desdel-a-mar

[desdel-a-mar]

Creo yo, que la vida no me pone nada que yo no pueda afrontar o sentimientos que no pueda procesar. También creo, que la vida últimamente me ha tratado bien, me envía mensajes y señales con amor, pero creo yo que a veces no escucho, y ahí es cuando tiene que halarme las orejas.

1. ¿Confias en ti y en lo que haces? No siempre, y eso tiene que cambiar

2. Cosecha de lo que siembras: así que preparate, porque el problema no son las espinas, es no estar preparado para tocarlas

3. IMPORTANCIA A LO IMPORTANTE

4. Que lo de afuera no entre, no cale. Que se quede afuera, que griten, que lloren, que se ataquen, yo estoy en mi hogar.

5. Aprender a diferenciar entre lo real, y lo sugestionado, subjetivo y oportunista.

MAR lo eres todo, la vida solo te está preparando para lo que viene, porque la vida es de opuestos: no existe la admiración, sin la envidia de la mano.

[desdel-a-mar]

impresión del viernes 24 de mayo:

estoy cansado y no he tenido tiempo, durante estos días no soy nada: sino todas las tareas que a diario cumplo de mi lista de pendientes.

#drag #travesti #diario #vlog

[desdel-a-mar]

Impresión del viernes 26 de abril

Impostora, impostora, impostora: esa fue la palabra de anoche. -"Suplantador, persona que se hace pasar por quien no es".  Que chiste, de eso vivo, por eso me pagan. Por maquillar mi ansiedades, y así apaciguar las tristezas de otros. Por hacer que canto una canción para entretener a borrachos, arrechos y vicentes. Por amarrarme, comprimirme y deformarme hasta pretender una figura ficticia; desde los tacones, hasta el corsé, las pestañas, las uñas y las ganas de estar aquí, todo falso, todo mentira. Pero todo sea por entretener, y hacer creer que soy capaz de hacer esto. Porque también impostora por no saber abrazarme, celebrarme y alentarme. No siempre el maquillaje es a prueba de ansiedades, vacíos y bajones.

[desdel-a-mar]

mispesares

Es muy fastidioso siempre terminar escribiendo solo cuando me siento ahogada, que si no exteriorizo lo que siento y pienso, me voy a hundir, como cuando de peladito uno se ponía a jugar tirando piedras al charco.

Y aún así acá esté hundiéndome sigo aferrado a las mismas piedras que me jalan al fondo. Y tampoco sé si es la forma dañina en la que siempre me relacioné, o en la que me sigo relacionando. Porque ahora tampoco sé si alguna vez cambié, o si en algún punto solo me hice creer que había cambiado.

Que indecisión.

No sé ni qué pensar.

Ahora estoy en México. Y de hecho acá dicen que uno siempre vuelve a los sitios en donde amo la vida. Pero hoy no sé ¿Amo la vida? ¿Por qué vuelvo a los mismos lugares? ¿NO ESTOY CANSADA? Sí y no, no sé.

Que indecisión.

No sé ni qué pensar.

El cansancio es aprendido.

El cansancio está en mis huesos.

El cansancio está en la forma actuada en la que me relaciono con los hombres.

El cansancio está en seguir intentando.

El cansancio está en creer que yo estoy mal.

El cansancio está en mí.

[desdel-a-mar]

Estoy aquí sentado, sentada o sentade, no sé.

[desdel-a-mar]

primero de marzo

Bueno,

Hace mucho no venía por acá.

No sé si es el comienzo de mes, el haber dormido con aquel hombre el sábado, o algún evento astral que no tengo en el radar, pero hoy tenía ganar de escribir, más allá... de hacer.

Me puso a pensar en la probabilidad que esta motivación a hacer fuese causada primeramente por un hombre, que fuese él quien me motivara a querer hacer cosas. Y me hizo sentir mal.

¿Por qué debería un hombre importar tanto en mí como para motivarme a hacer no hacer? No sé ¿Por qué siquiera un hombre me pone a pensar tanto? Menos lo sé, y pero aún porque no es que sea *el hombre*, sino cualquier hombre.

Mis habilidades para relacionarme sexo afectivamente con los que manes que me rodean están cada vez más oxidadas. Por ejemplo, ayer después de salir de la casa del man apresuradamente y torpemente, no tuve ni el valor de verlo a los ojos. De camino a la casa tuve que recordarme, porque nada mejor para pasar una one stand night que el walk of shame devuelta a casa a las 9a.m., que no debo esperar que un hombre me escriba, que no debo esperar.

Y esperar también es hacer algo.

Así que tal vez los hombres sí me motivan a hacer: a esperarlos, a desearlos, a querer que duerman conmigo de cucharita y me despierten con besos en la espalda.

Bueno, de una forma u otra, esperándolos o haciendo pensar que no los necesito. Acá sigo escribiendo solo desde la cama.

[desdel-a-mar]

de paseo con mis demonios

Ya estaba listo, me había bañado y aplicado crema de peinar en el pelo y todo, cogía de un lado y del otro cosas y las metía en la maleta como quien alista para irse por años, un libro, el antibacterial, las ganas de volver renovado de este pequeño viaje.

Bajé las escaleras, una a una, algo que me ha dejado mi dolencia en la rodilla es la paciencia de tomarme los escalones uno a uno, sin saltármelos de a tres o cuatro, no, de uno en uno. En la entrada, ya con las llaves en los bolsillos y la reja negra con el cristal manoseado cerrada... no sabía para donde ir.

Caminé cuatro cuadras o tal vez veinte y me seguía sintiendo perdido, pero es que esta sensación acompaña al que sale de su casa sin saber para donde va, o qué va encontrar cuando llegue a su destino, cualquier que sea ese. Veía a las personas que se quedaban viéndome, una pareja paseando a su perro, la niña y la mamá de la mano, la familia buscando donde almorzar. Los veía acompañados y ellos me veían solo, sin saber que yo nunca camino solo, que nunca estoy solo.

De hecho la escapada de hoy era para que mis pensamientos pasearan, que corrieran por las calles empinadas de Bogotá, y después se tiraran a botes, que se quedaran ahí inertes, para que así yo pueda volver a caminar solo, subir las escaleras de una a una, sacar las llaves del bolsillo, abrir la puerta, acostarme y descansar.

[desdel-a-mar]

a(mar)

siempre he encontrado la escritura como un instinto de supervivencia, una habilidad que sale a flote solo cuando estoy a punto de ahogarme, cuando las otras ya me dejaron morir, entonces yo no escribo cuando quiero, sino cuando me toca, cuando es lo último que me queda por hacer. Y lo comparo con el amor, porque tampoco lo controlo, tampoco lo entiendo, no sé cómo funciona, no puedo decidir cuando amar, ni a quién, ni a cuántos, ni cómo, si con las entrañas o con los labios, si con todo o con nada. y hoy escribo porque las dos se juntaron, porque me toca escribir porque me enamoré. El amor hace mucho dejó de ser lo que pensaba, dejó de durar años, dejó de ser entre dos, dejó de amarrarme; y es que el amor se me ha presentado en diferentes maneras, tiempos y personas, que fue después de mucho tiempo que descubrí que sí me había enamorado, que no fue como me enseñaron que uno se enamora, que no me llegó uno, ni que me duró toda la vida, sino que me enamore muchas veces, y de muchos, que los amé por meses, por años o por un fin de semana, pero que los amé. los hombres que han estado en mi vida no se han llevado partes de mí, porque el amor no resta, el amor suma, hemos creado juntos, hemos crecido y hemos volado. Amar es un despertar personal, nadie tiene que amarme para sentir amor, nadie tiene que esperar nada a cambio cuando ama, porque cuando uno ama, el único que mejora, es uno mismo. 🌊

[desdel-a-mar]

11:45

11:45p.m. de ayer, a esta hora estaba en sus brazos, entre sus manos, con mis nalgas desnudas tocando su entrepierna y mi espalda que encajaba perfecta en su pecho.

11:45p.m. de hoy, solo en mi cama, dando vueltas de un lado al otro, sin quien camine mi cuerpo con sus dedos y lo investigue con sus besos.

11:45p.m. de ayer, con sus piernas rodeando todo mi cuerpo, y sus brazos cruzando por debajo de los míos, con música de fondo, un porro encendido y escuchando las palabras susurradas que se le escapaban

11:45p.m. de hoy, escribiendo los recuerdos que me quedaron de sus palabras, imaginándome sus piernas, sus brazos, su culo, sus labios y el tono de su voz

[desdel-a-mar]

1 2 3

respiro conscientemente para calmarme

…

..

…

..

…

no recuerdo cuando fue la última vez que estuve desnudo conmigo mismo no en cuerpo, sino en alma 

completamente desnudo

Me miro y no me reconozco, me describo en voz alta para reafirmarme, cabello negro o castaño oscuro, nunca he sido capaz de diferenciar, los ojos, de mis partes favorita del cuerpo humano, capaces de hablar sin necesidad de las palabras, que poder, los míos no están mal, siempre me ha gustado el color de mis ojos, pero siempre he creído que están muriendo, que algo los mantiene cansados, mi nariz y sus cicatrices, las orejas que a veces siento que son muy grandes, mi barba, mis labios, pero aún así me describa no me reafirmo, no me reconozco, no me encuentro, tal vez estoy en otro espectro, tal vez ya no sé qué hacer con este molde llamado cuerpo.

[desdel-a-mar]

mis pezones

(foto tomada de tumblr)

- Eso era lo que quería, no?

- Pues sí, pero…

- Que lo tocaran, que lo desearan, y vea está besándolo como si no lo acabase de conocer.

- Pero…

- Está besándole el cuello, su lado más sensible, disfrútelo.

- Pero…

- Está diciéndole al oído que usted le gusta.

- Sigo sintiéndome vacío, me dije a mí mismo.

Su voz en mi oído me sacó de mi mente e hizo que el dialogo de mí mismo, conmigo mismo parara; curioso que a veces hasta cuando estoy teniendo sexo, mi mente se enrolla en conversaciones nocivas, y mi cuerpo responde a las acciones del hombre que esté al frente mío de forma automática, sin consciencia alguna.

Curiosamente sí fue muy tierno, si me beso todo el rostro, y bajo sutilmente por mi orejas y mi cuello, besándome como si realmente me conociera, como si ya hubiese besado las partes de mi cuerpo que con sus labios recorría, llegó a mis pezones, me miró, y entonces la comisura de sus labios se movieron formándole una sonrisa en el rostro, volvió a mis pezones y los besos, paró un segundo que sentí más largo porque apreció mi cuerpo, y después como cuando éramos niños que encontrábamos un diente de león y queríamos soplar tan fuerte para ver todas su partes volar libres, pero a la vez con tanto amor y cariño para que no se destruya, así sopló mis pezones llenos de sus fluidos…

                          gemí 

- ¿Ya se siente menos vacío?

- Tal vez

- ¿Tal vez?

- Sí, es porque tengo su mano en mi pecho ¿quién puede sentirse vacío con un hombre al lado de uno, abrazándolo y jugando con mis pezones como un niño de 5 años?

- ¿Entonces por qué ‘tal vez’?

- Porque él se va a despertar mañana, va a dejarme en la cama solo, y tendré que ser yo quien juegue con mis pezones para tratar de no sentirme vacío cuando estoy conmigo mismo, me dije por última vez antes de irme a dormir.