blueasiam

[blueasiam]

La verdad es que odio que puedas dormir tan a gusto con tu consciencia.

Por mi parte yo desearía arrancarme la piel con tal de sentirme un poquito menos yo.

[blueasiam]

Anhelo la chispa, la anticipación, el deseo. La vibra que sacudía los cimientos. Y todo lo que encuentro es ruido blanco.

[blueasiam]

I wasn’t supposed to hide my feelings anymore.

Yet here I am, lost in me.

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qué paja esa gente que pisa cualquier cabeza con tal de obtener lo que quiere

[blueasiam]

what do i have to do to keep my emotions at bay?

[blueasiam]

flew too high, too close to the sun, now I feel the falling before it even starts

i wanted it so deep i burned

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Hoy me crucé en instagram con una de esas cuentas publicitadas de psicología, y el texto promocionado, que no me conmovió en lo más mínimo, contaba la experiencia de una mujer a la que le pasaba algo así: 

Hacía un ejercicio familiar en el que todxs comentaban en voz alta sus objetivos, deseos y anhelos para ese año; y ella mencionaba el deseo de hacer un máster que pudiera pagar por sus propios medios. Su cuñada, en cambio, anhelaba que sus hijxs estuvieran sanxs y fuertes y ser una buena madre para ellxs. La mujer en cuestión dice que hizo el máster y se lo pagó de sus ahorros pero tardó en ver lo “inútil” que era emocionalmente porque pensó, en ese momento, que los objetivos de su cuñada no se podían cumplir si no se dedicaba a su profesión y sus estudios (porque en su familia había sido inculcada con la idea de que para lograr el éxito económico se requiere primero el éxito profesional). 

Me chocó profundamente hablar en términos de inutilidad emocional por priorizar una carrera o una profesión, por encima del deseo de maternar. Tampoco me pareció 100% correcta esa idea sesgada de que para ser buena en algo (maternar) es necesario tener estabilidad económica y profesional, como si una cosa dependiera de otra. O sea, todo bien, respeto mucho a las mujeres que deciden ser eso, madres; pero me parece que no desearlo o tener otras prioridades por encima de la crianza de lxs hijxs es igualmente válido y no te vuelve emocionalmente inútil. 

Entonces me puse a reflexionar sobre mi propia vida y objetivos y me pregunté si ser consciente de mi deseo de triunfar en un nivel profesional y académico me anuló el deseo de ser madre o si en realidad nunca tuve deseos de serlo. Mis viejos también me inculcaron a mí que tenía que estudiar para salir adelante, para ser independiente y exitosa, y para no depender de nadie que pudiera cortarme las alas; pero nunca me hablaron de la necesidad de hacerlo para mantener una familia: estimo que siempre asumieron que si yo formaba una familia sería de a 2, por lo que mantenerla no dependería enteramente de mí sino de otra persona también, y el sostén sería sobre dos pilares en lugar de uno. Lo cierto es que yo nunca tuve deseos de maternar y no sé si alguna vez los tendré, pero tampoco no me considero emocionalmente incapaz, aunque soy muy consciente de las “dosis” de amor que estoy dispuesta a dar o a las que quiero renunciar en determinados momentos de mi vida. 

Tuve una época en que estaba muy dedicada a mis sobrinxs, especialmente a una de ellxs, por quien renuncié a tener vacaciones sintiéndome en la obligación de quedarme a cuidarla cuando su madre no podía faltar al trabajo. Esta supuesta obligación no era más que una imposición que yo misma me puse cuando me nombraron madrina de esta nena, que hoy en día tiene 6 años y a quien adoro con el alma, pero ya no renunciaría a mis vacaciones para cuidarla. Creo que en algún punto entendí o entendimos (mi hermana y yo) que si yo decidí no tener hijxs hasta ahora no debería cargarme con la responsabilidad de cuidar a lxs hijxs de otrx como si fuera un mandato o una obligación sólo por compartir un, no sé, 25% de mis genes. El amor que estaba dispuesta a dar no aumentó ni se redujo, ni siquiera mutó, permanece en la misma medida, sólo lo entrego en otras dosis, porque la renuncia a otros anhelos (como las vacaciones, pero se me ocurren otras cosas también) me parece exagerada y creo que no vale la pena.

Es muy fuerte el peso que la sociedad, y especialmente la familia, pone sobre las mujeres en relación a la crianza y cuidado de lxs chicxs. Y es muy fuerte hacerle creer a una mujer que es una inútil emocionalmente por sentir que el trabajo y la carrera profesional son más importantes que la necesidad de convertirse en “una buena madre”. Porque además, al fin y al cabo, ¿qué es una buena madre? ¿Una madre que se dedica a sus hijos el 100% del tiempo, renunciando a su trabajo, a sus amistades, a sí misma; y convirtiéndose en una esclava de su familia? ¿Una madre que no piensa en otra cosa que en su descendencia? ¿Una madre que no tiene deseos o anhelos para sí misma, aparte de desearse y anhelarse a sí misma como madre? 

¿Acaso no es una buena madre la que se esfuerza por darle a su familia el ejemplo de vocación, dedicación y tiempo a la profesión elegida? ¿Una madre que es médica y pasa muchas horas fuera de casa salvando vidas, no es una buena madre? ¿Una madre que deja a sus hijxs al cuidado de otra persona para poder tomarse un día de spa, es una mala madre? ¿Dónde está escrito que cuando una es madre, tiene que ser madre el 100% del tiempo y nunca más volver a ser una misma?    

Como yo lo veo, y siempre lo vi de la misma manera, la capacidad de amar a otrxs depende proporcionalmente de la capacidad de amarse a unx mismx. El amor propio está en distintos lugares y se manifiesta de distintas formas dependiendo de la persona de la que estemos hablando: algunxs se aman dedicándose al trabajo, otrxs se aman dedicándose a lxs demás, otrxs se aman dedicándose a sí mismxs. 

Yo me amo, a veces, amo mi vida imperfecta y mi manera de llevarla adelante. Amo la docencia y amo trabajar para mantener mi casa, a mi gata, y mis caprichos. Amo también los defectos de mi profesión, mis jornadas laborales larguísimas, mi deseo de cambiar de trabajo, mis crisis de llanto cuando la presión no me deja pensar. Y lo amo todo porque lo elegí en algún momento y aunque ya no lo elija, me lo gané y es mío. Y en este amor no entra todavía la maternidad, y no me siento culpable por ello, y tampoco voy a sentirme mal si nunca decido tener hijxs, o si decido hacerlo y no pensar siempre en ellxs primero. 

Porque primero estoy yo misma, mis sueños, mis metas, y mis deseos y anhelos. Vivir para los demás no es vida, y hay que dejar de mitificar a la madre perfecta, porque madre no hay una sola, hay tantas como hijos hay en el mundo.

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Tapada de trabajo y contestando mensajes por varias plataformas al mismo tiempo, abstraída de todo, levanto la vista y veo un plato de comida junto a mi pc.

Mastico en silencio y sigo tipeando. El plato desaparece y lo reemplaza un vaso grande de agua.

"Hidratate," me dice, una caricia.

Tanto tiempo cuidándote sola, cuidando de los demás, no te acordabas de lo que se sentia descansar sobre los hombros de alguien que vela por vos.

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tener gatos be like

la miro, niego con la cabeza 

me mira, desafiante

la miro, frunzo el ceño 

“no me tires los anteoj...”

*empuja mis anteojos con la patita por el borde de la mesa*

“¡UMAMI!”

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cuídate de mí amor mío cuídate de la silenciosa en el desierto de la viajera con el vaso vacío y de la sombra de su sombra.

[blueasiam]

he asks if I have cold feet.

eh...

i didn't, till he asked

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espero que seguirte el ritmo sea tan fácil cómo llevarte la contra

[blueasiam]

woke up round three, cant stop sneezing, the cat's hysterical, i just need one dreamless, thorough night

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yet I need to learn to ask for advice when i need it

[blueasiam]

grateful of having two names that pop into my mind when someone says "best friend"

[blueasiam]

tengo que aprender a convertir el miedo y la incertidumbre en resortes para impulsarme a saltar hacia adelante 

me cansé de estar estancada en mí misma.