Tumgik
#¿POR QUÉ NO SANAS?
verso-abstracto · 3 months
Text
Para quien necesite leerlo…
Nadie dice que cambies. No, no se trata de eso.
Llega un punto en todo el recorrido en que el cansancio te pide hacer un alto.
Paras un momento, respiras, miras a tu alrededor y ahí caes en cuenta de la real situación.
Y sí, todos cambiamos, para bien o para mal todos lo hacemos, pero depende de cómo decidas cambiar y a partir de ahí empezará un nuevo camino para ti.
Entonces haces mejoras en tu vida, trabajas los puntos personales que tienes que trabajar, entras a círculos más fructíferos para ti, te alejas de personas que realmente no aportan a tu vida y ahí… ya. Todo cambia.
Ahora, no es que digamos que todo eso será rápido, no es como que después de tres meses de haber empezado dirás “¡Wau! ¡Qué cambios!”, pues tampoco, ¿no?
Pero sí, la cosa se vuelve un poco diferente, el aire cambia y, aunque no se pueda ver a simple vista para los demás, tú ya lo ves.
Para el corto tiempo no será ¡el cambio!, pero sí, ha cambiado algo, las cosas no son como antes. Se vuelve… menos doloroso, ya no hay tanto sufrimiento.
Te permites sentir, te permites llorar, pero ahora, en comparación con unos meses atrás, te entiendes, te comprendes, sabes qué es lo que está pasando y sabes que se te es permitido sufrir un poco.
Porque es normal, porque así es la vida y no tiene nada de malo que a veces nos sintamos como si el mundo se nos viene abajo, pero ahora sabes perfectamente que todo va a pasar, que el sufrimiento no es para siempre, que las ganas de derrumbarse no se quedarán instaladas por siempre en nuestra alma y que hay que salir adelante.
Te permitirás sufrir, pero también te permitirás levantarte y demostrarte que aquel mal momento no podrá contigo.
De eso de trata la vida, prueba y error.
Y mientras juegas este duro y pesado juego, disfrútalo, sonríe, vive, sana, quiérete, ámate, llórate cuando tengas que hacerlo, pero nunca te rindas.
Porque eso no es lo que hacemos los valientes.
Y créeme, todos lo somos.
Incluso tú, aunque ahora mismo no lo sientas así.
Little Moon
149 notes · View notes
chiquititamia · 4 months
Text
Calmar tu sed
Tumblr media
No tenía pensado escribir nada más hasta que acabase los exámenes pero anoche esta idea vino a mi cabeza y no pude contenerme, voy a suspender. Espero que tanto el anon que me lo pidió como las demás lo disfruteis ;)
💕Blas Polidori x f!reader
❤️‍🔥+18 sexo explícito, sleep kink, blas es insaciable, masturbación
Tu diferencia de edad con Blas no era tanta, o era eso lo que te querías decir a ti misma. Y en realidad no era tanta, técnicamente.
Pero las diferencias a ciertas edades, especialmente entre hombres y mujeres se hacían más evidentes.
Al fin y al cabo, Blas estaba en el principio de sus veintes, y tú ya los habías terminado.
Teníais una relación muy sana en la que él era bastante maduro y tú estabas embelesada por su dulzura y en ocasiones torpeza.
No eras ninguna desconectada de la realidad. Sabías perfectamente que tu novio veinteañero aprovechaba prácticamente siempre que tu salieses de casa para... Pasarlo bien a solas.
No era ningún secreto, a veces aún está acalorado cuando llegas. Diablos, hasta a veces aún está su portátil sobre el sofá, (y sabias que cuando lo usaba para trabajar o responder emails siempre lo ponía encima de la mesa). No era algo que te molestara para nada, pero no podías dejar de sentirte algo culpable.
Sabías perfectamente que el hecho de que alguien se masturbase no tiene nada que ver con que no desee a su pareja o que no se encuentre satisfecha. Simplemente Blas tenía 22 años y sus hormonas seguían en plena efervescencia.
La cosa es que tú tenias un trabajo muy cansado y, más veces de las que te gustaría llegabas a casa en un estado lamentable que solo te permitía ducharte, cenar un bowl de cereales y meterte en la cama totalmente derrotada.
Era más que probable que Blas te dejase dormir por empatía y no por falta de ganas de fiesta.
Pero eso no podía ser. Vale que no siempre sería posible, pero te prometiste a ti misma que serías más atenta en ese sentido para que vuestra relación fuera lo mejor posible.
Esa misma mañana, al poco de despertaros tu mano serpenteó por debajo de las sábanas, y, sin mucho preámbulo comenzaste a masturbarlo.
Fue demasiado fácil que Blas entrara en el mood, ya que, como la mayoria de los hombres de su edad se despertaba con una erección dia sí día también.
-Pero nena... Qué bien te despertaste... -suspiró
-Si, mi amor -dijiste con tono meloso- es que la vi tan dura que te tenía que ayudar... -al decir esto aumentase el ritmo de tu mano
-Ah... Sí, carajo...!
Conocías perfectamente sus puntos débiles, así que decidiste usar tus conocimientos para impresionarle. Mientras le masturbabas, empezaste a lamer su cuello presionando con tu lengua y haciéndole cosquillas con la punta.
-Ah! Pará! Me voy a veni-...! - A Blas no le dio tiempo de acabar la frase cuando acabó sobre su abdomen y su pecho- uffff.... Pero qué bicho te picó amor? -dijo incrédulo mientras te daba un beso en la frente y se levantaba para limpiarse.
-Ninguno, ¿no puedo mimar a mi novio?
-por mi sí, preciosa, pero ahora te tengo que devolver el favor, dijo dirigiéndote una mirada traviesa desde la puerta del baño de vuestro dormitorio.
- me encantaría, pero me tengo que ir a trabajar dijiste con pena.
- Ah... Un día voy a matar a tu jefe para que te den el día libre - bromeó él.
- Pero en serio cariño, quiero que no te contengas cuando tengas ganas... De estar conmigo. -le habías acompañado al baño y te sentaste mientras el comenzaba a ducharse.
Al decir esto, el asomó la cabeza para mirarte
- ¿Lo sabés? – preguntó divertido.
- ¿Qué cosa?
- Lo mucho que me contengo y lo que tengo que “descontenerme” cuando vos no estás… - oías el agua corriendo y podías ver como tu novio se duchaba a través de la cortina semitransparente.
Semejante confesión te hizo sentir calor en las mejillas.
- Si sé, y me parece bien – aclaraste.
- Pero te prefiero a ti, lo sabés, ¿no?
- Hombre, eso espero…- te reíste.
- Entonces la próxima vez voy a por ti, ¿es eso?
- Eso es, quiero q- antes de que terminases la frase miraste la hora en la pantalla de tu móvil y tus ojos se abrieron como platos, llegabas terriblemente tarde – me voy volando cariño, te veo a la noche, ¡chau! – dicho esto le diste un breve beso en su carita mojada y saliste corriendo hacia tu oficina.
Esa noche a Blas se le alargó terriblemente la jornada de modelaje y después de terminar había ido a tomar unas cervezas con sus compañeros y su manager. Cuando llegó a casa tú ya estabas profundamente dormida en vuestra cama. Te contempló durante un momento, estabas tumbada sobre tu costado, acurrucada a su almohada, con un pijama de verano que dejaba ver gran parte de tus muslos, y tus pechos estaban a punto de escaparse de la fina camiseta de tirantes. No podías estar más preciosa. Blas notaba su erección formarse mientras se aflojaba la corbata y se quitaba los zapatos con cuidado de no hacer ruido. Una de tus manos se apoyaba en tu labio inferior. Tu boca entreabierta le estaba conduciendo a la locura.
Cuando se quedó en ropa interior, que era como solía dormir, tu novio se tumbó suavemente en la cama detrás de ti.
No fue hasta que comenzó a acariciar tu cadera que notaste su presencia, sin embargo, te encontrabas tan cansada que simplemente sonreíste levemente.
Su nariz estaba rozando tu pelo, estabas segura de que el aroma de tu champú estaba llenando sus fosas nasales volviéndolo loco. Sus brazos rodeándote y atrayéndote hacia sí mismo.
- Está dormidita esta muñeca… - susurró dejando claro que sabía que no era cierto. Decidiste seguir el juego y fingir seguir dormida – qué pena…
Sus caderas se adaptaron a la curva de tu culo, encajando su erección apenas contenida por la tela de su bóxer entre tus nalgas, moviéndose suavemente, como si de verdad no quisiera despertarte.
- Cariño…exhaló su aliento caliente sobre tu nuca, erizando tu piel. Él por su parte notaba perfectamente que la humedad que sentía en la punta de su miembro no era solo suya – cariño… -susurró en tu oído- tengo ganas, preciosa… ¿Puedo, mami?
Tuviste que morder fuertemente tu labio para no dejar salir un gemido al oír ese apodo por el que te llamaba cuando estaba realmente desesperado.
- Me lo voy a tomar como un sí.
Aunque no le podías ver, reconocías el sonido de sus movimientos y, sobre todo, el suspiro de alivio que soltó. Se había bajado la ropa interior y había hecho lo mismo con tus pantaloncitos cortos. Su punta estaba apoyada en una de tus nalgas, terriblemente caliente y mojada, mientras que, con su mano libre, la que no estaba acariciando tu pecho, ya libre de tu camiseta, hacía a un lado tus braguitas.
Su pulgar dibujo la línea de tu entrada, recogiendo tu excitación y haciéndole suspirar. No podías esperar a que colocase su pija en tu entrada. Por suerte, no te hizo esperar.
Entro lentamente en tu interior, viéndose asfixiado por tu estrechez y soltando el aire por la boca junto con un largo gemido en bajo.
Tú te estabas tapando la boca con todas tus fuerzas para no gemir. Era mucho más excitante continuar con el juego.
- Ay, muñeca, qué ganas tenía de estar aquí dentro tuya… no podía esperar a mañana…si no me hubieras dicho eso esta mañana me habría hecho una paja en la ducha, porque no puedo dormir con vos a mi lado tan preciosa…- dio una estocada más profunda- y no tocarme o cogerte…
Blas continuó un rato follándote de costado mientras susurraba todas las cosas sucias que normalmente no te diría, pero ahora estabas dormida ¿no?
- Sabés…eres mi gatita, y te tengo que dar mi leche todos los días, para que no pases hambre y no se me acumule… pobre gatita -gimió.
Por desgracia no pudiste más y te moviste para acelerar el ritmo de sus estocadas dolorosamente lentas y dejaste escapar un gemido agudo y muy alto.
- Blaaaaas…!!
- ¿Eh? ¿Pero la gatita estaba despierta? ¡No lo puedo creer, qué sucia…!
El fin del juego sólo significaba una cosa, sus movimientos lentos y moderados también se habían acabado. En un visto y no visto te dio la vuelta con sus grandes manos dejándote boca abajo en el colchón, se posicionó detrás de ti y tiró de tus caderas para hacerte estar a cuatro.
- Menos mal que despertó mi nena, ya la quería oír gritar…
Y vaya si te oyó gritar, te escuchó él y probablemente todo el edificio, ya que al ser verano las ventanas de vuestro piso y las de vuestros vecinos se hallaban abiertas de par en par para combatir el calor.
En esa posición notabas aún más los centímetros con los que tu novio había sido bendecido, de una forma casi dolorosa, al entrar una y otra vez en ti con brutalidad.
- Sos un puto adolescente, todo el día con la pija dura -dijiste sin poder parar de gemir.
- ¡Es culpa tuya de estar tan buena, carajo! Y encima me decís esas cosas esta mañana, y me hacés tremenda paja antes de irte a trabajar… no se vale nena.
Sabías perfectamente que mañana tendrías las marcas de sus dedos tatuadas en tus caderas, pero poco te importaba. Notabas tu orgasmo aproximarse, lo cual te obligó a cerrar los ojos con fuerza. Le hiciste un gesto con la mano sin girarte. Aunque él ya había notado por la estrechez de tu interior lo que le querías decir: Sigue con el mismo ritmo y en la misma posición o te asesino.
Él te obedeció y te agarro de ambas manos, dejándote solo sobre tus rodillas y con la espalda arqueada para poder recibir su cogida. No pasó ni un minuto cuando tu clímax llegó arrasando, haciéndote gritar y aprisionando el miembro de él de la manera más deliciosa. Esto último provocó lo inevitable.
- Me voy a venir preciosa, ¿puedo…?
No hacía falta que te dijera lo que quería, y tú también lo querías, así que, como respuesta, lanzaste tus brazos hacia atrás agarrándote a sus hombros.
Ahora fue su turno de llenar el aire con sus gritos, mucho más profundos y roncos que los tuyos, ahogando el sonido del ventilador de vuestro techo.
Blas era de los que cuando te llenaban, te llenaban. Todo su líquido caliente salía disparado manchando tus paredes de blanco, haciéndote saber todo lo que te había extrañado ese día.
Cuando lograsteis recuperar el aliento fuisteis a asearos al baño que estaba junto a vuestro cuarto. Todas las marcas que os habíais hecho mutuamente, y vuestro cabello desordenado ahora se reflejaba en el espejito bañándoos con luz fluorescente.
- Mañana nos levantamos más temprano para que nos dé tiempo, ¿ta? – dijo secándose con tu toalla.
Dios mío, ¿en qué te habías metido?
tags: @madame-fear @llorented @deepinsideyourbeing @andyrubei @loveinsprings @iamjustadoll @daniboosblog
74 notes · View notes
Text
Partes de nosotros mueren todo el tiempo, con las personas, por decepciones, por qué cambiamos y eso a veces nos hace vivir en un luto eterno, pero con el tiempo comprendes que a veces en necesario que partes tuyas mueran para que otras puedan nacer, partes más consientes, más sanas y más fuertes. Aprendes que hay partes que siempre serán un luto de añoranza, pero habrá otras a las que con el tiempo y en tu memoria les llevarás flores y les dirás " gracias por existir, perdón por dejarte ir, pero tuve que soltarte para no soltarme a mi".
Efimera Lunar Intemporal
362 notes · View notes
neuroconflictos · 2 months
Text
De pronto va a llegar un dominguito donde el corazón esté tranquilo, y sí, a lo mejor antes de eso te vas a encontrar primero una docena de otros domingos donde las cosas no son sencillas. Pero ahora estás aquí, en paz, entendiste que a quien no quiere quedarse lo único que podemos hacer es desearle lo mejor, dejaste de preocuparte tanto por lo que no puedes controlar, paraste de sobrepensar un chingo el futuro y te diste cuenta que al final lo único que queda es hacer todo de corazón. Te pusiste de prioridad, volviste a trepar cerros, a cantar, a bailar, a viajar y a hacer todo eso que te gusta, y tal vez aún no llegas a donde quieres, a lo mejor aún no sanas al cien, pero qué bonito es cuando nos vamos construyendo de a poquito otra vez y sólo nos importa volver a estar bien.
Cherryofsaturn
40 notes · View notes
deepinsideyourbeing · 3 months
Note
La novia de Enzo dado puras indirectas de que quiere un hijo con el (mandandole TikToks de bebitos, mostrándole fotos de el y ella cuando eran chiquitos diciéndole lo perfecto que sería un nene con ambos genes, contándole que cree que va a dejar de tomar la pastilla, etc) y Enzo teniendo que confesarle en un mar de llantos que el es infertil y no se lo quería decir porque sentía mucho dolor de no poder darle lo que mas ansía en la vida 😭
youtube
Angst :c
¿En qué momento la habitación comenzó a sentirse más pequeña de lo normal? ¿Fue cuando cubriste la mesa de los viejos álbumes con fotografías arrugadas o cuando comenzaste a hablar de los rasgos que heredarán tus hijos? Enzo no está muy seguro, sólo sabe que le falta al aire y que sus ojos arden.
-¿Cuántos años tenías acá?- preguntás luego de perderte por muchos minutos en una foto suya. No tiene idea de cómo esas fotos llegaron a tus manos pero es muy probable que haya sido obra de su madre-. Lo único que tenés igual son las orejas.
Quiere reírse pero en lugar de eso en su garganta sólo surge un simple sonido de afirmación. Estás muy concentrada como para percibir su inquietud o sus pobres intentos de fingir que te sigue la corriente y él no tiene idea de cuánto tiempo más podrá mantener en secreto lo que le molesta. Unas semanas o meses, con suerte...
Llevás un tiempo libre de los efectos del método anticonceptivo que utilizaste durante años y él disfruta verte radiante, de mejor humor y mucho más sana. En principio fue divertido acostumbrarse a los efectos de tu ovulación y bromear con tu desesperación en esos momentos, pero luego comprendió que lo que denominaste baby fever no era sólo un producto de tus hormonas. Hablabas en serio. Siempre.
Ahora son cada vez más los momentos en que el tema de conversación es cómo serán los hijos que tendrán, preguntás cuántos niños le gustaría tener, querés sostener a todos los bebés durante las reuniones familiares e intentás que él, terriblemente incompetente con los pequeños, también los tenga en brazos.
-¿Vos qué decís?- deslizás dos fotos sobre la mesa-. ¿Se van a parecer a vos o a mí?
Cuando intenta tomar las fotos sus manos temblorosas lo traicionan. Sus dedos débiles no pueden despegar el papel de la madera y comienza a sentirse más que desesperado cuando recuerda que aún no contestó tu pregunta, sabiendo que no tiene una respuesta porque sería deshonesta.
Balbucea nervioso y toma su taza llena para tener con qué entretener su boca. Aún está temblando y es demasiado tarde cuando nota que pierde toda sensación en las extremidades, por lo que el aza de la taza se zafa de su agarre y esta cae sobre su regazo, derramando el líquido en todas las direcciones posibles.
El té estaba ya completamente frío pero puede sentir su piel arder.
Cuando te arrodillás frente a él con intenciones de ayudarlo con su ropa, ignorando por completo cuál era la temperatura de su bebida y sin comprender la falta de reacción de su parte, toma tus muñecas y te detiene sin dar explicaciones.
-No puedo.
-¿Qué no podés?
-Tener hijos.
-No hablo de tenerlos ahora- humedecés tus labios con tu lengua y él sabe que estás incómoda o avergonzada-. Puede ser en unos años o cuando...
-En unos años tampoco se va a poder- lamenta-. Porque no... yo no...
-Oh...
-Sí, oh- y vuelve a sentarse-. No sé por qué no te dije antes.
Acariciás su mejilla y tu pulgar deshace el rastro de sus lágrimas una y otra vez. Permanecés de rodillas entre sus piernas sin fijarte en el té derramado o la porcelana hecha añicos en el suelo, y apretás fuerte su mano para calmarlo.
-No importa- jurás-. Hay muchas formas de...
-Pero vos querés un hijo nuestro.
-Enzo- lo obligás a mirarte-. Si vos también querés entonces cualquier hijo va a ser nuestro.
Elegí el camino de la violencia, ¿no? Pero permítanme compensarlas por mi pésimo comportamiento y decirles que la letra de la canción en combinación con el video se interpreta de cierta manera, pero en realidad es sobre el amor incondicional entre una pareja y yo imagino algo así para este escenario :)
taglist: @chiquititamia @delusionalgirlplace @lastflowrr @madame-fear @creative-heart @llorented @recaltiente ♡
51 notes · View notes
elbiotipo · 5 months
Text
Las revistas científicas deberían ser más divertidas. Muchos se imaginan que son tipo Muy Interesante o National Geographic (QEPD) pero en realidad son "revistas" (algunas del tamaño y formato de un manual de secundaria) que son colecciones de papers desconectados con capaz alguna editorial. Cuando por primera vez vi una en un formato no PDF me sorprendí, parecen guías telefónicas (traiciono mi edad)
Tendrían que traer crucigramas y juegos, cartitas al editor, consejos y tips, un espacio para dibujitos de los hijos de los investigadores, fanart, recetas y manualidades, CDs gratuitos llenos de shovelware, un montón de secciones estilo "sabías qué" de cualquier cosa, y por qué no hasta un par de pinups pero así artísticos, la cosa sana.
52 notes · View notes
caostalgia · 2 years
Text
“No preguntes por qué pasaron las cosas, solo vive tu proceso, ponte firme, sana, y verás por qué tuvieron que haber pasado”.
Edmilson Fandiño.
391 notes · View notes
alasdepaloma · 10 months
Text
No es tu culpa si por una razón u otra tus relaciones no han funcionado. No es tu culpa si por circunstancias ajenas a ti tus ilusiones se han visto rotas y tus sueños golpeados por una realidad que no es absoluta. No es tu culpa si has dado todo y no se logra concretar nada. No es tu culpa si has cuidado con paciencia, amor, ternura y compasión, buscando ser responsablemente afectiva a través de un canal de comunicación prístino y aún así el fuego se ha apagado y sólo ha quedado un humo que ya no puede ser revivido. No… no es tu culpa tampoco aferrarte al amor e implorar cada día una nueva oportunidad para que nada de eso termine y con ello la fe de la niña interior que sólo anhela ser amada y amar y no volver a sentir abandono. No son más que heridas emocionales de la infancia que nos van guiando por caminos con espinas, caminos en los que creemos que es normal sangrar y dolernos, caminos a los que nos hemos acostumbrado y tenemos la falsa certeza de que así es como se debe vivir. Estamos condicionados. A mí me condicionaron. Son los llamados patrones familiares, esos con los que carga nuestro árbol genealógico, esos a los que pocos familiares afrontaron y rompieron para, como padres, no transmitírselos a sus hijos. ¿Y qué enseñamos a nuestros hijos sino a actuar en base a nuestro ejemplo? ¿Y qué aprende una niña sino a imitar a la madre a ser sumisa y olvidarse de ella misma para darle a los demás todo lo que ella no es capaz de otorgarse? ¿Y qué aprende un niño sino a buscar en muchas mujeres el afecto que tampoco se han logrado dar por el ejemplo de aquel padre que también buscaba validarse a través de otras? Crianza. No es más que eso. Sin embargo nuestra responsabilidad es darnos cuenta de ello y trabajar en sanarnos, porque como seres humanos merecemos una buena vida cargada de paz, sosiego y mucho amor aunque este amor no se trate de algo romántico. El amor va más allá de un simple romance, el cual es muy bonito y sanador cuando dos personas emocionalmente disponibles se unen y trabajan en equipo para ser en lo individual y como pareja cada día mejores. De eso se trata el romance… De ser cada día mejores, de buscar sanarse y de forma indirecta sanar al otro. No se trata de todo lo contrario. Donde no hay avance, donde no hay sanación, donde se percibe más fractura de heridas que el resarcimiento de las mismas, no puede haber amor. No puede haber una disposición madura para sacar adelante a un equipo y ser un buen guía o líder emocional. Pero entonces, no es necesario tener un amor romántico para sentirnos plenos y grandes. Es necesario tener un amor propio para ser pleno y grande, para buscarle un sentido subjetivo a la vida y con ello hacernos de una definición de servicio que sea tan altruista, que demos ese amor —que ya nos tenemos— al mundo, para sabernos aptos como seres amorosos que no requieren de estar en pareja para ser felices. Ambas cosas son sanas y hermosas. Una relación benéfica consigo mismo o con otro que ya se ha sanado y que busca, como tú, un compromiso real que sólo ejecutarán aquellos que han invertido tiempo en soledad y en silencio, para escarbar en su inconsciente, dejar hablar a sus heridas, abrazarlas, hacer tregua con ellas y llegar a un acuerdo: “Nunca más mi vida será guiada por una herida, pues de antemano sé que, como un mecanismo de defensa, lo que haré será sabotear mi felicidad, mal gastar mi vida y mis años, suprimiéndome tanto como si lejos de amarme me odiara. Y no… Hoy decido amarme, hoy decido sanarme y me comprometo a hacerme plenamente feliz y contribuir con ello a hacer de este mundo, un mundo mejor.”
Tumblr media
—Paloma.
Amor propio
56 notes · View notes
analisword · 6 months
Text
high infidelity (Enzo Vogrincic x fem reader)
Tumblr media
Capítulo 18.
Alana se movió incómoda en su asiento una vez más, a pesar del aire acondicionado del restaurante y que su espalda estuviera completamente descubierta debido al vestido que había elegido, sentía un calor abrasador recorrerle a lo largo de toda la espina dorsal, ¿cuáles eran las probabilidades de encontrarse a la ex novia de Enzo precisamente en ese lugar? Por lo que tenía entendido, la mujer, al igual que él, era uruguaya, ¿qué hacía en esa playa tan escondida de España?
Por su parte, Enzo se limitó a darle otro sorbo a su copa de vino,  era como si se encontrara fingiendo demencia, Alana sabía a ciencia cierta que Samara y él habían terminado en buenos términos, habían tenido una relación bastante duradera y sana, terminaron simplemente decidieron que sus planes a futuro no eran los mismos, Alana no se sentía insegura o celosa, claro que Samara era una mujer bastante hermosa, sabía que era inteligente y divertida, sabía que si Enzo había estado tanto tiempo con ella y hablaba con tanto cariño era porque Samara era verdaderamente una buena persona, sin embargo, no podía evitar sentirse incómoda por obvias razones.
—¿Querés volver a la habitación? Ya estoy comenzando a marearme—carraspeó su novio, se le notaba algo nervioso y su cara estaba más roja de lo normal, Alana no podía decidir si era por el vino o la presencia de su ex amor. 
—No me molesta si quieres ir a saludar, sé lo mucho que significó para ti—declaró Alana estirando su brazo para tomar la mano de Enzo—. Sé que siguen siendo amigos—le regaló una sonrisa sincera. 
—Ehh—vaciló—. Ella parece estar bastante en su rollo y yo en el mío en estos momentos, ¿para qué molestar?—dijo él levantando los hombros, quitándole importancia al asunto. 
—¿Alguna vez viniste aquí con ella?—preguntó, cuando recién llegaron al hotel, sintió que era un lugar mágico y nuevo para ambos, pero ahora existía la posibilidad de que esa no fuera la primera vez de Enzo en el lugar. 
—¿Qué?—frunció el ceño—. Por supuesto que no—dijo ofendido. 
—No lo digo con mala intención, simplemente me pareció una coincidencia muy grande que esté precisamente aquí, pensé que tal vez ambos ya conocían el lugar, eso es todo. 
—Escogí este lugar porque era el único hotel cerca que nos aceptaba con todo y Zola, Samara no tiene nada que ver aquí, ni siquiera sabía que estaba en España—habló rápidamente, más que enojo, su tono de voz mostraba cierto grado de frustración que Alana no lograba comprender, pues en ningún momento le había reclamado nada. 
—Vale—dijo ella—. Simplemente preguntaba. 
Enzo apartó su mano y se apretó el puente de la nariz, Alana tragó saliva en seco, todo el día había sido más que maravilloso, no esperaba discutir con Enzo, mucho menos por algo tan superficial. 
—Ya no tengo hambre—dijo Alana, no le apetecía seguir estando en el restaurante, de pronto el alcohol se había acentuado más en su sistema, las luces se sentían muy brillantes y las conversaciones del resto de personas sonaban invasivas. 
—Sí, yo tampoco—coincidió su novio.
—Voy al baño rápido—dijo Alana quitándose la servilleta de su regazo para después abandonar la mesa.
Sintió su cuerpo relajarse cuando el agua helada del grifo tocó sus manos, las lavó meticulosamente, las secó y miró su reflejo en el espejo.
Ella y Samara eran como polos opuestos, ella tenía el cabello oscuro, Samara era casi rubia, sus ojos eran cafés, los de Samara eran azules grisáceos, la había visto sentada, pero aún así lucía significativamente más alta que ella. 
Era hasta chistoso hacer la comparativa, Sebastián y Enzo también eran polos opuestos físicamente.
Alana sacudió la cabeza ante sus ideas, no estaba llegando a nada conciso, no había sentido en comparar. 
El sonido de la puerta la sacó de su trance, Samara entró como si gobernara el baño y le puso candado a la puerta, tal como lo había pensado, la chica era significativamente más alta que ella, Alana no pudo evitar sentirse pequeña, tanto física como metafóricamente. 
—Hola—dijo Samara alegremente—. No quiero parecer loca, pero quería conversar con vos, por eso le eché candado y toda la cosa—dijo riendo.
—Hola—dijo extrañada.
—Soy Samara, un gusto—dijo extendiendo su mano, Alana la inspeccionó por varios segundos y la tomó, tenía sus dedos delgados y largos, además de un precioso esmaltado, cuando Alana apartó su mano cruzó los brazos escondiendo sus propias manos, sus uñas estaban mordidas y con callos en las yemas debido al constante contacto con las teclas al escribir durante todos esos años. 
—Alana—dijo ella asintiendo. 
—Sé quién sos—dijo ella—. Soy gran fanática tuya, desde mucho tiempo atrás—exclamó llevándose sus perfectas manos al pecho.
Alana recordó como Enzo le había contado meses atrás que Samara había sido la que le mostró sus libros, sin ella, Enzo nunca hubiera tenido idea de quién era Alana Lomelí. 
—Yo también sé quién eres—respondió Alana, tal vez era el cambio tan repentino de escenario, pero sentía que todo el alcohol que había ingerido se había esfumado por completo.
—Quise acercarme pero no quería verme invasiva, Enzo y tú se veían bastante divertidos y con copitas encima—dijo ella sonriendo, ¿qué nunca se cansaba de sonreír?—. Es un mundo muy pequeño, vine acá con mi novio porque es pianista y lleva un par de semanas trabajando aquí, en el lobby del hotel—informó, Alana recordó haberlo escuchado tocar cuando llegó. 
—Oh, genial, es grandioso.
—Sí, le gusta mucho lo que hace—dijo Samara llevándose uno de sus rizos detrás de su oreja. 
—Qué bien. 
—Umm, Enzo y yo llevamos mucho tiempo de conocernos, somos…bueno, fuimos, no sé, grandes amigos—dijo Samara comportándose nerviosa por primera vez desde que la intercedió. 
—Sé que fueron novios—dijo Alana inclinando la cabeza—. Descuida, no me molesta o algo así, te tiene un gran aprecio. 
—Lo conozco bien—dijo Samara agachándose para quitarse sus sandalias de tacón, aún así seguía siendo bastante alta—. Probablemente no se acercó a saludarme porque no quería incomodarte, no me molesta, sos muy especial para él.
Alana abrió la boca para responder pero no logró emitir ni un sólo sonido, no sabía que responder a ello, Samara pareció notarlo de inmediato, porque siguió hablando con su dulce y melodiosa voz. 
—No he estado muy pendiente de las noticias—carraspeó—. Entre el teatro, el trabajo de Martín, mi novio y otras cosas, pero sí algo sé es que Enzo siempre ha sido una persona bastante reservada y compuesta, escuché ciertas cosas, su relación no ha sido precisamente la más discreta…
—No sé a qué viene todo esto—la interrumpió, Samara levantó la mano, pidiéndole a Alana que la dejara continuar, ella lo hizo. 
—Si Enzo se ha metido en todo ese torbellino es porque en verdad te quiere, ¿sabes? Martín y yo estábamos acá mucho antes de que ustedes llegaran al restaurante—informó, Alana abrió los ojos en sorpresa ante la revelación, Enzo y ella habían estado horas ahí y no se habían percatado de la pareja hasta hace unos minutos. 
—No tenía idea—murmuró. 
—Porque cuando están juntos, están en su propio mundo—dijo Samara sonriéndole con ternura—. Te mira como si vos fueras la única persona en una habitación llena de gente, y vos lo mirás igual. Para no hacer el cuento tan largo, sólo quería decirte que estoy muy feliz por ustedes, sobre todo por Enzo, merece una buena persona a su lado y vos claramente lo sos. Gracias por cuidar de él. 
—Gracias por tus palabras, en verdad las aprecio viniendo de alguien que Enzo considera importante en su vida—dijo sinceramente, no había esperado esa interacción, siempre le habían parecido mágicas las conversaciones que se podían tener con mujeres desconocidas en los baños y esta no había sido la excepción.
—Bueno, ya no te robo más que aquél hombre seguramente debe estar buscándote por todos lados. 
—Sí—asintió riendo.
Alana salió del restaurante sintiéndose completamente diferente, Samara en verdad le había agradado, podía ver por qué Enzo la seguía apreciando hasta el día del hoy, por culpa de su turbulenta relación con Sebastián, había olvidado que existen personas que terminan en buenos términos. 
—Te veo muy pensativo—dijo Alana cuando finalmente llegó hasta Enzo, contrario a lo que Samara había dicho, él no se había estado buscándola y en realidad se encontraba frente al mar, viendo el océano y con los zapatos en la mano, estaba algo oscuro, las tenues luces del restaurante a unos cuantos metros alumbraban el lugar, al igual que el reflejo de la luna sobre las olas. 
—Perdóname por como te hablé hace un rato—dijo Enzo rápidamente—. No fue la mejor manera de hacerlo, estaba nervioso. 
—¿Por Samara?—preguntó Alana sútilmente, Enzo se giró hacia ella y la tomó del rostro. 
—No, no sé, no quería que te incomodaras por su presencia, resulta que yo fui el que lo terminó haciendo más incómodo, te pido una disculpa por ello. 
—Enzo, entiendo que ustedes sigan siendo amigos, no porque Sebastián y yo hayamos terminado mal significa que todo el mundo termina así, además, es una chica bastante agradable, demasiado a decir verdad—dijo bajando la mirada sin querer. 
—Hey, ¿qué pasa?—preguntó Enzo levantando su mentón. 
Alana apretó los labios.
—Podés decirme—la impulsó. 
—Hablé con ella en el baño…es lindísima, por fuera y por dentro.
—¿Estás celosa?—preguntó Enzo con una pizca de diversión en su mirada.
—¡No puedo evitarlo! Es tan amable, además sonríe todo el tiempo, ¿cómo no se le cansa la cara?—preguntó con curiosidad, Enzo soltó una carcajada echando la cabeza hacia atrás, por un instante Alana se olvidó de toda la situación—. Y sé que la relación entre ustedes fue tan sana y tranquila, en cambio conmigo…Pues, siento que te he arrastrado a tantos problemas con los que no tienes que lidiar. 
—Alana, para mí no hay mujer más hermosa que vos, ¿me escuchás?—dijo viéndola fijamente—. Vos sos divertida, amable, inteligente, bella y la lista sigue y sigue. Samara fue alguien muy importante para mí y aún la aprecio, pero hasta ahí, desde que te conozco no ha existido nadie más para mí, no quiero que haya alguien más, sos vos o es nadie. 
Alana sintió que su estómago giraba y brincaba de felicidad, a pesar de todos esos meses, su novio seguía poniéndola nerviosa.
—Estás borracho—dijo ella empujándolo con el hombro, sólo porque se encontraba demasiado sonrojada cómo para decir o hacer otra cosa. 
—Sí—admitió—. Un poquito, pero sigo pensando igual. Y Lana, en verdad te quiero, te quiero tanto que no me importa lidiar con la gente aburrida que escribe cosas sobre nosotros, que nos critica como si nos conociera, te quiero tanto, y ni ellos, ni Samara, ni Sebastián, ni nadie cambiará eso. Te lo prometo. 
—Te quiero—dijo Alana rodeándole el cuello con sus brazos. 
—Te quiero—repitió,  tomó una pausa de unos segundos y volvió a hablar—. Y estoy completamente y profundamente enamorado de vos. 
29 notes · View notes
aziulpre · 7 months
Note
Creo que no hace falta hablar de la OTP RookBen es lo mejor, pero hablando del canon ¿ qué opinas de que Ben se quedo con Kai ? ¿ qué opinas de ese ship de forma objetiva?
"Entre toxicos se aman".
Ben le fue infiel a Julie con 2 chicas (claramente no se dio cuenta que estas gustaban de él pero él se dejo besar e incluso beso a Elena) y coqueteaba con otras (por eso terminaban o se daban un tiempo), Ben nunca salio con Ester pero él sabia que estaban en eso y aún así la ignoraba.
Kai cuando conocio a Ben lo trataba tan mal que Gwen tuvo que defenderlo, después lo trataba como perro y solo gustaba de él siendo lobo (aunque después se da a entender que si le gusta Ben humano pero fue más gracias a Crononauta).
Muchos defienden a Ben por "Julie ser tonta por dejarlo" y otros tratan mal a Kai por ser malo con Ben, pero estos 2 son muy malos. Ellos 2 representan muy bien muchas relaciones que permanecen años, pero con el tiempo maduran y "mejoran" al tener hijos.
Tumblr media
Si quieres una relación sana, mira Sabados Secretos, ambos actuaba un poco igual a Kai y Ben (peleandose porque enrealidad se gustaban) pero en poco tiempo se volvieron muy tiernos (a comparación de Kai y Ben que tardaron años que incluso sus personalidades cambiaron).
Tumblr media
Kai siempre fue destinada a ser la esposa de Ben (antes las series/peliculas eran así, si el protagonista tiene un interes amoroso es porque se casara con ella).
Tumblr media
El crew gustaba de crear intereses amorosos a Ben pero pues no podían cambiar lo de Ben 10,000. En lugar de hacer eso, pudieron desarrollar mejor a Kai y a Ben (no era necesario que fueran novios o interes, con solo ser amigos como en Omniverse pudieron madurar a los personajes, algo que si paso en Los Sabados Secretos en 1 año, para que nadie rechazara el ship y prefiriera otros).
32 notes · View notes
Text
Estoy segura que quiero estar contigo, porque ya no recuerdo qué es estar sin ti; las personas buscamos toda la vida unos ojos que nos miren de la forma en que tú lo haces conmigo, y sólo logro pensar que tu mirada es suficiente por el resto de mis días. Sé que no somos más que una crisálida y telares de emociones, nervios y sentimientos que nos absorben constantemente, pedir más de lo que somos ahora es risible, pero a veces es necesario completar la metamorfosis para poder llegar a ser algo, y yo, mi amor, quiero todo contigo. Lo que siento por ti me satura completamente, vive y palpita dentro mío como un destello que jamás se apaga, que no dimite. Es nuestra alma y nuestra compañía, nuestra presencia, nuestra ausencia, que entiende a silencios, lo que entre tú y yo se trate, lo que en nosotros vive. Tú, amor mío, solamente tú, eres mi hogar, provocas en mí paz y sanas cada parte de mi niña interior. Sólo tu presencia provoca que quiera contar historias hasta que mi voz demande reposo, mi alma se ilumina cada vez que se encuentra contigo, y para mí esto que siento es suficiente. Suficiente para saber que quiero estar contigo hasta que la vida lo disponga, hasta que nuestros caminos procedan a la eternidad.
A lo largo de la vida, tenemos un amor con el que conectamos tanto que dejamos un pedazo de nuestra alma en él, por favor, quédate en mi vida. Acompáñame en mi crecimiento personal, que quiero acompañarte en el tuyo.
JPGM
Note: aquí me permito ser la mujer más cursi del mundo sin tapujo, abriendo mi ser, mi alma, desnudándome justo donde más duele; el corazón.
130 notes · View notes
chiquititamia · 6 months
Text
Make you feel better
Tumblr media
Enzo vogrincic x reader Primera parte de mi segundo fanfic 💕Enzo es tu mejor amigo y entiende que necesitas sentirte mejor con la regla ❤️‍🔥warnings: de momento el smut es leve, pero la segunda parte será explícita. 💬Agradecería mucho vuestras opiniones. Os leo!
Make you feel better
Nunca te había dado tan fuerte. Es decir, sí, la regla normalmente te daba más hambre de lo normal o náuseas, según el mes. Algunas veces también experimentabas dolores de cabeza muy profundos, que te tenían en la cama durante tardes o días enteros.
Otros meses sin embargo…los síntomas eran otros.
Una especie de celo, de heat, se apoderaba de tu cuerpo; a menudo te despertabas con una sobreestimulación que había transcendido de un sueño y te había hecho meter tu mano entre tus piernas. Después de trabajar, a veces incluso antes de prepararte la cena te tumbabas en tu cama para aliviar la calentura que habías arrastrado durante el día.
Aquel día habías tenido que cumplir con varios mandados desde por la mañana: que fuera tu día libre en el trabajo no quería decir que pudieras descansar, al fin y al cabo, vivías sola y tú eras la única que se iba a encargar de las tareas de la casa como limpiar, cocinar e ir a la compra.
Muy para tu desgracia tu healthy you era quien había ido al supermercado, comprando todo tipo de comida sana, que, además, implicaba una elaboración, la cual no estabas dispuesta a realizar en ese momento. Matarías por un poco de tu chocolate favorito.
Te apresuraste a meterte a la ducha, debías estar algo presentable: tu mejor amigo, Enzo, vendría a pasar el rato contigo y quizá ver una película.
Ya tenías puesta ropa cómoda para andar por casa: una camiseta que te quedaba gigante y unos shorts. Te habías puesto un sostén al salir de la ducha, pero tus pechos se notaban tan hinchados que decidiste quitártelo, dolorida.
Te estabas peinando tu largo cabello mojado hacia atrás cuando el ruido del timbre te sobresaltó.
-Cómo vas, chiquita? -Enzo te saludó con dos besos.
- Podría estar mejor… - te lamentaste.
- Y eso? – Enzo pasó a tu lado y colgó su chaqueta en el colgador de detrás de la puerta.
-No es nada…
-Ah, bueno, mira lo que te traje – Enzo sacó del bolsillo un par de kit-kats de fresa-tus favoritos-y los agitó delante de ti.
Si fueras un dibujo animado se verían estrellas brillantes sobresaliendo de tus ojos.
Sin mediar palabra se los arrebataste de las manos y le abrazaste.
- ¿Che, qué bicho te picó? - dijo Enzo divertido.
Ignorándole corriste hasta tu cuarto con la chocolatina en la mano dispuesta a sentarte en tu cama.  Estaba anocheciendo, así que iluminaste la habitación con la guirnalda de lucecitas que colgaba en el cabecero de tu cama, en adición con la lámpara de lava que casi siempre estaba encendida.
Era viernes de películas: el mejor día de la semana. Desde hacía un tiempo, os habíais propuesto ver una película de terror cada fin de semana. A veces de horror clásico, como El exorcista o La Matanza de Texas, y otras, sobre todo cuando las eligías tú, de terror ‘elevado’, como Hereditary o Babadook. Enzo era, como siempre le decías para molestarle “un viejito en cuerpo joven”, y tenía debilidad por el cine del siglo pasado. Ambos cedíais en vuestros gustos con el fin de pasar un buen rato. Aunque os gustase joder, en realidad erais muy buenos amigos.
¿Amigos? “Sí, amigos”- te tenías que recordar a ti misma de vez en cuando, cuando te despertabas totalmente excitada por haber soñado que hacíais todas esas cosas que no hacen los amigos. Enzo era innegablemente atractivo, sobre todo cuando le mirabas con esa sopa de hormonas que era tu cuerpo en esos días. Pero atractivo o no era tu amigo, y eso se respetaba. Además, ¿qué pasaría si un día hicieras un comentario o un movimiento fuera de tono? Toda vuestra amistad se vería arruinada por algo tan mundano. Ni hablar.
Enzo no era el único que había traído un detalle. Esa misma mañana, en la universidad habías ido a hablar con el “proveedor” oficial de vuestro grupo de amigos y te había dado hierba de la mejor calidad.
La tarde transcurría entre el humo del porro que os estabais pasando mientras veíais la película Déjame salir de Jordan Peele.
-Ese chabón está muerto- comentó Enzo intentando adivinar el destino del pobre protagonista.
Tú apenas le estabas prestando atención a lo que dijo, ni a la película, tu mente se estaba perdiendo por unos lugares absurdos de los que nada bueno podía salir. Te sorprendiste a ti misma saboreando la boquilla del pucho, por el simple motivo de que se encontraba mojado con su saliva. De repente estabas visualizando su boca, sus labios. Despierta, pendeja, ¿qué te pasa?. Te pateaste a ti misma mentalmente por si quiera atreverte a explorar esos terrenos.
Tal y como si fuera un castigo divino por tus pensamientos impuros una tremenda punzada te atravesó el bajo vientre haciendo que contrajeses la expresión de tu rostro y gimieras de dolor por lo bajo. Aunque trataste de disimularlo, tu amigo se dio cuenta mirando un par de veces para cerciorarse de que te había visto retorcerte por el rabillo del ojo. Rápidamente alcanzó el control remoto de la televisión y paró la película.
-Bo, qué tenés? -su expresión contenía más gravedad que la que el asunto requería, por la cara que su amiga ponía podría estar sufriendo un ataque al corazón- Habláme!
Hiciste un gesto con la mano y negaste con la cabeza, dándole a entender que no sucedía nada y que ibas a estar bien, pero su cara decía todo lo contrario, a juzgar por sus ojos aún fuertemente cerrados.
-Contáme qué tenés, boluda, me estás asustando!
-Es solo un…calambre- gruñiste tú luchando por mantener la compostura. Si no lograbas recomponerte le tendría que explicar en detalle lo que le pasaba y, además de la pena que te daba, no tenías ningunas ganas de hablar con aquel dolor apuñalándote.
-¿Comiste algo malo? -se alarmó- ¿fueron mis chocolates?- Sus ojos se habían encendido como dos alarmas de incendio, era hasta adorable el repentino miedo que su amigo estaba sintiendo por ella.
¿Qué te pasa, tarada? ¿Cómo puedes estar disfrutando que tu mejor amigo se preocupe por ti y la pase mal? - te mortificaste.
-Che, Enzo, tranquilízate, sólo es mi periodo … - trataste de sonreír.
Él pegó un resoplido digno de un caballo de carreras, aliviado. Sólo era eso.
-Dale, mirá que sos dramática nena, por un poco de sangre de nada El moreno se rio sin ser consciente de la mirada asesina con la que le estabas fulminando. Si tuvieras poderes ahora mismo tu amigo habría estallado en llamas y estaría corriendo en círculos por tu pieza.
-No…voy a opinar. Seguí con la peli- trataste de respirar profundo como te había enseñado tu terapeuta, no había caso de comenzar una pelea con tu amigo, y menos en esa situación. Tu apartamento podría convertirse en La casa de las dagas voladoras.
-No, dale, chiquita, no podemos seguir viendo la peli como si no pasase nada, no soy tan así, te estaba jodiendo.
Buscaste un atisbo de diversión en su mirada, anticipando que se fuese a burlar de ti una vez más. Algo que en realidad te hubiera dolido. Pero no lo encontraste, parecía hablar en serio.
-Lo que te duele es la panza, ¿no?
Bajaste la mirada y asentiste.
-Mirá, no tienes que avergonzarte ni preocuparte, me he criado con mi madre y mi hermana, y también he tenido novia, sé de qué va
-No me digas -respondes sarcástica. Como si haberlo contemplado le pudiera hacer entender qué era lo que carajo sentías.  
-Bueno, a ver, nunca lo podré saber, soy un varón, pero si que puedo intentar ayudarte. – al decirle esto le puso una mano en su bajo vientre, el cual notaba arder por dentro. Al notar su mano grande y cálida te estremeciste, cosa que pareció asombrarle. No le había sonado exactamente a un sonido de dolor por tu parte – ¿qué más te duele, chiquita?
Estaba claro que Enzo no era consciente del impacto que un solo roce y un solo nombre podía significar para ti viniendo de él, especialmente en ese momento tan hormonal del mes. Sentías que tu aliento era tan cálido que te quemaría la garganta y qué él notaría esa temperatura saliendo de tu interior si llegabas a exhalar cerca de él.
-Y bueno, los senos – dijiste en un tono bajo, aunque intentabas sonar confiada. Con lo que no habías contado es con que ese comentario habías dirigido su mirada directa hacia Tus pechos, que, para más inri estaban desprotegidos de una capa protectora extra de un sostén. ¿Se adivinarían demasiado tus pezones a través de la gastada camiseta que estaba vistiendo?
-E-eso es normal- Enzo tampoco estaba haciendo un gran trabajo sonando casual- ¿querés que te traiga una infusión o algo?
-No, eres muy dulce, pero eso no me ayudaría.  ¿¿Qué?? Ahora le llamás dulce a tu mejor amigo. No, nena, estás perdida. Además, ¿para que le dijiste que te dolían las tetas?
-Está bien, pues no se me ocurren más ideas, nena.
-Sigamos viendo la peli, de veras que estoy… casi bien.
-Si vos decís…
Pasaron unos minutos, quizá una media hora y continuaste viendo la película, que estaba llegando a su punto más álgido de tensión, aunque eso poco te importaba.
Otra oleada de dolor inevitable te inundó nuevamente, y, aunque trataste de disimular, esta vez había sido un pinchazo aún más fuerte que el anterior. Sentiste como si alguien hubiera logrado meter la mano en tu vientre y estuviera estrujando tu útero con el puño como quien escurre una esponja. Además, podías jurar que notabas tus pechos como dos globos a punto de estallar, y, a la vez como si la superficie de estos se encontrase cubierto de hematomas, como si realmente te hubieran dado una paliza.
Enzo, sin apartar demasiado la mirada de la pantalla – al menos que tú hubieras visto- pasó uno de sus brazos por tus hombros, acercándose más a ti, para después empezar a acariciar tu panza con una mano y tu hombro derecho con la otra. Tras un par de caricias de tanteo, su diestra comenzó su arriesgado viaje hacia tu pecho. No podías creerlo, te habías congelado y no querías hacer ningún movimiento, por leve que fuera, que pudiera ser malinterpretado, no querías parecer ofendida y que parase. Lo que más deseabas que sucediera estaba ocurriendo. Un deseo nublado por las hormonas revolucionadas que parecían salir de tus poros y por el dolor, sí, puede ser, pero en ese momento no se te ocurría ninguna buena razón para pedirle que parase.
Sin mayores miramientos, su manó abarcó tu pecho con cuidado, su pulgar y su índice rozaban tu pezón con delicadeza, mientras que el resto de sus dedos masajeaban el resto de tu seno.
-Enzo… -comenzaste por lo bajo
-Shh…- te mandó callar como si la película fuera lo más importante de ese momento.
De alguna forma que no supiste explicar, el calor de tu entrepierna estaba sustituyendo más pronto que tarde al dolor que hasta hace unos minutos estabas sintiendo, lo cual te avergonzó, ¿no era que te dolía tanto?
Continuó ejerciendo la presión necesaria para que tu sufrimiento se suavizara. Estabas usando todas tus fuerzas para no gemir de placer, el volumen de la televisión no sería la suficiente para tapar el sonido que luchaba por salir de tu garganta.
La película termina.
Enzo se aparta de ti suavemente para volver a alcanzar el control remoto y parar la reproducción automática de Netflix.
-Y, ¿qué querés hacer ahora? – preguntó como si nada.
-La puta madre, Enzo, ¿¿cómo que qué quiero hacer ahora?? – estabas entre divertida e indignada
-Sí, ¿querés ver otra peli? Nos queda pendiente Midsommar, eh.
-Enzo, ¿vos me estás jodiendo? ¿Hace dos segundos me estabas tocando una teta y ahora me decís que quiero hacer? – intentabas que no te temblase la voz.
-Y, sólo quería ayudarte, vi que te estaba doliendo.
Eso te desarmó parcialmente, ¿qué podías responder a eso? Guardaste silencio.
-Nena, yo no quiero que estés mal, y si te puedo ayudar, ¿qué tiene?
-…
-Yo sé que hay ciertas cosas que pueden ayudar a las mujeres cuando se sienten así – dijo mirándote a la cara, clavando sus ojos negros en los tuyos. Ahora, por fin, podías notas un ligero tinte en sus mejillas, al menos un atisbo de igualdad de condiciones.
-¿Ciertas cosas? -Sí, bo, seguro que tus ex noviecitos te intentaban hacer sentir mejor, ¿no?
Ouch. Eso había escocido. No, ni mucho menos tus anteriores parejas habían movido nunca un dedo por hacerte sentir mejor acerca de eso (ni acerca de nada en general). ¿Y por qué ese tonito burlesco y eso de decir “ex noviecitos”?
Enzo pudo adivinar por tu expresión que no había sido así, pero decidió no hurgar más en la herida.
-¿Querés que te haga sentir mejor?
Notabas tus mejillas y todo tu cuerpo arder, notabas tu pulsación tan fuerte que creíste que se podía advertir a simple vista en tu piel, que todo tu calor y excitación era visible, pero no se lo querías dejar ver.
-¿Y qué pasa con nuestra amistad? Se arruinará todo y yo no quie-
Enzo te calló posando su dedo índice estirado en tus labios.
-A mí no me vas a perder nunca.
Suficiente. Eso fue suficiente para romperte y que se formaran lágrimas en tus ojos. Bastante sensible estabas ya como para que se le ocurriese ser así de lindo. A Enzo siempre le había gustado molestarte. En honor a la verdad, tú también le molestabas a él, pero siempre habías sabido que te quería a su manera, después de todo, eran muchos años los que habías compartido juntos.
Él se dio cuenta de que tus ojos estaban vidriosos y se acercó para abrazarte en la cama.
-Hey, no… no llores
En ese momento te liberaste de su abrazo para besarle. No en la boca, aún no tenías el coraje, si no en su perfecta mandíbula, entre otras cosas, para hacerle saber que aceptabas su oferta.
Él entendió el mensaje y acarició tu cara, limpiando tus lágrimas con delicadeza.
-Te voy a hacer sentir bien, chiquita.
Entonces, te dio un beso en la frente y separándose levemente puso sus manos en tus hombros y te presionó hacia atrás, para indicarte que te recostaras.
Tú obedeciste y miraste al techo que estaba iluminado por tus luces azules de ambiente, era vuestro cielo particular.  
Díganme si tienen ganas de que suceda!!
Parte 2
67 notes · View notes
sudaca-swag · 2 months
Text
todo el concepto de que haya restaurantes como hooters me parece tan de pajero y subnormal, por qué no pueden tener una relación sana con el sexo y la atracción en occidente?
16 notes · View notes
dansfull · 8 days
Text
estoy en una etapa de introspección, reflexion, siento que los días pasan y no logro salir del mismo bucle en el que caigo siempre. la culpa, sentirme una fracasada, no poder aceptar que las cosas terminaron. no entender y buscar respuestas donde no las hay. caigo en la victimizacion, en sobrepensaar, caigo en las profundidades de la autoflagelación. y me siento culpable, por no haber aguantado más. y juro que me leo escribiendo esto y pienso "¡qué enferma!". realmente mi unica culpa es sentirme muy sensible siempre, sentir que las cosas me importan mucho, no saber canalizar mis emociones de manera sana. me siento culpable porque si yo no fuera tan sensible, si yo cambiara de personalidad, esto no habria pasado. y es tan horrible sentirme asi, tan poco a gusto conmigo misma.
esta semana de eclipses, dicen que se va todo lo que no necesitamos más. el proceso de purificacion y liberacion durará hasta enero de 2025. el encontrar un nuevo camino, una nueva forma de vivir... anhelo perderme completamente en sensaciones placenteras, formas una nueva personalidad, nuevos gustos, nuevas pasiones. ser más fuerte emocionalmente, no dejar que me manipulen, no dejar que nadie invada el espacio sagrado que tengo que ser yo para mí misma.
quiero empezar a entender el amor no como algo que se merece, sino como algo que es y que se vive y que te encuentra. algo que te llega porque sos amor, y porque experimentarlo es una bendicion. y la verdad quiero pensar que nunca te amé, porque no puede ser que el amor sea esto. tiene que haber algo más que esta mediocridad y este dolor que siento. realmente si el amor es así no me interesa volver a vivirlo.
y me invaden las dudas: ¿realmente me quisiste o te gustaba simplemente cómo yo te trataba? ¿me mentiste todo este tiempo? ¿priorizaste a ella porque la amabas mas que a mí? ¿cual es la manera de evaluar la relacion, a través de lo que vos sentis unicamente? ¿existió algo más alla de vos? ¿estarás pensando en mí ahora? ¿me extrañas o me odias? ¿sentís que yo fui lo mejor que te pasó?
hay una escena muy recurrente que viene a mi mente en la que estas pensandome siempre. te pones a estudiar y te colgas pensando en mi, me buscas en instagram, querés verme todas las fotos, me buscas en twitter, queres verme todo lo que publico. y yo no subo nada y no podés enterarte de nada. y te dormis, y te pones a ver algo en netflix pero te acordas de mi entonces no podes ver nada. y vas andando en bici por toda capital con ganas de cruzarme. y cuando salís con otra chica la comparas continuamente conmigo. "uf, ella me habría dicho esto" o "ella me hubiera dado siempre la mitad mas grande" o "ella me hubiera...". y entras en un bucle de desesperacion, tristeza, pensas que nunca vas a encontrar a nadie mejor, que te equivocaste realmente al alejarte y que ya no podés volver porque me lastimaste muchísimo con lo que hiciste sistematicamente durante meses. y sos consciente de que no tiene sentido volver, por orgullo y por realidad. porque la realidad es que no tiene arreglo lo nuestro y nunca vamos a volver a estar juntos y solo queda aceptar ese vacío de no ser correspondido en el tiempo con la mayor dignidad que se pueda (si es que se puede aceptar esto sin humillarse y arrancarse el alma en el intento)
y yo, en mi realidad, me dejo llevar por los delirios. prometí no escribir nunca mas y acá estoy. prometí desaparecer de todos lados y estoy en más lugares de los que debería. y en cada cosa que hago pienso en vos. y toda mi motivacion viene por pulsión al imaginarte en mi mente. todo el tiempo se me vienen recuerdos con vos, caminando, paseando. te hiciste muy presente en mi vida, una presencia avasallante pero distante, una presencia volatil e invasiva. una presencia completamente fria pero que quema. y ahora hay un hueco en cada espacio de mi mente. en cada cosa que hago, falta algo más. es como si no pudiera completarme con el día a día. me duermo esperando al día siguiente despertarme y reconocerme. pero no me reconozco. no me gusta esta version mía que quedó desde que te fuiste. y tampoco me gustaba la versión que yo era cuando vos estabas. me olvidé quien soy. y no puedo acordarme de nadie que no seas vos. son imagenes que vienen y quedan detenidas por varias horas o minutos en mi mente. y me sube la angustia como olas de mar. y siento que la solucion es dejar de sentir. porque aceptar todo esto es un parto
14 notes · View notes
nubis84 · 3 months
Text
¿Por qué el pájaro canta a pesar de estar enjaulado?
Porque es ignorante de su situación.
O igual sí es consciente, pero canta para afrontar la situación con una sana locura.
13 notes · View notes
heautontimorumenxs · 19 days
Text
Septiembre amarillo
Como no planeo todavía hacer un post en mis redes donde me siga gente conocida, prefiero hacerlo acá. En parte porque justamente no me siguen amigos ni familiares, y en parte también porque es acá donde pasé las peores noches, los peores días, donde mi adolescencia se hundía y todas las etiquetas que seguía me hacían entender que había más personas sufriendo lo mismo.
La depresión me fue diagnosticada a los 19 después de un intento de suicidio, pero siguiendo el hilo de las conductas por las cuales me diagnosticaron, pude remontarme a los 11 años. Si el alta me la dieron a los 21, quiere decir que fue una década completa bajo la depresión. En el medio pasé un par de cosas que, antes de que pasaran, pensé que no iba a poder sobrevivirlas. Y acá estoy.
Serían incontables las veces que me hice daño, de hecho en el fondo de este blog se esconden posts que escribí en algunas de mis peores noches. Jamás le vi la salida a nada. Fueron años enteros, una adolescencia completa y parte de otras etapas completamente arruinadas por la depresión, las ganas de lastimarme y de no estar más acá.
Pero pude. Hoy no digo que no sufra, que no pelee. Sigo teniendo que ser consciente de acciones que me dañan o que potencialmente lo podrían hacer y tratar de cambiarlas. Pasé por cinco psicólogas y una psiquiatra, no me internaron porque mi familia no lo quiso y directamente me atendí de forma ambulatoria. Incluso en plena etapa de atención con la psiquiatra seguía pasándola mal, pero de fiesta. Mezclaba alcohol con ansiolíticos que le robaba a mi abuela y tenía actitudes bastante riesgosas que hoy en día miro y digo "menos mal que zafé de que me pase algo en todas".
Hoy sé que no puedo quedarme todo el día en cama, que el pijama tengo que cambiármelo y ponerme ropa aunque sea de entrecasa, que no puedo dormirme a las 5 y despertarme a las 16 hs; que tengo que generarme una rutina sana en la cual no me deje ganar por las ganas de no hacer nada. Porque cuando no hago nada es cuando me ataca toda esa oscuridad. Hoy en día cada herramienta que me dieron mis psicólogas ya fue puesta a prueba, y uso las que a mí mejor me sirven.
Es raro cuando después de mucho me dan crisis algo más fuertes de lo normal, pero con el tiempo estoy aprendiendo a sobrellevarlas. Y trato de no frustrarme, porque la frustración es quizá uno de los peores enemigos en el camino de mejorar la salud mental. Un tropezón no es caída, es un aprendizaje, y bien que aprendí estos años.
No es un texto para generar notas ni nada, es un texto para que el que lo quiera leer sepa que hay salida. Es larga, cuesta, hay días peores y hay días mejores. Y estar atento a las señales de qué acciones o momentos te hacen sentir peor. Lo importante es intentar, buscar lo que a uno más le sirva para salir. Alejarse de gente que no suma, hacer algo bonito, algo que distraiga. Y hablar. Hablar ayuda. No cura pero ayuda muchísimo.
8 notes · View notes