Vemos a alguien superficialmente aplomado y pensamos, qué temple, qué calma, qué dominio de si, cuando lo que el tipo está realmente es anestesiado y apagado por dentro y además, desde esa anestesia, no se entera de nada de lo que sucede a su alrededor ni de lo que le sucede a él.
Conocí hace meses a un hombre así, desactivado emocionalmente, víctima (sin enterarse, de una psicopatilla de merendero que se va a aprovechar de él hasta dejarle en el tuétano).
Personalmente desconfío de la gente que no se emociona.
La gente que no se estremece, no se conmueve, no deja salir sus emociones, está un poco muerta por dentro.
Son robotitos de la vida. Maquinas biológicas en un sentido literal del término.
Y yo no soy de esos.
Y no me llevo muy allá con los muermos que si lo son.
Y tenía que decirlo.
Y como me toques las narices vas y te bajas del taxi 🤣🤦🏼♂️
Quiérete como ya eres, sin cambios, sin mejoras, sin condiciones, contagia, transmite y difunde ese amor.
Entrega Amor. Sin buscar recibirlo, sin pretender más que darlo y compartirlo.
Acepta tu cuerpo y tu aspecto sin necesidad de operaciones, apaños, parches o tuneados, acepta tu verdad interior y tus fallas y carencias sin armaduras, sin fingimientos.
Hay almas que lo consiguen en pocas vidas y almas que necesitan volver aquí una y otra vez para aprender lo que tienen que aprender para seguir creciendo. Almas muy viejas y almas muy jóvenes. Almas veloces y almas lentas, obtusas o con demasiada resistencia a regresar al Origen.
El camino para unas y otras a veces puede ser doloroso.
¿Que clase de alma eres tu? ¿Con qué tipo de almas te vas a relacionar?
Todo el mundo (incluso quienes me hacen daño) son mis Maestros y de todos trato de aprender.
Pero cuando algo me duele, lo digo.
Cuando alguien me hiere, lo digo.
Y cuando alguien, en su ceguera o en un arranque de ira, egoísmo o mezquindad, me hace daño, también lo digo.
Y a menudo lo digo por aquí, y mucha gente se entera.
No me hagas daño y no recibirás mis dardos, ni mis mordiscos, ni mis palabras como flechas o cuchillos atravesándote el corazón, el pecho o la espalda.
Hazte responsable de tus actos, como yo me hago responsable de los míos.
Uno recibe lo que da.
Si no das amor ni respeto, no esperes de mi que yo te lo de a ti.
Si me ignoras serás ignorad@
Si me hieres serás herid@.
Trátame bien y te trataré bien. Hazme daño y habrás empezado una guerra que no sabemos cómo terminará.
Pero recuerda que, aunque yo nunca empiezo las hostilidades, tengo la mala o buena costumbre de terminarlas.
Nilda Chiaravaglio explica porqué las personas felices no se enamoran.
Cuando algo te falta, cuando tienes que romper una inercia, cuando te enfrentas a una gran pérdida o duelo, o buscas respuestas, o estas en carencia, o no sabes salir de un atasco, inconscientemente usas a otro para salir de ese estado de dolor, infelicidad o insatisfacción y entonces te enamoras.
El otro es la tabla de salvación porque tu no sabes salvarte.
Y el enamoramiento no es Amor, aunque a veces se transforme o desemboque en Amor (pocas) .
Si aún eres una niña o niño en el cuerpo de un adulto, y tienes temas pendientes de resolver con papá o mamá, usas a tu pareja como mami o papi simbólico para tratar de resolverlos.
"Todos los dolores que sentimos en nuestra vida son momentos en los que la Neshamá (el Alma o Ser superior) está comunicando su esencia, su naturaleza, al Yo Encarnado, una información que muchas veces nuestra mente (el ego) bloquea."
Mario Sabán
Lamentablemente no escuchamos al Guía Interior y no seguimos el Plan ni el Camino, por más que la vida nos golpee y golpee o nos deje estancados.
Y nuestra existencia se va desarrollando torcida y se resiente de las resistencias de nuestro ego a evolucionar... y así, ni la Alegría ni la Abundancia se manifiestan.
¿Cuanto vas a seguirte resistiendo a la idea de que por ese camino no es?
El vacío, cuando paras, cuando te relajas, cuando entre tarea y tarea pones tu atención, es una señal o aviso de que lo que estamos haciendo no va a solucionar el problema.
Deja de huir de ti mism@, detente, evita esa frenética actividad que te anestesia y conecta con lo que sientes. Así todo se resolverá y sabrás lo que te pasa.
A veces la acción nos aleja de nosotros mismos y de la solución.
¿Tu quieres que te quieran por lo que eres, por quien tu eres... O quieres que te quieran por tu aspecto físico y apariencia, tu tipín, tus éxitos, tus logros, tu trabajo y reputación, con los que te sientes muy muy identificad@?
Hazte tu mism@ esa pregunta y respóndete con honestidad.
Si te quieres por lo que eres, sin necesidad de aditivos la cosa va bien... Pero si te quieres y pretendes que te quieran por la segunda lista de valores (ninguno de los cuales eres tu, por si no te habías dado cuenta), estas bien bien jodid@.
Tal vez aprendiste a amarte y solo te amaron en casa por cosas externas al ser real que tu eras. Tal vez nunca nadie se preocupó de saber quien eras de verdad. Tal vez nunca nadie te quiso y solo quisieron al otro, al perfecto, a la perfecta, al exitoso, la exitosa, el buen estudiante, el triunfador, el hijo ideal.
Tal vez nunca nadie amó a esa persona que estaba debajo de toda la máscara, la Armadura que has construido para defenderte del mundo.
Tal vez llevas fingiendo toda tu vida o creyendo que eres ese constructo exitoso y triunfador que no eres ni has sido nunca.
Tal vez eres un eneatipo tres y solo obtienes valoración de la mirada del otro. Solo obtienes autoestima y sentido de la identidad si los otros te admiran...
De ser así vas apañad@.
¿A quien admiran realmente si ese, esa que enseñas al mundo no eres tu?
¿No te sientes ridículo, inadecuado... Un fraude? ¿No sientes, cuando paras y te detienes de ese montón de actividades con las que anestesias tu ser, una atroz sensación de vacío?
Vas jodid@.
Porque para ti el camino es otro.
1/ Parar. Dejar de hacer cosas. Respirar, sentir. Dejar que surjan las emociones.
2/Reconocer que te has sobreidentificado con una cáscara, una máscara, un personaje falso, construido para ser amado, admirado y para obtener la aprobación de los demás.
3/Querer al que está debajo de toda la cáscara. Mirarle sin miedo ni juicio, aceptarle con sus defectos y miedos (muchos) y sus limitaciones (muchísimas) y vivir a partir de ahora desde la Autenticidad del ser que eres, mostrándote ante los otros de verdad.
¿Vas a atreverte a hacerlo?
De eso depende todo, que lo consigas o que fracases.
Tu Alma te necesita.
No la des la espalda.
He visto a demasiad@s como tu vivir toda su vida en el autoengaño y malgastar su vida entera.
Algun@s murieron muy pronto, además.
Porque cuando no se sigue el Camino la vida se acorta.