que haya tenido que disminuir mi todo a la individualidad pura.

¿Será real que dos personas que se alinean tanto y se aman tanto no puedan de verdad estar juntos? ¿Cómo no? ¿Son nuestros demonios más grandes y fuertes que nosotros? ¿Son acaso ellos los protagonistas?

No lo permito. Tampoco tú lo hagas.

[teesperoconvertidaenluna]

Sólo siento como mi aliento botó lo que había logrado armar hasta ahora.

Por esto yo no quería conservar el pasado, no quiero volver y retomar, quiero crear. Quiero conocer. No quiero cargar con lo pesado de los hechos que llevaron al fin.

Íbamos a quemar todo.

Si de expectativas se trata, digo que las mías son que seamos capaces de construir sin mirar hacia atrás, como si nos persiguieran para asesinar lo lindo que queda. Espero que podamos ir seguros de la mano.

No sé cómo lidiar con lo que siento, no sé como expresarlo en palabras sin decir algo incorrecto, pero puedo decir por seguro que estoy mal.

Siento que otra vez voy detrás tuyo, que mientras más subo, buscas la forma de llegar más arriba para decirme "vas muy lento".

Otra vez te persigo, otra vez trato de hacerme mejor para ti, otra vez eres la meta y el centro. Y yo, tratando de armarme a tu gusto.

Y otra vez. El sentimiento de no ser suficiente.

Se supone que tenía esperanza, que yo era lo que querías, que me ibas a encontrar y yo te iba a recibir.

Tus palabras me lo dijeron, me dijeron que ibas a hacer de todo, que no te ibas a rendir, que sólo me querías a mi.

Me siento rechazada. Me siento traicionada por mí misma, por no aceptar la posibilidad de que no me querrías con lo que voy construyendo para ofrecer.

Es increíble como el tiempo funciona. Yo me sentía cada vez más cerca, más completa, más resuelta, que iba por buen camino para ofrecerte algo que no has visto y que querrías. Pero tú sentiste distancia y desesperanza, ¿quieres contagiarlo? ¿quieres que me hunda contigo?

No me des poesía si después me la vas a quitar diciendo que es una fantasía. Porque yo siento cada palabra en cada fibra de mi ser. No es justo.

Todo duele.

[teesperoconvertidaenluna]

Quise desbordarme y quise enojarme. Tu falta de esperanza es otro golpe para mi corazón que está tratando de sanar. No pienso consolarte tampoco, no pienso convencerte de que lo que asumes es incorrecto. Sigues asumiendo y sigues expulsando.

Si hubiera estado incómoda en la llamada, crees que hubiese detenido ese primer adiós, ese "es que viste que me dan ganas de contarte cosas" tan familiar y tan cómplice? Crees que te hubiera contado todo con una sonrisa en la cara? porque así fue. Pero tú saca tus conclusiones en base a asumir.

Rinde tus murallas, te sientes fuerte cuando eres impermeable e irrespirable, el cambio implica dolor, fragilidad. De eso se trata romperse, desarmarse. El proceso de armado es delicado, ¿te acuerdas como armaba mis puzzles? esa dedicación al detalle requiere. Todo lo puede botar, el viento, un gato, tu propio aire al exhalar más fuerte de lo necesario. Uno arma a pesar de todos esos peligros.

Acepto tu miedo, y acepto tu fragilidad, te abrazo y a tu vulnerabilidad. Con los mismo brazos que esperan abiertos a tu encuentro.

Lo que no acepto es que pienses y sientas por mi.

Recuerda que si algo me incomoda, te lo diré. Si hay algo que no me gusta, te lo diré, como ahora. Yo sigo con la misma intención que te hice saber, sé fuerte a través de las heridas que te provocan los pétalos. Recuerda que tienes que cruzar ese jardín para llegar a mi.

Te dejo un par de textos que vi y anoté hace unos días, me los encontré cuando estudiaba para la escuela.

"perseverar es aprender,

aprender es practicar,

practicar es repetir,

repetir es ganar experiencia,

ganar experiencia es crisis.

crisis es prueba.

prueba es fortalecimiento,

fortalecimiento es libertad,

libertad es crear de la nada,

crear de la nada es transformar,

transformar es camino y meta al mismo tiempo."

y,

"Se podría decir que el desarrollo necesita resistencia, si no, tendríamos un crecimiento no específico, sin rumbo. Al nivel psicológico tendríamos pasividad, apatía y finalmente sueño. Allí donde hay resistencia los individuos están llamados a afirmarse, a despertar, a hacerse conscientes, a desarrollarse."

Cuando los encontré, pensaba en como los fundamentos de Waldorf van tan de la mano con mi pedagogía, la cual también es mi forma de vivir. Y me alegré, sentí que estoy encontrando mi lugar de maestra, y me agradecí por no darme por vencida. Ese logro también te lo puedo compartir, en su momento tú me motivaste a perseverar, lo que también te agradezco a ti.

Siento que voy por delante, que ya pasé por las pruebas para despertar, creo que por eso veo todo más esperanzador que tú.

Lo único que te pido es que no te rindas. Sucumbe a la oscuridad si quieres hacerlo, pero atraviesala como atraviesas los calabozos. Una y otra vez, el tiempo que sea necesario, porfiando hasta que ganas tus recompensas.

En lo profundo de mi espiritualidad, te envío valentía y fuerza, envío mi mano para que tomes en la oscuridad y mi voz para que te guíe.

Y mi amor, para que te abrigues y protejas.

[teesperoconvertidaenluna]

Cada día miro por la ventana, me asomo por la cocina, a ver si es el día en que llegas.

Yo sí quiero volar, pero contigo al lado como parte de mi bandada, buscando el mejor clima para anidar y crecer. Me encantaría que sintieras la esperanza que tengo por ti y por nosotros.

Creo que el mundo sobrevalora demasiado la individualidad en la soledad, creyendo que la soltería es sinónimo de libertad. No importa cuantos títulos alcance, o cuantos lugares vea alrededor del mundo, ni cuantos campeonatos gane. Nada de eso cuenta al final del día sin tu compañía. Creo que la vida se trata de amor, amar y ser amado. Amo lo que hago, y me llena, pero ¿con quién lo comparto?

Todos mis logros se completan cuando puedo contarte al respecto, cuando te pido consejos, cuando me felicitas, cuando te alegras por lo que hago, cuando me apoyas a seguir haciéndolo. Sin eso, siento que quedan ahí flotando en la vida... esperando por la verdadera meta.

Nuestro destino lo hacemos nosotros. Deseo desde el fondo de mi ser, que mi destino sea escucharte y besarte cada día.

Ansío que llegue el momento de escuchar todo lo que me tienes que contar, y de poder contarte todo lo que tengo aquí esperando.

Lo que sientes hoy es mi constante estado de ser, no es agradable, a veces siento que odio estar viva en este tiempo. Pero hay que seguir, hay que transformar. Y como ocurre en el 3d2y, hay que volver más fuerte.

Disfruta esta lluvia suave, abochornada, que no se decide. Para que en invierno, pordamos disfrutar esa lluvia que parte el cielo, acurrucados toda la noche, con el fuego como única iluminación.

(¿te acuerdas cuando por fin pudimos ver el fuego? creo que podría ser una analogía acorde)

Compartimos un fuego profundo,

una llama que no se apaga,

¿de qué color crees que es nuestra llama?

[teesperoconvertidaenluna]

Mis sueños generan una mezcla de emociones. En ellos somos los dos, juntos, siempre riendo y abrazándonos. A veces pienso que estoy mirando a través de un hoyo hacia otra vida. Y me entristece, porque en esta despierto sin ti, y no estoy riendo contigo.

Pensaba en esa canción, con la que llorabas después de decir "si me dejas me voy a morir", siempre me enojaba que buscaras esa canción. Siempre me enojaba que dijeras esa oración. Y siempre tuve razón, yo no te dejé. Parecía que estabas esperando que llegara ese momento para sufrir, sólo sufrir. Por un momento la escuché, sólo lloraba, furiosa de que me hayas dejado ir. Después no pude seguir escuchándola.

Detesto pensar que en esta vida y que en otras...

En la conformidad de decir "bueno, quizás en otra vida".

Quizás.

¿y quién va a saber? ¡Jamás vamos a saber! Si no es en esta, nunca nos enteraremos de la dulzura de compartir nuestra existencia. A la mierda la otra vida, en esta es y se acabó el tema.

Más nos vale que llegues, es aquí o nunca.

Exploto de amor que sólo quiere llegar a ti. ¿cuánto falta? (no quiero acelerar nuestro proceso, pero existen estas veces en que desespero y me gustaría adelantar cada minuto)

¿Se supone que debo dejar de soñar?

Desde que te conocí que no he podido no extrañarte.

Creo que a esto es que le llaman regular el sistema nervioso, ¿cómo quieren que me regule si no siento tu voz preguntándome si estoy bien? ¿si necesito algo?

Que dulce sufrimiento tener estos maravillosos recuerdos. No te olvido.