zhyuxin

[zhyuxin]

"en realidad me preocupa más la resistencia del tejido de la hamaca, contigo debe estar suficientemente a prueba, señor thompson" revira dejando que la nota jocosa se mantenga en su tono a pesar de la pretendida formalidad de sus palabras. "ah, lamento el retraso entonces" se lleva la mano derecha al lado opuesto del pecho en un gesto sentido para completar su actuación. y una vez que se encuentra sentado, se quita el otro auricular que ha usado para limitar las interacciones tanto como le ha sido posible. 'el escudo de los tiempos modernos', solía decir su abuelo. agh, no quiere pensar en él. "claro, gracias" acepta, en cambio, el ofrecimiento del trago mientras la mueca burlona se transforma en algo más cercano a una sonrisa sincera. toma la cigarrera que reposa en su costado junto con el encendedor. "ahora me siento mal por no haberte traído flores" se permite bromear mientras los extiende en su dirección a modo de intercambio.

" Algo me dice que el Sr. Zhou no conoce el equilibrio " se mofó pero sin profundizar la pronunciación de sus palabras. Archie solo esta en esas hamacas buscando un descanso sobre actividades que está haciendo para mantenerse ocupado. Pero, ¿será la misma razón que llevaba a Yuxin a buscar la ausencia del ruido? No es imprudente todo el tiempo, siempre calculando si debe o no hacer algo, es parte de la actuación. De cualquier forma, también está en un descanso de eso. " Te estaba esperando, una hora más y terminaba calcificado " asomó la cabeza para percatarse de la silla, de los movimientos ajenos para hacerle compañía. " ¿Quieres un trago? " ofreció entonces, atreviéndose a compartir su preciado licor con alguien de su agrado. " De la colección especial de Archie Thompson ".

[zhyuxin]

exhala con dejes de risa divertida tan pronto como escucha aquellas palabras, ya ha dado por hecho que jamás podrá ganar contra ella. tampoco es como si le importara, en realidad. "¿quién es la sabelotodo ahora, hm?" murmura contra su cabello, dejando que las hebras se deslicen contra su rostro, provocándole algo de cosquillas. saca la mano del bolsillo de su chaqueta y cruza el brazo sobre el que ya tiene en torno a ella para sostenerla mejor contra su pecho. "pero no, no dejaría de abrazarte, a menos que me lo pidieras" retoma sonriendo un poco. e incluso entonces, debe admitirse, probablemente protestaría. "aunque si me dices que tienes frío, sugeriría ir a buscar alguna bebida caliente antes de volver a salir."

"Eso es lo que diría un sabelotodo". Lo regaña con delicadeza, una pequeña pizca de diversión asomando en los vocablos, pues está esforzándose por no reír. Envuelta en el sencillo abrazo, Ayaka cede al agradable contacto, apegándose sutilmente y tanto como puede, aunque sin despegar la atención del panorama encantador. "Si digo que no, ¿dejarás de abrazarme? Porque entonces, mejor pretendo que sí lo tengo".

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"uh... no" pronuncia despacio, alargando deliberadamente la palabra con una pretendida nota de interrogación. de todas formas, no puede evitar ocultar el fantasma de una media sonrisa que aparece en sus labios contra su voluntad mientras aparta la mirada del rostro ajeno para seguir el sonido agitado de las hojas de los árboles siendo sacudidas como huella de un trayecto. "me parece que tu atacante se ha dado a la fuga. ¿te dolió mucho?""

📍 cerca del muelle. . . ⠀Mirada perdida, pensando en todo y nada a la vez ¿habría diferencia si se hubiese negado a ir a Lautersee desde un inicio? Ya no importaba, su vida meramente fabulosa dejó de serlo de un día para otro y lo peor es que seguía sin entender por qué. De pronto algo le golpea la cabeza, haciéndola saltar, mirando rápidamente a su alrededor⠀‘ ¿Fuiste tú? ’⠀interroga a la primera persona que aparece en su campo visual, tono de voz es molesto y más elevado de lo normal.

[zhyuxin]

"querrás decir que 'dormirás' con los peces" deja salir el aire por la nariz como un resoplido entretenido por las palabras ajenas y el particular eufemismo que le hacen recordar. "la hipotermia no te dejará conocer a tus nuevos vecinos por mucho tiempo" repara en la apariencia ajena y echa un vistazo fugaz a lo que hay a su alrededor, mas no halla nada que pueda servir para que se seque. "pero me gusta la idea de quejarme, podemos hacerlo en turnos, si quieres." concede situándose al otro lado del muelle para apoyar la cadera en uno de los postes de madera y acomoda un tobillo sobre el otro. "¿algún tema en particular?" se acerca el cigarrillo a sus labios, aunque no consigue darle la calada. "excepto el humo. sólo puedes quejarte una vez por eso y consideraré apagarlo."

࿐࿔ MUELLE

cabello aún goteaba sobre su camiseta, pero la incomodidad provocada por el húmedo contacto era el último de sus problemas. recuerdos del agua resultando ideal para calmar ideas en su cabeza parecían un mero invento ahora que lo había intentado, y no había servido de nada. además del arrepentimiento y las ganas de irse a casa, ahora también tenía frío. ‘ dime que estás de malas y tienes ganas de quejarte ’ pidió, sin saber a quién, en cuanto escuchó par de pasos acercándose. ‘ si veo a una persona más pasándosela bien, me iré a vivir con los peces ’

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las palabras ajenas hacen que levante la mirada de la carta y la pose por encima del borde en el rostro ajeno. "los animales suelen evitar los lugares donde la presencia humana es obvia, así que no deberías preocuparte si tienes ganas de hacer un picnic" responde con el atisbo de una sonrisa divertida asomándose sútilmente en sus comisuras. si bien sabe que estar en un ambiente silvestre debe ser bajo las medidas precautorias mínimas, duda que sea el caso en lugares como éste, donde la idea del exterior es meramente una ilusión entretejida con las comodidades y el lujo. "probablemente pida una pasta" retoma el asunto del almuerzo. "¿qué hay de ti?"

COMEDOR GOURMET.

'¿te has puesto a pensar que no nos dijeron nada sobre los animales que viven en el bosque?' pregunta la pelinegra, ya que desde que llegó, fue algo que había estado muy presente en su mente, el posible peligro de encontrarse algo muy peligroso allá afuera. 'es un bosque, al final del día... cualquier cosa puede salirte mientras estás tranquilamente teniendo un picnic ¿no?' expone pensamiento antes de tomar su vaso de agua y darle un sorbo. '¿sabes que vas a pedir de comer ya?'

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"ninguna de las dos" responde escueto, elevando entonces la mano que sostiene el cigarrillo entre índice y pulgar mientras los otros tres dedos aferran el zippo, esperando que eso sea explicación suficiente. aunque no lo enciende, atento a cualquier señal de rechazo por mera cortesía. "te dolerá la cabeza si decides meditar mucho tiempo aquí" añade tras un instante, luego de notar la posición en que se encuentra. en su experiencia, los rayos del sol -a pesar del atardecer- y la humedad, suelen ser una mala combinación.

MUELLE — estaba sentado en posición de loto, mirando hacia el borde donde la tierra chocaba con el cielo que se teñía de un naranjo cada vez más apagado. se pudo ver una sonrisa dibujada en su rostro, hasta que un par de pasos a su espalda lo sacó de esa vaga concentración. ‘ ¿venías a ver el atardecer o vas a subir al yate? ’ sus orbes viajaron del intruse hasta la nave acuática aparcada a un costado, ¿y si estaba de antes? podría no haberse dado cuenta. 

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la repentina voz hace que sus pasos se detengan de golpe y que él aparte la mirada de la pantalla de su teléfono para centrarla en la espalda de quién ya se encuentra ocupando aquel rincón de la cubierta. "me parece que tienes la concepción errónea sobre a lo que se refieren con uso 'privado' para esta embarcación y no uso 'personal'" se encoge ligeramente de hombros antes de ponerse un cigarrillo en los labios para encenderlo para luego guardar la cigarrera y el encendedor de vuelta a los bolsillos de su chaqueta. "pero no te preocupes. no estaré aquí mucho tiempo."

Su mirada va perdida en el la vista que el yate le daba, perdido en algún punto en el agua, por fin gozando de silencio y tranquilidad, habían sido semanas bastante pesadas y todo aspecto de su vida estaba saliéndose de su control. Lo único relativamente bueno era que todos los moretones en su cara y cuerpo ahora eran fácilmente cubiertos con maquillaje, sólo una de las heridas por su ceja no había sanado tan bien como esperaba, dejando una pequeña cicatriz que le molestaba a más no poder, a pesar de que realmente no se notaba casi nada. Su paz se ve rota por pasos que se aproximan detrás de él. "¿No se supone que era un paseo privado? ¿Qué haces aquí?" pregunta antes de voltearse, aunque después lo hace, para ver quien era el intruso.

[zhyuxin]

enarca ligeramente una ceja tan pronto como se acomoda en el sillón aparte y escucha la pregunta. él tenía que estar bromeando, o probablemente no ha visto de quién se trata. "cubrir mis responsabilidades, supongo" palabras son escuetas, no está en su naturaleza entrar en detalles. "asumo que con esa 'libertad' has hecho un buen trabajo distrayendo a mi hermano, considerando que apenas lo he visto en casa" enuncia en ese peculiar tono suyo que hace difícil identificar si está hablando en serio o si, por el contrario, en cualquier momento aclarará que se trata de una broma.

      📍casa club

[ gif que no carga ]

' ¿y tú qué hiciste estas dos semanas? ' pregunta a la persona que tiene al lado, sin levantar la cabeza de su teléfono para confirmar quien lo acompaña. una vez más la sociedad lo tiene secuestrado ( según él ) en una celebración que poco le interesa y una vez más está al borde de la locura por el aburrimiento. ' yo disfruté de la libertad. la extraño un montón. '

[zhyuxin]

exhala con algo de gracia tan pronto como aquel ofrecimiento llega hasta sus oídos y le es inevitable sonreír a medias. "gracias, pero preferiría no terminar en el piso" replica con sorna mientras avanza un par de pasos más para jalar una de las sillas plegables y situarla cerca. la presencia del contrario es una de las pocas que podría tolerar en este momento, debe admitirlo. "¿disfrutas de la tarde o esperabas a alguien?" se permite curiosear mientras toma asiento sin mucha ceremonia y se acomoda entre los labios uno de los cigarrillos que acaba de sacar.

( hamacas en el bosque 🌳)

Varios árboles robustos sostienen hamacas de tela suave que se mecen suavemente con la brisa. " Ah… esto es justo lo que necesitaba. Un poco de paz lejos de todo " Dejando escapar un suspiro de alivio mientras se tumba cuidadosamente en una hamaca vacía. Después de una fructífera caminata, decidió sacar su cantimplora para dar un sorbo y así, percibió la presencia de alguien más. " Todavía hay espacio... " señaló la hamaca sin dejar de sonreír, invitándole hacerle compañía.

[zhyuxin]

"no creo que haya que saber demasiado de ellas para apreciarlas" mantiene el tono bajo, considerando que no hay más personas alrededor, al menos no tan cerca de dónde se encuentran. en un movimiento natural, le rodea los hombros con su brazo y apoya con suavidad el mentón sobre su cabello. "¿no tienes frío?"

— 20:00 horas, en los senderos alrededor del lago.

"No sé nada de estrellas, pero lucen hermosas reflejadas en el lago". Murmura distraída, su atención totalmente absorbida por el resplandor que el agua mece con suavidad; una visión hipnotizante. Al menos, algo bueno ha salido de este improvisado paseo nocturno.

[zhyuxin]

la repentina exclamación frente a él hace que aparte la mirada de la pantalla del teléfono y frunza el ceño, reconociendo a la chica tan pronto como distingue sus facciones. "acabas de pasarlo" señala hacia atrás de él con su índice y el atisbo de una sonrisa se asoma en sus comisuras mientras vuelve a centrar su atención en ella. "¿vas a almorzar o esperas a alguien?" o quizás, huía de alguien. porque debía estar ciego para no notar la forma en que ella ha reaccionado a su repentina presencia, mas decide guardarse sus conjeturas para sí mismo

CASA CLUB: no sabía exactamente cuánto tiempo llevaba mirando la entrada hacia la cava. debería irse de ahí, pero con tantas cosas que estaban pasando en su vida, sentía que estaba llegando a un límite y la última vez que había tocado ese punto, no había sido bonito, había una sola cosa que podría hacerla olvidarse de todo ¿no? se las había arreglado para escapar de su guardaespaldas nada más para poder estar ahí, por un momento, se decide. pasos la llevan a adelantarse hasta que escucha unos que no son suyos, volteando para ver que alguien más estaba pasando por ahí, arrepintiéndose inmediatamente. ' ah... ¡creo que me perdí! estaba buscando el comedor ¿sabes dónde está? '

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enarca ligeramente una ceja al escuchar la letanía de indicaciones por parte de aquella chica. su humor no es el mejor, así que habría estado tentado a mandarla callar sin mucha reverencia; pero mientras reajusta los broches de su chaleco, decide no hacerlo. "parece que sabes de lo que hablas, en teoría" recalca deliberadamente mientras sigue observando a la contraria y el atisbo de una sonrisa burlona aparece en la comisura de sus labios. "pero, ¿sabes sacarle partido? para una pequeña carrera, quizás"

Técnicamente no estaba trabajando, pero eso no le impedía ofrecer el apoyo a las personas que se encontraban a punto de subir a las motos acuáticas. Sabía que algunas habían presentado fallos por el constante uso, así que estaba revisando una de las que ya habían pasado por el taller con anterioridad. "No frena como un auto, ten cuidado al soltar el acelerador o perderás la dirección ¿de acuerdo? Si te caes esto se apagará solo. No debes tener ningún problema." Afirma, dando una pequeña palmadita a la moto que están a punto de abordar. "Cualquier cosa puedo ayudarte."

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tiene que hacer uso de todo su autocontrol para no entornar la mirada como respuesta inicial a las palabras de la mayor. de todas las opciones para entablar conversación, siempre parecía elegir la más punzante. "sería un escondite, si tuviéramos la necesidad de uno" para él es importante recalcar que, a pesar de todo lo que está ocurriendo, no es así. que ellos no han hecho nada malo y que no tienen la necesidad de bajar la cabeza. "al menos aquí no hay periodistas, pero no nos confiemos." apoya la nuca en el respaldo alto de su silla y bebe un sorbo de su copa de vino sin muchas ganas de continuar probando bocado, en realidad. "¿alguno de ustedes está listo para volver a shanghai de forma permanente?" pregunta tras un instante, paseando su mirada hacia el rostro de sus acompañantes, y se detiene un poco más en los menores. "lo pregunto porque nuestra madre lo está considerando, me lo dijo esta mañana" prefiere aprovechar para soltar la bomba ahora, que están sólo los cuatro, a que la mujer los tome desprevenidos uno a uno después. y tiene lógica, desde su perspectiva; pero sospecha que hay algo más debajo de aquella propuesta, aunque todavía no puede comprender el qué. / @jiaviz @sh4nz

El silencio gobierna la sala privada, donde, por petición de Xinyi —o eso supone—se dispone a degustar de la comida servida por el chef de la Casa Club; compartiendo un momento de tranquilidad con hermana y hermanastros. Una solicitud brindada con la finalidad de lo que asume es contener la calma y mantener la unión familiar luego del dictamen que ha terminado por enterrar la reputación de la cabeza de los Zhou. La tormenta, fuera de aquellas cuatro paredes, llegó sin aviso ni piedad, arrasando con todo a su paso y poniendo sus vidas de cabeza. El imperio que tanto orgullo trajo a la familia ahora sólo carga consigo penurias y vergüenza. Xinyi y su padre seguramente estaban en alguna reunión intentando amortiguar los daños con sus socios y abogados; daños económicos y sociales incluso permanentes. Mientras tanto, Xiaoyu permanece ahí, sentada, impasible, disfrutando de su salmón a la toscana; sin saber si aquella reunión contempla un ambiente festivo o lúgubre. "Me gusta más este escondite." Pronuncia, llevando un pedazo de filete a su boca. "¿A ustedes no?"

@zhyuxin @jiaviz @sh4nz

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“en realidad no, si se busca algo genérico e identificable” claro, su madre no compartiría la misma opinión de escucharlos hablar; pero eso es algo que a yuxin le ha dejado de preocupar desde hace tiempo. asiente despacio, coincidiendo en silencio con lo que escucha. conversaciones como ésa no le son usuales, pero eso no quiere decir que no las disfrute cuando captan su interés. se encoge ligeramente de hombros, imitando acción ajena y dejando que su mirada se deslice entre las caligrafías variopintas ahí expuestas, en las intenciones que han sido formuladas. desde las más futiles, como un postre o una nota alta, hasta peticiones de salud y mejoría para seres queridos y reencuentros con aquellos que están lejos. la pregunta vuelve a captar su atención y, por un instante, sólo puede mirar el rostro ajeno. “sólo hago cosas con las que sé que puedo vivir al día siguiente” admite dejando que el atisbo de una sonrisa se asome en sus labios. “así que supongo que sería por convicción” no es un modo sencillo de vivir, lo admite, pero tras años de haberlo adoptado, no podría hacerlo de otra forma, incluso si quisiera. “¿qué hay de ti? tal vez si defines tu intención o falta de ella, formular un deseo para plasmar será más sencillo…”

" No hay que reventarse la cabeza para eso, ¿no crees? " demasiado sencillo para quiénes buscaban el significado de todo. ¿No debería tomarlo como lo que era? Un festival que le da la bienvenida a una estación, simple y común como lo pintaban. Miró con gesto pensativo al varón, era capaz de reconocer su nombre y su apellido por los desafortunados eventos de la semana anterior; sin embargo, no dijo nada. " Las palabras son valiosas si sabes como usarlas " expresando pensamiento como consecuencia de su gusto por las letras, volviendo mirada al mural. " Esa es una muy buena frase. Es que, para escribir en el muro tienes que creer por lo menos en algo o carecería de sentido, solo harías algo por hacer.... Mmm, ¿tú, de que lado estás? ¿Haces las cosas por hacer o por convicción? ".

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no hay mucho que llame su atención entre los artículos exhibidos en los puestos, no porque crea que carezcan de la calidad suficiente para ser ‘dignos’ sino porque, una vez que ayaka entra en su rango de visión, no puede hacer más que observarla de hito en hito, atento a las reacciones que despiertan cada cosa que llama su atención, queriendo no perder detalle alguno de ella. “claro que confío en ti, sólo no quiero que pienses que no estaré contento con sólo tu compañía en una manta y algo de improvisación si es la única opción que tenemos por ahora” sonríe mientras se encoge un poco de hombros. el argumento parece sencillo, lo sabe, y aún así, para él, contiene una complejidad y profundidad que no es capaz de ordenar en frases vocalizadas. es la conclusión de que no necesita nada más que ella, su sola presencia. tenerla a su lado. en un mundo como el suyo, donde todo se ve en cuestiones de costos y beneficios, la idea es tan maravillosa como aterradora. ¿cuándo fue que bajó las manos y se rindió de esa manera? no está seguro, tampoco cree que sea el momento de buscar respuestas. hay demasiadas cosas sucediendo a su alrededor como para añadirle una complicación más. así que simplemente lo deja ser, como el pálido destello de una luz de faro en medio de un banco de niebla. no puede verlo con claridad, pero sabe que está ahí. “en ti” confirma, la sonrisa afable y sincera aún puesta en sus labios mientras se mantiene en el rango de visión de ella. nota el titubeo, el cambio no tan sutil en su lenguaje corporal mientras explica ocurrencia previa y no puede evitar fruncir el ceño ligeramente. ¿hay algo más que habría desencadenado su decisión? no se le ocurre nada. “es una pena, me habría gustado verla” no la va a presionar para que la muestre u ofrecerle arreglarla juntos, no es esa su intención. comienza a conocerla lo bastante bien como para saber que terminará abrumándola de hacerlo. en cambio, opta por instarle a que mantenga su atención en él al darle un suave apretón a sus dedos entrelazados y después desliza el pulgar sobre el dorso de su mano. “porque, siendo honesto, creo que te equivocas y que realmente necesitas una.” su mirada adquiere entonces un brillo divertido, el característico en él cuando se siente el más listo en la habitación, y sin frenar el contacto visual, estira el brazo que ha mantenido cuidadosamente a su espalda para dejar caer con suavidad una corona sobre la cabeza de ayaka. había tenido sus reservas sobre el diseño. tratando de dejar a un lado las enormes rosas llamativas que caracterizan la mayoría de los adornos entre los asistentes, él había optado por una mezcla de sólo un par de ellas en tono celeste, combinadas con botones de hortensias de color lila y diminutas paniculatas blancas entretejidos para armar un tocado menos extravagante, a pesar de la complejidad de la conformación. es elegante, sútil, pero cálido y brillante, justo como ella y la complementa a la perfección. “definitivamente tenía razón” musita complacido mientras la observa, tratando de que la imagen que tiene ante él se grabe de forma permanente en su memoria, y desliza el dorso de sus dedos sobre su mejilla. “luces hermosa con una puesta.”

¿Cuánto más durará este sentimiento? El apenas perceptible beso en su mano hace que su corazón revolotee con suavidad, la calidez de esa ternura que solo percibe a su lado la invade y la sonrisa falsa se desdibuja con disimulo, trazando una mucho más sincera, colmada de la dulce emoción que la ha acompañado en semanas previas; antes de que su mundo pareciera a punto de colapsar una vez más. Y aunque se siente terriblemente egoísta (incluso hipócrita y desalmada), intenta ser ella quien aprisione cada duda, cada pensamiento desesperanzador, encerrándolos a presión en una caja, al menos por lo que queda del día. Porque aunque no cree merecer ni una sonrisa más por parte de Yuxin, aún quiere tenerlas solo para sí, tan solo por un poco más de tiempo. "No tiene sentido sin prepararlo de antemano. ¿O es que acaso no confías en mi habilidad?" Refunfuña bajito, la fingida ofensa siendo ahora parte de su show cuando le propina un juguetón empujón con el hombro, aprovechando la cercanía. Al mismo tiempo, logra librarse de cualquier repercusión al distraerse con los objetos artesanales, con el sutil olor de las velas aromáticas que acerca hasta su nariz, tratando de decidir si debería llevar una o ninguna. La yema del índice se desliza por el borde de la rosa alpina, de una segunda flor igual de bonita y delicada pero de un color azul cielo que la hace sonreír mientras lo escucha defenderse y aun así, rueda los ojos manteniendo la farsa de esa breve 'molestia' que él tiende a provocar, como si realmente le hubiera herido el rechazo a una simple rosa que podría conseguir en cualquier lado. No era especial, tampoco tenía un significado implícito, más allá de una simple disculpa por el incidente del café; y ni siquiera sabe qué la motivó a extenderle la flor, pues se arrepintió profundamente en cuanto se marchó de la zona de obsequios. Tonta Ayaka, tal como siempre. "¿En mí?" Murmura, esta vez volteando a observarlo y apartando su mano de las artesanías. "No suelo usar adornos llamativos en el cabello. Dudo que me luzcan bien". Por instinto, esa mano libre presiona la agarradera de su bolsa de tela, una vez más recordando lo que tristemente guardó ahí, esperando olvidarlo en el transcurso de la tarde. "Pues... hice una corona". Confiesa, gracias a la intervención de su hábil amiga, cabe recordar. Una premisa simple fue lo que tuvieron en mente, usarla y conseguir el mejor cumplido que pudiera por parte de Yuxin. Pero al abandonar el stand de coronas florales, cuando los sombríos pensamientos regresaron en medio de la soledad temporal, creyó que era una ridiculez anhelar algo así en un momento como este, obligándose a desmerecer los sentimientos a los que ahora busca aferrarse, constantemente en un vaivén de lucha interna. "Pero me dio vergüenza usarla". Continúa, entregando una verdad incompleta. "Y ahora está marchita, hasta se desprendieron unos cuantos pétalos. Ya no vale la pena". ¿Se está refiriendo a la corona? ¿O quizás... a ella misma? Demasiadas preguntas que no quiere responder. Por favor, que alguien le conceda un maldito segundo de paz.

[zhyuxin]

ofrece una sonrisa sincera y un asentimiento como forma de agradecimiento a la ayuda, enseguida pasando a enfocarse en los materiales dispuestos para la elaboración de coronas. “diría que rosas, pero estoy seguro de que ella tal vez preferiría algo menos llamativo” medita al comparar el tamaño de algunos de los botones de rosas con respecto a los de otras flores. “aunque el azul parece ser buena elección, quizás en un tono más claro. tal vez algo de lila y blanco” la paleta de colores podría parecer sencilla, aunque para él no necesita de más complejidad para complementar la belleza de quien está pensando. “la vi vestida en un tono muy parecido al celeste durante la gala y lucía hermosa” se permite admitir, sonriendo de forma discreta sin poder evitarlo. una parte de él todavía se lamenta no haber tenido oportunidad de haber dicho tal cumplido cuando la tuvo frente a él, pero las circunstancias simplemente no lo permitieron. “¿crees que sean buenos elementos de composición?” no ha mentido, siendo alguien tan pragmático, su lado creativo está bastante oxidado.

' sí, exacto ' decide responder porque era más sencillo que explicar que su sobrina no se encontraba allí en ese momento y por eso decidiría hacerla de flores artificiales. curvatura de sus labios se vuelve amplia apenas él admite que había pensado en hacer una corona para regalársela a alguien, de verdad esperaba que ayaka fuese quien mencionaba ¿o podría tratarse de alguna de sus hermanas? ¿tenía hermanas? ¡no tenía idea! pero igual le ayudaría aferrándose a la posibilidad de que aquel gesto sería para su amiga ' por supuesto que estoy dispuesta ayudarte, me gustan mucho las manualidades ' asegura sin permitir que las comisuras de sus labios desciendan ' deberíamos empezar por escoger las flores para la corona, ¿cuáles crees que le gustarían? ' inquiere desviando su mirada hacia las opciones tendidas en la mesa ' ¿o qué color crees que le gustaría? ' hace una pequeña pausa ' las azules son lindas ' sugiere viendo al contrario nuevamente pensando en que ese color resaltaría en la cabellera de ayaka.

[zhyuxin]

“se consideran algo predecible y poco arriesgado, al menos para quienes buscan marcar tendencia” aclara con una exhalación entretenida. si bien mantiene el tono ligero, sus palabras no carecen del todo de verdad. No es que a él le interese, en realidad. la expresión que se forma en el rostro ajeno a causa de sus palabras consigue que él ría entre dientes con suavidad. “no lo sé, wooyoung, ¿tal vez?” lo mira con suspicacia fingida. “sólo quería asegurarme” completa su acto al levantar ambos brazos en gesto apaciguador, aunque la sonrisa burlona sigue evidente en sus facciones. “oh, y no. no me tatuaría algo que no pudiera cubrir con una camisa” reconoce al instante con sinceridad mientras vuelve a echar un vistazo a la página del catálogo que está observando su acompañante. “¿irías por algo monocromático o con colores vivos?” decide volver a enfocarse para evitar que el menor tenga dudas sobre lo que está pensando hacer.

‘ oh. ¿entonces no lo son? ¿he vivido engañado toda mi vida? ’ regresa preguntas retóricas, tono reflejando la broma en palabras. con atención, escucha su consejo, dando un par de asentimientos. tenía pensado tatuar su brazo, algo que una manga pudiera cubrir con facilidad. no obstante, es tomado por sorpresa por último comentario. ‘ ¿qué? —— ¡no! ’ exclamación sale en mayor volumen y, aunque clientes a escasa distancia voltean a verle, eso no le impide soltar una carcajada. ‘ estoy intentando cosas nuevas, pero no es para tanto. ¿doy la impresión de que tatuaría mi cara? ’ y se señala con obviedad. nada en su apariencia transmitía tener el valor para una decisión así de drástica. ‘ creo que alguien está proyectándose. ’