Don't wanna be here? Send us removal request.
Text






Este dolor no es mío, Guadalajara, diciembre 2023
0 notes
Text
Hace años ví Black Swan y me identifiqué con el personaje en el sentido de querer lograr algo al mismo tiempo de ser el principal obstáculo para hacerlo. La mayor tragedia es que la bailarina no se da cuenta que al presionarse a sí misma de tal forma es que no puede ser lo que quiere, me dije a mi mismo. Es muy fácil ver en un personaje los hilos con los que se vuelve el autor de su propio desastre. Es tan obvio que duele, pensé. Pero de nada sirve ver por una ventana si no le cambiamos el ángulo para volverla un espejo.
En los sueños recurrentes es dificil recordar uno particular, pasan tanto que terminan mezclados, recordados solo por sus puntos comunes. Igual me pasa a mí con las memorias familiares. Al menos con las rutinas. Una de ellas ha sido precensiar a mi mamá haciendo comentarios amargos, reacciones emocionales explosivas o momentos tensos a raíz de algo que no le parece. Puede ser un plan que cambia, un comentario que dijo mi hermana, la constante desaprobación de las ausencias de mi papá. La más común de todas: el arrepentimiento de la vida no vivida, la comparaciòn con lo que pudo ser.
Evoco esto como una rutina porque como en una danza, cada bailarín tiene sus pasos, movimientos, desplantes que se sincronizan al tempo. Y mi papel desde ser un poco adulto ha sido la desaprobación distante. Ay mamá, cómo no te das cuenta de que solita te estas cocinando ese veneno. Estás eligiendo pasar el trago amargo en situaciones que no lo necesitan. No porque las cosas no salgan exactamente como tú quieres significa que no puedas disfrutarlas. Me recito para mí mismo o a veces lo digo en voz alta, no que haga diferencia. Hay un tono de condescendencia ahí. Es tan obvio que duele. Está en esa situación porque no se da cuenta, pobre. Si tan solo se pudiera dar cuenta como yo.
Pero toda ventana es un espejo, y de nada sirvió ver afuera si no se ve adentro.
Yo no exploto emocionalmente. No hacia afuera, al menos. Yo no lleno el cuarto con mi energía para volver mi problema el de todos. Pero sin duda si hay un juicio enorme que emana de mí. Una policía que no descansa. Que ante los logros empieza a contar lo que falta para el siguiente. Ante la duda, asume un error y hunde el abdomen. Ante el ocio elige alguno de sus recurdos favoritos donde me he sentido incomodo, o he cometido errores o he lastimado gente. Arrepientente, ve cómo todo lo haces mal. Debiste hacer más, debiste hacerlo distinto. Deberías ser más, deberías ser distinto.Y no hay momentos de tregua. La policía no descansa.
Ay Rafa, cómo no te das cuenta de que solito te estas cocinando ese veneno. Estás eligiendo pasar el trago amargo en situaciones que no lo necesitan. No porque las cosas no salgan exactamente como tu quieras significa que no puedes disfrutarlas.
En la repetición encontramos la diferencia.
Vuelvo a alguno de esos momentos, una de las performances de esa rutina. Estamos en el carro, mi mamá dice alguna serie de palabras inintelegibles en el preciso tono que conozco desde hace tanto tiempo. Y no veo a la ventana con condescendencia sino con compasión. No veo al espejo con regaño sino con compasión.
Gracias por darme las guías para navegar el mundo del deber. Vivimos en un mundo donde es necesario actuar en ciertos contextos de ciertas formas. Eso lo aprendí bien. Pero yo ya no quiero vivir solo del deber. Quiero también entretejer mi querer, mi deseo, mis fantasías en la realidad. Quiero ser un yo auténtico sin miedo de decepcionar a voces que ya solo existen en mí. Y le digo al niño en el espejo, gracias por aprender a sobrellevar esto. Gracias por traerme hasta aquí. Pero a partir de ahora también vas y vamos a decir lo que quieres decir. Vamos a hacer lo que quieres y queremos hacer. Vamos a hacer una rutina de eso.
Vuelvo al carro hipotético junto con mi mamá. Los dos estamos llorando. Así como yo mientras escribo estas palabras. Cada uno tenemos que descifrar como reemplazar estos patrones que nos heredaron con otros que nos dejen querer y elegir lo que queremos. Pero no estamos solos.
0 notes
Text
Writing, however marvelous of a technology it is, is limited. How can words communicate research (art, design and architecture context) that expands towards embodiment of experience? Towards walking as a form of reading, and mapping as a way to understand rather than to communicate. If research is embodied, then how can it be transferred? The old age problem: we can't experience the world from text.
What happens once the researcher removes their body?

0 notes
Text
Hoy me salió un tiktok sobre como la canción de I'll make men out of you de Mulan fue diseñada para explícitamente exaltar la masculinidad a un punto ridículo para luego resaltar la feminidad en la forma de hacer las cosas de Mulan.
Decir eso tocó algo en mis fibras sensibles y tuve que ponerme a ver Mulan. Lloré desde los primeros minutos y le tomé un cariño nuevo a Mulan. 10 minutes in, cuando canta sobre no encontrarse en su reflejo, ahí fue donde me encontré. Se ve a sí misma con maquillaje y preparándose para ser una novia y no se encuentra. No cabe en el molde que le asignaron. Lloré con ella. Aún cuando no sea la intención, es una canción muy queer. E incluso más allá de idemtificarme con lo queer, me identifiqué con la dificultad de encontrar lo auténtico. El anhelo de conocer tu lugar.
El resto de la película ha envejecido de forma espectacular respecto al presente. Ella siempre fue una guerrera astuta y quien tuvo que cambiar fue su entorno, ella solo gana seguridad y fuerza. El género es una conversación siempre presente, llenando cada conversación con preguntas sobre los roles, los estereotipos, los límites. Las respuestas suelen tratar sobre la humanidad de los personajes más allá del género.
Lloré y lloré en toda la película. No sé bien por qué pero me hacía falta.
0 notes
Text
'Exhausted isn't a personality' I scribble in the new little notepad that I bought to journal about my psychoanalysis sessions. I actually bought the notepad to write letters to friends. Thinking of sending them by post, carrying lignin, ink and longing across the ocean. I was swooned at the fantasy of their thrill over receiving my letters from far and potentially writing something back, collecting the correspondance over months that would later be read as archeological artifacts of who we once were. But like many of the other poetic endeavors I imagine, the letter writing was left for later, I can barely keep up with bi-annual zoom talks these days.
Last week with Toño, my analyst, I ended up describing myself as a series of characters I've carefully played to appease the histrionic voices saying not enough, again not enough that swarm in my head. Acting a certain way, narrating my own life in a certain way, posting on the internet in a certain way, making life decisions in a certain way that would bring the applause from an audience that only I can see. An effort that felt more desperate than enthusiastic to fulfill expectations learnt a long time ago, enforced by a relentless judge, also played by me at this point.
'I'm tired of this performance, I want to get off the stage. I can't let the show go on' I told Toño, almost as if asking for his permission to go home on a sick leave and drink chamomile tea while I watch Disney chanel from 7 am til noon. I was again 8 years old feeling overwhelmed at school trying to keep up the appearance of perfect student which seemed like the only wall protection between me and the spilling shame and rejection on the other side.
'It sounds like you've played a lot characters, who's main desire is the applause of the audience. But what does the actor want?' Toño asked and I had to go into silence again. How to disentangle what's for the applause and what's for pure pleasure and what's the difference? And so I came to this notepad to try to find him, the performer off the stage.
0 notes
Text
Berlioz jazz sounds in the background
Ananth is cooking his glorious egg briyani while we all chat. Karen is entrataining the latest fantasy we're talking about, she's looking for a house we'd all buy together. The two of them do this as a hobby.
I don't think it's a bad idea to start thinking of investments. We're all laughing and joking, they get along great. I'm in the sofa, listening and giving my opinion while I read the preface of Giovanni's Room.
This is indeed a life I wanted and enjoy. I'm happy.
0 notes
Text
The lack of a kiss did more than a thousand
It's less about you than a romance with a memory
Esque se trata de la desolación gay de cuando aún estás solo en el closet. - Le dije a mi novio, tratando de explicar porqué la canción me movía tanto. Por una parte toma el período cuando la añoranza de un beso se acumulaba en el tejido cristalizando en derrota y soledad. Y lo contrapone con el período después del primer enamoramiento, después del primer rompimiento, cuando coleccionamos besos y galanes por deporte. Y claro, en ese baile frenético acumulador nos llenamos de mil besos pero también de llagas aquí y allá. Se vuelve hábito caerse de boca, levantarse, sacudirse el polvo y a lo que sigue.
Sin embargo, ese momento previo al primer beso, el tiempo de esperar sin saber hasta cuándo, termina pesando tanto más que todo lo que le sigue. De cierta forma el daño de la espera y la incertidumbre ahí siguen.
Durante cuatro semanas puse todo el álbum como soundtrack de mis diarios viajes en tram.
5 notes
·
View notes
Text
Confundido por las manifestaciones de mi propia magia, seguido me pregunto si aquellas visiones de puberto fueron premoniciones o una maldición que me puse yo mismo. Escribí por años sobre personajes que construían con sus propias manos las jaulas de su soledad. Hombres viviendo como testigos impotentes del daño que le hacen a aquellos que tienen más cerca. Incapaces de resarcir las distancias causadas por sus constantes fugas. Relaciones accidentadas por la incapacidad de enfrentar los sentimientos propios.
Es como si hubiera sabido desde el principio que iba a ser un tipo complicado. El dolor que iba a sentir al alejar a la gente. Y el placer de sobrevivir cada quiebre. La inhalación más satisfactoria sucede cuando después de haberse zambullido demasiado hondo volvemos a la superficie.
2 notes
·
View notes
Text
Una espiral causada por escuchar pop
De leer tuiter he sabido que hay varias cosas que otros gays experimentaron en su infancia, y que ahora de adultos bromeamos con que eso es la cultura gay. Y como cualquier rasgo cultural que se comparte por mucha gente que nunca se ha visto en su vida, hay mucha variedad. Pero por ejemplo, el pop nos une. Para los hispanohablantes de mi generación está La Oreja de Van Gogh, Belanova, y muchas muchas antes y muchas después.
Escuchando Rosas me pongo a pensar si existe de verdad una sensibilidad homosexual distinta. Si el melodrama, las cursilerías y el sentimentalismo con el que nos estereotipan, muchas veces de forma acertada, es de verdad algo distintivo. Si algún trauma compartido de las heridas patriarcales nos dejó la manita chueca a muchos de una forma similar. O si hay algo en nuestro cerebro que nos activa una sensibilidad diferente.
Estoy seguro que muchos recursos públicos de investigación se han usado para responder algunas de mis preguntas y debe ya haber varios libros y papers. Pero desde mi gran ignorancia escribo desde mi pequeño escritorio. Preguntándome si esto es especial de nosotros. Y la narrativa del gei dramático es una suerte de expresión de carácteres emergentes. O un cluster de traumas compartidos que se expresan de forma similar. Si nos tomamos la pregunta en serio, primero habría que preguntar si en verdad es un rasgo que se presenta de forma generalizada. Y pues quizá no, #NoTodosLosGeis y la extensa población de machirulos que cogen con hombres que ni por error se permiten mostrar sensibilidad. Pero supongo que ahí está u poco la clave. El hecho de que la masculinidad como institución y sistema de control social se contraponga a las emociones y la sensibilidad debería arrojar luz. ¿Por qué parece que los hombres homosexuales tienen una sensibilidad distintiva que los diferencía de sus contrapartes heterosexuales?
Se me ocurre pensar que los geis dramáticos nos atrevemos a desafiar al control social experimentando el placer de sentir mucho y hondo. Pero también se puede ser histriónico sin desafiar todas las normas del patriarcado, machirulos histriónicos que además son violentos abundan entre nuestras filas. Y también es importante de entrada desmenuzar qué es la sensibilidad y de dónde sale. Es claro que hay ciertos traumas compartidos, pero también es cierto que no se puede hablar de una experiencia universal. Y si es que existe una sensibilidad compartida, esta sucederá a través de las experiencias comunes. Una serie de códigos sociales y culturales, de valores y referencias que se han presentado a grupos de personas y que son reproducidas dentro del mismo grupo. Es decir, existirá en grupos, quizá interconectados, pero no de forma universal.
Nada de esto es novedad. Pero últimamente me cuestiono mucho el tema de la identidad. Qué significa para mi ser un hombre homosexual. Qué significa para mi ser un hombre. Si todo es circunstancial -nacer con ciertos organos, ser educado bajo ciertos ideales y normas de género- entonces qué tanto nos pertenece, y hasta qué grado podemos hablar de identidad. Y bueno, Siohban ya escribió en ‘Naces o te haces’ que más importante que la respuesta de la pregunta si lo nuestro es naturaleza o sociedad, es qué hacemos con eso, la ética de lo que ya está ahí. ¿Por qué me interesa saber si es una sensibilidad endémica? ¿Qué podría decirme de mi mismo que lo fuera o que no?
Algo de mi que adoro es la curiosidad y la sensibilidad. La capacidad de asombrarme con arte, con poesía, con pequeños momentos. Mi gusto por la teatralidad. Y sé que eso es mio. Pero me pregunto de dónde sale. Pero no sé si la respuesta importa. Quizá lo que importa es no saberse solo en este viaje incomodo de sentir hondo y sentir mucho. Saber que no somos los únicos que seguimos la melodía misteriosa en la noche obscura. Alguna especie de sentido de comunidad dentro de esta aparente sensbilidad compartida. Y que si está atada a la experiencia compartida de los dolores patriarcales de crecer maricón, pues es bálsamo a los traumas si no soy el único.
1 note
·
View note
Text
levitate
There’s something new here.
I thought I had experienced the two possible paths. But there seems to be more.
This is the first time I write a love letter that’s not a farewell. Or a summoning of long lost ghosts. Present tense feels different. More difficult. Almost like I have to be there and then. Be accountable. Be read.
I used to wait for some signal to be able to craft lines of tenderness and witty love confessions. A passage, a climax, an enchantation. A revelation that would break me open. It only ever happened with the fleeting perfume of distance, of idealization.
Novelty asks why don’t you just say it now? feel it now? Then my body is possesed and I see myself being tender, present and excited. A voice in my head worries if the spell will last, if the mechanics of this levitation will hold. And Novelty only says, quiet quiet, let the boys play.
0 notes
Text
Ya empezaron los pendejos de familias completas a hablar de sus domingos de dominó y piñatas. Los interrumpo para contarles que de donde vengo todas las doñas me quieren emparentar con sus hijas y mi bisabuelo era el dueño haciendas aguacateras pero se lo quitaron en la revolución. Mi abuela era francesa pero se escapó con un don y ya nunca vio a su familia. Soy Hernández Rodríguez, pero hay Gautier por ahí perdido.
Luego cuento que mi papá es de un pueblito de Jalisco, y que toda la familia se fue a California y yo iba todos los veranos a Disney de niño. Ni puta idea de que haya allá. Y no sé porqué chingados me pongo a inventar nombres de los juegos mecánicos para contar en cuál guacarié y los pendejos estos me dicen ah sí ya sé cual. Seguro ni de Mazatlán han pasado tampoco.
Me pregunta el de lentes que cuánto tiempo llevo viviendo en Guadalajara y le digo que como tres años. Luego la güera del Tinder que me invitó a esta mamada me pregunta que si no había estudiado aquí. A no sí, pero esque me regresé a Tepic un rato con mi papá para ayudarle en la tienda que puso alla, por eso solo cuento ya que volví.
En Tepic solo conozco a un wey grillero que vive del erario público mamando vergas de un regidor jotillo y uno que otro funcionario de medio pelo. Imagínate, ni siquiera se las está dando a un diputado local. De eso vive, ha de dar mamadas super buenas. Me imagino. Algo hay en Tepic donde sigo yendo. Será la brisa del Mololoa.
Ya bien pedo les empiezo a contar que tengo que ponerme a dieta para entrar en un traje que me heredó el abuelo Francés por la boda de mi hermanita que es en unas semanas. Vive en Hermosillo, les digo, hace mucho conoció a un wey en una página de internet de caricaturas japonesas y la cabrona se fue allá para estar con él. La primera vez que se conocieron, él fue a visitarnos y mi papá estaba infartado. Cómo chingados vamos a recibir en la casa a un cabron que conociste por ver Naruto, Berenice, no seas pendeja. Ya que lo vio todo ñengo y formalito se calmó mi jefe, y con los años formalizaron les digo. No he sabido nada de la Bere desde que a los 16 se fueron ella y mi mamá y ni por Facebook la he podido encontrar. Estaría bonito verla de blanco.
Le digo a la güera que ya nos vamos, que si quiere venir a mi casa. Sigue botada de la risa con sus amigos, el wey carita se anda quitando la playera y perreandole a todos. Está bien mamado del pecho el cabrón y arquea machín la espalda. Ha de ser joto el wey. Dany, vamos, te llevo. Ándale, pues.
Ya en el carro me quita la mano que le paso por el muslo.
Pon atención a manejar, ya andas bien pedo, wey.
Ya, ya, ando bien.
Oye y eso que sí pudiste venir, no tenías una carne asada en el bosque con tus amigos.
Cuáles amigos, de qué hablas.
Me habías dicho que este fin que no sé qué tus amigos de la prepa y no sé qué.
A sí, no, pues los compas nos juntamos seguido y es de no llevar novia. Y hacemos eso en un terreno aquí al norte de la ciudad desde que íbamos en primero, son muy cagados.
Oye pero qué no la prepa la hiciste en Guzmán? Ya no entendí.
Sí, no, por eso. Por eso te digo. El caso es que este finde no se hizo.
Ya luego se puso seria hasta que llegamos al depa. Íbamos saliendo del coche y que la pinche vecina de la planta baja se asoma por la ventana y con el tono más cagante y naco dice Buenas noches vecino, porfavor controle a su mascota, desde que se mudaron no deja dormir en la noche. Chigue su puta madre. Sí, claro, buenas noches, vecina.
La güera está pegada a su teléfono y ni escuchó. La agarro de la cinturita y le digo al oído que subamos. De un movimiento me quita. Ya está llegando mi Uber, fíjate que algo de la comida me cayó mal. Pero hay que vernos la semana que entra. No pasa ni por un vaso de agua y se larga. Seguro me quita el match llegando a su casa, pinche güera. Le hubiera dado un arrimón a su amigo, seguro él sí aflojaba, a ver si encuentro su Instagram.
Sería más fácil explicar los alaridos que suenan en la noche si tuviera un perro. O si en algún lugar hubiera alguna cocina donde se hacen quesadillas mientras hay gente hablando de mi, de lo mucho que me quieren y emocionados que están todos de verme pronto. Eso sí sería razón pa chillar con los putos aullidos que doy. Pero ni una ni otra. Ni pedo.
0 notes
Text
[keyboard song by Arthur suena en mis audífonos ]
Mientras me acerco, un pequeño parque con cuerdas metálicas formando puentes toma forma frente a mí. La niebla lleva días sin levantar. Las lámparas de vapor de sodio hacen que las líneas y los reflejos anaranjados se mezclen, nada parece lo que es a la distancia. Uno tras otro, edificios de aspecto cansado me van mostrando sus fachadas de finales del siglo XIX, ladrillos amarillos y anaranjados, detalles angulares y simétricos, algunas estatuillas de ángeles y otras antropomorfias en cantera tallada. Desde la calle se ven unas cuantas ventanas iluminadas, en los muros altos hay cuadros indistinguibles en salas que me imagino llenas de muebles viejos de los que probablemente se podrá oler polvo de 1970, algunas plantas colgadas, espejos que delatan libreros saturados.
Para escribir acción/suspenso quizá hay que imaginarse una situación extrema y luego pensar en el origen más distante para que nuestro protagonista termine ahí. Un chavo banda de Xochimilco que se ligó a un austriaco en Puerto Escondido, termina en un cementerio secreto donde se celebra una boda en las afueras de Praga. Mis pasos deben hacer mucho eco porque una familia me voltea a ver sorprendida en su camino al parque. Yo no escucho nada, los audífonos ahora tienen a David Behrman, solo noto sus miradas tratando de darle forma a mi cara, el resplandor de sus seis ojos. Una mujer que abandona la obra de teatro que está produciendo para entender el origen de su abuelo Polaco termina en una foza de agua en un viejo hotel abandonado y comienza a escuchar cantos que confunde con alabanzas.
Las ventanas de uno de los edificios me seducen con la obscuridad de sus amplísimos marcos. Al centro de la fachada un vitral de colores me hace saber que es la academia de arte y diseño, y lo ha sido así por más de cien años. Solo se ve una ventana encendida, de inmediato pienso en un estudiante terminando una entrega entre drogas y música frenética, ansiedad y la pregunta constante ¿me equivoqué? Me pregunto cuántos estudiantes han experimentado lo mismo en ese lugar a lo largo del tiempo. Una mujer mayor que lleva años sin ver a su hija, encuentra en una capilla al sur de Portugal algo que la hace querer parar su búsqueda.
Avanzando en la calle angosta hay cada vez menos lámparas pero la arquitectura se nota más moderna, ya de los treintas. Al fondo veo un haz de luz blanca enjaulada por ventanas rectangulares a la Bauhaus que cubren todo el costado de lo que parece ser una escuela. Se pueden ver escaleras de caracol y unos estandartes con diseños intrincados. Es solo una luz encedida que se tambalea un poco y no se ve ni una persona dentro, ni un mueble. Conforme avanzo no estoy seguro que sea una escuela. Me detengo un rato tratando de decifrar qué pasa adentro. Cerca de mi pasan unos ciclistas lento como buscando una dirección. Me les quedo viendo buscando pistas de la naturaleza del lugar a partir de sus reacciones al verlo pero no le dedican ni un instante.
Un escritor jóven de Jalisco en camino a una cena de cumpleaños entra a un gimnasio acuático abandonado desde la caída de la República Democrática de Alemania. Llega atraído por luces que luego no encuentra al entrar. Al tratar de investigar más, cae en una de las albercas, se lastima el tobillo y escucha varias puertas y ventanas cerrarse.
0 notes
Text
En algún tiktok dicen que Jung dice que la soledad es no tener a quién decirle algo importante. No tener con quién compartir los destellos de sentido en esta trifulca de caos llamada tiempo.
0 notes
Text
I've ripped your face out of memories to fashion a mirage for myself. A haunted house of everything we were not but could have been. The walls, made of the letters I write to your ghost, keep falling off and I run from room to room holding them together. A prisoner of this make pretend, I cling to any sign of activity in the house. But the pendulums never swing, the walls won't bleed, no eerie humming comes from the attic. I'm persistent to find a message from you in my tea leaves or in the morning bird song. A chill running through my spine that I can describe as your fingers to my psychic. A dream of us walking through dense fog. Anything that could justify this constant séance sessions that keep becoming more expensive. The only thing more terrifying than this house of quiet horrors is the thought of losing it. To have nothing to look back at. To become incapable of being turned into a salt statue. That, I couldn't bare.
0 notes