Y contemplarte embelesado, como si estuviera en un embrujo de la chica más linda y bella, hechizado porque tus pestañas son abanicos azabaches que dejan ver un par de pupilas marrones que brillan con el sol o con la luna si es de noche. Enmarcados por un par de cejas perfectamente curvas y son el marco idealizado de un sueño.
Y si, cuando te ruborizas, te conviertes en el atardecer más hermoso, con colores crepúsculares, con destellos, luz y cálidas sensaciones que me hacen que enamorado y feliz este por el amor que me regalas.
"...el tiempo para que Roberto luchara contra el rubor cada vez que al hablar le salía un gallo, el final de la confianza, del refugio fácil entre sus brazos cuando algo dolía o apenaba; otro cumpleaños, los quince, ya siete meses atrás, y entonces la llave en la puerta del baño, las buenas noches con el piyama puesto a solas en el dormitorio, apenas si cediendo de tanto en tanto a una costumbre de salto al pescuezo, de violento cariño y besos húmedos, mamá, mamá querida, Denise querida mamá o Denise según el humor y la hora, vos el cachorro, vos Roberto el cachorrito de Denise, tendido en la playa mirando las algas que dibujaban el límite de la marea, levantando un poco la cabeza para mirarla a usted que venía desde las cabinas, apretando el cigarrillo entre los labios como una afirmación mientras la mirabas. Usted se tendió a tu lado y vos te enderezaste para buscar el paquete de cigarrillos y el encendedor."
12 productos esenciales para crear tu maquillaje perfecto.
¿Qué productos básicos necesito para maquillarme diariamente?
Hola, Curly. Si te has hecho alguna vez esta pregunta, estás en el lugar adecuado. Porque te voy a responder ahora mimo. Pero antes déjame decirte que estoy muy contenta de estar aquí de nuevo. Y de estar haciendo pequeños cambios para que el blog vaya mejorando y estés más contentas con él. Dicho esto, ahora voy a solucionarte, esa…
Sabias qué?🙌🏻🙌🏻🙌🏻 💄Los protectores labiales, Bálsamos de labios, están diseñados para bloquear la humedad y darles a tus labios una capa protectora? ✔️Estos protectores labiales hacen que tu boca sea agradablemente suave al tacto y proporcionan una sensación agradable y suave en los labios. Estos productos ofrecen una hidratación suave y duradera para prevenir que la piel se seque a largo plazo. . . . #maquillaje #maquillajeprofesional #belleza #maquillajenatural #maquillajecolombia #maquillajedeojos #maquillajeojos #makeup #labiales #maquilladora #brochas #cosmeticos #sombrasdeojos #maquillajesocial #maquillajeartistico #brochasdemaquillaje #sombras #labial #maquillajeoriginal #rubor #makeupideas #tiendademaquillaje #maquillajes #maquillajesencillo #makeupartist #maquillajebogota #maquillajedeldia #ventademaquillaje #maquillajedenoche #maquillista (en Vigo, Spain) https://www.instagram.com/p/Cplvv7SoPMb/?igshid=NGJjMDIxMWI=
A veces me siento inmóvil a esperarte, me cubro las mejillas de rubor y pongo al limite mis ansias. Me siento y espero, nos espero y remojo la espera en un té. Te pienso claro, te pienso cielo, te pienso nube, te pienso mio. Y río para no llorar y trenzo mi cabello imaginando tus dedos. A veces me siento y espero, un largo rato, preparo mi boca, sale a flote mi poesía y te verso. Y espero un largo rato aún sabiendo que no debo hacerlo, pero disfruto la espera, disfruto imaginarte. Y no hay desespero, ni desgano, imagino que llegas cuando menos lo espero, que robas de mis labios las palabras que nadie ha oído. A veces te espero y lloró bajito cuando no llegas, cuando las ansias ya no te comen, cuando recuerdo que ya no sientes prisa por mi y no lloro, nomas te amo. Libertad con libertad se paga amor y tú y yo... Tú y yo somos libres."
⠀⠀ ⠀⠀ ⠀⠀ ⠀⠀ ⠀⠀ ⠀⠀ ˖˙ ᰋ ── lugar público, diferença de idade legal, bebida alcoólica, cigarro, dirty talk, humping, masturbação fem. Não revisado!
Ninguém consegue ver vocês dois ali. Quer dizer, ao menos é isso que você espera enquanto o deixa acomodar a perna entre as suas, se aproximando com o copinho de cerveja na mão e o cigarro aceso na outra.
Não pensou que fosse atraí-lo pra cá de fato. Wagner parecia muito investido na roda de samba com os amigos, dançando e cantando os temas clássicos do gênero. Conversando com os amigos “intelectuais”, todos mais velhos ou experientes que você. Mas aqui está ele, não? Com os olhos queimando nos seus, um leve sorrisinho de canto. A cara de puto, sedento e mal-intencionado.
“Por que cê tá aqui sozinha?”, ele quer saber, falsamente interessado. Traga do pito, sopra a fumaça pro cima, te ouvindo explicar nada, só vim dar uma volta. “Uhum”, murmura, pouco convencido. O olhar desbrava do seu rostinho bem maquiado até a rasteirinha marrom nos pés. Repuxa um sorriso maior. “Cê é bonitinha.”
Você pende a cabeça pro lado, “Bonitinha o suficiente pra me comer?”
“Que isso...”, ele foge do contato visual, tímido de repente. O sorriso dobra de tamanho, assim como o seu, embora o dele tente ser apaziguado rapidinho, escondendo o rubor. Mas chega mais pertinho, bem mais pertinho, aí o joelho só precisa suspender um bocado para resvalar no meio das suas pernas. “Então era isso que você queria esse tempo todo me rondando?”, sussura. Porque você toma o copo pra si, agora ele pode, com a mão livre, tocar no canto do seu rosto. A pele resfriada te arrepia, é gostoso. “Só quer um pouquinho de pica, meu bem?”
Você bebe da cerveja, umedece os lábios e as palavras, “Se eu disser que sim, você me dá?”
Ele cola a testa na sua, roça a pontinha do nariz na sua bochecha. “Talvez”, é o que diz.
“Talvez”, você repete, com um sorriso. O joelho dele pressiona direitinho onde mais te causa prazer, parece calculado. O seu quadril se perde nessa oferta, busca, rebolando lentinho, de certa forma discreta. “E se eu for boazinha?”, pergunta, com a voz doce.
Ele tomba de leve a cabeça, trocando o ângulo pelo qual te observa, devora os teus lábios desenhados de batom só pelo olhar quente. “Se for boazinha e me esperar”, fala, “aí, eu te levo pra casa comigo, prometo.”
A sua outra mão se esgueira por baixo da barra da blusa masculina, mas não sobe muito, fica ali só, no cantinho, acima do cós da calça, apertando a pele nua. “Promete mesmo?”, ecoa baixinho, cerrando os olhinhos e tudo. Adorável. Estimulante.
“Claro, princesa”, Wagner garante, com charme. O sorriso sacana não esconde o desejo, muito menos o jeito com que beija na curva do seu pescoço, arrastando a ponta do nariz até a sua orelha, “algo me diz que você é uma cadela muito gostosa de meter.”