Tumgik
#pisaster
isopodgirldick · 1 year
Text
SEA STAR CATASTROPHE CALL THAT A NATURAL PISASTER
202 notes · View notes
colorsoutofearth · 8 months
Text
Tumblr media Tumblr media Tumblr media Tumblr media
Sea stars by David Hall
Top left: Ocellate sea star (Nectria ocellata)
Top right: Spiny sea star (Hippasteria spinosa)
Bottom left: Stimpson's sun star (Solaster stimpsoni)
Bottom right: Ochre sea stars (Pisaster ochraceous)
11 notes · View notes
fungusqueen · 4 months
Text
Tumblr media Tumblr media
Ochre Sea Star (Pisaster ochraceus) looking like he's chillin in a hot tub or something
106 notes · View notes
raveneuse · 2 years
Text
Tumblr media
A Pisaster ochraceus sea star exhibiting symptoms of sea star wasting syndrome.
28 notes · View notes
Text
Tumblr media Tumblr media
Ochre Sea Star (Pisaster ochraceus)
taken at Laguna Beach, California
status: not evaluated
A lone sea star in a shallow tide pool just deep enough to submerge most of the sea star's body! This one had a good couple hours til tide would cover these rocks again.
13 notes · View notes
orangelovesyou · 4 months
Text
WHAT DO YALL KNOW ABT MUSIC^!^×&×*×*+(+
0 notes
nayerimz · 1 year
Text
⟟ zona industrial.
Tumblr media
' me pisaste ' practicamente le ladra a persona, posiblemente vástago, en la oscuridad. es culpa suya: no está bien posicionada en la banca, trae los pies estirados y está de brazos cruzados. sabe que no se ve, pero eso no le va a impedir buscarse una pelea ' prácticamente me dejaste sin pie ¿por qué no te fijas por donde vas, hm? '
101 notes · View notes
Text
La misma historia aburrida de leerme.
Ahora que el silencio se adueñó de nuestra voz, resuenan en mi mente como ecos inconscientes las cosas que vociferaste para aquietar el ruido que traías detrás. Dijiste tantas cosas para mantener sellados mis labios, un beso era el botón de pánico cuando todo se volvía extraño. Supiste elegir bien cada palabra, colocarlas de manera precisa sobre toda sospecha, cuando te enredabas en tu propio acertijo, cuando te perdías en tu propio laberinto, el mismo que mutaba si me acercaba mucho a la salida. Calculaste todas tus caricias, mediste todos mis complejos, lanzaste en el momento exacto granadas compuestas de adulación y ternura, promesas que estallaban masacrando silencios incómodos, y en el lenguaje de las pantomimas quisiste suprimir cualquier duda que viniera a desafiarte, pero la mentira no acepta descuido alguno, cualquier mínimo detalle desarmaría el castillo de naipes que sobre arena movediza construiste. Caíste en tu propia trampa, lo que bien plantaste como cebo se te volvió el piso minado que pisaste por andar tejiendo tu red de pretextos y evasivas, te cogió del cuello el lazo que tensaste para mi intuición si esta me empujaba a abrir los ojos cuando la luz se asomaba por alguna grieta, te olvidaste de lo obvio y la puerta del pasado se te quedó entre abierta, había una fisura en el cofre donde ocultabas el ayer. Lo que bien sumerges con todas tus fuerzas, con las mismas busca como emerger. Memoria Selectiva.
25 notes · View notes
noncompliantcyborg · 1 year
Text
Tumblr media Tumblr media
The summer before this last one, I took a larval biology course where I spawned and raised animals from a ton of different phyla, including these little brachiolaria that grow into ochre stars.
To commemorate the course, I designed the appliqué and embroidery patch on the right. I feel like there are so many wild and wonderful organisms and life history stages that don't get a lot of attention. I really enjoy making things that give me an excuse to talk about them and that might get more people interested.
Let me know if you want to hear more about my experience raising these little sea stars! Also, if you like the patch you can find it here:
https://shop.noncompliantcyborg.com/product/sea-star-larvae-pisaster-ochraceus-brachiolaria
21 notes · View notes
televisionenjoyer · 8 months
Text
La forma en la que argieblr postea sobre los porteños me da risa a veces. Decime que nunca pisaste una villa sin decirme que nunca pisaste una villa
10 notes · View notes
la-semillera · 1 year
Text
Tumblr media
HEDDA STERNE & PIEDAD BONNETT
Saqueo
Como un depredador entraste en casa,
rompiste los cristales,
a piedra destruiste los espejos,
pisaste el fuego que yo había encendido.
Y sin embargo, el fuego sigue ardiendo.
Un cristal me refleja dividida.
Por mi ventana rota aún te veo.
(Con tu cota y tu escudo me miras desde lejos).
Y yo, mujer de paz,
amo la guerra en ti, tu voz de espadas,
y conozco de heridas y de muerte,
                                       derrotas y saqueos.
En mi hogar devastado se hizo trizas el día,
pero en mi eterna noche aún arde el fuego.
- Piedad Bonnett, de Círculo y Ceniza.
9 notes · View notes
fungusqueen · 4 months
Text
Tumblr media Tumblr media
Closer to the edge of the sea break, we saw four starfish grouped together
49 notes · View notes
raveneuse · 1 year
Photo
Tumblr media
Giant Spined Star (Pisaster giganteus) on a sponge, Monterey, California, 2009. Photo: Ed Bierman
223 notes · View notes
Text
Tumblr media
Ochre Sea Star (Pisaster ochraceus)
taken in Laguna Beach, California
status: not evaluated
These Sea stars can occur in many colors from this more purple tone here to a bright orange. This one blended in so well with all its mussel and clam buddies that i nearly missed it entirely!
1 note · View note
Text
De citas y otros sucesos (Miles Edgeworth x fem!reader)
Fandom: Ace Attorney
Pairing: Miles Edgeworth x fem!reader
Word count: 4.2 K
Warnings: smut (super ligero, pero ¡menores DNI!), asesinatos, temas sensibles, enfermedades crónicas, fingering (f reciving), cualquier otra cosa lo agregaré después...
Notas: realmente no tiene mucho sentido, sólo se me ocurrió y realmente adoro a Miles. Espero lo disfruten, sé que no hay casi nada de Ace Attorney por aquí y mucho menos en español. No se olviden de apoyar con reblogueos y comentarios si les gusta.
P.D: no he olvidado mi fic de Obi-Wan, pero tenía esto por aquí, esperen proximamente una actualización de Blue&Grey.
Tumblr media
⋅•⋅⊰∙∘☽༓☾∘∙⊱⋅•⋅
Tu relación con Phoenix era de las más extrañas y adorables que muchos habían notado con el joven y brillante abogado. Claramente Maya no pensaba lo mismo, un ligero caso de celos le cegaba, pero intentaba actuar como si no le importara.
A pesar de los celos, ella podía distinguir que eras una buena persona, igual de entregada al trabajo que Phoenix y muy amable. Todas las mañanas traías café y pasteles para compartir con ambos antes de iniciar el día.
En el primer caso donde los acompañaste dentro de la sala de juicio. Maya notó algo que la hizo sentir como una idiota.
-Hey, Phoenix… ¿Quién es ese? – preguntaste en un susurro para que nadie más que ellos dos escucharan.
-¿Él? De todos los fiscales que pudiste poner tus ojos en, ¿te fijas en él?
-Siento que te molesta, ¿qué pasó allí? – preguntaste confundida
-Fingió su muerte y luego regreso – responde Maya en un susurro y todas las piezas lograron encajar como un rompecabezas.
-Oh, es tu amigo de la infancia, el que te defendió de una acusación en la escuela… ¿Cómo dijiste que se llamaba? – intentaste recordar mientras dabas varios golpecitos con tu dedo índice a tu mejilla derecha.
Maya lo entendió, no tenías ningún sentimiento romántico por Phoenix, eran mejores amigos y realmente le salvaste el pellejo más de una vez a estas alturas.
-Fiscal Edgeworth, ¿fiscalía se encuentra lista?
-Sí, su excelencia
-¿Defensa se encuentra lista, abogados?
Te mantuviste estática, todavía intentando recordar el nombre cuando Maya te dio un ligero codazo sacándote de la ensoñación.
-¿Qué sucede? – preguntaste sorprendida
-El juez
-¿Defensa, algún problema?
Entonces lo entendiste, Phoenix estaba aguantando la risa y le diste un pisotón por detrás provocando que se agachara a sujetar su pie con una mano y la otra cubría su boca aguantando el grito de dolor.
-Defensa se encuentra lista, su excelencia- respondiste con seriedad, pero tus mejillas anunciaron que te sentías avergonzada.
El fiscal tuvo que disimular una sonrisa ante tu acción, a lo que actuó con bajar la mirada hacia sus papeles y listas de pruebas.
•─────⋅☾ ☽⋅─────•
Miles estaba experimentando lo que llamaban “amor a primera vista”, cuando entraste por la puerta de defensa con varias carpetas bajo el brazo y en el otro tu bolsa, casi cae de espaldas.
El pantalón tipo palazo, la blusa de vestir blanca y los zapatos de punta triangular de color negro y tacón de aguja sumado a tu adorable rostro y cabello con los accesorios en tono dorado te hacían ver respetable y hermosa.
Cuando le susurraste algo a Phoenix y este respondió un poco molesto causando que te quedaras con una expresión que dejaba en claro que estabas pensando sobre algo, distrayéndote de la pregunta que hizo el juez que casi lo hace reír. Pero cuando con fluidez pisaste a Phoenix, Miles mordió su lengua para no reír y al ver tu expresión de vergüenza bajó su mirada a los papeles que tenía en frente para no perderse en lo tierna que te veías.
El juicio.
Oh, el juicio.
No dejaba de pensar en cómo te veías, completamente concentrada y en el momento en que lideraste la verificación de los hechos de los testigos fue increíble.
Miles sabía que perdería el juicio, desde el inicio, pero cuando dieron el veredicto no pudo importarle menos. Con solo el verte fue suficiente para él.
Al salir de la sala Phoenix estaba discutiendo contigo y no supo si no acercarse. Claramente, Maya decidió por él.
-Edgy, ven a saludar – exclamó y le saludo con la mano.
-Phoenix – saludó -, Maya… señorita.
Tu expresión fue algo similar a pánico, pero sonreíste antes de voltearte y extender la mano.
-Y/N Powell[EM1] 
-Miles Edgeworth – respondió con agrado y estrechó tu mano -. Bienvenida a la ciudad, no la he visto por aquí antes.
-Me mudé hace un par de meses, de hecho.
-Excelente trabajo allá dentro, supongo que todos tus amigos son igual de apasionados, Phoenix.
-Ella en especial – reconoció divertido a lo que rodaste los ojos.
-Pasó la prueba del bar un año antes de graduarse.
-En ese caso debe ser más inteligente que tú
-Muy gracioso, tú no pasaste ese examen tampoco.
-No cuando estudiaba, pero si poco después de graduarme.
-Te dije que lo intentaras de nuevo, Nick. No es tan difícil.
-Lo dice la que lo pasó siendo estudiante.
-Y siento que lo haría mejor ahora, estas desestimando lo que la experiencia aporta a tus conocimientos base. Deberías de hacerlo.
-Ugh, eres insufrible
Dejaste escapar una risa y negaste – Hace casi diez años que nos conocemos y sigues diciendo lo mismo.
-Es porque es cierto. Demasiado insufrible…
El teléfono de Miles sonó y todos lo miraron curiosos.
-Disculpen, me agradaría quedarme, pero tengo otro juicio en unos quince minutos. Fue un placer conocerle señorita Powell, espero verla nuevamente. Nos vemos Wright, Maya, con permiso.
•─────⋅☾ ☽⋅─────•
A pesar de no verse muy seguido se encontraron un par de veces en las salas de juicio. Las miradas cargadas de anhelo no pasaron desapercibidas por Phoenix ni Maya, pero tomaron el acuerdo mutuo de no decir nada, a ninguno de los dos.
Luego de un par de meses de admirar de lejos tuviste que visitar el edificio de la fiscalía. El caso era horrible y no encontrabas información que te diese una pista de lo que podría estar ocurriendo. Las pruebas, coartadas y todo se ajustaba al acusado, estabas segura de que él era el culpable pero la parte más importante era lo que faltaba, la prueba definitiva que lo dejara en evidente e indudable culpabilidad.
Por todo eso, te atreviste a solicitar permiso al juez para revisar los archivos que se encontraban almacenados en ese edificio. Tendrías severos problemas porque tendrías que vivir allí por días intentando leer todos los casos que pensaste se parecían un poco, o a lo mejor estuviesen relacionados y no lo habían notado.
Ahora mismo estabas intentando terminar de leer un caso a pesar de lo cansada que te sentías. Habías llevado muchas cosas en el bolso con el fin de poder vivir en la biblioteca un par de días, pero las gotas para los ojos no te estaban ayudando mucho y la cantidad de casos junto sus archivos anexos se habían multiplicado cuando habías pedido por ellos.
-¿Y/N Powell?
Levantaste la cabeza por encima de la torre de carpetas y encontraste a Miles confundido. El sonrojo que te recorrió fue digno de esas comparaciones con el color de los tomates. No tenías la mejor apariencia, en especial luego de haber estado leyendo sin parar por lo que tenías seguro ya eran horas.
-Fiscal Edgeworth, ¿qué hace por acá? – preguntaste nerviosa intentando soltar tu cabello y parecer alguien más respetable.
-Trabajo aquí, pero ¿qué hace con tantos reportes?
-El caso del asesino serial, estoy intentando encontrar algo entre todo esto que me sirva. Hay pruebas, pero no lo suficientemente fuertes. El abogado defensor me tiene acorralada.
-¿Está en ese caso?
-Los padres de varias víctimas decidieron contratar mis servicios para poner al asesino tras las rejas… Me estoy volviendo loca, el segundo juicio es dentro de quince días.
-¿Ha comido algo?
-Sí, un emparedado y un té.
-¿A qué hora? – preguntó interesado
-A las ocho de la mañana, posiblemente a las doce tome un descanso – respondes tranquila.
-Son las tres de la tarde… Venga conmigo, los documentos no van a salir corriendo por que se tome un descanso.
-Ah, pero…
-No acepto un no. Necesita comer algo, además, la habitación cuenta con llave y yo tengo una copia, todo su progreso no se perderá.
-Gracias, Edgeworth.
-Miles, por favor.
Sonreíste un poco – Está bien, Miles.
Te llevó a una cafetería preciosa, no te permitió decidir que pedir y mucho menos ver el precio de las comidas. Cuando la mesera se acercó tenía un par de emparedados salados que olían delicioso y varias tartaletas de frutas. En una taza transparente se encontraba un té artesanal que se estaba abriendo en forma de flor que olía igual de maravilloso que lo demás.
-Que disfruten la comida – dijo con voz dulce, aunque sospechabas que iba dirigida para el fiscal.
-Gracias.
-¿Estás intentando engordarme o algo? – preguntas, divertida sin dudar en sujetar un trozo del emparedado y morderlo.
Miles dejó escapar una sonrisa – No, pero me preocupa que descuide su salud por ese caso, por el momento no tengo ningún caso, quisiera ofrecerle mi ayuda.
Abriste mucho los ojos sorprendida, el famoso fiscal Miles Edgeworth estaba ofreciendo su valioso tiempo para algo que no lo beneficiaría en lo absoluto.
-¿De verdad lo harías?
-Con todo gusto, no sería ningún problema.
-Pero, no te beneficiaría en nada… No ganarías nada.
-No lo necesito, créeme…
-Te daré la mitad de los honorarios, no puedo permitir que no recibas nada si vas a ayudarme con ese caso.
-Insisto en hacerlo de buena fe, no necesito el dinero.
-No, de verdad no puedo… Tiene que haber algo.
Miles te analizó, si te veías cansada y todo, pero la tenacidad con que lo mirabas no le dejaba pensar muy claro. Eras increíblemente hermosa, incluso con evidentes ojeras.
-¿Qué harías por mí? – preguntó sin poder controlar la lengua y casi se pega al saber que lo que pensó lo había dicho.
-Uhm… lo que sea, mientras no sea matar a alguien.
Miles dejó escapar una risa genuina y negó – ¿Después de que termine el caso saldrías conmigo?
Estabas bebiendo un sorbo del té que sabía a caléndula, rosa y té verde, era de las cosas más deliciosas que habías probado en la ciudad, una lástima que terminara escapando de tus labios y casi terminara en tus pulmones ante las palabras que salieron de Miles.
-Perdona… creo que escuché mal – dijiste tosiendo un poco.
-Me temo que no… ¿Una cita a cambio de mi ayuda te parece bien?
-¿De verdad es eso lo que quiere?
-Efectivamente.
Bajaste la mirada y secaste un poco del té que había aterrizado en tu pantalón mientras pensabas. Una cita, sólo eso con tal de que te ayudara y de paso tuviesen horas para compartir juntos, una gran oportunidad de conocerlo más…
Serías una tonta si decías que no.
-Está bien, acepto.
Su expresión te pareció indescifrable, pero en el fondo, él estaba radiante de felicidad.
•─────⋅☾ ☽⋅─────•
Miles entendió la razón de todo el problema y cómo era que a pesar de todas las pruebas la persona estuviese a punto de salir de prisión preventiva y con un veredicto de no culpable.
Su ADN no correspondía al de la escena del crimen. Una de las últimas víctimas había logrado defenderse clavándole un abrecartas en el muslo. La lesión estaba en el acusado, según criminalística la herida podría haber sido causada por el abrecartas, pero la sangre del arma que usó como defensa la víctima no coincidía con el ADN con el del acusado.
El teléfono que habías dejado en la mesa mientras ambos revisaban un par de casos similares resonó y levantaste la mirada antes de responder.
-¿Sí? – preguntaste frotando un poco tu ojo para alejar el cansancio, hasta que quedaste estática al escuchar la voz al otro lado de la línea – ¿Hospital? ¿Por qué? ... ¿¡Qué!? Voy para allá.
-¿Qué sucede?
-Llevaron al acusado al hospital, Phoenix me llamó porque tiene un caso y estaba visitando al testigo en el hospital… Dice que está grave, aparentemente tiene una enfermedad sanguínea.
-Voy contigo, yo conduzco.
•─────⋅☾ ☽⋅─────•
Tanto el abogado del acusado como tú y Miles estaban esperando noticias.
El abogado del acusado había sido compañero de la universidad y mientras conversaban en voz baja intentando no revelar nada que el otro pudiese utilizar en el juicio. Él confesó que no tenía idea de que estuviese enfermo, los dos estaban igualmente sorprendidos en eso.
-¿Quién es el abogado del acusado? – pregunta el médico – Necesita una transfusión sanguínea de emergencia, si necesitaran tomar alguna muestra o algo para la investigación ahora es el momento.
Él se volteó a mirarte y mordiste tu labio, nerviosa. No tenías una orden y mucho menos sabías qué podría pasar.
-¿Qué es lo que padece? – preguntó Miles por ti al ver que parecía que no tenías idea de qué hacer.
-Leucemia, me temo que el trasplante de médula ósea no está funcionando o no estaríamos observando las señales de enfermedad nuevamente.
-¿Cree que pueda tener acceso a toda la información de tratamiento, doctor? – preguntaste al escuchar esa frase
-Eso sería una petición directa con la junta directiva del hospital, abogada, pero es posible que acepten a que tenga acceso.
-Gracias… Otra cosa, ¿tienen acceso a quien fue el donante de médula ósea?
-Sí, no es una donación anónima, por el procedimiento tiene que someterse a muchos estudios… También, si tiene una orden podría acceder a esta información, supongo.
-Gracias, doctor. Con permiso.
Miles te siguió con pasos lentos, no necesitaba correr para alcanzarte – ¿Qué pensaste?
-Una condición muy peculiar, si fue receptor de un trasplante de médula ósea es como si fuese una persona diferente sanguíneamente y el resto de él fuese otro. El termino es quimerismo y ya he visto un caso así.
-¿Dónde?
Sonreíste divertida – Mi segundo caso como novata.
Miles se quedó congelado permitiendo que tomases la delantera hacia el auto. Si los comparaba, tanto Phoenix como tú habían sido novatos prodigios para resolver casos con tanta complejidad. Si sabías términos médicos y no los olvidaste a pesar de los años, definitivamente eras un abogado notable.
Y uno que lo tenía casi de rodillas.
•─────⋅☾ ☽⋅─────•
En los últimos momentos del juicio el caso se había vuelto la sensación de la ciudad, los noticieros corrieron para solicitar entrevistas y declaraciones tanto de los detectives, criminalística, juez y los abogados. Lo inusual que era el caso, los registros médicos admitidos como pruebas, los resultados y la manera en que explicaste cómo había logrado como casi salir libre de la cárcel y al consultante médico que solicitaste como testigo fueron los que dieron el golpe final. Desafortunadamente, por la enfermedad que tenía y lo complicado que se encontraba de salud en esos momentos seguiría en el hospital bajo custodia activa, pero había sido un veredicto de culpable.
-Muchas gracias, señorita, sin usted se hubiese salido con la suya. Le agradezco mucho en nombre de mi hijo.
-No es nada, señora Peters, sólo estaba haciendo mi trabajo – admites un poco avergonzada, no te gustaba tener casos que resonaran tanto con la prensa y tampoco es que fueses un genio.
-Gracias, señorita, le agradezco mucho todo lo que hizo por traernos justicia – señala la madre, ya bastante mayor, de una de las víctimas. Una señora adorable que ahora quedaba sin su único hijo.
-Sólo hacía mi trabajo, les agradezco por haber confiado en mí – respondes y los reverenciaste, no podías evitarlo, les querías demostrar lo mucho que agradecías su confianza.
-Es hora de que se tome un descanso, su novio hizo un trabajo increíble apoyándola en el juicio. Vi como la miraba, estaba maravillado – intervino y sólo atinaste a sonrojarte, no la ibas a contradecir.
-No lo creo.
-Claro que sí, vaya a descansar y ese jovencito merece que le dediques un par de horas, luego de haber estado atrapada con este caso por semanas.
-Lo haré, le debo una cita, de todas formas – respondiste volteando de forma ligera el rostro para observar a Miles a lo lejos.
La señora te dio un par de palmaditas amigables en la mano – Nuevamente, muchas gracias por todo. Siga haciendo un trabajo excelente, los ciudadanos necesitamos abogados como usted. Ahora estoy segura de que mi pequeño podrá descansar en paz.
-También espero lo mismo, que tenga un buen viaje de regreso.
Cuando se retiraron giraste para observar a Miles y le sonreíste. Estabas cansada, sí, pero también extremadamente feliz.
-Miles.
-Estuviste increíble allá dentro.
-Gracias – respondiste y cerraste los ojos tardando un poco más de lo normal en abrirlos.
-Te vez cansada, mereces descansar un poco… ¿te llevo a tu casa?
-Puedo tomar un taxi, no quiero molestar más de lo que he hecho.
-No ha sido molestia alguna, me… me ha gustado pasar tiempo contigo – admitió y sonreíste.
-Si sigues diciendo cosas así, puede que me llegues a enamorar, Miles – admites sonrojada, pero restándole importancia, no querías hacerte ilusiones.
-¿Funcionaría?
Levantaste la mirada sorprendida, el corazón latiéndote desbocado en el pecho y la saliva se había tornado demasiado espesa de un momento al otro – Uhmm… ¿quieres que funcione?
Él levantó una mano hasta tu rostro y acarició tu mejilla con su pulgar, sentiste como tu piel se encendía por donde había tocado provocando que dejaras escapar un suspiro.
La sala de espera había quedado vacía, sólo quedaban dos guardias en la salida, Miles y tú. Pasaste la punta de tu lengua sobre tus labios. Sus ojos brillaron con un sentimiento que no fuiste capaz de identificar y él deslizó su dedo pulgar sobre tu labio inferior.
-No tienes idea…
Cerraste los ojos al mismo tiempo que intentabas tragarte un gemido que quería escapar, deseabas que te besara allí mismo, no había nadie y los guardias de seguro estaban demasiado aburridos como para notarlo.
-Dios, bésame Miles – suplicaste en un susurro.
Pero no pudiste terminar de comunicar tu deseo, los labios del fiscal habían terminado por tragarse las palabras que no terminaron de salir.
La sensación fue abrumante, sus labios estaban tibios, suaves y se movían con una facilidad sobre los tuyos que provocaron que tus piernas perdieran la fuerza para mantener el peso de tu cuerpo estable. Te sujetaste a su traje con ambas manos vueltas puños, la mano que había descansado en tu mejilla se movió hasta tu cuello y la otra se posó sobre tus caderas.
Ambos se separaron más rápido de lo que hubiesen deseado, sólo porque fueron capaces de recordar que estaban en un lugar donde debían de guardar el decoro.
-Te llevo a tu casa – murmuró cerca de tus labios
-Gracias.
•─────⋅☾ ☽⋅─────•
No tenías por qué estar nerviosa, la cita era algo que ya tenías planeado y no era como si fuese la primera vez que pasarías tiempo a solas con Miles. Habían tenido que posponerla casi dos semanas después de que finalizara el juicio, la cantidad de casos que ambos recibieron fue abrumante y no querían ser interrumpidos por el deber en media cita. Una que estabas segura ambos deseaban.
Un par de días después, cuando la carga de trabajo de ambos se estaba aligerando, recibiste un mensaje donde venía una fecha, una hora y un nombre.
Buscaste el nombre, claro, se trataba de un restaurante de los más lujosos de la ciudad y casi caes de espalda a la nota del pie de página “Código de vestimenta: elegante”. Tuviste que correr a buscar vestido, zapatos y joyería.
Por eso, ahora mismo estabas terminando de colocarte un poco de polvos compactos para terminar el maquillaje, rociaste un poco de perfume en tu pecho, detrás de tus orejas y en las muñecas. Tomaste los aretes que eran esmeraldas, luego el brazalete de plata y, por último, el collar. Tomaste los zapatos de color plateado, al tenerlos seguros en tus pies levantaste la mirada y admiraste el trabajo que habías hecho. Maquillaje ligero y discreto, cabello ligeramente ondulado que colocaste en un semirrecogido que definía más tu rostro, el bolso sólo contenía tus tarjetas de crédito y tu teléfono.
Lista.
Bueno, lo más lista que podías estar.
Miles había insistido en recogerte así que sólo esperabas que el timbre te notificara de su llegada. El abrigo negro largo te esperaba a la salida y deseabas no tener que usarlo o arruinaría todo el conjunto.
El timbre sonó y saliste sonriente. Miles te dejó boquiabierta, estaba demasiado guapo.
-Estás… estás – intentó decir y no lograste disimular la sonrisa.
-¿Me veo muy mal?
-No, no… Estás hermosa.
-Gracias, también estás guapo – admitiste y él extendió su mano a lo que asentiste antes de aceptar.
El viaje hacia el restaurante fue silencioso, pero nada incómodo. Al bajar del auto le entregó las llaves al jovencito encargado del servicio de estacionamiento y se dirigió a abrir la puerta, donde aceptaste su ayuda y entraron con seguridad.
La cena transcurrió sin percances, el vino estaba delicioso y tal vez tomaste un poco más de lo que debías. Para tu suerte él estaba atento y se adelantó a pedir que trajeran más agua, se encargó de asegurarse que bebieses más del líquido claro y sin alcohol, además de pedir un postre bastante delicioso y dulce para ayudarte. Luego de haberse asegurado que estabas lo suficientemente lucida pidió la cuenta, pagó y salieron del restaurante.
-¿Te sientes bien?
-Sí, ya estoy mejor, descuida – extendiste tu mano que tomó con cuidado y besó el dorso sin apartar la mirada del camino. Regresó tu mano a tu regazo y continuó conduciendo.
-Miles…
-¿Sí? – preguntó sin dejar de mirar la carretera, tu mano se colocó sobre su muslo y pudiste escuchar como su respiración se entrecortó – Y/N…
-¿Sucede algo? – preguntas sin dejar de acariciar su pierna, pudiste sentir como sus músculos se tensaban y mordiste tu labio esperando por una reacción
Habías escuchado susurros, cosas. No es como si durante el tiempo que compartieron juntos revisando documentos en la fiscalía las caricias distraídas y bastante camufladas no hubiesen ocurrido y sería una estupidez por tu parte decir que más de una vez no estuvieron cerca de hacer algo en su oficina varias veces.
En especial la última semana, sabías que estabas jugando con fuego, pero no le tenías miedo a su reacción, de hecho, estabas esperando por que sucediera.
Observaste la fuerza con que estaba sujetando el volante y no controlaste la risita cargada de diversión que escapó de tus labios. Miles abrió mucho los ojos antes de frenar bruscamente provocando que buscaras sujetarte del tablero del auto con la mano que antes tenías sobre su pierna y la otra en el borde de tu asiento.
-Miles, ¿qué pasa?
Viró en U con seguridad y tomó un desvío
-Vamos a mi casa – admitió y como única respuesta pasaste saliva al mismo tiempo que tu corazón se aceleraba.
•─────⋅☾ ☽⋅─────•
La forma en que te besaba te estaba volviendo loca, te había confesado que se tomaría su tiempo y estaba cumpliendo tan bien la palabra que te estaba llevando al borde de que casi podrías rogar.
Casi.
Sentiste su lengua rodear tu pezón a lo que arqueaste la espalda al mismo tiempo que dejabas escapar un gemido, no sabías el momento en que había sacado del camino el vestido, el cual ahora mismo se apuñaba a nivel de tus caderas y no podía caer más porque estaba ajustado al inicio de las caderas.
-Miles, por favor – pediste entre un gemido y él se atrevió a sonreír contra tu esternón antes de levantar la mirada. Un par de mechones cayeron de su usual peinado rozando ligeramente tu frente.
Volvió a acariciar tu labio inferior y no evitaste sacar la lengua para lamerlo sacándole un gruñido.
-Eres bastante impaciente – comentó y sin alejar su dedo de tu boca, ni apartar su mirada de tu rostro, su otra mano comenzó a subir por tu pierna hasta encontrarse cerca de donde más lo necesitabas –, sólo deseo venerarte como mereces.
-Oh – fue lo único que lograste decir al sentir como su dedo tocaba justo el lugar que necesitabas, a lo que terminaste por responder cerrando los ojos.
-¿Se siente bien? – preguntó curioso, intentaste asentir, pero sólo lograste morder tu labio inferior al intentar callar un gemido, al no recibir respuesta aplicó un poco más de presión y curvó un dedo en tu interior sacándote un gemido más fuerte – Necesito que me digas si se siente bien.
-¡Sí!, por dios, Miles… uhm…
-No dejes de decir mi nombre, quiero escucharlo.
Su mano no dejaba de hacerte sentir maravillas, los sonidos que escapaban de tu garganta te hacían sonrojar pero poco a poco el placer continuaba incrementando hasta que no te importaba si estabas gritando o no.
Sin darte cuenta, a pesar de tener los parpados cerrados lograste ver un fondo blanco. Al abrir los ojos un poco desubicada sentiste una caricia en el costado y al bajar el cabello de Miles resaltaba de donde se encontraba dejando besos. El vestido no estaba apuñado a nivel de tus caderas sino perdido por algún lugar de la habitación.
-Miles – llamaste y él levantó el rostro para verte, apartó un par de cabellos de tu rostro y besó tu frente antes de besarte los labios con reverencia.
-¿Quieres continuar? – pregunta y asentiste antes de rodearle las caderas con tus piernas.
Volvió a besarte tomándose su tiempo, la noche apenas comenzaba y no pensaba detenerse luego de unos minutos.
51 notes · View notes
koiantlers · 4 months
Note
If you'd like, the animal list! Hope you're having a great night!
Ohhhh its a long list cuz I love animals but here-
Also thank you I am having a good night :]
I have them in two categories of marine and land creatures, marine first-
*Atlantic Sea nettle Jellyfish that I plan to make to a subtle trans tattoo with pink blue and white colors
* Giant Octopus I am thinking of being on my hand
* Of course a koi fish with lilypads and water hyacinths
* Ribbon eel
* Hammerhead shark, my personal favorite shark.
* Whale shark
* betta fish
* moorish idol
* arowana
* nudibranch
* Alligator gar
* freshwater salmon
* peacock mantis shrimp
* leafy seadragon
* lungfish
* Cyerce Elegans (a pretty sea slug)
* butterfly tang
* common sea sponge and a pisaster brevispinus starfish as a reference to SpongeBob and Patrick lol
* seahorse
* Hermit crab
* Starry sturgeon
* neon tetra
* sea turtle
And for land ones-
* Frilled lizard, one if my favorite reptiles
* flamingo
* red kangaroo
* orange tailed marsh dart
* king cobra
* Orchid mantis
* jaguar
* Luna moth
* seven spined crab spider
* Japanese macaque
* poison dart frog
* golden Lion tamarin
* Bearded vulture, one of my favorite birds
* okapi
* snow leopard
* peacock
* African wild dog
* hare
* melanistic leopard
* pangolin
* zebra
* giraffe
Also some extinct fellas-
* quagga
* golden toad
* passenger pigeon
* Javan tiger
* bluebuck, also called blue antelope
* Carolina parakeet
* xerxes blue butterfly
1 note · View note