myfractaluniverse - Tumblr blog

[myfractaluniverse]

Soñé que dormía sobre una ola, tal vez fue porque mi almohada estaba llena de agua salada que salía de mis ojos.

[myfractaluniverse]

Te amo LFZB, gracias por un año lleno de primeras veces 🥰

[myfractaluniverse]

[myfractaluniverse]

[myfractaluniverse]

Ya no hacen las nubes como antes

Colaboración de CARC.

¿Has notado que cada día cuesta más encontrar a alguien que te diga siempre la verdad?

¿Has notado que la sinceridad ya no es una virtud?

Me pregunto si me pasa esto solo a mí  ¿O sentís igual?

Que todo cambió para mal.

Me atribula pensar que te contagié mi enfermedad mental

¿Has notado amor? Ya no hacen las nubes como antes

Parece ser que una crisis existencial las afectó.

¿Has notado amor? Vivimos los días del empaque

Y la envoltura suplió los anhelos del corazón

En la actualidad ya nada parece durar más que el estilo light

Que seduce a la humanidad

Y jurarse amor eterno es como cambiarse ropa interior.

¿Has notado amor? Cómo hemos destruido el medio ambiente

Parece ser que el verdor de los dólares nos idiotizó

¿Has notado amor? Viviremos en bosques de esqueletos

Parece ser que el dinero Absorbe mejor el CO2.

[myfractaluniverse]

Cita con el Doctor.

Un día, el doctor me escribió y preguntó cómo seguía de mis dolencias. Después de platicar un poco y explicarle mis síntomas, decidí hacer una cita con él. Llegué al lugar acordado el día y la hora en punto, él me esperaba sentado en una gran silla. Después de verme, me dijo que sabía exactamente mi diagnóstico y qué necesitaba hacer para que estuviera mejor. Me pidió que me recostara, comenzó a palparme la espalda, el pecho a escuchar mi respiración, a sentir mi pulso que cada vez se aceleraba más. Pasó sus expertas manos por todos los puntos necesarios mientras me desvestia poco a poco, él también se iba desvistiendo. Después de varias horas yo tenía dolor de verdad, del que te hace sonreír cuando lo recordás, y antes de despedirnos con un beso para vernos en casa, estuvimos de acuerdo en que en la próxima cita él ya no sería un doctor, si no que yo sería una secretaria.

[myfractaluniverse]

La matemática con base decimal.

(Colaboración CARC).

Hace más de 65 millones de años los dinosaurios dominaban el planeta. Existía una gran variedad de ellos y poblaban en gran número la faz de la tierra y las profundidades de los océanos. Si el meteorito no los hubiese aniquilado seguro que hoy estarían evolucionados, vigentes, y serían la especie más poderosa sobre este planeta. Es curioso pensar, ¿cómo serían hoy en día?, ¿Cómo lucirían?, ¿Será que habrían varios tipos? ¿los T REX, los Brontosaurios, los Triceratops, los Velociraptors? ¿Caminarían erguidos? ¿Cómo sería su vestuario? ¿Qué modas utilizarían? En lo particular, creo que no tendrían problemas con los temas de estética, las chicas más bellas serían las pesadas y las de caderas amplias, en consecuencia habría menos guerras y dolor en el mundo. Un aspecto que también llama mi atención es cuantos dedos tendrían en sus manos y sus pies, si es que los tuviesen. ¿Acaso serían 5 en cada mano y pie?, ¿o serían 4? Mientras los grandes saurios dominaban la tierra, los mamíferos se escondían; la mayoría de ellos eran algo así como ratas de albañal, escabulléndose entre los matorrales, comiendo huevos de dinosaurio, viviendo a hurtadillas, sobreviviendo de las sobras de otros. ¿Quién iba a creer que después del gran impacto del meteorito, los mamíferos sobrevivirían y tomarían el control del planeta? Muchos científicos dicen que el quinto dedo surgió por la evolución. Solo de esa forma los homínidos erguidos podían realizar tareas de diseño y construcción, creación de armas y herramientas que garantizarían su supervivencia. Ahora bien, si el meteorito no hubiese extinto a los dinosaurios, y si estos hubiesen seguido su camino evolutivo, y si hubiesen llegado hasta el punto de ser una criatura erguida con capacidad de razonamiento, y si no hubiesen mutado al quinto dedo sino que se hubiesen quedado con manos y pies de 4 dedos, ¿cómo serían las matemáticas en este planeta regido por reptiles evolucionados? Nuestras matemáticas tienen una base de 10, es decir una base decimal. El hombre, al tener 10 dedos en las manos, basó todos sus cálculos aritméticos en la idea de un inicio en el numero 1 y un final en el numero 10. Si bien es cierto la invención del 0 es mucho mas contemporánea (en el mundo Europeo, porque los Mayas lo descubrieron miles de años antes que el hombre de Neandertal o el de Cromagnón), los cálculos siempre estuvieron basados en 10. Tan arraigada está la base decimal que durante el Imperio Romano, cuando había una rebelión en los ejércitos, se acostumbraba matar 10 de cada 100 soldados con el objeto de aplacar las sublevaciones; de allí nace el concepto diezmar o reducir de 10, que sigue siendo utilizado en nuestros tiempos solo que con diferente connotación. De hecho, los hebreos en su libro de cuentos, expresan que su Dios les pide una cuota de pago de una décima porción de todas sus cosechas, de ahí la expresión judeocristiana: pagar a Dios el diezmo. Muchas veces he intentado imaginar las matemáticas con base en 8 dígitos en vez de 10, he tratado de hacer los cálculos mentales, 1, 2, 3, 4, 5, 6, 7, 8, luego 10, 20, 30, 40, 50... Hasta llegar al 80 y luego, ¿Qué?, 81, 82...87, y después ¿Qué? de hecho ya me confundí. Es por ello que mejor dejo de pensar en las matemáticas con base decimal y me enfoco en el tema de que hubiese sucedido si el planeta Tierra no ocupase el tercer puesto entre los planetas que orbitan alrededor del Sol. ¿Qué tal si el meteorito hubiese sacudido al planeta de manera tan violenta que lo hubiese movido de su órbita enviándolo tan lejos que ocupase el décimo puesto y no el tercero?, ¿Qué tal si el impacto hubiese hecho más lento el movimiento de rotación y el de traslación? ¿Qué tal si el impacto hubiese cambiado la duración de un año de 365 a 1,000 días? ¿Qué tal si el día pasara de durar 24 horas a 72 horas? Muchas veces, cuando medito acerca de estos temas me dan dolores de cabeza por lo que le aconsejo no pensar estas pendejadas durante sus noches de insomnio, porque solo logrará despertarse más. Es un tema complicado y la verdad no vale la pena darle mucha vuelta a estos asuntos. Hoy que estoy con usted, hoy que la tengo a mi lado, me doy cuenta que las matemáticas a pesar de todas sus leyes de uniformidad, conmutatividad, asociatividad, y muchas otras cosas más, pierden todo su sentido cuando se aplican en este mundo que se enmarca en estas 4 paredes, porque donde nosotros mandamos, las matemáticas son diferentes, porque cuando nos sumamos, UD y YO, el resultado siempre es UNO, y cuando somos UNO, la tierra deja de girar.

[myfractaluniverse]

Fantasmas en el autobús.

Aparecían a las 11 de la noche en punto  todos los días de lunes a domingo. Iban sentados en sus sillas numeradas con sus sábanas blancas hasta el piso, era imposible saber si había alguna forma bajo de toda esa cubierta de tela.  La imagen daba mucho miedo pues en la noche cuando los ojos no se acostumbran a la oscuridad, todas las siluetas se ven más amenazantes.         2, 4, 6, 8, ocupaban casi la mitad de los espacios disponibles, habían sábanas bastante largas y sábanas pequeñas, de todos los tamaños. Mientras los observaba me preguntaba quienes habían sido antes de tener esta forma, cuáles habían sido sus sueños y esperanzas, habían sido felices o no. Llegó la mañana y cuando desperté después de una noche difícil por no haber podido conciliar el sueño, noté que habían desaparecido, una metamorfosis había ocurrido: ahora en sus asientos habían personas normales, que para evitar el frío cambiaban de forma todos los días en punto de las 11 pm cuando el autobús se disponía a partir.

[myfractaluniverse]

El Viaje.

(Colaboración CARC).

El viaje es tedioso, el autobús atraviesa esa zona en la cual el terreno es muy accidentado. Curvas cerradas y pendientes extremas. El autobús marcha lento por precaución, además, una sección de la carretera está en reparación por lo que todos los vehículos circulan lentamente. Al terminar el tramo escabroso, el autobús sube a la zona pavimentada y acelera bruscamente. El arrancón lanza a los pasajeros hacia arriba y un segundo después caen sobre sus asientos. El, que ha despertado por el empellón, se acomoda la gorra y escucha los improperios que unas señoras le gritan al conductor. No comprende sus palabras. Está desubicado, corre la cortina y da un vistazo por la ventana. Ve una propaganda pintada en una pared de roca: ¨YAYITO ALCALDE¨, luego mira las huellas de la maquinaria que zanjó la roca y que abrió paso a la carretera en la que ahora circula; un segundo después, otro letrero: ¨JESÚS VIENE, ARREPIÉNTETE¨, luego más pared. Ahora sabe exactamente donde se encuentra, inmediatamente después del letrero religioso, viene una curva cerrada, las más peligrosa de todas, pero la última, luego, el autobús caerá en el valle.

Siente un gran alivio: el valle hace el viaje menos agitado. Corre la cortina para no ver el paisaje; tanta curva lo marea. Al llegar al valle corre nuevamente la cortina y la luz del sol lo ciega brevemente. Aparta la vista de la ventana y cuando se ha acostumbrado a la luminosidad externa, divisa el valle y una imagen apoteósica lo deja sin aliento: Al fondo, al pie de la cordillera, una inmensa nube flota a un metro de altura del suelo, ha cubierto los árboles de la zona y parece una gran bola de algodón. Siente una gran emoción y desea vehementemente bajar del bus y correr, correr hasta llegar a la nube, y tocarla. Muchos años han pasado desde la última vez que vio una nube como ésta. Ya no hacen las nubes como antes – piensa.

Todo lo de antes era mejor, hasta las nubes. Ahora las nubes son escuetas, difusas, pareciera que la crisis económica mundial también las afectó y ya no les aplican los mismos ingredientes, seguro les han disminuido las raciones para evitar subirles el precio. Pobre los pobres – piensa – ya ni de eso gozamos. El autobús continúa la marcha y a pesar que avanza a gran velocidad el valle y la nube parecen no tener fin. Recuerda que de niño, cuando viajaba de noche, veía como la luna lo seguía a la misma velocidad del autobús; nunca nadie supo explicarle porque la luna corría tan rápido, tampoco pudieron explicarle porque frenaba cuando el autobús bajaba la velocidad. Hay muchas cosas que los adultos ignoramos – piensa. Lo invade una enorme sensación de derrota. Ahora que es adulto sabe mucho de nada, o mejor dicho, sabe mucho de cosas que realmente no importan. Eran mejores aquellos días en los que se tiraba en el campo de fútbol y veía las nubes flotar en el cielo. Se imaginaba jugueteando, saltando feliz de nube en nube. Ahora las cosas son complejas, hay muchas reglas que considerar. Hoy, ya no imagina, solo calcula: la altura, el peso, el volumen, la velocidad; ya no inventa, ya no crea, solo percibe la realidad y se decepciona porque la realidad es cruel; la vida se disfruta más cuando se sabe menos de ella.

Parece que, al igual que a las nubes, a mí también me afectó la crisis - piensa. Disfrutaba ver las nubes flotar, pero cuando se topaba con esos días de cielos límpidos, no se entristecía y jugaba a buscar ángeles. Solía ver directamente al cielo azul, y allí, después de muchos minutos de observar la nada, lograba divisarlos, eran pequeños, casi como microbios. Curiosamente nunca volaban, mas parecía que caían; los veía caer desde muy arriba y gradualmente iban flotando, bajando poco a poco hasta que desaparecían de su rango de visión; no parpadeaba porque si lo hacía desaparecían y debía buscarlos nuevamente, y esto era dificultoso. ¿Por qué no se quedan quietos? – se preguntaba con desesperación. Le llamaba la atención que todos lucían como insectos y alguna vez tuvo la intención de preguntarle a un biólogo, amigo de su hermano mayor, si conocía la especie, pero se contuvo por temor a que se burlara de él, además, un día, meditándolo, se preguntó: ¿Y qué tal si es un poder mágico?, ¿Qué tal si soy el único que logra verlos, y si divulgo el secreto y pierdo el súper poder? Decidió guardar el secreto. Es mejor así – se dijo – seguro si le cuento a alguien me arruina el juego. A los adultos nos gusta explicar lo inexplicable y dañamos la diversión. El autobús llegó al final del valle y la nube quedó inmóvil, lejana, atemporal, impoluta. La vio por última vez y sintió tristeza. Ahora el autobús transita por una zona fresca y boscosa. Los árboles le parecen bellos de día, pero de noche lo atemorizan. Mi alma vive en un árbol hueco – piensa – un árbol en medio de un bosque de esqueletos, una selva nocturna donde la luna nunca se asoma. Por esa razón los climas fríos me sientan mal – se dice – porque mi cuerpo es un eco de mi alma.

Recuerda la ocasión cuando soñó que su alma escapaba de aquel árbol. Volaba a ras de suelo y a muy alta velocidad. Lograba evadir las ramas esqueléticas pero aquel bosque era un laberinto sin salida. Pensó en subir para poder divisar desde arriba la puerta de escape pero fue imposible elevarse a más de un metro de altura. Sentía que una fuerza misteriosa lo atraía hacia el suelo. Repentinamente, después de seguir todos los caminos existentes, entró en una cabaña. Era un lugar oscuro que olía a raíces y a tierra húmeda. Allí, en una esquina de la habitación, divisó una sombra sentada en un taburete de madera. No sabe cómo, pero aquel cuerpo correspondía al de una mujer. Era imposible ver los detalles pero sabía que usaba pedazos de tela para cubrirse, era como si la hubiesen desenterrado después de cien años de estar muerta. Ella dijo algo pero en vez de palabras emitió un gruñido, él se asustó y regresó a su árbol hueco; allí se siente seguro, frío pero seguro. Mi alma vive en un árbol hueco, en un bosque de esqueletos – pensó nuevamente.

¿Cuándo me aburrí de ver el cielo, como ocurrió? – Se preguntó – ¿Cómo fue que me perdí, cuando me perdí? Uno no se percata, no se da cuenta, se va cambiando y sin dejar rastros más que los que quedan en la piel y en las fotografías, pero por dentro las personas se transforman y el proceso es tan sutil que nadie realmente lo nota. Cuando era niño jugaba mucho con sus amiguitos pero los juegos que más conflicto generaban antes de iniciar eran los de buenos y malos: ¡Nadie deseaba integrar el bando de los malos!, era necesario realizar una competencia, de cualquier índole, saltar, hacer puntos, correr más rápido, escupir más lejos, para determinar los perdedores, de esa manera los pobres diablos pasaban a formar parte del equipo de las huestes siniestras. Todos deseaban ser los héroes, porque ser bueno era bueno. Irónicamente, ahora que hace la cuenta, todos sus amigos de la niñez, los que sobrevivieron, se convirtieron en gente mala, de hecho, algunos murieron producto de sus andanzas. Ladrones, alcohólicos, estafadores, traficantes, políticos. Eso es lo que hay ahora, ya no es necesario realizar sorteos ni competencias para elegir los integrantes de los equipos, ahora casi todos son del bando de los malos. ¿En qué parte del camino se perdieron?, ¿Cómo fue que no se percataron hacia donde iban? ¿Cómo fue que me desvié, como es que mi alma terminó en un árbol hueco, en un frío y húmedo bosque de esqueletos? Ya no sé quien soy – piensa, luego suspira.

Después de cuatro horas de viaje, llega a su destino. El autobús se estaciona. Espera que todos los pasajeros bajen, toma sus cosas, revisa el asiento buscando objetos olvidados, después baja del autobús. Una mujer lo espera en la puerta de salida, le sonríe con falsedad y le dice: ¡Gracias por viajar con nosotros, esperamos que vuelva pronto! Él le devuelve la misma falsa sonrisa y piensa: ¿Cuándo se perdió, cómo y dónde renunció a sus sueños? Camina hacia la calle y negocia con un taxista; le cobra muy caro, así que se mueve del lugar, camina unos metros. Más adelante, un taxi modelo del año ochenta se estaciona. Es una carcacha, la conduce un hombre de sesenta años, aproximadamente. Negocian y llegan a un acuerdo. ¿Le pedían mucho? – pregunta el conductor. Si – responde – piensan que porque viajo me sobra la plata. No los culpe, hacen el intento – comenta el conductor – y agrega – pobres los que caen. No debería ser así– comenta con vehemencia – y pregunta: ¿Por qué no cobran lo justo siempre, porque siempre hacen el intento de engañar? El amor al dinero señor, es la raíz de todos los males – contesta el conductor.

¿Y Usted, ama al dinero? – pregunta. Me conformo con poco señor, o mejor dicho, necesito poco, no todos tienen esa ventaja – responde el conductor. El guarda silencio y por su cabeza pasa la idea de hacerle una pregunta, pero desiste. Llegan al aeropuerto. Baja del taxi, paga al conductor por el servicio y le agradece. El conductor le devuelve los buenos deseos. El taxi arranca y se aleja. El permanece en el mismo sitio, y piensa: ¿Por qué no se perdió? ¿Sabrá donde vive su alma? Camina y entra en la sala de espera del aeropuerto. Pega el rostro en la inmensa ventana de vidrio que mira hacia la pista. Ve que en el cielo no hay nubes. Ya no hacen las nubes como antes – piensa – de hecho, parece ser que ya no hacen nubes. Ve su reflejo en el vidrio pero no se reconoce, de unos años hacia acá, siente que encuentra a otra persona en el espejo, así que decide evadir esa verdad y se concentra en el cielo azul. Parece un cielo de película de dibujos animados. Ya no veo ángeles, seguro cayeron y ahora son prisioneros en un bosque de esqueletos – se dice en voz baja – y siente pena por ellos. Se los imagina con las alas rotas, desconcertados, hambrientos, sedientos y sin esperanza. 

Sigue observando el cielo y nota que afuera hace mucho viento. Ya nadie vuela cometas – piensa –parece ser que ya no es divertido para los niños. Recuerda aquella cometa de dos metros de altura que construyó Tony, con bolsas para cemento y varillas de bambú; casi pierde los dedos de la mano al intentar detenerlo cuando una fuerte ventisca lo elevó hasta el infinito. Tomó tanto trabajo elaborarlo, había tanta expectación, y para nada; teníamos tantas esperanzas de verlo flotar en el cielo, y en un segundo, el sueño se esfumó, el viento se lo llevó, lejos, tan lejos que seguro quedó enredado en algún bosque de esqueletos. Ojalá le sirva a algún ángel caído para escapar de su laberinto. Volvió de sus elucubraciones y vio nuevamente el reflejo de su rostro en el vidrio, luego vio el reflejo de ella que estaba atrás de él, a eso de dos metros de distancia. Parecía un fantasma. El se dio la vuelta. Se vieron y por unos segundos no dijeron nada. Ella se mordió los labios y sonrió, después rompió el silencio:

Ella: Qué pena, hacerte venir hasta acá. Él: No es culpa suya. Ella: No era mi intención. Él: Estamos aquí, es lo que importa. Ella: Estabas muy distraído viendo el paisaje.

Él: Buscaba ángeles, Ella: ¿Encontraste alguno? Él: Si, pero no en el cielo. Ella: ¿Y cómo son los ángeles? Él: Bellos. Ella: ¿Y cómo es que puedes verlos? Él: Súper poderes. Pensé que los perdería al contárselo a Usted. Ella: ¿Perderlos, por qué? Él: Los súper poderes son secretos que no se revelan, si se hace, se pierden, pero estoy feliz al saber que no sucedió. Ella: ¿Y cómo lo sabes? Él: Porque sigo con la capacidad de ver ángeles. Ahora mismo estoy viendo uno. Ella sonríe nuevamente, se acerca, y lo besa, luego lo abraza (se cuelga de su cuello). Con la mano izquierda toma las maletas, con la derecha la toma a ella y caminan hacia la zona de abordaje. Viajan durante treinta minutos sin conversar. Observan en silencio las nubes. Sonríe al ver que desde la ventanilla del avión las nubes lucen impolutas y robustas. Ella le lanza su mirada curiosa, pero no pregunta nada, solo disfrutan el paisaje y el momento. Aterrizan sin percances, bajan del avión, realizan los trámites de rutina y salen del aeropuerto directo a la playa. Tiran las maletas a un lado y se tumban bajo una palmera, en la arena a la orilla del mar, desde allí ven el cielo plagado de nubes frondosas. Él, eleva la mirada y ve la copa de la palmera y se percata que los cocoteros ya no dan cocos como antes porque una enfermedad arrasó con ellos en todo el Caribe, pero a pesar de esto, se da cuenta que los mejores tiempos no son los de antaño, que lo mejor es lo que se vive de momento, porque lo que pasó, pasó, se fue, como el viento, y el viento que regresa es viento nuevo y fresco, y lo que el viento se llevó no regresará, y lo único verdadero e importante que queda, es el instante eterno. Se acomoda en la base de la palmera mientras ella yace acostada a su lado, dormitando sobre su pecho, y piensa: Mi alma vive con su ángel, bajo una palmera hueca en la orilla del mar, en un día soleado y lleno de nubes.

[myfractaluniverse]

Examen de inglés.

Como parte del proceso de contratación para una plaza, me solicitaron realizar un examen de inglés. Llegué con media hora de anticipación por el tráfico, entregué mi documento de identidad en una ventanilla y lo escanearon por una máquina muy extraña, parecía un escáner enorme con unos botones e interruptores que solo había visto en películas viejas, estoy segura que en ese momento supieron todas las veces que la presente, junto a que la guardé de donde vengo y para donde voy. Después de esperar unos 20 minutos al otro lado de la calle y bajo el sol, llegó alguien a ordenarnos en grupos de 5. Nos pidieron entrar en orden y dejar nuestros teléfonos en la recepción, de aquí en adelante sentí que estaba dentro de una película muy al estilo de Argo. El reloj marcaba casi las 2 de la tarde y cuando mi grupo entró comenzamos a bajar por varios elevadores y caminar pasillos muy largos, ese edificio es sin duda un bunker antiguerra. En medio de todo aquello pude ver un parque por una puerta y dos muchachas platicando, aquello me pareció extraño al inicio pero después pensé que tal vez les ayudaba a aliviar la sensación de encierro que tiene ese lugar. Llegamos a una pequeña sala de conferencias varios pisos bajo tierra y nos sentamos unos frente a otros con lápices y un cuadernillo frente a nosotros. Una representante de RRHH nos explicó las instrucciones una sola vez, iban a reproducir un CD y este no iba a parar por ningún motivo, nadie podía salir de la sala bajo ninguna circunstancia, ella nos dijo que la única manera de parar esa prueba era si teníamos que evacuar el edificio por alguna amenaza contra nuestras vidas, aquello era bien en serio. Oprimió el botón de reproducir y la prueba comenzó, nada difícil. Casi una hora después el examen terminó y nos sacaron de nuevo en grupos, comenzamos a subir de nuevo por los elevadores y a pasar por los distintos puntos de seguridad, en algún momento pensé que iba a encontrarme Ben Affleck en su papel de Tony Méndez. Me pareció surreal la experiencia sobre todo por el control y la seguridad. Espero nunca tener que regresar allí.

[myfractaluniverse]

Escultura de Mármol.

La primera vez que lo vi fue hace ya varios años en alguna reunión de amigos. Desde que se acercó a saludar la primera vez, pensé en lo atractivo que era: alto, pelo encrespado, ojos amables, nariz respingada, expresión franca, se notaba que se habían tomado el tiempo de tallarlo hasta el más mínimo detalle. No hablábamos demasiado, muchas veces decía cosas que yo no comprendía pero solo verlo me resultaba muy placentero, comenzamos una amistad que se convirtió luego en algo más y después de un tiempo si me pedía que nos encontráramos lo hacía sin dudar. La rutina siempre era la misma, comer, ver películas y series, hacer el amor y luego dormir, casi nunca salíamos en público lo que me parecía bien porque todo el tiempo que teníamos era solo para nosotros, esto continuó varios años hasta la última vez que estaba acostado a mi lado dormido y noté lo hermoso que se veía bajo la luz de la luna que entraba por la ventana, su piel dura como mármol travertino blanco yacía inmóvil y yo no podía pensar en otra cosa que no fuera lo feliz y afortunada que era de haber coincidido en esta vida con él. Llegó la mañana y cuando me voltee para decirle buenos días ya que me quedaban pocas horas allí antes de regresar a mi realidad, vi su mirada perdida en la nada, sus facciones duras, su boca cerrada en una línea recta, lo toqué y ya no respiraba, no entendía qué había pasado ¿Se acabó la magia que lo mantenía vivo a mi lado? Traté de reanimarlo y no lo conseguí, lloré, me cambié y me fui, no tuve más opción que dejarlo allí. Él no volvió a despertar jamás.

[myfractaluniverse]

Sol de Abril.

(Colaboración CARC) 

Nunca pensé que una historia triste pudiera surgir de nosotros, siempre todo vino de otros, le pasó a otros, pero nunca nos pasó a nosotros, como en aquella ocasión que me contaron que la jirafa es uno de los animales más elegantes del mundo pero es muda; o cuando me di cuenta que el Pavo Real tiene alas pero no puede volar; o cuando supe que una Lombriz tiene diez corazones pero no sabe lo que es amar; o que un pez puede padecer de sed; o cuando leí que un ser humano promedio sueña 1450 veces al año pero que algunos nunca sueñan despiertos, y si lo hacen, no luchan por sus sueños; o la vez que escuché la triste historia de los cerdos que a causa de una limitación física nunca miran al cielo, ¡Eso sí que es trágico, nunca ven las nubes!, (a pesar que ya no las hacen como antes porque la crisis las afectó y ya no les agregan los mismos ingredientes).

Me parece extremadamente cruel el hecho que una criatura esté limitada a mirar siempre hacia el suelo, y lo más triste es que la única vez en su vida que tendrán la posibilidad de ver hacia el cielo es cuando los voltean boca arriba para sacrificarlos, literalmente miran el cielo antes de visitarlo, es una pena. Eso había sido lo más triste que había escuchado acerca de otros, pero recientemente me di cuenta de un hecho científico que me impactó y que nos involucra a nosotros: “Nuestros átomos nunca se tocan porque una red de electrones lo evita”. Entonces, todas las veces que te abracé, todas las ocasiones que te besé, que te acaricié, nunca te toqué; mi piel sobre tu piel, mis labios besando los tuyos, mis labios sobre tu piel, ¡Todo fue una ilusión! Una barrera invisible nos separa. ¿Acaso no han existido suficientes tragedias en el mundo como para agregar una más a nuestra insignificante existencia?, ¿Qué mente enfermiza es capaz de estructurar un juego tan macabro?

Y por eso te propongo: No me hagas sufrir más y desafiemos a los Dioses, levanta esa barrera de electrones que nos separa y déjame entrar, permite que mis átomos toquen los tuyos hasta provocar una fusión y con ello una descomunal reacción cadena, te propongo: Volvámonos un Sol de Abril.

[myfractaluniverse]

Historia de un Tornillo

Ya no pude esperar más tiempo, no me sentía bien, era como estar incompleta así que fui al hospital. Era un edificio grande con ventanas de vidrio en toda la fachada frontal, pasé por seguridad y pregunté en recepción dónde podía acudir, le dije mi problema: "Se me zafó un tornillo y no lo encontré". Me indicaron que fuera al departamento de Entregas. Habían varias personas esperando, tomé asiento y esperé mi turno. Una enfermera parecía molesta porque era hora de almuerzo y no paraba de contestar el teléfono. "No le puedo atender en este momento, estoy con pacientes" le dijo a alguien al otro lado de la línea, dirigió la mirada hacia mi y me preguntó qué se me ofrecía, le dije lo mismo que dije en recepción: "Se me zafó un tornillo y no lo encontré". Parecía un problema muy común, buscó en sus gavetas pero al parecer no tenía ninguno, me dijo que iba a tener que comprarlo. Pregunté el precio y me dijo L 17.25. "Qué barata es la cordura" pensé. Fui a la caja a pagar y noté que muchas personas tenían cara muy triste, algunas incluso parecían estar llorando. Habían personas de todas las edades en aquel lugar, todas buscando aliviar su problema, no me gustaba estar allí. Cuando regresé al departamento de entregas me senté, sacaron un tornillo nuevo y lo colocaron en su lugar, le pedí que apretara los demás por si se me caía otro pero la enfermera dijo que estaban bien apretados. Le agradecí su ayuda y salí del hospital ya con los tornillos completos. El mundo se veía diferente, yo me sentía diferente, qué bueno era tener de nuevo mis anteojos en su lugar.