Text
RENACER EN ROMA
Hay años que llegan como un susurro, tímidos, inciertos. Y hay otros que irrumpen como una sinfonía.
Este año comenzó así: como un canto suave al oído, pero con la fuerza de un nuevo sol encendiendo cada rincón de mi alma.
Después de tanto subir y bajar, de tanto dudar, aquí estoy… con las expectativas en alto y el corazón más despierto que nunca.
Salud, amor, prosperidad. Las tres se asoman por mi ventana cada mañana como si hubiesen decidido quedarse a vivir conmigo.
La primera postal de este año: Roma.
¡Ah, Roma! Qué manera de empezar.
Viajar con mi hermano y mi mejor amigo fue un regalo que ni el tiempo podrá desgastar. Caminamos por esas calles llenas de historia, donde cada farol cuenta secretos, donde los pasos se sienten distintos, más livianos.
Caminábamos sin apuro, entre monumentos que nos hacían sentir pequeños, pero vivos. Uno más grandioso que el otro. Y yo, absorbiendo cada instante como quien guarda luz en frascos para cuando llegue el invierno.
Y mientras tanto, en el fondo de todo, un trabajo que aunque no soñado, me da paz. Menos agitado, más amable. Esperando sin ansiedad, como quien sabe que lo mejor está en camino. Porque he aprendido —a veces a golpes, otras con abrazos— que cada situación es una lección. Y yo… yo elijo aprender con gratitud.
Mi madre está radiante. Llena de vida. Y verla así, con los ojos chispeantes de alegría, me devuelve fuerzas que ni sabía que me faltaban. Ella es mi hogar, mi raíz, mi eterna primavera.
Y como si el universo hubiese decidido que ya era hora de florecer, nace también mi proyecto emprendedor. Algo nuevo, algo mío. Lo abrazo con entusiasmo, con entrega, con hambre de crecer.
Sé que me va a transformar.
Porque nací para grandes cosas.
Y vienen más.
¡Lo sé! Lo siento en cada célula.
Hace solo unos días, regresé de Hungría, donde viví otra historia digna de atesorar: un paseo por el Danubio con mi amada, bajo el cielo abierto, viendo el Parlamento húngaro reflejarse en el agua como un castillo de otro mundo.
Nos deleitamos con la gastronomía, con los paisajes, con la compañía mutua. Fue un viaje completo, redondo, perfecto. De esos que no se olvidan y que, sin decirlo, te enseñan más que mil libros.
Y por si fuera poco, cuando menos lo esperaba, la gran noticia:
¡La beca! Esa universidad en Nueva York.
Ese sueño que parecía tan lejano, tan reservado para “otros”, de repente…
¡era mío!
Y ahora está tan cerca, tan real, que me emociona pensar en el diploma, sí, pero mucho más en el camino que recorreré hasta tenerlo en las manos.
¿Quién lo hubiera imaginado?
Tal vez muchos no.
Pero yo… yo sí.
Porque estoy hecho para grandes propósitos y grandes retos.
Y lo lograré.
Porque puedo.
Porque quiero.
Porque lo merezco.
La vida me sonríe, y aunque no siempre sé qué cara ponerle a tanta felicidad, sólo puedo devolverle una más grande. Una de esas sonrisas sinceras, que nacen del alma y no piden permiso.
Ya van seis meses de este año… ¡solo seis!
Y todo ha cobrado un brillo que hace tiempo deseaba.
Una luz que no ciega, sino que guía.
Una certeza suave que me dice: "Lo mejor aún está por venir".
Y yo, con la frente en alto y la mirada templada, estoy listo.
Porque no es suerte.
Es propósito.
Es trabajo.
Es amor propio.
Y aquí estoy.
Avanzando.
Soñando.
Agradeciendo.
#notas de vida#escritos#cosas de la vida#hombres#noches de pensamientos#insomnio#citas de la vida#cosas del alma#motivación#crecer#cambios#superación personal#perspective
0 notes
Text
¡El viento finalmente cambió de dirección!
Hoy cierro los ojos, respiro profundo y siento algo que hace años creí imposible: **el universo susurrándome que, al fin, las piezas están cayendo en su lugar**. No es un sueño, no es un espejismo, es la vida diciéndome con su voz más dulce: *“Todo lo que sembraste en tierra árida está floreciendo”.
¿Recuerdan esas tormentas que parecían no tener fin? Aquellas donde el cielo se volvía plomo, el viento aullaba despiadado y cada paso era como caminar contra la corriente. Hubo noches en las que creí que jamás vería la luz, días en los que el cansancio de luchar me hacía preguntarme: ¿Valdrá la pena tanto esfuerzo?. Pero aquí estoy… **aquí estoy**, con el alma templada por el fuego de las batallas y el corazón intacto, latiendo con más fuerza que nunca.
Las aguas turbulentas, poco a poco, encuentran su cauce. Ya no soy ese barco a la deriva, sino el capitán que sostiene el timón con manos firmes, aprendiendo a bailar con las olas en vez de temerles. Cada lágrima, cada caída, cada “no” que recibí, cada puerta que se cerró… **todo tenía un propósito**. Y aunque en su momento solo vi espinas, hoy reconozco las rosas que crecieron entre ellas.
La vida no me debe nada, pero justo ahora decide recompensarme. No con riquezas materiales, sino con esa paz que solo llega cuando entiendes que el dolor no fue en vano. Con oportunidades que vibran en sintonía con mi esencia, con personas que reflejan la luz que tanto cuidé en mis días oscuros, con momentos que me recuerdan: Mira cuán lejos llegaste.
¿Sabes lo que se siente? Es como si el alma respirara por primera vez. Como si después de años de cargar piedras en los bolsillos, alguien me las quitara y, de pronto, pudiera volar. Es alegría serena, una certeza de que, aunque el camino siga teniendo curvas, **ya no camino solo: voy acompañado de mi propia fuerza, de mi fe renovada, de mi historia escrita a golpes de resiliencia.
Hoy celebro no solo lo que llega, sino lo que fui capaz de atravesar para recibirlo.
Que este no sea un final, sino el prólogo de todo lo increíble que está por venir.
#Renacer #LaTormentaPasó #MerecidoBrillo #ElFuturoEsAhora
#notas de vida#escritos#cosas de la vida#hombres#noches de pensamientos#familia#insomnio#citas de la vida#cosas del alma#motivación
1 note
·
View note
Text
Feliz año,
para quienes libran batallas en silencio,
para quienes simplemente
no encuentran palabras para su sentir,
para quienes están lejos
de quienes llevan en el corazón,
para quienes sienten
que la vida se va de a poco
y para quienes le suman vida a nuestras vidas.
Alejo M
245 notes
·
View notes
Text
C O N C L U S I O N E S
Horas para que el año acabe, y aquí estoy, con la mochila cargada de experiencias y malos recuerdos. Cada momento vivido, cada lágrima derramada, cada sonrisa compartida, todo se acumula en esta mochila invisible que llevo a cuestas. Pero no me pesa, porque sé que cada experiencia, buena o mala, me ha moldeado, me ha hecho quien soy hoy.
El año que se va ha sido un viaje lleno de altibajos. He aprendido, he crecido, he caído y me he levantado. He conocido personas que han dejado huellas imborrables en mi vida, y he dejado ir a otras que ya no tenían un lugar en mi camino. Cada despedida, cada encuentro, ha sido una lección, una oportunidad para aprender y evolucionar.
Y ahora, con la ilusión de un nuevo año que se asoma en el horizonte, me preparo para recibirlo con los brazos abiertos. 365 días, 365 oportunidades nuevas de reinventarme, de intentar todo con una nueva perspectiva. Porque cada amanecer trae consigo la promesa de un nuevo comienzo, una nueva página en el libro de mi vida.
Pero este año, lo afronto con la templanza de saber que nada me afectará en lo que ocurra o no. He aprendido que no tengo el control de todo, que hay cosas que simplemente están fuera de mis manos. Y está bien. Porque lo que sí puedo controlar es mi actitud, mi esfuerzo, mi perseverancia. Puedo dar lo mejor de mí en cada momento, y eso es suficiente.
Será un año bien, será un año próspero. No porque todo salga perfecto, sino porque yo decidiré verlo así. Porque elegiré enfocarme en lo positivo, en las oportunidades, en las bendiciones que la vida me ofrece. Y cuando lleguen los desafíos, los enfrentaré con valentía y serenidad, sabiendo que cada obstáculo es una oportunidad para crecer.
Así que aquí estoy, a pocas horas de despedir este año y dar la bienvenida al siguiente. Con la mochila cargada de experiencias, con la ilusión de un nuevo comienzo, y con la templanza de saber que, pase lo que pase, estaré bien. Porque al final del día, lo que realmente importa es cómo elijo vivir cada momento, cómo elijo enfrentar cada desafío, cómo elijo ser feliz.
Con la moral en alto y la mente lúcida
Por un año perpetuo y fausto.
#notas de vida#escritos#cosas de la vida#hombres#noches de pensamientos#familia#citas de la vida#cosas del alma#fin de año#project 2025#diciembre#felicidad#exitopersonal#prosperidade
4 notes
·
View notes
Text
Este año me enseño,
A no planear tanto la vida.
#notas de vida#escritos#cosas de la vida#hombres#noches de pensamientos#insomnio#citas de la vida#familia#cosas del alma
3 notes
·
View notes
Text
R E I N I C I O : PERSPECTIVAS
Hay momentos en la vida en los que parece que las cosas negativas no dejan de suceder. Es como si el universo conspirara para que nuestros planes no se concreten, sin importar cuánto esfuerzo pongamos en ellos. He estado sintiendo esto de manera recurrente últimamente. Cada vez que hago un plan, algo se interpone y no se realiza como esperaba. Es frustrante y desalentador, pero he decidido que es hora de cambiar mi enfoque.
He llegado a la conclusión de que planear cada detalle de mi vida solo me lleva a la decepción. Los planes no siempre salen como uno espera, y eso está bien. La vida es impredecible y, a veces, lo mejor que podemos hacer es dejar que fluya. He decidido dejar de planear y simplemente vivir el presente. Si las cosas no salen bien, no pasa nada. Si salen bien, tampoco pasa nada. No voy a esperar que ocurra algo específico, simplemente seguiré adelante con mi sentido de vida.
Voy a vivir el presente, disfrutar de los pequeños momentos y aceptar lo que venga. No más expectativas, no más decepciones. Solo yo, viviendo mi vida, un día a la vez. He aprendido que no puedo controlar todo lo que sucede a mi alrededor, pero sí puedo controlar cómo reacciono ante ello. Puedo elegir vivir con una actitud positiva, sin importar las circunstancias.
Dejar de planear no significa que no tenga metas o sueños. Significa que no me aferraré a ellos con tanta rigidez. Permitiré que la vida me sorprenda, que me lleve por caminos inesperados. A veces, los mejores momentos ocurren cuando menos los esperamos. No más expectativas, no más decepciones. Solo yo, viviendo mi vida, un día a la vez.
Voy a enfocarme en lo que está a mi alcance, en lo que puedo controlar. Mi actitud, mis acciones, mi bienestar. Todo lo demás, lo dejaré en manos del destino. He decidido confiar en que, al final, todo saldrá bien, de una manera u otra. Y si no es así, también está bien. La vida es un viaje, no un destino. Y en este viaje, lo más importante es disfrutar del camino, aprender de cada experiencia y seguir adelante con una mente abierta y un corazón dispuesto.
#notas de vida#cosas de la vida#escritos#hombres#noches de pensamientos#familia#insomnio#citas de la vida#cosas del alma#motivación#⭐️vation goals#couple goals
18 notes
·
View notes
Text
Más Allá del Hogar: "Encontrando Consuelo en Extraños”
En el vasto océano de la sociedad moderna, los hombres navegan en solitario, sus corazones cargados de silencios y sus almas marcadas por la desmotivación. En el seno familiar, donde se espera encontrar refugio y aliento, a menudo hallan un vacío, una falta de apoyo que pesa como una losa sobre sus hombros.
Desde la infancia, se les enseña a ocultar sus lágrimas, a ser fuertes y a no mostrar debilidad. Esta armadura, que debería protegerlos, se convierte en una prisión que los aísla. La desmotivación se filtra en sus sueños, y la falta de impulso para superar los obstáculos se convierte en una sombra constante.
Es en este contexto que, sorprendentemente, los hombres encuentran consuelo en los desconocidos. En las palabras de un extraño, en el consejo de alguien que nunca han visto, hallan la comprensión que tanto anhelan. En foros anónimos y comunidades virtuales, pueden desnudar sus almas sin temor a ser juzgados. Aquí, en la distancia, encuentran la empatía que les falta en casa.
Pero no todo está perdido. Actualmente, se intenta progresivamente mejorar y buscar cambios. Es un proceso arduo y pesado, especialmente cuando el daño emocional intrafamiliar ha dejado cicatrices profundas. La sociedad comienza a despertar a la necesidad de un cambio de paradigma, a la importancia de ofrecer un apoyo genuino y sincero.
Las familias deben aprender a escuchar, a ofrecer un abrazo en lugar de una crítica, a alentar en lugar de desmotivar. Es un camino largo y lleno de desafíos, pero no imposible. Con el tiempo, la paciencia y un entorno de amor y comprensión, los hombres pueden encontrar la fuerza para sanar y avanzar.
En este viaje hacia la sanación, es crucial recordar que la soledad no es una condena eterna. Con el apoyo adecuado, tanto de la familia como de la comunidad, los hombres pueden romper el ciclo de desmotivación y encontrar la luz en medio de la oscuridad. Es hora de construir una sociedad donde todos, independientemente de su género, se sientan valorados y comprendidos.
Así, en el vasto océano de la vida, los hombres podrán navegar con esperanza, sabiendo que no están solos, que hay manos dispuestas a sostenerlos y corazones dispuestos a escucharlos. La sanación es posible, y el cambio, aunque lento, está en marcha. Es un proceso continuo, pero con cada paso, nos acercamos a un futuro donde la soledad de los hombres sea solo un eco del pasado.
#hombres#sanar el alma#soledad#familia#escritos#cosas de la vida#notas de vida#amor#noches de pensamientos#citas de la vida#proposito#superación personal#superacion#imsomnio#psicología#cosas del alma#cosas que importan#cosas que escribo
5 notes
·
View notes
Text
ECOS DE UN SENO AUSENTE
En el rincón más profundo de mi ser,
resuena un eco constante, un lamento sin fin.
Es la voz de una madre que nunca está presente,
una sombra pesada que me envuelve sin cesar.
Dura y pesada, su presencia me oprime,
como un yugo invisible que no puedo quitar.
Siento que nunca está para escucharme,
para saber cómo estoy, cómo me encuentro,
para entender qué me pasa, qué me duele.
Ella no se preocupa por mí de la manera que necesito,
simplemente soluciona todo con discusiones y distancia.
Cada palabra suya es un muro que se levanta,
alejándome más y más de su corazón.
En múltiples ocasiones, he visto cómo se inclina
por otras personas, por otras voces,
dejando mi opinión y mis pensamientos en el olvido.
Encuentro más consuelo en brazos ajenos,
en personas que no son de mi sangre,
que en el abrazo que debería ser mi refugio.
Sé que me ama, en su manera extraña y distante,
pero es un amor que no logro entender,
un amor que no me llena, que no me consuela.
He pasado y pasaré más de media vida
sin el consejo y el apego de una madre
que esté interesada en impulsarme,
en ayudarme a ser una mejor persona.
Me siento herido, roto, en una soledad profunda,
una soledad que se extiende desde ambos padres,
una carga pesada que llevo en silencio.
Este sentimiento es raro, es duro, es cruel,
pero en mi corazón aún guardo un anhelo,
una esperanza de que algún día,
pueda encontrar el amor y el apoyo
que siempre he buscado.
#familia#notas de dolor#notas de vida#notas tristes#notas#cosas del alma#cosas que siento#cosas del corazón#cosas mias#sad moments
2 notes
·
View notes
Text
Z A N C A D A S
En la vorágine de la vida diaria, es fácil perder de vista los pequeños logros que alcanzamos. Nos enfocamos tanto en las grandes metas y en los sueños a largo plazo que olvidamos que cada paso cuenta, cada pequeño avance es significativo.
Piensa en esos momentos cotidianos que parecen insignificantes pero que, en realidad, son victorias personales. Levantarte temprano para disfrutar de un café tranquilo antes de comenzar el día, terminar ese libro que tenías pendiente, o incluso recordar regar tus plantas. Estos son logros que demuestran tu capacidad de cuidar de ti mismo y de tu entorno.
A veces, subestimamos el poder de estos pequeños triunfos porque no vienen acompañados de fanfarrias ni de grandes celebraciones. Pero cada uno de ellos es un ladrillo en la construcción de nuestra vida. Son esos momentos los que nos fortalecen y nos preparan para enfrentar desafíos mayores.
Así que, la próxima vez que logres algo pequeño, tómate un momento para reconocerlo y celebrarlo. Porque en la suma de todos esos pequeños logros, encontramos la verdadera esencia de nuestro crecimiento y bienestar.
1 note
·
View note
Text
L A P S O S
A veces, siento que el tiempo es mi mayor enemigo. Las circunstancias ajenas, esas que no puedo controlar, parecen conspirar para recordarme las dificultades que he arrastrado durante años. Los daños emocionales y físicos del pasado han dejado cicatrices profundas, y cada día es una lucha constante para no dejarme vencer por ellas.
Recuerdo momentos en los que el dolor era tan intenso que parecía que el tiempo se detenía, como si cada segundo se alargara en una eternidad de sufrimiento. En esos instantes, el tiempo no era más que un cruel recordatorio de mi vulnerabilidad y de las heridas que aún no han sanado.
Sin embargo, a pesar de todo, me esfuerzo por mantener la constancia. Cada día, me levanto con la esperanza de que mañana será un mejor día. Me aferro a la idea de que, aunque el tiempo puede ser un enemigo implacable, también puede ser un aliado poderoso. Con cada amanecer, tengo la oportunidad de empezar de nuevo, de seguir adelante y de encontrar la fuerza para superar los obstáculos que se presentan en mi camino.
He aprendido que el tiempo, aunque a veces parece estar en mi contra, también me ofrece la posibilidad de sanar y crecer. Cada día es una nueva oportunidad para reconstruirme, para aprender de mis experiencias y para fortalecerme. La esperanza de un mañana mejor es lo que me impulsa a seguir adelante, a pesar de las dificultades.
Así que, aunque el tiempo puede ser un enemigo en circunstancias ajenas, también es un testigo silencioso de mi resiliencia y mi capacidad de superación. Y mientras mantenga la esperanza y la constancia, sé que siempre habrá un nuevo día lleno de posibilidades.
#tiempo#progresiones#sanar el alma#escritos#citas de la vida#resilencia#continuidad#hombres#insomnio
1 note
·
View note
Text
Sanación Indulgente
No por olvidar lo que ha pasado,
sino por liberar mi mente y mi alma,
por sentirme aliviado y ligero,
por una salud mental que florece.
El odio y el rencor son cadenas,
que atan el alma y oscurecen el corazón.
Hoy elijo soltar esas ataduras,
por mi progreso, por mi desarrollo personal.
Cada día construyo una mejor versión de mí,
enmendando errores, enfrentando problemas,
siguiendo el camino del kaizen,
mejorando continuamente, paso a paso.
Perdonar no es justificar,
es liberar el peso que me impide volar.
Es un acto de amor propio,
una decisión consciente para sanar.
Hoy elijo el perdón como herramienta,
para crear una vida llena de paz y crecimiento.
Porque el perdón es la llave,
que abre las puertas de mi bienestar.
#escritos#notas de vida#cosas de la vida#hombres#amor#familia#cosas que pienso#motivación#desarrollopersonal#work in progress#kaizen#mejorar
4 notes
·
View notes
Text
PAPÁ (2)
El camino del perdón...
Perdonar no es fácil, especialmente cuando las heridas son profundas y afectan no solo a uno mismo, sino también a quienes amamos. Mi padre, con sus acciones y palabras, ha dejado cicatrices en mi madre, mi hermano y en mí. De los tres, he sido yo quien más ha luchado por superar y entender el dolor que nos ha causado.
El perdón no es un acto de debilidad, sino de fortaleza. Es reconocer que todos somos humanos, propensos a errores y fallos. Perdonar a mi padre no significa olvidar lo que hizo, sino liberarme del peso del rencor y la amargura que llevo dentro.
He aprendido que el perdón es un proceso, no un destino. Cada día es una oportunidad para sanar un poco más, para dejar ir el dolor y abrir espacio para la paz y la comprensión. Estoy en un proceso de transformación personal, y superar estos acontecimientos forma parte de ello.
Perdonar a mi padre es también un acto de amor propio. Es permitirme a mí mismo vivir sin el peso del pasado, sin las cadenas del resentimiento. Es un paso hacia la libertad emocional y la sanación.
A todos los que están en un camino similar, les digo: no están solos. El perdón es un viaje que vale la pena emprender, por nosotros mismos y por aquellos que amamos. Espero que esto te sea útil y te ayude en tu proceso de sanación.
#para papá#papá#perdon#perdonar#notas de vida#cosas de la vida#hombres#escritos#noches de pensamientos#insomnio#familia#cosas que pienso
6 notes
·
View notes
Text
Transformación y Resiliencia
En la vida, los cambios son inevitables. A veces, nos enfrentamos a situaciones que parecen insuperables, pero es en esos momentos cuando descubrimos nuestra verdadera fortaleza. Los nuevos cambios en mi vida han sido como un faro en la oscuridad, guiándome hacia un camino de mejora y crecimiento personal.
He aprendido a ver cada desafío como una oportunidad para aprender y fortalecerme. No más me dejo abatir por las circunstancias negativas; ahora, las enfrento con una sonrisa y la determinación de superarlas. 🌈
Recordemos, cada día es una nueva página en tu libro de vida. Escribe una historia de éxito y superación. ¡No permitas que nada te detenga! 💪
#resilencia#motivación#cosas de la vida#escritos#superacion#superación personal#exitopersonal#cambios#objetivos de vida
20 notes
·
View notes
Text
TEMPLANZA FORJADA
En el templo del acero y la voluntad,
donde el esfuerzo se mide en gotas de realidad,
encuentro un refugio, un altar sagrado,
donde mis problemas quedan silenciados.
Cada peso levantado, una carga menos en mi mente,
cada repetición, un susurro que me aliente.
Los hierros, testigos de mi transformación,
son los pinceles de mi nueva creación.
El sudor, las lágrimas de mis emociones mudas,
en cada sesión, se vuelven menos crudas.
El gimnasio, mi terapeuta silencioso,
convierte el dolor en algo hermoso.
La música de los discos al chocar,
es la melodía que me ayuda a respirar.
Y en cada zancada, salto o estiramiento,
libero el lastre de mi sufrimiento.
Así, cada día, con cada movimiento,
reconstruyo mi ser, encuentro mi aliento.
El gimnasio, mi aliado en la batalla,
donde cada victoria personal se talla.
3 notes
·
View notes
Text
GÉLIDOS SENTIMIENTOS
En la vorágine de la modernidad, donde el ritmo frenético de la vida a menudo eclipsa la calidez de las relaciones humanas, nos encontramos inmersos en una sociedad que, a veces, parece haber olvidado la importancia de los sentimientos. Vivimos en un mundo donde la vulnerabilidad es vista como una debilidad y la expresión sincera de las emociones es un acto de valentía.
La indiferencia se ha convertido en la moneda corriente, y con ella, la empatía y la comprensión se han vuelto monedas raras. Nos hemos acostumbrado a mantener una fachada de apatía, protegiendo nuestros corazones detrás de un muro de desapego, temerosos de ser juzgados o heridos. Pero, ¿qué perdemos cuando reprimimos lo que sentimos?
La capacidad de sentir profundamente es lo que nos hace humanos, lo que nos permite conectar con los demás en un nivel más allá de lo superficial. Cuando expresamos nuestros sentimientos abiertamente, corremos el riesgo de ser malinterpretados, de que se piense que “algo ocurre”, pero también abrimos la posibilidad de forjar lazos auténticos y significativos.
Es hora de cuestionar la norma, de desafiar la noción de que ser frío y sin sentimientos es lo normal. Debemos atrevernos a sentir, a compartir nuestras alegrías y tristezas, nuestras esperanzas y miedos. Porque al final del día, son esos momentos de conexión genuina los que dan color y calor a la existencia, los que nos recuerdan que, a pesar de todo, no estamos solos en este vasto y a veces frío universo.
La sociedad puede ser fría, pero cada uno de nosotros tiene la chispa de humanidad necesaria para derretir el hielo. Con cada palabra de consuelo, con cada gesto de comprensión, podemos hacer la diferencia. Seamos el cambio que queremos ver, y poco a poco, podremos transformar el frío invierno emocional en una primavera de sentimientos florecientes.
3 notes
·
View notes
Text
Nunca te das cuenta de lo mal que te trata alguien hasta que se lo explicas a otra persona.
— Oríah ☁️.
7K notes
·
View notes