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#cuento todo? no sé... veremos
haruvkas · 8 months
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Creyó que la suerte estaba de su lado cuando en el primer gashapon obtuvo un par de colmillos; una lástima que tras abrir doceavo gashapon solo se había hecho de baratijas que muy probablemente guardaría por el tamaño miniatura que solía llamar su atención. Respira profundo y tras soltar el aire, patea una lata vacía, notando un par de segundos después que tiene público " ¿Qué, nunca habías visto a alguien patear con estilo? " cuestiona molesta, no solo por su mala suerte si no porque alguien presenciaba su rabieta.
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Carta a mis hijas:
Viaja, viaja sin descanso. Viaja sola y acompañada, en familia y enamorada (no existe nada mejor) viaja con amigos y también —por qué no, con un amante, viaja en primera pero también en apestosos trenes regionales. Tienes que conocer La Mamounia y ver caer el atardecer en la terraza del Fortuny, con un Bellini en la mano (yo me encargaré de esto). Viajar es la única cura (bueno, y unos cuantos libros) que he conocido contra la estupidez.
No acumules trastos, no tengas dos armarios, no pierdas el tiempo soñando con un vestidor. Sólo son cosas, no te definen. Y quizá esta sea la lección más difícil de aprender (a mi me costó toda una vida). Las cosas sólo son cosas: no tengas miedo a deshacerte de ellas, a lo único que has de tener miedo es a no acumular calambres.
No te midas, no dejes cosas por decir, saca la mierda —ya— de la alfombra. Aún no lo ves, pero la vida es jodidamente corta, un día medirás tu vida por las cosas que no hiciste. Ojalá te salgan las cuentas.
Paga tus deudas, aprende a decir no (es lo que diferencia a un tarugo de un Rey) recuerda siempre que nadie te debe nada. Sé fiel. A tu pareja, a tus valores, a tu gente y (también) a ti misma. Esa fidelidad inquebrantable es la única vía que yo he conocido para dormir bien por las noches. Y qué placer, qué importante es dormir bien por las noches.
Lo de la sangre —por mucho que a tu padre le fascine El Padrino, es una soberana gilipollez. Tu familia es tu gente, y tu gente son los que se partirían la cara por ti, en cualquier situación. Nada vale tanto como un buen amigo. Nada.
Bebe vino, aprende a comer, cocina para otros. ..
Dedica tu vida a los animales. Cada minuto perdido con ellos valdrá un millón de veces más que muchas de las personas que habitarán tus días.
Es inevitable: la música será tu vida. Escucha lo que sea que escuches —no hagas caso a los carcas, pero haz hueco para Chet Baker, Coltrane, Morricone, Dylan, Miles Davis, Mozart y los Smiths. No hagas puto caso a los infelices que te digan (lo harán, créeme) que no hay que escuchar esto o lo otro. Si te emociona, me sirve.
El cine, el cine —ya lo sabes, fue el mejor diván que pudo tener tu padre: una sala oscura, el silencio, unos títulos de crédito. Las veremos juntos, pero aquí te dejo una letanía: Rojo, Amour, La última noche, Cuentos de la luna pálida de agosto, Chihiro, El Gatopardo, Fresas Salvajes, Nelly y el sr. Arnaud, Los Puentes de Madison, Dublineses, Hannah y sus hermanas, Dersu Uzala, El Río, Tierras de Penumbra, Big Fish, todo Wilder, todo Hitchcock, todo Pixar, todo Buñuel, todo Erice, todo Kubrick. Y claro, aquella pequeña obsesión de tu viejo.
Escribe, escribe sin descanso. No esperes un tema, ni una excusa ni un trabajo: sencillamente escribe. Créeme, todo es más fácil cuando lo ves sobre el papel. Lee hasta que se te caigan los párpados, no lo dejes cuando la vida te reclame horarios (lo hacen tantos…) que leer no sea un recuerdo de tu juventud, que sea una necesidad, una sed: No hay otro camino, y nunca lo hubo.
No es lo que miras, es cómo lo miras. Aprende a mirar. Y a mirar se aprende mirando: exposiciones, calles, vidas, cafés, lienzos, amaneceres y portazos. Un pequeño truco: cuatro ojos ven más que dos.
Aprende a sobrevivir («Quien resiste, gana» en la tumba de Cela) pero que nunca sea suficiente: has de vivir.
Te van a hacer daño (es inevitable) pero te levantarás. Yo estaré ahí, ayudándote un millón de veces. No pretendo que no caigas, tan sólo que aprendas una lección —por pequeña que sea, tras cada caída. Esas lecciones serán tu tesoro.
Date entera.
Y por lo que más quieras, nunca te vendas.
- Jesús Terrés en "No te vendas"
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nephil-ixvii · 2 years
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Después de meses de reflexión, empiezas a visualizar tú vida de otra manera.
Casi 5 años de una relación, que me hicieron cuestionar la mayor parte de mis acciones, hechos, comportamientos y partes de mi vida que hoy en día lo veo más como experiencias vividas que me sirven de aprendizaje para un futuro mejor.
El día 0 fue el más complicado. El punto de quiebre te hace actuar de una manera cegada "ya no puedo más", "no puedo vivir así", "¿Es realmente esto lo que tengo que pasar toda mi vida?", "No debía de pasar esto", "¿Soy yo realmente esta persona?¿O fui convertida?". Todo este mar de pensamientos y emociones te abarcan la cabeza mientras manejas para decir pocas palabras que acabarán una historia. Pero empezarán otra.
"Si te vas, yo sé que ya nunca nos veremos" me dijeron mientras el mar de lágrimas ahogaba un cuento con mal final. Pero aún no sabías que ese cuento era amargo desde antes de la mitad del mismo.
Comienzas a cuestionarte si fue la mejor idea "¿Y si ya no encuentro a alguien?", "¿Realmente tomé la decisión adecuada?", "Creo que no debí actuar de esa manera tan extrema". El sentimiento de negación comienza a abordarte y no tienes más que divagar e intentar calmar la marea hasta quedarte dormido.
Pasas días irritado, molesto, con una tolerancia demasiado baja para tú actitud normal. Soy una persona que tiene una alta capacidad para permanecer tranquilo, sin embargo hoy no es el día. "¿Solo yo fuí el culpable de todo?¿O eres tú quien no quiso aceptar su parte del trabajo?", "Yo no tenía porque aguantar tus caprichos" "no necesito ni necesitaba tus comentarios". Pero son sentimientos que te ahorras, porque ya no vale la pena reclamarlos, estás sanando y por más reencor que puedas llegar a aguantar. Sabes que no quieres volver a lastimar a alguien. O qué te lastimen nuevamente.
"Comencé a hacer más ejercicio" , "intenté dormir más", "retomaré estos viejos hábitos". Propones metas y medidas para intentar liberarte del veneno y de la toxicidad que tú cuerpo está dejando de emanar gradualmente. Te sientes un poco mejor, aunque el nudo de la garganta vuelve a aparecer, piensas que ya no te va a ahorcar como antes. Comienzas a asimilar un nuevo comienzo. Sin embargo, lo peor viene después.
El cigarro, el alcohol, las drogas y el desvelo de fin de semana se vuelven tus amigos favoritos. Comienzas a preocuparte solamente por cuál será la próxima vez que beberás hasta ahogarte, cuando pondrás la música que más te hiera, porque buscamos saber que aún estamos vivos, así sea a base de malas decisiones. Tú única respuesta para todo es "si, estoy bien", pero ambos sabemos que, no lo estás.
¡Hoy salimos! Decidiste vestirte bien, salir a caminar solo, ir por un café y sentarte a ver los autos pasar. Se van las horas volando y no te percataste de lo bien que el viento se siente hoy. Felicidades, te diste cuenta que nunca haz estado solo en tú proceso, porque te tuviste a tí todo el tiempo y hasta ahora tomaste el momento ideal para abrazarte, para volver a explorar el mundo. La vida vuelve a comenzar y sabes que campo minado no volver a pasar.
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historiasdeldivan · 2 years
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Viaja, viaja sin descanso. Viaja sola y acompañada, en familia y enamorada (no existe nada mejor) viaja con amigos y también —por qué no, con un amante, viaja en primera pero también en apestosos trenes regionales. Tienes que conocer La Mamounia y ver caer el atardecer en la terraza del Fortuny, con un Bellini en la mano (yo me encargaré de esto). Viajar es la única cura (bueno, y unos cuantos libros) que he conocido contra la estupidez.
No acumules trastos, no tengas dos armarios, no pierdas el tiempo soñando con un vestidor. Sólo son cosas, no te definen. Y quizá esta sea la lección más difícil de aprender (a mi me costó toda una vida). Las cosas sólo son cosas: no tengas miedo a deshacerte de ellas, a lo único que has de tener miedo es a no acumular calambres.
No te midas, no dejes cosas por decir, saca la mierda —ya— de la alfombra. Aún no lo ves, pero la vida es jodidamente corta, un día medirás tu vida por las cosas que no hiciste. Ojalá te salgan las cuentas.
Paga tus deudas, aprende a decir no (es lo que diferencia a un tarugo de un Rey) recuerda siempre que nadie te debe nada. Sé fiel. A tu pareja, a tus valores, a tu gente y (también) a ti misma. Esa fidelidad inquebrantable es la única vía que yo he conocido para dormir bien por las noches. Y qué placer, qué importante es dormir bien por las noches.
Lo de la sangre —por mucho que a tu padre le fascine El Padrino, es una soberana gilipollez. Tu familia es tu gente, y tu gente son los que se partirían la cara por ti, en cualquier situación. Nada vale tanto como un buen amigo. Nada.
Bebe vino, aprende a comer, cocina para otros...
Dedica tu vida a los animales. Cada minuto perdido con ellos valdrá un millón de veces más que muchas de las personas que habitarán tus días.
Es inevitable: la música será tu vida. Escucha lo que sea que escuches —no hagas caso a los carcas, pero haz hueco para Chet Baker, Coltrane, Morricone, Dylan, Miles Davis, Mozart y los Smiths. No hagas puto caso a los infelices que te digan (lo harán, créeme) que no hay que escuchar esto o lo otro. Si te emociona, me sirve.
El cine, el cine —ya lo sabes, fue el mejor diván que pudo tener tu padre: una sala oscura, el silencio, unos títulos de crédito. Las veremos juntos, pero aquí te dejo una letanía: Rojo, Amour, La última noche, Cuentos de la luna pálida de agosto, Chihiro, El Gatopardo, Fresas Salvajes, Nelly y el sr. Arnaud, Los Puentes de Madison, Dublineses, Hannah y sus hermanas, Dersu Uzala, El Río, Tierras de Penumbra, Big Fish, todo Wilder, todo Hitchcock, todo Pixar, todo Buñuel, todo Erice, todo Kubrick. Y claro, aquella pequeña obsesión de tu viejo.
Escribe, escribe sin descanso. No esperes un tema, ni una excusa ni un trabajo: sencillamente escribe. Créeme, todo es más fácil cuando lo ves sobre el papel. Lee hasta que se te caigan los párpados, no lo dejes cuando la vida te reclame horarios (lo hacen tantos…) que leer no sea un recuerdo de tu juventud, que sea una necesidad, una sed: No hay otro camino, y nunca lo hubo.
No es lo que miras, es cómo lo miras. Aprende a mirar. Y a mirar se aprende mirando: exposiciones, calles, vidas, cafés, lienzos, amaneceres y portazos. Un pequeño truco: cuatro ojos ven más que dos.
Aprende a sobrevivir («Quien resiste, gana» en la tumba de Cela) pero que nunca sea suficiente: has de vivir.
Te van a hacer daño (es inevitable) pero te levantarás. Yo estaré ahí, ayudándote un millón de veces. No pretendo que no caigas, tan sólo que aprendas una lección —por pequeña que sea, tras cada caída. Esas lecciones serán tu tesoro.
Date entera.
Y por lo que más quieras, nunca te vendas.
- Jesús Terrés en "No te vendas"
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veronicacardona98 · 6 months
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Nota preaviso
Pasan los días y más me doy por vencida.
Ya no tengo fuerzas para continuar, es como estar en medio de un desierto gritando y pidiendo ayuda sin que nadie me escuche, ni siquiera me oiga. Pasan los días y nada cambia, todo sigue igual, indiferencia, desinterés... Me consume poco a poco deshaciéndome por dentro. Es como querer contarle el cuento de Don Quijote a un chino en español,¡... da igual lo que haga jamás te podrá entender. Así me siento... Incapaz de hacer que me oigan, incapaz de que me escuchen, ya no sé como hacerle feliz. Ya no se que más necesita de mí, no sé como crear esa historia preciosa, bonita y sana que un día tuvimos... Ya todo son malas caras, no entendimiento, ni siquiera comprensión... Odio la indiferencia, odio el desinterés, odio no ser capaz de sentir que la hago feliz, odio la impotencia de no conseguir lo que tanto llevo luchando por conseguir y tener con ella.
Me desgarra la garganta dejándome la voz para que me entienda, para que me comprenda, para que me escuche, y la reacción siempre a la defensiva me quita las ganas de hablar convirtiéndose en la pescadilla que se muerde la cola, y en un constante mal estar por ambas partes.
La vida se me está desplomando por momentos, la presión en el trabajo me tiene aturdida todo el día, solo pienso en desaparecer y desconectar. Creo que me viene muy grande tales cosas.
El corazón se me sale del pecho constantemente, vuelven esos dolores que un día pasé y me aterraron dentro de un quirófano. El miedo al ahogo, a no respirar cuando esté en mi mejor momento, el miedo a no mantenerme en pie. La necesidad de machacarme en el gym para mantener el cuerpo activo y sentir que sirvo para algo... Aunque ni eso ya se me da del todo bien.
El amor e me está haciendo cuesta arriba, ni siquiera yo soy capaz de entender ya que necesita mi pareja, no se puede hablar, ya que cuando hablo opinando algo diferente son malas caras, reproches y al final un condicionamiento a hacer algo que quizá no quiera, por no escucharle. Además de una falta de reciprocidad por su parte, no creo que tenga el mismo compromiso que yo, y mis dudas es... si siempre será así o solo es cuestión de tiempo. Estoy cansada de amoldarme al resto, de esperar, de dar, de entender, de comprender, de escuchar, de aguantar, y cuando al contrario se trata, parece que todo estalla.
Las amistades es el lugar donde mas traicionada me siento, me fuerzo a hacer amistades o mantener relaciones, y la verdad es que cada vez esta más difícil confiar... me han decepcionado tanto, que ya ni siquiera sé si merece la pena, recuerdo cuando estaba sola, y creo recordar que exceptuando algún era mucho más feliz.
Sigo sin aprender a no esperar nada de nadie... Ni siquiera de mí misma debería esperar nada.
Estoy cansada, mi única tentación es desaparecer, llevo semanas soñando que veo a mi gente y a la gente que creo que le importo llorando mi muerte, veo a todos llorando, mi pareja, arrepintiéndose de estar en mismo bucle, mi madre lamentándose de la distancia y culpándose de sus miedos, mis abuelos, llorando mi ausencia. E incluso, ese que biológicamente es mi padre, arrepentido y culpándose de haberme ido de esta vida, sintiendo que no es nada en mi vida. Un completo cero a la izquierda. Un triste recuerdo de mi pasado.
A la que sí veo en cada sueño, es a ella, Marta, esperándome con los brazos abiertos, pero cuando la agarro y la abrazo me dice al oído, '' no es tu momento, vuelve, esto solo es una pausa, tu puedes, ya nos veremos, te quiero hermana''.
Automáticamente despierto de sobresalto del sueño, y vuelvo a la vida, como ella bien me pide. Aquí sigo en pie, sin fuerzas, sin ilusión, sin ganas, luchando por tener una estabilidad económica, por luchar por ese amor con el que tanto sueño tener con ella y esa relación fuerte y firme con la que deseo amanecer cada día, luchando por tener mejor calidad de vida, abrirme puertas laborales mejores.
Aquí sigo, luchando con las ganas de suicidarme, de no despertar nunca mas tras un simple sueño, aquí sigo en pie, un impulso, una esperanza de mejoría, algo... me mantiene firme en esta guerra...
Pero siento que cada vez me desvanezco más, ya no sé con quien hablar, no sé a quien explicar, ya no sé nada. Estoy muerta en vida.
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leonardorogelcine · 7 months
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Cría Cuervos
Carlos Saura (1976)
Narra la tragedia de una Ana en una estructura no lineal donde la, una niña huérfana que tras la muerte de su padre, el cual ella misma presenció, desde el inicio de la película, donde se despiden las 3 hijas del padre se le nota que ella es diferente a las otras 2 hermanas, no es porque sea más madura, sino que se fija en otras y la muerte de sus familiares le afectaron más que a las otras 2, sobre todo el de su madre, donde en el lapso de toda la película se ve completamente a una niña que extraña a su madre, y como desprecia a la nueva figura materna que está presente en su vida, su tía, quien se quedó con la custodia tras la muerte de su papá, ella revive algunos momentos que había vivido con su mamá, y esa misma situación se repite ahora con su tía y es completamente diferente, pero cuando le pide un cuento a su mamá y le cuenta el de almedrita, y al despertar le grita a su mamá, pero obviamente esta no llega, pero su tía si, y le cuenta el mismo cuento, es un momento bastante poderoso, porque la propia niña desea no vivir. Sé que esta película es una metáfora a como se desarrollaba por ese entonces la política en España, no obstante considero que la mayor fuerza de la película está presente en la historia evidente, de una niña que perdió a su mamá, y como vive su proceso de duelo.
La fuerza de ver a una niña que está tan cercana a la muerte y como se solapa con la inocencia de una niña de una edad temprana, me parece que es completamente único, en lo personal, me impacto mucho esta relación, por una experiencia personal que fue mi primer contacto con la muerte, en mi caso fue el fallecimiento de mi bisabuelo en ese entonces habré tenido 6 años, donde tengo el claro recuerdo de un momento donde mi abuela llego a la casa, llorando y dijo la frase: "Falleció mi papi", pero el primer pensamiento que tuve, en vez de ponerme triste fue algo similar a no eso es lo que todos querían que pasará (cabe recalcar que llevaba un tiempo desde que vivió un EVC que por desgracia no se pudo rehabilitar de una manera óptima), recuerdo también el haber ido al velorio, y ver a mi abuela y sus 8 hermanos llorar a su alrededor, y recuerdo que en el momento que lo acompañamos al panteón, le pregunté a mi tío (hijo de mi abuela), que porque todos lloraban, si me decían que estaba en un lugar mejor. Su respuesta fue algo parecido a "porque ya no lo podremos ver nunca más". Respondí: "¿Ya nunca lo veremos?", me dijo: "No", y hasta ese momento fue el momento donde yo empecé a llorar. En el caso de Ana, le tocó a una edad poco más temprana vivir 2 veces este episodio, y lo veía como algo "normal", pero parecía que a la vez, tenía la idea de lo que era la muerte, pero considero que nunca llego a comprender a ciencia cierta lo que esta misma implica. Honestamente siento que a mis 17 años no sé con claridad lo que esto significa, y creo que es algo que nadie sabe la respuesta hasta el momento que la ve de frente. Pero verlo de una manera externa reflejado en una niña de 6 años aproximadamente, hace que tenga un peso narrativo impresionante, y siento que el punto álgido, es cuando le pregunta a su abuela si quiere morir, pero aún más cuando le ofrece la muerte a la abuela.
Ese verano en la vida de Ana se veia que era una locura total, y ver toda esta clase de ecperiencias traumaticas en un periodo corto de tiempo y visto por una niña y como la vida hace que esta misma tenga que avanzar para poder avanzar por asi decirlo es como si la vida le estuviera poniendo pruebas, pero a la vez se ve como es una niña, y se comporta como tal, porque no por los sucesos que viva significa que iba a madurar magicamente
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lanuevajerga · 9 months
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He ido sólo a Sri Lanka.
Ando mucho por la jungla, voy sólo escuchando a Camarón, por tangos, me pone los pelos de punta y canto porque no hay nadie alrededor, sólo pasan algunos tuk tuks de vez en cuando. Le perdí pronto el respeto a caminar sólo y a que me raptara la guerrilla sri lankesa, voy contento con mi música, sudando, entre vegetación, a veces aparecen los monos, creo que me van siguiendo.
Cuando subo a los autobuses me miran, me sonríen, cuchichean y me señalan sin reparo alguno. Yo también les sonrío. Creo que no están acostumbrados a ver guiris en el transporte público. Tardo dos o tres días en quitarme los prejuicios, en sentirme cómodo, no por la suciedad, ni los olores, sino por las miradas, no me gusta que me miren.
He llegado a un Home Stay en medio de la selva, en realidad todo allí está en medio de la selva, pero esto está mucho más todavía en medio de la selva. Su dueño se llama Manjula. La primera noche se acerca al porche de mi habitación, me ofrece un cigarro y empezamos a hablar. Me cuenta cosas de su país, yo del mío. Pasamos casi dos horas charlando, es noche cerrada, hay luciérnagas, cientos de ella, nunca había visto tantas luciérnagas en toda mi vida. Manjula dice que mañana me va a preparar un buen desayuno, que si me gusta el pique. Of course, ponle pique ahí su Manjula.
Veo elefantes, escalo montañas, regateo con los conductores de tuk tuk, hablo con los sri lankeses que vienen directamente a preguntarme quién soy y qué hago allí. Se lo explico lo mejor que puedo.
He terminado en una piedra gigante que se eleva en medio de la jungla infinita, cuando llego arriba me da mucha impresión, me quedo allí sentado casi tres horas porque me apetece hacerlo, es una de las ventajas de viajar solo.
Kandy es como Su Eminencia pero en modo chatarrero, también tiene su lago y su templo donde está el diente de Buda, voy a verlo. He visitado muchos templos budistas, un gran porcentaje de ellos sin nadie dentro. Dí con una especie de cueva repleta de Budas de piedra en posición de meditación, estaba todo lleno de velas y flores. Las estatuas tienen miles de años, sus caras no son muy expresivas pero su gesto te inquieta si te quedas un rato en frente de ellas. Me giro, no hay absolutamente nadie. Miro a un Buda de cerca y decido que voy a tocarlo. Pongo mi mano en su hombro y coño, esto no es una piedra al uso. Me quedo un poco loco y salgo de allí, joder con la piedra.
En la ciudad se me acercan enganchetas Sri lankeses a pedirme dinero y cosas. Les sonrío y les digo que voy bien sólo. Uno de ellos se me pega y me habla, tiene mal aspecto pero es muy amable, sé que no me va a hacer nada, llevo toda la vida hablando con personajes de la calle y le doy cháchara, hace días que no hablo con nadie. Nos sentamos en el lago y le cuento quién soy, de donde vengo y a dónde voy, él me escucha, luego me habla de Buda, de espiritualidad, de la dirección que está tomando la civilización, es interesante oírle. Me propone llevarme a bares y lugares locales, baratos y sin guiris, está oscureciendo y aún no tengo sitio donde quedarme esa noche. Le digo que tengo que irme, le compro un paquete de tabaco y le doy mil rupias, Maesh me da la mano mirandome a los ojos, me dice que ya nos veremos, parece convencido de ello. Nos sonreímos, adiós Maesh.
Los niños y las niñas son muy guapos en Sri Lanka, van vestidos de blanco, llevan corbata, es su uniforme del colegio. Cuando son las dos y voy por algún lugar donde hay gente los veo salir de la escuela. Al cruzarme con las niñas sonríen divertidas y me miran de reojo, los grupos de niños me dicen cosas y caminan un rato conmigo preguntándome lo de siempre, son muy divertidos, sé que me vacilan un poco pero yo también a ellos.
El tiempo vuela y llego a Ella, destino final, allí sí hay guiris, es el pueblo más turístico del país, está repleto de británicos y alemanes. Subo a Adams Peak, me supone tres horas, al bajar hay una especie de desfile, una fiesta, es de noche. Me dejo llevar un rato, bebo unas cuantas cervezas y charlo con unas guiris de Southampton, la vida a veces es bastante extraña. Me cuesta regresar a mi habitación, voy un poco mareado y está oscuro de cojones, nunca había andado por la selva a oscuras, hay un pequeño surco que hace las veces de camino pero joder, da un poco de miedo, hay ruidos detrás de la vegetación, espero que sean monos, sí, tienen que ser monos.
Manjula viene a verme de nuevo la segunda noche, me dice que cómo me ha ido el día. Se lo cuento. Le digo que me quedaría en su casa un mes, sólo estando allí, sin tener que preocuparme por ver sitios o moverme de un lado a otro ¿Y por qué no? me contesta. No puedo, mi avión sale en dos días. Manjula me ofrece quedarme con él, yo le ayudo con los huéspedes y él me da alojamiento y comida hasta que se me acabe el visado. Joder, no sabes cuanto me gustaría amigo, pero no puedo. Your choice my friend, me dice.
Cojo el último tren, seis horas hasta el aeropuerto. En Sri Lanka puedes sentarte en los escalones de los vagones porque los vagones no tienen puertas, puedes agarrarte a la barandilla y sacar el cuerpo fuera del tren y dejar que te toquen las hojas de los árboles. Me paso así casi todo el viaje, a centímetros de la jungla, respiro su aire por última vez, es tiempo de volver, me noto cansado.
Puede que alguna día, me vaya un mes a casa de Manjula, a vivir descalzo con él en la jungla, a ver luciérnagas. Me ha dicho que nunca se le olvidan las caras de sus huéspedes.
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scarletwatcher · 1 year
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Charmed: La serie que pudo ser
No sé si dedicar dos entradas seguidas a series con temática similar y consideradas como series de culto es lo correcto, pero es mi blog y supongo que lo de la libertad creativa simplemente depende de mí. Si ayer hablamos de la Cazadora de Sunnydale (también conocida como Buffy Anne Summers), hoy hablaremos de las que intentaron ser sus sucesoras en San Francisco, y es que me estoy refiriendo a las Hermanas Halliwell, también conocidas como las Embrujadas.
Desde el inicio...
De Embrujadas se han escrito muchas cosas, desde simples resúmenes o críticas hasta textos académicos que analizan su impacto en la sociedad, su narrativa feminista o incluso la forma en la que se adaptó la narrativa clásica de los cuentos de hadas. Los expertos llaman a este género la Charmed Academia y si bien se encuentra lejos de los estudios sobre el Buffyverso, se debe admirar el impacto que llegó a tener en la vida de sus espectadores.
De todos modos, creo que no se han escrito suficientes cosas al respecto, quedándose en el tintero una gran cantidad de críticas merecidas y reconocimientos que nunca llegaron. Una entrada de blog no es ni mucho menos un texto académico ni un análisis detallado, pero me servirá para hablar de todo aquello que no se ha hecho. Y, sinceramente, creo que siempre se ha hablado poco del inicio de Embrujadas.
Debemos regresar al año 1997, año en el que llega a la pequeña pantalla Buffy, The Vampire Slayer. Ya mencioné en el post anterior que Buffy marcó un antes y un después en el género de lo sobrenatural y no era para menos. Nuevas narrativas, dinámicas y personajes con personalidades y desarrollos que no acostumbrábamos a ver hasta ese momento. Podemos decir que Charmed nació de ese deseo por querer reinventar el mundo de la televisión.
En el año 1998, La cadena The WB pide que se den nuevas ideas para una serie a estrenar en el transcurso de la temporada 98-99. Buffy había demostrado ser un éxito de audiencia para la pequeña cadena, por lo que deciden que otra serie de temática sobrenatural puede ser su mejor baza. Constance M. Burge llega entonces con la idea de un show sobre 3 compañeras de piso que resulta que son brujas.
Que Burge eligiese a las brujas como figura clave de su serie no fue tampoco una decisión aleatoria. No solo eran un elemento importante en el Buffyverso, si no que también estaban gozando de un notable éxito en la gran pantalla. Por un lado, la película del 96 The Craft (tal vez te suene más como Jóvenes y Brujas) había hecho que una generación de jóvenes se interesaran por la cultura Wicca. Y por otro lado, el mundo estaba a punto de caer a los pies de Nicole Kidman y Sandra Bullock en la película Practical Magic (conocida en España como Prácticamente Magia), donde la brujería y la hermandad eran motor principal de su historia.
La cadena no buscaba algo como Buffy, Cazavampiros pero tampoco querían caer en los clichés que series como Embrujada o Sabrina, Cosas de Bruja habían transmitido. Necesitaban un drama y si bien la historia de Burge parecía adaptarse a lo que buscaban, aún faltaba algo. Para el productor Duke Vincent faltaba un elemento clave, el que hiciese que semana tras semana todo el mundo se pegara al televisor para seguir las historias de 3 brujas. Es entonces cuando propone añadir el valor familiar, convirtiendo a esas 3 compañeras de piso en hermanas. Desde ese momento, el mantra de la serie fue que debía concebirse como una serie sobre tres hermanas que además son brujas (aunque Brad Kern se encargaría de cargarse ese mantra como veremos más adelante). Y así nació el concepto de lo que posteriormente conoceríamos como Embrujadas.
Las Audiciones
La empresa encargada de producir la serie fue la dirigida por el magnate televisivo Aaron Spelling, quien había producido fenómenos como Sensación de Vivir, Dinastía o Los Ángeles de Charlie. Una de sus actrices favoritas era Shannen Doherty, quien antes de interpretar a Brenda Walsh, ya había enamorado al mundo en su papel en la serie La Casa de la Pradera.
A esa audición, Doherty no acudió sola si no que lo hizo en compañía de su mejor amiga, Holly Marie Combs (conocida principalmente hasta esa fecha por su papel en Picket Fences). Si bien Doherty audicionó para el rol de Piper y Combs para el de Prue, acabaron por intercambiarse los papeles. Y supongo que tan mala no fue la idea, después de todo. Solo faltaba un papel por cubrir, el de la hermana menor, Phoebe. Y no, Alyssa Milano no fue la primera opción, si no la actriz Lori Rom, la cual llegó a interpretar el papel en el piloto no emitido de la serie.
Está disponible en internet, por si lo queréis ver, y cuenta con diferencias sustanciales respecto al 1x01 de la serie que conocemos. Por un lado, teniendo a Lori Rom como Phoebe, pero es que Andy estuvo interpretado por Chris Boyd. Si de la primero sabemos que abandonó la serie porque su Iglesia no estaba de acuerdo con que interpretase a una bruja, la marcha de Chris Boyd nunca fue justificada. Las malas lenguas dicen que se retiró por vergüenza, pero no hay verdaderas causas reales. Otros cambios notables fueron la ausencia de Darryl o la escena en la que Jeremy es derrotado (que incluía un mayor abanico de poderes demoníacos y un CGI un poco cutre).
Con la marcha de Rom, llega Alyssa Milano y nuevas incorporaciones como la de Ted King como Andy o la de Dorian Gregory como Darryl. Con mayor o menor presencia en la serie, todos ellos dejaron su huella, aunque en el caso de Alyssa Milano, el personaje de Phoebe merece mención aparte.
El Demonio de la Semana
Como ya he dicho, Charmed siguió los pasos de Buffy, The Vampire Slayer y una de las mayores influencias se puede apreciar en su modelo narrativo. Viendo que el modelo propuesto por Whedon atraía a masas en vez de espantarlas, decidieron implementarla en su nueva serie de temática sobrenatural. De esta forma, cada capítulo narraba una trama autoconclusiva que se enmarcaba dentro de otra historia aún mayor que duraba una temporada.
Buffy logró conectar todas las temporadas a través del Primero, un ente malévolo sin forma corpórea que resultó estar tras todos los acontecimientos de la serie. Embrujadas siguió un modelo idéntico... o lo fue por lo menos durante las 4 primeras temporadas. En cada temporada se desvelaba que aún había un poder superior al que había ejecutado las ordenes, hasta que llegamos a La Fuente de Todo Mal.
Dejando la marcha de Doherty a un lado (de verdad, sobre eso sí se ha escrito demasiado), la temporada 4 incluye a Rose McGowan como sustituta, encarnando a Paige Matthews, la medio hermana de las Halliwell. Esa trama no se la vio venir nadie y nos la colaron a todos con calzador. De todos modos, la temporada 4 no estaba destinada a tener 22 capítulos, si no únicamente 13. De hecho es en el 4x13 en el que las Hermanas conseguían derrotar a La Fuente, creando el cliff-hanger de que Cole se había convertido el siguiente en la línea de sucesión del Inframundo. A todos les pilló por sorpresa la renovación por 9 capítulos más, por lo que la trama que iba a ser desarrollada en la Temporada 5, se acortó para adaptarla en la Temporada 4.
A partir de aquí, la serie pierde esta noción de linealidad serial, haciendo que el hilo conductor fuesen demonios que no llegaron en ningún a conectar las temporadas 5 a 8. De esta forma, se sintió que Embrujadas había adquirido un carácter un tanto antológico, en el que cada temporada aparecía un nuevo Gran Villano. En la temporada 5 tuvimos a Cole hasta mitad de temporada, en la temporada 6 a Gideon, en la 7 a Zankou y los Avatares y en la 8 a las hermanas Jenkins.
La serie supo tomar el espíritu narrativo de Buffy, pero llegó a perderse en un intento por desmarcarse. Las decisiones argumentales fueron nefastas en momentos dados, llegando Brad Kern a cambiar el mantra de la serie. Ya no eran hermanas que descubrían que eran brujas, se habían convertido en mujeres (entendidas desde un punto de vista masculino) que eran hermanas y además, eran brujas. De hecho, esto queda patente con la perdida de calidad que sufrió la mitología de la serie a partir de la Temporada 5.
¿Iconos Feministas?
Si vemos la serie con una mirada actual, podríamos llegar a pensar que quién consideraría esta serie como un fenómeno feminista. Puede que lo fuese durante la estancia de Burge en la serie, pero decayó rapidamente cuando Brad Kern quedó al mando. Pero claro, para entender de qué feminismo hablamos, debemos hacer un poco de repaso a esta corriente.
El feminismo que imbuye a Embrujadas es el que se conoce como de Tercera Ola. En un intento por romper con el elitismo del feminismo de segunda ola y acercarlo a toda persona independientemente de su estatus, llega esta corriente en los 90. Tal vez el lema Girls can do it sea el mejor resumen de este movimiento. La liberación de la mujer como una luchadora que no debe renunciar a su feminidad para lograr igualdad, la liberación sexual o incluso la inclusión de la mujer trans como partícipe de este cambio. A día de hoy nos encontramos inmersos en un feminismo de cuarta ola, diferente a este y con otros objetivos. Y sí, puede sonar a un feminismo rancio, pero decir que Embrujadas no marcó un hito feminista también es faltar a la verdad.
Quizá Buffy supo representar mejor a esta tercera ola. Se nos presentaba como la típica chica girly que no debía adquirir atributos masculinos para ser respetada y considerada una persona válida. Esta había sido la tendencia hasta la época, reflejado en series como Wonder Woman. Del mismo modo, tampoco era sexualizada del modo que sí lo fueron los Ángeles de Charle. Buffy supo ser una buena representación de todo esto y la palabra sororidad alcanzó su máximo esplendor en le Temporada 7, cuando descubre que el poder compartido es más fuerte que el poder individual.
Las hermanas Halliwell bebieron de esto en sus inicios. Eran fuertes por ellas mismas y podían vivir su vida sin un hombre a su lado... bueno, no negamos que las tramas románticas como la de Piper y Leo eran necesarias, pero eran mujeres independientes con trabajos bien posicionados y que además pateaban culos demoníacos. Constance M. Burge supo añadir esta visión a su serie, pero las broncas con Kern por el rumbo de la serie llevarían a su salida como Productora y llegarían una serie de cambios que conducirían a Embrujadas a su ruina.
Quien mejor representa esta caída del feminismo es el personaje de Phoebe Halliwell. Durante las primeras temporadas se declara independiente, puede hacer lo que quiera, cuando quiera y como quiera, además es una bruja y no se va a la cama sin haber salvado antes el mundo. Los hombres pasan por su vida sin atarse a ninguno, y nadie la juzga ¿por qué? Porque ella es más que eso, sabe quién es y nadie puede decir lo contrario. Pero a partir de la temporada 3, perdemos a esa Phoebe independiente para encontrarnos con alguien que se parece a ella.
Phoebe se enamora perdidamente de Cole, hasta el punto de que lo culpa por todas las cosas que ocurren en su vida. Si el Cole de la Temporada 5 acaba hasta los cojones es porque a cada cosa que pasa en San Francisco, ella lo declara responsable de ello. Que defiendo que era un hombre que no aceptaba un no por respuesta y la relación fue de lo más tóxica, pero hay que reconocer que no todo lo demoníaco estaba causado por él.
Y bueno, tras su derrota, Phoebe se convierte en una especie de símbolo sexual dentro y fuera del mundo mágico. Lejos quedaba ya esa Phoebe que defendía su independencia. Se cruzó la línea entre al defensa de la vida sexual libre y sexualización. Phoebe lo sufrió en sus carnes, pero como ya he dicho, el mantra de la serie también cambió por completo.
Kern dejó de focalizar la atención en la vida familiar de las hermanas y poco a poco movió el foco a su vida como mujeres. Leo y Piper sufren una crisis en la temporada 6, que lleva a Piper a llevar una desenfrenada vida sexual. Phoebe se acuesta con cada tío al que conoce en la serie y si no, pensad en su jefe y su escritor fantasma ¿Qué es lo primero que hace al conocerlos? Pues eso, la justificación mágica no argumentaba la toma de según qué decisiones.
Paige, por otro lado, se sitúa como una especie de Phoebe en su llegada. También vivía sola, tenía un amigo con derechos y se la pasaba bien yendo al P3. Nada que objetar hasta que una de sus relaciones más destacadas es con un hombre que sufre una adicción a la magia (y no al estilo Willow) y en la que ella debe asumir el papel de niñera mágica. Después de eso, sus relaciones no van a mejor y en la última temporada nos regalan una relación metida con calzador que se resuelve en matrimonio poco antes del final.
En el caso de Prue, su marcha de la serie impidió que su personaje perdiese esta identidad de tercera ola, y casi se agradece. Pero como ya he dicho, el querer centrarse tanto en las tramas románticas, hizo que las hermanas casi pasaran a ser compañeras de piso y que las tramas mágicas perdiesen calidad.
Aún queda mucho de lo que hablar, pero esto extendería en exceso esta entrada. Prefiero que digiráis esta información y expreséis vuestra opinión en comentarios o en la sección de preguntas.
Y sin nada más que añadir, nos vemos en la próxima temporada.
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valerieheir · 1 year
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.19 de Febrero.
Pasó el viernes, pero igual lo cuento, entendí que Th no me hacía bien y lo pude dejar ir aunque me duela. Salí con Manu, sorprendentemente tuve energías y me arregle, hacía mucho frío y lo tomé como una “señal” para ir con el, soy mas linda en invierno y lo sé. Fuimos a un bar pero todos los tragos estaban 1.500, lo miré y nos dimos cuenta que nos teníamos que ir, así que empezamos a reírnos y planear como nos íbamos porque hace 5 min habíamos entrado. 3, 2, 1 y nos paramos, saludamos y nos reímos afuera porque no duramos ni 10 min.
Pedimos 2 cervezas en Arturo y hablamos un montón, a veces el me miraba muy lindo (o solo me miraba y para mi es muy lindo) y me ponía nerviosa espero que no se haya dado cuenta, es muy muy atento, dijo que mis uñas eran bonitas y varias veces me dijo que estaba muy linda, pero no lo sentí como el típico, sino que por ahí yo estaba acomodando algo o haciendo algo y solo lo decía, -sos linda eh- bajito, y me hacía mierda.
Algo que note, súper destacable, cuando nos dieron la mesa estaban enfrentadas las sillas, el abrió la mia para que yo me siente y me dijo -me siento al lado tuyo- y corrió la suya al ladito. Así que mi pierna y su pierna se tocaron indirectamente toda la noche. Me pareció muy provocador y sentí muchísima química.
Hablamos un montón, no me sentí en la necesidad de ofrecer pagar porque el me lo dejo indirectamente claro así que puntos extra. Hablamos y me reí muchísimo, fue lindo poder hablar de todo sin restricción de nada, me habló de su ex incluso me mostró su ig por las dudas que yo la conozca, por suerte ni idea. Hablamos de la familia y su carrera, aunque es medio vago no le va tan mal en Sistemas. Me ofreció de fumar aunque ya no lo hace tanto y acepte, salimos, me abrió la puerta y mientras manejaba para ir a su casa nos paró el semáforo de 1820, el puso su mano en mi asiento y me miró fijo un ratito mientras yo le hablaba de algo. Cuando lo vi que me miraba me puse medio nerviosa, otra vez, le pregunté porque me miraba así, me dijo -¿no te puedo mirar ahora?- y me dio una sonrisa que me derretí.
Recordé el camino a su casa de memoria y el se sorprendió un poquito, por suerte es a 8 min de mi casa así que puntos extra también, no tiene auto pero me ofreció su bici y eso me encanta.
Llegamos y ayyy sus perritos son preciosos, tiene una gorda con cara de mala que me enamore y un cruza galgo que cuando no se de cuenta se va a venir conmigo. Fume un puchito y entre chiste y chiste de que el perro quería un beso porque estaba re contento y saltaba me dice -¿vos querés un beso?- y yo solo asentí. Fue lindo, el es lindo. Me pone feliz.
Me ofreció fumar y le di un par de secas pero nada, no me pegó tanto tanto, le conté que cuando fumo mal viajo casi siempre y me dice -tranqui si te pasa algo te cuido, no tengo problema a parte tengo pizza- y no se, me hace sentir muy segura. Es muy alto mide como 1.85 y con las zapas como por ahí 1,88 la diferencia de altura es abismal y a parte es gigante para mi, me abraza y me siento como envuelta en un acolchado de esos que tienen relleno y son súper calentitos.
Subimos a su habitación y yo le fui clara, no iba a hacerlo en la primer cita y si quería que me quede yo me despertaba temprano así que dormiríamos temprano, el no tuvo ningún problema, quiso que me quede, y solo dormimos. La alarma sonó a las 7.30 y nos quedamos un ratito en la cama, amo que me haga tantos mimos, eran necesarios. Y me fui.
Lo estoy conociendo no me apuro a nada y no busco tampoco nada, a parte tengo mis prioridades, pero fue una linda experiencia y veremos, esta cerca, estudia, es de buena familia, no tiene nada malo con drogas, nos llevamos bien y se que le gusto mucho.
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hala2021 · 1 year
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Las flores, parte 30 (esto es solo una historia inventada)
Miré en casa la tarjeta de la illuminati, la rubia, que decía: «Gisela». Mientras tomaba un café bien fuerte, pensé: «esta gente no tiene ni apellido». Entonces, la cité en mi casa, porque de alguna forma debía entregarle una información jugosa, para que ella lograra una unión con mi esposo, así podría acelerar el nacimiento de mi hijo. Y después de una hora llegó, con un sombrero en la cabeza. Yo le dije que entrara confiada, porque casi todos los vecinos se habían ido de vacaciones. Habíamos quedado en que se colocara anteojos, peluca y sombrero. Además, que usara barbijo. Igual, ella me dijo que mi edificio ya estaba todo tomado por ellos.
—¿¡Aquí!? —pregunté asombrada.
—¡Y qué pensabas! Ya tomamos el edificio y la mezquita. También en los colegios. Por eso impulsamos los proyectos educativos, para controlarte más de cerca.
—Ja, ja, ja. Ustedes son ridículos —exclamé subiendo las escaleras.
Cuando llegamos a casa, la invité a pasar y le convidé un té.
—Vamos a hacer un trato, vos vas a ayudarme a encontrarme con mi esposo. ¿Cómo va a nacer la luz de mis ojos si no es así?
—No es fácil, él está controlado por las Armys.
—¿A él también lo controlan como a mí? —pregunté sorprendida.
—¡Claro, tarada! ? Vos pensás que lo vamos a dejar libre sabiendo quién es?
—Bueno. Tengo una buena información para vos. De alguna manera, soñar con papá me ayuda a sentirme en paz.
—¡¡¡Contame!!!
Y empecé a soltar todo lo que guardaba en el buche. Le confesé, casi con ternura y dolor, que sentía una paz increíble al saber cosas del mundo. Ella no paraba de tomar el té y yo le volvía a servir una y otra vez. Le dije que sentía paz al saber que las religiones no eran de Dios, porque papá literalmente me dijo: «no son mías», y yo sentí como que me sacaba un peso de encima. Y aunque yo le pregunté de quién serían, no recibí una respuesta. Por otro lado, se ponía feliz de que le rezara y ya no entendia nada. Por eso, pensé si los libros sagrados no estarían escritos por ángeles rebeldes a Dios, pero eso solo eran mis pensamientos. Yo le pedí a Dios que la gente no se enterara, porque muchas personas viven de la religión, como las autoridades religiosas, que tienen familias para mantener. Y papá me dijo que yo lo hacía pensar. Y otra cosa que me dio tranquilidad, y que siempre fue mi miedo, es sobre la perversidad en el mundo, más que la perversidad sería ya lo siniestro, de cómo haría Él para frenarla. Y papá me contestó: «no se preocupe, que eso yo lo curo enseguida». Y después de oír esas dos cosas puedo dormir bien. No obstante, papá me confesó algo que no puedo decirlo.
—¡Hablá más! Dame una pista de dónde está el muñeco. ¿Está dentro de una religión? ¿Se hizo hombre o mujer?
—Eso jamás te lo voy a decir. De a poco papá me está haciendo ver mi triste niñez, porque yo tengo la memoria borrada. Ahora sé mi verdadero nombre, que fue cambiado. Por eso siempre odié mi nombre legal, porque yo sabía que no podía ser hija de esos dos seres que no coincidíamos en nada —le dije.
—Tus padres son de los nuestros —aseveró, muy sería.
—Me siento tan mal de saber la verdad, pero todavía no estoy preparada para hablarlo.
—Nosotros sabemos todo de vos. ¿Acaso no te contaron que sos famosa entre nosotros?
—¿Pero pueden conocerme todos por fotos?
—No solo tenemos fotos, sino también videos.
—Bueno. Otro día nos veremos. Ahora te voy a acompañar hasta la puerta. Esto que hablamos con vos lo voy a publicar en mi cuento: «Las flores», que ya va por la parte treinta. Cuando llegue a la parte treinta y tres, tal vez te cuente la historia de mi nacimiento, porque ahora ya sé por qué ustedes invocan al demonio y todas sus porquerías a esa hora. Ahora voy viendo la triste realidad...
—Nos veremos —me dijo, acercándose a la puerta. Yo abrí y la acompañé abajo. Cuando se fue, me quedé mirándola. Ella movía sus rizos dorados. Y se contorneaba como una modelo de pasarela. Después, cerré la puerta y volví a mi hogar.
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juancolquehuanca · 1 year
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— Me puse ropa bonita para ti. — Escribí. No tardó ni dos minutos para ponerse en línea.
— Pero, no entiendo. Si no nos veremos hoy. — Respondió.
— Eso no es impedimento.— Envié, adjunto con una foto frente al espejo en lencería que había comprado por la mañana.
— ¡Qué ganas de estarte quitando eso!, ¡Qué chula te ves!
— ¿Sí? Yo creo que me veo mejor así — Mandé la siguente foto con una prenda menos.
— Te ves mejor encima de mí. Pero no dudo ni tantito lo hermosa que te sientes sin eso cubriéndote. ¿Sabes lo que estás causando, verdad?
— ¡No, no sé! Me gustaría sentirlo.
— ¡Hija de la chingadª! Bien que lo sabes. Ya sabes que te estaría tomando del cabello, mientras mis dedos se pierden debajo de esa ropa tan bonita que traes puesta. ¡Ni te cuento de los besos que quiero darte!
— Uff, ¡Cómo me prende imaginar la escena! Recordándome siendo tocada por ti. — Envié otra foto, en esta ocasión sin nada, en una posición excelente para que pudiera ver todo lo que tenía para él.
— No puedo. Necesito un momento — Respondió y salió del chat.
Me imaginé que fue a masturbarsē o algo por el estilo.
Así que proseguí a hacer lo mismo.
Saque algún juguete del cajón, junto con mi lubricante favorito de Amor líquido.
Era exquisito ayudarme de los recuerdos de nuestros encuentros.
15 minutos pasaron, cuando llamaron a la puerta.
Me levanté furiosa a cubrirme para poder atender.
Tarde algunos minutos así que tocaron por segunda, tercera vez...
— ¡Ya voy!, ¿Quién es?, ¿Qué puede ser tan urgente para tocar de esa manera? — Al abrir la puerta; ahí estaba. Era él.
Listo para hacerme lo que imaginé desde que vi aquella ropa exhibida en esa tienda de ropa interior bonita.
— Pero, ¿Qué haces aquí? — Pregunté riéndome.
— No podía quedarme así. — Entro al departamento, y cerrando de golpe la puerta, me puso contra ella, me beso tan rico que pude sentir cómo crecía la excitación de ambos por tenernos.
Quito mi bata, me cargó, y así, con las ganas escurriendo, fui suya.
¡Lo hizo! Me tomo y no puse objeción.
Después de todo, ese era el objetivo de aquellas fotos.
Quería jugar con sus ganas por tenerme, mostrarle un poquito de todo lo que esperaba por él.
Lo hicimos ahí, en el sillón, en la recámara.
— ¿Querías esto, verdad? — Preguntaba mientras me tenía encima y jalaba de mi cabello.
— Siempre, siempre voy a querer esto. — Respondí y lo bese.
Mariana Dottor.
📖Travesías de Junio
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arteamour · 1 year
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Yo no sé escribir, a veces es bueno solamente contar cosas al azar para despejarse, ¿no?...
Cada día estoy cada vez más cerca de enloquecerme totalmente o de simplemente acabar con todo (las dos son parecidas, solo que una es acabar con todo en vida, mientras que la otro es acabar con la vida)
Sé que cada año o cada vez que pasa el tiempo se crea nuevas “personalidades” (por así decirlo) o nuevas entidades que toman mi cuerpo pero con distintas opiniones sobre la vida y de las cuales sé que no son “yo”. Aquellas entidades me agobian, me irritan, me estresan, me hacen salir de mi zona de control, me… enloquecen.
No sé si es porque no he madurado o mi cerebro creo un espacio-tiempo donde me quedé con la edad de 12 años (algunas veces) y de 15 años (que es la más actual). En estos años me he quedado muchas veces sin memorias de cosas que me pasan en la actualidad (y que me entero porque mi familia me lo recuerda) pero a la vez soy consciente de lo que pasa a mi alrededor… muchas veces siento que estoy viéndome a mí misma caminando, hablando, comiendo mientras que a la vez me siento flotar… Parece que estuviera atrapada en un cuerpo que no es el mío y solo puedo quedarme callada.
Han pasado 5 años para ser exactos donde me empecé a sentir así (muchas veces decía que era por el cansancio o porque ya estaba loca). Comencé con alucinaciones vividas de mí haciendo cosas que en el futuro terminaba haciendo, después con sentirlas, olerlas y tocarlas. En mi actual etapa de mí denominada “locura” ya no solo lo veo despierta sino ya lo inicie dormida.
Aquellas alucinaciones me están empezando a asustar porque cada vez son más y más reales (¿y si estoy atrapada en una de estas alucinaciones y no me he dado cuenta?) que a veces siento que solamente soy la alucinación de alguien más loco que yo o ¡¿que ya estoy muerta y estoy recordando poco a poco mis recuerdos trágicos?! Eso… no lo sé, pero, sé que habrá una respuesta que todavía no se me ha dado porque no he comprendido del todo, lo que me pasa.
Hablando de sueños que se sienten tan real que quieres jamar escapar… He soñado en muchas ocasiones con el mismo chico, un chico tan… ­ ¿Genial? Por ahora no encuentro las palabras adecuadas para describirlo. Aquel chico aparece en los alucinaciones que ya he visto antes y que solo se me aparecen en ciertas temporadas de mi vida (7, 11 y por ahora 17) pero que ahora se aparece por alguna razón con frecuencia (y me da a la vez curiosidad y miedo de volver a despertarme)
Este chico es tan caprichoso y revoltoso como su linda cabellera negra tan oscura como la noche y a la vez tan misteriosa como esta misma. Gracias a su excéntrica personalidad no me ha dejado verlo cuando pido soñar con él (aquel que siempre me dice que despierte que todo es un sueño y que nos veremos muy pronto… muy pronto para ser real). Me pregunte por una semana entera de quererlo volver a ver después de aquel sueño (aquel donde coqueteaste conmigo y me besaste los labios, aquellos labios tan tibios que me dejaron en shock y me hiceron depertar) en donde compartíamos un sincero y divertido amor, donde me hiciste creer que el amor por un momento puede ser real.
Desde que comencé con aquello de las alucinaciones solamente quiere dejar de respirar y quedarme profunda en los brazos de Morfeo… Pero… sé que no es posible porque aún guardo la esperanza de poder conocer todo lo que me rodea y disfrutarlo como se merece sin ningun sentimiento negativo orbitando a mi alrededor.
 Muchas veces me pregunto que si lo tengo lo merezco, que si merezco vivir tan bien mientras que otros se mueren de hambre, de sueño, y de un montón de cosas que no puedo describir con palabras… ¿Sería justo no apreciar a esta vida? O ¿sería justo de que el mundo siga aguantando a alguien tan despreciable como mí ser?... Tantas preguntas con respuestas tanto complejas o sencillas desde los ojos de cada persona pero que a su vez nos lleva al mismo cuento ¿Acaso mi vida tiene importancia? ¿Si me muero, habrá alguien que me recuerde con buenos momento o con los malos? ¿Alguien de verdad sufrirá por mi partida o solamente fingirán como yo siempre hago con los demás?
Todas las anteriores preguntas son las que me hago cuando no puedo dormir (casi siempre) o cuando me despierto en la madrugada y no consigo el sueño. Podría decir que estos pensamientos solo los tengo en mi casa y cuando todo está en silencio… Pero… Sé que no es así, porque estos siguen latentes aun despierta y para calmarlos tengo que escuchar algo que me distraiga (muchas veces me pasa lo contrario, me puedo quedar en cualquier momento dormida sino escucho algo) Es raro y patético, lo sé, pero así ha sido desde que tengo memoria (y por eso no hacia tareas por el día para que en la madrugada triste y callada pueda calmarme y sentirme en paz).
Estos son los relatos del día: 11-11-2022
Las notas de una loca #1
Am
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caostalgia · 2 years
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Te solté obligándome a hacerlo.
Yo no sé huir, amor. Para ti fue lo más sencillo del mundo porque cuando las decisiones se toman, no hay vuelta atrás. Cuando tu amor se rompió, no intentaste, ni pudiste, ni quisiste repararlo. De tu lado, se mira que lo roto es inservible y sin contemplaciones, se manda a la basura. Tu practicidad, me envió directo al abismo. ¿Te acuerdas?
Yo sí lo recuerdo. En caída libre, no es fácil mantener la calma. Necesité muchas bocas distintas para olvidarte, las más difíciles fueron las primeras; todas sabían a ti. Y lo más sencillo se tornó complejo: olvidarte me hacía recordar para qué hacía todo aquello y sufría; siempre dolía tener que estar con otros que no eran tú y al volver a casa, el vacío y mi duelo eran mayores.
Me tomé muy a pecho que un clavo saca a otro clavo y así, me aferré a muchos clavos ardiendo. Ya sabes lo dedicada que soy. Tan errática y empecinada a sacarte de mi alma, me volví cínica, libertina, inescrupulosa. La versión más impía para no cargar culpas, ni lamentos ni tener que dar explicaciones salió a flote y se me adhirió después de un tiempo. (No me arrepiento de nada).
La negrura de mi alma brilló y se apoderó de todo mi ser (me encanta ser la mala de tu cuento). ¡¿Cómo se te ocurre que te daré una segunda oportunidad, imbécil?!
Las reglas son otras, amor. Fórmate en la lista de espera... Veremos si te toca la suerte otra vez.
-Cinthyacabalga
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“Querida Cristina, de Emma”
“Querida Cristina,
Tenía la intención de poner como dirección “para la casita de campo poliamorosa en la Tierras de las Hadas”, pero luego me di cuenta de que tal vez nunca te llegaría :) Vale, vale, estoy de coña. Te la envío al instituto de Nueva York —Clary dice que te la guardará.  Sé que Jules y yo hemos estado de aquí para allá como bolas de ping pong, pero finalmente nos hemos instalado en Londres durante al menos un par de meses, así que puedes –y deberías– escribirme de vuelta al instituto de Londres. Aunque no estoy muy segura de sin tan siquiera tiene una dirección concreta. (Y sí, podría haberte enviado un mensaje de fuego, pero tengo mucho que contarte. Prepárate.)
Bueno, hace un tiempo Jules y yo estábamos en Manaos, Brasil, estudiando el demonio Curupira, cuando nos llamaron del Instituto de Rio. Tenían un mensaje para Julian. Su tía abuela (sí, a la que él estaba visitando cuando viniste por primera vez a Los Ángeles) había muerto. Muy triste. Y luego, ¿te acuerdas de la casa tan bonita en Sussex donde ella vivía? Bueno, se la dejó a un primo del que nadie ha oído hablar, pero le dejó Blackthorn Hall a Julian. La cual es una ruina en Chiswick (como un suburbio de Londres). Así que tuvimos que venir aquí por un codicilo de testamento (ejem, según el diccionario, eso es “un añadido o suplemento que explica, modifica o revoca un testamento o parte de este”). Así que Julian tendrá que arreglarla en menos de cinco años para que sea un lugar donde se pueda vivir o tendrá que donarla a la Clave. Aun así, ya sabes como es Julian. Toma decisiones rápido. Llegamos a Londres a través de un portal un día después de recibir la noticia.
Yo estaba ya lista para comer bizcochitos, beber té, e ir al Ojo de Londres (todo lo que no pude hace la última vez que vine a Londres, ya que estábamos siendo perseguidos por guerreros hada y esas cosas). Pero eso fue antes de coger un taxi del Instituto hacia Chiswick y ver la casa.
Desde fuera parece un museo o una antigua biblioteca —ya sabes, grandes columnas de mármol, unas escaleras enormes, y una cúpula gigante que da la sensación de que debería tener un telescopio en ella. No, es más, parece algo hecho por hadas. O que ha salido de una película de niños. Es uno de esos cuentos de hadas donde un palacio en ruinas duerme durante mil años. Tuvo su punto romántico... durante cinco minutos. Después vimos a la primera rata, mordisqueando la borla de unas cortinas.
Es una mezcla rara de historia interesante, arte viejo y extraño, y completa ruina. Hay cuadros bastante guais de ancestros de los Blackthorn, la mayoría intactos. Julian dice no reconocer la mayoría de las caras. Algunos tienen escrito nombres detrás de los lienzos o en los marcos pero aparte de “Blackthorn”, ninguno de los nombres significa mucho para nosotros. Hay baúles de madera llenos de libros y papeleo antiquísimos, y un terreno cubierto de vegetación precioso que estoy segura alguna vez fueron jardines. Aunque ahora es la versión inglesa de una jungla. Hay un viejo invernadero y como una pequeña estructura hecha de ladrillo que no tenemos ni idea de que puede ser. (¿Un almacén? ¿Una habitación de armas muy pequeña?). Todo en si está hecho un desastre, y la mayor parte de la casa se encuentra inhabitable. Alguien creó un apartamento con cosas más modernas en un ala de la casa, seguramente en los sesenta. (Por cierto, me recuerda a esa tienda vintage de Topanga a la que te llevé. ¿Te acuerdas?). Quien haya vivido aquí ha dejado un armario lleno de todo tipo de ropa vintage además de un tapiz con muchos patrones florales y arte moderno por todas partes. Al menos el piso tiene electricidad, agua corriente y calefacción, pero el resto de la casa definitivamente parece no...
Ya estoy de vuelta. Perdona tuve que parar de escribir un momento. Julian me estaba llamando. Estaba en lo que parecía ser un salón de baile. Aunque bueno, pisó mal y su pie atravesó el suelo. (No del todo, lo que es un alivio. Pero definitivamente hizo un agujero). El salón de baile es grande y está lleno de polvo, pero se nota que hace mucho tiempo tuvo que ser precioso, y muy sofisticado. Tiene estas enormes puertas francesas que se abren hacia balcones de mármol. Aunque la mayoría de los cristales de estas han desaparecido. Una vez hube liberado a Julian del suelo roto me di cuenta de que era mi única oportunidad de hacerle entrar en razón, así que le comenté que esto es un proyecto gigantesco para dos personas que nunca han arreglado una casa; que ya tenemos un sitio perfecto donde vivir. Y que el tiempo es mejor allí.
Jules, siendo Jules, se tomó su tiempo para contestarme, sopesando lo que le había dicho. Luego dijo:
—Si no quieres hacer esto, no tenemos por qué. Tú eres más importante para mí que una casa. Que cualquier casa.
—No es que no quiera hacerlo —dije—. Es que no se ni por dónde empezar.
Julian me explicó con calma que había estado en contacto con algunos constructores hada. ¿Duendes tal vez? Que estarían el próximo lunes para echar un vistazo. Luego me rodeó con sus brazos y dijo:
—Sé que siempre podremos vivir en el instituto de Los Ángeles. Me encanta ese sitio. Pero mientras exista un legado de los Blackthorn, esto es lo único que queda. Estos papeles viejos, cualquier secreto que esconda la casa, son la historia de nuestra familia. Quiero dejarle el legado a Dru y Ty y Tavvy. Quiero darles lo que yo nunca tuve.
Ante eso, ¿Qué le podía decir? Lo entiendo. Tengo a Jem como mi legado histórico viviente. Y Jules no tiene nada parecido. Mientras tanto Aline y Helen dirigen el instituto de Los Ángeles, lo cual puede que no sea siempre, y además, pertenece a la Clave. Por lo que entiendo que no pueda deshacerse de su historia familiar sin ofrecerles una elección sobre el asunto.
Así que le dije:
—Está bien. Veremos qué podemos hacer. Si alguna vez vemos que es demasiado, podemos organizar una gran reunión familiar y que todos voten. Quedarse o no con Blackthorn Hall.
Me levantó y empezó a dar vueltas conmigo en el aire. Luego nos empezamos a besar. Seré piadosa en no contarte los detalles.
Así que he decido tomarme esto como Una Aventura. Es como un sitio arqueológico, y somos historiadores intrépidos. Más tarde veré si puedo convencer a Jules y ponernos un abrigo de tweed y un salacot mientras sorteamos a través de escombros. Porque quien viviese aquí antes tenía mucha cosa. Es una casa grande, y cada habitación tiene muebles con cajoneras y armarios, todos hechos un desastre. Armas llenas de polvo, libros dañados por el agua, pequeñas cajas con más suciedad en ellas, joyas para disfraces, fotos de gente desconocida, tazas de té rotas... Y recuerda que lo hemos visto todo solo con piedras de luz mágica.
En fin. Quería que supieses en que ando y donde hemos estado. Nuestro año de viaje se había terminado de todas maneras, así que esto es una forma de extenderlo y pasar más tiempo juntos. Esa parte la verdad que no me desagrada. Me lo estaba pasando realmente bien preparándome mentalmente para excavar en historia Blackthorn hasta esta mañana.
Sé que he dicho que esta casa parece estar encantada, pero estaba bromeando. En su mayor parte. No soy Kit; no puedo ver fantasmas al menos que ellos quieran que me van, y hasta ahora no me he cruzado con ningún espíritu ectoplasmático con mensajes del más allá. Pero este sitio me da malas vibras. No paro de imaginarme que me doy la vuelta al final de largos pasillos llenos de telarañas, como si esperase ver algo en las sombras. O me imagino que veo algo sobre mi hombro en el espejo. He asumido que eran solo nervios hasta esta mañana, cuando entré en el comedor y vi las palabras “IROS DE AQUÍ” escritas en el polvoriento suelo.
Salté, literalmente. Estaba agarrando a Cortana antes que a mí misma. “No seas ridícula”, pensé. Ese mensaje podría haber sido escrito en cualquier momento, mucho antes de que nosotros llegásemos. Podría haber estado escrito en el polvo durante años, intacto. Aunque sí que tengo que confesar algo. Borré el “IROS DE AQUÍ” con mi pie. No quería que Julian lo viese. Ya se preocupa de por sí. No quería que pasase por la misma sorpresa que yo, y sobre todo por algo tan poco importante.
Me siento mejor contándotelo toda la verdad. Ay querida, Julian me vuelve a llamar. No puedo esperar para ver en qué lugar ha metido su pie esta vez. Te escribiré de nuevo pronto. De mientras, ¡adiós desde Londres![1]
Mucho amor para ti y los chicos,
Emma.”
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Texto original de Cassandra Clare ©
Traducción del texto y la imagen de Niloa Gray ©
ATENCIÓN: no se permite hacer Drives ni PDFs de “Los Secretos de Blackthorn Hall” por Copyright. Cualquier infringimiento va contra la ley.
[1] En el texto original dice “pip pip cheerio”, lo cual es una manera de decir adiós en la jerga británica. Emma lo usa de forma cómica para despedirse de Cristina.
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Esta noche
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Las estrellas se desvanecen como los sueños, anhelos, ambiciones…
En muchas culturas el alcanzar tus propósitos es referencia a que estas alcanzando la plenitud, y es parte el caer en la conformidad cediendo a los placeres mundanos.
El cual empieza a marcar el fin de tu existencia.
Y sabes…
Me moría de ganas de hacerte saber cuánto dolor he sentido desde que te fuiste.
Pero eso es bastante imposible porque te has ido en un viaje de ida, un callejón sin salida para aquellos que aún permanecemos a este plano.
Me dijiste en tu lecho de muerte que cuando terminé de contar las estrellas, nos veremos otra vez.
Pero me frustro conmigo mismo, porque cada mañana pierdo la cuenta.
Todas las noches el recuerdo me atropella mientras cuento las estrellas esperando tu regreso.
Pero cada noche parece que aparecen más estrellas, lo que alarga la espera.
Algunos días están nublados y no puedo contar las estrellas, comencé a perder la fe en ti.
Han pasado años y no he llegado a verte.
Todos mis logros se sienten como si fueran nada sin tu alegría.
El día de mi graduación tiré mi birrete al aire, vislumbré las estrellas una vez más, empecé a llorar por el recordatorio que nunca llegaste a ver ninguna de las cosas de las que debería estar orgulloso.
Sé que te has ido, pero mi dolor no.
Entiendo por qué me diste una tarea poco realista, pero...
Seguiré contando las estrellas hasta que te vuelva a ver.
En ocasiones olvidó que solo salgo a dar un paseo, sigo sonriendo y no he vuelto a llorar en años.
En ocasiones olvidó que somos la noche y que las estrellas pueden desvanecerse.
Cómo esta noche.
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Querida Cristina, de Emma
Querida Cristina,
Pensé en enviar esta carta a “la cabaña poliamorosa en la tierra de las hadas”, pero supuse que nunca seria entregada. :) Bueno, bueno, solo bromeó. Estoy enviando esto al Instituto de Nueva York; Clary dice que la guardará. Se que Julian y yo hemos estado rebotando por el mundo como pelotitas de ping pong, pero finalmente nos hemos instalado aquí en Londres, al menos por un par de meses, así que tu podrías - y deberías – escribirme de vuelta al Instituto de Londres – No estoy segura de que el lugar donde nos estamos quedando tenga dirección.
(Y claro, pude solo enviarte un mensaje de fuego, pero tengo mucho que contarte. Prepárate).
Hace algún tiempo Julian y yo estábamos en Manaos, Brasil, estudiando Curupias, cuando fuimos llamados al Instituto de Rio. Ellos tenían un mensaje para Julian. Su tía abuela -si la que estaba visitando cuando llegaste por primera vez a L.A.- había muerto. Tan triste. Y entonces, ¿recuerdas la hermosa casa donde vivía en Suxxex? Bueno, ella la dejo para algún primo del cual nadie había escuchado, pero a Julian le dejo Blackthorn Hall. Que es una ruina derrumbada en Chiswick (una clase de suburbio de Londres). Entonces tuvimos que venir aquí, porque el codicilo de voluntad (aja, según el diccionario, eso es “un añadido o suplemento que explica, modifica o revoca un testamento o una parte de este”). Así que Julian tendrá que arreglar el lugar y hacerlo habitable nuevamente, en cinco años o tendrá que donarla a la Clave.
Como sea, ya sabes como es Julian. Reacciona rápido. Nos metimos a un portal a Londres al día siguiente de que nos enteramos.
Yo estaba lista para comer scones, beber té e ir al Eye (todas las cosas que no pude hacer la ultima vez que estuvimos en Londres, siendo perseguidos por indestructibles guerreros hada.) Pero eso fue antes de que tomáramos un taxi del Instituto a Chiswick y viéramos realmente el lugar.
Desde el exterior parecía un museo o una biblioteca antigua – ya sabes, grandes columnas de mármol, enormes escaleras, un enorme domo de metal en el techo, que daba la sensación de que tendría un telescopio en el. (Que no lo tiene, lo comprobé.) Pero por dentro era como un cuento de hadas. No, como algo de Feéra. O de alguna película infantil. Era como una de esos cuentos de hadas donde las ruinas duermen por cientos de años. Ha sido algo romántico, por unos cinco minutos. Entonces descubrimos la primera rata, mordisqueando la borla de una cortina.
Es una mezcla extraña de historia, arte extraño antiguo y la ruina total. Tiene increíbles retratos de los antiguos ancestros Blackthorn, casi intactos. Julian dijo que no reconocía la mayoría de las caras. Algunos de ellos tienen los nombres escritos al reverso del lienzo o en los marcos, pero aparte de “Blackthorn” ningún nombre significa algo para nosotros. Hay baúles de madera llenos de libros y papes antiguos, y un terreno cubierto de vegetación precioso que estoy segura alguna vez fueron jardines y ahora es la versión inglesa de una jungla. Hay un viejo invernadero y como una pequeña estructura hecha de ladrillo que no sabemos que es. (¿Un almacén? ¿Una pequeña sala de armas?). Todo el lugar es un desastre, y la mayor parte de la casa se encuentra inhabitable a más no poder. Alguien creó un apartamento con cosas más “actualizadas” en un ala de la casa, seguramente por los sesenta. (Por cierto, me recuerda a esa tiendita vintage de Tópaga a la que te llevé. ¿Te acuerdas?). Quien sea que haya vivido aquí ha dejado un armario lleno de todo tipo de ropa vintage además de un tapiz con muchos patrones florales y arte moderno por todas partes. Al menos el piso tiene electricidad, agua corriente y calefacción, pero el resto de la casa definitivamente no parece…
Estoy de vuelta ahora, Perdona tuve que parar de escribir un momento. Julian me estaba hablando. ¿Estaba en lo que podría ser un salón de baile? Aunque bueno, pisó mal y su pie atravesó el suelo. (No del todo, lo cual es un alivio. Pero definitivamente hizo un agujero). El salón de baile es grande y lleno de polvo, pero se nota que hace mucho tiempo tuvo que ser precioso y muy sofisticado. Tiene estas enormes puertas francesas que se abren hacía unos balcones de mármol. Aunque la mayoría de los cristales de estas ha desaparecido.
Una vez que liberé a Julian del suelo roto me di cuenta de que era mi única oportunidad de hacerle entrar en razón, así que le comenté que esto es un proyecto gigantesco para dos personas que nunca han arreglado una casa; que ya tenemos un sitio perfecto donde vivir. Y que el clima es mejor allí.
Jules, siendo Jules, se tomó su tiempo para contestarme, sopesando lo que le había dicho.
—Si no quieres hacer esto, no tenemos por qué. Tú eres más importante para mí que una casa. Que cualquier casa.
Me dijo.
—No es que no quiera hacerlo —dije—. Es que no se ni por dónde empezar.
Entonces me explicó con calma que había estado en contacto con algunos constructores hada. ¿Duendes tal vez? Que estarían ahí el próximo lunes para echar un vistazo. Luego me rodeó con sus brazos.
—Sé que siempre podremos vivir en el instituto de Los Ángeles. Me encanta ese sitio. Pero mientras exista una herencia de los Blackthorn, esto es lo único que queda. Estos papeles viejos, cualquier secreto que esconda la casa, son la historia de nuestra familia. Quiero dejarle ese legado a Dru y Ty y Tavvy. Quiero darles lo que yo nunca tuve.
Terminó y ante eso, ¿Qué le podía decir? Lo entiendo. Tengo a Jem como mi legado histórico viviente. Y Jules no tiene nada parecido. Mientras tanto Aline y Helen dirigen el Instituto de Los Ángeles, lo cual puede que no sea para siempre, y, además, pertenece a la Clave. Por lo que entiendo que no pueda deshacerse de su historia familiar sin ofrecerles una elección sobre el asunto.
—Está bien. Veremos qué podemos hacer. Si alguna vez sentimos que es demasiado, podríamos organizar una gran reunión familiar y que todos voten. Nos quedamos o no con Blackthorn Hall.
Le dije. Me levantó y empezó a dar vueltas conmigo en el aire. Luego nos empezamos a besar. Seré piadosa en no contarte más detalles.
Así que he decido tomarme esto como Una Aventura. Es como si fuera un sitio arqueológico, y somos los intrépidos historiadores. Más adelante veré si puedo convencerlo y ponernos un abrigo de tweed y un salacot mientras saltamos a través de escombros. Porque quien vivió aquí antes tenía muchas cosas. Es una casa grande, y cada habitación tiene muebles con cajoneras y armarios, todos hechos un gran desastre. Armas llenas de polvo, los libros están dañados por el agua, pequeñas cajas con más suciedad en ellas, joyas de trajes, fotos de gente desconocida, tazas de té rotas… Y recuerda que solo hemos visto todo esto solo con piedras de luz mágica, ninguna otra luz.
En fin. Quería que supieras en que estoy y donde hemos estado. Nuestro año de viaje se había terminado de cualquier forma, así que esto es una forma de extenderlo y pasar aún más tiempo juntos. Esa parte la verdad que no me desagrada. Me lo estaba pasando realmente bien preparándome mentalmente para excavar en historia Blackthorn hasta esta mañana.
Sé que he dicho que esta casa parece estar embrujada, pero estaba bromeando. En su mayor parte. No soy Kit; no puedo ver fantasmas al menos que ellos quieran que los vea, y hasta ahora no me he cruzado con ningún espíritu ectoplasmico con mensajes del más allá. Pero este lugar me da malas vibras. - Me encontré dándome la vuelta al final de largos pasillos llenos de telarañas, como si esperara ver algo en las sombras. O me imagino que veo algo sobre mi hombro en el espejo. He asumido que era solo nervios hasta esta mañana, cuando entré en el comedor y vi las palabras “LARGUENSE” escritas en el suelo polvoriento.
Salté, literalmente. Estaba tomando a Cortana antes que a mí misma. “No seas ridícula”, pensé. Ese mensaje podría haber sido escrito en cualquier momento, mucho antes de que nosotros llegáramos. Podría haber estado escrito en el polvo intacto, durante años. Aunque sí que tengo que confesar algo. Borré el “LARGUENSE” con mi pie. No quería que Julian lo viera. Ya está de por si preocupado. No quería que pasara por la misma sorpresa que yo, y menos por algo tan poco importante.
Me siento mejor contándote toda la verdad de mi corazón. Ay, querida, Julian me vuelve a hablar. No puedo esperar para ver en qué lugar ha metido su pie esta ocasión. Te escribiré de nuevo pronto. Y mientras tanto, ¡adiós desde Londres!
Mucho amor para ti y los chicos,
Emma.
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Texto original de @cassandraclare ©
Imagen de @cassandrajp ©
Traducción del texto e imagen Annie ©
@secretsofblackthornhall
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