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un-invierno-eterno · 1 month

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Martes 26 de febrero del 2024 (1:27 am)

Leo:

Ha pasado un año, lamentablemente te sigo recordando porque quizás soy un poco estúpida.

No te pondré en anonimato porque creo que eres la primera persona que me gustó mucho y de verdad le importa una verga mi existencia a pesar de haberme conocido y pasar un momento íntimo.

Yo... Esto es difícil admitirlo porque es estúpido y hasta me da rabia, pero me había enamorado de ti como una tonta. Había pasado mucho tiempo desde que alguien no me atraía desde ese punto de obsesión. 7 años desde que un hombre no me hacía temblar de esa manera las piernas y mi estabilidad emocional dependía tanto de alguien. Yo en serio sentí mucho, más de lo normal.

Y yo dentro de lo enamorada que estuve sabía lo imbécil que eras, pero dentro de mi tontería seguía pensando que eras el mejor.

Hace un año hablamos a través de una APP y fue gracias a mi, porque yo te hablé y me respondiste súper tarde, me comenzaste hablar y me caiste bien al tiro porque hablamos de té, no me sexualizaste, me hiciste reír, me hacías sentir bien y yo volvía a creer en el amor. Agregando de que físicamente te encontraba muy guapo, porque luces como los chicos que tanto me gustan. Y yo creía que por fin era el momento, fue una de las conversaciones más entretenidas de mis madrugadas de insomnio. Fue tan divertido y natural, yo creía que por fin dios me había escuchado. Sentía que estabas tan perfecto para mí que yo era el problema y en parte si lo fuí.

Hablamos durante 3 días seguidos así de intenso y me encantaba, me reía mucho, el apetito se estaba yendo, me sentía bonita, me sentía muy insegura y temerosa de que alguien más te conquistara, y trataba de estar full activa apenas me hablabas, aún recordando todo eso siento mi estómago vibrar. Si supieras como me hacías sentir.

Me invitabas a salir y me negaba porque eras un completo desconocido, sufrí de celos por algunas cosas que me dijiste y de verdad eran salidas con amigos sjsnsnsns.

Hasta que un día te digo que si, porque estaba demasiado caliente y quería besarte hasta más no dar, quería todo como si mi pecho fuese a reventar, mi útero no daba más, quería estar contigo de una manera fogosa y lujuriosa como nunca había estado en mi vida. Dije que nos juntaramos en tu depto, porque esa era una de las cosas que más me llamo la atención y es que eras un chico independiente, todo lo que yo quería y necesitaba para estar lejos de mi familia haciendo las cosas que tanto quería hacer.

Teníamos planeado que me enseñarias a besar, a tocar, a conocer mis puntos débiles, lo que me gustará y lo que no. Y me parecía perfecto, porque me hacías sentir en las nubes con todo lo que me decías, me temblaba el alma por querer estar enredada en tus brazos y en tu cuerpo de una forma extasiada.

Yo quería que fueras tú y ni siquiera te conocía, pero me diste tanta confianza que era capaz de entregarte el alma y el corazón en bandeja. Bueno la virginidad literalmente te la di en bandeja, pero no sé puso porque las palabras no es lo mismo que ir a los hechos y no me senti tan cómoda como para sentir que fueras tú el que diera ese paso.

Ese día murió mi abuela, escape se casa y fuimos al cerro porque dijiste el jardín Japonés y me gustó la idea, el problema es que no tome desayuno y casi me morí, me pegue el show sin querer, no empatizaste mucho, me hiciste caminar demasiado para buscar un lugar barato el cual ni siquiera me pagaste un jugo. Ahí ví la primera red flag, pero me gustabas demasiado como para tomarla en cuenta.

Me dejaste de hablar por 4 días y casi me morí en casa. Me sentía horrible y las náuseas aumentaban, yo te quería sólo para mí. Pero no me escribas y decidí hacerlo yo, sólo diste excusas.

El fin de semana tuve que ver cómo quitaban los restos de mi abuelo y reducirlos para ponerlo con mi abuela. Tu saliste con otra chica y lo ví todo. Casi me morí y te hablé. Me calentaste como el sol de verano, fui el lunes a tu casa. Nos encontramos en el metro, con suerte me mirabas, como que te daba asco. Un tipo se puso agresivo, me viste cagada de miedo y no hiciste nada. Otra red flag y la dejé pasar.

Viajamos mucho, no me pescaste la nada misma, hablamos en el parque, estabas chato y me hablaste de tu vida, de tus exs y te escuché como una niña, me sentía horrible. Quería huir, pero ya estaba ahí 😭😭 y te juro que no te soportaba, pero moría por besarte y tenerte conmigo aunque sea un poquito. Recuerdo esto y me da una ansiedad horrible. Fuimos al depto, ni me abriste la puerta, yo la tuve que cerrar y otra red flag que deje pasar porque mierda yo te quería conmigo. Me preparaste comida y yo odio el zapallo italiano, lo comí por ti con esos fideos con salsa que estaba demasiado ricos. Me hablaste puras cosas tristes. Fuimos a tu pieza, nos acostamos y se suponía que íbamos a dormir, pero moría por besarte. No soportaba el hecho de tenerte tan cerca y no besarte cuando en la primera cita era lo único que quería hacer. Mierda!! Tengo tanta ansiedad recordando esto. Fuiste una mierda conmigo y yo te quería tanto no se porqué. Te pedi que me besaras, me tomas la cara y me besas con lengua pero yo no sabía besar así y me espanto. Tu me miras como impresionado, al saber que yo nunca había besado así a una persona. Me enseñas y parecía lavadora, hasta que entiendo, me empiezo a subir de tono y termino debajo de ti mientras me besas y chupas mis senos de una manera que me deja loca. Y se sube más de tono al punto de terminar en ropa interior, porque te quería dentro mío y a la vez no. No soportaba lo imbécil que eras, pero quería que fueras mío por lo menos una vez y quitarme las ganas como nunca pude hacerlo con ninguno de mis amores amores anteriores. Casi me quitas la virginidad ese día, te faltó tan poco si tan solo me hubieses besado más y hubieses sido empático con mi inocencia. Pero no lo fuiste, eras duro, eras frío, eras cero amoroso y no entendía tu lenguaje corporal, tu tampoco el mío y te molestabas porque no hablaba y no entendías que era mi primera vez haciendo algo así, fuera de casa y con un completo desconocido. Que literalmente estaba vulnerable ante ti, casi desnuda y con muchas ganas de que fueras tú. Pero no entendías, y yo tampoco. Cuando ya estabas acabando conmigo para que yo sediera fuiste más suave y ahí sentí ganas, pero era demasiado tarde y tenía que irme. Nos besamos, dormimos casi desnudos en tu cama y nos hicimos mimos. Ahí yo te juro que quería que me hicieras tuya, pero ya no, te tenia demasiado cabreado.

Me fui más feliz que la cresta en la micro, me temblaban las piernas, sentía que olía a sexo y sonreía como una idiota hasta llegar a mi casa. Sentía que la vida era bella, que todo tenía solución y por fin me sentía normal al tener casi sexo con un chico.

Los días pasaron y no me hablabas ni me preguntabas cómo estaba, tenía un chupón en mi espalda, me dolían las caderas y cierta zona de mi cuerpo en la cual casi entras. Me sentía sucia y abandonada, me sentía usada y como algo horrible. No me hablabas y lloraba por las noches lo que había hecho porque no te merecías nada de mi. Te hablé y ahí me comenzaste hablar. Después de varios memes enviados me preguntaste cómo estaba y te cuento lo del chupón, no me creías y decías que había sido otro cuando con el único que había estado eras tú.

Pasaron los días y me ignorabas, te hablé para ir de nuevo, me estaba llegando la regla y fue horrible esa segunda vez. Casi pasa de todo. Pero me viste tan incómoda que dijiste que no y yo quería que fueras tú. Fuiste un imbécil, me trataste de niña por ser tan inexperta. Te molestaba tanto que fuese así, que fuese tan inocente para mis cosas, te molestaba todo de mi, no se porqué decías si, osea yo insistía un poco, pero porqué. Me veías enamorada de ti e igual aceptabas. Casi te tengo como una marca en mi cuerpo, el condón me molestó tanto, no habian sentimientos y no lograba lubricar.

Contigo descubrí que sin sentimientos no podía, yo los sentía pero por parte tuya no veía nada y eso me hacía sentir pésimo y cero merecedor de mi.

Yo te quería mucho, yo lo quería todo. Mentí, casi mate a mi perrito de angustia, gaste dinero y me bancaba 2 horas viajando para ir a verte porque así es el amor y la calentura. Te hace hacer cosas extremas.

Ese último día, casi me compras un jugo y me negué porque no quería nada que viniera de ti. Debí haber aceptado, pero no te soportaba. Esa despedida en el metro, yo quería llevarte conmigo porque estaba enamorada y loca por ti. Tu me tenías a tus pies, sólo que si me hubieses querido un poquito me habías tenido. Te faltó tan poco, pero no fui suficiente. Decías que no querías nada serio y a la semana ya estabas pololeando, casi me morí.

Yo de verdad te quería conmigo, pero no se dió. Me busque otro pero no lleno tu vacío. Fue peor que tú.

Y te quería de vuelta pero te había perdido. Yo sabía que te habías hdopuesto a pololear y jurabas amor de una.

Yo lloraba a mares, porque no podía entender toda mi entrega por alguien como tú...

Lunes 18 de marzo del 2024 (1:11 am)

Me ha costado terminar de escribir está carta, la escribí miles de veces en mi cabeza de diferentes formas. Estoy incomoda escribiendola acostada en mi cama... Okay ya me acomodé.

Creo que ya se cumplió un año de la vez que te rogaba dónde quería ir a tu casa y me enseñarás esas cosas de las cuales nunca aprendí. Sabía a lo que iba y sabía que no me querías, mi cabeza estaba confusa y traté de apagar mis sentimientos, te lo juro. Si supieras como me mentalizaba, sigo recordando en como mi mente me gritaba que me fuera de tu lado en el momento que íbamos en el metro y eras un pesado de mierda conmigo. Sólo hablabas de ti y de tu vida, te hablaba un poco de mi y me hacías sentir fatal e incomoda. Si bien te decía que sólo era cosa de amigos, que te había hablado porque quería salir de mi casa y hacer cosas diferentes. Pero no me aguante, porque siempre te tuve ganas ajajaja ¡dios! Suena horrible pero era la verdad.

Me tuviste en tu cama de la forma más vulnerable y aún así no te compadeciste de mi. Si tú hubieses sido yo, habría sido el ser más tierno y empático. Y lo fuiste, pero a tu manera. Pero ahora no me da para empatizar porque lo llevo reflexionando un año y me molesta la actitud que tuviste. Si bien era difícil decir que no y por mi parte también porque yo quería pero había una parte muy fuerte de mi que decía que no me merecías ni un poco.

Pasaron los días y no me preguntaste cómo estaba, quería morirme porque me sentía un cuerpo sucio y usado. Me sentía estúpida por lo que había hecho. Y en como casi me entregué en bandeja de plata ante ti cuando ni siquiera te preocupaste si llegué bien o si lo estaba físicamente.

Te preocupaste a los 4 días después y lo recuerdo todo tan malditamente bien. Esa película se repite una y otra y otra vez en mi mente. En como trataba de dar lo mejor de mi, porque sabías que era mi primera vez en muchas cosas y tú compasión no fue suficiente.

Yo estaba loca por ti, te busqué hasta quitarme las ganas y no lo logré porque tú me dejaste de hablar. En ese momento creí que iba a morir, el dolor era indescriptible, pero fingí todo el tiempo en que estaba mejor sin tu presencia porque no quería que vieras en como me habías afectado. Quizas en las canciones que publicaba lo podías notar. Y es que me dolías como la mierda, era una espina clavada en mi pecho, en mi alma y en mi vulnerabilidad como persona.

Siempre recuerdo cuando envié un meme donde decía "Todos cogen" y tú me dijiste "menos tú" quería matarte por decirme eso. Cómo podías ser tan malo conmigo y en como yo pude permitir esa mierda.

Eres el peor ser humano que conocí y no me importa si me cocinaste o te preocupaste de que si estaba bien mientras lo hacíamos, o en como te importaba una mierda mis pelitos o mis rollitos, o en como te daba igual mis defectos en ese momento. En como me hiciste sentir bastante bien la primera vez en tu cama, te detesto con mi alma y mis huesos. Supongo que si te vuelvo a ver en persona te miraría con desprecio y miedo. Porque el dolor es tan grande que aún te busco, te encuentro en mis recuerdos, te busco cada vez que voy a los lugares en donde estuve contigo y trato de ir con otras personas para cambiar el recuerdo pero no puedo. No puedo porque estás como un maldito fantasma. Deberías ser tu el que estuviese así y no yo.

Te detesto tanto que ya pasó un año y no te olvido porque supongo que contigo a sido lo más real y humano que he vivido. Aún recuerdo tu olor y tu maldita piel abrazándome, aún recuerdo tu manos, aún recuerdo tu cabello, aún recuerdo tu palidez, tus besos acelerados y tu delgadez.

Te odio tanto que estoy obsesionada con lo poco que te conocí y en como quise ser diferente pero eso no te importó porque me admitiste en la cara que me odiabas.

Y eso jamás se olvida.

Yo quiero dejarte atrás, te lo juro que si, pero llegaste dónde nunca nadie antes lo había logrado.

Y he buscado a otro ser humano que me haga olvidar este mal rato que no me merecía pero que me busqué porque estaba loca por afecto.

Espero encontrar un chico que me haga olvidar hasta el más miserable gramo de ti en mi mente. Tal y como tú hiciste que olvidara al Benja de una vez por todas. Pero a la vez fuiste tan malditamente parecido a él que el luto lo viví por dos.

No sé que es de tu vida, a veces miro tus historias para saber de ti. Pero no hay información, así que me voy como una imbécil sin saber rastro de ti.

Pero, no soy mala persona y tampoco de las que vuelven cuando hay un daño horrible.

No te deseo mal, pero no mereces amor de pareja. Ni siquiera merecías haber estado o estar en pareja, eres miserable, ni siquiera superabas a tu ex, necesitas terapia, solo sabes hacer daño y arreglar las cosas con tu familia.

Ojalá termines tu carrera porque la otra que tenías ni siquiera tienes el título y te las das de profesional.

—Winter🌧️

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