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Reflexión: Yo Valgo La Sangre de Cristo

Introducción En mi adolescencia, tuve expectativa del estreno de un documental que se titulaba “¿Y Tú, Cuánto Cuestas?”, durante el desarrollo, varias personas que tenían rasgos de una clase económica acomodada, y otras que denotaban desde sencillez hasta pobreza, (unas en USA y otras en MX) contestaban dicha pregunta. Lo curioso es que las primeras personas solían responder objetos materiales inalcanzables para muchos de nosotros (mansiones, yates, monedas de oro, 1M de dlls) mientras que muchos de los “pobres” decían que no tenían precio, otros asumían que valían más que el oro, pero nadie dijo “!Yo no cuesto, YO VALGO LA SANGRE DE CRISTO¡”. Desarrollo

Una de las actitudes más limitativas del humano, es tender a despreciar a la ligera, cosas que deben importarnos de nosotros mismos y lo que permitimos del exterior pase a nosotros o que salga de nuestras acciones (palabras, ideas, sentimientos, creencias, información) (Lucas 6:45), Y como dice la escritura, lo que decimos y que no podemos resistir a mostrarlo es porque lo tenemos dentro.

Cuando de pequeño decía alguna torpeza y me justificaba con un “se me salió”, mi madre solía decir “porque lo tenías dentro de ti”, cosa que es cierta, lo que puede llevarnos por varias ideas, la idea principal del objetivo de esta reflexión es que comprendamos que nosotros no somos cualquier persona que pueda tomarse la libertad de comportarse de formas que nos expongan a demeritar nuestra imagen y nuestro valor. -Tendemos a pensar (como parte de la cultura de nuestro entorno) que solo si tenemos traje, debemos comportarnos de tal o cual forma asumiendo que es lo correcto, o que sólo si vamos a realizar una actividad o un lugar de prestigio, el ir vestido en remiendos, nos quitaría valor ante los presentes, y aunque también somos personas que entendemos que hay un momento para todo (Eclesiastés 3: 1) y procuramos seguir el orden transmitido por Dios, vistiendo adecuadamente según la ocasión (pues también somos ejemplo (1 Timoteo 4:12)), sabemos que nuestro valor no radica en los objetos que nos rodeen o el dinero que manejemos, sino la sangre del mismísimo Hijo de Dios, quien la derramó para que por un nuevo pacto, Dios nos permia aspirar a dejar de ser gentiles y tener parte con Él.

Volviendo al ejemplo de la riqueza superficial, Cuando en el mundo, una persona llega a tener cierto tipo de logros (parejas, coches, negocios, estudios, contactos, etc), es alguien que puede cotizar sus servicios o algún tipo de trabajo en un precio alto, su mismo nombre es una carta de presentación, y no necesita gastar en varios de los lujos de los que disfruta pues mucho de ello es un detalle que otros tienen hacia su persona, buscando algún beneficio de él, y podría decirse que “Vale mucho, mucho, mucho más que cualquiera de nosotros que sin alguna carrera, ingreso, credibilidad bancaria, influencias, etc, tenemos que ver de qué forma convencemos de nuestro prestigio o aptitudes a alguien que probablemente no tenga ingresos para un servicio más completo”, y aunque para quienes se mueven en ese mundo, e incluso a quienes se dedican a lo malo, sea verdad, nosotros entendemos que valemos exactamente igual para nuestro Dios, (Hechos 10: 34) esto porque si hacemos conciencia, aunque nuestro prójimo no tenga algún compromiso serio con el Dios que nos toma por hijos, sigue siendo parte de la humanidad de la que muchos de nosotros fuimos un día, y por la que un día murió Jesús.

Es interesante la siguiente idea, por un lado, tenemos que para Dios todos valemos lo mismo, sin embargo, también entendemos que no todos son Hijos de Dios, aunque no todos seamos su creación, (Mateo 7:21) pues no es un simple título que se deseche y se ponga como una calcomanía. Entendemos que cuando alguien toma por hijo a alguien, lo valora y quiere más que a otras personas. Eso es así pues nuestra visión limitada como humanos, nos hace asumir o pensara que eso es sinónimo de preferencia, y si bien Dios tiene sus “escogidos” (Mateo 22:14 ), esto no es porque no ame a su creación y humanidad, sino que al final, un líder de familia debe aprender a saber cuando un extraño es más apto para algo que alguien de su propia casa que sufra dicha carencia, y que el hecho de valer la sangre de Cristo no nos hace más valiosos que quienes no han reconocido o quienes han rechazado el sacrificio del Maestro, pero si nos hace más cercanos y nos relaciona con Dios de una forma mucho más trascendental que cualquier sentimiento de plenitud humana cualquiera. (¿Y no acaso tener tremenda tranquilidad, es sumamente cara en el mundo para quienes compran seguros de vida, guardaespaldas, antivirus, candados, etc?). La oferta que Dios nos hace al invitarnos a ser parte de su Iglesia, no la puede ofrecer nadie ni nadie la puede pagar con algo que valga en este mundo.

Ya que nos hemos dado cuenta de nuestro precio como hijos de Dios, es momento de reflexionar, si no nos despreciaríamos a nosotros al saber lo que valemos, ¿despreciaríamos a nuestro hermano?, por enojos, arrebatos, cuestiones a veces serias y a veces incluso con razón, perdemos la confianza en un hermano, un hermano al que sabemos que si bien no tiene malas intenciones, es tan imperfecto como nosotros, esto pasa a nivel local, pero también a nivel social cuando despreciamos a un hermano por sus defectos, fallas o errores, nos olvidamos de lo que dice (Romanos 1:4), que acompañó a la conclusión anterior, donde dice que cundo un hijo de Dios cae, este cae para Dios, no para nosotros, y si se levanta, ¡Para Gloria de Dios!, no para gloria nuestra. (No confundir cuando tomamos distancia de la influencia y persona de quienes indignamente manchan el nombre de la Iglesia haciéndose pasar por Hijos de Dios, pero en lo oscuro celebran su cinismo, a quienes tampoco hay que despreciar, pero debemos actuar teniendo en cuenta dicho versículo y entender que sólo Dios sabe que recompensa tiene para cada uno) Conclusión Hay serias condenas no solo para quienes usan o maldicen el nombre de Dios, sino para otro tipo de pecadores (mejor seri que se atara una roca al cuello), pero en lo general, entendemos que todos tenemos oportunidad del participar en la eternidad como seres transformados para la Gloria de Dios, ¿y no acaso eso hace que valgamos mucho? Cuando alguien en vía pública fallece a causa de una herida, y los seres amados se encuentran cerca, ven con dolor tristeza y desesperación, la sangre correr de sus seres amados, algunos de ellos queriendo evitar que esta se derrame en el sucio asfalto… ¿no nos duele de la misma forma la sangre que Cristo derramó por nosotros? Se acerca La Cena del Señor, uno de los momentos que unen a toda la iglesia, y uno de los simbolismos más profundos, es su sangre, cuidemos nuestra salud, nuestros hábitos, nuestra higiene, nuestra imagen, nuestra credibilidad, nuestra mente, nuestros ojos, nuestras emociones, nuestros defectos, nuestra espiritualidad, porque somos Santos que valemos la Sangre de Cristo. (versículo nosotros bebimos el espíritu santo)

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Reflexión: Siempre ha habido guerra

Objetivo Que los hermanos evitemos alarmarnos por escuchar noticias de guerra en el mundo y oremos más por las diferencias de la Iglesia de Dios. (sábado 2 abril 2022) Introducción ¿Conocen un momento de paz en los últimos años, décadas, o siglos? ¿Alguna civilización que haya conseguido auténtica paz un periodo de su existencia? Hay que hacernos conscientes de que, en ningún momento, ha existido un momento de paz general en el mundo. ¿Nos preocupa más la descensión en el mundo, que en la Iglesia de Dios?

Desarrollo

El sabio Salomón dice: en (Eclesiastés. 1:9) que no hay nada nuevo bajo el sol, un tanto desalentado por el hecho de ver que las cosas no eran auténticamente nuevas o que la humanidad no cambiaría de sus defectos, vicios o que no saldría de sus limitaciones sin tener que retroceder en otro aspecto, Lo cierto es que su afirmación está llena de sabiduría, pues podemos entender que el humano permanece en un constante estado de conciencia, y que este no tiene avances por sí mismo, lo cual lo mantiene en un constante estado de amenaza que se encuentra por su propia maldad (Salmos 36: 1-4)

La misma biblia nos afirma que constantemente íbamos a escuchar sobre rumores de guerra, (Mateo 24:6-8 ) y que no debemos angustiarnos de más, pues, muchos de estos eventos son cosas que deben ocurrir inevitablemente y que poco podemos hacer para evitar que nos afecten, (sobre todo cuando por la poca información que tenemos por ingenuidad o ignorancia tenemos poco margen de maniobra para poder tomar decisiones que nos ayuden a amortiguar problemas directos). Esto debe servirnos de señal, no de que debemos permanecer en continua ansiedad y angustia, (pues estos inevitables eventos, no tendrán el mismo impacto en los impíos y en los hijos de Dios, quienes tenemos una confianza distinta. Salmos 91: 4-8) más bien, de que las noticias que hoy escuchemos, no son sino prueba de la maldad que el humano tiene inclusive al manejar medios de comunicación que sueltan información estratégicamente para causar miedo, morbo, molestia o frustración. Y Aun cuando alguna desgracia nos alcanzare, el habitar en su justicia y amor, nos hace tener una fe y una esperanza distintas, las cuales, son superiores a cualquier sentimiento humano por muy desesperante y agónico que éste sea. (Recordemos que a nosotros nos espera la primera resurrección (Mateo 6 19- 21)

Las guerras y los caídos, ya sean estos civiles inocentes que mueren por la elección que el hombre hace hacia la maldad, o el de criminales que pudieran ser afectados en un conflicto bélico, son un saldo que no vamos a cambiar angustiándonos ni protestando o criticando como aficionados un deporte. (Daniel 2:21). Pero podemos mantenernos fieles a Dios para que nuestro estilo de vida, sea dominado por la espiritualidad y no la carnalidad de la angustia (Gálatas 6: 1), así poder estar en posición de sentirse escuchados por Dios.

Lo que debemos cuidar, es la Iglesia de Dios, participando en su obra o siendo constantes en el crecimiento de la doctrina y disciplina que encontramos solo en su palabra; pues donde más Satanás va a querer provocar guerra y rumores de ella, es en la Iglesia de Dios, donde efectivamente, a causa de varias circunstancias, (Salud, espiritualidad, organización, recursos, comunicación etc.) nos vemos afectados y vulnerables a ser sus presas provocando disgustos, fricciones, tristezas y problemas en la congregación, sobre todo ocupando a los ministros y a sus familias para que desatiendan la congregación.

Las balcanizaciones son procesos geopolíticos que una potencia ejerce sobre un estado pequeño para cambiar su estructura y su civilización a conveniencia de dicha potencia, mediante la fragmentación y desestabilización de su sociedad, cultura, economía, religión, etc. Definitivamente no queremos eso para nosotros ni la Iglesia. Conclusión 1 - Lo ideal es mantenernos dignos y limpios de obras para tener el pudor y la conciencia limpia a la hora de presentarnos ante Dios por medio de la oración al suplicar por la claridad de pensamiento, capacidad de decisión, (2 Corintios 2:16) margen de maniobra, liderazgo, sabiduría y de todos los atributos que necesitemos para poder cuidar a nuestra familia de la desinformación mediática, de la ansiedad, o de miedos reales, de los que debamos estar conscientes para evitar el pecado o riesgo de que nuestra integridad física sea afectada por un mal social. (Lucas 21 36) 2.- Mantenernos alejados de quienes ya sabemos que mienten, incluidos medios y si de verdad queremos entender un conflicto, (con un fin sano, buscando el desarrollo intelectual, y tener paz espiritual) debemos buscar fuentes confiables que se encuentran al leer de historia, de antropología, economía y muchas otras disciplinas que no son malas, pero que ciertamente, nos restan espacio para un desarrollo espiritual robusto. ¿Realmente vamos a buscar una especialidad de una carrera que aún no iniciamos, y desconocemos si nos apasiona como para vivir de ello, solo para poder opinar de un tema?, No haría falta, pues bastaría con dejar algunos ocios y entretenimientos para poder concentrarnos, mínimamente como aficionados a dichos temas y saber si podemos aportar. 3.- Debemos ocuparnos más en la oración para que la casa de Dios (su Iglesia) no caiga en luchas o diferencias graves que nos lastimen (Lucas 11:17), podemos (si es lo más sano) tomar una distancia de amigos, conocidos, familia, hermanos de la Iglesia, etc. porque es importante saber que no siempre es posible que nuestros caracteres se acoplen (Pablo y Bernabé tuvieron que trabajar separados de ellos, más no de la doctrina como señala Hechos 15 36:41) y seamos espirituales para resolver dichas diferencias. Pero si buscamos ser todo eso, toleraremos las flaquezas de los demás y las nuestras, pues al fin, si es al Señor a quien servimos, a el es a quien le servimos o le fallamos. (Romanos 1 4-7). Para que así, un día juntos de forma plena, podamos alabar con dignidad y estando en paz con nuestro hermano a pesar de las diferencias.

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Fe e identidad Parte 1

La introducción a la revisión documental de la Iglesia de Dios, próximamente en https://www.youtube.com/@EstudiosIglesiadeDios

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Estudios de la Iglesia de Dios

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Paz a todos!

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¿Porqué usamos la Menorah?

En realidad no es que la Biblia diga que tengamos que usarla para identificarnos, sino que la Biblia es clara cuando se refiere a la Iglesia de Dios al mencionar al candelabro de las 7 lámparas.

Leamos Zac. 4

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Próximamente, revisaremos un mapa de todas las Iglesias de Dios (sabáticas) que hay en todo el mundo.

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CITAS SOBRE EL CAMBIO DEL SÁBADO AL DOMINGO

La ley dada por Constantino el 7 de marzo del año 321 d.C., relativa al día de descanso, era como sigue: “Descansen todos los jueces, la plebe de las ciudades, y los oficios de todas las artes el venerable día del sol. Pero trabajen libre y lícitamente en las faenas agrícolas los establecidos en los campos, pues acontece con frecuencia, que en ningún otro día se echa el grano a los surcos y se plantan vides en los hoyos más convenientemente, a fin de que con ocasión del momento no se pierda el beneficio concedido por la celestial providencia”. Código de Justiniano, Lib. 3, tít 12, Párr. 2

La observancia del domingo en la nueva ley sucede a la observancia del sábado no en virtud del precepto de la ley, sino por determinación de la Iglesia y la costumbre del pueblo cristiano. Y esta observancia no es figurativa, como lo fue la del sábado en la antigua ley. Por eso no es tan rigurosa la prohibición de trabajar en domingo como lo era en sábado; y así se permiten en domingo algunos trabajos que se prohibían en sábado, como cocinar alimentos y otros por el estilo. Y también algunos trabajos prohibidos se dispensan, por razón de necesidad, con más facilidad en la nueva que en la antigua ley, porque lo que es figura debe expresar la verdad sin salirse de ella lo más mínimo; en cambio, la realidad, que tiene razón de ser en sí misma, puede variar según las circunstancias de lugar y tiempo. Suma Teológica, Tomás de Aquino “Suma teológica - Parte II-IIae - Cuestión 122 Artículo 4, Respuesta a Objesión 4.

Ya no mandará guardar un día de descanso al que todos los días observa el sábado Cita de Irineo de Lyon: Suma teológica - Parte II-IIae - Cuestión 122

El Arzobispo católico Eusebio, escribiendo en el año 330 D.C. declaró: “Todas las cosas que eran permisibles para hacerse en el día del sábado las hemos transferido para el Día del Señor”. Comentario a Salmos 91, publicado en Migne, Patrología Graeca, tomo 23, Col. 1171 Cita del Arzobispo Eusebio (S. IV d.C)

“Agradó a la iglesia de Dios cambiar el culto y celebración del Día del Sábado por el Día del Domingo”. Catechismus Concilii Tridentini, Pars III, Cap. IV, 25. Ed. De París, Pág. 467

Concilio de Laodicea 364 D. C.: “Los cristianos no deben judaizar y estar ociosos el día del sábado (el día de reposo original), sino que deben trabajar en ese día. Deben honrar en una forma especial el día del Señor. Como cristianos, hasta donde esté a su alcance, no deben trabajar en ese día. Con todo, si se les encuentra judaizando, se les separará de Cristo”. Rev. Charles Hefele, History of the Councils of the Church, tomo II, p. 316

Pregunta ¿Cuál día es el día de reposo? Respuesta: El sábado es el día de reposo? Pregunta ¿Por qué observamos el domingo en lugar del sábado? Respuesta “Observamos el domingo en lugar del sábado porque la Iglesia Católica transfirió la solemnidad del sábado al domingo”. Peter Geiermann, The Convert’s Catechism of Catholic Doctrine (1957 ed) p. 50

“El domingo es una institución católica, y… puede defenderse solo sobre principios católicos… Desde el principio hasta el final de las Escrituras, no hay un solo pasaje que justifique la transferencia del culto público semanal del último día de la semana al primero” Prensa católica, 25 de agosto de 1900

"1247 El domingo y las demás fiestas de precepto los fieles tienen obligación de participar en la Misa; y se abstendrán además de aquellos trabajos y actividades que impidan dar culto a Dios, gozar de la alegría propia del día del Señor, o disfrutar del debido descanso de la mente y del cuerpo." La Función de santificar la iglesia" Capítulo III epígrafe 1247 (Cann. 1244 – 1253)

“El día de reposo era el sábado, no el domingo. La Iglesia cambió la observancia del sábado por la observancia del domingo. Los protestantesdeben estar bastante desconcertados por la observancia del domingo cuando Dios claramente dijo: 'Santificad el día de reposo'. La palabra domingo no aparece en ninguna parte de la Biblia, entonces, sin saberlo, están obedeciendo a la autoridad de la Iglesia Católica”. Canon Cafferata, El Catecismo Explicado, p. 89

“La iglesia católica por más de mil años antes que existieran los protestantes, por virtud de su comisión divina, cambió el día del sábado por el domingo… el reposo cristiano es hasta este día reconocido como hijo de la iglesia católica y como esposo del Espíritu Santo, sin una palabra de protesta del mundo protestante”. Editorial, The Catholic Mirror (Baltimore), 23 de septiembre de 1893:

''La razón y el sentido exigen la aceptación de una u otra de estas alternativas: o el protestantismo y la santificación del sábado, o la catolicidad y la santificación del domingo. El compromiso es imposible.” John Cardinal Gibbons, The Catholic Mirror, 23 de diciembre de 1893.

“Usted puede leer la Biblia desde el Génesis hasta el Apocalipsis y no encontrará un sólo renglón que autorice la santificación del domingo. Las Escrituras ponen en vigor la observancia religiosa del sábado”. Cardinal Gibbons, The Faith of Our Fathers, (92nd. ed., rev.), p. 89.

“La iglesia cambió la observancia del sábado al domingo haciendo uso de la autoridad divina e infalible que le fuera concedida por su fundador, Jesucristo. El protestante, al indicar que la Biblia es su única guía de fe, no tiene ninguna autorización para la The Catholic Universe Bulletin, 14 de agosto de 1942. p. 4:

“Puede leer la Biblia de Génesis a Apocalipsis, y no encontrará una sola línea que autorice la santificación del domingo” La Fe de Nuestros Padres, Por James Cardinal Gibbons, p.111

“La Biblia… nos cuenta cómo Dios ordenó que se guardase el séptimo día como monumento de la creación. Nos cuenta cómo el mandamiento fue repetido en el Sinaí. Nos narra cómo el mismo Hijo de Dios guardó el Sábado. En ningún lugar dice que los cristianos deberían guardar un día diferente al de los judíos, su pueblo escogido” The Catholic Bulletin, 7 de Febrero de 1954

“No hay un sitio en el Nuevo Testamento donde se registre distinguidamente que Cristo cambió el día de adoración del Sábado al domingo. Aún así, todos los protestantes, excepto los Adventistas del Séptimo Día, observan el domingo… Los protestantes siguen la tradición al observar el domingo” Our Sunday Visitor,11 de Junio de 1950

LO QUE LOS PROTESTANTES DICEN:

Bautistas: “No hay nada en las Escrituras que nos pida que guardemos el domingo en vez del Sábado como día santo” (“Considere el caso para Sábados tranquilos”, por Harold Lindsell, editor, Christianity Today,5 de Noviembre de 1976).

“Había y hay un mandamiento para guardar santo el día de reposo, pero ese día de reposo no era domingo. De cualquier modo, se dirá con cierto aire de triunfo, que el día de reposo fue cambiado del séptimo al primer día de la semana…¿Dónde se puede encontrar un registro de tal cambio? No en el Nuevo Testamento, rotundamente no.” (Dr. Edward T. Hiscox, autor de El Manual Bautista, en un documento leído delante de la Conferencia de Ministros de Nueva York, mantenida el 13 de Noviembre de 1893).

The Christian Church (la iglesia cristiana): “No hay autoridad directa de la Biblia para llamar al primer día de la semana “día del Señor” (Dr. D. H. Lucas, Christian Oracle, 1890).

Congregacionista: “El día de reposo cristiano (el domingo) no está en las Escrituras, y no fue llamado día de reposo por la iglesia primitiva” (Dwight’s Theology, Vol. 4, p. 401).

Episcopal: “El mandamiento bíblico dice que el séptimo día descansarás. Ese es el Sábado. En ningún lugar en la Biblia está basado el que se haga en domingo” (Phillip Carrington, Toronto Daily Star, 26 de Octubre de 1949).

Metodista: “La razón por la que observamos el primer día en vez del séptimo no está basado en ningún mandamiento. Uno buscará en las Escrituras en vano tratando de encontrar el cambio del séptimo al primer día” (Clovis C. Chappel, Diez reglas para vivir, p. 61).

Presbiteriano: “El Sábado es parte de… los Diez Mandamientos. Solamente esto despeja la duda acerca de si la institución es perpetua. Hasta… que se pueda mostrar que toda la ley moral ha sido abolida, el Sábado permanecerá… Las enseñanzas de Cristo confirman la perpetuidad del Sábado” ( T. C. Blake, Teología Condensada, p. 474, 475).

Cultura y ciencia: “Las gentes de habla inglesa han sido los más persistentes en perpetuar la asunción errónea de que el cuarto mandamiento se pasó al domingo … Se habla frecuentemente, y erróneamente, del domingo como día de reposo” (F. M. Setzler, director jefe, departamento de antropología, Smithosian Institute, carta, 1 de septiembre de 1949).

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Ley de la alimentación vigente P I

Introducción

Creemos que el pueblo de Dios obedece la ley de la alimentación que Dios ha enseñado desde el principio para permanecer en santidad. Introducción Este es un punto de doctrina que se ha prestado a la discusión durante mucho tiempo.

Enseguida revisaremos algunos aspectos que consideramos de suma importancia para sustentar lo que creemos en el pueblo de Dios, que sigue obedeciendo plenamente esta ley de la alimentación, cuyas citas base principales se ubican en Lv. 11 y Dt. 14.

Objetivo de la ley de la alimentación

Para el caso de la ley de la alimentación algunos grupos religiosos la obedecen teniendo como base algunas ideas de salud y de aparente “limpieza”: por ejemplo, se dice que el cerdo no se debe comer porque es un ser muy sucio y puede transmitir enfermedades.

A pesar algunas creencias de pensar que se puede comer de todo en los grupos religiosos, Dios puso muy claro su objetivo al dar su ley de la alimentación (Lea: Lv. 11:44). Él quiere que su pueblo, que ha apartado de todos los demás, sea diferente, como Dios es diferente de otros supuestos dioses.

Obedecer es señal de fe

Adicionalmente, el obedecer esta ley es una forma de manifestar nuestra fe en Dios, pues no necesitamos de una “razón científica” para obedecerlo, o pensar que sólo si nos beneficia en la salud le obedeceremos, lo hacemos porque amamos a Dios (Lea: 1 Jn. 5:3).

Las normas y reglamentos que rigen la alimentación del pueblo santo de Dios han estado presentes desde que existe el pueblo mismo, antes de Israel, antes de Abraham y después de todos ellos.

La alimentación Original

En un principio, la alimentación del humano fue a base de frutos y semillas (Lea: Gn. 1:29), esta debería ser pues nuestra principal alimentación, y en ese tiempo, la alimentación del humano no incluía la carne animal, en el relato bíblico, de Gn. 4: 1-4, se ve que el humano criaba ovejas, aunque no hay evidencia clara de que las utilizaran para alimento, no se ve ningún testimonio que utilizaran otros animales considerados como inmundo por la ley de Lv. 11.

(Lea: Gn. 1:29) Más adelante en el tiempo, vemos que el patriarca Noé conoció acerca de las reglas de la limpieza de los animales aunque no queda claro que haya sido para alimentación, sí que sabía cuales animales eran “limpios” y cuales “inmundos”, esta reglamentación fue obedecida para la salvación de las especies de animales en el arca (Lea: Gn. 7: 1-5) y para ofrecer sus sacrificios de agradecimiento al Dios todo poderoso utilizó de los animales y aves limpias (Lea: Gn. 8:18-21), no utilizó de las otras especies que estaban con él, porque tenía claro qué animales eran limpios y cuáles no y cuando Noé salió del arca, Dios le mencionó algo que a muchos los hace pensar en un rompimiento de esa ley continua a través de los milenios, ya que en Gn. 9:3 dice “Todo lo que se mueve y vive os servirá de alimento, lo mismo que las legumbres y las plantas verdes. Os lo he dado todo”;

Cuando el Señor dice todo lo que se mueve y vive, pensaríamos que incluye también animales “inmundos”, pero Noé no pensó así, pues más adelante veremos que la enseñanza de animales limpios y no limpios continuó; en su mente las palabras del Señor indicaron un cambio respecto a Gn. 1.29, pues el alimento del humano era sólo a base de vegetales, frutas y semillas, ahora incluía también “animales” (todo lo que se mueve y vive), de esos que Noé sabía que eran limpios y podemos asegurar esto por una razón simple al analizar el texto de Gn. 9:3, si la familia humana salvada, hubiese comido un cerdo, al haber solo una pareja (macho y hembra Gn. 7:2), habría destruido a toda esa especie.

Recordemos además que como había pasado alrededor de un año con inundación sobre la tierra, los vegetales todavía tardarían para desarrollarse, por lo menos algunas semanas o meses, mientras tanto el humano tendría qué comer.

El Señor le dijo a Abram que el cumplimiento de todos sus mandamientos era parte fundamental del pacto (Lea: Gn. 17.1), en eso consistía la perfección y esta obediencia incluía por supuesto, lo que ya conocía Noé sobre los animales que Dios designó como limpios o inmundos y de los que le había permitido alimentarse. En este tiempo, todavía no existía algo llamado el pueblo de Israel y había seguidores del Señor en varias naciones, personas que le obedecían (Lea Gn. 14:18-20) y conocían esta y otras leyes (como el diezmo).

En qué consiste esta ley

La ley de la alimentación no está concentrada en un sólo lugar en la biblia, pues que se conocía desde tiempos muy antiguos, antes de que se formara el pueblo de Israel, así que se mencionarán los aspectos esenciales que incluye.

El profeta Isaías, hablando del tiempo de la iglesia (Lea: Is. 66:16-23), menciona que juzgará con fuego a todos los que desobedezcan la ley de Dios (incluye aquí la ley de la alimentación, menciona a los que comen cerdo y ratón, por ejemplo); pues es necesario observar todas las leyes del pacto para formar parte del pueblo de Dios (Lea: Is. 56.6-7). La ley dada a Israel permaneció en la vida de esa nación escogida durante más de mil 400 años antes de que el Hijo de Dios se hiciera humano y naciera de una mujer judía. El Señor Jesús, como parte del pueblo judío obedeció esa ley de la alimentación (Lea: Lc. 2.52) a los ojos incluso de los maestros del pueblo de Israel.

El Señor Jesús no enseñó algo contrario a la ley de la alimentación, de otra manera, el apóstol Pedro hubiera tenido muy clara, desde el primer momento, la instrucción de la visión del lienzo con animales de todo tipo (Lea: Hch. 10:9-14) y no hubiera contestado como lo hizo: “...Señor, no; porque ninguna cosa común o inmunda he comido jamás...” Algunas personas toman la cita de Mateo 15.11 como un soporte para afirmar que el Señor Jesús habría “abolido” la ley de la alimentación; sin embargo, al leer todo el contexto anterior, entendemos que toda la situación se refiere a un problema de cumplimiento de la costumbre de limpieza de las manos antes de comer (Lea: Mt. 15:2), por lo que el Señor, al pronunciar lo que está descrito en el versículo 11, lo hace con relación a lo que contamina profundamente al humano no es lo sucio de las manos (Lea: Mt. 15:20), sino lo que está en los pensamientos y sentimientos.

El apóstol Pablo tampoco recibió instrucción del Señor referente a que los alimentos para los gentiles no deberían cumplir la ley de la alimentación (Lea: 1 Tim. 4:3- 5), por el contrario, en la carta a Timoteo enseña que los alimentos son limpios por dos causas:

a) por la palabra de Dios y

b) por la oración.

De tal manera que no basta con orar para que un alimento sea limpio, sino que debe cumplir con los requisitos de la palabra de Dios, que se ha conocido desde antes del diluvio, los patriarcas y el pueblo de Israel, para que el pueblo de Dios sea santo, cumpliendo con lo señalado en Is. 56: 6-7.

Los descendientes de Israel, los gentiles, y cualquier otra persona que decida adherirse al pacto (Lea: Is. 56:6-7) tienen esta ley de alimentación:

• Comer frutos, plantas verdes y legumbres (Génesis 1.29 y 9.3)

• No comer sangre (Génesis 9.4; Levítico 7.26; 17.10-14) . Parte de este mandamiento incluye no comer animales ya muertos (por causas distintas a la acción intencional humana para su consumo), ni despedazados por fiera (Deuteronomio 14.21; Levítico 17.15-16), Página 3 de 7 pues por la causa de muerte no fueron desangrados.

• No comer grasa de la que se quemaba en el sacrificio (Levítico 3.14-17; 7.23-25).

• El mandamiento dice no cocer el cabrito en la leche de su madre (Lea: Ex. 34:26 y Dt. 14.21), lo cual es un mandato directo y no es factible lograr una relación con la idea judía de no mezclar lácteos con carne (Lea: Gn. 18.1, 7-8).

• Podemos comer de los animales según los grupos siguientes:

A. Animales que caminan sobre la tierra.

Solamente se pueden comer los animales que tienen pezuñas divididas y que además rumian sus alimentos (Lea: Lv 11.3-4 y Dt. 14:4-6).

Aquí el Señor nos da, además de la característica que identifica a los animales que podemos comer, una lista de ejemplos.

En este sentido las características incluyen a las vacas, toros, ovejas, cabras, jirafas, ciervos, entre otros. El Señor también hace la aclaración de que las dos características (pezuña dividida y que rumien) deben estar presentes a la vez, por lo que comemos cerdo, aunque tiene pezuña dividida no rumia, o el conejo, que rumia, pero no tiene pezuña dividida.

Tampoco se deben comer los animales que anden sobre sus garras (Lea: Lv. 11:27) . Esta ley indica que no se deben comer animales que se mueven o arrastran sobre la tierra (Lea: Lv. 11:29-30), por ejemplo: "comadreja, ratón, lagartos... musaraña, salamandra, topo, y camaleón"; tampoco se debe comer ningún tipo de reptil (Lea: Lv. 11.41).

Tampoco debemos comer insectos de cualquier tipo (se marca una excepción con los langostinos), tejón, armadillo, tlacuache, o cualquier reptiles.

B. Animales que viven en el agua.

En estos animales la ley de la alimentación indica que sólo se pueden comer los que tienen escamas y además aleta para nadar (Lea: Lv. 11:10-12).

En este grupo podemos encontrar las carpas, algunos tipos de atún, sardina, salmón, merluza, huachinango, pargo, etc. Pero no incluye ningún marisco (camarones, ostiones, callos de hacha, pulpos, langostas marinas, cangrejos, etc.) o pescado liso que no tienen escamas y los evitamos.

Algo importante a meditar es que la lay fue dada para el uso de todo el pueblo, no sólo para los sabios o científicos, por lo que debemos considerar que si a simple vista no se ven estas características, por lo que no lo consumimos, pues alguien más podría vernos y entonces ser movido a pecar.

C. Animales que vuelan.

Para las aves, sólo da una lista de aves que son comunes de aquella región y que no se deben comer: águila, quebrantahuesos, buitre, milano, cuervo, avestruz, lechuza, gaviota, halcón, búho, somormujo, ibis, cisne, pelícano, buitre, cigüeña, garza, abubilla y murciélago (Lea: Lv. 11:13-19 y Dt 14:11-18 y 20). Por ello no consumimos esas aves listadas y tener cuidado con la frase del texto “...según su especie...”, pues indica que, según el entendimiento de ese tiempo, algunos animales similares estarían incluidos en la lista.

Una particularidad con el pato, es que no está listado, por lo que podría pensarse que sí se puede consumir, aunque as reglas kosher de los judíos indican que si el pato es criado en granja, sí se puede comer, pero si es silvestre no (algo de lo más extraño); nosotros, (la Iglesia de Dios) el pato no se consume.

Indubeo es un concepto usado en las áreas de lo legal para indicar que “Algo es mejor, en virtud del desconocimiento de algo…” Por ejemplo: En un crimen donde no se puede comprobar la culpabilidad de un sospechoso, no se debe proceder, pues “Es mejor tener a un culpable libre, que a un inocente preso” y para este tipo de situaciones podría agregar confusión, pero tomando el pensamiento del apóstol Pablo, si comemos pato no somos más, ni menos si no lo consumimos, así que si eso puede poner en riesgo la fe de alguno, mejor no comamos pato nunca (Lea: Ro. 14.21).

D. Insectos

No se deben comer los insectos, a excepción de aquellos que tienen alas para volar, cuatro patas para caminar y un par de piernas para saltar (Lea: Lv. 11:20-23). Además señala los que cumplen con estos requisitos: Langostas, grillos, saltamontes.

Recordemos que no debemos comer hormigas, jumiles u otros insectos que las personas que no obedecen a Dios sí las comen, esta ley incluye aquí el mandato de no comer ningún animal que se arrastre sobre su pecho o sobre cuatro o más patas (Lea: Lv. 11:42).

Modernidad y la alimentación

En la actualidad, con la necesidad de las industrias de ganar dinero y de producir suficientes “alimentos” para que todo mundo los pueda comprar a precios accesibles, las empresas utilizan diferentes métodos para asegurarse sus ingresos económicos. (Abiertamente hablamos de empresas como Monsanto, la cual ha ido sustituyendo la naturaleza orgánica de los alimentos, robando tierras mediante el endeudamiento de campesinos), Parte de estos métodos sin escrúpulos de las empresas, incluye hacer que los productos que venden sean atractivos en sabor y en color,

En algunos lugares del país, ya se comercializa la carne de avestruz y la de conejo (que ambas están prohibidas por la ley de la alimentación que se ha revisado) como alternativas por el precio de las otras carnes. Conchas. En otros casos, la elaboración de la costra dulce de la concha podría realizarse con manteca de cerdo, tal fue el caso de las conchas Tía Rosa de hace 20 años. Aunque puede cambiar, es necesario revisar o consultar.

Para mejorar el color de algunas carnes, jugos, aguas y otros productos, muchas empresas agregan colorantes “naturales”. Uno de los más utilizados es el llamado “carmín” (otros nombres de este mismo colorante son E-120, Rojo4 y ácido carmínico), que es extracto de cochinilla, un insecto que no se debe comer,

Otro aditivo que se utiliza mucho para hacer que los productos líquidos parezcan más espesos (como en los yogures, cremas y hasta la leche), es la grenetina, que existe en varios tipos: la más barata es la de cerdo; hay otra que es de pescado (aunque esta es muy rara y difícil de conseguir); también las hay vegetales (carragenina, algunas gomas) y claro, la hay de res, muy fuerte y la más cara; algunos en lugar de grenetina utilizan la pectina que se extrae de algunas frutas como naranjas (en muchas mermeladas y preparados de frutas), por lo que no debemos comer las gelatinas, pues la mayoría de las ocasiones se hacen con derivados de cerdo, porque es la más barata.

Un aspecto difícil de los productos modernos que se venden en las tiendas es que las empresas buscan reducir costos, por lo que es nuestra obligación revisar lo que compramos leyendo y asegurándonos de que los ingredientes son aptos de acuerdo con la ley de la alimentación o, más fácil, consumiendo menos productos procesados y más de los hechos en casa.

Conclusiones

Esta ley de la alimentación ha estado vigente desde siempre, como vemos con Noé y ha permanecido hasta nuestros días. Toda aquella persona que quiere ser parte del pueblo de Dios, junto con toda la ley de Dios, también obedece la ley de la alimentación. Las reglas para la alimentación son claras y, cuando las usamos constantemente, nos permiten una vida consciente de obediencia a Dios. En la vida moderna, si queremos utilizar productos procesados para nuestra alimentación, es nuestra responsabilidad revisar los ingredientes y asegurarnos que son adecuados para que cumplamos con la ley de Dios. Es recomendable reducir el consumo de productos procesados y utilizar más los hechos en casa, así nos aseguramos de lo que contienen y podemos obedecer más fácilmente la ley de la alimentación.

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¿Porqué la Iglesia de Dios sigue LOS 10 Mandamientos?

Introducción

Código de conducta (conjunto de normativas que rigen a un grupo de personas que tienen propósitos a fines al organizarse como sociedad, y que busca definir moral y éticamente sus conductas.)

Código de conducta

Por código de conducta, nos referimos a las normas que nos rigen, y estas no las imponemos de forma arbitraria, sino que están definidas y sustentadas alrededor de lo que Dios nos comparte y emite a través de su Pueblo, a quienes reconocemos, conocen las reglas emitidas por Dios.

Estas leyes, como las leyes y mandamientos dados a Israel, no son producto de la mente humana, su origen está en la mente de Dios, por lo tanto, son mandamientos santos (Lea: Jn 14: 10-11 y 17: 6-8). no son cambiantes, perecederos o se amoldables a intereses humanos; son de carácter permanente, pues vienen de Dios (Lea: 1 Ped. 1:23-25).

El Código que rige la conducta del creyente en Cristo resume la moral de Dios, mostrando lo que a Él le agrada y lo que le desagrada (Lea: Jer. 6:19 y Jn 14:15)

Cuando la descendencia de Jacob fue sacada de Egipto, claramente el Señor les dice que su propósito es que le sirvan, que ellos serán su pueblo, un pueblo especial (su especial tesoro), son la primera instrucción que Dios les da a su pueblo tras ser invitados de forma amorosa por Dios mediante Moisés(Lea: Ex. 6: 6-7 y 19: 5-8.) por lo cual le da leyes y mandamientos (Lea: Dt. 4: 5-9 y 7: 6 y 11), para ser libres de toda corrupción pagana y superficial arraigada de Egipto, aún antes de definir el resto de su identidad y cultura como nación, incluso antes de la circuncisión; por ende, no significa que sean solo para el pueblo judío (como todas las leyes y derechos a los que estuvieron sujetos e invitados con la circuncisión), sino para cualquiera que quisiera ser Hijo de Dios, (“Si ustedes me aman, cumplirán mis mandamientos” Lea: Jn. 14:15), por ello es fundamental entenderlos como parte de la doctrina de la Iglesia de Dios, y del porque no los cumplimos meramente como solo un compromiso, sino una sujeción confianza y alegría espiritual.

Igualmente, la Iglesia de Dios como el pueblo de Israel fue apartada para ser un especial tesoro, un pueblo santo y perteneciente a la familia de Dios. (Lea 1 Ped. 2: 9-10, Ef. 2:10), por esto, también la Iglesia de Dios recibe mandamiento y leyes para llevar una vida de santidad, justica, obediencia y amor al Padre Eterno (Lea Mt. 19: 16-17, Jn 14: 15 y 21, 15:10 y 1 Jn 2:3-4 y 5: 2-3).

Los Diez Mandamientos Como punto de Fe

Creemos que los Diez Mandamientos de la ley moral de Dios constituyen la norma de conducta para todos los hombres; y que estos mandamientos fueron dados por Dios para ser observados por su pueblo desde el momento en que fueron proclamados y por toda la eternidad; (ya que fue dada al pueblo de Israel como primer condición para aceptar todo lo que se venía con la ley ritual y otros aspectos de lo que Jesús enclavó en la cruz Lea todo Ex: 19)

Que ninguno de estos mandamientos ha sido cambiado o revocado, y que todos tienen vigencia totalmente pues Dios no cambia (Lea: Mal. 3:6, Num. 23:19, St 1:17, Is 46:10, el cual es muy contundente y Tit. 1:2), sin embargo sus leyes y tiempos para algo, pueden caducar y esto de acuerdo siempre a sus planes divinos, como cuando se termino el tiempo de los ritos. Lea: Heb. 9:10 y Col 2:14-17).

Que fueron escritos por el dedo de Dios en tablas de piedra: Lea. Dt 9:10, dados por Dios en una lista descriptivamente. (Lea: Ex. 20:3-17). y que Cristo no destruyó esta Ley. (Lea: Mt 5:17 yJn 14: 15-31).

Para obtener la vida eterna, el hombre debe guardar estos mandamientos. Lea: Mt. 19:16-22. pues estos permanecerán para nosotros los hombres. (Lea: Mt. 5:18. y es por estos mandamientos se llega al reconocimiento del pecado. Lea: 1 Jn. 3:4; Rom. 3:20).

El reconocer y alabar a Dios, nos acerca a su presencia, Hch 16:31 dice: “Cree en Jesucristo y serás salvo tu y toda tu casa”, aunque también esta dicho “Los demonios también creen y tiemblan” (Lea St. 2:19), así que no basta con reconocerte, sino con cumplir la ley (Lea: Mt. 7:21)

Que solo el enemigo es quien está en franca contra de la ley de Dios y por eso ha tratado de cambiarla junto con los tiempos que Él determina (Lea Dn. 7:25), y por eso, el mundo tratará de hacernos desistir de guardar correctamente estos mandamientos, existiendo muchos argumentos que traten de invalidarlos, sin embargo, aún a ojos de la escritura, quien se ostente Cristiano, debe comprender y saber responder a quienes cuestionen este tema.

Estos mandamientos determinan entonces lo que es bueno, sano, útil y lo que es pecaminoso, sin sentido y vacío; muestran al hombre que debe sujeción y honra a sus padres terrenales como la primera autoridad, le enseñan que es la idolatría, también le dicen que hay un día especial para guardar y es el sábado semanal, determinan también el orden en la relación matrimonial, al prohibir el adulterio; enseña el amor al prójimo al prohibir estrictamente el hurto, el asesinato, el falso testimonio, la codicia y deseos superficiales.

A este Código de conducta se le conoce como “Los Diez Mandamientos”

A los 10 Mandamientos los vemos plenamente descritos en el Nuevo Testamento:

La razón del porqué los recitamos al inicio de cada uno de nuestros días de reposo, la vemos en Dt. 6:6-9 y Fil 3:6, sin embargo, no los recitamos como si se tratara de un mantra repetitivo, pues el hacerlo ya sea teniendo falta de fe, dudando en si es correcto guardarlos, estando en falta con Dios o nuestro hermano, es tanto como ofrecer un incienso extraño y como veremos más adelante, tomar indignamente la Cena del Señor.

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La Biblia (Como punto de fe)

La Biblia.

Biblia viene de la palabra Biblos, que en latín quiere decir: “Libros”, y se escribió en hebreo, arameo y griego koiné, (distinguido por ser simple y común, es decir, que no es el griego avanzado y empleado por los filósofos y maestros griegos de la época)

Creemos que el Antiguo y Nuevo Testamento constituyen el único libro inspirado por el Espíritu Santo; que contiene la palabra infalible y expresa la voluntad de Dios y es la única guía de fe y práctica que nos proporciona Dios, y que esta es la palabra que “los santos hombres” hablaron siendo inspirados del Espíritu Santo. Lea 2 Pe. 1:19-21; 2 Tim. 3:16. y debemos comprender que es la única palabra que contiene la verdad. lea Jn. 17:17. por lo que no recurrimos a tradiciones, palabras o filosofías de otros hombres lea Col. 2:8

Nuestra convicción, nos lleva a creer también que es la palabra eterna y esta permanece para siempre. 1 Cr. 16:15; Mt. 24:35; 1 Pe. 1:23.

Que no necesita añadirle ningún concepto humano. Pr. 30:6. y que es muy grave quitar o añadir algo de este libro, Ap. 22:18, 19. pues contiene todo para que el hombre de Dios sea perfecto. 2 Tim. 3:17.

Cómo leer la Biblia

Dentro de los aspectos prácticos que debemos llevar a cabo, es que en medida de lo posible, nos preparemos en oración antes de la lectura de la palabra, que sea en un lugar propicio, respetuoso y donde se pueda guardar el orden y respeto al instante de su lectura, de preferencia siempre contando con una libreta y algo para anotar extractos y comentarios que nos sean relevantes para su posterior revisión.

Decimos que esto sea en medida de lo posible pues estamos conscientes que la lectura de la biblia, nos puede sorprender en cualquier contexto, ya sea que leamos que alguien afirma algo incorrecto y debamos consultar la forma a corregir, o que alguna persona de otro grupo nos de la oportunidad de evangelizarlo mediante sus intenciones de predicarnos un evangelio extraño, incluso cuando queramos citar algún versículo a los oídos del prójimo que necesite escuchar la sabiduría de sus páginas.

Utilidad y Práctica de la lectura de la Escritura.

El conocer la naturaleza de la santidad de este libro, nos hace tener respeto a lo ahí escrito, a la forma en la que a través de los tiempos se ha empleado y leído, por lo que nuestro celo nos tiene que llevar a ser metódicos en la forma en la que leemos la escritura.

Los siguientes consejos, son solo algunas de las formas en las que es adecuada y práctica, la lectura de la Biblia.

- La primera es una que ofrecen algunas de las ediciones de la misma Biblia, que es el plan de leerla durante un año, aunado a esto, se puede hacer uso de una libreta donde se hagan anotaciones, que van desde un breve resumen, hasta comprensiones que deseemos resaltar de la lectura, estas pueden incluir dudas que además de ponerse en oración, se comparten con el ministerio en búsqueda de una respuesta pensada (lea Ec 4:9-12, el cual también aplica en relaciones generales). Este plan puede llevarse a cabo de manera individual ya que el seguimiento puede llevarse a cabo en cualquier lugar en el que alguien desee sacar provecho, sin embargo también se recomienda que se haga en familia con los padres e hijos, o en pareja cuando se vive una vida matrimonial.

- Es posible anotar los aspectos más relevantes de las predicaciones que nos alimentan espiritualmente en la congregación y leerlas en casa, meditar en ellas, verificar sus acotaciones (más comúnmente conocidas como concordancias) cuando la edición de la biblia lo permite, para así dar repaso y revisión a lo predicado, si en este ejercicio surgiera una duda o de algo se requiriera una aclaración, esta debe ser puesta en oración para que sea aclarada por el don del Espíritu Santo al que aspiramos tener cuando comprobemos nuestro compromiso mediante el bautizo, posteriormente debe ser comentado con el ministerio.

- Una forma grupal de llevar a cabo la lectura, es en ejercicios que enriquecen nuestra elocuencia, dicción, oratoria y agilidad en la lectura, es aprovechar lo más posible los momentos de fraternidad cuando nos encontremos en la congregación, para charlar sobre temas relevantes de la escritura, ya sea mediante la organización de grupos por edad en la congregación, o momentos de recreación. Ejemplo: Turnándose lecturas, preparando una participación especial en los testimonios del programa, o en la elaboración de un tema que pueda ser expuesto en virtud de una necesidad local.

- La adquisición de un volumen que invite a la lectura avanzada, nos permite tener una mejor claridad de la biblia, pues muchas ediciones tienen la ventaja de agregar una concordancia, apartado que funciona para de auto referencia en las escrituras, para corroborar o comparar textos o mensajes y así poder investigar lineas por tema, ya que nuestra inquietud nos debe llevar a viajar entre versículos, de forma que tenga sentido una narrativa.

- Para una lectura avanzada, se recomienda que más que buscarse traducción específica, se busque una edición impresa Interlineal, donde vengan comparados los textos en hebreo/griego y un renglón en español y así tener certeza de los conceptos que son puntualmente usados.

Ejemplos Bíblicos

En el relato de Jos. 8:30-35, vemos que Josué edificó un altar de piedras enteras a Dios en el monte Ebal, de acuerdo a lo dicho por Moisés, y ofrecieron sobre él holocaustos a Jehová, También escribió allí sobre las piedras una copia de la ley de Moisés, la cual escribió delante de los hijos de Israel, entre otras cosas, cuenta que leyó todas las palabras de la ley, y no hubo nada sin decirse a las mujeres, de los niños y de los extranjeros que moraban entre ellos, por lo que vemos que al leerse en la congregación, esta debe ser atendida por todos, con sumo respeto y que no se lee en cualquier lugar, que este debe ser propicio y consagrado a Dios.

Dt 17:19 Nos dice que debemos hacerlo diario y siempre (Lea: Ap. 1:3)

También vemos que cuando no se está predicando, puede ser leída en momentos de cotidianidad, en los cuales aprovechemos un viaje, un transporte, y si bien, muchos hermanos no se sientes cómodos leyendo la biblia en un transporte donde las mundanalidades abundan, tampoco nos es prohibido hacerlo en el transporte: (Lea. Hch 2:26-40 Felipe y el etipe.), aunque de acuerdo a este relato, lo preferible es escuchar el evangelio, primero de quien ya lo conoce y comprende. (Lea: Rom. 10:17)

Lc. 4: 16-30 Nos habla de la costumbre que también tenía Jesús al leer en la sinagoga y el hecho de ver como maneja la profecía y como deslumbraba a los sabios cuando era jóven (Lc 2: 46-47), nos hace ver que era un lector asiduo a la enseñanza.

¿Cuál es el propósito de leer la biblia?

En ella podemos hallar consuelo, sabiduría, conocer el futuro, conocer las formas en las que nos comunicamos con Dios y con nuestro prójimo, podemos entender de cultura e historia del pueblo que más testimonio puede dar de las proezas del Creador, y prevenirnos de las ignorancias y falacias que este mundo nos trae por medio de falsos profetas e ídolos, (Recordemos que nuestro Señor Jesucristo con la misma palabra le responde al enemigo. Lea Mt. 4:7) por lo que los instantes en los que la leemos y sacamos provecho de ella, son incontables, sin embargo aún para lo más simple, se requiere de ciertas condiciones que propicien su correcta lectura.

Incluso Is. 58:14 y Sal 119:15 nos habla del gozo que debemos tener al meditar en su palabra.

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¿Qué es la "Iglesia de Dios"? P IV

Permanencia de la Iglesia de Dios

Una de las cualidades de la Iglesia verdadera es que nunca dejaría de existir, que la muerte no tendría potestad sobre ella, aun en medio de amenazas, persecución, ataques del enemigo, siempre prevalecería. Cuando el Señor Jesús les preguntó a sus discípulos:

“- ¿Quién dicen los hombres que es el Hijo del Hombre?”,

ellos respondieron que:

“- Juan el Bautista, Elías, Jeremías o alguno de los profetas a lo que el Señor. Respondiendo Simón Pedro, dijo: Tú eres el Cristo, el Hijo del Dios viviente. Entonces le respondió Jesús: Bienaventurado eres, Simón, hijo de Jonás, porque no te lo reveló carne ni sangre, sino mi Padre que está en los cielos. Y yo también te digo, que tú eres Pedro, y sobre esta roca edificaré mi iglesia; y las puertas del Hades no prevalecerán contra ella. Y a ti te daré las llaves del reino de los cielos; y todo lo que atares en la tierra será atado en los cielos; y todo lo que desatares en la tierra será desatado en los cielos.”: En esta declaración el Señor dice claramente “las puertas del Hades no prevalecerán contra ella”, esto quiere decir que la muerte no va a terminar con la Iglesia, es decir, fue instituida por Cristo y permanecerá hasta que el Señor Jesús venga por segunda vez (Lea Mt. 16:18 y Ef. 5: 25-27)

La Doctrina de la Iglesia de Dios.

“Porque primeramente os he enseñado lo que asimismo recibí: Que Cristo murió por nuestros pecados, conforme a las Escrituras; y que fue sepultado, y que resucitó al tercer día, conforme a las Escrituras;” 1ra a Cor. 15: 3 - 4.

La doctrina que recibieron los discípulos del Señor fue dada por medio de los profetas al Pueblo de Israel y posteriormente por el Señor Jesús, doctrina que venia del Padre.

(Hebreos: 1: 1 – 2 y Juan 14: 24),

Cuando se llega el tiempo en que el Señor Jesús fuera entregado, crucificado y muerto, eleva una oración y en ella dice: “He manifestado tu nombre a los hombres que del mundo me diste; tuyos eran, y me los diste, y han guardado tu palabra. Ahora han conocido que todas las cosas que me has dado, proceden de ti; porque las palabras que me diste, les he dado; y ellos las recibieron, y han conocido verdaderamente que salí de ti, y han creído que tú me enviaste… Yo les he dado tu palabra; y el mundo los aborreció, porque no son del mundo, como tampoco yo soy del mundo… Santifícalos en tu verdad; tu palabra es verdad Mas no ruego solamente por éstos, sino también por los que han de creer en mí por la palabra de ellos,” (Juan17.6-8).

En la carrera que en la vida tenemos para ser buenos Hijos de Dios y cristianos (no conforme a un criterio desvirtuado, basado en autoritarismo de tradiciones impuestas por quienes se han atrevido a perseguir al prójimo, apropiarse de sus posesiones y corromperse en Nombre de Dios), es importante conocer el camino y no desviarse, (“Entrad por la puerta estrecha: porque ancha es la puerta, y espacioso el camino que lleva á perdición, y muchos son los que entran por ella, Porque estrecha es la puerta, y angosto el camino que lleva á la vida, y pocos son los que la hallan, Y guardaos de los falsos profetas, que vienen á vosotros con vestidos de ovejas, más de dentro son lobos rapaces” Mateo 7: 13-14). Conocer, e identificar las repercusiones positivas, pero también las implicaciones que nos causaran esfuerzo, para ello es fundamental desear conocer la doctrina, comprenderla, analizarla, vivirla y difundirla, ya que es nuestro deber.

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¿Qué es la "Iglesia de Dios"? P II

Características de la verdadera Iglesia

Como ya vimos la Iglesia tiene su origen en Dios y por ello su naturaleza es celestial y divina; por ello, para identificarla entre los grupos religiosos “cristianos”, la Iglesia tiene cualidades especiales, propias, únicas, particulares y por ellas es posible identificar al grupo que Jesucristo fundó ya que están marcadas en las Escrituras, analicémoslas.

Algo que demuestra la unidad de la verdadera Iglesia, la vemos cuando Jesús oró: “Y por ellos me santifico a mí mismo, para que también ellos seansantificados en la verdad…para que todos sean UNO; como tú, oh Padre, en mí, y yo en ti, que también ellos sean UNO en NOSOTROS;... La gloria que me diste, yo les he dado, para que sean UNO, así como nosotros somos UNO: Yo en ellos, y tú en mí, para que sean perfectos en UNIDAD, para que el mundo conozca que tú me enviaste, y que los has amado a ellos como también a mí me has amado”, (Lea: Jn 17: 19, 21-23), por lo que es sumamente importante no buscar ni vulnerarse a desprender la Iglesia.

(Lea: Ef. 2:10) Como todo, la Iglesia tiene un nombre que la distingue de los demás grupos y es “Iglesia de Dios”, la base bíblica que nos instruye esto, es la siguiente lista de pasajes.:

- Hch. 20:28

- 1 Cor. 1:2

- 1 Cor. 10:32

- 1 Cor. 11:16

- 1 Cor. 11:22

- 1 Cor. 15:9

- 2 Cor. 1:1

- Gal. 1:13

- 1 Tes. 2:14

- 2 Tes. 1:4

- 1 Tim. 3:5

- 1 Tim. 3:15

La bendición que Dios nos da cuando nos acepta en su pueblo y nos perdona de nuestros pecados de ignorancia (es decir, aquellas faltas que tenemos sin estar conscientes de haberlas cometido o saber si son pecado Lea: 1 Tim 1:13) es llamarnos como aquellos que fueron los primeros hombres en la tierra, en invocar su nombre “Hijos de Dios” y es confirmado en Jn 1:12 y 1 Jn 3:1, cada uno de los convertidos al Señor recibimos esta potestad y distinción; por lo tanto, al conjunto de llamados, (su ekklesia,) le llama de su nombre, del nombre de Dios, individualmente nos llamamos “HIJOS de Dios” y colectivamente “IGLESIA de Dios”.

Cuando el Señor predice la restauración de Israel, da a conocer que recibirá un nombre nuevo (“Entonces verán las gentes tu justicia, y todos los reyes tu gloria; y te será puesto un nombre nuevo, que la boca de Jehová nombrará.” Is. 62:2) esto se refiere a la gloria que se manifestaría su pueblo a través de aquel que nacería de entre ellos mismos, (Lea: Dt: 18:18 y Jn 7:42) cuya justicia y esplendor se daría a conocer a todos los pueblos, y junto con él, la formación de un nuevo pueblo con nuevo nombre (“Iglesia de Dios”), grupo nacido en el pueblo de Israel, de linaje judío, ese pueblo al que el Señor le llamó hijo primogénito (Lea: Ex. 4:22 y Rom. 9:4 y 11:17-24)

Además de este nombre (ya que vimos que no solo se trata de adoptar o registrarse con él, pues hay otras características que distinguen al pueblo verdadero, hay que abrazar la Doctrina correcta.

¿Qué es la "Iglesia de Dios"? PIII

Jesucristo, el fundamento de La Iglesia de Dios.

Palabra clave:

Piedra Angular: (piedra angular o piedra base (del griego: Άκρογωνιεîς y latín: Primarii Lapidis) …la primera piedra en la construcción de una cimentación (albañilería), importante, ya que todas las otras piedras se establecerán con referencia en esta piedra, y que determina la posición de toda la estructura.)

(Lea: Is. 28:16) Las llamadas Iglesias Cristianas y aun los grupos no cristianos pero reconocidos como religiones, tienen como fundamento a un humano y el sostén de dichas agrupaciones se fundamenta en ideas de ese hombre fundador o líder moral; sus doctrinas emanan de esa mente humana. Es por eso que cuando ese líder muere se extingue el grupo o los sucesores tiene que hacer innovaciones para seguir adelante.

La tradición Católica Apostólica y Romana argumenta que el Señor Jesucristo deja como fundamento y cabeza de dicha Iglesia al apóstol Pedro, de esta manera Pedro se convierte en el jerarca de la Iglesia Católica, y cualquiera que le suceda, es la máxima autoridad (presuntamente), y los primeros colectores de esas disciplinas distorsionadas son conocidos como “Los Padres de la tradición” . Definitivamente esto es con base en mentira y no tiene un sustento en la Biblia, no puede ser que un grupo tenga como fundamento a un humano.

Otros grupos divididos de aquel credo (Que más adelante revisaremos brevemente) se han llamado así del nombre de su FUNDADOR o INICIADOR, o del nombre de corrientes con nombres acuñados por voluntad y análisis humano, no bíblico, sin embargo, un grupo que busque predicar la verdad, no debería tener como fundamento a un humano; Por ello, el grupo formado y establecido por el Señor Jesús tiene sus antecedentes y bases en el Pueblo de Israel, que vino a ser la cimentación del edificio (Iglesia de Dios). “Edificados sobre el fundamento de los apóstoles y profetas, siendo la principal piedra del ángulo Jesucristo mismo, en quien todo el edificio, bien coordinado, va creciendo para ser un templo santo en el Señor; en quien vosotros también sois juntamente edificados para morada de Dios en el Espíritu. Efesios 2. 20-22.” Los apóstoles y profetas vienen a formar esa cimentación y sostén de los muros de dicho edificio, siendo la principal piedra de ángulo el Hijo de Dios, Nuestro Señor Jesucristo, en Él descansa todo el peso de ese edificio. (Lea: Ef. 2: 20-22, 1 Ped. 2: 4-6, 1 Cor, 3:11, Hch. 4:11. a los Corintios 3. 11; Ef. 4:15 y 5:23 Y Col. 1:18).

La Iglesia de Dios no puede tener como fundamento a un hombre, con todo y que esta sea una persona ejemplar; debe tener como fundamento sólido y se estable en el Señor Jesucristo.

Mencionamos algunos grupos protestantes y fundadores y algunos detalles.

Congresionalistas, fue originada por Roberto Brown, en Holanda, el 1582. inicios de la práctica “evangelista” (No confundir con el “evangelismo” como práctica de predicar el evangelio, sino como una corriente acuñada) que consiste en establecer congregaciones que no se sujeten a una misma doctrina, sino que cada una es independiente.

Anabaptistas, fue fundada por los “Hermanos de Schwarzenau” en Alemania el siglo XVI,

Iglesias Bautistas, fue fundada por John Smith, quien la comenzó en Amsterdam en 1606,

(Estos dos grupos, históricamente no comparten raíces, y el nombre resulta ser una simple coincidencia, aunque sus principales ideas están relacionadas al bautismo del Espíritu Santo trino)

Iglesia Reformista, reconoce a Michael Jones como fundador de su Iglesia, se originó en Nueva York en 1628.

Iglesia Metodista, este grupo comenzó por medio de John y Charles Wesley en Inglaterra en 1739.

Unitarios, Teófilo Lindley fundó su Iglesia en Londres en 1774.

Mormones (Iglesia de Jesucristo de los Santos de los últimos días), su fundador fue Joseph Smith en 1829), el cual adhiere un nuevo paquete de escritos fundamentados en la idea de que Cristo visitó en cuerpo el continente americano antes de ser descubierto por los europeos, e instruyó a nativos.

Iglesia Adventista, debe reconocer a G. Miller como fundador de su secta en 1831, y quede ella se separó en 1845 el grupo de los Adventistas del Séptimo Día, formado por José Bates, Santiago White y Elena G. White.

Iglesia De Dios Séptimo Día AR., Es una organización que se desprende de la Iglesia de Dios al hallarse más identificados con la historia Millerista y los días en los que la Iglesia de Dios anduvo con sabatarios que más tarde derivarían en adventistas, y que se asumen como protestantes, el pionero (más no fundador) de la organización que más tarde derivaría en sincretismos con corrientes pentecostales, fue Calvin Burrel (sucesor del ministro Robert Coulter) y fue el responsable de autorizar las “reformas” que habrían de corromper al segmento que se fue separando de la Iglesia de Dios desde mediados de los 70’s a mediados de los 80’s

Ejército de Salvación, su secta comenzó en Londres, con Guillermo Booth, en 1865.

Testigos de Jehová, esta secta fue fundada por Carlos Taze Russell (ex millerista que no llegó al adventismo) en 1879, y modificada por su discípulo Rutherford en 1918.

Iglesia Pentecostal o Asambleas de Dios, estas iglesias cristianas (afrodescendientes en su mayoría) comenzaron alrededor de 1910 en HotSprings, Arkansas. Aunque su doctrina data de fines del siglo XIX como movimiento de avivamiento espiritual y que da a luz a liturgias “carismáticas” caracterizadas por alabanzas que van desde música de géneros modernos, hasta manifestaciones hiperactivas e histriónicas de la congregación, quienes dicen hablar en lenguas (algunos sostienen que son celestiales, otros terrenales) y dejarse llevar por una adrenalina irreverente. De esta corriente se han desprendido grupos trinos y dominicales que se registran como “Iglesia de Dios” sin negar la raíz pentecostal

Luz del Mundo, fue fundada por Aarón Joaquín en el año 1926, el adoptó varios credos a lo largo de los años incluyendo los que un día recibió de la “Iglesia de Dios” que conoció en México durante juventud, sus hijos han continuado 2 ramas más, pues se han separado.

Iglesia Católica Apostólica y Romana, por el Emperador Constantino en el año 325, con el credo niceno, el cual termina de adoptar a la tradición escrita en la “Didaché” para imponerla bajo pena de persecución.

Mesianismo Ben Israel Jakob (Siglo XIX Inglaterra), Sectas sionistas que Exponen sincretismos con tradiciones netamente judías desde una relativa aceptación de Cristo, promovidos por la idea de ser descendientes directos de una de las 12 tribus de Israel y el supremacismo racial. Muchas de ellas manejan traducciones propias, que han sido “ dadas a sus profetas”.

Samaritanismo Reformado Ben Muy próximos a Mesianismo, pues buscan vivir de manera restaurada todas las tradiciones hebreas antiguas, ubicándolas como “el seguimiento correcto” pues asumen que el pueblo Samaritano fue el que portó el verdadero seguimiento de la promesa de Abraham, llegando a afirmar que Jesucristo no es Hijo de Dios, sin embargo no niegan su existencia, afirmando que fue un hombre sabio, profeta de Dios y Samaritano, La Iglesia de Dios corre riesgo con este grupo pues recoge ideas que no nos parecen mal como el guardar el séptimo día, la ley de la alimentación, los horarios (de tarde a tarde) y el saludo de paz, entre otras cosas, sin embargo, nacen a raíz de una teología (que es práctica filosófica católico-grecorromana),(dicho por ellos mismos y acostumbran a repasar rezos.

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¿Qué es "La Iglesia de Dios"? PI

AL PREDICADOR:

Es importante que la labor evangelista que desempeñe el ministerio, desde los hermanos o hermanas que ayuden al predicador a visitar a familias o personas en lo individual, (ya sea para hacer llegar la palabra, enseñar el uso de las sagradas escrituras, apoyar en la música, apoyar en la orientación cristiana a los niños, etc) hasta los varones que apoyen en actividades y que busquen ser obreros, diáconos o ministros, tomen en cuenta varios aspectos antes de dar a conocer la doctrina de la Iglesia de Dios a los escuchas

Ya sea que fuese la primera vez que escuchan atentamente a un predicador hablar sobre Cristo, que cuente con respuestas y panoramas claros sobre lo que habrá de hablar, o de alguien que luego de tiempo de escuchar a otros en busca de respuestas, debemos entender que lo que buscamos es convencer de lo que para nosotros, debe ser una realidad innegable, debemos saber ser firmes y sostener argumentos, dar respuestas, y aclarar dudas con personas que pudieran tener escasos estudios o un avanzado entendimiento inclusive en áreas de la ciencia, la tecnología o la teología, por lo que un movimiento o una afirmación en falso, pudieran echar a perder una oportunidad de dar a conocer el llamamiento que Cristo hace al mundo.

Debemos saber que lo que transmitimos, no es solo con palabra, sino nuestras actitudes, lenguaje corporal, vocabulario, etc, (hablamos a los entendidos en la humildad, que deben ser, ante todo, recatados, humildes, de buen ánimo, sin arrogancia en la sapiencia de la palabra o algún otro tema surgido en la conversación evangelista). por lo que es recomendable siempre estar listos y a la orden en cuanto a la presentación que hemos de dar a quienes nos escucharán, debemos evitar caer en extravagancias tanto en nuestra vestimenta, nuestra actitud, nuestras palabras, etc. pues, aunque no esperamos deslumbrar vanidosamente con nuestra apariencia, apelamos a que buscamos propiciar el respeto en la envestidura que nos envuelve como siervos y predicadores del evangelio que decimos portar.

Eclesiastes 9:8 En todo tiempo serán blancos tus vestidos, y nunca faltará ungüento sobre tu cabeza. Vístete siempre con ropas blancas; ponte siempre perfume en la cabeza.

Se aconseja estar vestidos con un atuendo ordenado y limpio, ser elocuentes y hablar con palabras correctas, puntuales y justas (las necesarias, evitar derivar en otros temas y abrumar de información), tener un agradable aliento, ser ordenados al transmitir la palabra (evitar caer en emociones que desborden nuestra actitud, donde regañemos, hagamos sentir culpable, o revivamos momentos de tristeza y nostalgia de forma innecesaria, o en una alegría desmedida elevemos nuestra voz al estilo de los predicadores que buscan impactar espectacularmente) y ser amable al dar la mano a todos los presentes o incluso un abrazo, saber recibir con una sonrisa lo que en la casa a la que vamos nos ofrecen de su entero corazón (por lo que una de las cosas que es importante aclarar desde el inicio, es que no comemos cierta clase de alimentos por convicción religiosa, o inclusive por salud, más adelante habrá tiempo de explicar el porqué de nuestra dieta y así evitar una mala impresión y herir los sentimientos de quienes nos abren la puerta de su casa y corazón. Dicho consejo es simple ya que no es solo para quienes predican, sino quienes deben realizar visitas por diferentes cuestiones.

Proverbios 16:3 dice “Pon todo lo que hagas en manos del Señor, y tus planes tendrán éxito”, por lo que se espera que antes de que el predicador salga de su casa, y cuando inicie su obra, el mensaje a los escuchas y al final de cada mensaje, todo sea puesto en manos de Dios para que resulte en el correcto aprovechamiento del momento, y obtener su guianza en el cultivo de su palabra, incluso si es solo una conversación casual con un conocido en el trabajo, la escuela o el vecindario.

2 Timoteo 2:14 Nos insta a no caer en debates, ya que estos propician que además de malos entendidos, sobresalgan cuestiones carnales de nosotros y quienes nos van a escuchar; por el contrario 1 Corintios 11:16, nos recuerda que hay cosas que simplemente no se cuestionan ni se discuten, y Proverbios 10:19, nos recuerda que: “En las muchas palabras no falta pecado;” por lo que sin querer seríamos piedra de tropiezo para quien insista en permanecer en su necedad, o quien quiera solamente sacarnos de quicio por mero entretenimiento insano. Por ello es que una vez que las cosas se expongan o respondan, no debe haber lugar a debates, aún cuando alguno de quienes nos escuche desee discutir, nosotros debemos optar por lo que dice Proverbios 15:1: “La blanda respuesta quita la ira: Mas la palabra áspera hace subir el furor.” Por lo que es nuestro deber que, ante la necedad de la falta de entendimiento, o incluso ante una posible falta de herramientas de nuestra parte, evitemos que estas perlas valiosas Mateo 7:6 (Que es el mensaje de Dios), sean profanadas, concluyendo de forma educada y lo más amistosamente posible, terminando el tema o incluso la conversación con quien nos escucha, ya que al dar mal testimonio, solo conseguimos que el que nos observa blasfeme el nombre de Dios, Romanos 2:24

Introducción

Hoy somos testigos de la existencia de un sin número de grupos “cristianos” y que asumen tener la correcta y verdadera doctrina o tradición, siendo esta, de un evangelio adulterado; cuyos conceptos, contradicen a la palabra de Dios y romantizan sincretismos que, a la luz de la historia y la biblia, tienen su raíz en prácticas paganas, y aunque buscan bases bíblicas para sostener sus ideas y doctrinas, introducen ideas textos en versiones propias que no vienen de Dios sino de los pensamientos de muchos que (con buenas o malas intenciones), se han extraviado, forzando pasajes o tomando tradiciones de otros que se adjudican autoridad, y por ello muchos preguntan: ¿Quién tiene la verdad?, ¿Quién es Dios?, ¿Cuál es la Iglesia verdadera?; mientras otros afirman: "Todas las religiones nos llevan a Dios", "Cuando Cristo venga, tomará a las mejores personas de cada religión", “Todos somos hijos de Dios”, "Dios debe tener misericordia de nosotros, pues es amor”.

Dios deja claramente explicado en las Sagradas Escrituras, las características de la verdadera doctrina y cómo identificar a su Iglesia, por ello es que se requiere del Espíritu de Dios, y así entonces lograr comprender esto a la luz de la Palabra; a continuación, analizaremos y aprenderemos el nombre del grupo que fundó el Señor Jesús, sus características, sus leyes, su estructura, etc.

1 Origen

Iglesia: “del griego “ἐκκλησία” (transliterado como ekklēsía) en latín

Ecclesia. Usada frecuentemente para traducir el concepto hebreo: “qâhâl” (o kahal, transliteración de קהל), que se refiere a la “congregación” de Israel o pueblo de Dios”.

Religión: “del latín “religió”, formada con el prefijo re- (indica intensidad), el verbo ligare (ligar o amarrar) y el sufijo -ión (subfijo de acción y efecto). “Acción y efecto de ligar fuertemente con Dios”.

Evangelio: (del latín evangelĭum, y este del griego εὐαγγέλιον [euangelion], «buena noticia», propiamente de las palabras εύ, «bien», y -αγγέλιον, «mensaje»)

(Lea: Ef. 5:7), La Iglesia tiene su origen en Dios el Padre pues él mismo constituyó a su Hijo como fundamento de esta. Lea: Jn. 12:50, Mt. 16: 15-18, 1Ped. 2: 4-8, 1 Cor. 3:11 y Ef 2:20

En Atenas la “eklessia” era la asamblea en donde se trataban asuntos políticos. Este término utilizado en el Nuevo Testamento, y se aplicó a todo el conjunto de creyentes que fueron alcanzados por la misericordia de Dios y se convirtieron en su pueblo, por ello es que “Iglesia” quiere decir: “el conjunto de llamados o creyentes.” aunque la gente suele incorrectamente usar la palabra “Iglesia” como sinónimo de la construcción (un edificio).

La Iglesia, es entonces, la Institución establecida por Jesucristo con carácter universal y es El Señor Jesús quien da origen a la misma cuando hace el llamado a sus discípulos y les da instrucción y formación para llevar a cabo la predicación del evangelio, enseñándoles doctrina, estableciendo conceptos y principios morales y espirituales; y esto, los apóstoles lo enseñarían a otros ya que de esta manera cumplirían con la misión que el Padre Eterno les encomendó, y fue establecida de acuerdo a los propósitos de Dios (Lea: 2 Tim. 1: 8-12).

Y es El mismo Señor Jesús quien dijo que tanto sus enseñanzas como el propósito de su venida no eran de Él sino de su Padre. Lea: Jn 6:37, Hch. 10: 7-9, Jn. 3. 17 :8, 14, 18 ,23 y 25), y el llamamiento, también viene del Padre (Jn. 6: 44, y 17: 2) y este llamamiento es santo porque es de Dios, (Lea: 2 Tes. 1: 11-12, 2 Tim. 1:9 y Heb. 3:1), entonces entendemos que la Iglesia es de Dios y es santa, ya que la santidad es un atributo del Padre y también vemos que Dios designo a su Hijo como fundamento y cabeza de su Iglesia (1 Ped. 2: 4, 6 y 7), y por eso afirmamos que la Iglesia que el Señor estableció no fue obra humana, por lo que su nombre, su fundamento, sus objetivos, principios y leyes son totalmente diferentes a las transmitidas por tradiciones de hombres y sus divisiones.

Las características de la Iglesia de Dios son de acuerdo al Plan de Dios y su manifestación permanente en dicho grupo es a través de su espíritu, que es señal de que la Iglesia es de su propiedad. (Lea: Hch. 1: 4-5, Jn. 14: 15-17 y Ef. 1: 13-14).

1.2 Naturaleza de la Iglesia.

(Lea: 2 Jn. 1:10) La Iglesia tiene su origen en el mismo Dios y es el Señor Jesucristo quien la establece bajo los propósitos y lineamientos del Padre, el cual es su autoridad, (Jn. 14:24: dice:“y la palabra que habéis oído no es mía, sino del Padre que me envió”), entonces entendemos que su naturaleza es celestial, no humana y por lo tanto, es única entre todos aquellos grupos que aspiran ocupar su lugar sin practicar la verdadera doctrina o hacerlo de manera correcta; así que, su función, su misión y doctrina son excepcionales, siendo este grupo, una Institución divina, pues se originó en la mente de Dios por su voluntad, y su propósito es agrupar a todos aquellos que oyendo acepten por fe, al Plan de Salvación, siendo reverente a Dios, haciendo su voluntad y arrepintiéndose por medio del bautismo para perdón de pecados.

Uno de los acontecimientos que terminó de asentar a la Iglesia de Dios, la vemos en el momento en el que el Espíritu desciende sobre los que estaban reunidos, como promesa de que habría un consolador que estaría en lugar de nuestro Señor Jesucristo. (Lea: Hch 2: 1-12)

Tomemos en cuenta que no porque alguna asociación religiosa se haga llamar o se registre con el nombre: “iglesia de Dios” ante autoridades locales, significa necesariamente que es la iglesia verdadera, (bastaría con registrarse con ese nombre para ser el verdadero pueblo de Dios, sin embargo, no es así), lo que nos debe identificar además de no olvidar el nombre dado en la escritura es su doctrina, su apego, celo y obediencia a la Palabra de Dios. Ef 3:14 y 15 dice:"Por esta causa doblo mis rodillas al Padre de nuestro Señor Jesucristo, Del cual es nombrada toda la parentela en los cielos y en la tierra.”

[estudiosid]

Los 40 Puntos de Fe de la Iglesia de Dios

1. LA BIBLIA

Creemos que el Antiguo y Nuevo Testamento (comúnmente conocidos como La Santa Biblia) constituyen el único libro inspirado por el Espíritu Santo;

que contiene la palabra infalible y expresa la voluntad de Dios;

que es la única regla de fe y práctica de parte de Dios.

Qué es la palabra que “los santos hombres hablaron siendo inspirados del Espíritu Santo. 2 Pedro 1:19-21; 2 Timoteo 3:16.

Que es la única palabra que contiene la verdad. Juan 17:17.

Que es la palabra eterna, que permanece para siempre. 1 Crónicas 16:15; Mateo 24:35; 1 Pedro 1:23.

Que no necesita añadírsele ningún concepto humano. Proverbios 30:6.

Que hay una sanción para quien añade o quita algo de este libro, Apocalipsis 22:18, 19.

Que contiene todo para que el hombre de Dios sea perfecto. 2 Timoteo 3:17.

2. DIOS, EL CREADOR DE TODAS LAS COSAS

Creemos que la Deidad de todo el universo es Dios el Padre Celestial. Él es el Todopoderoso

Creador y Sustentador de los cielos, la tierra, y todas las cosas.

Que Dios creó los cielos y la tierra, Génesis 1:1; Hechos 14:15.

Que en él nos movemos y somos. Hechos 17:24- 28; Nehemías 9:6; Salmo 124:8; Apocalipsis 14:7.

Que creó los cuerpos celestes y a todos ellos llama por su nombre, Isaías 40:26,28; Isaías 44:24.

Que hizo los cielos, la tierra y todas las cosas que en ellos hay, Hechos 14:15; Hechos 17:24-28; Nehemías 9:6; Salmo 124:8; Apocalipsis 14:7.

3. JESÚS, EL HIJO DE DIOS

Creemos que Jesús es el único Hijo de Dios, engendrado por el Espíritu Santo, nacido de María; que fue un vaso escogido por Dios; que él es el Mesías o Cristo enviado de Dios como nuestro Redentor.

Que es el unigénito de Dios, Juan 3:16; 1 Juan 4:9; 1 Juan 1:18.

Que él da testimonio que vino del Padre, Juan 6:65.

Que los hombres que lo conocieron personalmente lo aceptaron como el Hijo de Dios, Mateo 14:33; Mateo 16:16.

Que, según el testimonio del ángel, éste es llamado “el Hijo del Altísimo”. Lucas 1:26-32.

Que en ninguno otro hay salvación; sólo en él. Hechos 4:12.

Que en el momento de su bautismo Dios dijo: “Este es mi Hijo amado”. Mateo 3:17.

4. EL ESPÍRITU SANTO

Creemos que el Espíritu Santo es una influencia divina que procede del Padre; es el Consolador que Cristo prometió enviar en su lugar al ascender a los cielos; que por medio del Espíritu Santo Cristo mora en nuestros corazones; que por el Espíritu Santo Dios revela la verdad de las Escrituras a los hombres y les da el poder para atestiguar de Cristo.

Que es llamado el Espíritu de verdad y el Consolador, Juan 14:16,17,26.

Que nos guía a la verdad y nos muestra las cosas que están por venir, Juan 16:13.

Que es la influencia que nos da el poder para atestiguar de Cristo, Hechos 1:8. Que el amor de Dios está derramado en nuestros corazones por el Espíritu Santo, Romanos 5:5.

Que el Espíritu Santo morando en nosotros, hace producir los frutos del Espíritu, Gálatas 5:22,23.

Que por el Espíritu Santo que Dios nos ha dado podemos

guardar sus mandamientos, 1 Juan 3:24.

5. LA PREEXISTENCIA DE CRISTO

Creemos que Jesucristo, el Hijo de Dios, estuvo en el plan de Salvación desde antes de la fundación del mundo;

creemos que él fue el Verbo o medio por el cual Dios habló al hombre,

(Juan 1:1,2), y que “Aquel Verbo fue hecho carne” se cumplió exactamente cuando nació del vientre de María.

En el principio era el Verbo, y el Verbo era con Dios. Juan 1:1,2.

Aquel Verbo fue hecho carne, Juan 1:14.

Que fue mucho antes de Abraham, Juan 8:56-58.

Que estuvo con el Padre desde el principio, Juan 17:5.

Que Dios tomó decisiones juntamente con él, Génesis 1:26; 3:22; 11:7.

Que por él fueron hechas todas las cosas, Colosenses 1:16-18.

Que era la piedra de la cual debían los hijos de Dios en los días de Moisés, 1 Corintios 10:4-9.

6. SATANÁS

Creemos que Satanás, es llamado también el diablo o la serpiente antigua (Apocalipsis 12:9), es el adversario de Dios y de su pueblo, el cual será destruido al final.

La serpiente antigua, que es el diablo y Satanás. Apocalipsis 20:2.

Que es el padre de la mentira y engañador desde el principio. Juan 8:44.

Se transfigura en ángel de luz. 2 Corintios 11:14.

Es un adversario del hombre, 1 Pedro 5:7.

Que siembra cizaña en el corazón del hombre. Mateo 13:39.

7. LA CAÍDA DEL HOMBRE

Creemos que Dios hizo al hombre perfecto, sin pecado, pero por la desobediencia se hizo pecador. Esto lo hizo imperfecto, y acarreó la maldición de Dios y la muerte para toda la raza

humana Que Dios creó al hombre a su imagen y semejanza, Génesis 1:26-31.

Que su desobediencia trajo su caída, y su expulsión del huerto del Edén, Génesis 3:8-20.

Que la muerte entró en el mundo por ese hombre (Adán), 1 Corintios 15:21.

Que la muerte es el resultado del pecado y su consecuencia es destrucción. Romanos 3:23; Romanos 5:12.

8. LA REDENCIÓN DEL PECADOR

Creemos que Jesús, como el Cordero que fue inmolado desde el principio del mundo, es el único que puede redimir al hombre pecador, y hacerlo partícipe de la naturaleza divina; que es la única manera de cómo el hombre puede ser libre de la pena de muerte.

Sólo por medio de la sangre de Cristo podemos ser rescatados. 1 Pedro 1:18-20.

Cristo es el único que puede quitar la muerte y sacar a la luz la vida, 2 Timoteo 1:10.

Que no existe ninguna otra ofrenda para poder rescatar al hombre, Hebreos 9:12.

Que Cristo es el único que se dio por rescate de muchos. 1 Timoteo 2:6.

9. EL PLAN DE DIOS PARA LA SALVACIÓN DEL HOMBRE

Creemos que el plan de salvación fue designado por Dios nuestro Padre, como un medio para escapar de la muerte que se pronunció después que Adán y Eva habían pecado; que la clave de este plan divino es su Hijo Jesucristo, al cual envió a la tierra para redimir al hombre de la maldición del pecado. 2 Pedro 3:9; Juan 3:16; Hechos 4:10-12; Romanos 5:11; 1 Pedro 2:24; Hebreos 9:13.

Que para hacer efectivo este plan, el hombre debe tener fe en Dios, Hebreos 11:6. El hombre debe creer y aceptar a Jesús como su Salvador, Juan 14:1.

Debe mostrar arrepentimiento de sus pecados y bautizarse, Hechos 2:38. Debe hacer morir al viejo hombre, Efesios 4:21-25.

Debe permanecer en la fe y en la santidad, 1 Timoteo 2:15; 2 Corintios 5:17.

10. LA SANGRE DE CRISTO

Creemos que por el derramamiento de la sangre de Cristo en el Calvario Dios proveyó una total y plena expiación por el pecado del hombre, 1 Juan 2:1,2; 4:10; Colosenses 1:20.

Que su sangre fue para la remisión de los pecados, Mateo 26:28.

Que por su sangre fuimos justificados de la ira, Romanos 5:6-9.

Que por su sangre hemos ahora recibido la reconciliación, Romanos 5:11

Que su sangre es la propiciación para pagar nuestros pecados pasados. Romanos 3:25. Que la sangre de Cristo nos limpió de todo pecado. 1 Juan 1:7.

11. LOS DIEZ MANDAMIENTOS

Creemos que los Diez Mandamientos de la ley moral de Dios constituyen la norma de conducta para todos los hombres; que estos mandamientos fueron dados por Dios para ser observados por su pueblo desde el momento en que fueron proclamados y por toda la eternidad; que ninguno de estos mandamientos ha sido cambiado o revocado, y que todos tienen vigencia totalmente.

Que fueron escritos por el dedo de Dios en tablas de piedra, Deuteronomio 9:10.

Que fueron dados por Dios en una lista descriptivamente, Éxodo 20:3-17.

Que Cristo no destruyó esta Ley, Mateo 5:17.

Que para obtener la vida eterna, el hombre debe guardar estos mandamientos, Mateo 19:16-22.

Que estos mandamientos permanecerán para siempre, Mateo 5:18

Que por estos mandamientos se llega al reconocimiento del pecado, 1 Juan 3:4; Romanos 3:20.

Que se hallan plenamente descritos en el Nuevo Testamento:

12. LA LEY CEREMONIAL

Creemos que la ley de ritos, conocida también como ley ceremonial o ley de Moisés, es un conjunto de mandamientos totalmente separados del decálogo; que esta ley contiene “sábados” también pero que son sábados rituales y no semanales; que esta ley quedó nulificada en el momento en que Jesús expiró en la cruz, Juan 1:17; Gálatas 2:16; Gálatas 3:10; Colosenses 2:14-16; Gálatas 3:19-25; Hebreos 9:9,10; Hebreos 10:1.

Que existe una diferencia muy marcada entre las dos leyes:

13. ORIGEN DE LA IGLESIA: SU NOMBRE

Creemos que la Iglesia primitiva se identificó con el nombre de “Iglesia de Dios”, porque es el nombre del Padre Celestial, sobre cuyo nombre se edificó la iglesia, Mateo 16:16-18. Hechos 20:28; 1 Corintios 1:2; 1 Corintios 10:32; 1 Corintios 15:9; Gálatas 1:13.

Que la familia de Dios debe llevar el nombre del Padre, Efesios 3:14,15.

Que con este nombre fue invocado antiguamente, Daniel 9:19.

Que los seguidores de Cristo serían guardados en ese nombre, Juan 17:11,12 y 26.

Que tuvo su origen en el momento en que Jesús la fundó en la roca eterna, Mateo 16:18.

Que el conjunto de congregaciones de esta Iglesia se determinan o denominan “Iglesias de Dios”, 1 Corintios 11:16, 1 Tesalonicenses 2:14.

14. EL ESTADO DE LOS MUERTOS

Creemos que la muerte es un estado de completa inconsciencia, y que tanto el cuerpo como el alma descansan en el sepulcro en la muerte;

que la muerte es comparada a un sueño por la condición de “inconsciencia”, Juan 11:11-14; 1 Corintios 15:18,20; 1 Tesalonicenses 4:13;

que los muertos nada saben, Salmo 146:4; Eclesiastés 9:5; Job 14:21.

Que ningún muerto está consciente en el sepulcro, Job 7:9,10.

Que ningún muerto ha sido juzgado en esta dispensación, 2 Timoteo 4:1.

Que ningún muerto, o el espíritu del hombre muerto, ha ido al cielo, ni irá jamás en el futuro, Juan 3:13; Hechos 2:29,34.

Que el juicio pronunciado sobre los muertos será hasta el final del milenio, Apocalipsis 20:7,11-15.

15. LA RESURRECCIÓN DE LOS MUERTOS

Creemos que en la venida de Jesús los justos que han muerto serán espertados del sueño de la muerte para recibir la inmortalidad, 1 Corintios 15:51-54; 1 Tesalonicenses 4:14-16; que los impíos resucitarán al final del reino de Cristo para recibir su castigo, Apocalipsis 20:11-15.

Que la iglesia desde el principio ha creído en la resurrección de justos como de injustos. Hechos 24:15; Daniel 12:2; Isaías 26:19.

Que los que están en los sepulcros saldrán, unos para vida eterna, y otros para destrucción eterna, Juan 5:28,29.

Que la recompensa vendrá después de la resurrección, Lucas 14:14.

Que los impíos muertos saldrán a la vida después de mil años de la resurrección de los justos. Apocalipsis 20:5,13.

Que resucitan para ser destruidos para siempre. Apocalipsis 20:7-9, 12; Isaías 26:14.

Que este castigo se llama “la muerte segunda”. Apocalipsis 2:11; 20:14; 21:8.

16. EL CASTIGO DE LOS IMPÍOS

Creemos que aquellos hombres que al morir Dios consideró impíos, serán castigados y destruidos en el lago de fuego el cual los consumirá totalmente. Apocalipsis 20:15; Salmo 145:20; Salmo 37:20; 68:2.

Que serán destruidos por fuego como los habitantes de Sodoma y Gomorra. Génesis 19:24,25; Apocalipsis 20:9; Mateo 13:40,42.

Que no dejará de ellos ni raíz ni rama. Malaquías 4:1,3.

Que la palabra “infierno” varias veces mencionada aquí, es traducida del griego “hades”, y quiere decir “sepulcro”. Hechos 2:31; Mateo 11:23; Mateo 16:18; Apocalipsis 20:13,14.

Que los términos griegos “hades, gehenna y tártaro’’ (2 Pedro 3:7), se usan figurativamente para representar el valle de Hinnom, en las afueras de Jerusalén. Indicando lugar de tortura o destrucción. Mateo 5:22,29; Marcos 9:43-47.

Que el fuego que destruirá a los impíos después de mil años del reino de Cristo, será literal. Apocalipsis 20:9,13-15.

17. LA CRUCIFIXIÓN DE CRISTO

Creemos que Jesús fue crucificado un día antes de la Pascua de los Judíos; que fue crucificado en el día que se conoce comúnmente como miércoles, que era el día de la víspera (preparación) de la pascua.

Que Jesús murió antes del sábado ceremonial judío, en la víspera del sábado. Lucas 23:54.

Que murió a la hora de nona de ese día, 14 de Nisán. Marcos 15:34. Que lo sepultaron en el mismo día, 14 de Nisán, antes de ponerse el sol. Juan 19:31, 40-42. Que el día de su muerte estaba profetizado. Daniel 9:27.

18. LA RESURRECCIÓN DE CRISTO

Creemos que Jesús, después de haber estado en el sepulcro tres días y tres noches, resucitó de la tumba. Mateo 12:39,40.

Creemos que Jesús estuvo exactamente 3 días y 3 noches en el sepulcro, de los cuales el primero fue Sábado (ceremonial), y el último fue Sábado (semanal). Mateo 27:57-64; Lucas 23:54-56.

Que Jesús resucitó cuando todavía el sol del día Sábado no se metía. Mateo 28:1,6.

Que la precisión de tiempo en el sepulcro, “tres días y tres noches”, contados desde el miércoles por la tarde, al sábado por la tarde, es incuestionable. Mateo 12:39,40.

Que el relato que hacen los Evangelistas Marcos, Lucas y Juan, no se refiere al momento de la resurrección de Jesús, sino que es una información de las visitas que se hicieron en el día primero de la semana.

19. LAS PROFECÍAS Y SU CUMPLIMIENTO

Creemos que las profecías de las Santas Escrituras son la prueba más infalible de la inspiración de la Biblia, 2 Pedro 1:20,21; 2 Timoteo 3:16, y que lo que antes fue escrito, para nuestra enseñanza quedó escrito. Romanos 15:4.

Que el pueblo de Dios debe conocer las Profecías que ha dejado escritas en su palabra. Proverbios 29:18.

Que el no conocer las profecías de la palabra de Dios puede afectar nuestra salvación. Oseas 4:6.

Que es bienaventurado el que guarda la profecía. Apocalipsis 1:3. Que por las profecías conocemos los tiempos del fin. Mateo 24:1-41; Lucas 17:26-31; Lucas 21:25-27; Daniel 2:34-45; Ezequiel 38:1-12.

Que la historia del pueblo judío encierra muchas de las profecías del Señor. Génesis 12:2,3; Romanos 3:2, 9:4-5.

20. EL RECOGIMIENTO DE ISRAEL

Creemos que el recogimiento de Israel a la tierra de Palestina, como está descrito en la profecía, está en proceso de su cumplimiento, y es una señal del pronto regreso de Jesús.

Que Israel sería llevado a la tierra de sus enemigos, Levítico 26:33. Que Jerusalén sería hollada por los gentiles. Lucas 21:24.

Que Jerusalén sería readquirida y reedificada antes de la segunda venida de Cristo. Salmo 102:16.

Que sacaría a su pueblo Israel de entre las naciones como cuando los sacó de la tierra de Egipto. Ezequiel 20:34-38; Jeremías 31:1-14.

Que los haría una nación otra vez. Ezequiel 37:21- 28.

Que la tierra desierta sería edificada, y las ciudades asoladas (de Jerusalén), serían restauradas. Isaías 61:4.

21. EL MENSAJE DEL TERCER ÁNGEL

Creemos que un poder impío, que la Biblia refiere como “la bestia y el falso profeta”, existe desde antes, y ha de existir hasta la segunda venida de Cristo; que hay un mensaje especial contra este poder, el mensaje del tercer ángel, que está siendo y debe ser predicado por la Iglesia de Dios como una amonestación en contra de este poder; que éste es parte del evangelio, que al aceptarse, hará que el hombre escape de la ira de Dios.

Que tanto la bestia como sus acciones están predichas. Apocalipsis 13:1-10.

Que el tercer ángel amonesta en contra la adoración de esta bestia. Apocalipsis 14:9-11.

Que esta bestia llevaría sobre sí a la mujer de que habla Apocalipsis 17:3-14

22. LAS SIETE PLAGAS POSTRERAS

Creemos que la ira de Dios en contra del pecado y los pecadores alcanzará su plenitud poco antes y al tiempo de la segunda venida de Cristo, por medio de siete plagas devastadoras, las cuales vendrán sobre los que tengan la marca de la bestia, y sobre los que adoren su imagen; que estas plagas son literales y representan un gran sufrimiento físico; que esto es parte del mensaje de la Iglesia de Dios para amonestar al mundo en contra de estas calamidades que vendrán como consecuencia del pecado.

Que están aparejados siete ángeles que tienen las siete plagas. Apocalipsis 15:1.

Que estas siete plagas están totalmente descritas en Apocalipsis 16.

Que en la penúltima plaga se desata el Armagedón, al final del cual se manifiesta Cristo Jesús. Apocalipsis 16:12-17.

23. LA SEGUNDA VENIDA DE CRISTO

Creemos que la segunda venida de Cristo será personal y visible, y al venir establecerá su reino sobre la tierra; que esta promesa él la pronunció varias veces mientras estuvo aquí en la tierra. Que vendrá en forma literal y visible, con el mismo cuerpo con que ascendió a los cielos. Hechos 1:9-11. Que él prometió que vendría otra vez. Juan 14:1- 3. Que su venida no será en secreto. Mateo 24:27; 1 Tesalonicenses 4:16.

Que todos los que vivan en ese momento, verán su venida. Revelación 1:7. Que los santos del Antiguo Testamento como los del Nuevo Testamento esperaron en su venida. Job 19:25-27; Salmo 50:3; Filipenses 3:20; 1 Tesalonicenses,4:13-18; 1 Corintios 15:51-55.

24. EL REINO

Creemos que el reino está dividido en tres etapas:

1. El reino espiritual, llamado el reino de gracia;

2. El reino literal de Cristo por mil años; y 3. El reino de Dios por la eternidad.

Que en esta etapa o era presente vivimos en el reino de gracia, durante el cual Cristo reina en nuestros corazones por medio del Espíritu Santo. Lucas 17:21.

Que todos formamos o pertenecemos a esa casa o reino espiritual. 1 Pedro 2:5-9. Que por la redención de la sangre de Cristo nos ha trasladado al reino de su amado hijo. Colosenses 1:12-14.

Que al vivir en justicia delante de él disfrutamos de ese reino. Romanos 14:17.

Que por el evangelio él nos llamó a su reino y gloria. 1 Tesalonicenses 2:12,13.

25. EL REINO LITERAL DE CRISTO

Creemos que al venir Jesús por segunda vez establecerá su reino literal sobre la tierra; entonces se sentará sobre el trono de su gloria y los redimidos reinarán con él por mil años; que esta es la segunda etapa del reino.

Que cuando él venga, recibirá el trono de David su padre. Lucas 1:32,33.

Que ese será el trono de su gloria. Mateo 25:31.

Que en su venida los santos muertos resucitarán, y los vivos serán transformados a la inmortalidad, y reinarán con Cristo mil años sobre la tierra. 1 Tesalonicenses 4:13-17; 1. Corintios 15:51-54; Apocalipsis 20:4,6; Apocalipsis 5:10.

Que al fin de los mil años, Cristo entregará el reino a su Padre. 1 Corintios 15:24-28.

26. EL REINO DE DIOS POR LA ETERNIDAD

Creemos que la tercera etapa del reino, es el tiempo en que

Dios reinará por toda la eternidad; que al cerrarse el período del milenio la restitución de todas las cosas habrá culminado, y la tierra será como una tierra nueva, restaurada a su estado original de perfección, habiendo quitado todo pecado y el resultado del mismo que esta tierra vendrá a ser el hogar eterno de los redimidos.

Que Abraham murió anhelando entrar a esa tierra nueva. Hebreos 11:10.

Que esta es la tierra nueva que esperaba Pedro. 2 Pedro 3:13.

Que la nueva Jerusalén será como el tabernáculo de Dios morando entre todos los redimidos. Apocalipsis 21:1-3, 23-27.

Que entonces Dios será todas las cosas en todos. 1 Corintios 15:28. Que de allí en adelante los redimidos “reinarán para siempre jamás” con Dios. Apocalipsis 22:5.

27. EL REPOSO DEL SÁBADO

Creemos que el séptimo día de la semana (comúnmente llamado sábado) es el verdadero sábado bíblico; que debe observarse desde la puesta del sol del día viernes hasta la siguiente puesta del sol, 24 horas después; que nos fue dado como un memorial de la creación, y debe dedicarse al descanso y adoración del Señor, Génesis 2:2,3; Levítico 23:32; Isaías 58:13; Éxodo 16:22-26.

Que constituye el cuarto mandamiento de la Ley de Dios. Éxodo 20:8-11.

Que ningún otro día fue instituido como día de reposo. Hebreos 4:4-9.

Que Jesús, como nuestro ejemplo, descansó también este día. Lucas 4:16,31,

Que las mujeres que habían ido al sepulcro reposaron este sábado, como Jesús lo había hecho. Lucas 23:56.

Que este día precede al primer día de la semana, y por tanto, es el séptimo día. Mateo 28:1.

Que Jesús se presenta como el único Señor de ese día. Marcos 2:27,28.

28. EL BAUTISMO

Creemos que el bautismo es una ordenanza de Jesús para entrar en la familia de Dios; que el bautismo es para remisión de los pecados, y que todo el que acepta el mensaje de Cristo debe cumplir con esta ordenanza, Mateo 3:16; Marcos 16:16; Hechos 2:38.

Que el bautismo debe ser por inmersión en agua corrediza. Mateo 3:16; Hechos 8:37-39; Romanos 6:3,4.

Que el bautismo debe ser conforme al mandamiento del Señor Jesús. Mateo 28:19.

Que el bautismo debe ser ejercido por un ministro autorizado en la Iglesia de Dios. Romanos 10:15.

29. LA CENA DEL SEÑOR

Creemos que la cena del Señor es una ordenanza para la Iglesia en memoria de la muerte de Cristo; que debe hacerse anualmente, en la misma noche en que Jesús la instituyó, al iniciarse el día 14 de nisán, primer mes del calendario hebreo y no conforme al calendario gregoriano.

Que es una ordenanza para la Iglesia. 1 Corintios 11:1,2.

Que Jesús la instituyó en la misma noche en que comió la Pascua con sus discípulos. Mateo 26:17-29; Lucas 22:7-20. .

Que la pascua se comía el día 14 del primer mes del año hebreo. Levítico 23:5.

Que consiste en tomar pan sin levadura y el fruto de la vid. Marcos 14:22-25.

Que esta ordenanza conmemora la muerte de Cristo, 1 Corintios 11:24-26.

Que el lavamiento de los pies es parte de esta ceremonia y debe hacerse inmediatamente después de comer el pan y beber el vino. Juan 13:1-9.

30. LAS DÉCIMAS DE TODA GANANCIA

Creemos que el plan bíblico para financiar la obra de la iglesia de la predicación del evangelio es por medio de los diezmos y ofrendas que sus miembros deben pagar de sus ganancias como parte de sus obligaciones cristianas; que este plan de Dios fue practicado por el padre de nuestra fe mucho antes de que existieran los hijos de Israel.

Que las décimas pertenecen a Dios. Levítico 27:30. Que los diezmos es la décima parte de nuestras ganancias. Levítico 27:32.

Que Abraham practicó esta ordenanza. Génesis 14:18-20; Hebreos 7:4.

Que está prometida una bendición para aquellos que pagan los diezmos. Malaquías 3:10.

Que Dios se siente defraudado o robado cuando se retienen los diezmos. Malaquías 3:8-9.

Que Jesús enfatizó esta enseñanza en Mateo 23:23.

Que los ministros que trabajan en la predicación tienen el privilegio de comer de esos diezmos, como se hacía en el tiempo de los sacerdotes. 1 Corintios 9:13,14; Números 18:21.

31. LA LEY DE LO LIMPIO Y LO INMUNDO

Creemos que el pueblo de Dios debe tener únicamente como alimento aquellos animales, aves y peces que Dios nos ha dado para este fin; que deben distinguirse de entre los que están señalados como animales inmundos.

Que la clasificación de animales y aves limpias e inmundas fue conocida desde los días de Noé. Génesis 7:1-3, 8-9

Que existe una lista perfectamente definida de animales limpios e inmundos. Levítico 11:4-23; Deuteronomio 14:3-20.

Que existe una lista perfectamente definida de animales limpios e inmundos. Levítico 11:4-23; Deuteronomio 14:3-20.

Que Pedro y la iglesia del principio hacían diferencia entre los animales limpios e inmundos. Hechos 10:9-14; Apocalipsis 18:2.

Que aquellos que comen carnes de puerco, abominación y otras carnes inmundas, serán destruidos a la venida del Señor. Isaías 66:15-17.

32. LA ORGANIZACIÓN DE LA IGLESIA

Creemos que la organización de la iglesia en el tiempo actual debe conservar la forma que fue ejemplificada desde el primer siglo, teniendo cada congregación su propio gobierno local, disfrutando de autonomía congregacional en cuanto a la distribución de sus finanzas, así como en la elaboración de programas de evangelismo que se refieren a la organización local; que todas las iglesias locales deben mantener la unidad tanto doctrinal como en sus relaciones con la iglesia general; que ninguna congregación o pastor en particular puede enmendar o cambiar un punto doctrinal, porque esto es sólo competencia del concilio general de las Iglesias de Dios.

Que todas las Iglesias de Dios son componentes del cuerpo de Cristo. 1 Corintios 12:27-30; Efesios 4:10-17.

Que Cristo es la cabeza de la iglesia. Efesios 1:22,23; Colosenses 1:18. Que no debe tener un gobierno ejecutivo como las iglesias del mundo. Lucas 22:24-27; 1 Pedro 5:1-3.

Que debe tener pastores u obispos para apacentar a la iglesia. Hechos 20:17,28.

Que en cuanto a finanzas, la iglesia es autónoma en su manejo. Filipenses 4:14-19; 2 Corintios 9:1-5; 2 Corintios 11:8,9; 1 Corintios 16:1-4.

Que todo lo que se refiere a doctrina debe ser estudiado en concilio de ministros. Hechos 15:1-4, 22- 28; Salmo 82:1.

33. LA ORACIÓN Y EL AYUNO

Creemos que la oración es el medio más eficaz para estar en contacto con Dios por medio de nuestro Señor Jesucristo, que es nuestro mediador y sumo pontífice: que toda oración debe ser hecha en el nombre de Jesús para que sea válida delante del Padre celestial; que el ayuno es parte complementaria de la oración para afligir el alma como un voto al Señor.

Que la oración debe hacerse en el nombre de Cristo. Juan

14:13,14. Que debe orarse sin cesar. Lucas 18:1; 1 Tesalonicenses 5:17.

Que se debe orar en todo lugar, y no sólo en la iglesia. 1 Timoteo 2:8

Que la práctica del ayuno es para los cristianos. Mateo 17:18-21; Hechos 10:30; Hechos 13:2.

34. UNGIMIENTO PARA LOS ENFERMOS

Creemos que Dios oye la oración de fe tanto individual como colectiva en favor de los enfermos; que es un mandato escritural llamar a los ancianos de la Iglesia para que oren por el enfermo y lo unjan con aceite; que la oración debe ser hecha con fe tanto por parte del enfermo como del ministro que ora.

Que el ungimiento por los enfermos es una práctica desde los días de Jesús. Marcos 6:13.

Que el enfermo debe llamar a los ancianos de la Iglesia paraque le unjan con aceite. Santiago 5:14,15.

Que sólo Dios es el único que puede sanar todas las enfermedades. Salmo 103:3.

Que la oración de los apóstoles sanó a muchos enfermos. Hechos 5:16.

Que es válido enviar pañuelos con aceite después de orar por ellos para enfermos que no están al alcance de un ministro. Hechos 19:11,12. Que el ungimiento y la oración por los enfermos debe hacerse poniéndole las manos en la cabeza. Hechos 28:8.

35. EL MATRIMONIO Y DIVORCIO

Creemos que el matrimonio es una institución divina (Génesis 2:21-24); que para que ni el hombre ni la mujer caigan en pecado de fornicación o adulterio, cada uno tenga su mujer, y cada una tenga su marido, 1 Corintios 7:2; que Jesús ratificó el mandamiento del matrimonio, Mateo 19:5,6; que el divorcio no estuvo en la mente de Dios cuando instituyó el matrimonio, sino por el contrario, asentó que lo que Dios juntó no lo aparte el hombre, Mateo 19:6.

Que el matrimonio delante de Dios tiene tanta fuerza como el matrimonio civil. Mateo 19:6.

Que la mujer o el hombre están ligados a la ley del matrimonio en tanto que viva su cónyuge. 1 Corintios 7:39; Romanos 7:2,3.

Que a causa de la dureza del corazón, Moisés dio carta de divorcio cuando se comprobaba la infidelidad. Deuteronomio 24:1-4.

Que cualquier hombre o mujer que abandona a su mujer o a su marido no siendo por causa de infidelidad conyugal, adultera y hace que su cónyuge adultere. Mateo 5:32; Mateo 19:9.

Que cualquier hombre o mujer que abandona a su mujer o a su marido no siendo por causa de infidelidad conyugal, adultera y hace que su cónyuge adultere. Mateo 5:32; Mateo 19:9.

Que cualquiera que deja a su mujer, fuera de las razones que expresa la Biblia, debe quedarse sin casar de nuevo. 1 Corintios 7:10-14.

Que tanto el hombre como la mujer que deja a su cónyuge y se casa con otro, comete adulterio. Marcos 10:11,12; Lucas 16:18.

36. EL VELO EN LA MUJER

Creemos que la mujer cristiana debe cubrir su cabeza mientras está en el culto de adoración, siempre que ora y siempre que lee la palabra de Dios.

Que la mujer cristiana debe tener señal de potestad sobre su cabeza, por causa de los ángeles. 1 Corintios 11:10.

Que esta es una ordenanza de Dios transmitida por el apóstol Pablo. 1 Corintios 11:2.

Que en el orden de autoridad, la cabeza de la mujer es el varón, así como Cristo es la cabeza del varón, y la mujer que no se cubre la cabeza, afrenta su cabeza. 1 Corintios 11:3-5.

Que la mujer que deseche esta ordenanza tiene que trasquilarse. 1 Corintios 11:6

37. HÁBITOS IMPUROS Y CONTAMINANTES

Creemos que los hijos de Dios son templos del Espíritu Santo; por consecuencia, deben abstenerse de toda práctica que pueda contaminar su cuerpo y hacerlos inmundos a la vista de Dios; que los cristianos deben vencer todos los deseos de la carne, abstenerse del vicio del tabaco, bebidas embriagantes y toda clase de drogas narcóticas, con excepción de aquellas que, por razones de salud, sean prescritas por el médico en calidad de medicina.

Que los cristianos son templo de Dios, y si desean que él more en ellos, deben guardarse limpios. 1 Corintios 3:16; 6:19; 2 Corintios 6:16-18.

Que Dios destruirá a quienes contaminen su templo. 1 Corintios 3:17. Que el cristiano debe guardarse de toda inmundicia de carne y de espíritu. 2 Corintios 7:1.

Que todos los deseos carnales son las obras de la carne que causarán que el cristiano no entre al reino de Dios. Gálatas 5:19-21.

38. LA MUNDANALIDAD

Creemos que las Santas Escrituras condenan toda clase de mundanalidad, lo cual incluye “los deseos carnales”; que los cristianos deben evitar asistir a lugares en donde se propaga la mundanalidad: tabernas, salones de baile, clubes nocturnos, etcétera. Que las obras de la carne impedirán la entrada al reino de Dios. Gálatas 5:17-21. Que el cristiano debe mortificar las obras de la carne. Romanos 3:12-14.

Que el que ama al mundo se hace enemigo de Dios. 1 Juan 2:15,16.

Que los hijos de Dios no deben vivir conforme a este mundo. Juan 17:16; Romanos 12:2; Tito 1:12.

Que el cristiano debe evitar joyas costosas, encrespamiento del cabello y vestidos deshonestos. 1 Pedro 3:1-4.

39. LA LUCHA CARNAL

Creemos que el cristiano no debe participar en luchas carnales, ni participar en guerras, ni guardar rencor ni vengarse de sus enemigos.

Que los cristianos deben mantener la paz con todos los hombres, Romanos 12:17-19.

Que los cristianos no deben buscar la venganza. Romanos 12:19; Levítico 19:18.

Que los cristianos tienen prohibido matar. Éxodo 20:13.

Que no debemos participar en la lucha carnal. Juan 18:36

40. FESTIVIDADES PAGANAS

Creemos que las festividades que el mundo celebra como navidad, año nuevo, viernes santo, domingo de resurrección, el reposo dominical, las fiestas de todos santos, rosca de reyes, etcétera, son de origen pagano, y los cristianos no deben participar en ellas.

Que el cristiano debe apartarse de las costumbres del mundo. Jeremías 10:2.

Que toda semilla pagana sembrada en nuestros corazones debe ser desarraigada. Mateo 15:13.

Que todas esas costumbres fueron establecidas por la bestia, y hay un castigo para quienes ostentan la marca de la bestia. Daniel 7:25; Apocalipsis 14:9,10.

Que no debemos consentir al engañador. Proverbios 1:10.