Tumgik
#prioridades
agresteee · 1 month
Text
Discúlpame, yo merezco ser la primera opción siempre. ꙳⋆🦔
-Agresteee
369 notes · View notes
meu-mundo-vazio · 8 months
Text
Tumblr media
223 notes · View notes
Text
Dicen que ya no es la misma que antes, que cambió la prisa por la paciencia y las lágrimas por risas. Que ahora se toma tranquila un café, que ha dejado su pasado a un lado y que se ha olvidado del amor y de lo que un día no fue. Que se ha vuelto pura magia, que ya no atrapa la nostalgia y que le dijo adiós a la melancolía.
Dicen que ahora vive distinto, que tiene mucha experiencia , que poco le asusta y que confía en su instinto. Dicen que ahora se ama desde enero hasta diciembre y que siempre tiene presente que ella está primero...
Pura maldad ❄️
62 notes · View notes
sinfonia-relativa · 5 months
Text
"Me insististe que no me preocupara, porque nada iba a cambiar, pero tiene más prioridad que nuestra amistad... Les deseo exitos, espero que esa mujer nunca te vaya a dejar."
Sad_Boy☕
49 notes · View notes
Text
Quando notei que você estava ficando inalcansável,deixei de ter você como meu maior objetivo,não me apequenei não, só caí na minha realidade de prioridades possíveis.
Jonas r Cezar
40 notes · View notes
tonemaimeuanjo1 · 4 months
Text
Tumblr media
25 notes · View notes
escrevisobrevoce · 9 months
Text
Sabe qual é o nosso problema? A gente vive se colocando em segundo plano. A gente deixa de fazer o que gosta por medo do que os outros vão pensar. A gente muda a personalidade para se encaixar em determinados ambientes. A gente muda características próprias quando não agrada a pessoa ao qual estamos nos relacionando e isso vai minando quem nós somos de verdade. Temos que aprender a sermos a nossa própria prioridade.
55 notes · View notes
caostalgia · 5 months
Text
Narcisismo a flor de piel
¿Qué se sentía subirte el ego al bajarme la autoestima? Si, tú gran narcisismo. -!Que, como y cuanto debía comer¡ -!Que debía colocarme¡ -!Con quien debía estar! -!Que debía hacer¡ ¿No te cansabas? Claro que no, permití tanta estupidez hasta que tus palabras se hicieron reales, no me enamore, no te amaba y el amor no existía por lo menos entre nosotros. Lloraste cuando me di prioridad antes de seguir sufriendo a tú lado, me aleje para que abrieras tus alas a otros horizontes como tanto querías. ¿Yo? Me esfuerzo por ser mejor que ayer, no me merece cualquiera, ya me hiciste mucho daño y la verdad prefiero paz mental y emocional... Dejarte fue mi mejor decisión, ni tus lagrimas de cocodrilo lograrían cambiar lo que había decidido para no continuar permitiéndote hacer de mí un desastre. Narcisismo, egocentrismo, manipulación, ¿Continuo? Me perdono, por haber permitido soportarte tanto
-S.B
45 notes · View notes
maryflorlovyblog · 11 months
Text
O certo não é priorizar o que está em sua agenda, mas agendar
suas prioridades
Tumblr media
54 notes · View notes
jozzsun · 8 months
Text
Tumblr media
22 notes · View notes
solxs · 1 year
Text
Con qué así se siente? Así se siente que te pongan como prioridad y que te alaben con un amor casi palpable?
Lumiusier
102 notes · View notes
Text
Tumblr media
29 notes · View notes
sinfonia-relativa · 5 months
Text
Tumblr media
Sad_Boy☕
30 notes · View notes
magneticovitalblog · 2 months
Text
A veces decir "NO" es decir realmente "SÍ" a ti mismo/a
Tumblr media
¿Te cuesta decir que no a las peticiones de los demás? ¿Sientes que siempre tienes que complacer a todo el mundo, aunque eso signifique sacrificar tus propios deseos o necesidades? ¿Te sientes culpable o egoísta cuando rechazas una propuesta o un favor? Si has respondido afirmativamente a alguna de estas preguntas, este artículo es para ti.
En este artículo, te voy a explicar por qué es importante que aprendas a decir que no sin sentirte mal, y cómo puedes hacerlo de una forma asertiva y respetuosa. Verás que, al decir que no a lo que no quieres o no puedes hacer, en realidad estás diciendo que sí a ti mismo/a, a tu bienestar, a tu autoestima y a tu felicidad.
Autor : @magneticovitalblog
¿Por qué nos cuesta decir que no?
Existen muchas razones por las que nos puede resultar difícil decir que no a los demás. Algunas de las más comunes son:
El miedo al rechazo. Pensamos que si decimos que no, la otra persona se va a enfadar, a decepcionar o a alejar de nosotros. Queremos ser aceptados y queridos, y creemos que la única forma de conseguirlo es haciendo lo que los demás esperan de nosotros.
El sentimiento de culpa. Nos sentimos responsables de la felicidad o el bienestar de los demás, y creemos que tenemos la obligación de ayudarlos o complacerlos. Nos parece que decir que no es una falta de respeto, de consideración o de generosidad.
La falta de autoestima. No nos valoramos lo suficiente, y pensamos que nuestras opiniones, deseos o necesidades no son tan importantes como las de los demás. Nos cuesta defender nuestros derechos, y nos dejamos influir o manipular por lo que los demás quieren o dicen.
La falta de habilidades sociales. No sabemos cómo comunicarnos de forma eficaz, y nos cuesta expresar lo que pensamos o sentimos. Nos da vergüenza o miedo decir que no, y preferimos evitar el conflicto o la confrontación.
¿Qué consecuencias tiene decir siempre que sí?
Decir siempre que sí a los demás, aunque no queramos o no podamos, puede tener consecuencias negativas para nuestra salud física, mental y emocional. Algunas de estas consecuencias son:
El estrés. Al asumir más compromisos o responsabilidades de las que podemos manejar, nos sentimos sobrecargados, agobiados y ansiosos. No tenemos tiempo para nosotros mismos, ni para descansar, ni para disfrutar de las cosas que nos gustan.
El resentimiento. Al hacer cosas que no queremos hacer, o que nos parecen injustas o desproporcionadas, nos sentimos frustrados, enojados y decepcionados. Nos parece que los demás se aprovechan de nosotros, y que no nos valoran ni nos respetan.
La baja autoestima. Al no atender a nuestras propias necesidades, nos sentimos insatisfechos, tristes y vacíos. Nos parece que no tenemos control sobre nuestra vida, y que dependemos de lo que los demás piensen o hagan.
La pérdida de identidad. Al no expresar nuestra opinión, nuestros deseos o nuestros valores, nos alejamos de lo que somos, de lo que queremos y de lo que nos hace felices. Nos convertimos en lo que los demás esperan de nosotros, y perdemos nuestra esencia y nuestra autenticidad.
¿Cómo podemos decir que no sin sentirnos mal?
Decir que no a los demás no tiene por qué ser algo negativo, ni algo que nos haga sentir mal. Al contrario, decir que no puede ser una forma de afirmarnos, de cuidarnos y de respetarnos. Para decir que no sin sentirnos mal, podemos seguir estos consejos:
Reconoce tu derecho a decir que no. Tú eres el único responsable de tu vida, y tienes el derecho a decidir lo que quieres o no quieres hacer. No tienes que justificar ni explicar tus decisiones, ni pedir permiso ni disculpas por ellas. Tú eres el único que sabe lo que te conviene, lo que te hace feliz y lo que te hace sentir bien.
Valora tus prioridades. Antes de decir que sí o que no a una petición, piensa en lo que es importante para ti, en lo que te aporta valor, en lo que te ayuda a crecer. Piensa en tus objetivos, en tus proyectos, en tus sueños. Piensa en lo que necesitas, en lo que deseas, en lo que te hace bien. Y luego, decide si lo que te piden se ajusta o no a tus prioridades.
Sé asertivo. La asertividad es la habilidad de expresar lo que pensamos o sentimos de forma clara, directa y respetuosa, sin agredir ni someterse a los demás. Para ser asertivo, puedes usar estas técnicas:
Usa la primera persona. Habla desde tu punto de vista, usando el "yo", y no el "tú" o el "usted". Así, evitarás acusar, juzgar o criticar a la otra persona, y te centrarás en lo que tú sientes o necesitas. Por ejemplo, en lugar de decir "Tú siempre me pides favores y nunca me ayudas", puedes decir "Yo me siento cansado y necesito un descanso".
Sé breve y concreto. No te enrolles ni des rodeos. Ve al grano, y di lo que quieres o no quieres hacer, sin dar demasiadas explicaciones ni detalles. Por ejemplo, en lugar de decir "Me encantaría ayudarte, pero es que tengo mucho trabajo, y además tengo que ir al médico, y luego tengo que recoger a los niños, y no sé si voy a tener tiempo…", puedes decir "Lo siento, pero no puedo ayudarte".
Sé firme y coherente. Mantén tu postura, y no te dejes convencer ni presionar por los demás. No cambies de opinión, ni te contradigas, ni te arrepientas. Sé coherente con lo que dices y con lo que haces. Por ejemplo, si has dicho que no vas a ir a una fiesta, no te presentes a última hora, ni digas que quizá vayas, ni te lamentes por no ir.
Sé amable y respetuoso. No seas grosero, ni agresivo, ni hostil. Sé educado, y muestra empatía y comprensión por la otra persona. Reconoce su punto de vista, y agradece su interés o su invitación. Por ejemplo, en lugar de decir "No me molestes más con tus tonterías", puedes decir "Te agradezco tu propuesta, pero no me interesa".
Ofrece alternativas. Si quieres, puedes ofrecer otras opciones o soluciones a la persona que te pide algo. Así, le demostrarás que te importa, y que quieres ayudarla, pero que no puedes o no quieres hacer lo que te pide. Por ejemplo, si te piden que les prestes dinero, puedes ofrecerles otras formas de conseguirlo, o decirles que solo puedes prestarles una cantidad menor. Si te piden que les acompañes a algún sitio, puedes sugerirles otro día, o decirles que solo puedes estar un rato.
¿Qué beneficios tiene decir que no?
Decir que no a los demás, cuando no queremos o no podemos hacer algo, tiene muchos beneficios para nuestra salud y nuestra felicidad. Algunos de estos beneficios son:
El bienestar. Al hacer solo lo que nos gusta, nos apasiona y nos motiva, nos sentimos más satisfechos, más realizados y más felices. Disfrutamos más de nuestro tiempo, de nuestras actividades y de nuestras relaciones. Nos sentimos más libres, más auténticos y más plenos.
La autoestima. Al respetar nuestros derechos, nuestros deseos y nuestras necesidades, nos valoramos más, nos queremos más y nos cuidamos más. Nos sentimos más seguros, más confiados y más capaces.
8 notes · View notes