Tumgik
midamnatiomemoriae · 2 years
Text
Estoy huyendo, sobreviviendo semana a semana; porque sobrevivir día por día a veces se vuelve muy pesado. Me duelen hasta las pestañas y mis pesadillas se hacen menos recurrentes pero el insomnio no se va. Sigo sin confiar en nadie mas que mi misma y la ansiedad que me causa mi futuro empeora cada vez que me siento sin salida. No sé que estoy haciendo con mi vida académica y mi vida laboral también es debatible.
Vivo cansada, exhausta, medio muerta; ni aquí ni allá.
6 notes · View notes
midamnatiomemoriae · 2 years
Photo
Tumblr media
75K notes · View notes
midamnatiomemoriae · 3 years
Text
Mi mamá toda la vida me ha dicho que los males estomacales vienen del corazón, y toda la vida lo he creído y confirmado. Cansada, triste, desolada, abandonada, sin hogar, decaída, con quince libras menos y medicada para varios males.
Cambiando de casa en casa, sin rumbo fijo, sin techo seguro, siendo prácticamente solo mi gata y yo. Nunca en mi vida me he sentido tan perdida y nunca en mi vida mis vicios han estado tan activos.
Tengo la costumbre de tomar sin compañía y a escondidas, pero hace poco gocé la libertad de llorar abiertamente en un restaurante, tomando vino tinto como si el mundo se acabara mañana y platicando con gente con la cual nunca me imaginé contar mis traumas.
Lloré, lloré, conté, y lloré aún más, hasta quedarme sin lágrimas, hasta que saqué el último suspiro que tenía. Regresé a una casa que de momento es mía, a acostarme, mareada, cansada de llorar, a dormir un rato antes de purgar lo poco que había entrado a mi sistema horas antes.
Y es que últimamente, como diría mi mamá, me ha costado tanto digerir las cosas que he perdido peso y lo que como lo vomito. Tengo a todos diciéndome qué comer, cuánto, que parezco huesos, que no haga ejercicio, a una psiquiatra pidiéndome estar bajo supervisión pero yo no veo el cambio. Me siento igual. Igual de mal, sí, pero igual al fin. Y me veo delgada, sí, pero no al grado que todos comentan.
Honestamente, solo me siento muerta por dentro y sin sentido. Mi medicación ya lleva tiempo y siento que no hacen nada más que sacar el poco dinero que cae en mi cuenta por un trabajo que me desespera hacer todos los días.
Siento que he estado jodida antes, pero nunca tanto como ahora.
Estoy hundida.
1 note · View note
midamnatiomemoriae · 3 years
Text
this is not a fucking joke
Se hace uno arquitecto construyendo, músico componiendo música; igualmente se hace uno justo practicando la justicia, templado practicando la templanza y fuerte practicando la fortaleza. 
Bajo los principios de la ética nicomaquea, soy escritora porque es lo que hago gran parte de mis días, gran parte de mi vida, durante los últimos años de mi existencia. No sos todo lo que hacés, pero lo que hacés se vuelve parte de quien sos. 
Yo nunca me callo. 
Soy fanática del silencio y la comodidad que él aporta pero mi vida no es mi vida si no tengo el beneficio de usar mi voz y letras para expresar lo que en mi cabeza ya no cabe y lo que me agobia el corazón. 
Callé por mucho tiempo, y esto honestamente es de las cosas más crudas que quiero escribir. No quiero aprobación, no busco más lectores, no busco generar empatía de personas ajenas a mí, mucho menos de conocidos que nunca estuvieron al tanto de la situación.
Esto no lo hago por nadie más que no sea por mí, porque de callarme un día más puedo explotar y para sanar necesito fluir.
Esta no es una buena historia.
Esto es una breve descripción catártica del infierno que fue mi vida. 
Me llamo Marcela. Tengo 21 años, Era estudiante de medicina veterinaria hasta junio de 2020 cuando decidí dejar en pausa mi carrera y buscar un trabajo a tiempo completo para poder independizarme económicamente e irme de mi casa.
Fui golpeada, manipulada y abusada en mi hogar durante veinte años de mi vida hasta que tomé la decisión de mudarme a escondidas. Dejé más de la mitad de mis cosas, mi ropa, zapatos, dejé mi cama, mis perros, mi carro y al único familiar que considero familia con tal de ahorrarme más años de trauma emociona, psicológico y físico. Dejé mis estudios también. 
Me tocó despertar por la madrugada y sacar las pocas cosas que cabían en mochilas o bolsas de basura para que nadie notase que yo estaba planeando irme, y así, evitar repercusiones. Escondí bolsas con ropa, mis libros en cajas y un poco de comida de emergencia en casas de amigos cercanos que mantuvieron el secreto de mi mudanza por más de un mes. 
Tengo ataques de pánico cuando recuerdo las situaciones que viví en esa casa y un remanente de paranoia por las circunstancias en las que crecí. Tuve problemas de alcoholismo y abuso de sustancias, diagnóstico de depresión, ansiedad, trastorno de pánico y tremor esencial hasta que descubrí con ayuda profesional que eran síntomas provocados por el abuso que se ejerció en mi durante tantos años. 
No me agrada el contacto físico sin previo aviso, soy extremadamente sensible a sonidos fuertes. Aprendí a caminar en la oscuridad por las noches para que nadie supiera que estaba despierta. Tengo insomnio y tiendo a pasar hasta dos días o más sin dormir. 
Tengo una caja fuerte.
Ningún ansiolítico funciona en mi cerebro. Ya he agotado toda una familia de antidepresivos y lo único que me detiene de adquirir más vicios de los que ya tengo es mi falta de dinero.
Repito, esto no es una buena historia. Tampoco una historia de superación, inspiración o motivacional. Mi vida ha sido un infierno en su mayoría, y he sufrido gran parte de ella. Me siento herida, abandonada, dañada, y tengo que mantener mi cabeza ocupada para evitar recordar pasados que siguen haciendo estragos tanto en mi cuerpo como en mi cerebro. Soy una profesional en el arte del calmar mis ataques de ansiedad pero con frecuencia es con métodos poco ortodoxos. No soy un ejemplo a seguir y no me agrada ser llamada como tal. No soy una superviviente, no soy una líder, soy una adulta que vivió tanto abuso tantos años que ahora apenas sobrevive día a día con lo que mantiene en su cabeza. Lo que superé, y lo que hice para huir no es de admirar, apreciar o aplaudir, es para temer; para llorar, para gritar, para enojarse y molestarse que nadie nunca se dignó a detener lo que me estaba sucediendo hasta que yo misma intervení.
Repito, esta no es una buena historia. Y no soy una heroína en mis propios ojos. Fui víctima de un trato que nadie merece, y a la fecha, sigo huyendo de demonios del pasado que quieren seguir dañándome a pesar de estar físicamente lejos. 
Estoy exhausta, desmotivada, harta, cansada y desesperada de pelear por mi vida. Quisiera decir que esto me hará más fuerte, o creerle a la gente cuando dicen que me volveré un ejemplo a seguir más adelante para personas como yo, pero desde mi punto de vista, estoy desgastada. Soy una carcasa, un cadáver con pulso remanente, el desastre que queda después del huracán, y no sé como componerme. 
No sé que camino tomar, apenas sé si mis medicamentos funcionan y cada trago que tomo me recuerda a cuando no podía parar. Me veo y no soy yo, no reconozco esa cara ni esa mirada en el espejo, no soy yo. No sé quien era tampoco. Los días se me van tan rápido que apenas me doy cuenta, cumplí años y nunca me sentí tan muerta. No hablo lo que verdaderamente siento y pienso a mis terapeutas porque no quiero ser internada pero vivo al borde de un abismo del cual sí deseo lanzarme.
Esto no es una buena historia. Es una maldita pesadilla, historia de terror, cárcel del siglo XXI, tortura medieval y castigo impuesto.
Vivir, para mí, con los recuerdos del pasado, es una constante herida abierta a la cual el tiempo solo se encarga de ponerle sal en vez de sanar. 
0 notes
midamnatiomemoriae · 3 years
Text
del odio al odio, del odio al rencor
De ciclos y emociones, de emociones a desensibilización. De amar a odiar, de odiar a amar y el ciclo se repite mil veces de manera compulsiva hasta que te explota la cabeza. O el cuerpo, o la lengua, o la boca, o algo más adentro de ti.
Y solo sentís piel caliente y cuello ardiente,  uñas por clavar y dientes por hincar,  el grito te lo ahorrás,  y el ciclo empieza otra vez. 
uno, dos, tres,  acá estás otra vez, nauseabunda, con huesos consumidos, los pulmones hechos polvo y  las manos ya cruzadas.
Odio, odio, odio, te odio, pero ya no,  aquí, allá, aquí otra vez, allá tal vez,  hoy no, pero mañana sí, hoy sí pero ayer no.
uno, dos, tres,  ya no pertenecés aquí, y tu cabeza ya no está en su lugar, aunque siendo honesta nunca has estado en tus cabales,  siempre al borde de un extremo, siempre pidiéndole al ser supremo
por salvación, por emoción,  por confort o solo por piedad, que te escuche, que te oiga,  que te salve de tu impulso te das cuenta que de todos tus personajes vos sos tu favorito,  y tu dolor se vuelve arte (o así creés, nadie te lee, nadie te ve, no tenés público, no hay quien alabe, no hay crítico porque no hay que criticar)
te volvés escritor pasivo, y estudiante, y mujer. y amiga, hermana,  y todos tus roles se van a la mierda, y todos esperan tu compostura, que sos vos la que mantiene la cabeza y la calma, sos vós la que rescata a todo y todos del caos y cagadal que se arma a pura costa tuya,
y te hundís, con lo tuyo y con lo nuestro,  con lo de ellos,  con los pies morados sin circulación, con taquicardia y manos temblorosas. ¡oh, tu sello personal!
tu temblor ya no es de amor,  ni de placer,  ni de emoción, solo traición,  abismo,  enojo,  ira,  rabia, de la que te mueve, te agobia, te acosa, te habla al dormir, te susurra al oído en la ducha y no te abandona ni muerta, repitiendo lo mismo, mismo, mismo, mismo,  todos, todos, todos, todos, todos, los santos días.
una, otra, otra, otra, otra, puta vez.
hasta que dudás de tus cabales,  y tus ojos tampoco los reconocés en el espejo,  y hablás con gente que ya no está,  y huís porque si no hay escape de vos, que haya escape de los lugares tan malditos 
y te da risa,  y te das pena,  y pensás,  tantos meses, tantos años,  arreglando porquerías y desastres que no te correspondían,  con la pena de agradar y de valer la pena,  y que tu valor no se redujera. y que fueras el puto ejemplo de una hija perfecta, de la esposa idonea,  de la estudiante estrella,  de la nieta que nunca habla,  de la hermana que soporta todo golpe.  de quien pone la frente y cara frente a todo,  y que dice que sí siempre, porque claro Marcela siempre está,  Marcela siempre arregla todo,  Marcela nunca dice que no,  porque le da pena,  por pendeja,  por dejada,  por idiota
Y empezamos otra vez,  hablando con espejos,  o con gente bajo tierra,  o en voz alta cuando nadie escucha,  o con el retrovisor del carro,  con mi perro en el copiloto,  de pie en las escaleras,  o agobiada en el ascensor
una, dos, tres, va de nuevo, perderme un par de semanas,  par de meses, par de años, no saber quien soy ni en donde estoy,  huir de mi cabeza y hasta de mi boca,  ahogarme en más que un vaso de agua observar extraños,  caminar en senderos sin gente, decirme “todo está bien”  con los hombros agachados,  y un corazón poco consciente odiando donde estoy parada,  y donde mis pies pisan,  donde mis manos tocan, y a donde mi cabecita va
sin saber donde ser,  donde estar, donde vivir
sintiendo que nada me pertenece, y que a nada pertenezco yo, que ningún lugar es mi lugar, que el sitio no es mi sitio, y que mi casa se vuelven dos piernas, dos brazos y mi propia cabeza
que pierde su lugar,  y su coherencia, que se apaga cuando la emoción se desata, y apaga mi sistema por meses
reiniciando,  cuando aparece mas enojo, decepción,  y un par de lágrimas, cuando llamo a grito suelto a mi versión que sí podía, sí aguantaba, sí perdonaba
para que agarre las riendas y solucione todo,  para que enmende lo que está pasando,  y le pido a la ignorancia que me tome por última vez en sus brazos, y me liberé de lo que sé, porque tanta carga no la aguanto, y mi cuerpo cada día más cansado solo pide descanso
porque solo escribo cuando puedo,  no cuando quiero,  porque solo abro la boca cuando me apago por completo,  porque mis arrebatos me dominan, y ya no puedo,  ya no quiero,  ya no debo,  ya no haré,  ni diré, ni moveré
una, dos, tres,  vamos otra vez. sin saber dónde quedé, sin saber cuando vendré,  o donde estoy,  o donde dejé,  a la que sí podía,  la que quería,  la que debía,
porque no estoy,  y esto no es pantalla pero sí carcasa,  remanente,  residuo, descarte,  parte
una, dos, tres,  vamos otra vez, enterrando todo atrás,  con más rabia en las venas, 
llorándole al viento,  y a la lluvia,  pidiéndole al sol que seque más lagrimas de las que puede,  pidiéndole que me regrese a otras épocas
una, dos, tres,  esto se está repitiendo otra vez,  y no tiene sentido, y desespera,  porque está en circulos,  y no logro llegar a lo que quiero, y se vuelve metáfora,  para un dolor que sigue ahí
uno, dos, tres,
 va de nuevo. 
4 notes · View notes
midamnatiomemoriae · 4 years
Text
21 años de soledad
Y de no tener idea de qué hacer con mi futuro o decisiones de vida. Esto ya parece más un diario pero siempre la idea principal de la escritura ha sido funcionar como un medio de expresión al cual sacarle provecho; y hoy, a eso vengo.
Hoy declaro, confieso, acepto, y lo grito a los cuatro vientos, que no tengo ni la más mínima idea de lo que estoy haciendo con mi vida; mucho menos con lo que quiero para mi futuro, mi presente, o como solucionar mis traumas del pasado que, cada día que pasa, se vuelven más pesados, mas intensos, y más sofocantes que antes.
Estoy hundida hasta el cuello y no sé en donde estar parada, no sé de donde aferrarme, y si de lo que me estoy aferrando no colapsará ante mis ojos dejándome vacía de nuevo. Me siento perdida, sin motivación, sin ánimos de continuar y sin ningún camino por tomar.
No tengo pasado, no tengo presente y me aterra pero motiva no tener futuro.
No pertenezco a ningún lado, o por lo menos mi sentido de pertenencia y arraigo está tan dañado que me siento como alma errante: sin rumbo, sin amor a los lugares y sin miedo de perder nada.
Y es que ya me he quedado sin nada.
Nada que me llene, nada que me haga sentir llena de nuevo, o amada, o necesitada. Me ahogo cada día y no precisamente en un vaso de agua. No tengo ni puta idea de lo que estoy haciendo con mi carrera o si siquiera quiero seguir en ella. No por falta de amor, pasión, vocación; sino por falta de motivación a seguir huyéndole al campo por estar postrada en una computadora todo el día, lejos de los laboratorios y potreros que solían revivir mis ánimos de existir.
Me siento más sola que nunca y me recuerda a lo que tanto solían decirme mis papás, sobre ser una niña solitaria. Y sí, lo soy. El problema es que no se si mi soledad es hasta cierto punto voluntaria, porque parece lo contrario.
Estoy hundida en mierda, y mis traumas salen cada día más a luz, dañando lo que tengo en el presente y amenazando con quitarme gran parte de mi futuro. Estoy cansada, agotada, enfadada, decepcionada; quiero hundirme en mis sábanas y no reconocer luz de día hasta que mi cuerpo decaiga y mis huesos se vuelvan polvo.
Perdón por lo dramática, tiendo mucho a abusar de las exageraciones. 
Regularmente terminaba lo que tenía por escribir con alguna motivación, pensamiento de superación, alegría o esperanza. Pero hoy no. Hoy solo quiero decir que estoy en la mierda, que me siento mal y con muchas ganas de llorar; que no quiero salir en días, y solo quiero tener a mis perros custodiando mi silencio y mis lágrimas. Hoy solo quiero decir que ya la muerte me atormenta y que el luto no lo aguanto, que quiero mejorar pero no tengo energías para hacerlo, y que me estoy cansando de despertar todos los días a intentarlo una vez más. 
0 notes
midamnatiomemoriae · 4 years
Text
tu pickup.
Mi abuelo compró un pickup hace más de cinco años. Beige, con detalles negros en las loderas y plateado en la palangana. Fue producto de su esfuerzo y trabajo durante años, y con orgullo, manejó a la ciudad para mostrarlo. 
Mii abuelo nunca fue celoso con sus cosas; solía prestarnos el pickup a mis primos y a mí para dar vueltas en el pueblo, manejarlo hasta la playa y a los ríos, y llevarme de copiloto cuando dábamos vueltas en las aldeas cercanas a mi pueblo.
Solía decirnos que las cosas son para usarse, arruinarse, desgastarse, que al morir nadie se lleva nada entonces que te gocés lo que tenés en vida, que acá se va a quedar el día que te vayás. 
así fue.
Años después perdí a mi abuelo.
El pickup ahí está. 
0 notes
midamnatiomemoriae · 4 years
Text
Quiero ver al cielo y estar segura que dos de las estrellas se enorgullecen de mí. Quiero arrancar el dolor que cargo en la piel, y remojar en cloro el corazón podrido que me aqueja, exhalar la asfixia que me causa mi entorno y reparar los platos rotos que conlleva ser yo.
Quiero ver en el espejo ciertos trazos de mi abuela, ver la buena voluntad de mi abuelo, el carácter de mi mamá y la bondad de mi papá sin que esos aspectos choquen entre sí. Sin ser un caos, sin ser una tragedia.
Quiero escribir algo que me haga sentir algo que no sea dolor. Quiero escribir porque estoy en paz, no al borde de un suicidio. Quiero poder despertar tranquila y no sentirme perseguida por las tragedias en mis sueños y el pesar que cargo siempre en vida.
Quiero creerme el cuento de que estoy bien, quiero aparentar que todo dentro de mi cabeza esta en perfecto orden y no es una tragedia; que se crea desde el exterior que no traigo el corazón hecho pedazos.
Quiero dejar de tragarme el llanto, porque no quiero una vida silenciada. No quiero vivir en constante censura. Quiero salir de mi caja y gritar, llorar y colapsar como solo yo sé que quiero hacerlo, como solo yo se hacerlo.
Quiero gritar y romper vidrios, quiero derramar cuanta lágrima sea necesaria; quiero un segundo para olvidarme tanto del dolor propio como del ajeno.
Quiero mostrar mis heridas sin el usual terror de ser abandonada. Quiero escaparle a los pensamientos intrusivos de mi cabeza, quiero deshacerme de cuanta mierda he soportado.
Hoy sí sé,
Que ni mi cuerpo ni mi alma aguantan,
Que mi corazón se esta aferrando a sus pedazos,
Que no puedo respirar tranquila,
porque la presión sobre mis hombros me esta matando.
Hoy sé,
Que parezco niña,
Aterrada del futuro,
Con ansias del pasado,
Con nauseas del presente,
vomitando realidad.
Hoy sé,
Que me siento enferma,
Que me pica la piel,
Que mis ojos están agotados,
Y mis hombros buscan refugio
Que hasta mis lagrimas están hartas de caer en suelo infertil,
En terreno baldío,
que mis pies se tambalean y ruegan
por balance, por un suelo un tanto más estable
Mi vida de antes ya murió,
y con ella yo me fui,
dejé partes enterradas de mí en cada pérdida que tuve,
en cada vez que me tuve que despedir de algo que no quería dejar
Arranqué partes de mí,
O me las quitaron en el camino sin pedir permiso,
me morí y revivi más de mil veces,
regresando cada vez un poco más cansada que la anterior.
1 note · View note
midamnatiomemoriae · 4 years
Quote
esta vez mi promesa sí va en serio
0 notes
midamnatiomemoriae · 4 years
Text
esto ya sabe a pasado
Esta no es la primera vez que te escribo, pero sí será la última. No te voy a desear la mejor suerte del mundo, no te voy a desear que cumplás todas tus metas. Hoy te vengo a desear, nada más y nada menos, que lo peor.
Deseo que me busqués en cada lugar que visités y no podás encontrarme, que te decepcione estar cerca de otra piel que no sea la mía, que busqués un lugar seguro en otras manos y no lo hallés, porque no soy yo.
Deseo que extrañés cada mañana que te hice el desayuno, porque te estás muriendo del hambre, que cada vez que llorés estés solo, sin tenerme ahí abrazándote en el suelo cada vez que te derrumbaste, que no tengás quién te seque las lágrimas a besos como yo lo hacía, o que te tome la mano cuando estés molesto.
Espero que te cueste levantarte cada puto día porque no estoy yo para llamarte y despertarte, que te estés muriendo de frío cada mañana, porque no estoy yo para darte calor, que te duela el pecho, el corazón y las costillas, cada vez que me mirés y recordés que ya no me tenés.
Que fue tu culpa, que yo no renuncié, sino que tú me echaste. Que tuviste todo lo bueno de este mundo, me tuviste a mí, y lo arruinaste.
Deseo que me mirés con alguien más y no podás dormir del dolor, que te cause pesadillas imaginarme sonriéndole a alguien más, y poder ver en tus ojos lo arrepentido que estás.
Deseo que pases el resto de tu vida pensando en qué hubiera pasado si hubieras hecho las cosas bien. si aún me tuvieras, si aún fuéramos lo que fuimos, y que el mero recuerdo te desplome en llanto.
Porque yo ya no estoy.
0 notes
midamnatiomemoriae · 4 years
Text
sobre luto
Sorbos de oro, con trago amargo, manos frías, y pesadez.
Dolor en el pecho, de recordar, de sentir, de pensar.
De ver tu silla vacía, tu nombre en cada esquina, tus promesas incumplidas, tu ausencia ahora en mi vida.
Tus palabras retumbando en mis oídos, las carcajadas olvidadas, tus enseñanzas y poesía, y cada evento al cual faltarías.
Tanto trauma para nada, para dejarte en un cajón, para tener la valentía de verte en una caja, y guardarme tanto rencor.
Mis cabellos enredados, ajenos al agua, de estar en el piso tirada, sin probar bocado, sin soltar palabra.
Una corriente eléctrica saltando de mis manos, un carácter irremediable, mi madre diciéndome que, por favor, por cortesía, le agradeciera a todos su compañía.
Pero quería gritar, quería quebrar, romper, sollozar, vengar.
Sentía fuego quemándome las venas, y mis lágrimas creando surcos en mi rostro, llevándose mi inocencia, dejándome con odio.
Muerta en vida en cuatro paredes, uniformes de indiferencia, una vida ya cambiada, una niña enojada.
Este es el relato del dolor que soporté, que callé, que grité.
Escondida en una casa, en los brazos de un extraño, con toxinas en el torrente sanguíneo, pidiéndole a Dios que te dejara volver.
Odiando al universo por su incoherencia, y su falta de piedad, su afán de quebrarme,  y dejarme siempre en pedazos.
Y yo, con afán de envenenarme, tanto el alma como el cuerpo,  con odio como con sustancia, buscándole sentido a ese dolor.
Pero se fue, o lo enterré, o lo olvidé.
o lo metí en una caja y en mi mente lo dejé, como siempre lo hago, mi costumbre de evitar, de prohibir, de cohibir, inhibir.
De pisotear mis dolores, arrojarlos al abismo,  hacer de cuenta que no pasa, que no soy,  y que no fue.
Me vuelvo ajena a mi propio dolor, evitando que sea libre, como río que surge de montaña, corriente que arrastra suelo fértil a su fin. 
0 notes
midamnatiomemoriae · 4 years
Quote
No voy a caer. Y si lo hago pues me levanto. Y si me pierdo pues yo misma me encuentro. Y si entro en apuros pues yo misma me salvo. Si todo me da pelea, doy pelea yo también. Que vine al mundo a pelear, a vivir, a ser como soy, sin plan de respaldo.
0 notes
midamnatiomemoriae · 4 years
Quote
estoy acostumbrada a doler y llorar sola
2 notes · View notes
midamnatiomemoriae · 4 years
Quote
Si te vas a quedar, quedate con huevos, quedate firme, con alta marea, y con vientos violentos Quedate entonces, aunque la noche sea fría, y no tengamos más refugio que uno al otro, aunque tengamos miedo, y temblemos de dolor, porque estamos juntos, y es lo único que nos da valor
0 notes
midamnatiomemoriae · 4 years
Text
esto no tiene título
Tengo ganas de correr descalza por la playa, con mi cabello enredado por la arena y sal marina, con la piel quemada por el sol, tomando agua de coco y con nada más que trajes de baño como vestuario. Quiero correr con la mirada fija en el agua y sumergirme hasta quedarme sin aire, salir a superficie y confiar en que puedo nadar a aguas más profundas sin que nada malo me suceda; quedarme tomando cerveza viendo el atardecer, viajar en la palagana del picop con la frescura del anochecer tocándome la piel. 
Tengo ganas de cortarme el cabello hasta los hombros y decolorarlo, de hacerme tres piercings y dos tatuajes sin pensarlo; de tomar mis maletas, mi carro, y desaparecerme por un par de meses en lo que recorro el país y me encuentro en los lugares que visite. En lo que consigo suficiente dinero para comprar una maleta que me alcance para todos los países que me faltan conocer. 
No quiero tener ataduras en ningún lado, no quiero compromiso de quedarme atada en cierta tierra, porque quiero volar, quiero nadar, quiero bucear, todo muy lejos de aquí. No quiero extrañar, no quiero pensar en el pasado, ni en el dolor, en la pena o melancolía. 
Quiero olvidarme de cada mierda que pasó, estando en otro lado con otra gente igual a mí. 
2 notes · View notes
midamnatiomemoriae · 4 years
Text
supervivencia
cuando todo lo demás colapse, cuando tus pulmones griten por aire, cuando tus piernas se  cansen de huir, y cuando tus manos estén sangrando de tanto golpe, regresá a escribir.
cuando tu mente se vuelva un tornado, y tu cuerpo un calvario, cuando tu aliento no tenga fuerzas, y tu corazón esté llorando, buscá tu raíz.
cuando te levantés preguntando qué hacés aquí, cuando el dolor se hizo tan fuerte que solo dejaste de sentir, cuando tus gritos de ayuda no puedan escapar de tu boca, y en tus ojos se encuentren las palabras que no te atrevés a soltar, buscá tu talento.
cuando sintás que el mundo está siendo destruido frente a ti, que no hay esperanza a la cual aferrarse, cuando todos los consejos son banales, y la soledad tu peor aliada, encontrá tu confort en las palabras.
1 note · View note
midamnatiomemoriae · 4 years
Text
Me gustaría ser guiada, que alguien me explicara; no sentirme tan perdida e ignorante. No todo lo puedo aprender sola pero sólo no sé quién me podría dar lo que estoy buscando.
1 note · View note