#todo se transforma
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rienziera · 2 months ago
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Nada se pierde, todo se transforma
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tornbluefoamcouch · 1 year ago
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Artista: Jorge Drexler Álbum: Eco Ano: 2004 Faixas/Tempo: 11/41min Estilo: folk Pop Data de Execução: 15/04/2024 Nota: 7,0 Melhor Música: Todo se transforma
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moviestarmartini · 10 months ago
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💕 Send this to ten blogs you think are wonderful. 💕
-Con amor, niñita ♡
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(total lo único que hago en esta aplicación es asquearme, prenderme o llorar)
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meduz-z-za · 2 years ago
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I think the reason why Izzy's death isn't even making me sad or angry la because is just so out of place with the rest of the series, it feels like reading an ooc fanfic.
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mis5citasfavoritas · 1 year ago
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Mis #5 de "La historia interminable"
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svnmih · 2 years ago
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💀 + aurora, mercury, etta
fuck: mercury.
marry: aurora.
kiss: etta.
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ane-doodles · 18 days ago
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MYSTICDEATH TODO EL ROLLO COMPLETO
Nota: soy malísima para retener el lore original del juego, y más aún los pequeños fragmentos de info que los desarrolladores dan en redes sociales, así que todo esto son puros desvarios nocturnos y libertades artísticas escritas en horas libres de clase/trabajo reunidos en un sólo documento.
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(No tengo arte nuevo de ellos. lo siento)
Mystic Seller
MS pertenece a un grupo más alto en la jerarquía de los dioses. No viven en el mundo terrenal sino en el espacio vacío entre mundos, haciendo de una especie de supervisores y testigos de los acontecimientos ocurridos en dichos mundos con poca oportunidad para intervenir (en realidad el sólo hecho de interactuar con los seres de dichos mundos se le considera algo desagradable y deshonroso). MS tiene a su cargo el mundo donde se desarrollan los eventos del juego junto con otros varios más, pero desarrolla interés en particular por las guerras entre dioses, disfrutándolo como una especie de historia de entretenimiento.
En una ocasión, viendo cómo las guerras han destruido gran parte de las islas y el mundo, MS se toma el atrevimiento de visitar las recién formadas “Tierras de la Antigua Fe”, topándose así con Narinder, dios de la muerte de estas tierras.
Nota sobre Narinder: a diferencia de los obispos cuyos dominios son más específicos, y por ende limitados, el dominio de Narinder al ser más vasto y con un alcance de poder superior lo pone automáticamente en una posición más alta sobre el resto de los dioses.
Sabiendo que el rango de Narinder técnicamente lo distingue por encima del resto de dioses y criaturas de este mundo MS decide hacer una excepción e interactuar con él periódicamente. Primero cada par de años con visitas breves que funcionan más como informes de la situación entre los dioses, luego con cartas anuales dónde, además de los informes, también responde las preguntas del dios a manera de misterios y a su vez escucha de algunas vivencias banales personales que Narinder considera pueden ser de su interés, al menos por entretenimiento. Eventualmente las visitas se hacen más constantes, más largas, las conversaciones giran en torno a los misterios del universo pero también se adentran en temas cotidianos como la música, los pequeños problemas de los mortales y la apreciación por los breves momentos de la vida que el dios de la muerte atesoraba a modo de memorias escritas (para MS resulta cuanto menos curioso el cómo el dios de la muerte se ve interesado en preservar momentos banales de la vida de sus seguidores en vez de conservar eventos más relevantes de la historia de sus dioses).
Para MS Narinder se convierte en una especie de amigo prohibido, alguien con quien no debería interactuar pero que genera una inexplicable curiosidad de escuchar, de entender, de preguntar sobre su perspectiva en las situaciones más complejas pero a su vez de experimentar la simplicidad de las nimiedades de un mundo material que parece crear momentos preciosos basados en la apreciación personal y el paso del tiempo. Para Narinder, en cambio, MS representa un misterio al inicio, incluso un posible enemigo que poco a poco se transforma en un simple visitante que solo desea curiosear y escuchar el chisme de lo que sucede en sus tierras, finalmente le toma cierto aprecio cuando accede a responder a las preguntas de su naturaleza y su mundo, y a su vez experimenta ciertos “placeres simples” que el mundo de los dioses y mortales ofrece.
La relación crece hasta el punto en que los mensajes entre ambos son constantes y muchas veces rozan lo íntimo (en el sentido emocional). Las visitas de MS, aunque secretas ahora duran semanas e incluso se adentra en las cercanías del culto de la corona roja. Narinder igualmente mantiene la relación en secreto de los obispos, quienes sólo asumen que se encuentra a escondidas con alguna criatura para negociar asuntos del culto, y a su vez se esfuerza por servir como una especie de guía para MS en este mundo, enseñándole lugares, costumbres y experiencias propias de la vida mortal.
Nota de la relación: no estoy segura de cómo describiría la relación de ambos… Sé que no es meramente romántica, pero sé que traspasa la amistad y compañerismo por mucho. Hasta encontrar un nombre por los momentos lo describiremos como platónico. Se aceptan sugerencias.
Conflicto
Muchos siglos después se dan los sucesos previos al juego donde Narinder empieza a experimentar con la inmortalidad y resurrección para los seguidores de su culto. MS es consciente de esto y en realidad sabe perfectamente cómo llevarlo a cabo, pero se niega a darle a Narinder la respuesta, alegando que una intervención de este calibre sería gravemente penada y le quitaría la diversión al asunto.
A pesar de ello y viendo los constantes fracasos en los experimentos de Narinder MS (algo aburrido y fastidiado) decide darle un incentivo para terminar con ello y que su atención vuelva a centrarse en éste: ofrece darle a Narinder una pista importante dentro de su investigación escondida en un acertijo, si logra descubrir el método para la resurrección antes de la próxima luna de sangre participará en el mundano ritual de “matrimonio” que tanto insisten en celebrar los mortales.
Al inicio Narinder se queda sin palabras, pero termina accediendo más por la emoción del reto que por la recompensa en sí, pensando además que MS no entiende realmente el significado del ritual (Nota: si, lo entiende, pero me tomo la libertad narrativa de decir que prefiere guardarse esa info para sí porque no va a admitir que la idea de una conexión intangible entre dos seres basada únicamente en compromiso y atracción física/emocional le encanta).
Finalmente Narinder logra completar sus investigaciones obteniendo resultados favorables en su experimentación con respecto a la resurrección, mostrándolo a MS orgulloso.
Ambos fijan la fecha de la ceremonia para dentro de los próximos días, pues Narinder desea presentar sus resultados a los obispos y presentarles también a MS (al menos en su forma menos eldritch(?) después de la fecha de la boda. Aquí pasa lo sabido: los obispos consideran los descubrimientos de Narinder como algo peligroso que debe ser contenido y terminan matándolo para finalmente encerrarlo en el otro mundo, todo esto sucediendo mientras que MS se encuentra en su propia dimensión, atendiendo a los otros mundos que ha descuidado sin saber nada de lo que sucede entre los dioses; además recibe un sermón de parte de otros de su especie recordandole el cómo no debe interactuar y mucho menos fiarse de las criaturas que viven en los mundos que supervisan.
Finalmente la fecha para la ceremonia llega y MS espera por Narinder en el sitio designado. Las horas pasan, luego días y finalmente toda una semana…
Nota: para la especie de MS el paso del tiempo se percibe diferente según su estado de atención. Es decir, mientras más centrado esté en algo más lento percibe el paso del tiempo, mientras que cuando está distraído o desinteresado pueden pasar siglos en un parpadeo. Así mismo, mientras más tiempo pasen dentro de un mundo también pueden adquirir características propias de las criaturas del mismo, en este caso las emociones.
MS empieza a ser invadido por emociones mortales (fruto del aprendizaje y de su tiempo en este mundo) ¿tal vez Narinder se arrepintió?, ¿Tal vez después de que él logró su objetivo más grande decidió desecharle?, ¿Tal vez no desea participar en el ritual de compromiso?... un torbellino de ideas crece en su interior creando un resentimiento y frustración ante la incertidumbre sobre el paradero de Narinder, por lo cual decide abandonar este mundo.
Para desgracia de MS esas emociones de mortales han creado raíz dentro de él y esto se evidencia ante los otros supervisores quienes notan los cambios en su comportamiento, atribuyéndolo meramente a “demasiado tiempo visitando un mundo” lo cual será curado si se mantiene alejado. MS acepta a regañadientes hasta que por mera casualidad se entera del paradero de Narinder al pasar junto a la entrada a su mundo, escuchandolo de voces familiares (los obispos), enterándose también de su destino y la profecía que ha de cumplirse antes de que el dios sea capaz de retornar a su propio mundo.
MS entra en un breve lapso de desesperación (pues el umbral de la muerte es el único que su especie no puede atravesar) donde en su dolor por haber desconfiado de Narinder su afán de mirar al futuro y descubrir cuándo se cumplirá la profecía termina revelando accidentalmente su relación con el dios ante los otros supervisores, quienes en su horror deciden castigarle.
MS es despojado de su posición como supervisor y destituido de la posibilidad de comunicarse con otros mundos. Así mismo se le otorga un trabajo degradante: permanecerá en el mundo de los mortales, interactuando constantemente con criaturas como un informante de primera mano para los otros supervisores, y además funcionará como mensajero y mercader, teniendo a su disposición a dos discípulos quienes se comunicarán con los supervisores por él.
Nota del castigo: para los supervisores MS es reducido al mismo rango de Narinder o los obispos, sellando parte de sus poderes y además prohibiendole hablar con ellos, por lo cual le asignan a los dos discípulos quienes transmiten los mensajes entre MS y los supervisores. El trabajo como vendedor es meramente una burla.
La espera
Los mil años de aprisionamiento de Narinder transcurren con MS casi sin pronunciar palabra más allá de los informes periódicos y un par de conversaciones con los profetas (así le diremos a los pájaros ok?). El tiempo transcurre lento y tortuoso hasta que en una tarde cualquiera percibe la presencia de la corona roja de regreso a éste mundo.
Esperanzado de que sea Narinder se decepciona al enterarse de que éste apenas es el inicio del cumplimiento de la profecía, con la resurrección del cordero elegido como liberador, y a su vez el inicio de la matanza de los últimos dioses. MS toma vago interés en las elecciones del cordero, no teniendo la mínima intención de ayudarle, pero en más de una ocasión se pregunta si a través de este pequeño animal podría comunicarse de nuevo con Narinder…
Nota de la espera: MS durante este tiempo, a pesar de mantenerse al margen en cuanto a temas mundanos, ha seguido “infectandose” con emociones y sentimientos de mortales, conociendo lo que es el anhelo, la tristeza, la melancolía y la ira. Por su parte Narinder también extraña a MS, pero sin manera de comunicarse con el exterior más allá del cordero no tiene forma de saber de su paradero (plus, no hay forma de que le pregunte al cordero sobre algo/alguien como MS, aunque si hace menciones breves de un viejo amigo a quién espera ver pronto).
Finalmente algunos siglos pasan y Narinder es liberado, destronado, asesinado y traído al culto (sin ser adoctrinado). El cordero decide traerlo de regreso únicamente porque puede, pues no tiene un interés personal en él, aunque debido a la transición de lo divino a lo mortal, además de las heridas causadas por su última batalla Narinder sufre de severas complicaciones y lesiones permanentes.
Sabiendo que el cordero ha terminado su misión, MS se encuentra con éste con la intención de preguntar por Narinder, pero se sorprende al ver que es aún el cordero quién porta la corona (pero mantiene una fachada totalmente calmada). En una de las muchas negociaciones por objetos valiosos (basura ctm) que el cordero menciona el paradero de Narinder en el culto y el mal estado en el que se encuentra.
MS forma una idea en ese momento, otorgándole al cordero la misión de sacar a los obispos del purgatorio a manera de distracción con dos posibles desenlaces: Narinder se siente relativamente más cómodo con la presencia de ellos cerca en el culto o en cambio lo detesta lo suficiente para abandonarlo y en cambio regresar con él.
Periódicamente MS vigila el progreso del cordero, encaminándolo a dar pequeños avances en la construcción y manejo del culto a fin de mejorar la estancia de Narinder, pero también haciendo pequeñas insinuaciones de que Narinder no debería estar ahí. El cordero sin ser tan estúpido presiente el interés de Etéreo por el antiguo dios y decide hacer conversación casual con Narinder para obtener información. Gracias a esto se entera brevemente de la existencia de una relación previa entre ellos y trata de motivar a Narinder a reencontrarse con MS, pero él se niega dando razones como la posibilidad de que su interés por él ha desaparecido después de mil años, la disparidad entre ambos y especialmente las limitaciones de su actual cuerpo mortal que le impiden vivir tranquilamente y por ende también le hace imposible ofrecer algo de interés a MS como lo era antes.
Nota sobre Narinder: para Narinder la relación entre ambos se podría comparar con una especie de amor no correspondido. Por su parte había una atracción e interés genuino de Narinder hacia MS, mientras que por parte de MS y gracias a su naturaleza superior (que en ese momento le impedía procesar emociones) percibía que su interés se sostenía de las experiencias que Narinder podía proveerle. Justamente con el ritual de matrimonio MS tenía la intención de probar que su interés por él era más genuino, pero ahora con el aislamiento y el daño físico presente en su cuerpo él se considera menos que interesante o digno de siquiera acercarse de nuevo a alguien como MS.
El cordero entonces queda atrapado como una especie de recadero entre Narinder y MS, a su vez que trata de que ambos se reencuentren (para el cordero sería un peso menos si Narinder se fuera con MS pero entiende que las heridas físicas y emocionales de Narinder lo impiden, además de que MS no tiene idea de primeros auxilios en caso de ser necesario).
Eventualmente Etéreo se siente frustrado y en un momento de rebeldía a sus propias reglas (como en el inicio) decide adentrarse en el culto del cordero, tomando la forma en la que se suponía viviría con Narinder a escondidas de los supervisores. Al encontrarse con este queda paralizado sin saber realmente qué decir o hacer… y se termina regresando de nuevo al portal entre mundos junto a sus discípulos.
Después de ese breve vistazo Narinder se sorprende de verle, mucho más en aquella forma y en aquel lugar. Él termina dejando los terrenos del culto durante la noche, encontrándose con MS sentado al borde del purgatorio discutiendo consigo mismo (de la misma forma que los mortales hacen y él solía mofarse con Narinder). El antiguo dios se acerca en un reencuentro incómodo que pasa a alivio, pero termina transformándose en culpa al enterarse del castigo que MS ha tenido que soportar todos estos años, afianzando en su cabeza la idea de que lo que eran antes no puede regresar. Por el lado contrario para MS es un reencuentro feliz, pensando que será capaz de llevarse a Narinder consigo ahora que ha venido por su cuenta, pero se encuentra perplejo al notar las intenciones de Narinder de regresar al culto y el cómo este se niega ahora a participar en el ritual de compromiso (que MS propuso retomar).
A partir de ahora Narinder permanece en el culto, siendo constantemente visitado por la forma semi-mortal de MS “Etéreo” quién trata de hacerle entender que sí, sus sentimientos han cambiado en estos mil años, pero no de la forma que él piensa. MS por su parte se da cuenta de la terrible condición en la que Narinder se encuentra, decidiendo “rebajarse” a aprender sobre el mantenimiento del cuerpo de los mortales a fin de mejorar el estado físico de Narinder (inconscientemente la presencia de MS termina ayudando a mejorar su estado emocional). Y finalmente el cordero quien trata de juntar y echar a estos dos del culto previniendo que los cultistas enloquezcan con la presencia de un ser como Etéreo entre ellos.
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hsballerina · 8 months ago
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red card.
Louis sendo o craque do time, sempre em busca da vitória, porém dessa vez durante uma partida decisiva, as provocações de Harry, o árbitro, testam os limites de Louis, transformando o campo de futebol em um palco de tensão e rivalidade.
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— Não esqueça, Louis, nada de perder o foco essa semana — O técnico diz o alertando assim que Louis desce do ônibus do time com uma expressão fechada. Para completar o técnico dá tapinhas nas costas dele.
Ele era o meio-campista estrela de um dos maiores times de futebol do país, e a pressão para a sua performace em campo era imensa.
Os jogadores entram no hotel, já sabendo das regras rígidas impostas pelo técnico: sem distrações, nada festas, e definitivamente sem relações sexuais antes do grande jogo.
As conversas animadas e as zoações que costumavam preencher os corredores deram lugar a um silêncio pesado, quase reverente.
Essa regra se aplicava principalmente a Louis, dono de um apetite sexual gigantesco e um festeiro sem limites.
A concetração era 100% dentro do campo durante os treinos. E apenas isso.
Louis acena com a cabeça, concordando com o técnico. A determinação estava lá, mas ele sabe que o desafio iria além do jogo. O clima entre os jogadores é de concentração absoluta, todos em silêncio enquanto seguem para seus quartos. Eles sabem que esse jogo pode definir a taça, uma das conquistas mais importantes.
O estádio estava lotado, o estádio vibrava tomado por um mar de cores, as torcidas em uníssono entoando o hino e frases que reverberam por toda a arena oficial do time.
O clima era eletrizante.
O som era ensurdecedor, mas para Louis, tudo parece mais distante, quase abafado, como se o mundo ao redor estivesse em câmera lenta. Ele estava completamente focado no jogo, o coração batendo no ritmo acelerado da partida.
Louis domina o meio de campo com a confiança de quem já esteve ali centenas de vezes. Seus passes são precisos, sua visão de jogo, impecável. Ele lê o movimento dos companheiros de time e dos adversários como se estivesse vendo um jogo de xadrez, calculando cada jogada, cada espaço em branco no campo. A pressão é imensa, mas ele a transforma em combustível, guiando seu time em direção ao gol como um maestro conduzindo uma orquestra.
Então, no meio de uma jogada crucial, Louis avança com a bola, focado em abrir caminho para um ataque. Mas seu foco é interrompido por uma presença inesperada — Harry, parado à frente, quase em seu caminho. Louis desvia no último segundo, mas a distração é suficiente para que ele perca o controle momentaneamente abrindo o caminho para o outro time que pega o controle da bola. Harry apita, o som do apito cortando o ar como uma lâmina, e levanta o cartão amarelo.
— Sério? — A voz de Louis saindo carregada de frustração e incredulidade enquanto abria os braços, as palmas das mãos viradas para cima, um gesto claro de revolta.
Harry manteve o olhar firme, o cartão amarelo ainda erguido como uma ameaça silenciosa. Seus olhos fixos em Louis, frios e impassíveis, mas havia uma faísca ali, uma tensão quase palpável, que deixava Louis ainda mais irritado.
— Jogada perigosa, Louis. Cartão amarelo — Harry disse, a voz carregada de autoridade.
— Jogada perigosa? Eu tava passando a bola, e você tava no meu caminho! — Louis rebateu, sentindo a raiva subir como um calor sufocante em seu peito. — Isso é ridículo!
— Regras são regras. Se não concorda, deveria ter mais cuidado. — Harry respondeu, sem vacilar.
Louis sentiu a raiva e o sangue ferver em suas veias, cada batida do coração mais forte e intensa, alimentada pela raiva que borbulhava. Mas ele sabia que, por mais que quisesse explodir, não podia se dar ao luxo de perder a cabeça agora. O jogo era importante demais. Ele respirou fundo, tentando acalmar a intensidade da raiva que sentia e que crescia por dentro e parecia tomar cada célula de seu corpo. Ainda assim, ao se afastar, lançou a Harry um olhar que era de puro desafio, um aviso silencioso de que aquilo não estava acabado.
— Calma, relaxa, mano — Disse um dos colegas de equipe, se aproximando e dando um tapinha na nuca de Louis, bagunçando o cabelo dele como se quisesse trazê-lo de volta ao jogo.
Louis tenta redobrar sua concentração, ignorar a presença de Harry, focar apenas no futebol. Mas a presença do árbitro se torna uma distração impossível de ignorar. Cada vez que Louis olha para cima, lá estava Harry, observando ele com aquela expressão indecifrável. É como se ele estivesse em todo lugar, em cada canto do campo, tornando impossível para Louis se livrar da raiva e da atração que Harry liberava como feromônios de ômega querendo acasalar com um alfa.
Em uma jogada particularmente agressiva, Louis avança em direção ao gol. Ele passa por dois defensores com facilidade, mas no momento em que se prepara para chutar, um adversário o atinge de lado esquerdo, quase o derrubando.
— Porra. — Louis tropeça, mas se mantém esperando ouvir o apito de Harry. Porém, o som não vem. O jogo continua, e Louis é forçado a passar a bola para um companheiro de equipe antes que seja tarde demais.
Quando o jogo finalmente é interrompido para uma substituição, Louis usa o breve momento para se recompor. Ele respira fundo, tentando acalmar os nervos, mas sua mente continua a girar em torno da presença de Harry.
Com alguns minutos a mais o placar 2 a 0 pro time de Louis, o encerramento do primeiro tempo é anunciado. Louis aproveita para secar o suor que escorre por seu rosto. Ele puxa a camisa para cima, revelando a barra da sua cueca e depois ajeita o short branco que já começa a incomodar e modelava o volume do seu pau de forma obscena. Ele percebe o olhar de Harry sobre onde ele mexia atento a cada movimento. Louis sente a intensidade do olhar, e algo dentro dele se agita e faz seu pau contrair. Ele poderia ignorar, poderia simplesmente se focar no campo, mas em vez disso, ele olha de volta empurrando seu pau na bermuda.
Harry levanta os olhos, percebe que Louis estava olhando para ele o fazendo desviar no mesmo momento, as bochechas um tanto avermelhadas, desconcertado e um tanto quanto envergonhado, Harry dá passadas rápidas para sair do campo, e Louis observa como a bunda dele estava bem deliniada no short escuro que em Harry parecia curto demais. As coxas grossas estavam expostas e de acordo com o que Louis via em campo, os árbitros não deveriam ter short tão curtos como aquele era.
Louis ajeita e aperta o pau semi ereto dentro da bermuda e se recolhe nos vestiários do time.
Na volta do segundo tempo, o jogo retoma com a mesma ferocidade. Desta vez, Louis joga com ainda mais intensidade, como se quisesse provar algo — não apenas para seu time e sua torcida, mas para Harry. Ele corre mais rápido, marca mais forte, e seus passes são ainda mais precisos.
Então, acontece. No meio de uma jogada, o mesmo adversário de antes se aproxima de Louis, desta vez com uma entrada mais dura. Louis é derrubado com força, rolando no chão enquanto o adversário segue com a bola. A queda é feia, e Louis sente o impacto em cada parte do corpo, mas não está machucado. Ele espera que Harry apite, que reconheça a falta evidente. Mas o apito não vem.
Louis permanece no chão, o campo parece congelar ao seu redor. Ele olha para Harry, esperando que ele faça alguma coisa. Mas Harry simplesmente observa, Louis sente a raiva crescendo, uma chama que ameaça consumir por completo.
Finalmente, Louis não aguenta mais. Ele se levanta de um salto, arrancando grama do campo com os dedos em um gesto de frustração. Ele caminha em direção a Harry, seus passos rápidos e decididos, sem perceber a proximidade até que está cara a cara com ele. O suor escorre pelo rosto de Louis, se misturando à raiva que borbulha dentro dele.
— Você tá brincando com a porra da minha cara, ô caralho? — Louis quase grita, a voz rouca de indignação, a respiração descontrolada. — Isso foi falta! Como você pode deixar essa merda passar?
Harry manteve a compostura, as sobrancelhas levemente arqueadas, mas a expressão inabalável. — Disputa de bola, Louis. Sem falta.
— Sem falta? Tá de tiração comigo, porra? Eu fui pro chão, e você não viu nada? — Louis continuou, avançando ainda mais.
— O jogo continua, se não gosta, lamento, mas faz parte — Harry respondeu, a voz firme, sem ceder um centímetro. — Foca na bola, não em mim.
— Foca na bola? Você tá cego ou tá querendo me fuder, fuder com o meu time? — Louis rebateu, cada vez mais perto, agora quase colado em Harry.
Harry não recuou, mantendo o olhar fixo no de Louis. — Já avisei, Louis. Vai jogar ou quer que eu te tire do campo? Se continuar com isso, eu vou te dar um cartão vermelho, e aí vai passar o resto do jogo no banco. E a culpa vai ser inteiramente sua.
Louis estava a ponto de explodir. Sua raiva se manifestava no aperto dos punhos e na respiração pesada. Ele estava pronto para fazer algo que poderia acabar com o jogo para ele, mas antes que pudesse dizer ou fazer qualquer coisa, seus companheiros de time entraram no meio.
— Louis, para com isso! — Um dos colegas gritou, o agarrando pelo braço, o puxando tentando afastá-lo.
Outro jogador se posicionou entre Louis e Harry, empurrando Louis levemente pelo peito para afastá-lo. — Deixa isso pra lá, mano. Não vale a pena!
— Vai em frente então. Me expulsa.
Harry levantou o queixo, tentando parecer indiferente, mas Louis sabia que ele estava se segurando. Sabia exatamente onde pisar para provocar.
— Você é um merda.
Ele queria continuar, queria gritar, mas seus colegas estavam certos. Isso poderia arruinar o jogo, e ele não podia dar a Harry o poder de tirá-lo da partida. Relutante, ele deixou que seus companheiros o afastassem.
— Tá bom, tá bom... — Louis murmurou, jogando os braços para o alto em frustração. — Isso não vai acabar aqui.
Os minutos seguintes foram de pura tensão. Louis estava mais determinado do que nunca. Ele sabia que, no fundo, passando a bola com precisão, distribuindo jogadas, recuperando o controle do meio de campo.
Em um lance rápido, ele avançou driblando dois defensores e, no momento certo, chutou. A bola cruzou a área e estufou a rede com força.
O estádio explodiu em comemoração, e Louis, com um grito de vitória, ergueu os braços ao céu, sentindo a explosão de adrenalina. Os companheiros de time correram para abraçá-lo, e a torcida não parava de gritar.
3×2.
Com o apito final, o jogo estava decidido. Louis e seu time eram os campeões.
A taça foi entregue com orgulho, e, enquanto ele a ergueu junto com os colegas, sentiu um olhar em sua direção. Harry estava ao longe, observando a celebração.
Louis não precisou encarar por muito tempo. A taça em suas mãos já dizia tudo que ele precisava.
O campo fervia de energia, a torcida gritando sem parar enquanto Louis observava ao longe o placar final. Eles haviam vencido, mas o gosto da vitória estava misturado com a raiva que ainda pulsava em suas veias. Ele ainda conseguia sentir o olhar de Harry sobre ele, mesmo do outro lado do campo.
— Vamo, Louis! Levanta essa taça, porra! — Gritou um dos seus companheiros de time, batendo nas costas dele com um sorriso largo.
Louis, gritou com sorrisos, o estádio tremia de animação da vitória. O treinador também comemorava, os fotógrafos e repórter vinham para o campo a fim de entrevistar e gravar aquele momento. Louis continuou a erguer a taça junto com os outros jogadores.
(...)
O vestiário estava praticamente vazio, com o eco das comemorações ainda vindo de longe. Louis, que acabara de tomar uma rápida ducha, estava em frente ao espelho, enxugando o cabelo, quando ouviu a porta se abrir. Ele olhou pelo reflexo e viu Harry entrar com aquele andar confiante, o mesmo que ele usava no campo, mas com um brilho de desafio nos olhos.
— O que é que você tá fazendo aqui? — Louis perguntou, sem esconder o tom impaciente. Ele sabia que não tinha sido por acaso.
Harry deu de ombros, se aproximando lentamente. — Só vim te parabenizar pela vitória. Jogou bem, apesar de... uns deslizes. — Disse, com um sorriso sarcástico.
Louis soltou uma risada baixa, jogando a toalha no banco antes de se virar para encará-lo.
— Deslize? Eu chamo isso de testar os meus limites. — Ele avançou um passo, encurtando ainda mais a distância entre eles. O peito nu de Louis fez Harry engolir em seco.
Harry ergueu uma sobrancelha, mantendo o ar desafiador. — Testar os seus limites? Achei que estivesse mais focado em ganhar do que provar alguma coisa.
Louis riu de novo, mais próximo desta vez. Ele estava a poucos centímetros de Harry agora, e a tensão entre os dois era palpável, uma mistura de competitividade e algo mais que Louis não conseguia ignorar. — Quem disse que não posso fazer os dois?
Harry bufou, cruzando os braços. — Pelo que vi no campo, você só fez o que eu permiti.
— É mesmo? — Louis arqueou uma sobrancelha, o olhar desafiador cravado em Harry. Ele deu mais um passo, invadindo o espaço pessoal do outro, que agora parecia um pouco menos seguro de si. — E por que você não impediu, então? — Harry hesitou por um instante, mas logo voltou a se recompor.
— Regras são regras, e eu sei como usá-las. Só não queria te dar a desculpa perfeita para a sua derrota.
Louis deu uma risada curta, se aproximando ainda mais.
— Você fala como se estivesse no controle, Harry. — A voz dele ficou mais baixa, rouca, carregada de provocação e... desejo. — Mas acho que você já percebeu que não é tão bem assim.
Harry engoliu seco, sentindo o corpo reagir à proximidade de Louis, mas manteve o olhar firme.
— Acho que você está subestimando o quanto posso te derrubar quando eu quiser.
Louis não respondeu com palavras. Em vez disso, ele agarrou Harry pela cintura, o puxando bruscamente para perto.
O choque no rosto de Harry foi imediato, e sua postura desafiadora começou a desmoronar. Ele tentou resistir no início, mas quando sentiu o corpo firme de Louis contra o seu, a tensão se esvaiu como o ar de um balão.
— Tá vendo? — Louis sussurrou, os lábios quase roçando o pescoço de Harry, sua respiração quente contra a pele dele. — Não é você que manda aqui.
Harry tentou responder, mas as palavras ficaram presas na garganta. Ele mordeu o lábio com força, os braços ainda tensos ao lado do corpo, incerto sobre o que fazer, enquanto Louis apertava sua cintura com firmeza, como se quisesse deixar sua marca.
Harry sentiu as pernas fraquejarem, a raiva de antes agora substituída por um desejo incontrolável.
Louis ergueu o queixo de Harry com uma mão, o forçando a encarar seus olhos.
— Onde foi parar toda aquela confiança, hein? — Provocou, a voz baixa e rouca, carregada de superioridade. Harry abriu a boca, mas não conseguiu formular uma resposta.
Antes que Harry pudesse reagir, Louis avançou, seus lábios capturando os de Harry em um beijo faminto, cheio de posse. Seus dedos tatuados agarraram a mandíbula de Harry e apertou firme, as mãos de Harry foram imediatamente para o braço rígido de Louis. Ele gemeu entrecortado quando sentiu o aperto na sua mandíbula ficar mais duro. Louis dominava totalmente a sua boca era como se ele tivesse pegado o coração de Harry entre os dedos e o apertasse com toda a força que estava, na verdade, sendo desferida em sua mandíbula.
O coração de Harry estava acelerado e gelado, e ele podia sentir seu pau vazando em seu short. Ele teve o hábito do pensamento de apertar as suas coxas, como uma puta buscando conforto, porém Louis coloca a sua coxa contra as dele pressionando o pau duro de Harry contra ele.
Os braços de Harry antes rígidos, subiram até os ombros de Louis, o puxando para mais perto, rendido quando o jogador solta o seu maxilar, a dor ainda permanecia mostrando o domínio de Louis sobre ele.
O beijo era intenso, uma mistura de raiva e desejo que os consumia haviam horas. Louis ditava o ritmo, seus lábios e sua língua explorando cada canto da boca tão incrivelmente macia de Harry, que, por sua vez, se derretia em seus braços, sem mais resistência. Ele, que antes desafiava Louis no campo, agora parecia pequeno e submisso, completamente entregue à intensidade do momento.
Quando finalmente se separaram, ambos estavam ofegantes, as testas encostadas. Louis sorriu, satisfeito ao observar a expressão quase vulnerável de Harry.
Mas sua fome por ele ainda não havia terminado. Com desejo ardente, Louis o puxou para mais perto, uma mão enredando nos cabelos cacheados de Harry, enquanto a outra descia pela cintura até alcançar sua bunda. Ele apertou a carne macia e exposta sob o short, quase com ferocidade.
— Ah... — Harry gemeu quando Louis pegou um punhado de seus cachos, os puxando deixando seu pescoço completamente exposto.
— Quem está no controle agora? — Louis perguntou, a voz baixa e carregada de desejo.
O membro rígido de Louis pressionava contra a coxa de Harry, que se esfregava instintivamente, como se estivesse desesperado por mais.
Harry abriu os olhos lentamente, ainda tentando recuperar o fôlego. Tentou responder, mas as palavras não vieram. Apenas encarou Louis com as bochechas coradas e os lábios inchados pelo beijo intenso.
— Responde, porra — Louis deu a ordem subindo a mão que estava na bunda de Harry e descendo com um tapa ardido em sua bochecha direita. Harry virou o rosto para o lado, mordendo os lábios com força. Seus olhos lacrimejavam, mas não de dor, era puro tesão. — No campo, você sabe me desafiar bem, não é? E agora fica mudo! Cadê a porra da sua coragem, Harry? — Louis puxou seu rosto com força.
— Eu... Eu... — Harry tentou falar, mas Louis restringiu seus movimentos, tomando sua boca com mais intensidade do que antes em um beijo que arrancou todo o ar de seus pulmões.
Desesperado por contato, Harry friccionava sua coxa contra o membro duro de Louis, buscando qualquer tipo de alívio que não vinha. Suas unhas curtas cravavam no peito de Louis, arranhando e marcando, espalhando o vermelho vivo pelo peito e abdômen do jogador. Mas Louis mal sentia, o desejo que consumia seu corpo era tão intenso que qualquer outra sensação parecia insignificante.
Louis desceu mordidas violentas pelo pescoço de Harry lhe arrancando gritos. Ele rosnava enquanto cravava os dentes, quase a ponto de machucar de verdade. Lambeu e chupou com força, formando um colar de marcas ao redor do pescoço de Harry.
— Lou... — O apelido escapou de Harry de forma repentina, inesperada.
As mãos de Louis desceram novamente para a bunda de Harry, adentrando o short, a cueca, abrindo suas nádegas e apertando com força. Uma das mãos ousadas deslizou pelo meio, sentindo a entrada se contrair em torno de nada, como se ansiosa pelo que estava por vir.
De repente, Louis se afastou de Harry e ditou:
— Você tem cinco segundos para tirar toda a roupa e se ajoelhar para me chupar.
Harry precisou forçar seu cérebro a processar o comando, e, quando finalmente o fez, agiu imediatamente. Suas mãos trêmulas começaram a puxar a bermuda junto com a cueca, depois a camisa, jogando as roupas de qualquer jeito pelo chão, enquanto Louis, de costas, procurava algo em sua bolsa.
Quando Louis se virou novamente, encontrou Harry de joelhos, completamente nu e a poucos centímetros de si.
— Vá em frente! — Louis mandou. Harry ergueu seus olhos verdes para encontrar os de Louis, e então voltou sua atenção para o que tinha à frente, pronto para obedecer.
Harry aproxima o rosto deixando um beijo por cima da ereção gloriosa coberta pelo short limpo e branco do time. O pau fazia uma barraca no tecido e Harry arrasta e pressiona a bochecha de forma carinhosa contra o tecido.
Louis agarrou os cabelos de Harry, pressionando seu rosto mais firmemente contra si com mais veemência em seu pau coberto que babava a cada segundo a fim de mais contato.
Ele permanecia com uma ereção desde que avistou Harry correndo no campo e prestou atenção em como o short entrava em suas coxas o deixando mais curto, e durante o banho ele se recusou a bater uma pensando em Harry.
— Quem diria que você fosse uma putinha tão suja por paus, hum? — Louis murmurou.
Harry não respondeu. Em vez disso, com um gesto decidido, ele puxou o short de Louis para baixo, revelando a boxer branca, que já mostrava sinais de sua excitação. O tecido de Louis, aparecia metade de sua glande. A parte babada de pré-porra deixou a área um tanto quanto transparente. Ansioso, Harry abaixou a cueca e o pau duro de Louis saltou em sua bochecha vermelha arrancando de Harry um tremendo tremor de susto.
A ereção gorda, grossa e grande fez Harry salivar. As coxas grossas e definidas de Louis eram evidentemente devido aos exercícios e treinamentos constantes no campo pelo futebol. As coxas faziam destaques junto ao pau com a cabecinha rosada e babada.
Harry gemeu só de ter aquela visão, cravou os seus dedos nas coxas de Louis e passou a língua de maneira calma pegando o gosto de Louis em sua língua, o sabor forte sendo degustado a princípio.
— Caralho! — Louis murmura alto quando Harry chupa a cabeça do seu pau com veracidade enfiando na boca, passando a língua na fenda.
Harry amou como o pau de Louis a preencheu de maneira boa, o peso gostoso contra a sua língua fez Louis praguejar, as veias se contraindo contra os movimentos de Harry tentando o levar até a garganta em um vai e vez gostoso de mais.
Além da combinação de sucções, a língua habilidosa brincando com a sua fenda e o desespero de Harry tentando levar o pau latejante, dolorido até o final.
Porém, os grunidos de Louis tornavam a dormência em sua mandíbula algo que valia a pena.
— Porra. — Louis puxou Harry para cima, beijando ele de maneira mais agressivo do que antes enquanto a sua mão se dirigia para a sua bunda, o dedo molhado de lubrificante sendo encaixado de uma vez na entrada quente e apertada de Harry.
Harry tentou se afastar dos lábios de Louis, mas ele não deu espaço.
O cacheado era macio, e suave, mas o único pensamento de Louis era ser capaz de machucar aquele pequeno espaço até ele não conseguir andar sem lembrar da sensação de ter o pau de Louis enterrado em sua pequena entrada.
Harry desejava a mesma coisa: ser fodido, ser usado, que Louis descontasse toda a sua raiva em seu corpo.
Louis adiciona mais 2 de seus dedos, tesourando, abrindo espaço para si.
Abrindo espaço pro seu pau que latejava enquanto Harry o mantinha ele em suas mãos masturbando, acariciando, pressionando, apertando como um lembrete de como seria dentro dele.
Com delicadeza, Louis tirou seus dedos de dentro de Harry fazendo com que ele sentisse falta imediatamente. Ele afastou as mãos de Harry de seu pau e o virou de costas.
— Agora, Harry, vou te mostrar o que realmente acontece quando você fala demais. — Louis posiciona a cabeça do seu membro na entrada de Harry, que inclinou a cabeça em seu ombro, o rosto intencionalmente na altura da orelha de Louis.
O jogador adentra aos poucos enquanto Harry geme longamente no pé do seu ouvido. O aperto de Harry era sufocante, abrasador.
Louis soltou um suspiro quando suas bolas tocaram a bunda de Harry. Ele deu um tempo, permitindo que Harry se ajustasse à sua presença, até que, em um momento de desespero, Louis mordeu a nuca de Harry, que começou a soltar pequenos gemidos. Então, Louis deu uma estocada firme, atingindo a próstata de Harry, que gritou surpreso. Louis agarrou o pescoço de Harry, puxando-o para trás e colando suas costas em seu peito, entrando em uma sequência rápida e intensa de estocadas.
Todas elas esmagavam e pressionavam intensamente a próstata de Harry, que mantinha a boca aberta, virada para Louis, que o beijava, chupava e invadia com a língua enquanto investia com força em sua bunda.
As unhas de Harry arranhavam o quadril de Louis de forma agressiva, e ele começava a se contrair. Nesse momento, Louis parou e cessou os movimentos.
Harry fez uma expressão de surpresa ao sentir e ver Louis comeca a sair de si, se afastar e caminhar até o banco largo de madeira no vestiário, onde se sentou.
— Vem até aqui! — Louis disse e Harry obedeceu. — Monta no meu colo. — Harry obedeceu e passou a perna se acomodando em seu colo, guiando a ereção dolorosa até sua entrada, a massageando com a glande macia e molhada antes de se afundar completamente nela. Levando o pau de Louis com esforço. Ele continuava a se contrair e gemer, esfregando sua bunda de forma obscena nas bolas de Louis. Se sentindo completamente preenchido novamente, Harry murmurou:
— Tão bom... Ah, Louis, tão gostoso.
Louis jogou a cabeça para trás, arfando. O aperto de Harry era tão intenso, tão bom que parecia drenar metade de suas forças.
Tomlinson observava com tesão explodindo em suas veias Harry saltar em seu pau com habilidade, como um profissional.
Louis agarrou as mãos de Harry atrás das suas costas, segurando com firmeza e erguendo o quadril de forma intensa.
Fode, fode, fode!
Harry gritava, mas não saia som, a boca permanecia aberta enquanto o corpo de Styles é solavancado para cima.
— Quem está te comendo, Harry? Quem vai te fazer gozar sem tocar, baby?
— Você... Ah, só você, Louis — Harry descia no membro de Louis com uma velocidade impressionante.
— Então rebola gostoso no meu pau, bebê, mostra o que só você sabe fazer. — As mãos de Louis firmemente abriam a bunda de Harry, ajudando a guiá-lo que não hesitou, ele começou a rebolar
lentamente, de maneira provocante, esmagando as bolas de Louis em cada movimento, arrancando gemidos altos de Louis, que mordia os lábios, tentando se controlar. Mas o controle era uma batalha perdida. O prazer era intenso, quase doloroso, enquanto Harry rebolava com tanta habilidade que Louis sentiu como se estivesse à beira de perder a cabeça.
Harry não parou. Ele sabia exatamente o que Louis queria.
Lentamente, começou a mover os quadris, rebolando em círculos, gemendo profundamente ao sentir o membro de Louis ainda mais fundo dentro de si.
— Ah... Tão bom, tão apertado... — Louis gemeu alto, seu corpo tremendo de prazer.
Ele levou uma das mãos ao cabelo de Harry e puxou com força, inclinando a cabeça dele para trás, expondo seu pescoço enquanto Harry continuava a gemer.
— Isso, rebola pra mim, devagar agora... — Louis ordenou, sua voz cheia de desejo.
Harry obedeceu, se movendo com mais lentidão, cada movimento meticulosamente calculado para prolongar o tesão, o atrito entre seus corpos criando uma fricção que os deixava à beira da loucura.
Os dois estavam tão próximos que era difícil dizer onde um começava e o outro terminava. O prazer era intenso no ar, uma mistura explosiva de tesão e necessidade, ambos completamente entregues ao momento.
Louis puxou Harry com mais força, seus
movimentos se tornando mais agressivos enquanto ele sentia o orgasmo se aproximar, e os dois corpos se chocavam em perfeita sincronia.
— Lou-i-is — Harry choraminga com o prazer absurdo que tomava conta de seu corpo.
Louis sentiu a onda de êxtase tomar conta dele, e com um último impulso, ele e Harry chegaram juntos. O pau de Louis tendo espasmos dentro de Harry, um fluxo intenso de porra jorrando dentro dele.
Estava tão fodidamente cheio e pesado que não tinha forças para se mover, paralisado em seu próprio prazer e Louis seguia se derramando dentro de si.
Harry mantinha a cabeça apoiada no ombro de Tomlinson, respirando com dificuldade e soltando gemidos a cada gota de semên que sentia dentro de si.
Ele veio no seu próprio abdômen sujando Louis e a si próprio com seu próprio prazer. O prazer era tão intenso que parecia consumir todo o ambiente ao seu redor, os deixando ofegantes e exaustos.
Louis apertava Harry mais perto de si, acariciando seus cabelos e suas costas. Ele ainda estava dentro do cacheado, e Harry, em clara ação de carinho depois do sexo, parecia carente de mais toques de Tomlinson. Harry ronronava em seu ombro, deixando beijos em sua pele suada. Louis, sentindo aquelas sensações, não conseguia manter seu coração distante daquele maldito e adorável árbitro.
Louis apertava Harry mais perto de si, acariciando seus cabelos e suas costas.
No próximo jogo, Harry foi no mesmo ônibus do time de Louis. As regras eram as mesmas, mas agora se aplicavam também a Harry, o que significava celibato. Louis o provocava, dizendo que, se ele fosse o campeão da rodada, iria retribuir tudo isso de maneira bem satisfatória.
Os dois não ficavam nem na dupla de assentos; o técnico sempre os separava, colocando Harry no fundo do ônibus. Porém, Louis se recusava a ficar tão distante e o arrastava de volta para seu lado. Sexo e beijos eram negados quando começavam a esquentar.
No hotel, a tensão era palpável. Louis e Harry se olhavam intensamente, ainda ofegantes dos beijos anteriores, as mãos de Louis apertando levemente a cintura do namorado enquanto seus corpos se afastavam, com muito esforço. Harry mordeu o lábio inferior, os olhos brilhando em uma mistura de provocação e desejo.
“Se controla, Tomlinson,” sussurrou Harry, a voz baixa, quase rouca, tentando parecer mais autoritário do que realmente estava. Louis riu, inclinando-se para roubar mais um beijo rápido, antes de se afastar novamente.
No dia do jogo, a tensão no campo era diferente. Louis corria com foco total, mas sempre que seus olhos encontravam Harry, que estava na linha lateral como árbitro, não conseguia evitar o sorriso malicioso. Ele sabia exatamente o que estava esperando ao final daquela partida.
No meio do segundo tempo, após uma jogada intensa, Louis marcou o gol que virou o placar. A torcida explodiu em comemoração, mas o que chamou mais atenção foi Louis correndo direto para a lateral do campo, onde Harry estava. Sem pensar duas vezes, Louis agarrou Harry pela cintura, o puxando para um beijo caloroso bem ali, na frente de todos.
Harry tentou se afastar, surpreso e corado, mas não conseguiu evitar sorrir contra os lábios de Louis. O estádio inteiro ficou em silêncio por um segundo, chocado pela ousadia do gesto, e depois explodiu em risadas e assobios.
Aproveitando o momento, Harry se afastou lentamente, os olhos brilhando de travessura enquanto deslizava a mão no bolso e, em meio ao sorriso, levantou o cartão vermelho para Louis.
— Expulso por comportamento inadequado — Ele murmurou com um sorriso provocante. Louis revirou os olhos, mas não conseguia conter a risada.
— Você vai pagar por isso mais tarde — Louis sussurrou, seus olhos carregados.
Harry arrepiou, caminhando de volta à sua posição, afetado, desconcertado tentando evitar de ficar com uma ereção.
O campo estava quase vazio, com o crepúsculo se aprofundando e uma leve brisa balançando os cabelos ainda um pouco úmidos de Louis, que esperava no centro do gramado. Ele sabia que, mais cedo ou mais tarde, Harry apareceria — e não precisou esperar muito.
Assim que o viu, Louis fixou o olhar em Harry, permanecendo firme, enquanto o observava se aproximar.
— Achou mesmo que eu ia esquecer aquele cartão vermelho? — Louis disse com a voz carregada de intenção, enquanto Harry avançava na sua direção, os olhos verdes se prendendo aos dele.
Harry soltou uma risada suave, divertida, mas parou a poucos passos, ainda hesitante.
— Expulsão por comportamento inadequado, lembra? Achei justo.
— E você acha que consegue se safar de uma provocação dessas? — Louis deu alguns passos na direção de Harry, que tentou manter o tom brincalhão, mas começou a sentir o coração acelerar.
— Eu... eu pensei que você fosse entender a dica — Harry murmurou quase em um sussurro, a voz vacilando levemente.
Louis inclinou a cabeça, um sorriso de leve desafio nos lábios, e antes que Harry pudesse reagir, as mãos firmes dele seguraram sua cintura, o puxando para mais perto. A respiração de Harry ficou suspensa, e ele soltou um leve gemido, as mãos se apoiando nos ombros de Louis enquanto tentava disfarçar o arrepio que percorreu seu corpo.
— Sabe, amor — Harry provocou com um brilho travesso nos olhos enquanto piscava para Louis. — Achei que você precisava de um pouco mais de disciplina.
Louis riu baixo, mantendo o olhar fixo em Harry, que se contorcia em um misto de expectativa e desafio.
— Talvez eu precise mesmo — Ele sussurrou aproximando Harry pela cintura com mais firmeza. — Mas você sabe o que acontece com quem provoca demais, não sabe?
Harry sentiu o coração acelerar com o toque de Louis, mas manteve o sorriso brincalhão, agora envolto em tensão. Ele deslizou os braços pelo pescoço de Louis, deixando os dedos se entrelaçarem nos fios macios de seu cabelo.
— E o que acontece? — Harry provocou com a sua voz quase tremendo de ansiedade.
Louis inclinou a cabeça, o analisando por um momento antes de murmurar com um sorriso desafiador.
— Eu posso ser expulso por comportamento inadequado, mas você... você pode ser punido por provocar.
Harry tentou conter o rubor e a aceleração de sua respiração, mas o peso das palavras de Louis o arrepiou dos pés à cabeça.
— Estou disposto a correr o risco.
— Você realmente me subestima, Harry.
Antes que ele pudesse responder, Louis se inclinou ainda mais, aproximando o rosto do dele, e o ar ao redor parecia carregado, denso demais de tanta tensão. A provocação havia dado lugar a algo mais profundo, algo que ambos sabiam que não poderiam conter por mais tempo.
— Isso é... uma ameaça? — Harry sussurrou.
— É um aviso. Vou garantir que você se lembre desse cartão vermelho por muito tempo.
E, com uma intensidade que fez o tempo parar, Louis avançou com desejo sobre os lábios de Harry, que sentiu o corpo inteiro ceder ao contato. As mãos de Harry apertaram os ombros de Louis, depois deslizaram lentamente pelas costas dele, explorando cada centímetro ao seu alcance, como se quisesse memorizar aquele momento.
Harry soltou um leve murmúrio entre o beijo, ansiando por mais contato, mais proximidade, até que o próprio corpo tremia de desejo e expectativa, os dedos entrelaçados nos cabelos de Louis, o puxando para ainda mais perto. O toque das mãos de Louis, seu olhar intenso, tudo parecia fazer o coração de Harry acelerar a um ritmo impossível de conter. Era como se o mundo inteiro desaparecesse, restando apenas o calor que compartilhavam.
— Louis... — Harry sussurou tentando encontrar a voz enquanto se afastava apenas o suficiente para respirar.
Louis deslizou uma das mãos pelas costas de Harry, os dedos explorando a curva da sua cintura até quase alcançar a linha da sua bunda o puxando para mais perto, com uma firmeza que fez Harry arfar e sentir arrepios intensos por todo o corpo. Em resposta, ele apertou ainda mais os braços ao redor do pescoço de Louis, como se recusasse a deixá-lo ir, com uma necessidade que parecia enraizada no fundo de seu peito.
Louis desceu os lábios pelo maxilar de Harry, mordiscando e deixando beijos molhados, que logo se transformaram em marcas escuras, visíveis. Ele sorriu satisfeito ao ver as manchas vermelhas surgirem na pele do namorado, como se cada uma delas fosse uma lembrança gravada. Harry, com uma expressão de falsa seriedade, parecia tentar manter o controle, embora suas mãos vagassem impacientes pelo corpo de Louis.
Os estalos no campo eram altos durante à brisa da noite enquanto eles exploravam o corpo um do outro, e, com uma urgência quase descontrolada, começaram a desfazer os botões, deslizarem zíperes e jogarem as roupas de lado, abandonando-as pelo gramado sem nenhuma cerimônia.
Logo, estavam deitados no centro do campo, Louis por cima de Harry, os corpos aquecidos pelo toque e o rosto iluminado apenas pela luz suave do céu noturno. Louis deixou seus lábios explorarem o peito de Harry, descendo pelo pescoço, clavícula e finalmente chegando aos ombros, sentindo cada suspiro e gemido baixo escaparem do namorado.
— Lou... — Harry gemeu com a voz rouca, arqueando levemente o corpo em direção ao namorado.
Os quadris de Harry se moviam, intensificando seu desejo por mais contato.
— Meu. Apenas meu. — Louis rosnou, mordendo com força o mamilo de Harry.
— Seu... Ah, Louis, só seu.
— Ah, sim? — Louis o encarou com aqueles olhos claros e intensos, que fizeram Harry apenas assentir em resposta. Num movimento rápido, Louis trocou as posições, deixando Harry deitado sobre ele enquanto suas costas se colavam ao gramado fresco. — Vira de quatro pra mim, amor.
Harry soltou um suspiro trêmulo, mas obedeceu, posicionando-se sobre ele, com a bunda praticamente exposta diante do rosto de Louis.
— Porra, você é lindo demais — Louis murmurou, passando as mãos pela pele de Harry antes de dar um tapa forte em um dos lados, arrancando um gemido alto dele e fazendo-o empinar ainda mais em sua direção. — Essa sua bunda é gostosa pra caralho.
A cena era absurda, com Harry empinando a bunda, buscando mais contato de Louis, revelando um lado que o deixava louco: o lado sedento e submisso dele.
As mãos de Louis exploravam a pele quente de Harry, os dedos tatuados apertando sua bunda com firmeza enquanto ele gemia baixinho, empinando ainda mais para sentir o toque de Louis. Quando Louis se inclinou e passou a língua pela pele de Harry, subindo desde o perínio até a entrada sensível, um gemido entrecortado escapou dos lábios de Harry.
— Lou... — A voz de Harry se quebrou em um choramingo rouco, enquanto ele deixava a cabeça cair sobre o volume evidente de Louis, que se destacava por baixo do tecido da bermuda. Harry rebolava, se pressionando ainda mais contra a boca dele tentando provocar.
Louis rosnou baixo, sentindo o hálito quente de Harry atingir seu membro já dolorido de desejo, a boca aberta de Harry o provocando intencionalmente.
— Porra. — Louis murmurou, acertando um tapa firme na bunda de Harry, que gemeu e se empinou ainda mais.
Louis observava Harry, a pele quente e exposta, o rosto afundado em seu colo, se entregando por completo sem qualquer resquício de vergonha. Harry o provocava de uma forma que parecia saber exatamente o que fazer para deixar Louis à beira da loucura. Cada gemido, cada rebolada, o corpo dele todo implorava silenciosamente para que Louis o tomasse.
As mãos de Louis se moviam lentas, os dedos desenhando trilhas imaginárias nas curvas da bunda de Harry, que estava completamente à mercê dele. Louis apertava a carne de sua bunda com uma mistura de desejo e possessividade, aproveitando cada segundo daquela entrega. Ele rosnou baixinho, sentindo o prazer se espalhar por seu corpo, cada toque em Harry só servia para intensificar o desejo que ele mal conseguia conter.
Harry beijava a sua ereção sofrida, apertada, vazada que latejada a cada contato superficial dos lábos dele.
E Louis afundou a língua aspera na entradinha de Harry que quase demoronou em cima de Louis que sorriu de forma sacana.
— Ah, você gosta disso, não é? — Louis murmurou, com a voz rouca, enquanto passava a língua devagar pela pele sensível de Harry. Ele subiu o músculo úmido deixando um rastro molhado, até a afundar na entrada rosada que o deixava insano. Louis penetrava a pontinha da língua, indo e voltando. — Gosta de estar assim, toda entregue pra mim Harry gemia, sua voz era quase um sussurro entrecortado pelo prazer que sentia. Ele se contorcia contra a boca de Louis, sem se importar com nada além do que estava acontecendo ali, naquele momento. Cada toque era uma tortura deliciosa, cada lambida de Louis parecia incendiar seu corpo inteiro, enquanto as suas mãos exploravam cada centímetro de Harry, deixando marcas que diziam claramente a quem ele pertencia.
— Lou... — A voz de Harry se desfazia em um gemido rouco enquanto ele se inclinava mais, os lábios roçando no volume evidente de Louis, ainda coberto pelo tecido da bermuda. Tão próximo, tão tentadoramente próximo, que Louis mal conseguia conter o desejo.
— Isso, assim… tão bom pra mim — Harry murmurava, mantendo a boca no membro de Louis, o provocando com a respiração quente.
Desesperado pelo prazer e pela necessidade de sentir Louis de verdade, Harry puxou a bermuda dele para baixo, libertando o pau e as bolas de Louis. Louis gemeu ao sentir os lábios de Harry deslizarem na sua entrada, enquanto a respiração dele se tornava mais pesada e urgente.
Harry arfava, o corpo inteiro entregue, cada toque de Louis despertando uma reação nele. Os dedos de Louis exploravam seu corpo com firmeza, e a sensação de ser tão desejado fazia Harry perder o controle, ao ponto de ele abocanhar a glande sensível de Louis, descendo até onde conseguia, gemendo, fazendo todo o comprimento de Louis vibrar de prazer.
— Isso, bebê — Louis sussurrou contra a pele de Harry, beijando e mordendo a bunda dele, provocando-o ainda mais. Louis já não sabia mais qual prazer o deixava mais insano, se era a entrada de Harry se contraindo ao toque da sua língua ou a boca dele o chupando, gemendo e o cobrindo com desejo. A barba de Louis roçava nas nádegas de Harry, intensificando cada sensação, deixando-o mais sensível.
Harry não se conteve e começou a rebolar, gostoso demais, na língua de Louis, que logo acertou um tapa firme em sua bunda, arrancando um gemido de Harry. A entrada dele se contraía sem parar, enquanto o próprio prazer escorria, manchando o peito de Louis.
Deslizando as unhas pelas coxas de Louis, Harry as arranhava até alcançar as bolas cheias e inchadas, ansiosas para se esvaziarem em sua boca.
— Porra, amor, você me chupa tão bem… — Louis murmurou, gemendo, enquanto enfiava dois dedos de uma vez na entrada de Harry, que, tomado pelo prazer, levou todo o comprimento de Louis na boca, emitindo gemidos abafados e enlouquecidos, fazendo Louis gemer junto, alto e descontrolado.
Quando Louis sentiu que estava chegando ao limite, ele afastou o pau da boca de Harry e mordeu a coxa dele, sussurrando:
— Você só vai gozar hoje no meu pau, bebê.
Louis adicionou mais um dedo, estocando firme, massageando a área sensível de Harry por dentro. E, enquanto o fazia, ergueu o quadril e deslizou seu pau novamente na boca de Harry, que o chupava com mais intensidade, como se quisesse sentir cada pedacinho de prazer.
Quando Louis já não conseguia mais se conter, ele trocou as posições, jogando Harry no gramado e se posicionando por cima dele, o olhar dominador e decidido. Eles estavam no centro do campo, as arquibancadas vazias, o estádio aberto, apenas os dois ali, entregues ao momento, sem ninguém para interromper.
O campo era deles, e naquele instante, nada mais importava além de um ao outro.
Louis pairava sobre Harry, os olhos azuis cintilando em um misto de desejo e possessividade. Harry estava deitado no gramado, a respiração entrecortada, as bochechas ruborizadas e os olhos semicerrados, completamente à mercê de Louis que deslizou as mãos firmes pelo corpo de Harry, sentindo a pele quente, arrepiada sob seus dedos. Ele pressionou o quadril contra o de Harry, o fazendo gemer baixinho e arquear o corpo em direção a ele, buscando mais contato. Com um sorriso satisfeito, Louis se inclinou e deslizou a boca pelo pescoço de Harry, beijando e mordiscando, deixando marcas pela pele.
— Você não sabe o que me faz sentir —Louis murmurou, a voz grave e rouca, enquanto sua mão descia pelas costas de Harry, parando na curva da cintura, onde ele apertou com firmeza. — Me deixa completamente louco.
Harry suspirou, os olhos fixos nos de Louis, que o encaravam intensamente, como se ele fosse a única coisa no mundo que importava. Ele mordeu o lábio, mal conseguindo conter o desejo que crescia dentro dele, cada toque de Louis acendendo chamas que o consumiam de dentro para fora.
— Então mostra, Lou — Harry sussurrou desafiador e ao mesmo tempo entregue, a voz suave, mas cheia de provocação.
Louis sorriu, aceitando o desafio. Ele puxou Harry para mais perto, o corpo dele se moldando ao seu de maneira perfeita. As mãos de Louis exploravam cada centímetro da pele de Harry, e ele o puxou com força, deslizando uma perna entre as suas, enquanto tomava a boca de Harry com um beijo faminto, suas línguas se entrelaçando, uma dança de necessidade e urgência.
Sem romper o contato visual, Louis começou a mover o quadril contra o de Harry, a fricção dos membros nus arrancando gemidos baixos dos dois. A cada movimento, a tensão entre eles só aumentava, o desejo crescendo até um ponto de ebulição.
Louis segurou as coxas de Harry, o puxando ainda mais para si, os dedos tatuados afundando na carne macia enquanto ele o observava, absorvendo cada reação, cada arfar, cada gemido que escapava dos lábios de Harry.
— Isso, bebê, quero você assim… todo meu — Louis sussurrou com aquele tom possessivo e sedutor, deslizando os lábios pelo pescoço de Harry, deixando um rastro de beijos quentes até seu ombro, onde mordeu suavemente, arrancando um gemido trêmulo de Harry, que se arqueou, implorando por mais.
Harry começou a mover os quadris devagar, rebolando de forma provocativa contra Louis, sentindo a excitação dele firme contra si. A cada movimento, novos gemidos escapavam dos lábios dos dois, como se criassem uma sinfonia de desejo em perfeita sintonia. Louis apertava sua cintura com força, os olhos intensos, acompanhando o ritmo cada vez mais intenso, a fricção levando-os mais perto do limite.
— Porra, Harry… — Louis murmurou, a voz rouca de desejo, sem mais conseguir conter a intensidade do momento.
Num impulso, Louis virou Harry de lado, o deitando no gramado fresco, e fofo e se posicionou por cima dele, segurando as pernas de Harry firmemente e capturando seus lábios em um beijo profundo e faminto. Cada toque era carregado de um desejo bruto, cada suspiro um lembrete da intensidade entre eles.
Com a respiração ofegante e os olhares fixos, Louis se alinhou contra a entrada de Harry, sentindo a pressão da glande roçando na pele quente dele. Harry ergueu a coxa, enlaçando a cintura de Louis, e arfou contra os lábios dele, os olhos conectados, um encarando o outro. Então, Louis empurrou o quadril com firmeza, penetrando Harry completamente, arrancando um gemido abafado que escapou contra os lábios de Louis. O contato era intenso, quase primitivo, como se cada toque entre eles marcasse o desejo que os consumia. Harry, completamente entregue, capturava o lábio de Louis entre os seus, chupando-o devagar, mordendo de leve, os dentes arranhando com provocação. Em um momento de ousadia, roçou até o nariz de Louis com seus próprios lábios, rindo entre suspiros.
Louis, perdido na intensidade de Harry, começou a se mover, os quadris encontrando um ritmo que deixava ambos à beira do delírio. Suas mãos seguravam com força as coxas de Harry o puxando para si a cada estocada, como se quisesse se fundir com ele. Cada investida trazia um suspiro, um gemido, e os dois se encaravam, olhos vidrados e respirações descompassadas, criando uma conexão que ia além do físico.
Harry enlaçava os braços ao redor do pescoço de Louis, o querendo ainda mais perto, enquanto os movimentos do jogador ganhavam intensidade. Ele rebolava devagar a cada investida, provocando Louis, que perdia o controle aos poucos, os lábios entreabertos em gemidos roucos que ecoavam no ar.
— Droga, Louis... mais... — Harry gemeu entre um beijo e outro, os olhos semiabertos, ofegantes, sentindo cada fibra do seu corpo se acender ao toque de Louis. Ele se apertava contra o corpo dele, o incentivando a não parar, enquanto a tensão entre eles atingia o limite, como se nada além daquele momento importasse.
Sentindo a entrega completa de Harry, Louis, com os músculos tensos e a respiração falha, intensificou o ritmo. Seus quadris se moviam com precisão e força, acertando a próstata de Harry, que deixou escapar um grito, ecoando pelo campo vazio, se perdendo no silêncio ao redor deles.
— Ah, Louis… — Harry arfou, e, em resposta ao prazer avassalador, suas unhas se cravaram nas costas de Louis, deixando marcas quentes na pele dele, o trazendo ainda mais perto, como se precisasse tê-lo ainda mais junto. O toque dos corpos, o calor que compartilhavam, só aumentava o desejo de Louis, que, sentindo as mãos de Harry em suas costas e os gemidos abafados no seu pescoço, perdia cada vez mais o controle. Seus olhos se fechavam de puro prazer, os lábios entreabertos enquanto tentava conter o próprio êxtase.
Louis acelerou o ritmo, guiado pelo impulso de Harry, que o enlaçava com as pernas, os pés pressionando-o para ir mais fundo, mais forte. As mãos de Louis apertavam com firmeza a cintura suada de Harry, os dedos cravando-se na pele enquanto suas estocadas se intensificavam. A cada movimento, os gemidos de Harry ficavam mais altos, os olhos cerrados em puro prazer, completamente entregue ao momento.
— Tão bom… — Harry sussurrou com a voz rouca, quando Louis os virou de lado, o mantendo próximo, um de frente para o outro. A coxa de Harry se acomodou por cima do quadril de Louis, e ele continuou, investindo com força, fazendo Harry arfar a cada movimento, os corpos em perfeita sintonia.
— Sim? — Louis sussurrou, indo devagar, prolongando o prazer dos dois e criando uma tensão deliciosa
no ar.
— Sim... — Harry respondeu em um sussurro, completamente entregue, enquanto Louis acelerava o ritmo, fazendo seu corpo vibrar de desejo.
As respirações entrecortadas e gemidos se misturavam ao redor deles até que Louis, em um último impulso, acelerou ao máximo, segurando Harry com força enquanto selava seus lábios num beijo profundo, desesperado. O beijo abafava os gemidos que escapavam de ambos, intensos e incontroláveis, enquanto o prazer os atingia como uma onda, explodindo dentro deles. Louis engoliu os gemidos de Harry, assim como Harry engoliu os seus, quando, em uma estocada firme, Louis acertou a próstata de Harry, fazendo-o gozar, o prazer escorrendo pela barriga de Louis. Ao mesmo tempo, Louis se liberou em jatos fortes e intensos dentro de Harry, que gemeu de satisfação, sentindo o calor do namorado preenchê-lo.
Harry se contorcia, gemendo manhoso e movendo os quadris devagar, enquanto Louis, decidido a prolongar o orgasmo dos dois, começou a estocar lentamente, saboreando cada momento. Ele queria que Harry sentisse cada onda de prazer, cada carícia.
— Você é tudo pra mim, Harry — Louis murmurou a voz suave, enquanto os dois trocavam um olhar cúmplice, sorrisos satisfeitos, compartilhando o silêncio confortável e a paz depois da intensidade.
— E você é o meu — Harry respondeu, iluminando o ambiente com um sorriso lindo, enquanto selava os lábios de Louis mais uma vez em um beijo lento e cheio de carinho, encerrando aquele momento perfeito entre eles.
— Vamos para casa! — Louis sussurrou, envolvendo Harry em um abraço apertado, como se quisesse protegê-lo de tudo ao redor.
Harry se aninhou contra ele, se sentindo seguro e amado, afirmando com a cabeça devagar, como se dissesse que estava pronto para o que quer que viesse a seguir.
Selando sua resposta com um beijo carinhoso, ele expressou sua gratidão por ter alguém que o cuidava de maneira tão profunda.
A casa dos dois não era uma construção de tijolos, cimento e areia; a casa deles era feita de amor e carinho, dos abraços apertados e dos sussurros suaves, da confiança que compartilhavam em cada olhar. Era um lar construído nos braços um do outro, onde cada momento juntos se tornava uma nova memória, cada riso uma nova parede, e cada beijo um alicerce que os unia ainda mais. Sabendo que, onde quer que estivessem, sempre teriam um ao outro.
Era pra ser postada ontem, mas ontem foi meu aniversário, então não consegui finalizar, por isso eu estou trazendo a ultima one votada da primeira enquete. Desculpem novamente!
Obrigada pela sua leitura e até breve! 🪽
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d-lacruz · 2 months ago
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Todo silêncio faz barulho.
Toda tempestade causa estragos.
Toda alma cicatrizada, se transforma em
Caos.
E toda solidão, tem a sua própria companhia.
Marcelo D'lacruz..
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projetovelhopoema · 4 months ago
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Coragem não é o que nos contam nos livros de histórias, não se trata de derrotar dragões ou atravessar mares tempestuosos. Às vezes, coragem é simplesmente sair de casa, dar o primeiro passo para fora da porta, mesmo quando o coração pesa e a mente grita para ficar. Porque eu vou te confessar: há dias em que cada movimento parece um risco. Pedir um Uber e temer que algo aconteça no caminho. Estar no trabalho e sentir que todos podem ver a vulnerabilidade estampada no rosto. Deitar a cabeça no travesseiro e duvidar se o sono virá ou se será mais uma noite de batalha silenciosa contra os próprios pensamentos. O medo se esconde nas coisas mais banais, nos gestos mais cotidianos, transformando o ordinário em desafio. E, ainda assim, seguimos. Colocamos os pés para fora, encaramos o mundo mesmo quando tudo dentro de nós pede o contrário. Esse é o ato de coragem que ninguém celebra, que ninguém escreve em poemas épicos e em livros. O simples continuar, o modo automático ativado para que o dia aconteça, uma luta invisível, mas intensa. Lutar contra a própria mente é um embate árduo, sem espadas e nem armaduras, apenas a força de existir. Porque o simples fato de viver, de seguir em frente quando o peso parece insustentável, é o maior ato de coragem que alguém pode ter. E cada dia vencido é uma pequena vitória, mesmo que ninguém a perceba, mesmo que seja apenas dentro de nós. Mas um dia essa luta se transforma, o medo que antes paralisava perde a força, a dor que sufocava encontra um alívio e então, percebemos que não somos apenas sobreviventes, somos guerreiros de batalhas invisíveis. E viver, apesar de tudo, se torna o maior ato de resistência.
— Diego e Julliany em Encontro de poetas.
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isiswolfblog · 1 month ago
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Como uma garota cega conseguiu ir para o trabalho apenas ficando sentada na sala de sua casa e imaginando.
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Após a história contada no livro "O Despertar da Imaginação" de Neville Goddard, abordarei por meio desse exemplo como a fantasia e a imaginação não são separadas, mas sim um só, além de como elas se diferenciam nas manifestações pela intensidade. Agora sim, vamos para a história.
───── ⋆ ꩜ ⋆ ────────── ⋆ ꩜ ⋆─────
Em São Francisco, uma garota cega estava passando por problemas relacionados à transporte, pois ocorreu uma mudança nas rotas de ônibus em que precisava de 3 conduções entre sua casa e o seu trabalho. Isso prolongou uma viagem que antes era 15 minutos para mais de 2 horas. Ela pensou seriamente nisso e chegou à conclusão de que um carro era uma alternativa melhor. Por ela ser cega, sabia que não podia dirigir um carro, mas ainda sim sentia que podia ser conduzida por um. Colocando essa concepção à prova — ''de que sempre que as ações do eu interior corresponderem às ações do exterior, o seu eu físico apaziguará seu desejo, e o seu desejo se realizará", ela disse a si mesma: "eu sentarei aqui e imaginarei que estou sendo levada para o meu trabalho."
Sentada na sua sala de estar, ela começou a imaginar-se sentada em um carro. Ela sentia o ritmo do motor. Ela imaginou sentir o cheiro de gasolina, sentia o movimento do carro, tocava a manga da jaqueta do motorista e sentia que o motorista era um homem. Ela sentia o carro parar e dirigindo-se ao seu companheiro, dizia, "Obrigada, senhor". Ao que ele respondia: "O prazer é todo meu". Então ela saía do carro e ouvia a porta fechar.
Ela centrava sua imaginação em estar em um carro mesmo sendo cega, ela via a cidade em sua viagem imaginária. Ela não pensava apenas em uma carona, ela pensava tudo que lhe era implícito. Esse passeio controlado é subjetivamente dirigido elevou a sua imaginação ao seu pleno potencial. Ela manteve seu propósito mesmo sem antes saber que, havia uma consistência intencional em sua ação interior. Nestas viagens mentais uma continuidade emocional deve ser sustentada — a emoção do desejo realizado. Expectativa e desejo unidos intensamente, se transformam de um estado mental em uma ação física. O seu interior deve ser colocado para fora, e ele é colocado para fora por meio de grandes pensamentos e sacadas de ganho pessoal. Devemos ter prazer em nossas ações.
Por 2 dias seguidos, essa jovem cega pegou sua carona imaginária, dando-lhe toda a alegria e o sentimento de realidade vivida. Poucas horas depois de sua segunda carona imaginária, uma amiga lhe falou de uma notícia que passou no jornal. Era a história de um homem que ajudava pessoas cegas. A garota ligou para ele e lhe contou seu problema. No dia seguinte, voltando pra casa, esse homem parou num bar, e sentiu a vontade de compartilhar isso ao seu amigo, dono do bar. Um total estranho, ao ouvir a história, se ofereceu para levá-la para casa, todos os dias. Então o homem que contou a história disse: "Se você a levar para casa, eu a levo para o trabalho."
Agora, ao invés de gastar 2 horas em 3 ônibus, ela chega em seu escritório em 15 minutos. E no primeiro dia de trabalho, ela virou-se para o motorista e disse: "Obrigada, senhor!", e ele a respondeu de volta: "O prazer é todo meu!"
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Imagine que fantasia e imaginação são como dois modos de uma mesma "luz criativa". A diferença está no quão forte essa luz brilha:
Fantasia (luz mais suave) - É como montar um quebra-cabeça — você junta peças que já existem (dragões, castelos, fadas) em combinações novas, mas sem mudar o que elas são. Exemplo: Criar uma história com uma princesa e um lobo falante. São elementos conhecidos, só reorganizados.
Imaginação (luz mais forte) - É como derreter metais para criar um novo: você transforma elementos em algo totalmente original, que não existia antes. Exemplo: Inventar um ser feito de sombras (algo que ninguém nunca viu ou descreveu).
• Frase-chave de Fantasia: Molda o que já existe para criar algo único.
• Frase-chave de Imaginação: Funde coisas para criar algo novo.
Ambas usam a mesma "energia criativa", mas a imaginação vai mais fundo, mudando a essência das coisas, enquanto a fantasia trabalha com o que já está ali. É como a diferença entre montar um castelo de Lego (fantasia) e inventar um novo tipo de bloco (imaginação).
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Neville nessa parte do livro aborda a bilocação. Bilocação aqui não é necessariamente estar em dois lugares ao mesmo tempo no plano físico, mas sim estar presente em dois estados de consciência. Um pé na realidade atual, outro pé no estado desejado. É como viver como se já fosse verdade. E quem treina isso, vai aprimorar a capacidade de se concentrar e ficar em paz (quiescência = tranquilidade profunda). Com isso, a consciência desperta e a pessoa acessa um mundo interno vasto — ou seja, desperta espiritual e emocionalmente.
"Todo lugar que pisares com a sola dos teus pés, eu te darei." (Josué 1, versículo 3).
˚ ༘`✦ ˑ ִֶ 𓂃⊹˚ ༘`✦ ˑ ִֶ 𓂃⊹˚ ༘`✦ Obrigada por ler até aqui!
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magneticgirll · 2 months ago
Note
Como que somente o poder de acreditar no que queremos muda tanto na nossa realidade? Essa é uma dúvida que me deixa insegura na hora de manifestar
o poder da ˚. ᵎ
🫧 lei da suposição
⊹   ︶︶  ୨୧  ︶︶  ⊹
isso acontece porque a consciência é a única realidade. Tudo o que experienciamos no mundo externo é reflexo daquilo que estamos sustentando internamente — em nossa imaginação, suposições, sentimentos e crenças. Isso significa que a realidade não acontece “lá fora” primeiro para depois acreditarmos nela. Ao contrário: ela se molda ao que acreditamos ser verdade agora.
i, topic 💿 a realidade é reflexiva.
A realidade física não tem vontade própria. Ela é como um espelho — apenas reflete o que está sendo sustentado na consciência. Então, quando você acredita verdadeiramente que já é aquilo que deseja ser, a realidade começa a reconfigurar-se para se alinhar com esse novo estado interior.
Por exemplo: se você acredita, com sentimento profundo e constante, que é amada, desejada e bem-sucedida, o mundo exterior começa a organizar eventos, encontros e circunstâncias que comprovam essa crença. Não porque o mundo “decidiu” te dar isso, mas porque você assumiu o estado e a realidade respondeu.
por isso costumamos dizer que somos os deuses da própria realidade, apenas assumimos e isso se torna realidade.
ii, topic ✉️ exemplo prático.
vamos supor que você deseja ser uma atriz, você pode:
ficar se perguntando se é boa o bastante, duvidar se tem chance, esperar o resultado externo para só então se sentir confiante.
e boom 💥
você não passou.
ou você pode fazer diferente:
Você fecha os olhos, respira fundo e se vê já no papel. Você sente a emoção de estar no set, ouvindo o “ação!”, vestindo o figurino, ouvindo os elogios do diretor. Você sente a alegria, a confiança, a certeza de que esse papel é seu. Você vive isso dentro de você todos os dias, com prazer, com fé. Porque você já passou desde o momento que você decidiu que o papel é seu.
iii, topic 🌟 conclusão.
Você muda sua realidade não quando algo externo muda, mas quando você se transforma internamente através da suposição. Acreditar é assumir. Sentir é criar. Imaginar é manifestar.
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gotiqes · 26 days ago
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SOLUCIONES AL TUTORIAL LINK PERSONALIDADO PARA TWITTER
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hola amigis de tumblr, ya han habido muchos comentarios sobre que no les funciona lo del link personalizado, es por eso que hago este hilo para que puedan identificar que es lo que les falla o les falta, hay un video al final en donde hago todos los pasos
1. NO DEBEN USART FONTS. ya que punycode no reconoce a las fonts y solo las deja como un texto normal
2. PREVIAMENTE HAY QUE ESCRIBIR Y EDITAR TU TEXTO EN NOTAS. si lo haces directamente en punycode no va a tomar el texto, por eso es mejor escribirlo previamente para obtener el resultado deseado
3. BORRA EL ESPACIO. (incluso después de incluir el espacio en blanco) bien, creo que este paso no lo aclare y es justamente el mayor provocante de los problemas, cuando creas un texto (ejemplo):
pequeño angel (espacio del teclado)
debes BORRAR ESE ESPACIO
pequeñoangel (sin espacio del teclado)
y reemplazarlo por el espacio en blanco
pequeño⠀⠀angel (espacio en blanco)
este espacio en blanco (que puedes encontrar en tumblr o paginas como emojicombos) es el único que permite que tu texto sea transformado de forma exitosa, ya que punycode no transforma el espacio del teclado, puedes poner este espacio a tu manera (mi espacio en blanco es doble, pero puedes hacer el espacio más grande o pequeño)
4. NO JUNTES TEXTO Y EMOJIS. basicamente punycode solo reconoce una cosa a la vez, si vas a poner un texto procura no poner un emoji en la misma sentencia, es mejor el texto primero, guardarlo en el formato punycode y DESPUÉS pasar el emoji
5. SIEMPRE FIJARSE QUE EMPIECE CON "xn--" si te sale "xn-" (solo una raya) entonces no transformó tu texto !! siempre deben ser 2 rayas (--)
6. TU NAVEGADOR WEB NO RECONOCE EL FORMATO PUNYCODE. puede que sea un navegador no actualizado u antiguo, una configuración del navegador que impide la visualización del formato punycode o un error de implementación
¿como solucionar el problema de navegación?
actualiza a su ultima versión o cambia de navegador !! también si es problema con tu dispositivo movil, cambia a computador
7. USAS CARACTERES QUE NO SON POSIBLES DE PASAR A PUNYCODE. sip, hay caracteres/símbolos que el formato punycode no reconoce y solo queda quitarlos, es mejor cambiarlos por otros
por ahora esas son las soluciones para crear un link personalizado en punycode, también incluyo un video de lo que se realiza para que funcione, como siempre si tienen alguna duda o problema HABLENME !! de verdad no me molesta ayudar o crearles el link yo misma si es que no encuentran solución al tema :-)
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elcorazondealis · 1 year ago
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Partes de ti🤍
Amo cuando nuestras manos se entrelazan,
amo poner mis manos en tu rostro,
ver esa sonrisa cuando te digo
que es lo más hermoso que eh visto.
Amo incluso la manera en que sonríes,
y como se te ven tus gafas,
amo cada centímetro de tu cuerpo,
y llenarme de tu esencia en cada instante.
Amo cada beso de ardiente pasión,
incluso tu aliento es un vicio grato,
amo tu energía, tus ansias de acción,
y cómo te esfuerzas por alcanzarlo todo.
Amo cada una de las cosas que eres,
Amo cada una de las cosas que te hacen ser tu.
Así, entre versos de amor y sentimiento,
se entrelazan nuestras vidas, cual redes.
En cada encuentro, en cada mirada,
amo la forma en que me envuelves,
el fuego que arde en tu mirada,
y el amor que en nuestras almas vive.
Amo la pasión que nos transforma,
en cada abrazo, en cada caricia,
amo el tiempo congelado cuando estamos juntos,
y en ese instante, siento que la eternidad existe.
Amor que crece y se renueva,
publicando en tu corazón un decreto,
amo cada palabra que me susurras al oído,
amo cada verso que en tus labios recito.
Y cuando la noche se adueña del día,
y la luna llena ilumina nuestro rincón,
amo el silencio compartido,
amo el abrazo que nos llena de emoción.
Amo cada latido que nos une,
cada promesa que llevamos en la piel,
amo la libertad que juntos encontramos,
y el amor que en cada gesto se revela.
Amo ese eco de pasión que nos guía,
que nos empuja a seguir adelante,
amo construir contigo un futuro brillante,
y en cada paso, hacer historia con poesía.
Amo cuando nuestros cuerpos se abrazan,
amo el cariño que en tu pecho habita,
amo cada instante que a tu lado paso,
porque en tu amor, la vida se nos cuela.
Amo el brillo en tus ojos,
Cuando hablas apasionadamente,
Amo escucharte hablar de tus sueños,
De tus deseos y anhelos.
Amo cuando ríes a carcajadas,
Y tu risa se convierte en música,
Amo la forma en que me abrazas,
Y me haces sentir protegida y amada.
Amo cada momento que compartimos juntos,
Cada conversación profunda y sincera,
Amo la forma en que tu presencia
Llena de alegría mi vida entera.
Eres mi inspiración y mi motivo,
El fuego que enciende mi ser,
Amo amarte con cada fibra de mi ser,
Y hacerte sentir amado también.
Así que hoy celebro y alabo
A ese ser maravilloso que eres,
Tu luz ilumina mi camino,
Y cada día renuevo mi amor por ti.
-Pararuby
Esto lo escribí esa vez en tu casa cuando se te dije que hora entendía la diferencia entre sexo y hacer el amor recuerdo que 5 segundos después me di cuenta de lo ridículo que sonó y tú querías que repitiera lo que dije por qué según no habías entendido bien pero se que si escuchaste nose si te estabas burlando o si era verdad que no entendiste pero si esa noche muchas cosas cambiaron en mi.
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waltfrasescazadordepalabras · 3 months ago
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C A R P E    D I E M" La frase se hizo famosa en la película: “La Sociedad de los poetas muertos” a raíz de un poema del gran Walt Whitman.  Aquí el poema: "CARPE DIEM" Aprovecha el día. No dejes que termine sin haber crecido un poco, sin haber sido feliz, sin haber alimentado tus sueños. No te dejes vencer por el desaliento. No permitas que nadie te quite el derecho de expresarte, que es casi un deber. No abandones tus ansias de hacer de tu vida algo extraordinario... No dejes de creer que las palabras y la poesía, sí pueden cambiar el mundo; porque, pase lo que pase, nuestra esencia está intacta. Somos seres humanos llenos de pasión, la vida es desierto y es oasis. Nos derriba, nos lastima, nos convierte en protagonistas de nuestra propia historia. Aunque el viento sople en contra, la poderosa obra continúa. Y tú puedes aportar una estrofa... No dejes nunca de soñar, porque sólo en sueños puede ser libre el hombre. No caigas en el peor de los errores: el silencio. La mayoría vive en un silencio espantoso. No te resignes, huye... "Yo emito mi alarido por los tejados de este mundo", dice el poeta; valora la belleza de las cosas simples, se puede hacer poesía sobre las pequeñas cosas. No traiciones tus creencias, todos merecemos ser aceptados. No podemos remar en contra de nosotros mismos, eso transforma la vida en un infierno. Disfruta del pánico que provoca tener la vida por delante. Vívela intensamente, sin mediocridades. Piensa que en ti está el futuro, y asume la tarea con orgullo y sin miedo. Aprende de quienes pueden enseñarte. Las experiencias de quienes se alimentaron de nuestros Poetas Muertos te ayudarán a caminar por la vida. La sociedad de hoy somos nosotros, los Poetas Vivos. ¡No permitas que la vida te pase a ti, sin que tú la vivas! Todos los días las legiones romanas a las 6 de la mañana saludaban con el grito: Carpe Diem
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junmsli · 1 year ago
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heated
pairing. felipe otaño x reader
cw/tw. smut, oral sex (pipe recibe), unprotected sex, pipe!celoso, relación establecida, afab!reader/pronombres femeninos, otra vez siento que me olvido de algo
word count. 1.8k+
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"¡no podes estar tan cerca de fran y pretender que no me joda!" pipe suelta con furia, ambos de pie en la sala de su apartamento frente a los muebles, tú con un semblante exasperado y él manteniendo un rostro enojado, sus rasgos están tensos y su mirada es fulminante.
“fran es solo un amigo cercano, feli, ¿no es eso obvio?” tratas de razonar pero pipe no busca entender la situación, quiere dejarte en claro que la sola idea de verte cerca de otro hombre le causa repulsión.
“me importa una mierda si es amigo nuestro o no, no puede ser tan pegajoso y cariñoso con mi mujer.”
"feli, entiende que esa es su manera de expresar cariño. por favor, bájale dos líneas a tus celos", exclamas con un suspiro, exhausta de la situación. felipe simplemente rueda los ojos, incapaz de comprender.
no puedes negar que fran ha permanecido cerca de ti durante gran parte de la noche, pero comprendes que sus intenciones no son coquetear contigo ni interferir en la relación con felipe. para él, el contacto físico es su forma natural de mostrar afecto, pero eso no lo convierte en alguien que busca seducir o romper relaciones, eso lo sabes con certeza.
aún así, pipe está furioso, cegado por los celos al imaginar que estás con alguien que no es él. “seré tan celoso como quiera si se trata de vos” te mantienes en silencio por unos segundos, evaluando la situación.
“feli, soy tuya, ¿entiendes?” dices mientras rodeas su cuello con tus manos. él baja la mirada hacia tus brazos que lo envuelven, incapaz de resistir el contacto, coloca sus manos en tu cintura y la acaricia lentamente. su expresión enfadada titubea por un momento, exhala un suspiro y asiente.
“lo sé, bebé, pero me pone mal verte con cualquiera.”
suspiras suavemente y ríes, encontrando cierta diversión en su actitud, que a su vez te excita un poco. “fran no es cualquiera,” afirmas, notando cómo felipe aprieta la mandíbula una vez más, cansado de tus intentos por defenderlo. “sabes a lo que me refiero. es tu amigo, mi amigo, y nunca intentaría nada.”
él niega con la cabeza y retira sus manos de tu cuerpo. “¿podes dejar de mencionarlo, por favor?”
“¿tanto te molesta?” comienzas a molestarlo, retirando tus manos de su cuello y colocando las suyas de nuevo en tu cintura, para luego volver a posarlas en su cuello. llevas tus labios a su mejilla izquierda, la que lames por un par de segundos y depositas un dulce besito, jugando a la inocente.”dale, qué tal si se te pasa tu mal humor y vamos a la cama.”
la furia en su rostro titubea una vez más “¿te calenta verme todo celoso, no?”
“feli…” dices y acercas tus labios a los de él. “dale, vamos a la cama.” felipe toma tu mentón y aprieta ligeramente, sin lastimarte. 
“no respondiste mi pregunta.” dice tu nombre y te mira fijamente en espera de tu respuesta.
“sí amor, me gusta cuando estás todo celoso conmigo, me gusta mucho.” dices, sus ojos conectados a los tuyos, saben lo que está por venir, este juego del gato y el ratón que les encanta es solo parte de su juego previo.
“¿te gusta o te calienta?” felipe cuestiona.
“¿no es lo mismo?” dices y acercas finalmente tus labios a los suyos, el mero pensamiento de sentir su boca contra la tuya te enloquece, pero pipe tiene otros planes y voltea su cara evitando lo que tanto esperabas. “¿feli?”
“seguís sin contestarme, no le doy besos a atrevidas.” pipe suelta y tú cara se transforma en una de sorpresa por unos segundos.
“te odio.” musitas y pipe alza una ceja.
“¿ah sí? ¿posta vos no sos la misma que me rogaba que me la garche hace menos de un minuto?”  ahora es su turno para que sus manos vayan a parar a tus mejillas.
“feli… me calienta tanto cuando te pones celoso conmigo, solo puedo imaginarte así de enojado mientras me coges duro” sueltas finalmente. pipe une sus labios en un acalorado y totalmente sucio beso, su lengua se convierte en una intrusa dentro de tu boca, ambas sucumbiendose ante el deseo de sentirse.
sin separarse, empiezan el recorrido hacia su habitación, pipe mantiene una de sus manos en tu cintura, usa la otra para mover la manilla y abrirles paso en su cuarto, aún con la pasión del momento, te sienta en la cama mientras se mantiene de pie. comienza la labor de quitarse su ropa y tú lo sigues quitando la blusa de tu cuerpo, dejándote en brasier, las bragas y tu falda. pues antes de poder continuar, un pipe desnudo niega con la cabeza y suelta en voz alta; “primero me tendrás en esa dulce boca tuya.” 
asientes y salivas ante el pensamiento de tenerlo dentro de tu cavidad bucal, el deseo por sentirlo y poder saborear su sabor salado humedece tu centro. “bien, follame la boca, por favor.”
“ya que me lo pedís tan dulcemente, te haré mierda.” felipe expresa sin vergüenza, te bajas de la cama y te arrodillas lo más rápido posible, abres la boca, en posición y lista para recibirlo. pipe lucha para no soltar un gemido ante la vista tan obscena. no extiende tu espera por él por más tiempo y tomando su pene en una de sus manos, lo lleva a tu cavidad bucal, tu lengua pasea de arriba hacia abajo por aquella vena marcada en su miembro, sientes tu vagina mojarse aún más ante la sola idea de tu accionar en el momento acalorado.
 “sí, chupame la pija como solo vos sabes.” no lo decepcionas, lo llevas en tu boca como una campeona, pipe toma tu cabello en un moño mal hecho y apresurado, lo jala y empuja su longitud en tu garganta. “la única pija que vas a tener.”
nunca has sido la mejor cuando se trata de los reflejos nauseosos, así que aunque son pocos los segundos que pipe tiene en tu boca, empiezas a lagrimear. 
felipe lo sabe y sonríe con malicia ante tu imagen algo destruida a causa de únicamente él, en caso no quieras seguir siempre puedes decir la palabra segura y no dudaría en detenerse y verificar tu bienestar, pero acostumbrado a tu imagen desecha al llevarlo en tu boca, solo se divierte con ella. “¿te gusta chupármela, no mi amor?”
entra y sale de tu cavidad bucal, hace y deshace. “¿te pensás que podes estar con otro toda la noche y que no me va a joder? ¿tengo que recordarte que el único que te puede tener así soy yo?”
no puedes soltar palabra con él follándote así la garganta, “pues sí tengo que hacerlo, lo haré, pendeja malcriada.” de insultarte a decirte sus apodos cursis designados solo para ti, este momento lo tiene de acá para allá. “esta boquita es solo mía.” dice y tú sólo asientes torpemente, te mueves queriendo perseguir el ritmo que pipe mantiene dentro de tu boca.
hasta que el oji celeste se aleja con lentitud, consiguiendo una mirada un poco desconcertada de tu parte. señala con su cabeza la cama. “dale, en cuatro.” sin querer darle la contra, le haces caso y te acomodas quedando según su orden. procede a ponerse de rodillas en la cama y su miembro queda a la altura de tu mojada entrada. su cuerpo está encima del tuyo, tu rostro y el suyo a la misma altura, pero sin permitirte que lo veas. se presiona contra ti y antes de introducirse en tu intimidad, lleva un dedo a tu clítoris, haciendo movimientos circulares, formando dulces ochos que hacen que la atmósfera se vuelva el doble de pesada para ti y empieces a soltar grandes gemidos. 
“feli… sí sí.” palabras sucias abandonan tu boca. “estoy lista feli, por fa.” le ruegas ganando una sonrisa maliciosa del castaño. 
“¿sí?” dice y acelera los movimientos en tu clítoris, inserta un dedo en tu coño empapado sin detener los dulces toques en tu clítoris. “¿de quién sos?” ruedas los ojos en medio de tu fascinación por la estimulación de parte de pipe, pero decides darle lo que quiere si es lo que necesita para penetrarte.
“tuya feli, toda tuya.” gemidos no dejan de salir de tu boca, felipe lleva su pene hacia tu entrada con el apoyo de una de sus manos, en menos de un par de segundos se introduce en ti sin mucha delicadeza dejando salir un gran jadeo de alivio al sentir tu interior de una vez por todas. “sí sí sí feli, m-más más.” dejas salir, los que para felipe, son los gimoteos más dulces que ha escuchado en toda su vida. 
“sos mía, cada centímetro.” continúa con un delicioso ritmo dentro de ti, saliendo y entrando, lleva ambas manos hacia tus caderas para arremeter con más rapidez y fuerza. su pene felipe cierra los ojos en contra de sus deseos de ver tu figura desmoronándose, toca ese dulce punto en tu interior dónde se mueve con destreza. la habitación se llena del sonido obsceno que causa el choque de ambos cuerpos, embiste tu interior con determinación. “mía, sos solo mía.”
“si feli, por favor, por favor.” tus gemidos no se detienen mientras apoyas tu cabeza contra la sábana, el placer nubla tu mente haciéndote pronunciar las palabras más sucias para incentivar a pipe a seguir con su continuo vaivén en lo profundo de tu coño. “soy tuya.” 
felipe sostiene un rostro sumido en la satisfacción, su mirada fija en tu cabeza inclinada contra el colchón “feli, más.” ruegas sin un atisbo de vergüenza, tus manos se convierten en puños, tu boca abierta soltando todo tipo de incoherencias.
“nadie más te hará sentir así, solo yo ¿entendés?” asientes con dificultad, logrando que pipe niegue,  “respondé usando esa boquita” sus manos se deslizan lentamente a tu cintura donde deja suaves caricias, en contradicción a sus duros y rápidos bombeos en tu interior. 
“s-sí feli, solo tú, te lo juro.” el castaño toma tu palabra, la manera en la que te lleva no es como ninguna otra anterior, te folla como si su vida dependiera de ello y no hace falta más para que sientas tu orgasmo llegar a cada parte de tu ser. felipe no tarda en notarlo, gracias a tu característico aspecto consumido por el reciente orgasmo, que por cierto, siempre disfruta registrar en su memoria. 
disminuye la rapidez de sus movimientos penetrándote de forma pausada en búsqueda de su propio clímax. “correte en mí, por fa.” suplicas, jadeos de cansancio y satisfacción acompañan tu pedido. 
“te dejaré toda llena, ¿querés?” accedes de manera casi automática y después de sólo unos pocos segundos derrama toda su carga en tu interior. permanece dentro de ti unos minutos más, permitiendo que ambos se recompongan.
“¿ya no estás enojado?” rompes el silencio que lejos de ser incómodo, les trae calma a ambos, volteas para afrontar la deliciosa vista de un felipe recién follado.
quien solo rueda los ojos y con una sonrisa juguetona replica “sos una conchuda.”
-
wn: llevo bastante sin subir un os pero les juro que no tenía nd de inspiración. espero les haya gustado <3 tengo algunas requests que seguro tomen tiempo pero espero darles T - T 
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