Tumgik
mutismonoselectivo · 4 years
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EL CENTRO
Un día dispuesto a comer decidí vender mi corazón , bajé al centro y en una esquina inicié a pregonar:
A diez mi corazón a diez...
Sin embargo replicaron
- Está muy caro loco!
Por lo que rebaje 2 mil pesos
Y continué
A 8 mi corazón a 8...
Cuando dice el tintero de la carpa verde
- Le doy 4
Sin embargo no los recibí porque con eso sólo lograba aumentar mi hambre
Entonces empecé por pedir 6 mil
A 6 mi corazón a 6...
Y nadie se detenía a mirarlo
Por lo que baje a 4 mil.
A 4 mi corazón a 4....
Y el tintero se ríe y dice:
- Le doy 2 , sí vio...Por güevon ¿Para qué no aprovechó antes?
Pese a lo dicho no acepté porque me parecía que 4 mil era menos de lo justo, ya había rebajado tanto...
Despues de haber pasado todo el dia, cansado y con hambre opté por regalarlo.
- Damas y caballeros: regalo mi corazón.
Al tintero pareció no importarle, los transeúntes en su afán andaban por inercia por lo que la señora de las arepas me dice:
- Yo le recibo esa chimbada mijo, regalado hasta un moco.
Ese día dormí sin corazón y con hambre.
(...Cuento corto...)
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mutismonoselectivo · 6 years
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Domingo por la tarde
Bajan las horas como cargadas de afán aún cuando la tarde muestra su cara más fúnebre.
Y a lo lejos te digo - Calma baby
Tú y yo somos sombras que no caen en la noche.
Somos el grito borracho de una madrugada en el centro
Somos la excusa de dios para no existir.
Tú eres bala de cazador y yo elefante que no huye , y si esta tarde existe es por nosotros.
Tranquila nena, acércate un poco más,
Mira que he dibujado con ansias una diana en mi pecho para que no falles, ven y extingue en mi cuerpo tu cuerpo , ven y no peques más.
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mutismonoselectivo · 6 years
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Envuelven las montañas , lo que envolver no pueden mis penas
Ese recodo de vida que se asoma tímida sin saludar.
Miro al abismo mientras la vela debajo de mi palma escasea
E intento no abandonarme a las ideas que desgastan los años.
Sí, me alcanza la vida en estas horas donde respirar se hace blando y el frío ya no se cala en los huesos.
Es tan difícil reconocerse así,
La paz no es costumbre en este cuerpo violento, que no se cansa de lanzar piedras al aire esperando recibirlas de cabeza.
Hoy con decisión no prevista de antesala, saludo a la muerte como Judas a Cristo y me arrepiento por no haberla traicionado antes.
La vela se seca y mi mano vuelve a estar fría, a lo lejos gritan mi nombre, la ambulancia ya va a arrancar. Es hora de volver a morir.
- Nemo Rodas
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mutismonoselectivo · 6 years
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Ausencia
Cuántas veces se cayeron mis dientes y por no haber respuesta del ratón los fui enterrando uno a uno bajo sombras , escondidos del verano , de los gusanos y los cuervos
Todos los días llegaba a regarlos. Cargaba en mi hombro el agua del día anterior, le escurría a mis venas su sed. No sobró el sudor en mi cuello esperando un árbol de dientes.
Ahora pienso en lo bueno que habría sido tener unos cuantos que llenaran esta boca mueca de sonrisa ausente y no haber gastado mis días haciendo crecer árboles de mentira.
- Nemo Rodas
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mutismonoselectivo · 6 years
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Y uno se traslada a los aforismos de Porchia: Quien no llena su mundo de fantasmas, se queda solo. #antonioporchia #robertojuarroz #juarroz #poemas #poema #poesiavertical #poesia #poesía #prosa #versos #verso #argentina #colombia #barranquilla #escritor #escritos #libros #libro #escritura
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mutismonoselectivo · 7 years
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Los olvidados
Son el ultimo hombre del bar Y duermen aunque la barra esté llena. Los ven como sombras de retrovisor Como se ven de lejos las cosas que no se quieren ver. Andan de un lado a otro. Buscan una ciudadanía en cuerpos xenófobos y mueren solos, sin patria. Son leprosos para la muerte, lejanos. Cargan campanillas en el cuello para que sean reconocidos y así vivir sin soledades. Cuando las personas reconocen a un olvidado, este muere y se vuelve perro. Por eso ellos no tienen registros , ni actas de de defunción. Por eso los días no pasan en ellos y el tiempo evade su sueño. Por eso los oyen ebrios en las calles y los creen vivos, pero no saben que la lluvia les acorta la vida acelerando su locura. Ellos saben que asentir en las conversaciones de dios, elimina el absurdo. Reconocen la cerveza ajena aunque sea brindada. Tienen por superstición, no dar sus ojos a una lluvia de estrellas porque saben que los deseos sólo los cumplen las putas y que es ahí donde se fabrica el amor.   Los olvidados, mis olvidados Ya no los recuerdo.
-Alejandro Rodas
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mutismonoselectivo · 7 years
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2
La vida me ha visto con sus ojos de tragaluz y yo me he dejado ir en ellos. Sus cabellos, siempre finos cual lombrices antes de pesca, alimentaron mi fatiga. Paralizaron mis pies los descansos del tiempo Y el silencio antes del segundo, gangrena seca fue a la lengua Mi verso, la palabra no dicha Mis horas, las de esta madrugada inerte que se debate con su destino. El alma, de lo no existido Los labios, que insinuaron una paz dolorosa Y esta vida que es medusa, la he visto a los ojos antes de nacer. Por eso cuando te acerques, hermano sol, recuerda que aún soy desde el vientre de mi madre del cual no naceré.
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mutismonoselectivo · 7 years
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1
Nada estimo en la vida Más que apresurarme a la parca ¿Qué es la vida sino el disfrute del calvario? Que relinchen los látigos Con el galope de los caballos de Aquiles Que venga hades con lirios a levantar un gladiador, ese que nunca peleo y las manos muertas siempre mantuvo Libéralo señor, porque más vale un día por fuera de la jaula aunque esta sea de oro. Corónalo de vientos, que hagan temblar el mar Y hundir barcos. No lances salvavidas a los peces Ni pan a los muecos Que los muertos entierren a sus muertos. Mas tú señor, recoge a este que camina entre vivos pero hijo de madre infertil siempre ha sido.
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mutismonoselectivo · 7 years
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Se extrañan esos lugares que nunca sobran en la calle y a uno parece que le amputaran la nostalgia porque se siente es un dolor como de vivo. Entonces uno se saborea la vida desde el suplicio y la vida supone quitar la sed aunque al día siguiente llegue la resaca, es cierto, uno se puede jubilar de un bar pero nunca de la vida, ella nos alcanzó y nos mató desde antes. DG.
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mutismonoselectivo · 7 years
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Se extrañan esos lugares que nunca sobran en la calle y a uno parece que le amputaran la nostalgia porque se siente es un dolor como de vivo. Entonces uno se saborea la vida desde el suplicio y la vida supone quitar la sed aunque al día siguiente llegue la resaca, es cierto, uno se puede jubilar de un bar pero nunca de la vida, ella nos alcanzó y nos mató desde antes. D.G.
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mutismonoselectivo · 8 years
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Uno no sabe qué hilos se tejen dentro del estómago para extrañar un lugar, aunque se camine por las mismas calles de asfalto. Uno no olvida pero algún desasosiego se asienta sobre ello.
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mutismonoselectivo · 8 years
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PIELES
Me doy cuenta que no sólo estoy hueco por dentro sino que ese espacio lo ocupa otro yo, que no soy yo, y resulta difícil, penoso e irrelevante intentarlo conocer, pues cuando esta piel haya mudado, Seré el otro que no conozco , y ese otro no pensará en mí más, No habrá recuerdo de mí en mí Se preocupará más por el mismo vacío que lo llena inconscientemente, cual matrioska.
En este mudar y demudar He sido sombra Pájaro Ratón de laboratorio Cazado y cazador Llave sin cerrojo, llave inútil. Agua para lavar pies Comida de muecos Cristiano para los ateos Intelectual con todos, menos con los pescadores Madre de tres hijos que ya no tiene trabajo. Prostituta sifilítica. Perro.
He sido todas las cosas menos yo Ni siquiera sé si he sido. Por si con urgencia el suicidio habla Este no soy yo, es otro.
-El otro
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mutismonoselectivo · 8 years
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Los entristecidos
Los entristecidos          Que de una vez se vayan, que se mueran          Jaime Sabines Los entristecidos son relojes descompuestos que nos miran con la torcedura de las manecillas. Los entristecidos son una secta que nunca se reúne a llorar. No se quejan porque ya para qué. Serían una lágrima que llora otra lágrima. En su mirada y en sus gestos está el movimiento sutil de un río. Existen en el juego de palabras y en su violencia: no muestran sus lágrimas a este mundo idiota; lloran en las calles oscuras de Tuxtla cuando la canción de Cohen y Dylan sea un mero recuerdo; lloran en el pecho de una camisa sin cuerpo; lloran en la hora en que todos están dormidos y el iris del sol comienza a meterse a través del cristal roto. Los entristecidos toman mucho licor porque es una manera de gemir hacia las entrañas, una manera de entretener al félido que de otro modo saltaría, apesadumbrado, al cuello del sobrevivir. Así son los entristecidos, así mueren. Si les pedimos que no más llanto, ellos responderán: la higuera del patio tiene una rama quebrada; hoy no tengo ganas de levantarme; las casas crecen como vegetación sobre la vegetación; me da miedo atravesar las avenidas; en la tarde amanecí con el cuello torcido. Saben que lo sin remedio es un amor por ganar, que del pozo estéril salen cubos desbordados de rock melancólico, que en la pústula interna hay diminutas flores, que del nudo en la garganta puede brotar un brazo. En fin… Los entristecidos saben que a la soledad llega siempre un beso, un grito, una palabra más triste, un vaso de vino amoroso, un poema arrancado al suicidio, una mano que nos acomoda el cabello. (De entre los animales que medran en los entristecidos, el león tiene un sitio predominante. Este carnívoro ofrece un silencio y un llanto tan potentes como la voz. A decir verdad, a los entristecidos no les interesa su voz; solo retoman el mutismo y la forma de gemir de los leones. Respecto a la nauyaca no hay duda alguna, sobre todo en el caso de la especie te amo, serpiente que tiene vocación de sepulturero.) Los entristecidos llevan un león en el lugar del alma y una nauyaca en el sitio de la querencia. Los entristecidos quieren terriblemente y lloran como leones silenciosos. Su hora preferida comienza en la madrugada: Merodean sobre las tejas, en el sueño del prójimo; se contorsionan en la oscuridad vegetal, se muerden a sí mismos en el callejón, cambian de piel en los hospitales. No se les arranca ninguna protesta autoritaria; pocos saben de se existencia. Cofradía líquida. Los oyen bailar en un segundo piso y los toman por alegres, por ruidosos, aves de escandaloso aleteo. Si supieran, si observaran la manera del vocerío y las vueltas del baile, los movimientos de la víbora y las patas llagadas del félido; si pudieran escuchar por una rendija las palabras que profieren. Esto sólo es dado a otros entristecidos. Y otros entristecidos, al escuchar la fiesta del llanto, abren botellas en sus casas, se desvisten el cansancio y permiten que el aroma del limonero entre al cuarto de música. Los entristecidos no conciben la belleza sin cicatriz, como el presente que es también futuro, como la caricia que es un poco tierno picotazo, como una mano con las uñas mordidas. Los entristecidos aman el poema dolorido, las arañas de la película, los recados en la pared; aman el trazo torpe, la picazón del pasto, las ramas vencidas de los árboles. Mucho hacen con seguir subiéndose en los camiones, leyendo literatura perfecta, mucho hacen con ir de compras y habitar casas de concreto, mucho hacen con quitarse los zapatos al amanecer, amándose desnudos. Mucho, en realidad, hacen. Pero hay un asunto sobre el que no existe duda: los entristecidos son los perfectos amorosos. Guillermo Samperio. (Ciudad de México, 1948 - Ciudad de México, 2016)
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mutismonoselectivo · 8 years
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Vacío
Sea este medio día, noche aparte Donde sombra acaricia sombra y pide tiempo. Estas ansias de no ser, Este vacío casi lleno de fiebre ¿Cómo puede caber tan poco en este pecho de nadie? ¿Será que nos ha sido negado el sol a quienes por la escasez de gracia vivimos endeudados con el tiempo?
Pesan penas tras penas los dolores ajenos La saudade morbosa se añeja Y la sombra es luz empañada. Viajo entonces como quien enebra un hilo en una aguja ciega, pero el ciego soy yo .
Se vive insuficiente, deficiente, frustradamente entre lo que se siente y lo que se decide no sentir, se siente lo que duele. Y adentro, este vacío cada vez más hondo, más insasiable, más vacío. No se puede llenar donde nunca hubo.
Amanece sin que termine el día. ¿Para qué otro? No se puede vivir, cuando vivir es lo único que queda.
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mutismonoselectivo · 8 years
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Aquí se revoluciona la vida.
He reversionado tantos momentos mis versos que no me queda más versión que verme honestamente en ellos. Versículo primero de mis no tan santas escrituras. Adoptar junto con lo favorable lo adverso. Tu derecho y tu reverso . Se trata de ocultarse o de verse. Pedir un verso que se convierte en deseo. Y hay que atreverse o morirse si al enfrentarte con un ejército de sílabas, te vas desnudando con ellas y el nudo del que hablas empieza a desatarse como si nada. He reversionado tantas veces mis versos que cada uno ahora parece cobrar vida y me veo a mi misma consumiéndome, en mitad de un orgasmo o haciéndole cosquillas al miedo. Así percibo y así siento. Vivo, que es mucho más que todo esto.
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mutismonoselectivo · 8 years
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LA CASA DE TÍA "DOLO"
Por las calles de mi pueblo Anduvo el viejo Alejo Con su sombrero de gabán Con sus sandalias tres puntá
Se llenaba de tardes la esquina del parque Las sillas en la terraza,  las niñas moviendo sus nalguitas entre los vestidos con la picardía que sólo la niñez consiente y el viejo Alejo que no alentaba,  se reía.
El patio que divide la casa de Dolo y Alejo es apenas nuevo Un patio de naranjas, torombolo y cocos La mecedora de tía dolo que no deja de mecer La cotorra que siempre grita “Estela” cuando tiene hambre El sonido del machete del señor de la casa. El “suaz” del agua cuando la niña Manuela regaba las Matas.
La niñez perdida y viviendo en el diván Cómo se extrañan esas horas cuando no había conciencia del dinero o de la vida, si es que existe conciencia de estas en algún modo posible. Cuando todo era amable de un modo no especial. Mi memoria era la de un Súperman o la de un carro amarrado siendo arrastrado por la calle llena de barro. ¿Cómo se es niño cuando no se tiene al viejo Alejo?
Son en definitiva,  la sumatoria de recuerdos y no las ausencias, las que salpican su nostalgia encima de un piso recién limpiado. Son las tardes en la casa de tía dolo con el viejo Alejo mientras las niñas pasan hacia el parque, con sus vestiditos de  primera comunión moviendo las nalguitas.
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mutismonoselectivo · 8 years
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Por ejemplo la palabra mariposa. Para usar esta palabra no hace falta aligerar la voz, ni dotarla de pequeñas alas empolvadas, ni inventar un día soleado o un campo de narcisos, ni estar enamorado, ni estar enamorado de las mariposas. La palabra mariposa no es una mariposa de verdad. Está la palabra y está la mariposa. La gente tendrá todo el derecho a reírse de ti si confundes estos dos conceptos. No le des tanta importancia a la palabra. ¿Qué quieres transmitir, que amas a las mariposas con más perfección que nadie o que entiendes realmente su naturaleza? La palabra mariposa no es más que un dato. No te da pie a revolotear, elevarte, proteger las flores, simbolizar la belleza y la fragilidad o interpretar de alguna forma a una mariposa. No representes las palabras. No representes nunca las palabras. No intentes nunca despegar del suelo cuando hables de volar, ni gires la cabeza y cierres los ojos cuando hables de la muerte. No me mires con ojos ardientes cuando hables del amor. Si quieres impresionarme al hablar del amor, métete la mano en el bolsillo o debajo del vestido y acaríciate. Si tu ambición y tu hambre de aplausos te han llevado a hablar del amor, debes aprender a hacerlo sin desacreditarte a ti mismo ni lo que dices. ¿Qué expresión podría definir a nuestra época? Nuestra época no tolera expresión alguna. Todos hemos visto fotografías de madres asiáticas desoladas, así que no nos interesa la agonía de tus órganos achacosos. Nada de lo que puedas expresar con tu cara tiene parangón con el horror de nuestro tiempo. No lo intentes siquiera. Sólo merecerías el desprecio de los que han sido tocados en lo más hondo. Todos hemos visto telediarios con seres humanos embargados por el dolor y la desazón. Todos sabemos que comes como Dios manda y que hasta te pagan para que te subas a un escenario. Estás tocando para gente que ha vivido catástrofes, así que tranquilízate. Di las palabras, transmite los datos y hazte a un lado. Todos sabemos que sufres. No puedes contarle al público todo lo que sabes del amor en cada verso de amor que digas. Hazte a un lado: la gente sabrá lo que tú sabes porque ya lo sabía. No tienes nada que enseñarles. No eres más hermoso que ellos. Ni más sabio. No les grites. No fuerces una entrada en seco. Eso es sexo mal practicado. Si muestras el contorno de tus genitales, entrega lo que prometes. Y recuerda que, en el fondo, la gente no quiere acróbatas en la cama. ¿Qué necesitamos? Estar cerca del hombre natural, estar cerca de la mujer natural. No quieras ser un cantante venerado por un público numeroso y leal que desde siempre ha seguido los altibajos de tu carrera. Las bombas, lanzallamas y demás mierdas han destruido algo más que árboles y poblados. También han destruido los escenarios. ¿Acaso creías que tu profesión iba a escapar de la destrucción general? Ya no hay escenarios. Ya no hay candilejas. Estás entre la gente, por tanto sé modesto. Di las palabras, transmite los datos y hazte a un lado. Quédate solo. Quédate en tu habitación. No montes un número. Se trata de un paisaje interior. Está dentro y es privado. Respeta la intimidad de tus textos pues fueron escritos en silencio. La valentía de la interpretación es decirlos, la disciplina de la interpretación es no violarlos. Deja que el público sienta tu amor por la intimidad aunque ésta no exista. Sé una buena puta. El poema no es un eslogan. No puede promocionarte. No puede fomentar tu reputación de sensible. No eres un semental. No eres un ladrón de corazones. Tanto gánster del amor y tanta tontería. Eres un estudiante de disciplina. No representes las palabras. Las palabras mueren cuando las representas, se marchitan, y no nos queda más que tu ambición. Di las palabras con la precisión exacta con que comprobarías la ropa de tu colada. No te conmuevas con una blusa de encaje. Unas braguitas no tienen por qué ponértela dura. No tiembles al ver una toalla. Las sábanas no han de dibujar una expresión de ensueño alrededor de tus ojos. No hace falta que llores en el pañuelo. Los calcetines no están ahí para evocarte extraños y lejanos viajes. No es más que tu colada. No es más que tu ropa. No seas un mirón escudriñando a través de ella. Limítate a llevarla puesta. El poema es mera información. Es la Constitución de la patria interna. Si lo declamas y lo hinchas con nobles intenciones, no eres mejor que esos políticos que tanto desprecias. No haces más que agitar una bandera y llamar patéticamente a la patriotería emocional. Piensa en las palabras como ciencia, no como arte. Son un informe. Es como si dieras una conferencia en la Federación de Montañismo. Las personas que te escuchan conocen todos los riesgos de la escalada, y te honran dando por sentado que lo sabes. Si se los pasas por la cara, estás insultando la hospitalidad que te ofrecen. Infórmales de la altitud de la montaña, describe el equipo que utilizaste, especifica el tipo de superficie y fija el tiempo que duró la escalada. No busques dejar al público boquiabierto. Si el público se queda boquiabierto, no será debido a tu apreciación de los hechos, sino a la suya. Tu mérito estará en la estadística y no en las inflexiones de tu voz ni en los ademanes enérgicos de tus manos. Estará en los datos y en la tranquila organización de tu presencia. Evita las florituras. No temas ser débil. No te avergüences de estar cansado. Tienes buen aspecto cuando estás cansado. Parece como si pudieras seguir y seguir sin parar. Y ahora ven a mis brazos. Eres la imagen de mi belleza
“CÓMO ESCRIBIR POESÍA”, por Leonard Cohen
(via pesadillasenlisergia)
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