I'm sorry, l don't speak EnglishOficialmente graduada ya!, me gusta dibujar en mis tiempos de ocio, soy amante de los gatos(los amo), mi juego fav es the legend of zelda y espero que te entretenga las tonterías que dibuje, mayormente son cosas relacionadas a los moomins y undertale (errormare) / twitter: conoviacat99 creadora de H1lal ("hijo" de error con la pesadilla y ???)
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I made a new Moomin video
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He empezado a trabajar lejos de mi ciudad natal, me siento extraña con muchas emociones guardadas y el empleo está siendo más rudo conmigo de lo que espere, no me e topado con gente mala quiero aclarar es más bien el peso del ambiente literalmente, hace frío, le dije a mi madre que me acoplaria o me iba a acostumbrar, pero trascurrido el segundo día y tenía ganas de llorar, de decirles que ya no me iba a presentar pero ella marco contándome muy feliz que habían empezado a arreglar mi cuarto, me fui de casa para arreglarlo y escuchar eso me golpeó fuerte, se incrustó adentro de mi y me muestra de cara mis promesas, metas y deseos que ahora siento vacías y en cierto modo forzadas, quiero mantener la cabeza en alto y luchar pero me siento tan extraña y ciento más como está vida me engulle.
Ya me voy a trabajar pero quisiera no hacerlo, quisiera estar en mi vieja cama, en cuarto sin terminar, acostada pero en mi hogar.
Que deseo tan estupido el de desear ser grande, ahora quisiera volver a mi infancia lejos de todo esté salvajismo y agresividad, pero la vida es asi los mejores momentos son fugaces y aleatorios, nunca sabes cuándo vivirás uno.
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Una portada del cuarteto de nos + los mumins
Hice dos versiones ya que no me decidía por la pose, igual siento que me gustó más la primera aparte de que está más acorde.
Aún quiero hacer más pero todo a su tiempo 😊, en verdad me gusta está banda sus canciones son tan geniales.
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Ya se la saben, disculpas anticipadas por los errores y fin.
Capítulo II: Pétalos en brisa
Después de largos minutos para agarrar una pizca de fuerza en sus piernas se levantaron rumbo a la cafetería más cercana, el lugar era poco transitado y tenía varios años en el mercado, tanto buenas como malas reseñas por igual en la página oficial, al parecer estas últimas le habían quitado una buena cantidad de clientes, ya que al entrar solo se toparon con dos mesas ocupadas de las más de 15, de las cuales una de ellas era meramente ocupada por un solo individuo de avanzada edad.
Al llegar lo primero que hicieron fue sentarse en el lugar más cercano, las plantas de sus pies parecían palpitar y una leve sensación de acalambramiento se empezaba a esparcir por sus pantorrillas, la energía no era la suficiente como para andar paseándose por el lugar, cuando moomin sentó sus posaderas en aquel duro asiento una mueca de incomodidad se formó en su rostro, nunca le había tocado experimentar un asiento tan incómodo, el tamaño era diminuto y sentía que una pequeña parte de su trasero se desbordaba, además estaba tan duro como una piedra, para rematar el lugar tenía un extraño olor a madera guardada y humedad lo que le generaba un pequeño desagrado, ya que el olor a comida se mezclaba con los otros olores, ahora cobraba sentido el estado de la cafetería y su falta de clientela, estaba casi seguro que los pocos que seguían yendo al lugar lo hacían solo por nostalgia o porque su olfato ya no funcionaba al cien.
moomin se sintió con el descaro de empezar a criticar el lugar y para su imprudencia había decidido que sería un buen tema de conversación, el lugar era terrible y estaba seguro de que joxter opinaría lo mismo, pero vaya sorpresa que se llevó cuando esté le dirigió la mirada con una sonrisa resplandeciente
—Me encanta este lugar— decidio romper el silencio
—¿Hablas en serio?—preguntó con incredulidad
—Por supuesto, solía visitarlo cuando era más joven —suspiro nostálgico—. El dueño era un gran tipo, solía invitarme la comida cuando yo no tenía ni para caerme muerto
—No sé qué decir— admitió apenado—. Me sentía un poco disgustado por el sitio— dejó caer sus hombros con pesar mientras desviaba la mirada— es que simplemente el aroma no es nada favorecedor por decirlo de modo amable.
—Entiendo tu opinión moomin, pero el lugar ha cambiado, no es del todo lo que yo recuerdo —mencionó mientras dejaba su abrigo en el respaldo de la silla, este topaba levemente con el suelo.
Al terminar la oración un encargado se acercó a su mesa para tomar la orden, un silencio inundó el momento y moomin prefirió enfocarse en el menú desgastado para aligerar un poco sus pensamientos, joxter por su parte no toco el menú y mantuvo en todo momento su mirada en él, quien al percatarse de esto se vio obligado a prestarle atención
—¿Necesitas algo?
—¿Qué te parece si mejor ordenó yo por los dos? —sugirió—. Tengo más tiempo conociendo el lugar y sé cual es el mejor platillo
Moomin levanto una ceja no tan convencido por lo sugerido, pero prefirió confiar en las palabras y el buen juicio de su reencontrado amigo de universidad, una parte de la adrenalina aún seguía en su sistema y se sentía hozado con la simple decisión de darle la oportunidad a joxter de elegir que comer, para muchos eso era algo trivial pero no para el que gustaba de decidir cada cosa, a pesar de esto moomin aún se sentía extrañamente involucrado con la decisión aun al darle el mando a su acompañante, cuando por fin moomin asintió después de varios minutos de liberación mental joxter le mostró una sonrisa aún más ancha, un pequeño pero cálido sentimiento se implantó en él, era tan diminuto que casi pasó desapercibido por lo que al notarlo decido rebajarlo a una simple felicidad casual
—Bueno, pediremos dos tartas de piña con canela, encima le pone nieve de nuez y lo acompañaremos con té de naranja y cardamomo, eso sería todo, gracias
El mesero a punto todo en su cuadernillo desgastado antes de marcharse con un cordial "en un momento le traigo su orden", era alto de pelo rubio y encrespado, tenía una apariencia de marinero lo que lo hacía verse ciertamente algo gracioso pero al mismo tiempo bien con aquel mandil blanco lleno de bordados de flores. Cuando el mesero se perdió de la vista de moomin este regresó su atención a su acompañante, quien lo veía minuciosamente
—¿Tengo algo?— pregunto sobándose levemente el rostro
—No nada, pero él está casado— soltó sin más
—¿Qué?
—Creo que tiene una niña—siguió— es una lindura, muy lista por cierto
—¿Por qué me cuentas eso?
—... no sé, simplemente pensé que tal vez quisieras saber más de las personas que te rodean
—Bueno, realmente ni siquiera lo había visto en mi camino, es la primera vez que lo veo
—Puedo asegurarte de que no es así— lo miro—. Esta ciudad es muy chica, todos se conocen en cierto punto de la vida, tal vez eres tú el que no pone realmente atención a tu entorno— lo juzgo con la mirada
—¡Yo!, tonterías — farfullo
—Entonces ¿apostamos?— sugirió
—Apostemos
—Cuando el mesero venga, le preguntaré si te ha visto en algún lado y si ha hablado contigo. Sí, me responde que si me deberás un favor
—Pero, ¿cuál será el favor?
—No me interrumpas moomin, pero si me dice que no, yo te deberé uno a ti
—Pero, ¿cuál sería el favor?
—No lo sé, moomin aún no se me ocurre nada
—Está bien, joxter pero siento que vas a perder
Río levemente —me gusta mucho esa confianza que te cargas—. Apoyo su rostro contra su palma.
—Gracias, aunque debo admitir que solo lo tengo de a ratos
—Eso es mejor que nunca— sentenció—. Ahí viene
—¿Quién?
—Pues, ¿tu novio?
—¡Joxter!, pero qué insinúas...
—Disculpe interrumpir, pero con referencia a su pedido abra un retraso —mencionó con amabilidad
Moomin se quedó estático mientras que joxter se echaba a las carcajadas hasta que sintió una mirada fulminante y pudo notar al dueño de esta, moomin lo veía muy mal, intentando librarse de la regañada inminente, alzó los hombros antes de dirigirse al mesero
—Muchas gracias, esperaremos, pero igual si pudiera traernos, aunque sean las bebidas como verá —señaló a moomin— tenemos un hambre voraz y hasta mi querido amigo se ha puesto de mal humor
El mesero soltó una pequeña risita antes de responderle —sí, seguramente fue por eso joxter
El coraje que traía moomin se le desplomó cuando esté nombró a su amigo ¿a caso se conocían? qué tontería, obviamente que se conocían joxter le había dicho con anterioridad que este puesto era su preferido, claro que conocía a los trabajadores como la palma de su mano lo que lo hizo sudar frío, entonces las posibilidades de que joxter tuviera razón en lo que habían apostado se habían duplicado, se sentía en picada y levemente nerviosos por deber un favor, viendo como era no se podía imaginar un favor simple viniendo de él, pero tampoco quería pensar tan siniestramente por lo que suspiro acomplejado mientras estrujaba levemente la servilleta
—¿Te encuentras bien moomin? —dijo joxter con un tono de preocupación, dejando de lado su charla trivial con el mesero
—Claro, perfectamente —embozo la sonrisa más extraña y poco creíble
Tanto joxter como el mesero se intercambiaron miradas poco convencidas, pero fue el mesero quien ganó la palabra
—Si no se siente bien, aquel pasillo da al baño— a punto hacia adentro
Moomin se sintió apenado por tal escena, que decidió solo asentir antes de pararse y marcharse al baño. Los nervios habían llegado por andar pensando de más y el hecho de que posiblemente se malentendiera algo lo ponía aún peor, ahora estaba ansioso y no deseaba salir del baño que hasta el momento no se había dignado en apreciar, este era bello pero su mente estaba tan desconectada de él que no podía enfocarse y admirar con mayor plenitud el sitio, con fastidio se metió a uno de los cubículos donde bajo la tapa del retrete improvisando un asiento en lo que intentaba traerse nuevamente a la realidad, su mente seguía sobre pensando y no se sentía cómodo con sacar las narices fuera de ese diminuto pero protector cubo, el sudor empezó a hacer acto de presencia por lo que cada cierto tiempo pasaba su mano para limpiarse, los segundos se hicieron minutos y más tarde que pronto moomin pudo recuperarse de ese pequeño bajón, ya con la calma en su sistema abrió la puerta encontrándose con joxter justo en frente, apoyado en los lavamanos
—¡Joder, joxter! qué susto me has dado —dijo dando un salto
Él solo sonrió y movió su cabeza en círculo mientras mantenía ambos ojos cerrados
—... ¿Me he tardado mucho?
—¿Me lo preguntas a mí?
—Pues a quién más, no veo otra alma por aquí
—Sí.
—¿Si hay alguien más?— Busco con la mirada algún indicio de la presencia de alguien más
—No
—¿No hay nadie más?—redirigió su mirada a su amigo, acomodándose la corbata
—Tal vez
—Joxter por favor, estás empezando a irritarme— frunció levemente el ceño
Este volvió a reír —qué poca paciencia tienes— abrió uno de sus ojos para mirarlo
—Tal vez sea solo contigo— contesto mientras lo miraba con detenimiento dando se cuenta de que no llevaba la misma ropa que tenía en la mañana, ambas combinaciones eran alegres, pero había algo que le intrigaba en aquella combinación, sea lo que sea se escapaba de su comprensión, aun así debía admitir que tenía buen gusto, lucía fino con cierto toque de algo... sensualidad, era la palabra que penetró en su pensamiento.
Joxter cambió su sonrisa a una traviesa al percatarse de la atención que estaba recibiendo. —Regresemos, pronto traerán nuestro pedido
Moomin se despabiló de sus pensamientos —¿todavía no lo llevan?— se acercaba al lavamanos con obvias intenciones de limpiarse
—No, no lo tenían así que lo empezaron a preparar, ¿qué acaso no escuchaste al mesero?
—Qué barbaridad, joxter, hubieras pedido otro— aludió mientras esparcía el jabón por sus manos —. La verdad es que no presté atención al mesero
—Pero yo en verdad quiero que lo pruebes— hizo un pequeño puchero tonto antes de seguir—. Es un platillo que lo terminas amando u odiando, ¿cuál crees que sea tu veredicto final?
Moomin lo pensó, pero no tardó mucho en responder —no lo sabré hasta no probarlo, aunque no soy muy exigente con la comida, rara vez me disgusta algo
—Qué diferentes somos, yo soy muy quisquilloso, por eso mi peso
—¿Solo por eso?— indagó más, algo le decía que no era la única razón, había algo más, más profundo
—... pues— apretó los labios
—Si no te sientes con la confianza para decírmelo, no lo hagas —agarró un pequeño trozo de papel para secarse las manos— no quiero forzar nada, eso debe de salir sin sentirse ajeno, quizás más adelante lo sepa
—Sí, seguramente sí, conociendo cómo eres —sonrió recargando su rostro en su propio hombro
—Y ¿cómo soy?
—Ya sabes, amable —fue lo último que soltó mientras se dirigía a la salida, dejando a moomin expectante.
¡Yeeei, por fin lo acabé!
Espero que sea de su gusto y chao.
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Mucho texto jajaja, es el siguente capitulo de mi historia.
(Lamento las faltas de ortografía o gramaticales, según yo lo corregí pero siempre se pasa algo por las narices, además ya me cansé de leerlo y releerlo para ver si está bien jajaja 🤣)
Unas cosillas que quiero recalcar y decir antes de seguir.
1- Está historia tendrá temas sensibles y vocabulario indecente, así como escenas lascivas y +18 (obviamente), así que si eres menor de edad favor de no leerla plis 🙏.
2- Igual los capítulos que tengan dichas escenas tendrán una advertencia ⚠️ en grande al inicio y en caso de que sea necesario censura (por si fb se pone delicado) esto se verá más adelante y la historia irá algo lenta (por si de repente les aburren los capítulos jajaja)
Bueno ya dicho todo lo anterior solo que queda dar gracias por su atención, ahora sí el capítulo. 👇
Capítulo I: Pétalos
Después de una tediosa ida al banco, se encontraba sin energía en su sistema; el conjunto de sucesos que lo habían estado golpeando el día de hoy lo dejaron agotado, pero el que sin dudas le había quitado todo el aliento y se robó toda su atención fue el de su viejo amigo joxter, nombrarlo le hacía sentir raro no quería decir que se había enamorado o algo por el estilo porque eso sería una rotunda mentira, sino más bien lo que sentía era vergüenza. Cuando por fin llegó al lugar destinado, contempló con monotonía aquella estructura de metal frío y de un azul metalizado. La estructura crujió mientras se abría ante sus ojos para dejar el paso libre, saludo vagamente al guardia antes de dirigirse de inmediato a aquella pequeña lápida pintada de un color crema y decorada con flores, moomin se postró frente a ella apreciándola por unos minutos antes de barrer suavemente con una de sus manos las flores que generaba el palo de rosa adyacente; el color de estas hacía un hermoso contraste con la lápida frente a él casi como si trataran de capturar la hermosa esencia de su querida esposa.
—¡Ya llegué, querida! Lamento llegar tarde, pero no creerás lo que me pasó —comentó mientras se sentaba más cómodamente—. Me he encontrado con un viejo amigo y bueno —pensó por un corto momento—, no sé, me dejó con muchas preguntas. Se llama joxter ¿quizás tú sabrás mejor quién es?, siempre supiste recordar mejor a las personas— suspiró entre hermosos y amargos recuerdos—. Si tan solo estuvieras aquí.
Moomin dejo su charla rutinaria cuando unas traicioneras lágrimas intentaban escapar de sus hermosos ojos, ya que todo parecía meramente inútil y él lo sabía perfectamente, ya que sin contestación esto era realmente una conversación o solo un intento más de desahogar su adolorido corazón abatido por la perdida, meneó un poco la cabeza para enfocarse mejor en la limpieza de la lápida, si bien se mantenía presentable aún había una leve capa de polvo y tierra; además debía remplazar las flores marchitas de los jarrones, el cambio fue rápido y la hora de visita estaba por terminar así que entre suspiros melancólicos se levantó sin muchas ganas para dirigirse nuevamente a la salida, el guardia solo lo miro con pesar y lástima antes de volver al periódico del día. El atardecer había llegado cubriendo el cielo con sus hermosos tonos naranjas, dando un momento de serenidad, el camino de vuelta era relajado iba a buena hora y seguramente su querido hijo le contaría todo lo que hizo con su tía Jane quien amablemente siempre cuidaba de él cada que podía mientras él visitaba la tumba de su amada esposa, tan pronto como llego a la primera división que dirigía hacia el centro se vio interceptado por una figura alta y oscura que destacaba con su gran abrigo naranja, el choque fue inevitable y ambos cayeron de bruces al suelo, moomin estaba molesto, pero antes de tan siquiera repelar aquella figura se lanzó hacia adelante en un abrazo lo que lo dejo perplejo, acaso este día aún no acababa con él.
Alzó la mirada para poder enfocar al intruso en su espacio personal y sus ojos se abrieron de extremo a extremo al ver a su amigo joxter.
—Pero qué cara pones cuando me ves— mencionó entre risitas.
Las mejillas de moomin se tornaron inmediatamente de ese particular color durazno que tanto lo caracterizaba en momentos como este.
—Fuiste tú quien chocó conmigo— se excusó débilmente—. ¿Acaso no tienes ojos para ver por dónde vas?— añadió bruscamente.
Él solo rio brevemente: —Cálmate, Mooren — palmeó suavemente su hombro antes de levantarse del suelo, extendiéndole la mano de paso—. ¿Es que acaso te pongo tan nervioso?
—¡Qué! No, joxter— soltó un gritillo sintiéndose descubierto.
—Guarda silencio— lo interrumpió tapando su boca—. Vámonos de aquí antes de que...
—¡Ustedes dos, alto ahí!— ordenó un policía saliendo de la esquina de la calle; estaba sudando y bofeaba un poco mientras se sostenía de lo que podía, parecía haber corrido por un largo rato.
—¡Eso jamás, rata fanguera!— gritó con provocación—. Vámonos, moomen no querrás que nos atrapen— tomó su mano y lo jalo en dirección contraria al policía, quien seguía exclamando que se detuvieran.
—¿Qué haces?, deberíamos detenernos— sugirió mientras intentaba persuadir a su amigo de algún modo.
—¡Estás loco!, si nos atrapan nos quedaremos de dos a tres días en la cárcel — contestó mientras lo jalaba con mayor fuerza—. Créeme, ya lo he comprobado y las celdas no son nada cómodas.
Corrieron por varias calles y con toda la persecución se habían agregado más policías a esta insulsa carrera del gato y el ratón a moomin ya le empezaban a doler las piernas y joxter parecía no ser tan bueno perdiendo de vista a los policías por lo que con cierto grado de gallardía decidió tomar el mando cambiando bruscamente de dirección; se metieron por una calle angosta y maloliente, apartada del bullicio de la gente.
—¿¡Qué haces!?
—Silencio, hago lo que tú no has podido hacer, pienso despistarlos— sentenció
Moomin lo guiaba por nuevas calles unas más difíciles que otras; angostas, de piedra, rodeadas de flores, principales, incluso algunos jardines, joxter se sentía libre y emocionado quería detenerse para apreciar mejor todo, pero aún no se deshacían de los policías o al menos no de todos ahora solo faltaba uno: era el más joven, parecía ser nuevo por lo que se estaba esforzando. Moomin sintió admiración de él, sí bien estaba agotado aún seguía en la persecución, su andar se había vuelto más lento y los constantes jalones de aire le decían que no duraría por mucho tiempo más, pero para ser franco él tampoco estaba seguro de quien duraría más si el joven policía o él, hacía años que no corría de esta manera ni siquiera tenía la condición de antes era toda una proesa que sus piernas se siguieran moviendo, la única evidencia que dejaban a su paso eran las piedras que salían disparadas en su escape, de un momento a otro moomin supo que debía de hacer algo para dejar atrás al policía el crujido que había soltado su rodilla derecha fue la perfecta advertencia de su límite, pronto no podría correr más, también sentía que le era más difícil el respirar por lo que sus ojos se enfocaron más en su entorno y su mente empezó a maquinar el doble para idear un plan y por fin salir de esa situación, su oportunidad se vio presentada cuando vio un jardín con valla rojiza y una sonrisa maliciosa se dibujó en su rostro
—Espero que seas bueno manteniendo tu paso y esquivando por si acaso—habló mirando de reojo a su acompañante.
—¿De qué hablas, moomen? —contestó divertido.
—¡Mira allá! Espero que estés listo para saltar.
—¿¡Qué!? —miró con cierto pánico al sitio que le habían indicado con la mirada—. Estás loco, eso es peligroso— intentó desacelerar un poco su paso, pero el fuerte jalón de moomin lo hizo seguir hasta reincorporarse al andar.
—No seas cobarde joxter.
—¿Pero moomin sabes lo que significa tan siquiera ese color de la valla?
—Claro que lo sé idiota, por eso es la mejor opción que tenemos.
—Pero si no resulta, terminaremos heridos y en la cárcel.
—Tú confía en mí.
—Pero moomin...— intentó replicar mientras le empezaban a sudar las palmas de las manos.
—¡Nada de peros joxter! el que tenga miedo a morir que no nazca— lo interrumpió lleno de adrenalina por lo que estaban a punto de hacer.
—Si termino en el hospital, tú pagarás la cuenta— fue lo último que mencionó antes de saltar la valla junto a él.
—Corre joxter, corre como si tu vida dependiera de ello.
—Pero sí depende, idiota —gritó con algo de pánico en su voz.
Los minutos parecían haberse alargado el doble pero la adrenalina nunca los abandonó hasta que estuvieron fuera de peligro, unas vueltas y metidas por callejones antes de tan siquiera voltear para confirmar que habían perdido de vista al policía, entre jadeos moomin se dignó a hablar aun cuando esto se le dificultaba.
—Bueno— tomo un respiro largo—, será mejor que sigamos.
—Dame un respiro moomen.
—Lo siento joxter, pero hasta que me sienta lo suficientemente seguro, podremos descansar. Si lo hacemos aquí nos podrían encontrar; aún estamos lo suficientemente cerca de ellos, así que levántate.
Esta vez joxter ya no replicó nada y lo siguió de cerca, ya no corrían solo mantenían un paso acelerado que con el trascurso se fue haciendo cada vez más y más lento, después de un largo rato llegaron a una zona que ambos conocían y dónde sabían estaban muy lejos de su problema, con eso en mente por fin moomin se dejó caer seguido de joxter quien igual se desplomó en su estómago, algo que era bastante evidente porque desde hace más de dos cuadras moomin había tenido que ser una fuente de apoyo para que él, aunque más que apoyo lo estaba cargando ya que no movía los pies desde hacía varios metros, moomin estaría muy enojado de lo contrario si joxter no fuera jodidamente liviano para su edad, esto le hacía sonar una pequeña campanita de alerta en su mente, por alguna razón esto le preocupaba un poco, bien podría indicar que no se alimentaba lo suficiente y por ende su falta de peso, por lo que en un momento de fuerza decidió entablar una conversación con el susodicho
—¿Joxter porque eres jodidamente liviano?
Él solo balbuceó en contestación, aunque moomin pudo jurar que solo dijo letras al azar por mera cortesía para que no se sintiera ignorado.
—¿Qué?— decidí insistir en la charla mirando en su dirección, viendo cómo este solo movió débilmente su cabeza a un costado para dirigirle una mirada cansada. Él estaba igual de agotado o más que él—. Vamos, levántate— lo sentó de un leve tirón recibiendo un gruñido bajo.
—Vamos a comer, eso nos dará un poco de fuerzas— sugirió sintiendo un vacío en su estómago.
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Este es el primer capítulo de este proyecto joxminpapa ya tiene un año que lo escribí así que probablemente tenga muchos errores, una disculpa de antemano, lo subo hasta ahora ya que últimamente le he puesto más ganitas y tengo otros dos pendientes por subir pero quiero hacerlo de modo cronológico y no revuelto jajaja
Tal vez después le haga ilustraciones para complementarlo
"CAPITULO 0"
Flor roja ¿Quién eres tú? (Aún no me convence el nombre de este "capitulo" así que si tienen sugerencias las leeré)
La bulliciosa cuidad no era nada parecida a su querido pueblo de origen, pero hace años que lo había dejado por cuestiones más favorables, la vida no era mala aquí, al contrario vivía en una buena colonia apartada un poco del centro lo que le daba el suficiente espacio para apreciar la naturaleza que lo rodeaba, además había tenido la fortuna de llegar a una cuidad tan plagada de diversidad y naturaleza que cada día podía descubrir algo nuevo aunque hace años que no hacía alguno de estos recorridos, mientras caminaba rumbo al banco para cobrar algunos cheques no pudo evitar postrarse enfrente de un viejo establecimiento de flores, la estructura estaba completamente intrincada, sus curvas parecían irreales y desproporcionadas lo que le daba un toque magnífico y mágico que lo hacia destacar de los demás establecimientos cuadrados, sin mencionar de las muchas flores que lo adornaban y salían de pequeñas rendijas y grietas. Al adentrarse una pequeña campanita sonó por todo el establecimiento alertando la llegada de un posible cliente, llevándose una grata sorpresa al ver qué el lugar era más grande de lo que aparentaba, claro que fue completamente ignorada su entrada por la dueña que platicaba alegremente con un hombre alto y esbelto a simple vista, su rostro se escondia bajo su gran sombrero rojo carmesí que le daba ese toque misterioso, moomin se mantuvo quieto en su sitio hasta que el hombre volteo aún manteniendo su rostro escondido
—vamos querida! por qué no lo atiendes, no querrás perder un pez gordo —finalizó levantando el ala de su sombrero y dejando a la vista su rostro
Moomin no supo si enojarse o sentirse alagado por aquellas palabras, realmente no le molestaba su aspecto pero era cierto que aún así le era incómodo que hablaran tan libremente de su apariencia, queriendo no tomárselo tan a pecho bajo su sombrero de copa en forma de saludo antes de acercarse a la barra donde se mantenía ambas personas sonrientes, junto a varios chiquillos que se hicieron visibles solo hasta que se acercó lo suficiente, todos ellos jugaban con flores marchitas o desechadas por su aspecto y a la vista de moomin era algo un poco incomprensible pero a su vez familiar, para ellos todas esas flores eran juguetes relucientes y asombrosos, no pudo evitar esbozar una sonrisa al apreciar la inocencia de la niñez en su maximo explendor.
Cuando por fin se sintió seguro de como iba abordar a la encargada, trago un poco de saliva antes de hablar —buenas tarde, me gustaría saber ¿tiene salvias? —pregunto mientras se colocóba de vuelta el sombrero en su lugar
—¡por supuesto! aquí encontrará mucha variedad de flores, ¿cuántas quiere? o es acaso que ¿usted prefiere un ramo personalizado? —hablo alegremente mientras hacia leves señalaciones a toda la viariedad de flores que estaban a la vista
—la verdad es que yo deseo un ramo de rosas rojas intercaladas con blancas, también me gustaría complementarlo con ballon flowers, una camelia roja y una salvia azul y otra roja —finalizó mientras mantenía su mirada en la encargada quien solo se sonrio
—claro, espere un momento en lo que le tengo su ramo —respondió mientras se alejaba a toda marcha, algunos niños aún se mantenían colgandos de su vestido
Moomin solo la miro irse antes echarle una mirada al establecímiento en busca de los pocos asientos que estaban a su alcance, las piernas le dolían y le parecía muy tentadora la idea de descansar un rato antes de seguir con su camino, al pasar su mano por el asiento más cercano una cantidad exorbitante de polvo se levantó, moomin no pudo aguantar y empezó a tocer a consecuencia de su acción, mientras se encontraba luchando por no ahogarse debido al polvo una voz traviesa resonó en su espalda
—no sabía que te gustaba comer polvo señor ... elegante
no pudo ni reaccionar cuando su sombrero había sido extraído de su sitio estaba estupefacto había escuchado que habían personas groseras en la ciudad, por supuesto que lo sabía el mismo se había topado con más de una en alguna ocasión, pero nunca alguien se había atrevido a quitarle su sombrero eso sí que era algo descortés por lo que no dudo en darse la vuelta para encarar aquel hombre que jugueteaba con su sombrero
—buenas tardes señor —le saludo intentando mantener su compostura —me gustaría informarle que me parece muy descortés su acción y le pediré con toda la amabilidad que me devuelva mi sombrero —extendió su mano
Aquel hombre solo ladeó un poco la cabeza y colocó su dedo índice en la comisura de sus labios mientras sonreía traviesamente
—y si no lo hago señor, ¿que hará? arrestarme —bromeó
Moomin sintió como le entraban calores a la cabeza y empezaba a irritarse, aún así prefería no hacer ninguna escena por lo que volvió a insistir batiendo un poco su mano en el aire a lo que el hombre aprovecho para estrecharla amistosamente, moomin lo miro sorprendido pero recobro rápidamente la compostura
—joxter —fueron las palabras que brotaron de aquella persona
—¿joxter? —repitió moomin sin captar
—así es, el joxter, ese soy yo —contesto mientras devolví el sombrero a su lugar y se enderezaba en su sitio listo para marcharse —¡ya me voy querida! te veo más tarde si es que vuelvo —se despido de quién moomin suponía era la mujer, mientras que el solo se quedó ahí parado cuando esté le devolvió la mirada
—oye amigo necesito esa mano
Moomin hecho un vistaso rápido a dónde los ojos de aquel individuo señalaban para notar como aún la mantenía sostenia, por lo que en un momento de vergüenza la retiro rápidamente
—lo lamente, no quería, es solo que yo, tu sabes, confundído
Moomin estaba seguro que lucía ridículo al estar travandose tanto pero le era algo imposible de no realizar cuando aquella persona tan enigmática para sus ojos lo miraba tan penetrantemente casi como si esperara algo de el, se sentía perdido y no lo entendia
—bueno —suspiro resignado —supongo que no debo esperar tanto viniendo de ti o no moomen —dijo antes de alejarse
Moomin estaba sorprendido, como aquel extraño sabía su nombre y como porque le había puesto un apodo, a caso era alguien cercano a el que no recordaba, ¿un familiar? no imposible eran completamente distintos, ¿una ex.. expareja? no jamás, solo había tenido un unico amor en su vida, hasta que porfin lo penso...un amigo, ¡oh! que cruel era como había podido olvidar a uno de sus amigos eso era tan descortés e hiriente. Pero rebuscando en su mente aquel nombre no le resonaba por ninguna parte, ¿será acaso que lo estuviera confundiendo con alguna otra persona? pensó hasta que por milagro del señor un golpe de un recuerdo difuso de sus años de universidad se instaló en su mente, en aquel recuerdo se nombraba vagamente aquella persona, por lo que al menos con más tranquilidad moomin sabía que lo conocía al menos de algún lado
Con el recuerdo aun en mente y el arrepentimiento hasta la nariz se dirigió rápidamente hasta donde estaba joxter y lo tomo por el brazo sutilmente deteniendo su andar y ganándose una sonrisa del contrario
—¡Vaya, pensé que me dejarías ir por unos instantes! al perecer si soy de tu interés —jugueteo un poco
—¡oh, yo solo quiero disculparme jo.joxter —musitó avergonzado —lamento no haberte reconocido pero han pasado tantos años desde aquellos días de universidad que ¡uf! me parece muy lejano tu recuerdo casi.. como si no nos hubiéramos conocido, nunca —admitió arrepintiendo se enseguida de sus palabras —lo siento, no quise decir eso
Joxter explotó en carcajadas —típico de ti moomen, pero bueno me gustaría platicar contigo con más calma, tengo prisa por el momento haci que nos vemos después —se despidió dejando un beso rápido en su mejilla y quedándose unos pocos segundos cercas de su cara con una gran sonrisa traviesa a lo que moomin solo supo tragar en seco, estába sorprendido y no solo eso estaba aún más confundido.
Para cuando joxter salió de la tienda moomin aún se mantenía estático en su sitio, seguía procesado todo lo que había pasado en ese corto lapso de tiempo, un conjunto de emociones golpearon su corazón coraje, calidez, desepcion, vergüenza, tantas y muchas emociones contradictorias, se sentía como si su alocado corazón anelara el tacto de alguien ajeno a el, acaso estaba loco no tenía mucho que había perdido a su amada y ya andaba de enamorado se sentía asqueado consigo mismo, sentía que la estaba traicionando, entre más pasaban los minutos más se autoflagelaba psicológicamente hasta que unas suaves palabras brotaron de una boca ajena pero conocida robando toda su atención
—lamento interrumpir tus malos pensamientos pero tú ramo a quedado —menciono enseñándolo a la vista —no crees que luce bien, es precioso ¿Verdad? estoy segura que destacara en esos incontables cuadros grises.
moomin no respondió nada aún estaba algo absorto en sus pensamientos pero se obligaba a regresar a la realidad y después de unos minutos al final pudo pronunciar esas dichosas palabras
—gracias
—si me lo permite — empezó hablar la encargada mientras le hacía entrega del ramo —no debería aferarse a ninguna emoción o persona, eso puede ser muy contraproducente para el alma — termino sonriendole gentilmente
Moomin no sabía que responder y no quería verse descubierto pero parecía libro abierto lo viese por dónde lo viese, era inefable lo predecible que era que le enfadaba un poco serlo, pero tampoco podía negarlo.
—... ¿cuánto es? —decidió cortar la plática abruptamente para no terminar hablando de más
—simplemente hombres – suspiro con cierta desepción
Bueno eso es todo, saludos cordiales y estaré al pendiente de todos sus comentarios 😊
#joxminpapa#joxter#moominpapa#fanfic#amor de hombres ❤️#la incertidumbre y el anhelo entre las flores
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🌿 DAY 22
Father and son bonding (aka park keeper torture hours)
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😂😂🤣
fffffffff u uuu kc
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1. yo what are you doing it tickles-
2. HEY don't bite!
3. Oops-
4. COUGH COUGH
5. Hehe this will pass-
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Viejos enamorados que aún no lo han descubierto 🫣
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Jajajaja 😂 dios esto es tan gracioso, me encanta
Una obra humorística 😊
Los moomins
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Timeskip Mymble Jr!!!
Sorry the coloring sucks I got lazy :-P
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Jajaja sin dudas eso haría el pobrecito de moomin 😂😊
Moomin's lil scare 👻
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Little My's humble abode
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Jajaja joxter luce tan gracioso que es genial
SNUFKIN'S ORIGINS (best case scenario)
Bonus:
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