libr4sc - Tumblr blog

[libr4sc]

[libr4sc]

Día 1: Describe tu personalidad.

Dejando de lado la reflexión filosófica sobre el ego y la identidad, siento que igual definirme es difícil en sí mismo. Siempre he sido naturalmente amorosa, e inevitablemente lejana. Pienso rápido en que decir, y en que ese algo sea siempre gracioso, y en que no lo haya dicho nadie más. Con toda intención cálida, amable y amiga queriendo ser confidente. Expresiva con el rostro, el cuerpo y la mente, enérgica si me gusta el lugar. Soy cambiante, distinta, despreocupada y melancólica. Soy artista, m��sica y escribo lo que siento desde que aprendí a escribir. Amante de escribir y las palabras, las canciones cantables, los acordes en séptima y los poemas sensibles. Me falta vergüenza para bailar, enamorarme y decir lo que pienso. Contradictoria, relajada, sensible, amante de todo lo que se vea bonito y haga sentir. Cantante, romántica, ilusa, apasionada, sexual y escapista. Mentirosa en pro de la ilusión, escritora, izquierdoza, diría mi abuela: malvestida, feminista exrapada, cada día menos del extremo y más del equilibrio. Ascendente en libra, luna en aries, y, más relacionado con lo que escribo, sol en sagitario. Esoterica que cree en cosas que no puede ver pero puede sentir, creyente del amor y del destino, de la luz y la paz. Vidente de todas las señales, los símbolos y los significados. Azul, por ahora. Empática que evita el conflicto pero que ama el enfrentamiento, la verdad después de la mentira. Hábil lectora del otro y de mi misma, analítica desde, por y para el corazón. Ruidosa, con la risa contagiosa de siempre, libre y con un poco de miedo, desafiante. Incómoda en la tristeza, el pesar y el dolor, que al final pongo aquí, en las manos que escriben por mi. De fiesta, por fuera, en familia. Sin intenciones de enseñar o salvar. Imprevista, improvisada, cada día menos impulsiva. Poética, antipoética, a favor de todo lo que esté bien. Ansiosa sin la virtud de la paciencia y la confianza en los procesos, entiendo sin justificar y acepto sin aceptar. Directamente honesta e indirectamente emocional, avergonzada de lo que no puedo decir y demasiado consciente de lo que sí. Aceptadora compulsiva de los errores propios y poco detallista de los logros mismos; una impostora, quizá. Impostora llena de suerte y diría mi abuelo, avispada. La que habla cuando nadie más habla, quebrantadora del silencio, señaladora del elefante en todas las salas y a veces, el elefante de todas las salas. Feliz, agradecida de la experiencia humana y al final, humana.

[libr4sc]

Suerte

Inevitablemente, la suerte me acompaña. Aunque no sé hacer nada del todo bien, siempre ando perdida y nunca sé que hacer, al final, todo se hace, todo sale bien. Aunque no estudio, no planeo, no madrugo, no presto atención, no me gusta, no quiero, al final, todo sale bien. Hay un pequeño impulso que al final, me empuja hasta la linea de meta, aunque llegue en último lugar.

Me preocupa cuando la otra gente no conoce de toda esta suerte que yo sí, y piensan que sí sé, cuando no. Me asusta, no me gusta que me sometan a más de una prueba porque tengo miedo de que la suerte me falle. Me dice quien me conoce que tengo una gran mente, y me cuesta creerle, porque yo creo que es la suerte.

[libr4sc]

Siempre he querido ser dulce y tierna, ser como una margarita frágil que mueve el viento, pero siempre resulto tosca, brusca, dura... Siempre he querido ser flor cuando siempre he sido piedra.

[libr4sc]

Sentir [1]

Me guío por lo que pienso y no por lo que siento, o eso me gusta decirme a mi misma. He aprendido que lo que "siento" no necesariamente es lo que siento en realidad. A veces lo que "siento" viene de la herida, del ego, de las creencias, del trauma, del apego, de lo precario y de lo vacío. Por eso no confío en lo que siento, pero a veces confío tan poco que se me olvida que está ahí.

Me he enseñado a correr, a huir, a recurrir al placer y al olvido. Hice de mi cuerpo un templo mentiroso (y) compulsivo, al que le duele todo pero no le duele nada, que no sabe dónde está ni cómo está ni para qué. Puedo encontrarme a mí misma ocultándome lo que siento; lo que realmente siento. Me miento, me engaño, me oculto y finalmente, me castigo.

Sentir es dificil cuando es tan intenso y tan incómodo. Durante mucho tiempo mis nervios terminaron por canalizarlo todo en rabia, en ira, en fastidio, en rebeldía, explotando, pero ahora parece que solo implosiono. Conozco la felicidad y la rabia pero pareciera que todavía Tengo que leer fichas bibliográficas sobre "emociones incómodas de las que tengo que dejar de huir".

Y es que a veces el refugio está bien, supongo; a veces me duerme por días, a veces tiene ojos y lunares bonitos, a veces me hace perder mucho el tiempo, a veces me hace sentir muy bien, a veces me hace sentir muy mal, a veces es el recuerdo de su voz, a veces el antiguo camino a casa, a veces el tiempo que mato y que me mata de vuelta, a veces es una cama ajena en la que quiero dormir por siempre y nunca volverme a ir, a veces me hace querer irme, a veces me hace querer quedarme, pero siempre, siempre, hace que me olvide de que la vida fuera de él existe, y la sobriedad que conlleva quedarme allí.

[libr4sc]

con las noches me vas a hacer falta

[libr4sc]

Escribir

Siempre me ha gustado escribir. Recuerdo mucho cuando en transición me emocionaba escribir frases completas, tanto así, que aun recuerdo la primera frase dictada de largo que escribí, fue algo tipo "La paloma vuela alto", algo así, había una paloma. Desde entonces no hacía más que escribirle cartas a mi mamá del estilo "Mami te amo con todo mi corazón", que sabía terminarían pegadas en la puerta de su cuarto. Mi mamá siempre ha sido mi fan #1, así como yo la de ella.

Mi primer intento de cuento, por allá como a los 6-7 años, tenía como protagonistas a las hadas de las películas de Tinkerbell pues eran mis películas favoritas, no recuerdo nada de la trama pero sí todo el esfuerzo que puse en la cartilla de papel en que la escribía, con stickers y todo. Para quinto de primaria ya me gustaba escribir historias un poco más maduras, recuerdo mucho una en específico en la que un vagabundo y un ladrón se hacían amigos, conseguían trabajo en una panadería y se iban a vivir juntos (and they were roommates). En este universo alterno existía una crisis de salud pública crítica, por lo que médicos y científicos, abotinados en protesta contra los gobiernos del mundo, empezaron a experimentar con humanos bajo su propia ética anti-ética, secuestrando personas en estado de vulnerabilidad para ello. En resumen, los dos amigos (especiales) terminan siendo víctimas de esta problemática, siendo secuestrados por un grupo de científicos armados los cuales inyectan químicos en su cerebro, conduciendolos a un estado de trance alucinatorio en común donde experimentan una realidad en la que son contratados como espías del gobierno para salvar el mundo. El plot twist de la historia es revelado al final, donde se desmantela como todas sus aventuras como espías fueron solo alucinaciones producto de la experimentación. Como último, mueren, y el destino del mundo queda al azar.

El mismo año, y con el propósito audiovisual de hacer el mejor corto jamás escrito y grabado en la historia de los colegios bogotanos femeninos del norte, escribí "En busca de mi hermana perdida", la historia de dos hermanas que, por circunstancias de la vida, ya entrando en la adolescencia, terminan por tomar caminos distintos en la vida y jamás vuelven a tener contacto a pesar de todo el amor y admiración que sentían mutuamente. Años después, el mundo (dividido en 5 reinos, el del agua, fuego, tierra, aire y hielo) entra en guerra, y al enlistarse en las tropas guerreras de su reino correspondiente, las hermanas terminan por encontrarse en pleno campo de batalla, donde la menor descubre que la persona a la que acaba de clavarle una lanza en el pecho, es su hermana, a la que llevaba buscando tanto tiempo. Esta historia la escribí en guión, la imprimí y puse a todo el parche de 5A a aprenderlo mientras yo dirigía y grababa, todo en los descansos, en un tipo de castillo de piedra perfecto para el aura de la historia.

Cuando entré a 7mo en 2016 ocurrió el milagro de mi vida y conocí a las amigas que me acompañarían toda la adolescencia y los primeros pasos de la adultez. Este fue el año en donde la promoción descubrió Wattpad y de repente estábamos todas haciendo venting de nuestros traumas en supuestos libros con supuestos personajes que no eran más que todas nosotras tratando de sacar lo que ahora nos perseguía en el inconsciente. Y yo no era la excepción, ese fue el año en que empecé a indagar y descubrir dentro de mi propia identidad y orientación sexual, y claro, lo que correspondía era escribir una historia homoromántica entre dos chicos que para nada me representaban a mí y a la chica que entonces me había hecho dudar de mi propia sexualidad. Dalas y Lance eran los protagonistas de 2 A.M, los cuales eran vecinos y casualmente se conocían en la carrera de derecho. Dalas, que era yo, tenia el pelo de colores, era skater y vivía solo con sus amigos, con los cuales tenía una banda de lo que ahora sería indie rock alternativo otaku aesthetic, mientras que Lance era un niño de casa, con el pelo blanco y los ojos verdes, que tocaba el piano y vivía con su padre y su hermana a la cual odiaba. Los dos querían dedicarse a la música pero por motivos familiares terminaron en la casualidad de conocerse en un aula de clase así, destinados a enamorarse y dedicarse los dos al final a su pasión y aquello que amaban. 2 A.M no tenía muchas vistas pero todas mis amigas estaban al pendiente, lo cual llenaba mi alma escritora y me sentía sagradamente cada 2 días a escribir aunque fueran 2000 palabras.

Empecé a escribir poemas, a leer poesía, a comprar libros con la plata que me daban mis padrinos de cumpleaños. Empecé a leer a Murakami, a Pizarnik y cantidades absurdas de fanfics Vkook en Wattpad, la trilogía de Daughter siempre vivirá dentro de mi. Nunca dejé de escribir, y con el tiempo los poemas se hicieron canciones, las tristezas se hicieron textos y los cumpleaños de mis amigas la excusa perfecta para dar todo de mi en las palabras más hermosas que pudiera escribir. Escribí alguna vez para un trabajo de español una historia sobre cómo el cielo (Yoongi) y el sol (Jimin) se enamoraban y solo podrían estar juntos si el sol atraviesa el mar para por fin descansar con su amado. Escribí mil décimas y presenté mis primeros textos largos al profesor de español alto, delgado, vegano y calvo que tenía un tipo de fe muy especial en mi. Para 2019 escribí mi primera obra de teatro (la cual terminó en desastre) y publiqué mi primer libro de poemas y cositas en Wattpad. A día de hoy aun me llegan notificaciones de gente guardando esos libros de intento de poesía en sus listas de lectura y releyendo todo aquello, me sigue gustando un montón. Mi favorito habla de los amantes, “El momento”, donde hablo de como me es, desde siempre, necesario morir de amor. A veces más que textos eran cartas así que eso hice desde entonces, escribir siempre en una carta.

Creo que le he escrito una carta a cada persona que he amado, y que he odiado, y que me ha dado igual. He profesado mi amor, mi odio y mi perdón. Escribir se hizo para mi el medio por el que expreso lo que creo que soy, lo que creo que siento, lo que creo que pienso. Todo lo que no me sale de la boca me sale de las manos cuando escribo esto, todo lo que no digo lo escribo, escribir se ha hecho necesario para mi mente, para mi corazón y mi alma; no puedo parar de escribir, pareciera que tengo mucho por decir. Solo escribiendo aclaro mi mente, tomo decisiones y saco de mi todo lo que hay por sacar. Escribo amor, tristeza y todo lo que se pueda sentir. Amo los poemas de poetas argentinas en los 50’s, la poesía de notas del celular, los tuits retuitibles, los libros espirituales, a Borges, las canciones de November Ultra y todo lo que exprese con las palabras exactas eso de lo que mi cuerpo huye sentir.