mamelukeraza

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let's work it out on a remix

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I was reading about roman clothing and uh one thing led to another

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Oh Pierre…

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FOR MY HISPANIC MOOTS/PARA MIS MUTUALS HISPANOS: No lo había hecho antes porque estaba inconforme con el número de capítulos publicados, pero como ya van cinco, y aprovechando que es el mes del orgullo, ¡entonces me siento más cómodo promocionando esta historia! Si les gusta la Historia de la Independencia de México, y en especial el ship entre Vicente Guerrero y Agustín de Iturbide, ¡vayan a leer Contradanza! n_n Van a encontrar una no tan perfumada versión de los hechos en Acatempan y la relación entre ambos caudillos, enemies to lovers, tensión homoerótica, trancazos, caballos chistosos,,, sí, todo lo que de ellos se requiere xd ¡Les dejo el link! <3 CONTRADANZA II AGUSCENTE

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HAPPY PRIDE MONTH!!!!!!!!!

oh god im going to Draw so hard for this month :3

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this shit is incredibly funny

I’m so sorry ancient Roman tumblr but I made another cursed Agrippa and Augustus redraw.

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Mammu! Finius and Ferbingetorix built Rome in a day!

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what if instead of catullus he was called freaktullus and instead of writing poems he would. actually post cancelled nothing would change

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you cant even begin poems with "i will sodomise and facef uck you" anymore. because of woke .

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…I have a theory

my evidence (Suetonius):

The verse in question:

In conclusion: 🏳️‍🌈?

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Julius Caesar!!! (WIP obvi😢)

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Prince Alexandre Ivanovitch Tchernychev ou Tchernychiov/ Александр Иванович Чернышёв ✨

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heey pstt. look at my bad sulla attempts

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A él, Agustín de Iturbide, nada se le podía negar.

A petición de una personita, y de manos del maestro Catón una vez más, les traigo otra de las Iturbiradas de ese señor todo loco.

En voz baja se comentaban los desaforados entuertos de Iturbide. Digo que en voz baja porque todos temían su arrebatado carácter, que se encendía a la menor provocación. Se contaba, por ejemplo, que andando él en campaña en Veracruz hubo menester de una recua de mulas para transportar un cargamento. Mandó un propio al alcalde de Xalapa, don Bernabé Elías, ordenándole, más que pidiéndole, que le entregara aquellas acémilas. Quizá no gustó a don Bernabé el perentorio modo que tuvo Iturbide de hacerle la demanda, o a lo mejor no tenía las mulas en el número que don Agustín las requería, el caso es que no atendió la petición. Nunca lo hubiera hecho. Fue personalmente Iturbide hasta Xalapa, buscó al alcalde, lo sacó a empellones de su despacho y en plena plaza hizo que sus soldados lo desnudaran de medio cuerpo arriba y con sus propias manos lo enjaezó como a una mula, le puso albarda, freno, riendas y gualdrapa, y luego ordenó a uno de sus hombres que así atalajado, y estirándolo con una cuerda, le diera a don Bernabé Elías una vuelta en torno de la plaza para que todos los vecinos lo vieran y aprendieran de ese modo que a él, Agustín de Iturbide, nada se le podía negar. Otra vez hizo prisionero a un caballero principal llamado don Juan Sein, y lo condenó a morir fusilado acusándolo de haber dado ayuda a unos insurgentes a quienes él, Iturbide, perseguía. No se tocaba el corazón para fusilar don Agustín. Dice don Francisco Bulnes que "estaba acostumbrado a matar tanto como a comer y dormir". Ya frente al pelotón don Juan juró por la salvación de su alma que era inocente de la culpa que Iturbide le imputaba, y casi se puso de rodillas para pedirle piedad. El jefe realista se mostró inflexible. La esposa de don Juan, llorando, clamó a Iturbide suplicándole la vida de su marido. Don Agustín ni siquiera la miró. Levantaban ya sus fusiles los soldados que harían la ejecución cuando Sein tuvo una inspiración súbita: pidió a Iturbide que le permitiera hablar con él a solas un momento, y le dijo al oído que tenía ocho mil pesos fuertes, y que gustosamente se los entregaría si le perdonaba la vida. Lo que no pudieron juramentos de inocencia ni súplicas de piedad lo consiguió el poderoso caballero que decía don Luis de Góngora y Argote: el dinero. Don Juan entregó el dinero a Iturbide, éste lo dejó ir, la cuantiosa suma la compartió el jefe realista con su superior, Calleja, y todos contentos.

Fuentes. 2008, p. 437-438. La otra historia de México. Hidalgo e Iturbide: La gloria y el olvido.

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"Pues más sabrosa te va a saber la muerte que te espera."

¡Traigo nuevamente otro extracto de la obra del maestro Catón! Ésta vez menos cañonazos y más chocolatitos; con Agustín de Iturbide como nuestro protagonista.

Ahora que Iturbide era el primer insurgente, el autor de la Independencia nacional, ¿quién recordaba que él mismo había sido el enemigo más sañudo que la causa de la Independencia había tenido, el más enconado perseguidor de los insurgentes? Estaba en el olvido el terrible parte que Iturbide escribió al virrey después de su triunfo en Salvatierra sobre las huestes de Rayón, el 16 de abril de 1813: "Perecieron 350 miserables excomulgados, que descendieron a los profundos abismos del infierno…" Ese mismo día, un Viernes Santo, Iturbide fusiló a 25 prisioneros. "El mejor medio de santificar el día", dijo piadoso. Nadie recordaba tampoco al infeliz padre Luna, insurgente. Cayó prisionero de Iturbide y se dispuso a morir fusilado, como sus compañeros. Pero Iturbide lo hizo separar de los condenados para ser llevado a su presencia. Le dio un abrazo fraternal, le recordó que habían sido amigos en la infancia. ¿ba él a fusilar a su "colega de niño"? El padre Luna se alegró hasta las lágrimas. De los umbrales de la muerte salía para caer en brazos de un verdadero amigo, de su salvador. Hizo Iturbide que el padre Luna se sentara y entabló animada conversación con él. Recordaron sus juegos infantiles, las travesuras de sus días de niñez. Le preguntó Iturbide cómo era posible que hubiera caído en la tentación de andar con aquellos malvados insurgentes, heréticos, sacrílegos, enemigos del rey y de Dios. El padre Luna, sinceramente consternado, agradecido con Iturbide por salvarle la vida, le dijo que ahora conocía su error y que se arrepentía sinceramente. Jamás volvería a luchar por la causa de la Independencia. Iturbide le hizo preguntas sobre los jefes, su número de tropas, su localización, y a todo respondía puntualmente el padre Luna, cuyo corazón desbordaba en gratitud. Acabado el interrogatorio, Iturbide ofreció chocolate al padre Luna, con puchas y rosquillas de manteca. Juntos disfrutaron la merienda, riendo de sus cosas de niños, recordando con nostalgia los días del ayer. De pronto Iturbide preguntó al padre Luna: — ¿Qué te pareció el chocolatito, y el trato que te he dado? — Eres tan caballeroso amigo como indulgente militar. En cuanto al chocolatito, me supo exquisito, como que es muy bueno. Y ofrecido por ti, más sabroso. En eso cambió el tono de la voz de Iturbide. — Pues más sabrosa te va a saber la muerte que te espera —le dijo al espantado sacerdote—. Ahora vas a ver cómo trata Iturbide a los enemigos del rey. Disponte a morir dentro de dos horas.

Fuentes. 2008, p. 563. La otra historia de México. Hidalgo e Iturbide: La gloria y el olvido.

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Vicente Guerrero y el cañonazo.

Recientemente hice fanart del caudillo Guerrero, agregué muchas de sus cicatrices (algunas canonicas, otras como decisión artística) y me gustaría explicar la del hombro. Simplemente porque es una historia graciosa. Esto se da poco después del fusilamiento del generalísimo José Ma. Morelos, para dar contexto temporal del texto que acompaña el relato.

[…] Los demás jefes lo ignoraron. Victoria y Guerrero se negaron hasta tener una entrevista con él; Bravo se juntó con Victoria, pero viendo éste la popularidad que don Nicolás tenía entre las tropas lo apartó de su lado con acritud. Entonces Bravo buscó a Guerrero, y lo encontró postrado en el lecho del dolor, porque resulta que el pobre de don Vicente se puso a revisar un cañón, pero tuvo la malísima ocurrencia de revisarlo cuando estaba cargado, y quién sabe qué fierro le movió que el tal cañón se disparó con estruendo fragoroso, y cuando se disiparon el humo y el susto, en ese orden, don Vicente estaba tendido en el suelo echando sangre a chorros por un brazo. Y menos mal que nomás ahí pegó la bala, que si no…

Fuente: Fuentes. 2008. La otra historia de México. Hidalgo e Iturbide: La gloria y el olvido.

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Happy Ides of March! This is a historical account of what Caesar said: