La búsqueda de la verdad día a día, también evocado la busqueda de saber quienes somos y el reencontrarnos en el camino.
Porque no importa quienes hemos sido en el pasado, al final del día; aquella sonrisa de nuestra madre, la calidad de nuestros hermanos, el abrazo sincero de nuestros amigos, la calidez de quien te saluda en la calle sin ningún interés, la esperanza de quien confía en nosotros, somos todo lo que los demás dejan en nosotros
Nunca creí encontrar un amor tan bonito en la vida, que me sepa amar de una forma excepcional.
Al ver el mar, veo esa inmensidad y me pregunto, ¿Que tanta vida da?, así siento su amor, tan inmenso que me hace soñar, tan lleno de vida que me hace disfrutar aunque sólo este en mis pensamientos.
Quiero navegar por las olas del mar, quiero navegar para conocer otro lugar que nunca jamás haya visto, pero sobre todo, quiero navegar contigo, que me enseñes a volar o flotar en tu amor, que no tengas miedo porque aquí estoy, amándote.
En la inmensidad del amanecer, el sol asoma tímido en el horizonte, y yo me pierdo en la minucia de los pequeños detalles que lo hacen único.
Las nubes son como algodón de azúcar, el viento juega con las hojas de los árboles, y las aves cantan en coro una melodía que solo ellas conocen.
Los rayos de sol se deslizan entre las ramas de los árboles, creando sombras y luces que bailan al compás de la brisa mañanera.
Un arcoíris de colores se despliega en el cielo en un espectáculo de belleza, mientras la tierra empieza a despertar de su sueño nocturno.
En este instante único e irrepetible, me pierdo en la escritura minuciosa y detallada, que Julio Cortázar plasmó en su estilo vanguardista, y como él, trato de capturar cada detalle y matiz.
El mundo es un universo de sensaciones, una sinfonía de colores, sonidos y texturas, y yo, un simple espectador, un escriba, que intenta atrapar la esencia de cada momento.
Así, mi pluma vuela libre y creativa, creando imágenes surrealistas y simbólicas, para representar los sentimientos que surgen ante tanta belleza y perfección.
Y así, en este momento de contemplación, en el amanecer de un nuevo día, me dejo llevar por la emoción y el asombro, y me convierto en un poema vivo y vibrante.
Resguardada en el calor de las sábanas, acompañada de la melancolía del día. Detestando el ser que habita en mí cuerpo. ¿Cuándo terminé así? Odio la luz que se acerca por la ventana, me recuerda a lo tan desperdiciado que tengo mí día. Detesto lo largas que son las noches porque el insomnio me recorre a la par de la angustia, la vida es tan larga y aburrida. Hay dolor y más dolor.
Me levanto y miro al espejo, "mirá esas ojeras!" "Tu pelo está cada vez más descuidado" ¿Dónde quedaron las sonrisas?
El compromiso me aguarda, estudiar, trabajar, ordenar. Que irónico ordenando mí casa teniendo un desorden en la cabeza.... Eso de ahí ya no se cómo ordenar.
Otro día más, o un día menos, ya no sé ¿Qué le pasó al tiempo? Antes parecía no acabar más, y al mismo tiempo ser tan efimero, con ansias de seguir viviendo para jugar un día más, para reencontrarse con personas maravillosas, la ansiedad de vivir me carcomia. Que inocencia la infancia... ¿Donde quedó aquella niña? Que reía y disfrutaba de jugar, que sentía y lloraba fuertemente cuando algo no estaba bien y lo intentaba cambiar.... Ahora solo lloro ante la injusticia pero nada puedo hacer... Ya no juego, solo hago por hacer, ya no vivo ni siento como lo solía hacer. Atrapada en el recuerdo, con un presente vacío y un futuro monótono, con ansias de conseguir un alquiler. Ja! Cuando antes solo pensaba en cuando me llevarían al parque para jugar y sentir el pasto en mis pies...
Ahora sí siento el pasto en mis pies me enojo, me molesta, ¡Otra tanda para lavar...!
Tantas ansias para convertirme en adulto de niña y tan desolada se siente la vida siéndolo. De chica pensaba que todos me respetarian y me admirarian, y de grande a todos les importa tan poco quien soy, solo lo que pueda aportar. ¿Cómo terminé así?
Al fin y al cabo, con esta actitud le hago daño a ella, a la niña que fervientemente miraba las estrellas buscando viajar a ellas en sueños, con su imaginación, soñaba despegar en avión y conocer el espacio y su inmensidad. De grande se que esas cosas no serán posibles para mí ni para la realidad. Pero esa niña vive en mí, en el fondo sigue ahí, sigue anhelando las estrellas, sigue viajando por el planeta en sus sueños, se quedó dormida el día que crecí, porque necesitaba convertirme en adulto tan rápido que la perdí... Y la vida de adulto era tan aburrida cuando la descubrí, tal y como me la mostraban sí era aburrida, pero nunca tuvo porque serlo ...
"Ya no quiero ser adulto, porque la vida así es aburrida, quiero jugar, quiero explorar, quiero sentir, ya no quiero siemplemente guardarme lo que soy, lo que fui" súplica la niña en sus sueños, hoy tuvo una pesadilla donde se convirtió en mí... ¡Qué tristeza!
No somos entes separados, somos una, somos la misma, quién murió en ilusiones, quién vivió de realidades y quién sigue siendo aún. La existencia es compleja, pero no tiene porqué ser tan aburrida y monótona, al final del día a la única que le hago daño en mí presente es a a esa pequeña niña dormida. Ya no quiero lastimarla más, ya no quiero lastimarme más. Y sí, aún deseo vivir, ya no solo existir y actuar por inercia, me voy a levantar de la cama y voy a sentir a flor de piel ya no me voy a bancar las injusticias, ya no quiero esconderme atrás del sofá, elijo luchar por vivir, siendo esa niña que miraba las estrellas y no fallarnos otra vez. No creo viajar al espacio a contemplar las estrellas en toda su inmensidad cómo pensaba de niña... Pero le propongo algo mejor y espero que así logre despertar.... Porque me convertiré en una de ellas, en una estrella y así volver a ser mí prioridad una vez más.
Me gusta el universo, pero del modo en que puedo apreciarlo desde mi inferioridad, saber que es lo mas lejos y poder apreciar a sus estrellas desde abajo.