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Sion estaría mintiendo si decía que nunca había tenido pensamientos un tanto extra en los cuales Isla era la otra protagonista principal, pero nunca les había llevado el apunte hasta el momento en que de buenas a primeras tenía a Isla en su cama después de haber tenido sexo — dos veces. ¿Qué demonios era lo que había hecho? Wade se iba a poner como loco si se enteraba — no, no loco — directamente lo iba a matar. ¿Lo peor de todo? O lo mejor, dependía desde que lado se lo mirara, era que Sion se sentía tan satisfecho que literalmente no podía importarle menos Wade y el código de los bros en ese momento. Esa no había sido su primera vez, y claramente tampoco la de Isla, quien con todo lo que habían hecho le había demostrado por qué Wade estaba tan obsesionado con ella al punto de que varias veces le había contado virginales detalles de su vida sexual, que Sion no quería saber pero pretendía escuchar por amabilidad. Así que en fin, ahí estaba Sion con Isla abrazada a él, y aunque estaba contento no podía sentirse más raro. ¿Por qué? Pues por eso mismo: porque estaba contento. Porque sentía que la conexión que tenía con esta increíble chica acababa de avanzar a otro nivel más íntimo y personal, y que no habría vuelta atrás ya que por más forro que sonara no tenía dudas de que podía acostumbrarse a esto. No porque quisiera ser su novio ni nada —insisto, no quería morir a manos de un furioso Wade—, pero... quién sabía. “Buenas noches, Islita.” Susurró dándole un beso en la frente y cerrando sus ojos. Ya podrían hablar de lo sucedido cuando se despertaran en la mañana.

Un par de horas más tarde Sion se despertó con el sonido de su teléfono vibrando contra su mesita de luz, al borde de la cama y con Isla toda estirada en al menos el 80% de la misma, lo cual en una ocasión normal lo hubiese hecho reír porque les siempre sucedía lo mismo — sólo que esta vez se quedó observándola dormir, mordiéndose el labio porque no podía creer que la noche anterior había sido algo real y no un descabellado producto de su imaginación. Mientras tanto, el teléfono empezó a vibrar de nuevo y cuando vio quien era Sion no pudo evitar rechazar la llamada de Wade, más que nada porque no podría hablar con él sin sentirse mal. Decidiendo que necesitaba unos minutos a solas Sion bajó a la cocina y preparó el desayuno favorito de su ‘mejor amiga’ antes de volver a subir para despertarla, lo cual no quería hacer porque ella se veía preciosa ahí toda despatarrada en su cama, aunque tuviera el pelo sobre la cara y un hilo de baba saliendo de su boca. “Andando.” Suspiró y estiró su brazo para tocarla pero no lo hizo porque si la despertaba eso significaba que tarde o temprano tendrían que aclarar cierto tema y Sion no estaba listo para que Isla le dijera que eso había sido un error, o que sería mejor si no seguían haciendo esto. “Isla.” Dijo relamiéndose los labios de manera nerviosa y finalmente sacudiéndole suavamente el brazo. “Islita, despierta.” Insistió, quitándole el cabello del rostro para poder admirarla mejor. “Son casi las once de la mañana y el desayuno está listo, arriba dormilona.” Le sonrió, soltando una risa cuando ella dijo que no y le dio la espalda. “No me hagas patearte de la cama como el otro día, Elizabeth.” Bromeó poniéndole sus manos en su cintura y haciéndola voltearse para que lo mirara. “O peor, ¡no me obligues a llamar al monstruo de las cosquillas!” Exclamó y empezó a hacerle cosquillas en básicamente todos lados para que ella pudiese despertarse del todo.

“Bueno Sion, lo olvidé” dijo encogiéndose de hombros mientras entraba a la casa de Sion yendo al lugar donde había una tarjeta con su nombre. “Bueno, pero debes por lo que más quieras que será nuestro secreto ¿Okay?” sonrió mientras bebía la botellita de Seagram Isla se estiró en el sillón ante los ojos curiosos de Sion que todavía estaba esperando la relevación “Katherine se acostó con mi hermano” Sion abrió la boca demasiado grande para su gusto y dijo que le dijera que era una broma, para luego reirse y decirle que le prometiera no dejar de hacerle la vida imposible acerca de ello “Claro que no, nunca lo haré, mañana mismo le compro el traje de monja porque dijo que prefería convertirse en monja antes de estar con alguno de ustedes, así que…” se encogió de hombros y posicionó su cabeza en el hombro de Sion mientras miraban una película de terror. Y mientras la historia iba transcurriendo delante de sus ojos, Isla se iba posicionando más cerca de Sion, tanto que no supo como terminó en su falda con sus brazos entrelazados debido al susto. “¿Sion, que ocurre?” preguntó mientras observaba los ojos de el chico, los cuales iban directamente a sus labios ¿Que mal podía causar si lo besaba a Sion? No mucho seguramente, después de todo no es como si Wade estuviera enamorado de ella o que fueran algo más serio que amigos casuales que cogían, por lo que, lsla decidió dar el paso y besarlo en los labios, sin pensarlo demasiado ni pensar en que quizás estaba mal. Cuando se separó pudo sentir como sus mejillas se sonrojaban y se apartó de el “Lo siento Sion, no pude controlarme”. Sion parpadeó y luego susurró que no lo sienta porque el no lo sentía, para luego ponerle una mano en la mejilla y acariciarsela para luego acercarse para besarla. 

Y cuando la besó, oh vaya, realmente pudo ver los fuegos artificiales, parecía que no necesitaba aire para continuar con lo que estaba haciendo porque estaba demasiado entretenida y cuando quiso acordar, tenía a Sion encima de ella. 

No les tomó demasiado tiempo para decidir que debían irse a la habitación de Sion la cual tenía una cama de dos plazas esperando por ellos. Isla se posicionó encima de el y no dudó demasiado en trazar un camino de besos hasta su pantalón, del cual se deshizo rápidamente junto con el boxer para poder comenzar a hacer movimientos con sus labios haciendo que Sion lanzara gemidos dignos de una película porno, y cuando Isla pensó que fue suficiente de tentarlo, le colocó un condón para luego posicionarse encima y comenzar hacer movimientos con su cadera.  Y luego de aguantar su buen tiempo de pura y genuina diversión, Isla colapsó encima de Sion el cual  la besó nuevamente diciendo que era fantástica. “Una fantástica chica que está toda sudada ¿Vamos a darnos una ducha?” preguntó con una sonrisa y el la siguió. Una ducha inocente que terminó en más sexo. Y cuando estuvieron en pijamas y acostados en la cama Isla tuvo miles de preguntas en su cabeza, pero no tenía por qué decirlas y arruinar el momento, por lo que se abrazó a Sion y escondió su cabeza en su hombro esperando dormir. 

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En las últimas semanas Sion e Isla no habían dejado de enviarse mensajes de texto y no quería ser exagerado, pero ya hasta podía decir que ella se había vuelto su mejor amiga después de los chicos — tanto que estaba más que feliz de poder ayudarle a ocultar su ‘relación’ con Wade siendo siempre la coartada perfecta, para que Thomas no se enterara de lo que su hermanita hacía a sus espaldas. En ese momento, él estaba esperando que Wade la trajera para su pijamada semanal —que usualmente sucedía entre cinco a seis veces por semana, oops— con todo un banquete de comida chatarra y par de botellitas de Seagram’s preparado en la sala de estar, aprovechando que estarían completamente solos en casa sin que nadie los molestara porque su hermana Mali se había ido a lo de una amiga y sus padres estaban en Nueva Zelanda.

Cuando escuchó el timbre, Sion dejó lo que estaba haciendo en donde iba —un cartelito con el nombre de su amiga para poner como ‘indicador de sitio’— y corrió a atender, encontrándola ahí riéndose de algo que parecía ser demasiado chistoso y que por la manera en que estaba riendo lo hizo reír a él también. “Espera, espera, ¿de qué nos reímos? ¿Adónde está Wade? ¡¿Isla, qué le hiciste al pequeño pingüino?!” Fingió preocupación llevándose una mano al pecho y sacudiendo la cabeza cuando ella le dijo que había venido en un taxi porque primero había tenido que ir a su casa a buscar su cepillo de dientes. “Isla, ¿en serio? Sabes que tienes uno aquí.” Rodó los ojos porque era verdad. Su madre, dado que Isla pasaba tanto tiempo en casa de los Thomas, se había tomado el tiempo de comprar un cepillo de dientes para ella y dejárselo ahí en caso de que olvidara el suyo — al igual que todo un set de toallas y toallones que como todos las de la familia, tenían su nombre bordado en ellas. “En fin, pasa de una vez y dime de qué te estabas riendo porque ahora siento demasiada curiosidad.” Dijo poniéndole el brazo sobre los hombros y cerrando la puerta de entrada con el pie. “Por cierto, bienvenida al banquete. El Chef Sionnie es un ídolo, amarás las delicias que preparó.” Bromeó, yendo a sentarse en donde estaba la tarjeta con su nombre.

Isla había tenido un genial día con Wade, y cuando decía genial se refería a que lo habían hecho en más posiciones de las que se imaginaba que eran posibles, pero antes de que el la llevara a la casa de Sion se dio cuenta de que no tenía su cepillo de dientes, así que decidió que la llevaría a su casa y luego ella se tomaría un taxi a lo de Sion antes de que Thomas notara su presencia allí. Así que cuando escuchó que el estaba con Katherine en la cocina, lo único que tenía que hacer era caminar en puntitas hasta el baño, sin hacer demasiado ruido, tomar su cepillo de dientes e irse. “¿Que demonios?” preguntó mientras observaba el inodoro, el cual tenía no uno, sino tres preservativos NEÓN (los favoritos de Katherine) en el agua. Así que luego de tomar su cepillo de dientes bajó hacia la cocina y los observó mojados. MOJADOS. “EL DESCARO DE USTEDES DOS INSENSATOS ¿CÓMO SE ATREVEN A COGER EN MIS DOMINIOS?” gritó llamando la atención de los dos mientras ambos decían que o sabían a lo que se refería “¿¡AH NO?! Y LOS PRESERVATIVOS NEON QUE ESTÁN EN EL INODORO LLEGARON AHÍ POR OBRA DE ARTE SEGURAMENTE” dijo mientras abría la heladera para servirse un vaso de agua y tranquilizarse mientras ambos intentaban decirle que no armara un escándalo de todo eso “¿Escándalo? ¿ESCÁNDALO?” gritó nuevamente “No lo se lo tengo que pensar, voy a caminar por ahí mientras ustedes ven lo que quieren hacer de su vida” suspiró. 

Así que cuando salió por la puerta, aguantándose la risa porque había fingido el escándalo lo más bien para que la dejen tranquila y lo único que le había causado en realidad lo de su mejor amigo y su hermano cogiendo por el hecho de que los dos eran unos hipócritas. Así que cuando estuvo en el taxi yendo a la casa de Sion le envió un mensaje a Katherine agradeciéndole por sus servicios y que siempre ella tomaba una por el equipo. 

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@MichaelHT: THIS PARTY IS SICK!!!!!

@SionHT: *tweeted from your room*

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Sion usualmente no era el tipo de chico que iba pidiendo los números de teléfono de chicas bonitas y que terminaba recibiéndolos, pero no podía negar que tras conseguir el número de Isla se sentía como un ganador. No porque tuviera intenciones con ella, como decía Thomas, sino porque la chica era asombrosa y le parecía super graciosa así que obviamente quería su número si a ella le parecía bien dárselo. Tras enviarle un mensaje para que le quedara registrado el suyo, Sion abrió el yogur que había sacado del refrigerador de los Fletcher y se unió a sus otros dos amigos, que estaban discutiendo con Katherine acerca de música y… “¿Muchachos?” Sion entrecerró los ojos y miró a la rubia, que parecía exasperada. “Katherine, Michael… quiero pensar que no están intentando llevar a Thomas al lado oscuro de…eso que hacen ustedes, ya sabes.” Bromeó ganándose que Katherine le clavara una mala mirada mientras le decía que se jodiera, y que Michael le pegara un cachetazo en la nuca, haciéndolo escupir todo el yogur que tenía en la boca. “¡Oye, eso fue grosero!” Exclamó devolviéndole el golpe e iniciando una pequeña pelea hasta que Thomas los detuvo diciendo que se comportaran. “Sólo tienes un año más que nosotros, no eres un adulto y no puedes decirme qué hacer.” Sion rodó los ojos y asintió burlonamente cuando él empezó con todo ese argumento de que cumpliría los dieciocho en menos de un mes. “Sí, pero aún sigues siendo un menor de edad como todos nosotros.” Apuntó riendo cuando Katherine dijo que ‘hablara por ellos pendejos’. “Katherine. Kath, mi querida Katie. Deja de pretender que nos odias. Nos amas, y lo sabes.” Subió y bajó las cejas, riéndose de como Katherine empezó a decir que preferiría meterse en un convento antes que amar a cualquiera a ellos.

Para cuando Isla los llamó a comer Sion todavía no podía dejar de reírse de los mensajes de texto que se estaban enviando, y definitivamente no se arrepentía de haberle propuesto ser amigos porque ella era literalmente fantástica. Cuando Thomas preguntó de qué se reía, Sion respondió que de él teniendo el pelo lleno de producto capilar y automáticamente Katherine le clavó la mirada y le preguntó si había vuelto a ponerse más de esa porquería que no hacía más que engañar a la gente porque... porque argumentos de niñita genio que Sion no tenía ganas de repetir, básicamente. “Oh, ya cállense, que nadie quiere escucharlos discutir como pareja de ancianos casados.” Dijo sin levantar la mirada de su plato porque si lo hacía uno de los dos probablemente le sacaría el ojo con un tenedor o algo. “Isla, ¿alguna vez te dijeron que eres una excelente chef? Porque este platillo está para lamerse los dedos. Cien de diez lo recomendarían.” Le guiñó el ojo a la chica, cambiando el tema e ignorando las miradas intensas de Thomas y... ¿Wade? “En serio.” Sonrió, llevándose otro bocado del exquisito pollo a la boca y volviendo a mirar a su mejor amigo, que a su vez estaba sonriéndole a Isla con esa cara de baboso que ponía cuando quería disimular.

Si había algo que Katherine amaba de haber finalmente terminado el secundario y con ello su estadía en el Colegio Stephen Hawking para Chicos con Aprendizaje Avanzado, eso definitivamente era el hecho de que al fin había podido volver a su amada Australia y esta vez de manera permanente — al igual que su mejor amiga Isla, cuyo hogar estaba visitando en ese mismo momento. “¡Buenos días, fracasados!” Saludó a los tres amigos inseparables de Thomas, el hermano mayor de Isla: Michael, Sion, y Wade —o como le gustaba llamarlo a ella, Magda la niña pingüino—, dejando su mochila sobre el sillón y pasando al comedor con la esperanza de que Isla hubiese tenido la decencia de levantarse temprano al menos ese día — pero claramente eso no iba a suceder por más o menos la próxima hora y media, así que Katherine decidió quedarse en la biblioteca de los Fletcher leyendo uno de los tantos libros que Isla mandaba a Australia con ella cada verano, ya que ella usualmente se quedaba en el internado mientras Katherine volvía a su país a repartir su encanto por todos lados. “Wow, Thomas, te ves encantador con todo ese producto mal aplicado en el cabello.” Bromeó al ver salir al chico y como era malvada pero no tanto, tomó un par de servilletas de la cocina y lo siguió para arreglar ese desastre. “Ven aquí, que no puedes andar así por la vida.” Bufó mientras lo hacía sentarse en una silla de la cocina y le quitaba el exceso de crema para peinar. “Mucho mejor.” Dijo, y rodó los ojos al ver como él la estaba mirando con desconfianza. “Tranquilo, no te hice nada. Por ahora.” Sonrió y lo dejó irse, disfrutando de la manera en que lo intimidaba no sólo a él sino también a los otros tres.

Cuando Isla se dignó a aparecer para desayunar, Katherine esperó a que su mejor amiga estuviese lo suficientemente despierta —en serio, lidiar con Isla Fletcher antes de que ella tomara su preciado café en la mañana era más difícil que enfrentarse a la furia de todos los titanes griegos— y cuando eso pasó la puso al tanto de todo lo que harían ese día, lo cual se fue todo al mismísimo carajo cuando Thomas sugirió que su hermanita se quedara a presenciar la práctica de la banda e Isla, siendo la putita pedófila que era, aceptó sin demasiada resistencia. “Uh, ¿Isla? Te recuerdo que nosotras teníamos planes. Y no eran ser niñeras de los amiguitos de tu hermano.” Apuntó en voz baja, mientras Isla le decía que no fuera mala y entrelazaba su brazo con el de Wade, que obviamente ya le estaba coqueteando. “Agh, pendejos.” Bufó dejando caer su mochila en el sillón donde la había dejado y siguiéndolos a todos al garage. “Bueno, ¿cuál es el setlist de hoy? Déjenme adivinar: ¿Barney and friends? ¡Oh, espera! ¿The Backyardigans? ¿Yo Gabba Gabba? Anda, Wade, dime. Después de todo tú eres el que más influencia tiene en los setlists, ¿no?” Se burló del rubio y chocó los cinco con un sonriente Michael mientras Wade le decía que si iba a molestar que se fuera. “Oh, vamos, sabes que sólo estoy bromeando. Es más, como estoy de buen humor porque Isla está aquí si quieres hasta te dejaré cantar She Came In Through The Bathroom Window sin amenazarte con incendiar a tu pequeño Pengey.” Ofreció sentándose en un puff frente a ellos, que ya estaban con sus instrumentos o detrás del mismo en el caso de Thomas. “Prometo ser sensata.” Dijo poniendo su mano sobre su corazón para darle seriedad al asunto. “Ahora por favor ya empiecen de una vez, que no tenemos todo el día.”

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sms » isla fletcher

Isla: Astronomía, Sion. Astronomía.

Isla: La astrología es el estudio de la posición y el movimiento de los astros, a través de cuya interpretación se pretende conocer el destino de las personas y pronosticar los sucesos terrestres.

Isla: La astronomía, por otro lado es la ciencia que estudia la estructura y la composición de los astros, su localización y las leyes de sus movimientos.

Isla: dije astrología porque seamos sinceros, thomas astrónomo sería como that's not gonna happen like, ever.

Sion: no voy a mentir, tuve que releer eso al menos tres veces antes de (medianamente) entenderlo pero wow eso fue increíble

Sion: jajajajajajaja no seas malvada, pobre Thomas

Sion: (aunque tienes razón)

Sion: ((por favor no le digas que dije eso))

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sms » isla fletcher

Isla: Jajajajajajajajaja mi patrón de desbloqueo es la constelación de Cassiopeia así que a menos de que mi hermano se haya hecho un astrólogo avanzado no tiene chances de abrir mi celular nunca.

Isla: Ahora te agendo Sion ♥

Sion: wow, no deberías haberme dicho eso.

Sion: Amo la astrología así que yo que tú no dejaría tu teléfono solo cerca mío porque quién sabe?

Sion: Tal vez algún día podrías encontrarte con muchas selfies random y yo no me haré cargo

Sion: Es broma, no lo tocaré porque eso sería invasión a la privacidad y Sion Thomas no hace eso!!! *laughing emoji*

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sms » isla fletcher

Sion: hola, soy Sion!!

Sion: excepto que Thomas pregunte... en ese caso, no soy Sion :D

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@MichaelHT: haha someone just called me a cutie! Thank you but I'm not a cutie! I'm a badass.

@MichaelHT: but its k, can't help that all the babes love me ;)

@SionHT: and how or WHEN did that happen? bc as far as i know we never left tom's house lol

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@SionHT: Pretty girl, I've got your name, got your number.

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im group - weirdos

Thomas: PERFECTA VA A SER LA PATADA EN EL CULO QUE TE VOY A DAR, PENDEJO.

Thomas: SION TU TAMBIÉN? PENSÉ QUE TU ERAS MI BRO

Michael: Yo la única práctica que quiero hacer es con tu hermana lololololol

Thomas: Mi hermana es demasiado inteligente como para dejar que alguno de ustedes roñositos la toque así que bye.

Wade: Hola pendejos soy Katherine, le robé el teléfono a Wade para decirles que todos ustedes apestan!!!!!

Wade: Es broma, los tolero

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im group - weirdos

Thomas: AHORA QUE ME ACUERDO NO TENEMOS PRÁCTICA HOY TENEMOS MAÑANA

Thomas: ESPERO QUE NO ESTÉN ACÁ INTENTANDO ALGO CON MI HERMANA

Thomas: ojalá la manden otra vez a Inglaterra, babosos.

Wade: LA PRÁCTICA HACE LA PERFECCIÓN, MI QUERIDO THOMAS!!!!!!

Wade: Ya nos perdimos una el otro día, vamos. No nos hará daño una práctica extra.

Sion: CIERTO.

Sion: Y seamos realistas además hace mucho calor afuera como para hacer otra cosa :))

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S I O N · T H O M A S : a m o o d b o a r d

G E N E R A L    M O O D

♪ Dance, Dance - Fall Out Boy

♪ Don’t You Want Me - Neon Trees

♪ Can We Dance - The Vamps