mungkin bagi manusia penakut sepertiku, rasa aman menjadi hal yang dicari. memasang banyak pagar hanya untuk bisa merasa tenang.
kemudian rasa takut tetap muncul dari balik pagar. takut kalau ada yang cukup hebat untuk melangkahi pagar. akhirnya meresah hingga nyaman perlahan mulai tertelan.
tetapi mungkin harus kuakui bahwa aku tidak memasang batas yang jelas untuk pagarku. aku terlalu sering melepas pagar kemudian memindahkan ke sisi lain. akhirnya lalai menutup sisi yang perlu ditutup.
Con una amiga fuimos a pagar algo y nos pusimos en la fila, cada cual tenía que pagar lo suyo, ella delante de mí, se dio vuelta, y me hizo la peor pregunta que me podía hacer en ese momento: “Si yo te dejo pasar primero ¿cual pasa a ser mi lugar? ¿quedo detrás tuyo o mi lugar en la fila se resetea y tengo que ubicarme al final, comenzar de cero?”. Odio esas preguntas estúpidas porque me dejan pensando durante los próximos 72 años, y ella lo sabía.
El problema es que no está legislado, así que uno improvisa en esos momentos, y confía en que el resto coincida con nuestra resolución, que exista consenso. Pero cualquiera podría saltar y decir “el lugar es transferible solo para quienes están detrás, por eso cuando alguien cede su lugar, TODXS ganamos un lugar y no solo la persona inmediata a sus espaldas. Mientras tanto, quien cede su lugar lo pierde, pierde el suyo y cualquier otro, se resetea, debe ir al final de la fila”.
Otra persona podría estar en completo desacuerdo y argumentar que “los lugares son intercambiables si ambas partes están de acuerdo, si se respeta el contrato verbal, esto se sabe desde Rousseau: usted pasa adelante y usted pasa detrás mientras el resto de nosotros (la masa, el rebaño) no se ve afectada en nada su vida ni sus costumbres. Pongamos por caso, usted está tercera y usted cuarto, yo quinto. Ustedes intercambian, la tercera ahora es cuarta y el cuarto ahora es tercero, mientras tanto yo sigo siendo quinto, nada ha cambiado para mi, no hay injusticia, el universo se regula solo, el reseteo es absurdo y solo busca castigar a la persona que cedió el lugar. Quienes piensan eso son envidiosos porque jamás darían su lugar a nadie y les molesta que alguien lo haga, que sea mejor que ellos, así que explotan de rabia y demandan que no señor, que ahora usted va detrás de todos, no puede ser no hay derecho. Esa gente es escoria”.
Pero nadie dijo nada, y nosotros no cambiamos nuestros lugares, por las dudas.