Soy la mamá de Luca y así fue como todo empezó.
Me convertí en mamá! 😳👸👦🏼
Mi experiencia, fue compleja y dura. Cuando quedé embarazada, no lo planeamos y estábamos en un momento difícil en la relación. Para él, el aborto era una opción obvia, sin dudas, por el entorno en que creció y su manera muy diferente de pensar.
Para mí, desde el momento en que me di cuenta que estaba embarazada, sabía que metí la pata, que mi vida iba a dar un giro completo, que nunca nada iba a ser igual. No pensé en lo lindo de ser mamá, tenía 23 años, sin una carrera terminada, viviendo con mi ex pareja en una relación tóxica e inestable, pero, nunca, nunca, pasó por mi mente abortar. Con esto dicho, no juzgo a nadie que decida hacerlo, simplemente expreso mi situación, lo que me pasó a mí en ese momento de mi vida.
Ser mamá soltera no es fácil, pero ser mamá soltera es mucho más fácil, que lidiar con una relación tóxica y ser madre al mismo tiempo. Yo no quería ser mamá en medio de peleas ni un día más, por mi bien y en especial por el bien de mi hijo.
Siempre algo hay que hacer, trabajos de la U, trabajo por fuera, tareas del kínder, el desayuno, almuerzo y meriendas del kínder del día siguiente antes de dormir, resfríos, medicinas, desvelos feos porque él se siente mal, desvelos lindos porque él no tiene sueño y quiere cantar y contarme historias en la oscuridad, travesuras, mocos, llantos, risas, uff...
No me sobra el tiempo, pero tampoco me hace falta.
En mi situación no hay un ̈Es tu turno, a mí me tocó ayer ̈, pero en mi situación no me pierdo de nada, estuve y estoy ahí en cada uno de los momentos importantes, pequeños y grandes. Es muy cansado, pero indescriptible la sensación de plenitud, alegría, satisfacción.
No hay nada, nada en el mundo que se compare con ser mamá, y las cosas más pequeñas, son las más grandes en mi mundo.
Un gran miedo, es el dejar ir. Ahora cuando ya Luca está creciendo, aunque es completamente dependiente a mí, es súper independiente también, no es de los niños que si yo no estoy no duerme o llora, lo cual muchos pueden ver como algo bueno, un descanso, incluso hasta yo, cuando me acostumbre, pero es un poquito difícil y egoísta pensar que sin mí también estaría bien, y que un día me diga que se quiere ir con papá a vivir porque yo soy la que dice no cuando hay que decir que no, la que regaña cuando hay que regañar, la de las reglas, eso creo que es lo más difícil de ser mamá soltera, porque para ellos estar con papá un rato cada cierto tiempo es siempre estar de vacaciones, salir a jugar, ir a ver películas, descansar de estudiar, de reglas, de quehaceres, de tareas. Porque así es, pasa.
Pero en fin.
Al principio había momentos donde la tristeza ganaba, pero al verlo, saber que me necesita ahí para él siempre, me dio las fuerzas para seguir adelante. Además de que no tenía ni tiempo extra para llorar así que no era una opción.
Las mamás solteras enfrentamos muchos sentimientos como miedo, culpa, angustia, frustración, preocupación, y es algo que debe hablarse, no guardarse.
Yo nunca he sido de amar a los niños o ser chineadora, pero Luca es increíble, parece que fue hecho específicamente para mí. Muchos me dicen que es como un bebé adulto. Es un niño cool. Veo muchísimo de mí en él. Los que nos conocen lo ven, no hablando de físico, sino todo en general, nuestro ser.
Todo esto va por mí, por todas las mamás que pasaron por lo mismo, y por las que siguen ahí porque creen que no pueden salirse de ahí, por “amor” o porque creen que es lo mejor para los hijos, no lo es, Luca es tan feliz y tan positivo, porque pudimos salir a tiempo de una relación que no iba a ningún lado, estoy segura que si él hubiera crecido estos años rodeado de eso, sería muy diferente en su personalidad y percepción de las cosas. Ahora tiene una mamá muy feliz, una papá que lo ama, y no tiene por qué verse afectado por cosas que no son culpa de él.
Texto y fotos por Michi Vera. Mamita de Luca.
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