Don't wanna be here? Send us removal request.
Text
Cumpleaños 26
Llegue en un vuelo a Phuket. Dos dìas despuès que mis amigas decidieran como “plan perfecto” modificar lo acordado 3 meses antes y pasar mi cumpleaños en Kho Tao. Y si, desde èse momento, odie Kho Tao sin conocerlo.
La idea era llegar a pasarlo con ellas asì que me tomè un taxi por 4mil baths desde el aeropuerto de Phuket a Surathani. Lo que me llevò tres horas de la madrugada del 13 de Julio.
Tres horas en taxi, ¿Desde cuando soy tan Queen? Desde que decidì no pasar mi cumpleaños sola y no existen los omnibus nocturnos a Surathani.
Intente generar amistad con el tachero, quizàs me hace un descuentito- pensè, Pero su corto inglès hizo imposible el diàlogo asi que aproveche a tirarme y disfrutar de dormir con aire acondicionado, màs que un lujo para las condiciones que ultimamente me acompañan.
La noche ya estaba joven y google màpas anunciaba destino. Sin embargo no recuerdo màs que una ciudad oscura y vacìa en la que me vi rodeada por un grupo de policias.
El taxista les hablaba confiado y me miraba, se acercò uno de ellos . El ùnico que hablaba ingles supongo. Me comunicò que la zona del puerto estaba cerrada, que no salìan barcos a media noche y que debìa dirigirme a un hotel.
Ni loca! -pense. Mis gastos ya fueron suficientes por hoy.-Duermo en el puerto. Le dije con tranquilidad.
La cara del poloicia se deformo. Usted no puede dormir en el puerto, es muy peligroo. ç¿Mucha mafia! MUCHA.Elija un hotel y se lo informo al taxista. -¡El mas barato!
Claramente no entendio nada, y aca estoy, parada en la recepciòn de un 4 estrellas al que no pienso acceder. Dejo por cortesia que el recepcionista me muestre todas las opciones y aclaro que son unas horas, solo necesito la clave del wifi, pasar al baño y si me permite utilizar el sofa seria maravilloso.
Creo que le di pena, y asì empezaron mis 26. sI, para muchos gozando en Tailandia, para mi sentada en la recepcion de un hotel de Surathani, mirando una novela argentina, y respondiendo los saludos de quellos que supieron sacar bien las cuentas...
0 notes
Text
Lunes de julio a la noche, mas que páginas matutinas son nocturnas. La paginas nocturnas son . más oscuras, son mas tristes, son más melancólicas. Por algún motivo que desconozco me levanto llena de luz, con ganas de todo, con hambre de nada. Sin embargo, llega la noche, y las luces se me apagan. La energía se convierte en vacío, las ideas se terminan y los sueños se opacan.
Que habilidad tienen las personas para influir en nuestro estado de ánimo. Una palabra, una cara, una acción.Pueden llegar a cambiarme el día entero. Y más si vienen de alguien cercano. A veces la lógica sabe que fué sin intención. Que mañana va a estar todo bien. Que nada es tan importante. Pero el corazón no entiende, y sube, sube hasta la garganta con ganas de salir pero no puede. Generando ese nudo molesto que no me deja dormir.
Hasta hoy no lo había extrañado, y ya me estaba haciendo ilusión de que todo iba a ser más fácil de lo pensado. Al final, todo era una ilusión emocional, pensé.
Pero no, hoy cuando los problemas me abrazan, cuando la sensación de flote regresa y la línea de tiempo parece acortarse, me cuesta encontrar otro ser humano a quien yo esté dispuesta a mostrar mi desarme. Me siento más sola que nunca. Si, hoy lo extraño.
0 notes
Text
Levanto las manos queriendo tocar el arcoíris que rodea mi mundo, no puedo evitar moverme de un lado al otro, el centro de mi cuerpo es un nido de gorriones revoloteando. Mi cabeza solo piensa en lo bien que se siente ser feliz. Se me cierran los ojos de placer, pero solo unos segundos, no quiero dejar de mirar, de apreciar cada detalle del lugar más mágico en el que estuve.
Me reconozco en los hombros de alguien a quien nunca había visto antes, no hablámos el mismo idioma ni sabemos de donde somos, frente a mi tengo el castillo, el reino secreto de MELODIA. Banderas blancas flamean desde las torres rozando las iluminadas cascadas de agua que caen desde lo más alto del escenario. Los bailarines alaban al rey que tiene lugar en la parte central del castillo.
Los colores, más vibrantes de lo normal, las luces brillantes iluminan toda la pista reforzando la luz del sol.
En la parte inferior Martin Garrix, rodeado de mar, ese mar conformado por personas, que trasmite una energía inimaginable, una fuerza,un sentimiento de felicidad absoluta. Cada país, cada cultura, todos unidos por la música, eso es para mi Tomorrowland.
Se me llenan los ojos de lágrimas, me siento yo en mi mejor estado, plena, segura y feliz. No necesito drogas, no necesito comer, tomar , no necesito nada porque tengo todo lo que me hace feliz, la música, la libertad de bailar y la energía cultural.
¿Es el lugar que me imaginaba? No, mucho mejor, mi lugar en el mundo.
0 notes
Text
Flotando,
Viviendo para no vivir. Apostando al sueño, al paso de los días, a los atracones de miedo que se manchan de comida, a las ganas de nada, al sueño de todo. No hay inspiracion que cure el silencio del invierno, que me congela el corazon, y el cerebro. Todas las ideas, todas las esperanzas, los caprichos . Mi carcasa se baña de acido, uno tan fuerte y toxico que me rompe y me contamina. Ya no siento miedo, no siento nada. Ya no me veo lejos, ya no me veo
Trabajo, trabajo horas para poder pagar el psicologo que me ayuda a soportar la vida que no vivo. El resto no me da para nada, y sin nada la tierra no gira. Siempre quise creer que la moneda no mueve al mundo, pero hay dias que la ranura se deja ver y mi pedazo de metal no alcanza para engañarla.
0 notes
Text
Y él, la persona que menos me interesa en el espectro, el lindito sin contenido, resulto ser el cascanueces y cuando menos me lo esperaba despertó para hacerme la pregunta más profunda que me podía hacer, quizás sin notarlo, quizás en otro sentido, pero yo sentí ganas de responderla,
- Quien sos Agustina?
SOY, soy una persona extremadamente sensible, muy visceral, todo lo que sale de mi se siente, y todo lo que se percibe también, soy frágil, muy frágil, no lo demuestro ,lo se, porque tengo miedos, muchos miedos que oprimen y me hacen ser alguien que no soy. También soy creativa, muy creativa, pero siempre en base a lo que está, no soy de esas personas que crean a partir de la nebulosa, yo creo a partir de lo que veo, a partir de lo que se, de lo que siento, de lo que sueño. Puedo ver una escena cotidiana e imaginarme una escenografía perfecta, para una cita, para una meditación, para un crimen perfecto. Imagino, imagino todo y lo escribo, porque encuentro en la escritura mi escape, mi escape para esta mente activa que no puede parar, si soy mental, muy mental, anhelo ser espiritual pero mi mente es muy inquieta por lo que tuve que aprender a calmarla, y ahí llegaron mis hobbies, el ballet, la danza en general, la escritura, la caminata, y de mis hobbies a mis sueños.
¿Soy capaz? tengo voluntad pero mis miedos son mas fuertes, el miedo al rechazo, al abandono, hacen que no logre exponer lo que sale de mi. Hay días que lo se, hay días que no, mi mente es tan activa que fluctua entre lo bueno y lo malo constantemente, entre una hora y otra hay mil pensamientos, mil ideas, mil emociones, el amor y el odio se pelean por ocupar mi pecho, y asì aveces siento un hormigueo, y aveces una faja, una faja que me apreta y casi no me deja respirar, una faja que me hace odiar todo lo que veo, todo lo que me dicen, todo lo que pienso. Me peleo con personas, creo discusiones, creo escenarios en los que no puedo parar de llorar, todo en mi mente, sin que nadie mas sea parte de ello, pero lo siento, lo siento tan profundo como si fuera real.
En mis días buenos soy escritora, soy bailarina, soy feliz. Cuando los transcurro pienso que no hay forma de volver a salir, pero la historia de mi vida me enseño que es un circulo, los días buenos y los malos existen para poder diferenciarse. El dolor y el cosquilleo son intensos pero siempre son mejor que el vacio, ese vacio que me hace sentir muerta. Si, lo he sentido, lo siento aveces, cuando estoy atada a algo, cuando no avanzo, cuando no se que es lo que quiero. Tengo la gracia de decir que nunca dura mas que un momento, y que cuando durò supe imaginarme un escape, ese escape que logró conectarme con mi cuarto y casi favorito hobbie, el viaje.
0 notes
Text
Me encuentro sentada en la madera húmeda de un muelle quizás abandonado, no estoy sola, estoy con ellos, con mis actuales compañeros de viaje, Renato y Juan, sin embargo me siento más sola que nunca, y creo que ellos también.
Hace dos días salimos desde Tauranga ellos en un auto y yo en el mio, hicimos la parte baja de la isla norte y en Wellintong tras una noche de camping solos en el medio de la montaña cruzamos en ferry hacia Picton. Desde allì nos fuimos turnando para que yo no tenga que manejar toda la jornada, sobre todo porque las curvas y los precipicios ya me tienen un poco mareada. Definitivamente son las rutas mas hermosas que vi en mi vida. La combinación de playas oleadas con lagos cristalinos y montañas nevadas me tiene enamorada.
Estamos juntos pero no hablamos, porque la situación es muy completa como para agregar diálogos. El agua es un espejo que refleja las montañas, es un lago, un lago amplio rodeado por las montañas más maravillosas que hasta ahora he visto. Hay un muelle, nuestro muelle, que se hunde en el agua de deshielo. El cielo no está claro y llueve, o llovizna, el sonido es tan ameno que ninguno se molesta por eso. Todos miramos al horizonte y vemos donde estamos, en una postal, en un cuadro inicial de película, realmente no creí que estos rincones existieran, y si existían me imaginaba un escuadrón de chinos sacando fotos, pero no, no hay nadie, somos solo nosotros tres, un entrerriano, un mendocino y yo, una uruguaya sin locación definida.
No puedo dejar de respirar y mirar la punta de este muelle, hace frio y en lo más alto de las montañas veo nieve, pero la persona más friolenta de éste mundo, osea yo, no tengo frio.
Hasta hoy creí que el motivo de mi viaje era uno, y estaba encaprichada con mantenerlo, no entendía la historia del eterno viajero, no entendía la filosofía de viajar por viajar, intentaba encontrarle un motivo, una excusa, ahorrar, aprender inglés, tomar experiencia en distintas áreas quizás, o simplemente tomarse un descanso y sanar el alma cual Julia Roberts en “Comer, rezar y amar”. . No me reconocía en nadie, no me sentía identificada con ningún backpacker, de hecho no fue fácil superar ese día, en el que en mi primer hostel de Tauranga una argentina llamada Melina me impuso que yo, era Backpacker. La mire con cara de pocos amigos, nadie me iba a decir quien yo era, y sin dudas no era una backpacker. Yo tenía más aspiraciones, una “vida” en Uruguay,amigos, un camino marcado, “metas”, yo no soy ni voy a ser de esas personas que necesitan un viaje para tener algo que contar, yo estoy acá para aprender inglés, para conocer el mundo, para volver con otra experiencia y seguir mi ambición de ser “alguien”.
Pero creo que estoy entiendo, ya era alguien, ¡Claro!, que ya soy alguien, que todos somos alguien y nadie es más que nadie por tener un par de sellos en el pasaporte, o un buen trabajo, un título, una meta super definida o la cuenta llena de ceros. Hoy entiendo que yo estoy acá porque lo necesito, y que viajar definitivamente no se trata de lo yo pensaba.
Viajar no es conocer lugares lindos, subirse a un avión y recorrer el mundo, no es visitar y sacar una foto para después marcar con un punto las ciudades en el mapa de Facebook.
Viajar es esto, es estar por accidente en lugares mágicos, con personas que por algún motivo del universo se cruzaron, es confiar en el desconocido pero más que nada confiar en mí, en mis instintos, en mis miedos y en mis seguridades. Es trabajar duro para aprovechar los momentos de libertad, reconocer que las distancias no son tales si no tengo márgenes de tiempo, es saber decir no a lo que no quiero y embarcarme ciegamente en lo que si estoy buscando hacer. Es perderlo todo, pero todo, deshacerme de las cosas, perder la línea de la imagen, quedarme sin un peso y ver cómo sobrevivir. Gastar esos últimos dólares en noodles para todos los almuerzos, y las cenas y hasta a veces los desayunos. Disfrutar como nunca ese gustito de comer un buen plato de comida cuando se presenta la oportunidad.
Hay una frase que gusta mucho a la sociedad “Salir de tu zona de confort”. ¿pero es realmente subirte a un avión es salir de tu zona de confort? Hoy creo que no. Mudarte a otro país manteniendo tus costumbres, tus seguridades, teniendo un respaldo de que nada va a suceder, eso no es salir de tu zona de confort, al menos no de la mía.
Hoy viviendo esta postal entiendo que llegue acá para saber que nada de lo que me preocupa es tan importante, que la idea del trabajo fijo la creo el hombre, que la idea de una carrera la invento el hombre, que la idea de vivir en una sola ciudad, la invento la sociedad, y que si algún día me siento bien con eso va a estar bien también, pero porque yo lo elijo, porque yo decido que ahí va a estar mi felicidad, no que es lo correcto, no que es lo que tengo que hacer.
Con este sentimiento de paz y esta alegría que siento por no saber qué va a ser de mí en un año, ni en un mes, ni en una semana, ni siquiera mañana, siento hoy y quizás solo por hoy pero un hoy eterno que no nací para estar quieta. Nací para vivir de las circunstancias y que, si empiezo a apreciar cada coincidencia, cada persona que se aparece en mi camino, cada milagro que se me presenta ya soy feliz, y ya soy quien quiero ser.
Los chicos empiezan a hacer comentarios, estamos todos mojados y unos buenos mates nos harían bastante bien.
Cargamos la olla de agua y prendimos la mini garrafita de camping, -suerte que están preparados-pienso
Nos metemos debajo de un techito y empezamos a planear nuestro recorrido por esta maravillosa isla sur, aún no los conozco bien, pero no necesito más tiempo para saber que son buenos pibes. Ellos vienen viajando juntos hace un mes y ya parecen hermanos de toda la vida, se pelean, pero sé que se aman. Los envidio en el buen sentido de la palabra, me gustaría crear un vínculo así con alguien en éste viaje pero todavía no lo he sentido, todavía me queda tiempo sola.
-Bueno sigamos viaje- Dice Renato-Tenemos que llegar a la próxima ciudad antes que anochezca porque otra noche en carpa con lluvia no da no?
-Si vamos.
Y así, como quien se va de un lugar al que asiste todos los días, nos despedimos de éste mágico portarretratos, y así como quien vive un día más empiezo a conocer a mi “yo de viaje”.
0 notes
Text
Fui a mirar un apartamento así que aproveché la caminata y me vine hasta el Monte. Si, de Tauranga a Papamoa caminando y desde ahí al monte, un montón. Tal como me prometí anoche me vine al paraíso de día y sola, aca estoy, feliz. Es impresionante como alterno de la felicidad a la melancolía todo el tiempo. Desde que llegué no he conocido muchas chicas viajando solas, generalmente están en grupos o en parejas, me pregunto diariamente si yo voy a ser de esas, ¿Me voy a encontrar en unos meses siendo la que viaja con? Me cuesta pensarlo, la soledad no me asusta por ahora.
El sol me hace sentir calor y resalta el color turquesa del agua, el color me encandila y me encanta. Hace una hora estoy aca tirada sin hacer nada mas que mirar pensar y sacar algunas fotos, pienso en la hora que tengo de caminata, reacciono que es tiempo de volver si quiero seguir buscando auto y departamento.
Voy cual turista feliz caminando por la playa, miro todo, el agua, la arena, y la vegetación intensa que rodea el lugar. Los edificios son bajos y muy cuidados, éste lugar me recuerda bastante a la zona del Emir en Punta del este. Hace frio para estar en el agua, pero nunca faltan los grupos de surfistas dominando las olas. Tampoco faltan los surfistas potros que salen del agua y se dirigen a su combi (lo ojeo)
Parece que ya se va, tiene la piel bronceada cual chico rip curl y el pelo ondulado y descolorado muy fiel a su religión. Debe ser australiano, apuesto todos mis bienes a que es australiano. Ojos color miel que resaltan en el marron de su bronceado, la panza esta perfectamente tallada a mano y su actitud Otto Rocket power básicamente mata a cualquier individuo femenino que este a la redonda. Por suerte esto de mirar y hacerme la interesante a la vez me sale barbaro, así que seguí mi camino sin titubear y pase por en frente de Otto.
-Hola!
¿Escuche bien? El topisimo Otto wallabie me acaba de hablar y en español? . No pude evitar darme vuelta y decir lo primero que se me cruzo en la mente
-¿Cómo sabes que hablo español? – exclame
Hasta ahora todos pensaban que era francesa, de hecho los argentinos del hostel me hablan en ingles. Que ingenuos.
-Lo presenti- dijo . Como para completar un cuadro perfecto de Nicholas Sparks
Me reí y segui caminando. Los nervios no me permitieron tomar más acciones, típico que se dio cuenta que lo estaba mirando, y yo que me creía la dueña de todos los oscar en el rubro “bichar con disimulo”.
La rambla es larga y yo me siento observada, ¿Cómo no le segui la conversación? ¿De donde sos? ¿Qué haces aca? ¿Das clases de surf? Osea mil cosas podías haber dicho Agustina, miles, nadie te conoce, estas sola del otro lado del mundo, te acaba de hablar el potro imaginario de todas tus películas pero vos no, no fuiste participe de la película, tomaste el papel extra calificado y seguiste caminando. Y si, así es la vida, parece que viene la magia pero una se dedica a mantener el perfil mujer normal.
En un escenario uruguayo esto queda aca, es decir, ya está, cruce de palabras con un potro se dan dos veces al año con suerte , pero parece que el viaje es distinto, las películas si se concretan.
-Hey!- Me grita desde la combi que ya esta a mi costado
-Hey- respondo
- Me vesti rápido para alcanzarte, ¿Te llevo?
Me vesti? Yo le sigo viendo todo ese maravilloso pecho descubierto, ¿que se puso? ¿las medias?
- Para donde vas? –Pregunto
- Para Te Puke
Genial, exactamente para el lado contrario a donde voy yo – pensé- si crei que era mi dia de suerte crei mal
-Voy a Tauranga, no te sirve
-Bueno no importa subite que te llevo a donde quieras
Wow, que onda, estoy completamente confundida con la situación, lo veo como esmerándose, hasta ahora ni el pibe más pedorro de Montevideo se esmeraba por verme, pero desde que llegue no paran de invitarme a salir , y hoy conozco al potro de mis sueños y se va a clavar dos horas de viaje solo para llevarme al hostel. Wow.
- De que parte de Argentina sos ¿
- Uruguay- digo sintiéndome una vez mas re original
- Me muero! Yo también soy uruguayo! Que viaje no pareces uruguaya
-Vos tampoco! – Tuve que pelear conmigo misma para no preguntarle de qué película lo habían sacado.
Así que me encuentro con un tremendo potro uruguayo , que hace surf, se viste con la mejor onda y tiene básicamente la combi de mis sueños. Miro para atrás y no puedo creerlo, toda equipada, hasta una hamaca paraguaya , quiero pedirle casamiento, pero capaz se asusta, tendría que esperar unos días mas.
- Y bueno vayamos a los clásicos- se rie- ¿Hace cuanto llegaste?
- A nueva Zelanda una semana y media pero estaba en Auckland, a Tauranga ayer y parece que ya tengo trabajo empiezo mañana. ¿Vos que onda?
- Yo estoy en la vuelta hace tres meses, vine con dos amigos y ya recorrimos la isla norte, ahora estoy trabajando en el Picking de kiwis muy tranqui en la naturaleza, las fabricas no son lo mio.
- No te estaría viendo trabajar
- Jaja pasa que los kiwis tienen que estar secos para que los podamos sacar entonces aprovecho las mañanas para tirarme al agua y después voy directo para alla, hoy voy a estar llegando como dos horas tardes porque se me cruzo una rubia en el camino- se rie
Hola te amo casate conmigo – Pienso
- Uy me vas a hacer pagarte las horas o que?
- Con tu teléfono arreglamos. Si queres! Sino la buena onda del viaje ya esta bien.
- Jaja no obvio aparte soy nueva en la zona me viene bien un contacto
- ¿Y con quien viajas?
- Con mi persona
- Wow una Uruguaya con pinta de francesa que viaja sola, siento que descubrí America
Y yo siento que me quiero quedar a vivir en tu combi-Pienso.
- Si no se soy bastante nueva como verás, todavía no tengo casa ni auto y aún no me acostumbro a esto de dormir con 12 personas más en el cuarto, me despierto cada vez que abren la puerta, y vestirme a la mañana con la lámpara del celular me pone un poco malhumorada.
- Jajaj no! Yo tampoco me acostumbre, ahora estoy viviendo en la casa de unos Maories que son unos genios, tenes que venir un dia, va te tengo que llevar porque es exactamente para el otro lado de Bay of Plenty
- ¿Cómo conseguiste una camioneta con cambios en Nueva Zelanda? Esta divina!
- No se tuve mucha suerte, me la vendieron ya toda equipada, estoy enamorada de ella, ahora le voy a comprar la parte de mis amigos asi cuando nos separemos me la quedo yo.
Hablamos todo el viaje, su exceso de simpatía me confunde, realmente no estoy acostumbrada a esto, se ve tan excitado e interesado en mi persona. Nos despedimos en la puerta del hostel y quedamos en hacer algo. Yo no caigo en la situación pero este viaje en combi ya hizo que mi dia sea perfecto.
Llego al hostel, cansada y con ganas de dormir la siesta. Este lugar me atrapa, el sillón es como mi rincón favorito donde me siento a escribir y a buscar autos, van a hacer dos días que estoy aca y ya siento que paso un mes. Garfield y Sam son mis amigos de living, dos ingleses , muy ingleses, que disfutan de conocer gente de otros países.
Ellos admiten ser aburridos y odian ser ingleses, dicen que aman a los latinos y que sueñan con ir a la locura de Sudamerica. Que extraño saber que un ingles tiene interés en ser uruguayo. El típico uruguayo reprimido que odia Uruguay diría estás loco! Uruguay es inseguro, es caro, el nivel de vida es malo. Pero ellos no lo ven así, lo único que no paran de mencionar es que somos quejosos y que no apreciamos lo que tenemos.
A las 6 de la tarde nosotros tres ya estamos cenando, mientras los argentinos están cocinando en comunidad el clan ingles y yo fuimos por unas pizzas y nos las devoramos mientras miramos Star Wars. Si bien no paran de decirme que hablo muy bien ingles yo me pierdo la mitad de sus chistes y aún no logro entender lo que dice la recepcionista que por cierto es kiwi.
¿Do you want some? Dice Lolo un argentino que tuvo que googlear como decirme esa expresión emitida con un ingles muy argentinizado.
-Soy uruguaya -exclame- Ya me sentía mal de hacerme la que no les entendia
- Uy enserio? Jurábamos que eras francesa o dijo Cami alemana
Camilo, de todos el mas serio y el que mejor me cae. Si bien es el menos atractivo quizás es el único que me resulta familar en lo que tiene que ver con formas de moverse. Casi no he hablado con ellos pero solo con mirar una persona ya sabes mucho.
Socialice un poco con el clan latino y volvi a mi lugar, le digo a sam que mañana seguimos con la búsqueda porque ya quiero ir a la cama.
- Sos la única latina que se duerme temprano.- dice
- Seguro también soy la única que no toma cerveza- me rei
Levanto mis cosas y aprovecho a comunicarme con el mundo Uruguayo, los horarios son difíciles así que la mañana y la noche son los momentos de conexión los cuáles al principio se hacen necesarios.
Entre todos los mensajes veo un numero desconocido.
-Hola soy Bruno el chico de la playa, te copa que hagamos algo?
Corri expreso al cuarto, ya no a ponerme el pijama. Me arregle como pude y a la media hora ya estaba en la puerta mi surfer príncipe azul.
- Wow- dice Sam
- A donde vas Uruguaya?- Grita lolo
- Citas no permitimos- dice Cami
- Contanos- grita Melina una de las argentinas
- Nada voy a ver un amigo nos vemos después!
Todos se rieron, acababa de llegar a la ciudad pero la piba ya tenia un segundo amigo que la pasaba a buscar denoche. Me subo a la combi y lo vuelvo a mirar, por si acaso la belleza se la había adjudicado el traje de surf. Pero no, tenia una camisa a cuadros de esas gruesas muy yankee, y estaba realmente comestible.
- ¿Vamos a tomar algo al mount?
-Me parece bien!
Con todo esto casi no le respondi a Dante, y en este momento estoy empezando a caer de me estoy distrayendo con otra persona y no hace dos semanas que llegué. El único punto negativo de Otto es su altura, es como de mi tamaño, no mucho mas, si me pongo plataformas lo paso. Pero bueno todo no se puede, y su sonrisa es demasiado perfecta, prefiero usar siempre chatitas a exluirlo por eso.
-¿Fumas?
Era de esperarse, su perfil daba perfecto con el cultivador de Marihuana.
- Tuve una mala experiencia en Amsterdam hace un año y desde ahí no más weed.
- Es tremenda flor, pero sos vos la que elige. ¿Te molesta que yo fume?
- Te acepto alguna pitada
Hablamos de la vida, de lo de siempre, que te trajo aca, que extrañas, que queres hacer, queres volver o no queres volver, donde pensas pasar el invierno, y en este caso hablamos mucho de su perro, el único ser al que el sentía que extrañaba.
-Mañana te llevo a ver departamentos si te parece bien, es un embole andar en bondi aca.
-Uy te re agradezco
La marihuana ya me pego fuerte, estoy tan calmada, tan tranquila, me siento bien en su compañía, sin embargo no me dan ganas de besarlo, es como que siento culpa, suena estúpido sentir culpa por alguien que esta tan lejos y que nunca te tuvo en cuenta, pero es lo que siento, y lo que siento no se pausa, se mantiene.
Agarra el elemento que le faltaba para ser perfecto, y empieza a tocar muy predeciblemente una canción de Bob Marley en su guitarra. Me cuelgo en sus manos, la flor y la música imposibilitan mi capacidad de movimiento.
-Tenes frio?
-Siempre tengo frio
Se saca el buzo y me lo da. Es un canguro gris con letras impresas, muy lindo, muy cheto , pero mas que nada super abrigado.
-Este buzo me lo compre en Nepal y lo amo, cuídamelo
Mientras se saca el buzo y me lo da se acerca. Me abraza como para darme calor y recostados en el techo de la combi, miramos el cielo. Momentos perfectos si los hay, estuvimos como media hora abrazados en silencio.
- Me gustaría seguir viéndote- dice
- A mi también
Me agarra la cara, me mira , y sin darme cuenta tuve mi primer beso de viaje, extrañamente con un Uruguayo,extrañamente culposo,un beso largo y tierno, que quedo en la nada, y me hizo pensarlo todo.
0 notes
Text
Martes, primer día en Tauranga.
La luna esta llena y me ilumina, a mi ,al mar y a este maravilloso monte que me rodea, ah! Y al chico que me acompaña.
Hace frio debo decir que la altura a la que me encuentro me asusta un poco, me siento confusa, bastante confusa, aún no logro adaptarme a Nueva Zelanda, lloro mucho, un montón, todos los días me sorprendo siendo muy feliz y llorando a la vez, es tan raro, no siento que extrañe a nada ni a nadie, tampoco tengo motivos para estar mal, no tengo miedo, no tengo presiones, no tengo nada que me preocupe, simplemente estoy sola , viendo que va a pasar, me sigo despertando a las cuatro de la mañana y me vuelvo a dormir a las seis de la tarde..
Me volví a encontrar con el intruso del avión, ese uruguayo que me dejo un papelito con su numero cuando llegue al aeropuerto de Auckland, y aca estamos sentados, contando nuestras historias, va , en éste momento el me cuenta la suya y yo sigo enredada en mis pensamientos. No es que su vida no me interese, o quizás si, quizás no me interesa ni un poco saber por qué renuncio a su super trabajo cuasi millonario, ese para el que estudió 8 años de su vida, o cómo se lo dijo a su novia quién lo fue a despedir al aeropuerto antes de partir. Lo miro y le doy mi aprobación, creo que ni el ni yo estamos seguros de la locura en la que vivimos, pero lo veo actuando bien, seguro, insistente en su plan “Aventura”. Me rio internamente convencida de que este pibito se vio “Into de wild” unas 5 veces, se imaginó un plano en la ruta con el pelo al viento levantando alguna francesita que hacia dedo al pasar y se mandó, ahora, trabajando 12 horas encerrado en una fabrica se debe querer pegar un tiro. Pero bueno, lo disimula bien , y yo hago que lo escucho.
Estamos precisamente en Mount Manganui. Unos metros antes de llegar al monte hay una isla que no es isla, es como un trozo de tierra virgen, parece que la tomaron del medio del océano y la pegaron aca , en la playa del monte. Llegamos caminando desde la arena, el con su birra y yo con mi agua, atravesamos el mini bosque y nos sentamos en el extremo más alto que encontramos. Este lugar es un paraíso, mañana quiero volver de día, y sola.
El sigue hablando y yo no dejo de pensar en cómo me gustaría compartir esto con alguien, o más precisamente con Dante. Hablamos tanto que aveces siento que está acá, pero no está y no va a estar, así que me tengo que ir acostumbrando.
Mientras sigo sumergida en mis pensamientos y en la contemplación del inmenso mar que me rodea siento cada vez más la cercanía de éste chico. – Uy no, se me esta acercando- Quien me manda a ponerme en ésta situación- el ochenta porciento de la cubiculo mentalidad uruguaya diria : y si, una chica sola con un desconocido en el medio del bosque seguro tenía otras intenciones- pero no señores, no todo el mundo se cruza en la vida con intenciones
- Extraño a mi novio- Mentí
- Ah no me contaste que tenias novio, ¿y como es eso? ¿Va a venir?
- Quizás, o quizás yo me vuelvo antes del año. Quien sabe
- Te entiendo, yo también la extraño.
Lo mire a los ojos, esos ojos redondos y grandes que se espejan mientras se rasca su crecida barba, el también extraña, el también llora, no me lo dijo pero lo se,capaz no somos tan distintos. Lo pensé dos segundos, pero no, definitivamente no me gusta. -Vamos yendo?
0 notes
Text
Ya me estaba acostumbrando, y la costumbre me daba miedo, miedo a haberte perdido, pero haberte perdido en serio, a haberte pedido en mi corazón, en mis sentimientos, en mi felicidad.
Te adelantaste, como siempre, y me dejaste, me dejaste con limites, me dejaste creyendo que no soy lo que queres, y lo soy, solo que vos no tenes idea que queres,. Y yo , tengo claro que te quiero, tengo claro que quiero que estes conmigo, que quiero verme con vos, sin embargo, tengo claro que no sos mi salvador y que no te necesito, te quiero.
Y ahora todo vuelve a ser divertido, porque sos otra vez un objetivo, vas a ser otra vez una motivación y no ya una ocupación.
0 notes
Text
-No lo tengo claro -me dice,
como dando a entender que yo si, y yo no , o si, no se , no me importa, no me importaba, no me importó, no me importò cuando decidí probar denuevo , porque para el era probar, pero para mi era probar denuevo.
Probar de nuevo y arriesgarme a que mis sueños cambiaran, arriesgarme a cambiar de refugio, perder esa imagen en la que solia pensar cada vez que mi vida me defraudaba, porque si me volvia a romper el corazón, podía mantener ese sueño, pero si me dejaba conocerlo, todo lo que yo crei se derrumbaría.
Y sucedió, el pedestal callò al suelo y debajo de esa estatua divina me encontré un ser humano, un ser humano con inseguridades, con miedos, con defectos. Alguien que no era feliz todos los días de su vida y que no sabia exactamente que hacer después de cada amanecer.
Senti que la distancia se desvanecia pero no solo porque el bajara, sino porque verlo ser, me hizo sentirme viva. Dude de la intensidad, porque la intensidad destruye. Yo soy intensa, ¡ como no ser parte de lo intenso!, ¿Es que acaso tengo que despedir mi intensidad? Seria entonces despedir parte de mi esencia, de mis ganas ¡ Que sentido tiene disfrutarlo sin intensidad!?.
Un freno, un freno que me oprime el pecho, que no me deja fluir, que no deja fluir. ¡Que se yo de relaciones? Nada, no se nada, soy como un niño, un niño al que nadie le enseño a querer.
. No se si tuve esta relación, no se si contaba como relación, porque para mi era lindo, era muy lindo, me hacia sentir bien, me hacia sentir parte, capaz entonces no era nada.
Queria vibrar, quería fluir con alguien que parecía vibrar, pero al final, como todo. El tenia limites. Me gusta querer, y querer implica cuidar, querer implica acompañar, implica ser y ser es compartir, ¿Còmo quiero en secreto? ¿ Como siento sin que se note? ¿ Como sigo sin querer?
Parece que no era eso, no era disfrutar de ser lo que somos, entender nuestros defectos, no era querer hacerlo feliz, pero tampoco era entender que la felicidad es de uno, porque para eso hay que ser uno, y si hay un freno, si hay un limite para querer, ¡ Como se puede ser uno!?.
Pero no sabia, no sabia nada, no sabia que había reglas, había cargas, había una parte negativa del amor que nadie me conto. Porque si no hay limites hay responsabilidades, responsabilidades que terminan con la magia, y parece que yo sin tener idea de las reglas las estaba escribiendo, las estaba reclamando. ¿Lo estaba haciendo? Yo de verdad estaba dejandome ser, como fluir puede llevar al encasillamiento? ¡ Como dejarse llevar puede dirigir a ruptura?
No me importa que no seas vos, no me importa haber perdido mi ideal, no me importan tus limites, ni pienso volver a querer sin ser yo. Si no fluye, que no sea.
0 notes
Text
Solo unos metros nos separan , estamos sentados en la plácita de la explanada, él en la mesa y yo en el banquito, estamos solos, el frío que invade Waiheke después de dos días de lluvia nos encuentra mirando al horizonte y hablando con más dificultad de lo normal .
Está ansioso y yo nostálgica. Me pregunto como se siente estar en su lugar , me pregunto que se siente volver, que se siente dejar el viaje, es tan extraño, y me siento tan ajena a esa realidad de “la vuelta”. Pero se él lo anhela, ya quiere estar allá , sabe que va a extrañar ésta islita segundo hogar, pero no aguanta más la ansiedad de abrazar a su familia y sentirse después de tanto tiempo “en casa”.
Hacemos como si entre nosotros no hubiera cambios , como si mañana nos fuéramos a volver a ver , como si nos conociéramos desde siempre y esto se tratará de una anécdota a agregar. Pero yo no lo siento así , y creo que el tampoco . Hoy, quizás 6 meses atrás para mi sorpresa, soy consciente que estoy a punto de separarme de una de las personas más importantes de mi viaje , estoy a punto de separarme de mi primer compañero, al primero que quise y odie a la vez , el primero que supo discutir, el que me enseño lo que es la convivencia y antes que nada el primero que me hizo sentir parte de un vinculo, o simplemente “Parte”. El fue y es mi refugio en este universo solitario. Recuerdo cuando empezamos a viajar juntos , ya hace 8 meses de esto , yo siento que fue ayer o que pasaron años, mis primeros pensamientos en la ruta fueron “ que suerte que tengo , es buen pibe, lo voy a querer , como me va a costar separarme de él “. Todavía no lo conocía realmente , no sabíamos que nos íbamos a separar pero que nunca íbamos a dejar de hablar , en un momento pensé que nunca más nos íbamos a ver y acá estamos, juntos, hasta su final. No puedo evitar pensar que éste es nuestro final , vivimos en ciudades distintas, en países distintos, en climas distintos. Con suerte nos cruzaremos alguna ves más en la vida pero éste vínculo se termina acá y cuesta mucho, mucho ser concientes.
Nos miramos porque sabemos lo que estamos pensando. “Gracias” es todo lo que le quiero decir, sin embargo no puedo, mi orgullo y mis miedos son más fuertes, él lo sabe todo y yo también , no nos vamos a volver a ver, pero nunca me voy a olvidar de vos , porque fuimos familia, de esas que solo las circunstancias conforman y los viajes deforman.

0 notes
Text
Pecho chiquito
El monstruo más temido, ése a quién nadie quiere ver.Aveces aparece y me cubre con su sombra, Pero yo cierro los ojos para no verlo, porque se que está ahí.
Ese sentimiento oscuro y seco, ése que me inmoviliza en la cama y no me deja pensar. Me bloquea,me detiene, me hunde.
Aveces siento que duele, aveces creo que no, que es simplemente una pérdida energética que me consume y me deja chata, más chata que yo misma.
Mentalmente es un circulo, un plato, un plato que va pasando y me estruja con cada giro, primero lo siento en alguna parte, después me aplasta por completo, al punto de sentir que ya no vivo.
Cuando se va sin embargo sabe hacerlo lento, girando, lo siento cada vez menos, y sin darme cuenta pasa, y lo recuerdo, no lo extraño, le temo.
Pero se va y me deja, me deja sabiendo que puede volver, me deja sabiendo que ya paso, entendiendo que no es suficiente para que vaya detrás de el.
Se la llevó, a élla, se la llevó de repente, cuando parecía que se había ido. Parecía que faltaba un solo giro para salir de su órbita, pero simplemente estaba aprontando su filo, dejándola ver el mundo y despedirse. El no la obligó, el la invitó, la invitó a ser parte de su victoria, la invitó a ser parte de su decisión.
Ella aceptó pensando que terminarían los círculos de sufrimiento, pero la monstruosidad se encargó de hacerla parte, y compartir un poco de si con todos los que temíamos ese momento.
#depresión
0 notes
Text
hitch-hike?
“ Jucy KeyBox”- Leo
-Bien, supongo que llegó el momento de separarnos. La miro por última vez, nos entendimos muy bien todo éste tiempo, a decir verdad después de todo supe quererla. Recuerdo el primer día,
- Estas son las llaves, viene con un tanque de obsequio y debe ser entregada en la fecha estipulada en Brisbarne.- La miré con susto, el Mitsu era bastante más bajito que ésta, pero bueno como siempre, me tuve que hacer cargo de la situación. Al principio con miedo, era muy nueva, muy linda, muy alta y muy tecnológica pero la verdad es que no me falló, fue mi camioneta, mi hogar y mi compañera de viaje todo el mes, solo élla sabe el calor que sufrí en el Norte, el susto que me pegue cuando casi muero esquivando un kanguro, solo ella vio mis interpretaciones de Taylor Swift en el medio del desierto, y solo ella estuvo conmigo cuando el Ciclón Debbie me encerró en una ciudad que nunca supe como se llamaba.
Pero como todo en la vida, llegó el momento, hoy, dos días tarde, estoy en Brisbarne y paso de ser la “Chofer y Queen de la Jucy” a ser la “Caminante y aspirante a pasajera Deluxe” de algun alma caritativa que me levante en la ruta. Acomodo mi mochila y con la ayuda de Google maps busco la ruta más cercana, son las 20 horas, está anocheciendo. Llego a la ruta que al parecer es una Autopista, genial, doy vuelta los ojos con ironía , no era esto lo que me había imaginado. Cuando pensé en hacer dedo en la ruta me hice la idea de estar en Nueva Zelanda o en Uruguay, Líneas blancas, postes indicando Kilómetros, y yo, bien a la vista para todos los solidarios presentes. La realidad es muy distinta, para llegar a donde están los autos tengo que saltar un muro, si lo salto me van a pasar por encima, a la velocidad que vienen me es imposible que alguien se detenga sin causar un accidente.
Es de noche y estoy en las afueras de la ciudad, sola, y bastante cargada, sin dudas tengo que pensar en un plan B , Pensá Agustina, Pensá. Bien, veamos que me depara Google Maps, la paralela más cercana que conecta con la autopista está a unos diez minutos, tendré que caminar hasta la siguiente estación de servicio.
Preparé mi dedo y me puse en acción, Ya comenzaron a pasar autos, todos miran, nadie se detiene, Rechequeo mi apariencia en el iphone para verificar que esta todo en orden, no hay peligro de confundirme con un asesino serial, supongo.
Ya pasaron 30 minutos, 20 sentadillas, 5 estiramientos y 10 imitaciones a los Pimpinela.
Para un auto, Yea! Baja el vidrio, cinco chicos, edad promedio 19, todos borrachos, -¿A dónde te llevamos? - No gracias creo que no entro y voy hasta Sydney – Mentí - Te llevamos hasta mi casa – grita alguien de atrás. El auto arranca, y yo me vuelvo a replantear el plan.
De inmediato para otro Auto, un policía, - ¿Señorita que hace?- Ingles odiosamente Australiano - Voy para Surfers Paradise , Bayron Bay o cercanos. - Suba, la voy a llevar a un mejor punto para que alguien pueda recogerla. Me subo feliz de que finalmente mi plan haya funcionado y empiezo mi típico speach de simpatía para éste tipo de situaciones.
- ¿Usted sabe que lo que hace es muy peligroso? - Aclama - La verdad es que hice esto mucho tiempo en Nueva Zelanda y estoy acostumbrada - Si, pero esto no es Nueva Zelanda, es Australia, ¿Sabe cuantos casos de violación diarios tenemos? No quiero saberlos, pienso. - Acá no hay cultura de recoger gente, va a ser muy difícil que la levanten , yo que usted voy buscando un hotel por la zona. ¡Ni loca!, grito para mis adentros. Mi presupuesto ya fué superado, no estoy dispuesta a pagar un hotel de media ruta.
Llegó el momento de bajarme, agradezco, y noto que como era de esperarse me olvidé de algo en el auto, la bolsa con municiones. Respiro hondo, miro a mi alrededor y noto que me vuelvo a encontrar en una situación en la que nunca en mi vida pensé estar.
Mi cara se ve iluminada por cientos, de miles, de miles de autos que pasan en todas las direcciones. Estoy parada en el medio de un cruce de tres autopistas mega, mega, muy mega enormes. Me siento en una película, podría decir que hasta escucho a los Rolling de fondo, me estoy imaginando a mi misma en ésta situación, siendo filmada por una cámara frontal, Rubia, de short,bottines, mochila y gorro de paja. El pelo me vuela por la brisa que genera el movimiento de los autos, puedo jurar por el universo que no hay nadie más en éste lugar que sea peatón. Me estoy divirtiendo en esto de ser la protagonista de la autopista pero la realidad es que no me estarían dando los cálculos para creer que alguien va a decidir parar y pasar a ser un obstáculo en el tránsito simplemente para consultarme a donde voy.
No voy a mentir, llevo dos horas cambiando de pose, nadie para, ni con buenas ni con malas intenciones, claramente éste no es un lugar para hacer dedo. Me siento y empiezo a planificar como descansar un poco en el medio del cantero, a decir verdad no creo que ni un uber me levante en éste lugar. La realidad no es tan mala, simplemente estoy en un país tamaño continente, sola, de noche, cargada, en el medio de dos ciudades, en una ubicación pésima para pedir ayuda, casi sin batería, y sin haber informado a nadie de mi paradero. La verdad es que no tengo miedo, pero quiero llorar del cansancio que tengo, hice 14 horas manejando de corrido para llegar a Brisbarne, camine con la mochila hasta llegar a la autopista, y ahora después de 30 horas sin dormir, no tengo ni idea donde voy a pasar la noche. Lo que se es que de acá caminando no puedo salir porque claramente no hay semáforos, y si, tengo tendencias depresivas, pero no como para tirarme a que me atropelle un australiano en su Mercedes Benz , si no son dos, tres o diez los que me pasan por arriba.
Me imagino las noticias en Uruguay, “Se suicida joven Uruguaya en Australia tras cruzar una autopista corriendo. Nadie sabe como llegó hasta allí pero testigos informan que no estaba muy bien de la mente y que hacía más de un mes que se encontraba viajando en Van sola por el desierto” ( Les encanta exagerar). No, eso no va a suceder, prendo los datos móviles y le envío mi ubicación a Tin (pero no le llega), supongo que sin en unos días no respondo me llegará un helicóptero. ¿Qué estará haciendo Tin? ¿Qué hora será en Uruguay? Seguro está estudiando, o yendo a trabajar. Seguro está chateando con su novio o haciendo abdominales en el piso del cuarto.
No termino de generar la idea porque me está enfocando algo. Una luz blanca muy fuerte y un desconocido que me grita ¡Subite rápido! – Otro acento a australiano nacido y recibido con honores de inentendible.
Corro al auto, no se si es un asesino serial, si es un violador o si es mi angel de la guarda, pero este tipo se jugo la vida para levantarme de la ruta. -Gracias, Gracias, Gracias!! – No puedo parar de decir - ¿Cómo llegaste ahí?- La cara de “ no entiendo nada” que tiene me da gracia -Me dejó un policía -Yo voy al siguiente pueblo, ¿Te espera alguien? - Si! – Miento- Tengo reserva en Surfers Paradise y me están esperando, ya les avisé que me has levantado- sigo mintiendo - Te llevaré hasta allí -Es de camino? -No, debo desviarme una hora y media. Wow, o me encontre con el Papa Francisco o éste señor me está dando miedo.
Enseguida le suena el teléfono, es su mujer - Me salió un tramite en Surfers Paradise voy a llegar unas horas mas tarde no me esperes.
Ya estoy temblando, el sigue hablando con su mujer pero no puedo concentrarme en escuchar y aparte entender cuando siento que mi vida esta corriendo peligro. Miro mi celular con intención de avisar a alguien, “Batería baja”, segundo acto, “Muere”. Bien, ahora estoy mejor que antes, en un auto de un desconocido, en un país que hace unas horas me describieron como “El paraíso de las violaciones” , sin Gps, sin tener a quien avisar, sin conocer en lo más minimo el camino ni a donde voy. Pasó una hora y sigue hablando por teléfono, creo que la esposa esta enojada, la autopista parece nunca terminar y mis nervios se van haciendo cada vez más intensos. Mueve la mano, viene hacia mi, tiemblo, me corro contra el vidrio, No, simplemente está haciendo un cambio – ¡Calmate Agustina! pienso, Sigo mirando para adelante, me arrepiento de no haber escrito la mátricula pero la verdad es que no tuve tiempo ni de pensar si subirme o no. Empieza a desviar y el camino comienza a hacerse más oscuro, tengo miedo y no es broma, miro hacia la guantera y veo una tarjeta personal, “Jhon Cron”. Bueno, por lo menos se que mi violador asesino serial se llama “Jhon Cron” y no Michael Rodriguez del CAP. Capaz hasta me hago famosa después de muerta.
¡Basta Agustina deja de pensar bobadas! ¿Se enterarán mis amigas como me morí? No puedo imaginarme el dolor de mi familia, ¿Se enterarán mis compañeros de trabajo? ¿Mis amigos de viaje? ¿Se enterará León?, reacciono, Estás a punto de ser violada, secuestrada y asesinada, ¿te importa si se entera el pelotudo de León?
- Esos edificios que aparecen allá, eso es Surfers Paradise
Abro los ojos al punto del llanto, ¿Es Jhon Cron el héroe de mi vida? ¿O será un angel guardián que me mando mamá? -¿Dónde queda tu hostel? (No tengo Pienso ) -Sobre la principal – Mentí. - Bien, ¿Te acordas el nombre? Así te dejo en la puerta, es de noche para que andes caminando
Miro por la ventana, “Surfers Paradise”, rascacielos enormes, mucha luz, muchos autos, mucho ruido, en nada se parece a lo que me imaginé, esperaba encontrarme un Bayron Bay más chico, un balneario de surfers, pero bueno, eso pasa cuando no te preocupas ni en averiguar a dónde vas.
-Es la ciudad de la juventud, fiestas, universitarios, y playa- dice con entusiasmo. Vuelvo a apreciar la ciudad, no está tan mal un poco de civilización después de tanto desierto, Respiro con aires de “Pasa a la siguiente fase” y decreto que hoy Agustina Berges sale a la “ciudad de la juventud paraíso surfer” para festejar que conoci otro buen tipo que, solo porque sí, me salvo la vida.

“VIVA EN SURFERS PARADISE”
#australia#adedo#mujer#miedo#viajes#ciudadanasdelmundo#surfersparadise#magia#viajeros#uruguayas#itravelalone#mujeresqueviajan
0 notes