jj-aex - Tumblr blog

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“¿tienes idea dónde está la sección de ciencia ficción?” inquiere deteniendo a primer transéute “o alguna sección” aclara, ya que estaba perdida de más, ya ni recordaba dónde estaba abel que le había divisado de lejos. 

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desconocía si podía llegar a ser capaz de eso, acostumbrarse a las miradas, abucheos o vitoreos, la presión de alcanzar las expectativas, de tan solo pensarlo le presionaba el pecho. definitivamente jimin había nacido para ser apreciada, a diferencia de ella que su lugar estaba en las sombras. una tenue sonrisa aparece en sus carmines hasta que nota el silencio, no es un silencio cualquiera, lo siente, lo reconoce porque ella también hace uso del mismo cuando las palabras arden y mencionarlas en voz alta es revivirlas. la observa a la espera, quiere decir algo, sin embargo se siente un poco invadida por emociones ajenas y elige no interrumpir su proceso, quizás de hacerlo dejaría un sabor amargo en aquellas emociones que no se terminaron de digerir al haberlas regresado al presente. la mira unos segundos, en los ojos dibujando una disculpa tacita que no intenta colocarla en un lugar vulnerable, que se sintiera mal por simplemente sentir. entendía aquello, ella solía martirizarse cada que se sentía ahogada en emociones, buenas o malas, casi como si no se sintiera merecedora de aquello. acerca su mano libre para acunar la ajena, acariciando el dorsal del pulgar ajeno con la yema del propio, con movimientos ascendentes y descendentes. el labio inferior presiona sobre el superior, casi ocultándolo de la molestia que eso le generaba, sentía que su propia respiración reaccionaba a las emociones ajenas pero escondía aquello respirando por la nariz y buscando el control. traga a la fuerza cuando las emociones se intensifican, y exhala sutilmente por las fosas nasales, apretando los dientes. sacude la cabeza "no, no, descuida" miente sabiendo que era mejor para la opuesta no tener esa presión de no poder liberarse sólo por su falta de control en expulsar emociones ajenas de su propia anatomía "nunca es difícil estar contigo, mim" estrecha de forma cálida la mano ajena, brindándole fuerza para que pudiera seguir o recomponerse, lo que le hiciera sentir bien, ella lo sabría. "¿y te hizo sentir bien? ¿saber quién eras?" pecaba de curiosa por demás "lo siento, lo siento" se pone de puntillas para dejar un corto beso en la mejilla ajena, buscando brindar una muestra de afecto por haberle despertado todas emociones. le sonríe "y mirate ahora como destacas, todo el mundo se gira a verte, eres famosa" intenta hacerle sentir mejor, quizás desde el lado del ego como si de esa forma pudiera ayudarle a sanar esas memorias de personas que no pudieron ver el valor de lo que era jimin, pecando completamente de mirarla con una perspectiva muy subjetiva. "siempre se me dio bien huir" expresa aquello que había pensado "de mis compañeras, de mi casa, de mi cabeza" le sostiene la mirada, sabía que de cualquier forma sus angustias no pasarían a cuerpo ajeno como le ocurría a ella. "correr era la forma fácil de no pensar" no lo tomaba como un deporte pero si era muy fácil escapar, o al menos crear la ilusión que lo hacía hasta que terminaba de regreso a la puerta de su casa ¿por qué? no lo sabía, tampoco tenía muchos lugares para ir hasta que supo que podía irse definitivamente. "¿qué más me quieres mostrar, mim?" quizás era lo mejor no hablar de más, que jimin le viera distinto, le gustaba que creyera que era una buena compañera de travesuras. "si te hace sentir mejor, a nosotras nos creen mal augurio" le expresa buscando sacarle importancia a la palabra, sin embargo a veces la vestía.

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las cejas se elevan tan pronto la información es brindada ¿cómo hacían para no morir de vergüenza frente a tanta gente? además de que sus actos tenían presencia internacional, sonaba a demasiada aventura para ella que requería de cierta estabilidad, al menos tener una rutina diaria que la ayude a formar una familiaridad con su nueva vida. “¿han llenado muchas carpas? que no lo cuestiono, “ se ataja esperando que la pregunta no resulte tomada a mal “ me sorprende, y admiro, como pueden estar frente a tantas personas” tímida rasca su nuca con la mano libre, a continuación con las minas yemas acaricia su codo tratando de no parecer incómoda, al menos la sensación de nerviosismo le brotaba como una pelota en la panza, la imaginación actuando demasiado real para que no despertarán reacciones sinceras en su anatomía. la sensación que presiente de la ajena le rechaza la idea de cuestionar sobre progenitores, le estrecha la mano haciéndole saber que estaba allí acompañándola si lo necesitaba, una muestra de afecto que sirviera como motor a hacer lo que sintiera, ya fuera hablar o no “¿siempre supiste que eras una bruja?” era una pregunta estúpidamente pero si algo que le sorprendía “no tienes que hablar de tus padres si no lo deseas” se ataja a aclarar antes de que las emociones de jimin reactivaran en su cuerpo la respuesta de algo que prevalece como conocimiento peligroso, de seguir preguntando quizás hasta podría entender si era dolor lo que sentía u otra cosa, gran parte suya quería entenderla, hacerla sentir entendida. de momento, sabe que si se involucraba a ese nivel con jimin, ella estaría en todo su derecho de preguntar y saber sobre su propia historia. sólo abel sabía muchísimo más de lo que le acomodaba explicar, culpaba a empatía que había generado en ellos un vínculo de entendimiento mutuo, sujin sabía parte de su historia, lo suficiente como para ser siempre presente en sus días. temió que si contaba a la fémina sus tragedias familiares, la misma diera cuenta que los rumores de su aquelarre eran ciertos, y que su presencia no era más que un iban a malas noticias. “wow, de seguro eras muy popular ¿de donde vienes?” estaba haciendo demasiadas preguntas y ni siquiera dando información en respuesta “yo era la más rápida de mi curso——corriendo, claro” estupido aclarar algo que podría simplemente darse por entendido. aquella información sólo le hizo pensar unos segundos en lo fácil que era siempre huir de los problemas reales.

asiente ante interrogante, lleva apenas unos años en el circo pero puede decir aquello con certeza. sonríe, siendo aquel uno de los puntos que realmente ha cambiado perspectiva del circo en primer lugar. ‘ acabas acostumbrándote. ’ asegura, no está segura de cuánto le ha tomado aceptar estar bajo las miradas, pero no fue demasiado, como si hubiera nacido para estar en ese mismo lugar. ‘ la adrenalina, los aplausos, los rostros de sorpresa. ’ enumera factores que la han llevado a enamorarse de aquello que la hace quien es hoy. tópico acaba siendo eclipsado por uno menos agradable, mantiene silencio brevemente, confiando en empatía femenina para no tener que incursionar en un pasado que aun le lastima, sabiéndola capaz de interceptar emociones propias para poder inclinar conversación hacia otro sitio. niega, aun sin soltar palabra, como si todo lo que abriera aquella puerta a recuerdos e inicios de su vida en la isla, convergieran en el mismo punto. ‘ no supe quien era los primeros años de mi vida. ’ finalmente logra encontrar propia voz para pronunciar aquello, notándose agobiada por un historial que mantiene enjaulado. le tomó ese tiempo dar con su abuela y encontrarse consigo misma. dígitos se aferran a tacto contrario, necesidad de un cable a tierra que la mantenga allí siendo dominante. incluso con ello, se las ingenia para mantener la vista delante suyo, cree no poder encontrar la ajena y seguir hablando sobre eso. ‘ la primera maravilla que desperté fue la piroquinesis. ’ y casi como si aquello fuera suficiente para dar idea general, acaba inspirando profundamente. quizá era suficiente explicación a temor de su poder, al poco control, a la carencia de poder sobre emociones que pudieran llevarla a otro incidente. ‘ lo escondí, algunes comenzaron a decir que yo era un mal augurio. ’ confiesa, vivencias a temprana edad no siendo agradables de traer a psique, pero espera que visión femenina sobre ella no cambiara por algo como eso. presión en el centro de su pecho se hace predominante, angustia ligada a recuerdos también le invade y se pregunta si interlocutora sería capaz de lidiar con eso. ‘ lo siento, jae, te estoy haciendo difícil estar a mi lado, ¿cierto? ’ asume, sería el caso. si sentimentalismos le desbordaban, no quería imaginar lo que muchacha experimentaba. exhala, enseñando un superficial elevamiento de comisuras, buscando recobrar compostura que normalmente la caracteriza. ‘ una vez que supe de dónde venía, las piezas encajaron solas. ’ concluye en un intento desesperado por calmar emociones desequilibradas, esas mismas que usualmente mantiene delimitadas para que no se revolucionen. mención ajena la lleva a reír por lo bajo. ‘ para nada. ’ tiempo en escuela no ha sido memorable en lo absoluto. ‘ nunca fui buena creando lazos, me era imposible destacar. ’ eleva hombros. ‘ era invisible. ’ quizá era por eso que agradecía no haber conocido nadie allí durante una adolescencia como aquella, probablemente nada habría llegado a ser significativo para ella. ‘ de seúl. ’ es único sitio que ha conocido de tierra natal, única ciudad en la que vivió con pariente hasta que decidieron tomar iniciativa hacia la isla. ladea la cabeza, observándola. ‘ ¿de verdad? ’ curiosea. ‘ ¿corrías mucho? ’

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”yo no —-ugh “ de adentro le brota aquella forma de gruñir que luego da cuenta que no es propia, no es la forma en la que ella se comporta y tiene que empezar a crear su propio bloqueo para que no latiera el pecho en enojo y susto por causa del opuesto. respira hondo mientras cierra los ojos y se centra en barrer la marca ajena de su interior, diluirle sin dejar que eso fuese el motor que moviera sus propias acciones. había aprendido que sin darse cuenta actuaba en reflejo del otro, como si la fuerza del sentir tuviera los hilos que le guiaba, haber aprehendido aquello sólo significaba que estaba a más pasos de comenzar a liberarse de dichas ataduras. seguía sonando irracional que fuese ella quien quien los envió a esa zona, a ese espacio. sin embargo ella había sentido en su interior una chispa, como un relámpago que cruzaba su cuerpo antes de poder notar el entorno cambiado ¿podía ser? ¿había ese poder crecido más de lo que pudiera entender y controla? observó sus manos unos segundos, cuestionándose de qué podía ser capaz. y de pronto aquella acusación Distinta la hace girar la cabeza hacia él “¿q-qué dices?” la alarma puede notarse en su tono agudo que tajaba todos los niveles de un nerviosismo puro, de tal cantidad que hasta parecía culpable de haber efectuado encuentro a la fuerza para pasar el rato con él. negar belleza ajena era poco inteligente, inclusive sólo apoyaría la idea de que estaba actuando cual quinceañera que intenta fingir que el destino les cruza por una extraña razón. “n-no, yo—-“ la letra se le atora en la garganta y las mejillas hierven como si fuese parte de un cuadro de delirios febriles. “no te conozco tanto“ empieza a decir pero no lo mira “sólo sé que—-tenías una novia, y que ahora estás triste” explica lo hablado con las cervezas aquella tarde. no sabía qué tanto había dicho sobre su persona pero era tan triste su vida amorosa que de seguro habia quedado como la misma torpe que estaba en ese momento, pero sobria. un poco recordaba, la humedad de sus mejillas, el amargo sabor en la lengua, y el tenue mareo que había bloqueado su vista panorámica (además de la irracional necesidad de ir al baño por la razón primera). “lo tendré en cuenta, te invito a ser secuestrado por mi“ intenta bromear para sacarle peso a lo dicho anteriormente. si estaba en lo seguro, el recuerdo de la fémina le generaría angustia al opuesto lo que podría ser tan fuerte que le iniciara a ella aquella emoción, o quizás ni necesitaba ser contagiada por él. “no tengo ni idea, nunca había estado aquí por eso no creo haber sido yo” nota que está a la misma altura que ella y lo mira unos segundos, pecando de curiosa recuerda la idea alocada que tiene el contrario sobre ella y desvía la mirada de nuevo a las nubes que entre sus abstractas formas parec��an tintar el cielo de una monocromía deprimente. “¿realmente lo crees?” lo observa un segundo antes de volver al cielo “que a alguien le importemos tanto como para notar nuestra ausencia” explica.

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“¿yo?” inquiere realmente sorprendida por el descaro de la culpabilidad trasladada, emociones fuertes se comparten a ella y el tono de su voz se iguala al ajeno, caída fue nada más y nada menos que al lado del opuesto. al dar cuenta de ello, debe gatear un poco sobre el pasto para recuperar un poco su espacio personal. palabras continuas que brotan del contrario la hacen confundirse. no podía haber sido ella, no tenía ese poder tan entrenado, poca atención le daba, ¿era posible? ¿podía hacerlo si quería? quizás su anhelo de escapar se había traducido en una utilización indebida del mismo. ”¿qué? ¡no!” intenta defenderse “tú eres—el que hace todo esto, no tengo más alcohol” expresa tratando de negar por completo que aquello fuese su responsabilidad “¿por qué me sacaste de allí? ¿acaso quieres pasar tiempo conmigo?” inquiere sabiendo que aquello era descabellado, pero las emociones que recibe son las que la hacen reaccionar de esa manera “devuélvenos, por favor” pide, pero su pedido es débil. el silencio acuna sus oídos. la brisa que, aunque acarrea un poco el olor a quemado, acaricia su piel. leves cantos de pájaros que invitan a una serenidad que no encuentra negativa. quizás era la sorpresa del cambio repentino, la inconsciencia de un deseo que se cumplió. allí en el pasto, el verde claro, el sol que intentaba salir de las nubes, la naturaleza y la calma. no sabe cuánto tiempo lleva callada como para darse cuenta que se acomodo sobre el suelo. “no sé si has sido tú, pero gracias” dice por fin “no toleraba más estar allí abajo”

desconoce y no comprende el porqué continúa mintiéndole, insistiendo en poner culpa sobre su cabeza de acción que ni siquiera controló ¡que solo estaba caminando! y podría haber dudado si no hubieran ido a… bueno, donde sea que estuviesen ahora. ni se le cruza por la mente que propia maravilla que ignoraba podría haber subido de nivel, seguía siendo realidad que deseaba no aceptar como cierta. por ende, solo podía ser responsabilidad de la morrigan. ‘   — — ¿por qué querría pasar tiempo contigo? ¡tú me trajiste aquí, en serio!  pero si no quieres matarme, es… ’ voz se va apagando de apoco mientras le mira con los ojos entrecerrados, receloso de repente cuando miedo es suplantado por incredulidad. ‘ ¿estás coqueteando conmigo? ¿es que quieres pasar tiempo conmigo y…? ’ increíblemente rebuscado si era el caso. ‘ porque prefiero, no sé, una carta llena de corazones escrita con bolígrafo de brillitos antes que… eh, secuestro… ¡que harás que me de un ataque! ’ continúa protestando mientras se sienta mejor en el suelo, frotando sus palmas para entrar en calor mientras se permite ignorar a fémina, tras confirmar que no va a intentar cometer un crimen en su contra allí mismo, y observa panorama que les rodea. ’ ¿cómo nos voy a regresar? ya te dije que no fui, y no- ¡no puedo! no la uso nunca a propósito, que escuché te puedes quedar en otro plano o algo así ’ musita con un ligero escalofrío. desconocía funcionamiento de muchas de las maravillas, pero contras de la propia se le quedaron bien grabadas en su mente. no presta atención a repentino agradecimiento, porque nada ha hecho. ‘ por tu culpa vamos a tener que caminar, ugh ¿siquiera sabes dónde nos trajiste? ¿no es lejos, verdad…? ’ y de golpe, se deja caer de espaldas en el césped. ‘ déjame aquí si es mucho, no me voy a mover. mejor esperar a que alguien se de cuenta no estamos y nos vengan a buscar. ’ 

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tatehn​:

‘ ¿por eso debías mirarme tanto? ’ empezó de mala gana, pero acabó por serenar su tono de voz. la chica no tenía la culpa de su indisposición, a pesar de que sentir sus ojos sobre ella le había molestado de sobremanera. miró sus zapatos y se dio cuenta de que lo que estaba encastrado en su suela no era más que los restos de una rata que tuvo la mala suerte de cocinarse viva. ‘ ew ’ sacudió su pierna, en vano, antes de restregar el pie contra el suelo, buscando deshacerse de ello. ‘ hubiese sido mejor si se trataba de la porquería de algún animal y no un animal muerto. ’

tuerce los labios y arruga el entrecejo antes de levantar las manos como bandejas, acercando indirectamente los hombros a su rostro “no estaba segura de qué era y quizás—-era lodo y te estaría asustando por nada” justifica su accionar cuando prácticamente pecaba de introvertida cuya meta era no meterse en vidas ajenas. “¿quieres que te acompañe a limpiarte?” ya que no había sido útil en primera instancia al menos intentaría compensarle con la compañía y también acompañarle en el mal humor. de haber sido ella en su lugar, hubiera refunfuñado en vergüenza y huido a morrigan hasta limpiarse y no regresar. estaría muy apenada de toda la situación que se encerraría a sentir vergüenza.

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ruizhou​:

intención no era permitir que herramienta colisione contra el suelo, pero cuando contraria desaparece de su vista, es inevitable que la busque con la mirada, encontrándola bastante alejada del lugar indicado, y perdiéndose del momento en que el objeto cae frente a sí. ‘ diría que tienes un problema con las medidas, porque esos son más que diez centímetros ’ menciona, cuando finalmente la encuentra. ‘ ¿no controlas bien la transmutación? ’

aquella voz que estaba más cerca que antes ahora se escuchaba lejos, y no pasó desapercibido, simplemente creyó que el opuesto se había dado a una corta fuga para no responsabilizarse por la situación (siendo o no responsable, ella no lo sabía) cabeza se descubre de su escondite, como si aquello pudiera ser una buena idea a evitar que se lastimara. “¿no controlo qué?” inquiere confundida hasta qué nota la gran brecha de distancia que les separa. “¿esto fui yo?” necesita confirmar porque se le hace completamente confuso que fuese real. sabia que poseía ese poder, no reconocía el nombre, si sus acciones pero no lo había practicado realmente como para tener control del mismo, y aquella acción había sido completamente sorpresiva. “quizás tú te alejaste” busca intentar no reconocer su propio poder.

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beamleeyao​:

observa la escena con algo de preocupación, llevando sus manos hacia sus propias mejillas, como si quisiera pedirle que se detuviera, porque de otra forma podría lastimarse. cuando la escena termina y recibe aquella pregunta, termina por morder levemente su labio inferior.  “  creo que… un poquito.  ”  miente, en un intento por darle ánimos a la contraria, aún si el banco no se había movido para nada.  “  uh, quizás si te ayudo… sea más fácil que lo movamos.  ”  sugiere, aunque sabe que su fuerza física no es nada del otro mundo, probablemente con el peso de ambos sería más sencillo empujarlo, así que se acerca para colocarse a su lado, apoyando sus manos en el banco, esperando que ella haga lo mismo.  “  a la cuenta de tres lo empujamos, ¿vale? uno, dos, tres…  ”

la sonrisa en su rostro se ensancha, orgullosa de estar siendo útil. la poca facilidad que tenía para otras cosas como reconocer objetos de valor o usar poderes para levantar cosas, tener conocimientos de carpintería, electricidad, o experiencia en arreglos varios. deseaba de cualquier forma encontrar algo en donde pudiera comprobar que su estadía en el lugar era validada por sus acciones, necesitando que alguien le dijera que había hecho un buen trabajo. “claro, claro, será más rápido” expresa con una motivación que poco reconoció en si, ignoró aquella sensación que tuvo segundos atrás porque estaba muy encantada con que había podido lograr algo. tan pronto el contrario da la orden sus pies se anclan en el suelo para empujar, gruñendo por dentro ya que sentía que esa exteriorización ayudaba a que potenciara su fuerza. lo estaba dando realmente todo “¿se está moviendo?”

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chvemin​:

primera reacción femenina es más que suficiente para dejarla satisfecha, haciéndola sentir mucho más tranquila respecto a llevarla a conocer aquel lugar, quizá era familiaridad que representaba en su vida, llevándola a desear compartirlo con aquellos que despertasen algo similar. ‘ ¿unas mil? ’ es insegura, porque nunca se ha detenido a averiguarlo realmente. ‘ quizá más. ’ ladea la cabeza suavemente. ‘ aquí no lo llenamos a excepción de eventos muy especiales, pero el espacio es necesario cuando el circo se mueve por diferentes ciudades. ’ anuncia con el poco conocimiento que tiene, no ha tenido oportunidad de viajar junto a ellos, escaso tiempo que ha compartido a su lado, no le ha ofrecido eso aun. interrogante ocasiona un cambio en expresión, notorio, mismo que aparece ante mención de familia como tal, niega en silencio, permitiéndose aun guiar camino y fijar mirada al frente. ‘ mi abuela era… es de alejandría. ’ confiesa. ‘nunca le gustó el circo, tampoco que yo sea parte.’ quizá es allí donde yace el conflicto mayoritario entre ambas.  ‘ mis padres… ’ se detiene, sin saber que decir, no es buena abriéndose a otres. jae le genera confianza suficiente, tal vez, para abrir ciertas puertas que siempre ha preferido mantener cerradas. ‘ bueno, no estoy segura. ’ confiesa, dejando que vista quede estática en el suelo. le toma un instante tomar aire y regresar a semblante animado y regular en ella. ‘ no importa ahora, me enamoré del circo cuando llegué a la isla. ’ confiesa. ‘ cuando era más pequeña hacía gimnasia y mucho deporte, siempre fue activa. ’ comparte con ella. ‘ en la escuela estuve en el club de atletismo. ’

las cejas se elevan tan pronto la información es brindada ¿cómo hacían para no morir de vergüenza frente a tanta gente? además de que sus actos tenían presencia internacional, sonaba a demasiada aventura para ella que requería de cierta estabilidad, al menos tener una rutina diaria que la ayude a formar una familiaridad con su nueva vida. “¿han llenado muchas carpas? que no lo cuestiono, “ se ataja esperando que la pregunta no resulte tomada a mal “ me sorprende, y admiro, como pueden estar frente a tantas personas” tímida rasca su nuca con la mano libre, a continuación con las minas yemas acaricia su codo tratando de no parecer incómoda, al menos la sensación de nerviosismo le brotaba como una pelota en la panza, la imaginación actuando demasiado real para que no despertarán reacciones sinceras en su anatomía. la sensación que presiente de la ajena le rechaza la idea de cuestionar sobre progenitores, le estrecha la mano haciéndole saber que estaba allí acompañándola si lo necesitaba, una muestra de afecto que sirviera como motor a hacer lo que sintiera, ya fuera hablar o no “¿siempre supiste que eras una bruja?” era una pregunta estúpidamente pero si algo que le sorprendía “no tienes que hablar de tus padres si no lo deseas” se ataja a aclarar antes de que las emociones de jimin reactivaran en su cuerpo la respuesta de algo que prevalece como conocimiento peligroso, de seguir preguntando quizás hasta podría entender si era dolor lo que sentía u otra cosa, gran parte suya quería entenderla, hacerla sentir entendida. de momento, sabe que si se involucraba a ese nivel con jimin, ella estaría en todo su derecho de preguntar y saber sobre su propia historia. sólo abel sabía muchísimo más de lo que le acomodaba explicar, culpaba a empatía que había generado en ellos un vínculo de entendimiento mutuo, sujin sabía parte de su historia, lo suficiente como para ser siempre presente en sus días. temió que si contaba a la fémina sus tragedias familiares, la misma diera cuenta que los rumores de su aquelarre eran ciertos, y que su presencia no era más que un iban a malas noticias. “wow, de seguro eras muy popular ¿de donde vienes?” estaba haciendo demasiadas preguntas y ni siquiera dando información en respuesta “yo era la más rápida de mi curso——corriendo, claro” estupido aclarar algo que podría simplemente darse por entendido. aquella información sólo le hizo pensar unos segundos en lo fácil que era siempre huir de los problemas reales.

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ryujin ♡ sooo lucky ♡ wepick awards 2021

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RYUJIN x 2022 SEASON’S GREETINGS

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secha​:

¡no podía ser que no encontrase un sitio donde poder estar en paz! sino eran ruidos de construcción, era alguien pidiéndole que ayude u otro cualquiera tratando de matarle con agua envenenada. no quiere estar allí, las chances de que se le caiga alguna viga en la cabeza eran demasiado altas para su gusto.  es en medio de ese torrente de pensamientos que no paran que se choca sin querer con contraria, pero ni alcanza a quejarse cuando pestañea un par de veces, viendo que escena a su alrededor había cambiado. piensa en que ha sido propia transmutación jugando con él mas… no, él solo se podía mover uno o dos metros como mucho. eso parecía ser más lejos.  ‘ ¿dónde… dónde estamos? tú ¿qué hiciste…? ’ le acusa de regreso y la mira con el ceño fruncido, retrocediendo un par de pasos como si la otra tuviese la peste. en medio de eso es que tropieza con raíces de árboles en el suelo, cayéndose al suelo. ‘ ¡¿por qué me trajiste aquí?! ’ asustadizo, imposible que no imagine lo peor. ‘ eh  — —  ¿¡me vas a matar porque se me fue la mano con la cerveza el otro día?! ¿acaso te dije algo y me guardas rencor? no seas tan- tan… tan ¡vengativa! ’ 

“¿yo?” inquiere realmente sorprendida por el descaro de la culpabilidad trasladada, emociones fuertes se comparten a ella y el tono de su voz se iguala al ajeno, caída fue nada más y nada menos que al lado del opuesto. al dar cuenta de ello, debe gatear un poco sobre el pasto para recuperar un poco su espacio personal. palabras continuas que brotan del contrario la hacen confundirse. no podía haber sido ella, no tenía ese poder tan entrenado, poca atención le daba, ¿era posible? ¿podía hacerlo si quería? quizás su anhelo de escapar se había traducido en una utilización indebida del mismo. ”¿qué? ¡no!” intenta defenderse “tú eres---el que hace todo esto, no tengo más alcohol” expresa tratando de negar por completo que aquello fuese su responsabilidad “¿por qué me sacaste de allí? ¿acaso quieres pasar tiempo conmigo?” inquiere sabiendo que aquello era descabellado, pero las emociones que recibe son las que la hacen reaccionar de esa manera “devuélvenos, por favor” pide, pero su pedido es débil. el silencio acuna sus oídos. la brisa que, aunque acarrea un poco el olor a quemado, acaricia su piel. leves cantos de pájaros que invitan a una serenidad que no encuentra negativa. quizás era la sorpresa del cambio repentino, la inconsciencia de un deseo que se cumplió. allí en el pasto, el verde claro, el sol que intentaba salir de las nubes, la naturaleza y la calma. no sabe cuánto tiempo lleva callada como para darse cuenta que se acomodo sobre el suelo. “no sé si has sido tú, pero gracias” dice por fin “no toleraba más estar allí abajo”

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dizvn​: / flashback

historia hace que las pupilas se desvían del rostro contrario, no sólo porque busca priorizar un ambiente donde se sienta cómoda y presiente que con el contacto visual no lo logrará, pero también fijarse en otro lugar le hace más fácil la tarea de procesar palabras ajenas. “siento mucho que hayas tenido que pasar por todo eso.” aunque no profundiza en la vivencia, empatía permite sentir a flor de piel vaivén emocional. “pero — también me alegro que hayas salido de ahí si no te sentías bien, no era tu deber cambiar un destino que no te correspondía.” ofrece una sonrisita, atreviéndose a posar la diestra sobre la de la más chica. “también se puede elegir a la familia, ¿sabes? en realidad eso siempre me ha hecho más sentido que simplemente adecuarte a la que te tocó.” expone perspectiva, sintiéndose conmovido con el ofrecimiento a tal grado que no sabe que hacer, o decir. “¿estás segura? no quiero que tengas pesadillas por mi culpa.” carraspea, tomando al muñeco de peluche con una mano y con la libre hace que los dedos pasen por los bordecitos. “yo —” no lo sabe con exactitud, simplemente no había espacio para él. “mi familia es pequeñísima y me amó demasiado, pero después, no lo sé.” el trabajo abrumador, la muerte de su abuelo, las drogas. recapitular cada momento hace que inconscientemente termine abrazando a su nuevo amigo. “sentía que no tenía ningún motivo para quedarme en casa y vivir sin reglas era muy tentador.” suelta finalmente, dejándose caer en la cama con los párpados cerrados. “luego todo empeoró en lugar de mejorar. aunque… si llegué aquí no estuvo tan mal.”

eleva los hombros, como si no tuviera más que aceptar su destino cuya fortuna no era la mejor. ella no había elegido en absoluto nada de lo que le sucedió, aún le costaba amigarse con la idea de sus poderes, estaba mejor, se sentía más a gusto y abel era parte de esa ayuda. sin embargo era muy difícil no sentir a veces que sus poderes eran más una carga que una bendición. poco podía percibir de algo positivo que hubiera salido de los mismos, quizás aquellas aventuras con jimin. el contacto le lleva a buscar mirada ajena en sorpresa, y la expresión muta a una más ligera, agradeciendo en silencio aquella muestra de afecto. a pesar de haber usado fuerza con el contrario, seguía allí, le había perdonado y eso era algo importante para quien no sentí que tenía demasiadas personas con las que contar. “¿de verdad?” la idea de poder elegir a su propia familia le daba un poco más de ilusión, pero ¿acaso era tan fácil como desplazar a quienes deberían haber estado cuando no lo estuvieron? ¿era como elegir borrar de la memoria a cuyas figuras marcaron su vida en el desastre que era? los adultos siempre habían hecho y deshecho lo que quisieron con su salud mental, con su estabilidad ¿era posible salir a flote después de vivir aquellas situaciones? mil preguntas atentaban con la parsimonia momentánea. “claro que estoy segura, te protegerá como me protegió a mi” mira al muñeco con una sonrisa nostálgica “cada noche que papá regresaba borracho golpeando muebles por haber perdido, cada vez que mamá se iba a buscarlo, cada vez que se peleaban, siempre estuvo allí para mi” detalla sin darse cuenta de la cantidad de información que estaba dando. lo mira mientras habla, arruga el entrecejo mientras intenta hilar las explicaciones con aquellas emociones que llegan del contrario. quizás esa empatía que compartían era lo que les servía para entenderse mejor, era una de las pocas veces que realmente se sentía comprendida. sube la pierna al colchón y acerca la rodilla a su rostro, sosteniendo su cabeza en la misma, mientras le escucha. “¿alguna vez----pensaste que quizás nuestros poderes--?” silencio, intenta pensar, formular una frase coherente, hacerse entender con la voz “¿que las personas abusaban de nuestro poder para---usarnos?” siempre tuvo esa duda, quizás era ella demasiado ingenua y se dejaba llevar demasiado “como si, sentir lo que el otro hacía que las cosas tuvieran razones más fuertes que las de nuestra propia libertad” estira la mano buscando acariciar a lyra para calmar un poco la ansiedad que le brotaba de esa idea.

[jj-aex]

había avisado a sujin que se iría de visita al circo, no porque la opuesta reclamase dicha información, sino más bien porque adoraba hacerla partícipe de su vida, de sus días, saber que a alguien le interesaba al regresar, eso era lo que siempre destacaba de la mayor. no dice demasiado al llegar, simplemente se siente un poco pequeña ante la inmensidad de la carpa, allí donde tantas maravillas eran vistas, tantas piruetas, tantos trucos, tanta magia natural.como siempre, se deja llevar por la contraria, ya acostumbrada al agarre y al calor de sus falanges con las suyas.  “woah” murmura sorprendida, si la inmensidad de la misma tenía no sólo aquella impresión desde afuera, por dentro era aún mayor el asombro. “¿cuántas personas entran aquí?” pregunta deteniendo un poco sus pasos a culpa de la intención de querer apreciar más el lugar, por lo que siente el tirón de la mano ajena obligándola a caminar. “¿y por qué te uniste al circo? ¿tu familia era de aquí también?” daba cuenta que poco sabía de jimin, y trataría de usar ese tiempo para conocerla más. 

starter privado  ♡  @jj-aex​

dudas respecto a invitación comenzaron a surgir en cuanto muchacha estuvo en el lugar, aun así, sonrisa no ha disminuido tamaño, ni se ha permitido mostrar pequeña incertidumbre respecto a presencia contraria, se esforzaría por mostrarle el lado agradable del circo. ‘ me alegra que estés aquí, no hay tantas personas ahora, así que será algo realmente tranquilo. ’ concede, ha visto unos cuantos compañeros, mas número es considerablemente bajo. ‘ ven, estoy segura que te encantará. ’ o al menos, espera que sea el caso. mano aferra la femenina antes de buscar adentrarse en la carpa, guiando a compañía hacia el interior. ‘ ten en cuenta que se ve mucho mejor cuando estamos por tener un show. ’ luces, música y ambientación creaban la verdadera magia alrededor de ellos.

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se sorprende al escuchar dicho estruendo, buscando entonces la fuente de aquello, esperando que fuese nada más que nuevos escombros que caían ante la falta de soporte por las zonas quemadas, la información perdida de aquellas paredes que solían estar. “¿vilho?” inquiere dudando si era o no él, pero de cualquier forma acercándose a verle “¿estás bien? ¿te lastimaste?” pregunta atendiendo a sus acciones sobre su extremidad “¿quieres---quieres que llame a alguien?” se agacha a su lado intentando buscar la razón de su dolencia, ya que no había visto toda la escena como para poder servir de ayuda. sus dedos se estiran sobre sueldo sucio para quitar del plano restos de aquella figurilla que ya no era, volviendo a ser material amorfo cuya relevancia ni siquiera podría recuperarse, tal como todo el edificio. 

desde que noticia había alcanzado canales auditivos se ha decidido sobre nulo interés en brindar apoyo, pero como suele suceder entre terminales nerviosas contrariadas, ha terminado en sitio de catástrofe, arreglándoselas de poner cereza sobre días atestados de sensaciones extrañas y malos presentimientos al perder equilibrio sobre una de las escaleras de mano. ‘ ugh, ahórrate los regaños, no le pasó nada a la figurilla. ’ suelta refiriéndose a figura de cerámica causante de embrollo, adelantándose a propósito que supone qué hay detrás de presencia, no molestándose siquiera en confirmar identidad, con atención y dígitos concentrada en inspeccionar tobillo, el cual segundos atrás juraba tendría que encontrar a otro bruje para solucionar.

[jj-aex]

“no mucho” explica tomando asiento a pesar de que la opuesta ya no se encuentra allí “necesitaba alejarme un poco” explica sin dar demasiado detalle “¿qué hacías?” inquiere señalando con la cabeza aquello que la opuesta se encargó por eliminar, pero la curiosidad le vencía por sobre todo, al menos intentaba buscar algo que pudiera distraerle de momento. “¿conocías el lugar?” le pregunta observando al punto en cuestión, las mil preguntas que tenía se enredaban con la falta de conocimiento del mismo, falta que su imaginación tendría que encargarse de reconstruir.

sobre banquillo no lejano de punto de reconstrucción, no le inmutan diminutas gotas comenzando a humedecer hebras y prendas. mente elevada entre nubes, y no es hasta que ligera precipitación cesa que avellanas se abren para visualizar alrededores, inevitablemente sobresaltandose leve al encontrarse con alguien más. ‘ ¿cuanto llevas ahí? ’ busca hacerse una idea del papel que ha hecho frente a tercere, al momento abandonando sitio y suela yendo a borrar parte de marcas en tierra. ‘ nos dara algo se tiempo para seguir, puede que en media hora las nubes decidan irse por su cuenta. ’ y espera que consigo, parte de la atmósfera pesimista.

[jj-aex]

levantando unas figuras de piedra, o mejor dicho restos de las mismas, se detiene observando al recién llegado. ojos curiosos que se posan en el contrario mientras intenta no hacer preguntas y permite que hable. “¿para mi?” mira a sus costados sin encontrar nadie más tan próximo como para que la confusión cruzara un nivel de vergüenza que la tuviera yéndose del lugar sin siquiera dudarlo. “b-bueno, gr-gracias” debe guardar los restos de las figuras en aquella bolsa que le acompañaba. golpea las palmas entre si, sacudiendo el polvo, y al no conformarse, las arrastra por la tela de su pantalón, confirmando que estaban, en apariencia, limpias. aferra la botella con la diestra y la abre con la zurda, bebe un sorbo corto, tímido “no---no creo que mi ayuda pueda ser considerada como trabajo duro” intenta dar en cuenta la realidad a la que se enfrentaba “¿quieres un poco?” ofrece en regreso. 

“Oye–” comienza con voz suave, y después de aproximarse con sumo sigilo hasta aquella figura. Sólo cuando la cercanía se lo permitió, Lauren elevó una botella de agua fría que acercaría hasta el primer fragmento de piel expuesta que encontró. “Te vi trabajando duro y he traído esto para que te hidrates. ¿O hubieras preferido algo diferente?”

[jj-aex]

intentaba mover un banco que estaba atorado a por unos escombros de piedras, pensó que sería pan comido pero no estaba realmente funcionando, intentaba demostrar que su permanencia en la escena era útil, quería ser útil. “creo que---” empuja sin lograr mover nada “puedo” habla con esfuerzo en su voz “mover---esto” realmente lo intenta pero objeto terco ni se asoma a salir de su lugar. gruñe en sus esfuerzos hasta que el cuerpo desiste “¿se movió?” mira al opuesto buscando su aprobación. 

“  hey, ¿necesitas ayuda con eso?  ”  le pregunta a la primera persona que piensa que parece estar ayudando con la reconstrucción de galloris. tampoco se detiene a dar explicaciones del repentino cambio en su actitud.  “  sé que no soy el sujeto más fuerte del mundo, pero seguro que te puedo dar una mano.  ”

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“sólo quería avisarte que acabas de pisar algo que parece lodo, pero puede---no ser lodo” podía ser un animal calcinado, sus heces, algún cuerpo, no llegaba a ver bien. 

‘ ¿y tú qué me ves? ’ espetó de mala gana, sin importarle a quién perteneciera la mirada que identificó como inquisidora. ‘ no estoy en mis cabales —— me llegas a dar una orden o a reprocharme por qué no estoy trabajando y te juro — te juro que no te va a gustar mi respuesta. ’